-Sé que YoungMin también ha de estar deprimido.- comencé a acariciar su cabello, él sólo se dejó querer.
-¡Ahí viene!- me levanté del suelo y despeiné su cabello para darle ánimo.
-Nos vemos más tarde.- susurré, le quería dar un besito pero no puedo. Porque eso me traería problemas.
-Gracias Minho.- entró el maestro y sólo hice una reverencia para salir de ese salón. Estoy pensando seriamente en sólo venir quince minutos antes de que comience a dar clases para no estar aquí toda la carga horaria. Además, no he terminado el proyecto de animación, podría usar el tiempo de la mañana para seguir tomando las fotografías y cuando llegue HongKi sólo nos quedará juntarlas y hacer que pasen muy muy rápido para que se produzca la animación.
Suspiré y fui hacia la cafetería, también necesito la botella de agua.
…
Cerré la llave del agua y agité mi cabello para que se secara.
-¡Entrenador!- me apresuré a ponerme la toalla en los hombros para cubrir mi pecho. –¡Entrenador Choi!-
-¿Qué sucede?- pregunté saliendo de las regaderas mientras secaba mi cabello para ir hacia mi casillero, yei, porque me quedé con el mismo que tenía el semestre pasado en donde metí mi ropa limpia y el resto de las cosas que uso y usaré en la clase.
-Estoy yendo a un gym, ¿cree que tenga que dejar de hacerlo?- no lo miré porque tengo descubierto mi pecho.
-No sé.- sonreí apenado. –Porque podrías desarrollar tus músculos más rápido, pero no sé qué tan musculoso quieras estar. Lo que hacemos aquí sirve para esculpir y perder peso.- seguí cambiándome
-¡Entrenador!- volvió a gritar, tomé mis cosas para cerrar el casillero y cerrarlo. –Entrenador, qué dulce suena. ¿No Minho?- ¡esa voz!
-¡ChangMin!- extendí los brazos para abrazarlo.
-¡Minho!- lo abracé.
-Cuando escuché que Artes dijo que serías Entrenador, pensé “¿Minho usa palancas sexuales?”- nos separamos para golpearle el hombro.-Je, je… me lo gané, lo admito. Pero sí lo pensé.- negué riendo para caminar con él hacia la salida.
-¿Qué haces aquí?- pregunté cerrando los vestidores.
-Oda supo que vendría a Seúl y mandó la convocatoria para el Campeonato de Baloncesto. También me dijo que echara un vistazo a qué estabas haciendo como entrenador y que te felicitara por él.- sonreí orgulloso, el Director Oda también me cae bien.
-¿Y crees que lo esté haciendo bien?- lo miré sonriendo.
-Creo que sí, no pude ver completa la clase pero las gotas de sudor que dejaron tus alumnos en el pavimento son más que evidentes.- yo también las vi, algunos tenían un pequeño charquito otros sólo un par de gotas grandes.
-¿Qué opinas sobre eso?- pregunté caminando hacia la sombra de un árbol, en donde llegaría Taemin.
-Me parece que está bien. ¿Cómo has estado? ¿Me has extrañado?-
-No te pude haber extrañado porque el viernes te vi en Ciudad Universitaria después del diplomado.- dije sonriendo, ahora él me golpeó en el hombro. –¿Cómo estás tú?-
-Estudiando, estoy buscando un libro en esta biblioteca porque en la de allá ya no hay.- ¿qué se supone que le hace pensar que en la biblioteca de esta prepa habrá un libro de su calibre?
-¿Ya lo encontraste?- vi que ya viene Taemin.
-Sí, pero estoy sacando copias.- asentí por eso.
-¿Me acompañas a la sala de maestros?- miré a ChangMin antes de que Taemin llegara, cuando lo hizo me abrazó y besó en los labios. Pero no quedó ahí, sino que noté que estaba mirando a ChangMin y luego tiró de mi labio.
-¿Cómo te fue, amor?- Taemin se metió entre ChangMin y yo para separarnos.
-Bien.- contesté. –Vamos a la sala de maestros para firmar e irnos.- pasé mi mano por la cintura de Taemin.
-Escuché que alguien de aquí se fue a un colegio súper privado, ¿supieron quién?- cerré los ojos con pesadez, no por favor, que no se empiecen a pelear.
-YoungMin.- los abrí sorprendido. –Jo YoungMin se fue a Larú. ¿Por qué?-
-Cuando un colegio de ese calibre recluta a uno de la Universidad o sus ramas, es un orgullo de para la misma.- sonreí y noté que Taemin también lo hacía.
-Es la Copia. Es de YoungMin de quien la Universidad se enorgullece.-
-Te has de sentir feliz por él.- susurró ChangMin poniendo su mano en los hombros de Taemin. –Yo lo estaría, lástima que mi mejor amigo sólo llegó a Entrenador.- siii…
-Lo que me gusta es que me apoyes.- dije.
-¡Hey!- alguien más nos gritó. Nos detuvimos para mirar por encima de nuestros hombros. –Srito Max, Sr. Choi y Srito. Lee. Ustedes hoy salen a las dos de la tarde, están en Detención.- ¿qué?
-Ya oíste, Taemin, te quedas en Detención.- dijo ChangMin soltándonos, entonces quité mi mano de su cadera.
-Usted también, Max.- sonreí ampliamente, ya sé. –No se ría, Sr. Choi que usted también.-
-¿Demostración afectiva en los pasillos?- pregunté.