‘’si, mis motivos’’
Orochimaru iba caminando, estaba en su mundo oscuro, y no hacía caso a nada de lo que sus hombres iban haciendo, el solo caminaba como si fuera autónoma o un títere, podía sentir su venganza entre sus manos, estaba tan cerca como para fallar.
Recordó la cara del hombre que le había hecho tanto daño.
‘’jiraiya’’
Y sin poder evitarlo recordó su pasado, el pasado que lo había hecho el hombre que era en esos momentos, el sufrimiento y el dolor cambian a las personas, y en este caso lo mismo había pasado con orochimaru.
Salgámonos un poco de la historia, y volvamos un poco hacia atrás.
Orochimaru era un joven alegre y hermoso, en su villa era querido, aunque no tenía dinero y su familia era pobre, el nunca dejo de sonreír, porque sabía que si tenía una familia que lo quería lo tenía todo, y los aldeanos compartían las comidas con ellos, todo era hermoso.
Aunque no tuviera dinero era el doncel más hermoso que había, si un doncel…
Era una gema en bruto, con sus ojos dulces, y sonrisa amable, muchos lo pretendieron, pero él no quería amor, o una pareja, se sentía bien como estaba además le gustaba cuidar a sus pequeños hermanos.
No tenía tiempo para poder perderlo en varones.
Tal vez ya estaba demasiado mayor para no estar acompañado, tenía 17 a punto de cumplir 18 pero eso a él no le importaba, él siempre fue la luz de su villa y todos lo respetaban.
Pero todo cambio cuando se encontró a un joven apuesto, el más hermoso que había visto, llevaba su largo cabello blanco en una coleta alta, su cara tenia líneas rojas y sonreía amablemente, alto y con un cuerpo bien formado, llevaba katanas, parecía un samurái retirado. Capto toda su atención y se cautivó al ver como el varón de ojos negros le miraba a él.
De algo si estaba seguro, no era de su aldea, quizá iba de paso, y no se equivocó el joven varón iba de paso, pero su estancia se alargó, al conocer a orochimaru, como muchos otros lo pretendió, y orochimaru cayo enamorado del varón, pasaban tardes, hasta días enteros juntos, era un amor puro, y cristalino, así como el agua.Se amaban.
Se enamoró de jiraiya, aunque no sabía mucho de el ya que el varón no le decía nada, era muy misterioso pero aun así lo siguió amando tanto.
Siempre desparecía antes del anochecer, y volvía con él en las mañanas, pasaban horas contemplándose, y cuando se dieron su primer beso, fue el momento más cálido de orochimaru, no le importaba que pasara en un futuro porque él estaba feliz de tener un presente con jiraiya.
‘’te amare siempre orochimaru’’
Orochimaru se entregó al amor de su vida, le dio su primera vez de todo, su primer beso, su primer amor, su inocencia, porque sabía que jiraiya no era malo, sus ojos negros siempre le miraba con ternura e infinito amor. Bajo la lluvia jugaban y se abrazaban.
Y sus noches apasionadas se hicieron mayores y largas, amándose sin apuros y sin ataduras, y el fruto en el vientre de orochimaru confirmaba su amor.
‘’-tendré un hijo
-n-no puede ser- lo jalo y lo abrazo a su fuerte cuerpo, su cara demostraba preocupación-
-te amo tanto! Estoy feliz!
-y-yo igual-lo separo y acarició su cara lentamente- eres hermoso’’
Y esas habían sido las últimas palabras que había escuchado de él, jiraiya no volvió a aparecer durante unas semanas, orochimaru deseaba con todo el alma verlo de nuevo, pero si hubiera sabido lo que le esperaba al verlo de nuevo, se hubiera quedado solo.
En una noche, toda su vida cambio, hombres del imperio habían arrasado con su villa sin contemplaciones ni remordimientos, habían matado a casi todos y quemado también, los que habían podido sobrevivir estaban corriendo en busca de protección, orochimaru había podido salir, y en todo momento cuido de su pequeño vientre que apenas comenzaba a abultarse.
No entendía porque estaban haciendo eso.
Eran samuráis imperiales, que tenían ellos que hacer contra su villa? Ellos no habían hecho nada malo.
No pudo huir como otros, estaba destrozado y mareado por tanto humo, recordaba a sus hermanos muertos, quemados vivos, estaba asustado, y lloraba, unos samuráis lo agarraron y se lo llevaron con poca delicadeza, cuando llegaron a un pequeño monté cerca de su villa, lo tiraron al suelo.
Orochimaru podía ver como todo se consumía en llamas, quería gritar, quería decirles ‘’porque hacían todo eso?’’
De las sombras vio como salía el emperador en persona, era un hombre tétrico, con la mirada más dura que había visto, el hombre imponía terror.
‘’-eres la puta que dejo preñado mi hijo, es una deshonra y para peor eres un muerto de hambre’’
-hijo? –decía desorientado y confundido.
-jiraiya es mi hijo, y él te manda este saludo’’
No había podido ni captar la idea cuando los dos hombres que tenía cerca, habían comenzado a golpearlo, pudo reaccionar y se hizo bolita tapándose el vientre, los golpes eran dolorosos, pero quería recibir el daño el, no su niño.
Pero no pudo hacer nada cuando lo sostuvieron y el mismo emperador le había dado una patada con toda la fuerza en su vientre.
Grito de dolor, grito de amargura, su mundo se le destrozaba, cayó al suelo casi inconsciente, podía ver toda la destrucción, el dolor le cegaba y con dificultad sobo su vientre, a lo lejos vio la cabellera blanca, ese pelo lo reconocía en cualquier lado, lo había acariciado tantas veces.
Ahora solo veía entre borroso como se iba encima de su caballo y lo dejaba ahí solo con su sufrimiento.
Cerró los ojos que estaban abarrotados con lágrimas, dentro de sus piernas sentía fluir algo, sabía que era sangre y sabía que había perdido lo más hermoso que había conseguido.
Solo quería dormirse y no despertar jamás, no quería saber que por su culpa habían matado a casi toda su villa, que por haber amado incondicionalmente a un hombre había pasado todo eso.
Como el amor podía ser tan dañino?
Como jiraiya le había hecho eso? Porque no le había dicho la verdad, porque lo había utilizado de esa manera?
Se sentía estúpido, y sin vida, solo quería ahogarse en sus lágrimas.
Después de ese día, nada había sido lo mismo, su corazón se llenó de odio, se odiaba el, por no haber muerto con su bebe, se odiaba por haber causado todo eso y odiaba a jiraiya por haberle hecho todo eso.
Por su culpa no pudo encontrar paz, no pudo volver a amar, y no pudo volver a engendrar vida en él.
Se había acompañado con un varón, pero al ver que orochimaru nunca le daba hijos lo había dejado, orochimaru lleno de odio y de dolor, planeo su venganza por todo lo sucedido.
Había tomado tanto tiempo, pero ahora podía ejecutarlo y estaba tan cerca de lograrlo.
Sus ojos iban llenos de lágrimas, agradecía que sus hombres fueran atrás de él, así no lo veían en ese estado tan lamentable, llevo sus manos a su vientre, y lloro, ya nada quedaba ahí.
No lo podía perdonar, habían pasado los años, pero él todavía lo sentía en su piel, el amor y el dolor que le había causado encontrarse con jiraiya.
‘’ahora él es el emperador, y tiene hijos, es casado y está feliz, bastardo, todo a costa de mi’’
Quiso desfallecer y quedarse ahí, plantado en la tierra, quería consuelo, pero los años habían formado un caparazón que no dejaba ver lo que en verdad pasaba con él.
-me adelantare-dijo en un susurro.
Salió corriendo ya no le importaba esa herida que tenía, solo quería desaparecer.
Cuando se vio lejos se tumbó en el pasto y vio el cielo, hace tanto que no lloraba y ahora estaba ahí, volviendo a sentir todo lo que una vez sintió a flor de piel.
Se hizo bolita y buscó consuelo en el suave viento y en la hojas que Caían en frente de él.
.....................
-oh no!
-oh no que?? Soy muy feo o qué?
-n-no es eso…-Itachi se acercó más y naruto se coloro- espera!!
-qué pasa?
-NO ESTAS MUERTO!!!
-no no lo estoy, pero si, muy mal herido.
-qué?-Y ahí lo noto, itachi sangraba por uno de sus costados, el rubio se alarmo – oh por kami-sama!! Quítate la ropa rápido!
-oh no sabías que estabas tan interesado en mi.-naruto no le hizo caso y comenzó a jalarle la ropa lastimándolo- auch auch ya entendí, espera!
Naruto lo dejo e itachi comenzó a quitarse la ropa que andaba, dejando ver su gran cuerpo y la herida de espada profunda.
-sasuke pensó que todos estaban muertos!
-llevo inconsciente por varias horas, la realidad me ha pegado duro a mí también auch! Ten un poco más de cuidado!!
Naruto limpiaba la herida con un pedazo de tela rota y un poco de agua que todavía le quedaba.
-no te quejes tanto! Trato de ayudar… esto se ve un poco grave, tenemos que ir a la villa más cercana y que te curen.
-como diga el doncel más hermoso que haya visto.
El rubio vio como Itachi sonreía, el varón era guapo, tan guapo como sasuke, no sabía cómo reaccionar, Itachi era tan abierto y directo con sus sentimientos, era algo nuevo para él, pero recordó a sasuke, se sentía triste pero aun así su corazón latía desenfrenado al recordarlo.
Itachi le tomo la mano y la beso suavemente.
-que es lo que te perturba?
-nada-dijo suave, no podía decirle que estaba así por sasuke- vámonos, sube en el caballo tenemos que apresurarnos.
-está bien.
Así comenzaron el viaje, buscaron la villa más cercana, naruto iba en frente e itachi atrás, estar pegados era irremediable, Naruto iba nervioso, podía sentir como Itachi le abrazaba por la cintura, como recostaba su cara en su hombro y le decía como excusa ‘’estoy mareado’’
Cuando al fin llegaron naruto busco al sanador del lugar, tuvo que esperar bastante tiempo sentado a fuera de la casa, unas mujeres amables le habían dado ropa era un kimono de verano, que se entornaba a su bella figura, tomo un baño dejándose limpio, se puso el kimono y dejo su pelo rubio suelto.
Cuando salió el sanador le dijo que podía pasar a ver a Itachi, Que en esos momentos estaba dormido.
-ha perdido mucha sangre, tiene que tener reposo y recuperarse, no puede hacer movimientos bruscos, por favor cuide de él.
-si-hizo una reverencia, no sabía cómo pagarle.
-no se preocupe, vi que es un samurái, es un honor servirle a uno. Aquí se les acogerá bien.
Naruto sonrió, habían buenas personas, se metió en el cuarto y vio a Itachi durmiendo, se acercó y se sentó a su lado, se veía muy cansado, y titirineaba, seguro tenía fiebre, no podía moverse cuando Itachi estaba así de mal, tampoco lo podía dejar.
Era más seguro que sasuke escuchara a su propio hermano antes que él.
Solo pensarlo su corazón se encogió, la última mirada que le había dado había dolido tanto, acaso lo perdonaría?
Él también estaba cansado, y se sentía sin fuerzas, se recostó en el suelo, viendo el perfil del varón que tenía en frente y cerró los ojos, por lo menos iban estar seguros ahí.
...........................
Cuando abrió los ojos todo estaba oscuro, suponía que eran altas horas de la madrugada, se sentía cómodo, un agradable calor lo envolvía, fijo mejor su vista y vio que estaba recostado en el futon donde Itachi también dormía, se apeno y trato de levantarse, pero los brazos de Itachi lo mantenían bien envuelto, se sonrojo y escucho la suave sonrisa del otro, levanto su cara y vio los ojos negro con destellos rojos abiertos.
Las suaves caricias en su espalda lo calmaron, Itachi lo miraba, le dio un beso en la frente y de ahí hizo que volviera a poner su cabeza en su pecho quitándole alguna vista al rubio.
-solo duerme- la voz ronca y pasible retumbo en sus oídos.
Cerró los ojos y se dejó llevar.
........................
Kiba miraba con mala cara como esos dos dormían, tenía que reprender a naruto por hacer cosas antes del matrimonio, suspiro por enésima vez, le estaba constando mucho no lanzársele encima y despertarlos.
La mañana ya caía encima de ellos, y kiba estaba desesperado tenía ganas de comer pero Naruto seguía dormido como una roca, no aguanto más y se acercó ladrándole en el oído, Naruto pego el grito y kiba comenzó a reír.
-esto no es graciosos maldición!!
-oh sí que lo es jajaja!!
-naruto estas bien?-preguntó un adormilado Itachi.
- ah sí, no fue nada- la puerta fue tocada y por ellas entraron dos mujeres que llevaban platos de comidas.
-esperemos su pronta recuperación.
-gracias señoritas- decía itachi con una sonrisa.
Kiba se acercó a naruto y le susurro.-tenemos que hablar jovencito… ah y si no te importa iré a cazar bellas jovencitas.
-tienes que volver o me iré sin ti.
-sí, sí.
Kiba salió de la habitación corriendo, Naruto ayudo a Itachi a sentarse y los dos comieron, el azabache lo miraba con cuidado Y naruto no se daba cuenta por estar perdido en sus pensamientos.
-ya lo decidí! Cuando te recuperes y te sientas más fuerte iremos donde sasuke!
Itachi vio como los ojos azules le brillaron cuando menciono a sasuke, suspiro con pesar, había llegado demasiado tarde a la vida de Naruto.
Asintió, así pasaron dos días completos.
Naruto le cuidaba y le sonreía a él, era el doncel más hermoso que había visto.
Le tenía envidia a sasuke, él se lo había ganado.
Deseo quedarse con naruto en esa villa, ser solo ellos dos, pero tenía un deber, y ese deber era con todo su país, no podía permitirse ese lujo cuando tenía el destino de Japón en sus manos.
Se puso la ropa que le habían ofrecido y tomo prestada la armadura de Naruto, le quedaba perfecta, justa a sus músculos, estaba listo. Naruto entro y se quedó sin habla al verlo listo, no le había dicho nada, había sido todo muy de improviso.
-estas bien?
-sí, ya es hora que nos vayamos.
-pero todavía sigues…
-no quiero pasar más tiempo contigo- esas palabras habían dolido- si lo hago no querré separarme nunca de ti.
Pero esas palabras habían sanado el escozor de las otras palabras, Naruto se sonrojo y sintió como Itachi acariciaba su cara y después su cabello.
-alístate, nos vamos.
-sí.
Itachi sonrió triste, había pasado dos días, donde había apreciado a Naruto, porque sabía que después de eso, ya no lo volvería a ver… lo presentía, naruto no se tardó nada en estar listo, había conseguido otro caballo para él, así que montaron con provisiones de comida y mantas.
Tenían que recuperar esos dos días, así que galoparon sin descanso, llevando al límite a sus caballos, pero habían acortado la distancia mucho, la última noche antes de entrar ya a territorio imperial, Itachi detuvo a naruto.
-oye!! Estamos cerca.-dijo el rubio
- lo sé.
-escucha eso, es música!! Es un festival! Acaban de llegar!
-tal vez tengas razón.
-iban a pie, nosotros hemos hecho el recorrido a caballo, pudimos alcanzarlos!! Tenemos que entrar rápido.
-naruto, escucha!
-Itachi tenemos que…
-por favor escucha!.
-ah sí, perdona...
-eres hermoso- se acercó a él y lo tomo por la cintura.
-si lo sé, me lo dijiste muchas veces.
-me gusta tu sonrisa y tus hermosos ojos azules.-se acercó más dejando sus caras a unos cuantos centímetros- es una lástima que ames a mi hermano y no a mí.
Naruto se sonrojo, es que acaso había sido tan obvio?
Reacciono cuando sintió los suaves labios de Itachi sobre los suyos.
Era un beso, UN BESO!! SU PRIMER BESO!! Era una caricia suave y lenta, y las manos grandes de itachi acariciaba su mejía y sus cabellos, cuando se separó le sonrió-por lo menos sé que fui el primero en algo.
-eres un idiota!!-dijo apenado con sus mofletes inflados.
-si lo soy, ahora si vamos!! No hay nada mejor que recobrar energías robando besos.
-eres un!!!
Itachi se fue riendo, y Naruto se acarició los labios, estaba tan avergonzado, era un pervertido por haberle robado su primer beso, que se creía?
No le quedo de otra que seguir a Itachi.
Entraron al territorio y vieron a sasuke con los demás samurái, Naruto se alegró, y Salió a todo galope, tenía que enfrentar a sasuke. Estos iban pasando y los aldeanos aplaudían y reían felices al ver los héroes de Japón, al final estaba la entrada del castillo imperial y ahí espera el emperador.
Sasuke iba con la cabeza en alto, pero no sonreía, no se sentía digno de tan gran recibimiento, varias decoraciones, música alegre, pólvora china.
Su camino fue interrumpido cuando un rubio se puso en frente.
-que demo… Kura…
-soy naruto, sasuke tienes que proteger al emperador!
-de que hablas?
-los orochi venían hacia aquí!! Vienen por el emperador.
-estás loco, vete por donde viniste.
-tienes que creerme!!!
-no estoy tan mal para volver a creer en ti- dijo frio y retomo su camino, naruto agacho la cabeza dolido, contuvo las ganas de llorar y sintió una mano en su hombro.
-tranquilízate, vamos hacer guardia, mi tonto hermano menor como se atreve a tratarte así.
-ya no importa, vamos.
Naruto comenzó a buscar a los orochi, eh itachi también hizo lo mismo, pero no se miraba nada fuera de lo normal, pero el rubio sabia… él estaba seguro de que algo iba a pasar.
-No desesperes vamos hacia el emperador.
Itachi comenzó a moverse y naruto también, a lo lejos pudieron ver como sasuke llegaba al frente del emperador y todos hacían silencio y se inclinaban, sasuke caminaba con la espada de orochimaru, aunque el rubio había sembrado la duda en él. Y si orochimaru estaba cerca?
Tampoco sabía porque había sonado tan rudo.
Ahora se reprochaba mentalmente por ser tan estúpido, cuando estuvo en frente del emperador este hablo contento.
-eh aquí, a los héroes de Japón!!!!
Todos gritaron felices, sasuke se inclinó y le ofreció la espada al emperador.
-aquí está la espada de orochimaru.
-se lo que representa esta espada –dijo despacio- sé que tu padre hubiera estado orgulloso de ti.
Jiraiya estaba a punto de agarrarla cuando, dentro de la multitud, unos encapuchados salieron con máscaras de onis* y corrían a toda velocidad hacia sasuke y el emperador. Sasuke apenas pudo reaccionar cuando ya lo habían golpeado en el estómago y estaba en el suelo, le habían arrebatado la espada, y habían agarrado al emperador, solo pudo ver como subían las gradas con el emperador que forcejeaba para liberarse, en la punta de las escaleras estaba orochimaru, vestido de negro, un enmascarado le dio la espada.
Este sonreía satisfecho.