Terminé con la ultima burpee y plancha, mi pecho estaba muy agitado y no paraba de sentir mi sudor escurriendo desde mi cabello hasta mis brazos. Volteé a ver a mis compañeros, la mayoría ya habían terminado, pero noté que Key aun hacia planchas.
Corrí hacia él, me puse a su lado y comencé a hacer planchas.
Luego él se levantó para hacer las burpees, lo que hice yo también.
Conté siete burpees, luego volvimos a hacer las planchas.
-¡Vamos nenas! ¡Un poco más!- presioné mis ojos y suspiré, luego me levanté para hacer las burpees pero Key ya no me siguió, así que me detuve.
-Vamos.- susurré acercándome a él, estaba rendido, son sus manos sobre el suelo y su frente también. –Ya casi terminas.-
-No puedo.-
-¡Vamos Key!- escuché a Amber. –Vamos amigo, te queda poco.-
-¡Aquí no regalamos cuerpos, aquí se hacen esos cuerpos!- Key se levantó del suelo apoyándose en sus rodillas, luego miró al entrenador. –No en mi gimnasio.-
Vi como Key alzaba la nariz y se agachaba de nuevo a hacer las planchas. Sonreí. Continúe haciéndolas a su lado, igual que Amber.
-Ocho Key, faltan poco.- susurró Amber sudando también.
Fue más fácil hacer dos planchas pero un tanto complicado las ocho burpees, aun así, Key lo estaba manejando bastante bien. Me detuve antes de hacer la última plancha, sólo me quedé en el suelo, sentado sobre mis pantorrillas.
Amber también se detuvo porque se extrañó que yo lo hiciera, pero negué sonriendo. Key terminó solo sus diez burpees, luego se quedó de pie, caminó un poco supongo que relajando los músculos de sus piernas pero alcé las cejas sorprendido cuando golpeó la pared.
-Enfríense chicos, hagamos un último estiramiento.- asentí por lo del entrenador, me levanté del suelo y fui con Key.
-Lo hiciste bien.- susurré, él asintió sorbiendo de su nariz, sonreí y regresé a mi lugar a un lado de Jonghyun.
…
-Mañana me va a doler todo.- entré a las regaderas junto con Jonghyun. –Y tengo presentación hoy.- me puse a un lado de él en la otra regadera y la abrí, el agua fría comenzó a caerme. –Le diré al Sr. Andy que sólo me pongan un banquillo, je, je, no creo moverme mucho.- dije sonriendo, sintiendo como poco a poco mis músculos se enfriaban.
-Dile a tus bailarines que ellos se encarguen de eso, porque estás molido.- asentí moviendo mi cabello para que todo el sudor se lavara.
-¿Sabes qué se me antoja?- pregunté girándome para que mi espalda también se enfriara.
-¿Qué?-
-Un par de cervezas frías.- contesté sonriendo. –Pero no puedo llegar ebrio al programa.- así que tal vez mejor después.
-Cuanto quieras podemos ir por unas, sé en dónde son baratas, frías e internacionales.- oh~ eso me agrada.
-Estaría bien un viernes.- susurré cerrando la llave de agua. –Te veo en el vestidor.- después de que Jonghyun asintiera salí de las duchas con la toalla en mi pelvis, no es que esté desnudo, pero tampoco quiero que me vean las piernas.
…
-Estuviste increíble hoy.- susurré lo más bajito que pude, notando como Key abrí la bolita de papel que le lancé con la intención de pegarle en la cabeza.
Porque se esperó a que todos usáramos las duchas para que estuvieran solas cuando él entrara.
Key volteó por encima de su hombro así que me escondí. Reí bajito y me asomé para ¡ah!
-¡Ah!- nos separamos nerviosos, creo, yo sí lo estoy, si rostro quedó muy cerca del mío porque parece que quería saber quién le mandó la bolita de papel y al salir del vestuario casi choca conmigo. –Me asustaste.-
-Tú también.- susurré saliendo de mi escondite. –Estuviste increíble hoy.- dije.
-No más que tú.- susurró. –A ti hasta te escogieron para estar al frente.-
-¿Por qué viniste?- pregunté entrando tras de él al vestidor.
-Porque esto es importante para ti.- sentí que mis ojos se aguaron. –Y quería estar contigo pero sin interrumpir tus actividades.-
Estaba pensando en cómo tratarte.
-Así que le pregunté a Henry si aun venías al gym.-
¿Tratarte mal por cómo me heriste?
-Dijo que sí, pero me advirtió que esto no era zumba.-
¿Hacer como que nada paso cuando hay rastro de ti en otras personas?
-Quise tomar la banda azul para demostrar que estaba tu nivel.-
No dejaría que tú tomaras una decisión más cuando todas las que has decidido han sido perfectamente estúpidas y erradas.
-Quería parar, me lastimaba pero me mirabas por encima y eso me daba valor y energía para seguir.-
Sentí que una lágrima se escurrió de mi ojo derecho, y otra más se asomaba por el izquierdo.
-Y cuando no me abandonaste y fuiste a mi lado…-
También había lágrimas en su rostro.
-Tú dijiste que no había algo en espacio que te guste más que yo.-
He’s making me crazy.
-Yo no he visto en el espacio algo como tú.-