Los brazos de James se aferraban a su espalda brindándole una acogedora calidez, al mismo tiempo que sus labios se rosaban dulcemente, dándole paso a un beso más intenso por parte del exgryffindor, que el correspondió. No podia evitarlo, amaba a James Sirius Potter.
Cuando James termino el beso se separó lentamente de él, y ambos se quedaron perdidos en los ojos que tanto amaban, mientras sus acelerados corazones amenazaban con salirse de su pecho.
Habia pasado un día estupendo la mayor parte de este muy acaramelado a Albus, cuando la noche llego, le dio un beso rápido a su novio y se fue a su habitación, mientras Albus hacia sus rondas de prefecto.
Estaba a punto de acostarse en su cama cuando Scorpius hizo acto de presencia con una radiante sonrisa.
—Parece que a alguien le fue muy bien en sus clases privadas— dijo con una soñadora sonrisa.
Scorpius se sonrojo levemente y le dijo—Lo he conseguido Lorc, por fin pude hacer un Patronus corpóreo—
—Enhorabuena Scor, haber déjame verlo— dijo Lorcan emocionado acercándose hacia su rubio amigo, al cual se le torno el rostro aún más rojo.
—No te vayas a reír vale— le dijo Scorpius al mismo tiempo que alzaba su varita para hacer el hechizo.
Mientras la brillante luz salía de la varita de Scorpius el solo miro expectante en la espera del Patronus de su amigo, desde que conocía a el rubio a este casi siempre a la primera le salían los hechizos, así que cuando este no pudo lograr el Patronus corpóreo él se sorprendió mucho y se preguntaba curioso cual sería el Patronus de su amigo.
Varios tipos de Patronus habían pasado por su cabeza, pero en ningún momento imagino ver una mantícora con la cara de James como el Patronus de Scorpius.
Y contario a reírse solo pudo poner su cara soñadora enternecida al ver el grado de amor que el heredero de los Malfoy le tenía a James.
—Es James— dijo después de un rato.
—Sí, le dijo Scorpius nuevamente sonrojado, dejándose caer en su cama—
—Eso significa que ya están juntos— inquirió Lorcan curioso.
—Algo así— le dijo el rubio con una sonrisa.
— ¿Cómo que algo así? —
—Es que no lo hablamos, pero nos besamos—
—Scor, recuerda que James y Albus son algo lentos, tienes que dejarle bien en claro que el ahora es tu novio—
Cuando llego a su habitación, con una radiante sonrisa dibujada en su rostro, se percató de que a pesar de que habia logrado besar y abrazar a su rubio de ojos platinados, tontamente se le habia olvidado volverse a declarar, no podia creer que después de ese momento mágico que habían tenido se le hubiera olvidado pedirle al heredero de los Malfoy ser su novio.
Y a la mañana siguiente mientras desayunaba en lo único en que pensaba y que quería era estar nuevamente con su rubio a solas para pedirle como era debido que fuera su pareja.
Sin embargo no habia esperado que la directora McGonagall, lo tuviera ocupado con asuntos del colegio que no formaban parte de su trabajo como profesor.
Cuando habia bajado a la sala común listo para irse con Ellen y Rose al gran comedor, encontró a las dos Gryffindor mirando muy curiosas el tablón de anuncios, ya que en este habia un anuncio sobre el inicio de las clases de aparición.
La mayoría del desayuno las dos chicas se la pasaron hablando emocionadas sobre dichas clases mientras él pensaba en la mejor idea de cómo lograr que Scorpius y James estuvieran juntos.
Concentrado pero con una cara soñadora recordó una parte del castillo que su mama mencionaba mucho, pero a la que a él no le habia causado tanto interés como para ir a buscarla.
No obstante aquel lugar era perfecto para lo que habia planeado.
Desde que habia logrado hacer su Patronus corpóreo, no habia podido hablar con James a solas, quería decirle que lo perdonaba y lo mucho que lo amaba, pero las circunstancias no estaban de su lado, James estaba ocupado con asuntos del colegio y él lo estaba con los entrenamientos de quidditch y las prácticas de Aparición extras que Rose los estaba obligando a tener.
Lo único que podia hacer era mirar a James en el gran comedor y durante sus clases.
Cuando el fin de semana por fin llego empezó a poner su plan en marcha, dicho plan no era nada laborioso, pero él creía que si lo suficientemente efectivo, ya que a su parecer Scorpius y James solo necesitaban un pequeño empujoncito para poder estar juntos.
Así que le dijo a James que la directora McGonagall, lo mandaba a buscar unos libros de defensa contra las artes oscuras y le mintió a Scorpius diciéndole que lo ayudara a buscar unas cosas que los Nargles le habían escondido.
Cuando llego al lugar en donde se encontraba la sala de los menesteres con Scorpius a su lado, quien se esforzaba todo lo que podia en ver a los Nargles y encontrar las cosas escondidas de su amigo, aunque nunca habia podido ver a los Nargles. Vio a James salir de la sala confundido.
Al instante, los ojos de James y Scorpius se iluminaron al verse y Lysander aprovecho su distracción para empujarlos a la sala y encerrarlos, lanzando un hechizo para que estos no pudieran salir.
James y Scorpius se miraron confundidos un segundo antes de poner una sonrisa. Ya que entendieron inmediatamente lo que habia hecho Lysander.
—Te he extrañado— dijo Scorpius sonrojado sentándose en un largo sillón que se encontraba en la sala.
James ensancho su sonrisa y acercándose lentamente al rubio, tomo su mano para levantarlo y arrodillarse él. Scorpius lo intento levantar pero el negó con la cabeza y mirando los platinados ojos que tanto amaba dijo — Scorpius Hyperion Malfoy, te amo como nunca pensé que amaría a algui….. antes de que James pudiera terminar su declaración. Scorpius poso delicadamente un dedo sobre sus labios silenciándolo.
Se arrodillo para quedar a la misma altura que James y mirando muy profundamente los ojos avellana del exgryffindor dijo — Yo también te amo, te he amado desde que te vi en el callejón Diagon y estoy seguro que lo are toda mi vida— hiso una pausa y con voz seria y firme dijo— Pero por mucho que te amé, si me vuelves a dejar, si te apartas nuevamente de mí no te lo voy a volver a perdonar—
James sonrió con una radiante sonrisa y colocando sus manos sobre las mejillas del Slytherin, lo acerco aún más hacia él juntando sus frentes y dijo— Nunca, me voy a volver a alejar de ti, tu eres lo único que quiero y necesito en mi vida, así que vete preparando, porque pienso recuperar todo el tiempo que hemos perdido—
Scorpius se sonrojo y tomando por sorpresa a James lo beso profundamente a la par que lo abrazaba.
No estaba seguro de cuánto tiempo le tomaría a Scorpius y James reconciliarse, pero intuía que no pasaría nada si los dejaba ahí un día o dos, después de todo ambos tenían mucho de qué hablar.
Así que se regresó a su sala común a buscar a Ellen.
Después de terminar el beso Scorpius se levantó y levanto a James para que ambos se sentaran en el largo sillón.
—Aquella vez que hicimos el Patronus en que recuerdo mío pensabas— inquirió James curioso tomando la mano de Scorpius.
Scorpius no pudo evitar sonrojarse y aferrándose más a la mano de James dijo —Pensaba en la primera prueba, antes de que salieras a enfrentar a la mantícora, yo estaba nervioso, pero también estaba feliz de que te preocuparas por mí y de que no te hubiera pasado nada, ¿tú en que recuerdo mío pensabas?—
James puso una cara enternecida antes de decir —Yo también pensaba en la primera prueba, pensaba en ti cuando me deseaste suerte antes de realizar la prueba, aquello me hiso sumamente feliz, aunque lo que paso después ya no tanto—
—Tú tienes la culpa de lo que paso después, si no te hubieras ido y hecho novio de Myrcala, yo nunca habría aceptado a Alistair —
—Lo sé fue mi culpa, y por eso estoy arreglando todos los errores que cometí— dijo James con una pícara sonrisa acercándose al rubio para atrapar sus labios.
La mayor parte del día se la habia pasado abrazado a Albus en la sala común de Slytherin, pero cuando noto que empezaba a oscurecer, también noto que no habia visto a Scorpius desde el desayuno, así que levantándose del sofá en donde estaba, jalo a Albus y juntos se encaminaron al gran comedor, esperaba encontrar ahí a Scorpius.
No encontró al rubio, pero si a su gemelo.
—Lys, has visto a Scor, no lo hemos visto desde el desayuno—
—Scor, está bien Lorc, está haciendo las pasas con James—
— ¿Cómo sabes que esta con James? — Pregunto Albus.
—Lo sé porque, los encerré en la sala de los menesteres— les dijo Lysander como si aquello fuera lo más natural del mundo.
Lorcan y Albus se golpearon al mismo tiempo la frente al oír las palabras de Lysander.
—Ven Lys vamos a liberarlos— dijo Lorcan a la par que jalaba a su hermano y su novio para ir a liberar a su amigo.
Cuando llegaron a la sala de los menesteres, y Lysander quito el hechizo entraron a la sala, encontrando a un Scorpius acostado sobre las piernas de James mientras leía un libro y el mayor le acariciaba el rubio cabello.