-Sí, aquí vive él.- contesté abriendo la puerta. –¿Cómo has estado?- salí de mi casa para abrazarla un poco y tomar su portafolio.
-Buscándote.- suspiró. –He tocado en las últimas tres casas hasta que te encontré.- le mostré la entrada y ella asintió para comenzar a caminar, después entramos y cerré la puerta. –Cómo vas en el proyecto ¿ya casi terminas?- sonreí un poco mientras revisaba lo que he hecho en mi laptop. –Yo todavía no.-
-Podemos comenzar ahora.- dije sonriendo y entregándole el portafolio.
-¿Tu novio está aquí?- preguntó Hyuna sacando su laptop del portafolio.
-No.- contesté yendo hacia la cocina para tomar la jarra con agua de sabor que dejó Andy y llevarla hacia el comedor junto con dos vasos. –porque si estuviera ya hubiera lanzado un tenedor.- o algún objeto punzocortante.
-¿Por qué?- preguntó un poco asustada, eso se me hizo gracioso.
-Na, así es él.- susurré dejándolo en un lugar seguro para nuestras computadoras. –Pero acordamos en que cenaríamos juntos, así que mejor, demoños prisa.-
-Bien.- susurró. –Quiero que mires mi cortometraje y me digas si crees que el movimiento se ve muy robótico.- asentí sentándome a su lado en mi lugar. –O si notas algo raro, por favor.-
-Está bien.- susurré viendo sus créditos iniciales.
-Tu novio es bonito.- alcé las cejas un poco extrañado. –¿Es el de la fotografía?- dejé de ver su corto para mirar su dedo que apuntaba hacia mi sala, en donde tengo una fotografía de Taemin y yo juntos.
-Sí, es él.- contesté sonriendo. –¿Crees que es bonito?-
-Creo que es adorable.- miré a fotografía un poco más, porque en esa él está haciendo aegyo y yo mantengo una pose neutral. –Se ven bien juntos.-
-Hoy le van a teñir el pelo.- susurré sonriendo.
-¿De qué color?-
-No sé.- suspiré. –Pero se le verá bien, estoy seguro de eso.-
End Pov’s Minho
En casa de Jonghyun…
Pov’s Key
-¡No, no, para, para… Jonghyun!- exhalé todo el aire que tenía en mis pulmones siento más calor bajo la cobija, tuve que quitármela de encima y respirar aire frio y fresco. –Ahh~-
-Je, je, je…- nivelé mi respiración. –Perdón.- susurró también saliendo de abajo de la cobija. –Pero me gusta hacerte muchas cosquillas.-
-Sí, me di cuenta.- suspiré acomodándome en la cama. –¿Pero sabes?- me giré sobre mi costado para mirarlo, de perfil se ve muy bien. –No te lo tomes a mal pero… soy una persona muy sexual.-
-¡Oh calla!- se giró para mirarme de frente. –Yo también soy muy sexual.- susurró poniendo su mano en mi mejilla, ladeé más mi rostro para sentir su tacto.
Separé mis labios porque deslizó la yema de su pulgar de mi pómulo hacia mi boca.
-¡Jonghyun!- de inmediato me cubrí con la cobija hasta el cabello. –¡Hijo! ¡Te llegó un sobre!-
-¡En un momento!- gritó. –Vamos, Kibum.- me descubrió de la cobija. –Le mandé canciones a Andy, las letras y la composición, me dijo que me resolvería a la brevedad así que supongo que es de él.- me senté en la cama y busqué los botines.
-¿Qué crees que te haya dicho?- pregunté levantándome y acomodando mi pantalón.
-Espero que diga que sí.- susurró también acomodando su pantalón y la playera. –Vamos.-
-Claro que dirá que sí.- terminé de acomodar mi cabello. –Pero aún tenemos una conversación pendiente.- caminé a su lado para salir de su habitación.
-He estado pensando un poco en eso.- dijo dejándome pasar por enfrente de él. –Antes ya nos hubiéramos comido un montón de veces pero ahora es diferente.-
-¿Diferente es bueno?- pregunté de inmediato.
-¡Claro que es bueno!- contestó terminando de bajar las escaleras.
-El sobre está en la mesa.- su mamá pasó hacia la sala de estar con una taza de té y dos revistas. –¿Se estaban divirtiendo allá arriba?- temblé un poco cuando me miró. –Se reían mucho.-
-Le estaba haciendo cosquillas.- contestó Jonghyun con el sobre en las manos. –Es del Sr. Andy.- susurró asustado, mirándome y tendiéndome el sobre.
-¿Quieres que lo abra?- pregunté tomándolo.
-Sí.- asentí tomando los bordes del sobre. –Pero ahora no.- retiré mis dedos. –Listo, ya me preparé.-
-¿Qué es lo más peor que te puede decir?- preguntó su mamá levantándose para tomar los hombros de Jonghyun, sentándolo y dándole la taza del té. –Que las posponga para dentro de un mes o dos. Hace poco comenzaste y no me gustaría que te agotara.-
-¿Qué dice?- mientras su mamá le daba ese bonito discurso abrí el sobre y saqué la única hoja. –¿Dice que sí? ¿Dice que no?-
-Jonghyun.- susurré muy serio leyendo las letras.
-¿Dice que no?- preguntó ahora su mamá.
Giré la hoja para que él mismo leyera la respuesta.