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Cerré la puerta del auto y me aseguré de que todo estuviera en orden, luego de asegurarme de eso asentí y encendí el motor.
Pero antes de salir completamente de mi estacionamiento, puse el radio sólo para oír una vez más la canción de Jonghyun, me pregunto cómo estará él. Y cómo le habrá caído la noticia de que ahora estará trabajado con Key en Buena Miel.
Aunque Key me dijo que no estaría de forma fija, sólo un par de días en lo que los ejecutivos lo llamaban o no, realmente espero que sí consiga ese trabajo. Le hará bien ya que no está estudiando.
Fruncí el entrecejo semi molesto porque los compañeros de su salón, cuando me ven me preguntan por él y no tengo otra cosa que decirles más que “esto no es lo que él busca” y pese a que dice que hará trámites para Teatro, hay algo que no me vende completamente la idea.
Pero lo apoyaré.
Aunque, ¿qué estaba diciendo antes? ¡Ah! Jonghyun.
Su canción parece que hizo lo que tenía que hacer, sí, mi amigo lo está haciendo bien, pese a que en las noches me llame diciéndome que es raro y que se pone nervioso cuando tiene que salir al escenario. Pero sé que ahora que está con Key de nuevo esos nervios tiene que ser algo del pasado.
Que espero que esa empresa sí lo llame, aunque no sé cómo le hizo para obtener ese contacto.
Sería divertido verlo trabajar, aunque él diga que está en el Imperio de Minho todos sabemos que el único que hace el trabajo es Minho, me pregunto cómo le estará yendo.
Supe que se fue a Jeju con Taemin, ojala que todo esté bien ente ellos dos. Tal vez Minho esté con Taemin hoy y sólo les haga el mal tercio. Aunque un día así pude ser toxico para Minho también. No recuerdo cómo es que él toma los cumpleaños de su papá ahora que ya no está, creo que son días normales, no les prestará atención o sólo ya lo olvidó.
Quién sabe, pero me gustará verlos a todos.
Me detuve en una tienda para comprar una soda o una botella de agua.
Empujé la puerta y caminé hacia los refrigeradores, tomé un envase con jugo y lo saqué del refrigerador, sentí que mi celular volvió a vibrar así que lo saqué del bolsillo mientras caminaba, ¡oh! Mi celular se cayó al suelo pero pude salvar la botella con juego al tiempo que tomaba los hombros de la chica con la que choqué.
-¿Estás bien?- pregunté
-Fue mi culpa.- susurró con un acento raro que me extraño.
-Ese no es coreano.- dije agachándome ara levantar mi celular. –¿De dónde eres?- menos mal no lo levanté con todo y mi dignidad porque no se le salió ni la tapa ni la batería.
-¿Tu móvil está bien?-
-Descuida.- contesté revisándolo, sólo tiene un rasguño más. –¿Eres de intercambio?-
-Sí.- asintió, eso me hizo sonreír porque su voz es más dulce.
-Me llamo Jinki.- le tendí mi mano después de guardar mi celular.
-Mami.- susurró estrechando la mía.
-Me gusta tu cabello.- susurré alejando mi mano, ella miró su cabello e incluso lo tomó para mirarlo, eso fue divertido porque supongo que tiene que saber cómo es.
-Gracias.- susurró acomodando sus mechones de cabello, ella es rubia, no rubia amarilla sino rubio albino como el de Jonghyun, pero su cabello interno es de color azul o verde, lo mismo pasa con el cabello que cubre su frente.
-Soy de Japón.- susurró. –Estudiante de intercambio.-
-Yo soy de aquí.- contesté recibiendo el dinero que sobraba de mi jugo. –Estudiante de QFB.-
-Fisioterapia.- contestó sonriendo.
-Tengo carrera trunca en Arquitectura.- dije abriendo la puerta para que ella saliera.
-¡Yo en Sistema Computacionales!- dijo mirándome sonriendo y sorprendida.
-¿En serio?- pregunté abriendo la tapadera del jugo.
-Sí, me quedé hasta cuarto pero me salí porque eso no me hacía feliz, prefiero tratar con las personas que con las maquinas.- apuntó hacia una motocicleta negra, supongo que es de ella. –Tengo que irme.-
-Yo también.- apunté a mi auto. –Yo voy a Seúl.-
-Yo a mi departamento.- se rió un poquito más, incluso su risa es diferente a la de las chicas de aquí. A la de DamBi o la de Luna.
-Te llamaré después.- dije sonriéndole, volviendo a cerrar mi botella. –¿Tienes SplashFace?-
-No, pero te puedo dar mi número de teléfono.- me miró y caminó hacia mí mientras sacaba su cartera para darme un papelito, en el que tenía su nombre y su número de teléfono, además de su nick de esa aplicación que me he reusado a descargar.
Pero quizá lo haga.
-Entonces te llamaré.- contesté guardando el papelito en mi billetera. –Ten un buen día.- le sonreí, ella se puso su casco ya sobre su motocicleta.
Suspiré mientras la veía partir, encendí mi auto para ponerme en reversa y salir del estacionamiento de la tienda. Ahora a ver a Taemin.