El ángel y el loto.
Capítulo II
P.O.V Mu.
Domando leones.
Errante, solo y sin ayuda Brittany se convirtió en mi única esperanza, pero mientras el tiempo cruelmente avanzaba yo me iba quedando sin dinero y sin alternativas.
Mi hija y yo pasábamos todo tipo de necesidades y no podía arriesgarme a llamar demasiado la atención, mudarme y conseguir empleo en el pueblo no era definitivamente una opción a considerar, tenía que actuar y deprisa y no se me ocurría que hacer.
En una de las ocasionales salidas al pequeño pueblito a comprar víveres, conocí a un hermoso joven me dijo que su nombre era Aioria, llamo poderosamente mi atención porque no parecía ser del lugar, se me acerco y me dijo que no había visto a alguien como yo y que si me interesaría trabajar que el conocía a la persona indicada, para ese momento me pregunte si estaba escrito en mi rostro que necesitaba ayuda o si acaso ese chico era alguna clase de psicópata que quería desmembrarme, me reí internamente de mis pensamientos, le mire y aunque a primera impresión me sorprendió su osadía y desfachatez no pude evitar notar que no había rastro de malicia en su rostro y en honor a la mas franca verdad mi economía en esos momentos era prácticamente inexistente, así que me encogí de brazos y le dije que sí que me dijera que debía de hacer.
Me sonrió de lado y me dijo "brillaras pequeño, ya verás".
Por primera vez realmente le mire y me senti embobado con el chico, era muy hermoso, grandes ojos verdes, piel bronceada como besada por el sol, sedoso y brillante cabello castaño muy claro y una hermosa sonrisa, en definitiva todo un manjar a la vista y me sonroje un poco y baje la mirada.
- una moneda por tus pensamientos pequeño ángel - me dijo con su sonrisa de lado, esa que comenzaba a ponerme nervioso.
- ¿por qué me llamas pequeño si somos prácticamente de la misma estatura? - le pregunte visiblemente molesto.
- tranquilo fiera, es solo que eres tan hermoso y delicado que pareces un ángel caído del cielo, o una especie de aparición divina, aun no he escuchado tu nombre, precioso. - Me respondió sonriendo.
- Mu, me llamo Mu.
- es un hermoso nombre, tanto como tú.
volvi a sonrojarme y esta vez el si lo noto y sonrió.
- gracias, supongo.
- Y ¿qué te trae por estas tierras Mu? es obvio que no perteneces a este lugar.
- alejarme del bullicio de la ciudad- respondí evitando mirarle a los ojos, temiendo revelarle mi más profundos secretos al chico que estaba a mi lado.
- mmm... digamos que te creo y dejemos el asunto por la paz, escúchame Mu, te llevare a conocer a alguien, es el dueño del lugar donde trabajo el es un tipo un tanto extraño, pero es muy buena persona, se que le encantaras porque Dita ama la belleza y tu eres muy bello solo haz lo que él te pida que hagas bien y el estará feliz ¿entiendes?
- Aioria, no me has dicho en que es que trabajas- aunque tenía una ligera sospecha de que podía ser o al menos eso pensaba yo.
Lanzo una carcajada que no alcanzo sus hermosos ojos y me miro fijamente, luego acaricio mi mejilla tiernamente.
- Mu ¿en realidad crees que fue casualidad que me acercara a ti? - Me dijo mientras suspiraba - te he observado varias veces y siempre que te visto he podido notar el desconcierto en tu bello rostro, se que estas en problemas y no trates de negármelo. Puedo ser joven, pero conozco de la vida, y veo en ti al mismo joven desorientado que yo fui al llegar a estas tierras hace años huyendo de mi pasado. Sé que no es fácil vivir en un lugar que no conoces sino tienes a nadie que te de la mano, no se qué te trajo a estas tierras lejanas del mundo, y no te pido que me lo digas tampoco, pero si puedo ayudarte lo hare y llevándote con Dita es la única forma que conozco de hacerlo, ¿me dejas ayudarte, Mu?
Me quede pasmado al escuchar sus palabras y no pude hacer más que asentir a estas, había tanta sinceridad impregnada en ellas, que desde ese preciso momento supe que Aioria sería parte vital de mi vida.
- ¿Aioria?
- Dime, Mu.
- háblame de ti, ¿de dónde eres?
Soy griego, de Atenas, específicamente. Soy el menor de dos hermanos, mi hermano se llama Aioros y somos huérfanos, ¿y tú?
- Soy del Tíbet, de una pequeña tribu casi extinta, Lemuria se llama mi aldea.
- No la conozco.
- No me sorprende - dije en tono de tristeza.
Y así nos enfrascamos en una muy agradable conversación hasta que llegamos al lugar donde Aioria trabajaba. Cuando llegamos se identifico como el león dorado, lo que llamo bastante mi atención y un hombre alto de piel bronceada, ojos azules, cabello azul corto, muy guapo aunque con una sonrisa sádica que daba miedo nos recibió, note que, tenía un marcado acento italiano.
- hola Deathmask, este es mi amigo Mu, se lo traigo a Dita para que lo conozca, mi amigo necesita trabajar y creo que puede servirnos muy bien - dijo entre bromas con el sujeto aterrador.
- claro gatito, llévaselo al pez, de seguro le encantara ya que parece un angelito, oye tu! - dijo señalándome - el pececito es mío, ¿entiendes?, nada de andarse fijando en el - se retiro mientras me daba un palmada en la espalda.
- tranquilo pequeño, Death es aterrador, pero es buena persona, ese tipo rudo que creíste ver es solo una pose para mantener a los revoltosos a raya, en cuanto a lo de Dita, eso fue en serio mantente alejado o te molera a golpes, Dita es su esposo y Deathmask es muy celoso.
- ¿Dita? que clase de nombre es ese para un hombre - pregunte curioso.
- en realidad, mi nombre es Afrodita, lo que pensándolo bien no ayuda a aumentar la masculinidad de mi nombre, pero según mi padre era eso o que mi madre me pusiera la versión Romana del nombre de la diosa griega del amor y no creo que Venus fuera más masculino de todos modos - respondió calmadamente una hermosa voz a mis espaldas.
Me quede helado, no creí que me atraparía hablando sobre él, y mucho menos criticando su nombre.
- yo...lo... si... siento - dije muy avergonzado dándome la vuelta, solo para encontrarme a la que presumiblemente fuera la criatura más bella sobre la tierra, quede mudo ante tanta belleza y con la boca abierta, delante de mi estaba un hermoso hombre de piel blanca como porcelana fina, con unos ojos celestes como agua de mar y un largo y ondulado cabello del mismo color de sus ojos que caía grácilmente como cascada por sus hombros, unos hermosos y carnosos labios rosados y un lunar que invitaba al pecado, estaba simplemente estupefacto ante tal criatura.
- deberías cerrar la boca Mu, o ensuciaras el piso de babas - se burlo Aioria sacándome de mi ensoñación, mientras yo me sonrojaba furiosamente.
- Dis...discúlpeme por favor, no quiero ser grosero, ni ofenderlo, pero es que usted es realmente muy hermoso, sin faltarle al respeto - ya que vi, como el sujeto Deathmask me miraba fijamente, para después tanto él, como Dita me sonrieron.
- ¿no es una ternurita este chico Masky?, tu también eres muy bello, y que trae a un ser tan bello a un lugar como este - pregunto con suspicacia.
Fue Aioria quien se adelanto y contesto.
- mmm Dita, este es mi amigo Mu, necesita trabajo y le dije que lo podrías ayudar, ¿lo harás, Dita? Por favor.
- gatito, sabes que aquí siempre habrá lugar para el que lo necesite, además de que el bicho, la hielera con patas y tu ya no dan abasto, lo que pasa querido Mu es que los clientes o intentan robarse a mis empleados, o estos se casan entre ellos y se largan - dijo entre risas esta vez dirigiéndose a mi.
- escucha Mu, - dijo de repente serio afrodita - como te habrás dado cuenta esto es un club, aquí los chicos acompañan a los clientes y los atienden, yo pago muy bien, puedes vivir aquí o solo venir a trabajar en las noches, es tu decisión, no te preguntare que te trajo aquí y desde este momento, cuentas con mi ayuda y protección, no sé si te sirve lo que te ofrezco, pero es la única forma de ayudarte que tengo. ¿Me entendiste?
- sí, eso creo... pero, ¿atenderlos como? Dita.
- hombres y algunas mujeres de alta sociedad y con mucho dinero vienen a este lugar buscando compañía, a veces solo desean alguien con quien hablar, tomarse unos tragos y bailar, al veces buscan compañía mas... como decirlo mmm ... Intima, no debes hacerlo si no quieres, no estás obligado.
- entiendo perfectamente y acepto Dita, necesito el trabajo y de nuevo... gracias.
- No me lo agradezcas hermoso, porque puede que esta sea la única forma que conozca para ayudarte, pero eso no significa que sea la correcta - dijo acariciando mi mejilla mientras se sentaba en su escritorio.
- Aioria, preséntale a los demás chicos y a nuestro jefe de seguridad Aldebarán, le pediría al cangrejo que lo haga pero mi maridito y yo tenemos "asuntos" que atender - dijo guiñándome un ojo y devorando a Death con la mirada.
- vamos Mu, te presentare al bicho y al cubo - dijo mientras me arrastraba fuera de la oficina de Afrodita, a la cual habíamos entrado hace un rato.
- Hey, chicos carne fresca - grito Aioria a dos chicos extremadamente hermosos, uno de piel tostada y largo cabello de color azul eléctrico y ojos turquesa y otro de piel blanquísima como porcelana, de cabello aguamarina y de hermosos ojos azules.
- nunca había visto tantos hombres hermosos juntos - susurre para mí mismo.
- hola gatito, hola niño bonito - dijo coquetamente el de pelo azul - soy Milo Antares y esta belleza aquí a mi lado es Camus Marceau MI novio.
- hola bicho, hola cubo, este angelito es Mu, un amigo y trabajara con nosotros anda Mu, saluda que no muerden - dijo riendo.
- no podría asegurarte eso si te acercas mucho Mu, sobre todo a Milo y como dijo el Neanderthal de mi novio, soy Camus Etienne Marceau - dijo hablando por primera vez el chico peli aguamarina mientras besaba mis manos.
- hola Camus y Milo, soy Mu Arien, es un placer conocerlos.
- oye Mu, ¿qué signo eres? - Me pregunto curioso Aioria.
- Eh... pues soy Aries ¿por qué?
- chicos, ya tenemos un borrego - rio con ganas Aioria.
- por cierto iba a preguntarte sobre eso, por que se llaman como animalitos, escuche a Death llamarle pececito a Dita y a este llamarle cangrejo a Death, y también que Dita los llamo bicho y hielera a ustedes - dije señalando a Camus y Milo, por cierto Aioria, ¿tú que eres?
- eso es una broma entre nosotros haciendo referencia a nuestros signos del zodiaco, yo soy el león o gatito porque soy leo, Camus es la hielera o cubo porque es acuario, Milo es el bicho porque es escorpio, Dita es piscis, así que por eso mascara lo llama pez y como adivinaras Death es cáncer, por esa razón tu eres el borrego - agrego divertido - bienvenido al zoo de Afrodita.
- eres incorregible Aioria, debo marcharme, empezare a trabajar mañana si Dita no tiene problemas, debo dejar algunas cosas arregladas antes de empezar.
- está bien Mu, aquí nos vemos mañana.
- adiós Mu - dijeron Camus y Milo al unísono.
Salí de ese lugar con el corazón en la mano, no sabía si había tomado la mejor decisión, pero de algo estaba completamente seguro, mi vida cambiaria a partir de ese día, solo que de no sé si eso era algo bueno o malo.
Continuara...