-¿Con la mamá de Taemin?-
-Sí, sólo llega y corta el césped, en cuanto esté en Seúl también lo haré. Nos vemos.- finalicé pronto porque seguramente saldrá a relucir su santidad y no querrá cobrarle a su suegra. Pero estos son negocios y en los negocios no existe ni la familia.
Además, tengo muchas ganas de hablar sobre Jonghyun y ese asunto pero le dije que no se metiera.
Mordí mi labio desesperado, no quiero más esta situación pero, bueno, tampoco quiero estar sin él. Es decir, no veo lo malo.
Suspiré y acomodé mis gafas, miré hacia el camino y vi que venía un camión, agudicé mi mirada para ver si decía Seúl y sonreí al leerlo. Me aseguré de tener todas mis cosas dentro del bolso que traje, luego de revisar sonreí y me formé para subir.
Pagué mi boleto y me fui a los asientos que estuvieran vacios, acomodé mi bolso en el que estaba libre aun y saqué mi celular para ir escuchando… esos son unos bonitos pantalones.
-Disculpa, ¿va ocupado?- apuntó a donde estaba mi bolsa. Suspiré y negué, al tomé y me cambé de asiento para que él estuviera en el lado del pasillo. –Gracias, sólo voy hasta el centro de Seúl, ahí bajaré.- lo miré y le sonreí por cortesía.
-Yo también.- contesté para seguir buscando los audífonos.
-¿Estás estudiando aquí? Digo, qué pregunta más tonta, por supuesto que estudias aquí, y tampoco te puedo preguntar si es tu primer día porque hoy fue el ingreso.- miré divertido al chico que se enredaba en sus palabras. –Es un clima muy cálido.- reía negando por eso.
-Sí, es cálido.- contesté olvidando mis audífonos. –Fue mi primer día de clases pero mis compañeros son unos idiotas, me voy a esperar un semestre más para volver a entrar.- contesté asintiendo. –¿Hoy también fue tu primer día?-
-No.- negó lento con sus manos. –Es que vine a ver si había cupo en la Facultad que quiero pero ya no lo hay, a veces los que sí quedaron no entran por X o Y razón y esos lugares quedan vacios pero ya me los ganaron.- alcé las cejas sorprendido, no sabía que eso se hacía.
-¿En qué facultad querías entrar?- pregunté.
-Mecatrónica.- wow, ahora me siendo un poco gay con la que yo tenía. –¿Y tú?- oh no por favor, no me hagas decirlo.
-¿Mecatrónica?- pregunté para desviar. –¿Son los que hacen robots?- a eso me suena.
-Entre otras cositas.- susurró sonriendo. –Desde niño cuando compraba juguetes con control remoto los desarmaba para ver cómo funcionaban, incluso estudié una carrera técnica en sistemas para poder hacer la ingeniería.- ¿ingeniería?
-Pero aquí son sólo carreras universitarias, ¿o no?- hasta donde sé es así, por eso se llama “Ciudad Universitaria”.
-Así es, Mecatrónica es una carrera universitaria pero sales como Ingeniero. Eso es lo que quería.- tengo que cultivarme más respecto a esta ciudad.
-Mecatrónica.- susurré. –Hasta el nombre es apantallador.-
-Un poco.- comenzó a reírse. –Soy Sandeul.- me tendió la mano.
-Key.- correspondí estrechándola.
-Entonces ¿en qué facultad estabas? ¿Por qué no te gusto?- desvié la mirada y noté que ya íbamos por la autopista.
-Oh por Dios, no te vayas a reír.- me amenacé jugando.
-No.- negó. –Anda dime, no me voy a reír.-
-Confió en ti.- susurré. –Diseño de Interiores.- confesé con los ojos presionados pero seguro él no los veía por las gafas oscuras.
-¿Diseño de Interiores?- preguntó. –Tiene sentido.- abrí mis ojos sorprendido.
-¿Cómo?- pregunté curioso.
-Tienes pinta de ser de esos que se fijan en la ropa que usan y si combina o no.- entonces recodé lo que pensé de sus pantalones y sólo me reí leve. –Serás un buen diseñador de interiores.- sonreí feliz por eso.
-Gracias.- agradecí.
-Tal vez hasta te llame para que diseñes el tapiz del interior de mi robot.- ambos nos reímos por eso. –¿Pero por qué no vas a entrar este semestre?- dejé salir el aire de mis pulmones y recordé la razón.
-Mis compañeros son unos idiotas.- dije serio. –Por eso.-
-¿Tus compañeros son unos idiotas?- preguntó sorprendido. –Muchas personas no entran porque sólo no fueron seleccionados, otros porque se tienen que mudar y pierden el lugar pero no había conocido a alguien que por eso no tomara la universidad.- me encogí de hombros y sonreí.
-Ahora conoces a alguien.- dije.
-Key, el que dejó la universidad porque sus compañeros son unos idiotas.- visualicé todo eso que dijo como si fuera la cinta de una película. –Es un título largo.-
-Además de que sean unos idiotas quiero tomar Teatro el semestre que viene.-ahí no importa si siguen siendo unos idiotas, estudiaré teatro y nada ni nadie me lo va a impedir.
-¿Te gusta el teatro?- me preguntó, luego de que asentí buscó su billetera en los bolsillos de su pantalón y al sacarla la abrió para mostrarme dos boletos. –Me los gané en una rifa y pensaba venderlos, pero si quieres podemos ir.- me tendió los boletos, los tomé para leer la hora y la obra.
-¿El miércoles a las 5pm?- la obra no la había escuchado pero tiene tintes de ser un buen drama. –¿Es una cita? ¿Te estás citando con un desconocido?- se los regresé.