Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

No te atrevas a pensar que solo camine lejos. por Atenea Lawrence

[Reviews - 9]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Nezumi se da por vencido esta dispuesto a irse de la nueva No.6 para siempre dejar a Shion ser y no entrometerse pero esa tal Kanade... no puede salirse con la suya. ¿Y si esa tipa le era infiel? ¿Y si esa tipa lastimaba a Shion? A pensamientos extremos, medidas extremas...

Sentado en un tren con la cara hundida en mis manos. Viajando libre por una de las ciudades donde solía escurrirme. Debería sentirme feliz de que ahora sea así pero solo me siento terriblemente decepcionado, no tenía donde ir, recorrí las mismas cloacas recordando cosas, para simplemente terminar sentado en la barra de un bar.

-Shion.- Susurré mirando el techo del lugar.

-¿Problemas con su mujer amigo? Tengo el trago que le hará olvidar cualquier problema.- Dijo el bartender poniendo un vaso frente a mí.

-¿Y si no quiero olvidarlo? ¿Y si solo quiero devolver el tiempo y hacer las cosas bien con él?- Le pregunté bebiendo el elegante trago, de todos modos ya no había solución.

-¿Con él? Pues de esa clase de cosas no sé, supongo que podrías intentarlo una vez que superes lo que sientes ahora y salgas de aquí.- Dijo mientras servía otro trago.

La noche se desapareció dejando paso al día, dormí en un hotel barato, cada noche se volvía un infierno, así que decidí irme a donde pertenecía, seguro me aceptarían de nuevo solo tomé todo dispuesto a largarme, una vez en el autobús vi a unas prostitutas de pie frente a un club, la vida fácil era algo tan humillante, recordé como cantaba vestido de mujer y lo humillado que me hacía sentir.

Lo molesto que había estado con Shion. Un… momento, eso es, si quiere una tipa, yo ¡YO PUEDO SER MUJER! Le demostraría de esa manera que puede pasar sobre mi orgullo si quiere, si es necesario demostrarle a esa mujerzuela que un hombre puede ser más atractivo que ella. Yo… sería mejor. Impulsivamente me hice arrojado del auto bus y volví al hotel. La semana siguiente me coloque extensiones, compré la ropa, el maquillaje y decidido fui hasta la clínica donde ahora trabajaba Shion.

Después de días de pensamiento, una larga sesión de depilación, muchas cervezas y shots de anís imperial me di cuenta que… nadie podría cuidar a Shion como yo. ¿Y si esa tipa le era infiel? ¿Y si esa tipa lastimaba a Shion? Solo considerar esas ideas me hacía arder la sangre. Ahora que se lo que quiero, que se cómo lograr que los otros muros caigan, quiero aceptar lo que siento por Shion.

Eran las cinco de la mañana y me paseaba de un lado a otro en esa horrible habitación barata de hotel, con mis tacones talla trece. Me maldecía a mí mismo una y otra vez. Realmente ¿Iba a salir así a la calle? ¡SI! Tengo que hacerlo. Él quiere una chica, puedo ser una. Puedo serlo. BASTA. ¡Me veo  RÍDICULO! Solo debo salir por esa puerta y ya.

Salí y me dirigí hasta la estación del tren me baje en el lugar justo donde ella tomaba su conexión para ir al trabajo.

La arrincone en el tren tenía tiempo observándole.

-Kanade Arisa, no eres más que una zorra entrometida. Shion, esa niña, Karan, son mi familia, y no tienes que hacer nada entrometiéndote con ellos. ¿Está claro?-

-¿Perdón pero quién eres? A Shion no le gustan las tipas tan femeninas y arregladas, seguramente eres una completa loca, al pensar que tienes una oportunidad con el cuándo sale conmigo. Para que sepas su hija me adora y yo tengo las facultades perfectas para poder ser una madre para ella y que Karan no deba sobre esforzarse. Es una mujer que ya ha pasado por suficiente.-

Al escucharla hablar, me di cuenta que ella iba enserio. Esto era la guerra, Kanade era lista y sus sentimientos eran verdaderos pero definitivamente  esta historia iba a terminar con un corazón roto y el mío no iba a ser.

-Soy tu competencia y conozco a Shion desde hace mucho más tiempo.- Dije empujándola con fuerza y bajándome antes que ella. Prácticamente corrí a la clínica en tacones y busque a Shion. Se quedó helado al verme y sabía que podía reconocerme, había hecho mi mayor esfuerzo y de mi estúpido bolso saque un bento. Había cocinado eso solo para él no era la gran cosa, pero realmente me esmeré para que estuviera delicioso.

-Perdón por lo de la otra vez, no debió ser de esa manera, pero bueno, te traje tu almuerzo. Yo, bueno, merezco una oportunidad más que ella.-

-Nezumi, Kanade no despierta al vecindario, asusta a mi hija y destroza el jardín de mi madre. Ni me grita y me hace sentir miserable, ni se ha desaparecido un solo día, ella se esfuerza por ser parte de mi vida, tu.. ¿Crees que solo porque ahora estás aquí basta para que te acepte y seas parte de mi vida?- Dijo mirándome molesto y claramente resentido.

-Solo déjame probarte que…- El me interrumpió.

-Este es mi trabajo y necesito que te vayas ahora, o se armara otra escena y ocupo alimentar a Karan y a Shiromi, si pierdo mi trabajo por tus estupideces, no habrá más que hablar entre nosotros. Búscame en la noche. En mi casa, toca la puerta como una persona normal y gracias por el almuerzo puedes quedarte este… yo lo hice, no para ti. Era lo que iba a almorzar pero, quiero que comas bien.- Dijo acompañándome hasta la salida.

-Iré por Shiromi, yo la llevaré a casa, avísale a Karan.-

-No Nezumi, ella, agh… por favor no te metas en problemas. Cuídala es mi vida.- Dijo apresurado volviendo a entrar.

Seguidamente decidí que le daría a Shiromi el mejor día de pinta, yo podía ser su padre, aún si vestía de mujer. Podía talvez hacer que ella me apoyara a mí y no a esa zorra carismática.

-Buenos días. ¿A qué viene?-

-Necesito retirar a Shiromi, señorita, soy Nezumi, ella debe conocerme y hay un pequeño problema familiar por lo cual necesito retirarla.-

-Shiromi, ven aquí. ¿Conoces a esta señorita? Es Nezumi. Dice que tienes un problema familiar y debes acompañarla. ¿Quieres que llame a tu padre para verificar?-

-No, ellos son amigos. Nezumi es el nombre que mi tou san dice cuando duerme. Ella dice la verdad, la otra vez incluso estaban en casa y arruinaron el jardín de Karan Oba san por estar jugando.- La profesora le permitió tomar sus cosas y ella tomó mi mano.

-¿Qué paso en casa? ¿Tou san y Oba san están bien?- Pregunto cuando salimos de la escuela.

-Están bien, solo quiero conocerte y este día haremos lo que quieras. Parque de diversiones, patinaje, helados, lo que desees.-

-¿Enserio? ¡sí! Yo no sabía que eras mujer, la vez pasada pensé que eras un chico.-

-Lo soy, pero me vestí así porque quiero que Shion se fije en mí, sabes cuando el y yo nos conocimos solo teníamos 5 años más que tú.-

-¡wow! ¿Hace tanto tiempo y aún son amigos? ¿Está bien si pasamos por un helado y luego vamos a los videojuegos?- Preguntó emocionada.

-Claro que sí, pero te voy a vencer tanto que tienes prohibido llorar.- Me reí.

-¡Oh no! ¡No vas a vencerme! ¿En todo caso porque te vistes de mujer para que tou san te ponga atención?-

-Él fue mi primer beso y creo que fui el de él, no siempre tuvo el cabello blanco, tu tou san es un héroe. El me sacó una bala y me cuido, aun cuando eso hizo que perdiera la hermosa casa en la que vivía. Él es todo para mí y lo amo, nunca se lo dije, nunca me di cuenta, pero no quiero volverme a separar de él y esa tipa Kanade apareció de la nada y creí que si me veía como una chica quizás el… volvería a pensar en mí, pero lo que dijiste antes. Con tu profesora. ¿Él dice mi nombre cuando duerme?- Entramos en la heladería.

-¿Puedo pedir un granizado de los grandes grandes y compartimos?- Preguntó y yo asentí.

Ella pidió una torre gigante de helado, era gracioso, al verla comer, noté que lo hacía igual que Shion y a pesar de que no era su hija, me recordaba a él muchísimo, era igual de castaña que el antes del parasito.

-Bueno sí. Karan me explico que aveces un chico puede querer a otro chico igual que una chica. Así que no deberías vestirte de mujer, igual Kanade parece chico.-

Me reí por su comentario y comencé a disfrutar de aquel enorme granizado.

-¿Te gustaría ver a Kanade al despertarte, haciendo el desayuno y llevándote a la escuela? ¿Te gustaría verla besando a Shion? ¿Las fotos del recibidor dejen de ser tú, Shion y Karan y ella también este ahí? ¿Cómo te sentirías si ella empezara a vivir con ustedes?-

-Incomoda, pero lo mismo sería contigo, no quiero compartir el tiempo libre de tou san con nadie más. Aunque… ¿Estás haciendo esto de salir conmigo solo para que crea que eres mejor que Kanade?-

-No, yo al contrario de Kanade te vi cuando eras una bebé, te conocí antes de que siquiera tuvieras un nombre, vi como tu padre valientemente hizo todo por salvarte y te envolvió en una manta para que un perro te sacará del horrible y conflictivo lugar donde estábamos. Vimos a tu madre morir, yo… a decir verdad solo quería sacar a Shion de ahí, estábamos lastimados, habían balas, querían matar a mucha gente, pero el… se jugó toda su vida en pequeños instantes por ti. De no ser por lo noble que él es no estarías aquí, yo le cubrí a pesar de no tener tiempo para cosas como esa. No me arrepiento, él te ha hecho crecer como nadie lo habría hecho.-

-Tou san… nunca hablo de eso.- Dijo mirando algo preocupada el helado y detiendose.

Tomé su cara y le miré a los ojos.

-Eres la esperanza y la bondad que viven en él. Ahora deja de preocuparte y vamos a divertirnos.- Dije mientras dejábamos el helado y nos íbamos a jugar a los videojuegos, luego almorzamos juntos en un parque y después fuimos a la pista de patinaje en hielo y comencé a enseñarle a Shiromi lentamente a patinar. Se sentía tan agradable, escuchar su risa, verla levantarse, sus piernas temblorosas, verla lograr su primer par de metros sin una caída. ¿De esto se trataba ser un padre? ¿De este orgullo y terror?

Yo nunca tuve un padre y hasta donde se Shion tampoco, siempre quizé conocerlo, poder hacerle orgulloso. Mi niñez y la de Shiromi era completamente distinta. Pero no por ello estaba mal, debía enseñarle a luchar también, no podría soportar que alguien hiriera a la niña por la cual casi pierdo a Shion.

Llegamos al atardecer a su casa.

-Nezumi, no pensé que volverías por aquí. ¿Te quedarás a cenar?

-Sí. ¿Puedo tomar ropa de Shion prestada y tomar un baño, creo que esta ropa no es para mí?-

-Adelante, ya sabes cuál es su habitación.-

Entre lentamente en su cuarto y miré bajo su almohada la carta. La había leído. Me sentí tan imbécil en ese momento. Comencé a desvestirme, quitarme las extensiones, la joyería, las medias, los zapatos, el corseé, toda esa basura, la puse en una bolsa y al quedar en ropa interior me envolví en una toalla y tomé la ropa que se veía más holgada.

Entré al baño y cerré la puerta, me quité todo aquel horrible maquillaje, el sudor y una vez fresco salí, la casa olía delicioso. Karan estaba preparando algo delicioso. Simplemente salí dispuesto a esperar a Shion en las escaleras de la entrada y ahí estaba el con ella. Ella tomando su brazo, mirándome fijamente. Arrebatadamente beso a Shion, él le aparto enseguida.

-Kanade, no, no puedo, estoy confundido.-

-Es ¿Qué acaso te gustan los hombres?- Pregunto ella alzando la voz, haciendo que todos los vecinos le oyerán.

-No, es, bueno…- Él no sabía ni que decir.

-¿Y que si a mi hijo le gustan los hombres? No podrías juzgarlo, el ha intentado darte una oportunidad pero tú no eres de quién realmente esta enamorado. No puedes obligar a alguien a enamorarse cuando su corazón piensa en otra persona. Pero puedes aceptarlo y ser su amiga, eres una gran chica Arisa chan, y también hay que tener consideración por lo que sientes. ¿Quieres quedarte a cenar?-

-¡OBA SAN!- reclamamos Shion y yo al mismo tiempo.

-Claro Karan sería bueno que todos hablemos como adultos y dejemos las cosas en claro.- Dijo apartándome y entrando en la casa.

Cuando Shion pasó a mi lado le detuve.

-¿Estaba bien tu almuerzo? El mío estaba delicioso, gracias y antes que hablemos con la zorra señorita carisma, quiero que tú y yo hablemos.-

-Estaba exquisito, has mejorado mucho, gracias y ¿De qué quieres que hablemos? Yo bueno no hay más que decir, sigo enamorado de ti, quería intentar enamorarme de Kanade. Pero la besé y creo que siento algo por ella y me destroza, porque ella no merece ser lastimada y toda la presión y lo celosa que puede llegar a sentirse Karan. Kanade es doctora, su dinero podría hacer que juntos compráramos una casa más grande y poder ofrecerle una mejor vida a mi madre y mi hija. A parte de tu amor ¿Qué de provechoso para mi familia tendría nuestra relación? Somos dos hombres y eso, aún sigue siendo raro, no quiero que le digan a mi madre que su hijo salió mal. No quiero que traten a Shiromi diferente.- Me miró y noté que su decisión era obvia y esto le destrozaba.

Me destrozaba. Tanto como cuando decides renunciar al sueño que más te complacía, que más ganas de seguir luchando te impulsaba. Es como perder el suelo, la base… todo. Quería huir de ahí. Entrar asesinarla y desaparecer y volver a intentarlo cinco años después. No tengo mucho dinero, en realidad no tengo siquiera un trabajo o una casa, solo quiero que la gente sea libre, pero sobre todo eso quiero que Shion me elija a mí.

Sentenciado a condena de muerte me senté en aquella mesa a disfrutar de mi última cena. Shiromi Y Kanan se fuerón al terminar.

-Arisa, Nezumi… Yo… no he superado a Nezumi, debí esperarlo más. El cometió su error al ni siquiera enviarme una miserable carta, pero yo debí suponérmelo que él no era para esas cosas. Él se vistió de mujer porque está dispuesto a cambiar su género si eso tiene que hacerme feliz. Nuestra historia, no la conoces y no me siento bien contándola. Él es un idiota, pero si me quedo contigo, seguiré pensando en él siempre y cada día de nuestra relación me arrepentiré de no haber perseguido lo que realmente anhelaba desde hace tanto tiempo. Tú eres hermosa, talentosa, puedes conseguir un buen hombre, que piense solo en ti y yo… no soy… ese. Pero si aun sabiendo esto estas dispuesta a quedarte conmigo y hacer que cambie de opinión y te quiera solo a ti, me quedaré contigo.-

No podía creer lo que estaba diciendo… ¿Por qué? ¿Realmente podría quedarse con ella si ella lo pedía? Me moría por aventar la mesa, largarme y dejar que se quedaran juntos pero solo me mantuve viéndola de manera desafiante.

-Eres libre de quedarte con Nezumi, pero antes quiero que vengas a mi casa y pases la noche conmigo. Si en una sola noche, no soy suficiente mujer para hacerte querer estar conmigo, no juzgare su relación y les daré mi bendición.-

-¡DE NINGUNA MANERA! ¡SHION ES VIRGEN!- Levanté la voz.

-Yo también lo soy.- Afirmó ella, pero era obvio al menos para mí que era una vil mentira.

-También soy virgen y no por eso me acuesto con alguien para convencerlo que se quede conmigo. Shion dile que no… ¿Y si la dejas embarazada? Es todo ¡un truco!- golpee la mesa y la miré enojado.

-Accederé, este viernes iré a tu casa. Ahora por favor…- No termino la línea.

-Nos vemos entonces, tengan una linda noche, me retiro.- Dijo levantándose, tomando sus cosas y sonriéndome con malicia y satisfacción mientras se marchaba.

Me deje caer al suelo y me tapé la cara con una de las almohadas haciendo lo posible por no perder el control.

-¿Me puedo quedar a dormir hoy al menos?- Pregunté claramente frustrado.

-Sí, puedes dormir, aquí en el sillón o en mi cama, iré a tomar un baño.- Dijo cortante metiéndose en su habitación.

Recogí los platos y me dispuse a lavar y ordenar. Debía mantener una buena actitud a pesar de todo, a pesar de que esa cualquiera, se saliera con la suya, yo, ni, ni siquiera me había tomado el tiempo de reflexionar sobre tener sexo con Shion. Claro que lo había imaginado miles de veces, pero habían más detalles, bueno el lugar no es el más limpio, ¿Cómo putas se pone un condón? ¿Se puede usar un condón? ¿Debería de… preguntarle a Shion? No seguro tampoco tenía ni idea. ¿Karan? Seguramente se infartaría si le pregunto algo así. Necesito una computadora o un teléfono, internet necesita darme su información justo ahora.

El salió del baño, sin camisa y con la toalla en su cabeza, su cuerpo, no había cambiado mucho desde la última vez que lo vi así.

-Entonces ¿Dormiremos juntos o dormirás aquí?- Preguntó algo nervioso.

-Dormiré contigo, aquí seguro todos se despiertan muy temprano, en tu cuarto podré dormir más tiempo.- Dije intentando que sonará creíble.

Entramos juntos a la habitación.

-Ella te beso ¿Qué tal si me besas a mí?- Le dije mirándolo de frente, mientras apagaba la luz.

-Creo que es lo justo.- Sus labios nuevamente se juntaron con los míos y seguía sintiendo esa suavidad pasión y dulzura en ellos. Pero… yo quería más. Una y otra vez  nuestras cálidas lenguas se acariciaban despacio y nuestras respiraciones se volvían más y más pesadas. Le empujé en la cama y me pusé sobre el, al hacerlo se remarcaba un asunto en sus pantalones. La luz del alumbrado iluminaba un poco la habitación y el viento se colaba moviendo las cortinas. Volví a besarlo y antes de darme cuenta sentía esa tensión contra la ropa que andaba puesta también.

-Nezumi… no podemos, Kanan y Shiromi, no quiero… que nos oigan por… favor… -le miré sonrojado y me quité de encima.-

-Me deseas a mí no a ella, no lo hagas Shion, no pierdas tu virginidad con ella.- Le abracé.

 

 

 

 

 

Notas finales:

Yo les puedo enseñar, un seme trasvesti -cantar con ritmito de la canción de disney un mundo ideal de aladin.- 

Bueno el proximo capítulo es desde la visión de Shiromi... para que esperen por el como una pequeña dulzurita interpreta todas esas cosas raras y cambios en su vida. 

Espero que lo disfruten :) cualquier sugerencia, comentario, chiste, crítica constructiva, es bienvenido y todos estan cordialmente invitados a leer otros de mis trabajos.

-Me disculpo por mi ortografía imperfecta. Realmente me esfuerzo pero mi cerebro coloca tildes donde no las hay y omite algunas otras. Acepto esto y hago mi esfuerzo por corregirlo.-


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).