Ya en su cuarto, James no me dejaba de besar, luego sus labios bajaron por mi cuello, besándolo y lamiéndolo, esto me estaba enloqueciendo.
-A la cama- me dijo dirigiéndome cual si fuera un niño.
Me deje caer en el colchón, el empezó a desbotonar mi camisa, la saco por completo y lleno mi pecho de besos, de vez en cuando miraba arriba para ver mi cara extasiada, siguió y me quito los pantalones quedando yo en mi bóxer apretado, miro hacia mi semi-erecto pene y luego me sonrió, yo me sonroje y eche mi cabeza hacia atrás, el abrió mis piernas, flexionando mis rodillas y quedando el en medio, se quitó la camiseta, me sonreía de manera perversa, yo lo miraba rojo cual tomate, subió a mis labios y empezó a atacarlos de nuevo, lleve mis manos alrededor de su cuello, mordió mi labio inferior y yo ahogue un gemido en nuestras bocas, el me deseaba tanto y yo quería más que eso, no quería alejarme nunca de él, nos separamos porque se nos acabó el oxígeno yo estaba con los ojos entre abiertos al igual que mi boca respirando muy agitado, el me miro sonriendo y con la respiración agitada.
-Donde está el Dave respondón, enojadizo, peleón y muy machito?- me dijo en tono de burla.
Yo le sonreí y me le acerque al oído para susurrarle - cambia en tu cama- y me volví a recostarme.
-Bueno hay que aprovecharlo- dijo empezando a bajar mi bóxer.
Miro mi miembro y luego sonrió parecía feliz de que este erecto, “lindo” susurro, yo me sonroje, detestaba que me mirara así pero al mismo tiempo me encantaba. Su mano empezó un vaivén, subía y bajaba y yo gemía con los ojos entre cerrados, el beso mi cuello, me olvidaba hasta de mi nombre cuando me tocaba así.
-Sabes a veces al gemir suenas como niña- dijo riendo, yo estaba muy sonrojado mientras él seguía con su vaivén, luego se acercó a mi oído, mordió mi lóbulo yo reprimí un gemido.
-Te meteré mis dos dedos a la boca quiero que los lamas si…- me susurro entrecortado por la agitación yo asentí con la cabeza él se alejó un poco, aunque no detenía el movimiento de su mano, con la libre metió sus dedos a mi boca, yo empecé a lamerlos, eso me hacía excitarme más, James empezó a gemir por como mi lengua se metía entre sus dedos y como lo babeaba, luego saco su mano de mi boca y se inclinó a besarme, mientras introducía uno de sus dedos en mí, yo me aparte de sus labios, necesitaba respirar me sentía sofocado con el tocándome así, su dedo entraba y salía yo no podía dejar de gemir muy despacio, entonces metió el segundo yo gemía más fuerte y agudo, la respiración de James estaba agitada y sonreía cuando yo gemía de manera ronca y aguda, sus dedos entraban y salía y hacían tijeras, y luego los doblaba esto me causaba espasmos y arqueaba mi espalda. Luego repentinamente saco sus dedos de mi interior.
-Ya te mime mucho estás listo- me dijo con voz entrecortada de excitación.
-Sí, pero antes… - le dije poniéndome arriba de el- yo te mimo un rato- dije bajando por su pecho y su torso suave, lamiéndolo, el suspiraba pesado, llegue a sus pantalones y se los desabroche bajándolos junto a su bóxer y al quitárselos por completo, lamí la punta de su pene, el gimió y me agarro del cabello tirándolo un poco.
-No juegues Dave, si vas a calentarme sin comerme te voy a hacer gritar por piedad- me dijo sonriendo.
-Tranquilo apenas comencé- le dije y enfoque mi vista en su hombría.
La tome de la base luego empecé a masturbarlo y me metí la punta de su pene a la boca, lamiéndola y babeándola, James comenzaba a gemir, adoraba oírlo gemir por mi causa, entonces sentí de nuevo sus dos dedo dentro mío, por esto saque su hombría de mi boca y gemí agudo.
-Que pasa dulzura? Sigue- me dijo sonriendo, yo estaba rojo y me metí toda la extensión de su pene de una, se me cortaba la respiración pero seguía subiendo y bajando con mis labios y mi lengua, el no detenía el movimiento de sus dedos. Luego se la deje de mamar y el saco sus dedos de mi interior.
-Ya estoy listo y tu- lo mire de manera lujuriosa, el me tomo de los brazos y me puso debajo de él, volviendo a la pose inicial en la que estábamos, el entre mis piernas flexionadas.
Empezó a entrar en mi con estocadas suaves, pero firmes, yo gemí por la mescla de dolor y placer y James gimió por mis contracciones y la manera en la que me arqueaba, mientras apretaba las sabanas.
-Siempre tan de estrecho al principio.
Se comenzaba a mover lento pero de una manera que llegara profundo, yo lo sentía invadirme y moverse dentro mío como quería, no lograba evitar gemir y respirar fuerte, luego de un tiempo así James empezó a moverse más rápido dentro mío, se sentía muy bien y me volvía loco, él tomaba fuertemente mis piernas y de esa manera se impulsaba para entrar y salir con toda libertad.
-Ahaha James ms…más rápido si- estaba al borde de la locura, detestaba como me ponía al estar con él.
Acelero el ritmo y esta vez ya no gemía si no gritábamos de placer, era evidente que el orgasmo estaba cerca, así que el al darse cuenta de mis seguidas contracciones sin mencionar las incoherencias que le decía, tomo mi miembro en su mano y comenzó con un vaivén y mis espasmos al igual que mis contracciones aumentaron, haciendo que el enloquezca.
-James yaahah ya noo…noo aguanto más.
-Yo tampoco- dijo aumentando tan solo un poco más el movimiento asiéndome gritar y llegando al orgasmo, me contraje de tal manera que él no se podía mover, gimió muy fuerte y termino dentro mío cuando yo ya lo había hecho en mi torso y en su mano, salió despacio de mí, y se recostó a un lado.
-Fue genial- dijo con la voz excitada y la respiración agitada envolviéndome en sus brazos apoyando mi cabeza en su pecho
-Tu eres genial- fue lo único que alcance a decir antes de caer dormido en sus brazos.
La verdad es que si fuera por mí estaría lo que resta de mi vida así, incluso la eternidad también, lo odio tanto por hacerme sentir de esta forma.