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ZHIEND, ¿Una sombra olvidada" por LORD GRIM

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Notas del capitulo:

Hola a todos(as) mis lectores(as) espero que se encuentren muy bien, en este episodio tengo unas cuantas sorpresas para ustedes, pero para conocerlas deberán leer todo hasta el final. 

Días posteriores a la divertida cena, la gira del cantante Zhiend estaba arrancando con gran fuerza está iniciaría en el Sur para ascender a través de todo el país terminando en Hokkaido y justo ahora el joven albino se encontraba volando en el exclusivo jet de NG Récords hacia el sur, específicamente a la isla Okinawa en compañía de su jefe Thouma Seguchi listo a comenzar su primera gira artística en aquel lejano país.

- Zhiend - llamo el rubio al joven que de encontraba frente a el, quien ajeno a todo su alrededor miraba las nubes pasar por la ventana - Como estas?, es decir, estas nervioso ansioso o emocionado.

- Si tuviera que ser honesto - anunció el menor aún atento a las nubes pasar - No me entusiasma mucho la idea de iniciar la gira en una isla - sonrió un poco para así mirar a su jefe con preocupación.

- Y ese descontento se debe a... - pregunto el empresario percatandose de que por primera vez en victoriano lucía incómodo, cosa extraña viniendo de alguien que se pierde con facilidad y se veia envuelto en las situaciones más bizarras posibles.

- No es la gran cosa, - un pequeño sonrojo apareció en la cara del albino logrando que a los ojos del mayor luciese más encantador que nunca - De hecho se trata de algo bastante infantil - miro a sí jefe con cierta duda para después reír un poco aún con el rostro rojo - La verdad... La verdad es que no me gusta el clima cálido, prefiero el frío.

- Es comprensible - comento el rubio tratando de tranquilizar al menor que aún parecía contrariado - Por lo que tengo entendido tu has vivido mucho tiempo en New York donde el clima es bastante frío, así que es natural que sientas aversión hacia el calor - le sonrió con cariño - Pero no tienes que preocuparte, una vez terminados los ensayos podremos refrescarnos en la piscina o la playa privada del hotel.

- Tiene razón, agradezco su comprensión - comento el victoriano para después volver a mirar el exterior con la preocupación en el corazón.

El tecladista fue perfectamente capaz de captar esa preocupación en los ojos de su adoración y en cierta forma no se tragaba esa historia de que el menor detestaba el clima cálido, si su memoria no le fallaba muchos de los lugares en Europa donde el menor se presentó por cuestiones de trabajo poseían un clima aún más elevado que el de la pequeña isla a la que viajaban y en los vídeos de sus presentaciones lucía tan normal como siempre, lo cual era increíble tomando en cuenta su vestimenta, era obvio que la ropa victoriana era muy calurosa más aún cuando los colores oscuros prevalecían en ella.

Algo no estaba para nada bien, que podría preocupar tanto al menor como para tenerlo tan ajeno a la realidad bueno más que de costumbre, de improvisto una idea llego a su mente; la angustia del cantante fue más notorio cuando menciono la cuestión de la piscina y la playa, su mirada viajo hasta el más joven, acaso Zhiend no sabía nadar; lo mejor sería hablar con K antes que nada o con lo despistado que era el chico y con su suerte podría terminar ahogándose en tres metros de agua.

- Con permiso - el rubio se disculpó ante el menor para dirigirse al baño del jet en el que viajaban, una vez dentro tomó su móvil para hacer una pequeña llamada, sin embargo la persona con la que deseaba hablar parecía no estar disponible por lo que opto por dejar un mensaje - K, necesito saber algo importante sobre Zhiend... Hace un momento me comento que no le agrada el calor y cuando le hice mención de que podría refrescarse en la piscina o playa se puso algo extraño... Bueno más de lo normal - el tecladista se sujetó el puente entre la cien para al fin - Mi pregunta es... Zhiend sabe nadar?, por favor llámame es urgente.

El rubio regreso a su lugar tratando de lucir lo más normal posible, cosa que no fue difícil ya que el menor continuaba perdido en su mundo unos minutos después el piloto anunció que se abrocharan los cinturones pues en breve iniciaría el aterrizaje. Una vez en el suelo ambos músicos se encaminaron a la salida donde los esperaba el auto que los llevaría al hotel, en el trayecto fueron abordados por un sin número de periodistas quienes siguieron al menor todo el camino inundandolo de preguntas; hasta que al subir al vehículo la presión disminuyo.

Una vez que llegaron al hotel fueron conducidos de inmediato a su piso, el tecladista preocupado por que su adoración se perdiese pidió la mejor suite del lugar, misma que poseía dos habitaciones independientes separadas por una sala de estar, eso con el fin de darle algo de privacidad al victoriano además de gozar de una explendida vista a la playa privada del hotel.

- Zhiend... - llamo el rubio sonriendo con tranquilidad - Si gustas puedes escoger la habitación que más te agrade - ofreció el mayor mientras se acercaba al sillón para descansar un poco.

- Es usted muy amable - agradeció el victoriano mientras contemplaba la vista hacia el mar - Pero... La habitación es lo de menos, - sonrió con ternura mientras tomaba asiento junto a su jefe para después recostar la cabeza sobre las piernas del mayor - Usted escoja primero, para mi cualquier recámara estará perfecta, incluso no me molestaría dormir en el sofá siempre y cuando sea cómodo.

- Eres muy gracioso Zhiend - confeso el rubio al mismo que comenzó a acariciar el cabello del menor, era tal y como la última vez increíblemente sedoso - Te noto cansado porque no vas a darte una ducha y descansas un poco, yo haré lo mismo y luego bajaremos a cenar o si lo prefieres pediremos servicio a la habitación.

- Es una gran idea Sr. Seguchi - contesto logrando que el mayor sonriera decepcionado, pues a pesar de que le hubiese pedido que dejara de tratarlo con tanta formalidad el menor se mantenía firme con respecto a tratarlo con suma educación.

- Bien si no te molesta tomare la habitación de la derecha - propuso recibiendo un asentimiento de parte del albino.

En pocos segundos ambos músicos se encontraban en sus respectivas habitaciones, cuando el empresario comenzaba a quitarse su chaqueta su móvil comenzó a sonar, al revisar la pantalla agradeció a Dios por ello.

- Hola K... - saludo al americano mientras se recostaba en su cama a la espera de lo que su buen amigo le dijese - Asumo que escuchaste mi mensaje.

- Yes Seguchi and Don't worry about Zhiend - afirmo el manager con tranquilidad este parecía estar distraído mirando algún programa - El chico sabe nadar perfectamente bien, - explico al mismo que se oía que cambiaba de canal su televisor - Hay más probabilidades de que el ahogado seas tu - aquel comentario no le causó mucha gracia al empresario - Y en cuanto al clima, te has quedado corto Zhiend aborrece el calor en su totalidad- confeso muy tranquilo - Pero descuida no te dará problemas sólo asegúrate de tenerle siempre cerca una botella de agua con hielo, de acuerdo.

- Comprendo perfectamente - contesto el tecladista quien ya acalorado encendía el clima de la habitación - Debe ser difícil dar un concierto usando ropa victoriana; a mi el simple hecho de usar traje en la playa me asfixia... - río un poco imaginando aquella situación bastante abrumadora - Pero... eso no explica el motivo por el cual Zhiend parecía contrariado por la idea de ir a nadar.

- Seguramente no quiere que nadie vea el tatuaje en su espalda - contesto el manager quien seguía totalmente distraído disfrutando de la programación.

Sin embargo un silencio incómodo se formó en la línea telefónica, hasta que...

- Zhiend... Tiene un tatuaje en la espalda - grito el empresario con los ojos en blanco tras enterarse de aquello, siendo rápidamente imitado por el amante de las armas.

- Fuck - grito el americano con todas sus fuerzas al darse cuenta de enorme error que acaba de cometer - Damn... Damn... Damn - se maldecía internamente al hacer sido tan estúpido como para revelar algo tan íntimo sobre su protegido.

- K... - llamo el tecladista mortalmente serio y muerto de curiosidad por enterarse de más detalles referidos a la pequeña circunstancia en la espalda del victoriano - Hablas en serio? - pregunto con ansias - Zhiend tiene un tatuaje en la espalda.

- Seguchi - regaño el americano intentando mitigar la enorme caos que acababa de iniciar - Olvida lo que acabo de decirte me oyes.

- Ni hablar K... - declaro el empresario bastante serio, ya que se acababa de enterar de algo muy importante acerca de la persona que en estos momentos más le importaba - Más te vale que comiences a cantar o te juro que soy capaz de lo que sea con tal de enterarme acerca de..,

- Enought - regaño el americano apagando el televisor como una precaución para no distraerse y revelar algo más - Esta bien tu ganas te diré lo que se... Pero tienes que jurarme que no le dirás nada al chico, me oyes

- Te lo juro - prometió el tecladista sonriendo al haber ganado esa pequeña contienda - Ahora habla.

- Whatever... - contesto el amante de las armas para después suspirar derrotado - Es verdad Zhiend tiene un tatuaje en la espalda y no es algo de lo que hable muy seguido.

- Y... Como es? - pregunto muerto de curiosidad el dueño de NG quien ya se imaginaba varios posibles diseños para aquel tatuaje - Es una rosa o un símbolo o quizá...

- Para tu auto Seguchi... - regaño el otro rubio un tanto impresionado por la gran curiosidad que mostraba el empresario por el victoriano, algo bastante inusual ya que aquel enorme interés solo lo mostró por una sola persona - Eso es algo muy intimo y como sabrás Zhiend no es tipo de persona que anda ventilando su vida personal - una suave risa de burla se escucho - Ni yo tengo idea de como demonios es el estúpido tatuaje... Ya que tardo cerca de un año para que luciera como el deseaba.

- Es una broma - la decepción se escucho perfectamente en la voz del tecladista, esto tenía que ser una broma - En serio, no tienes idea de como puede ser el tatuaje de Zhiend?

- No tendría porque mentirte - afirmo el amante de las armas ya un poco más tranquilo, ya que en cierta forma no mentía acerca de aquella situación - Digo la verdad no tengo ni la menor idea.

La conversación telefónica llego a su fin, sin embargo la mente del empresario era una tormenta de preguntas, ya que la curiosidad por saber la forma que tendría el tatuaje del menor lo abrumaba con intensidad, una vez que tomó un baño y ya estando vestido salió de su habitación para toparse con el menor quien escribía en su libreta.

- Zhiend - saludo el mayor con una gran sonrisa en el rostro, para después sentarse justo frente al menor.

- Buenas noches Sr. Seguchi - saludo el albino ajeno a todo mientras continuaba escribiendo en su libreta.

- Y bien bajamos a cenar - propuso el mayor recibiendo un gesto de negación por parte del oji bicolor, el cual se levanto de su lugar para dirigirse a su habitación

- Le ruego y me disculpe pero... - con elegancia cubrió su boca a causa de un ligero bostezo que lo ataco de improvisto - Temo que me siento más exhausto de lo que llegue a creer, si me lo permite me retiraré a descansar - pidió a la espera de la respuesta de su jefe.

- Claro ve a descansar - declaro el mayor con una amplia sonrisa, la cual tranquilizo al menor - Mañana será un largo día.

- En ese caso yo me retiro - con su típica elegancia regaló una reverencia a su jefe para después dirigirse a su habitación - Que pase buena noche Sr. Seguchi.

Cuando el menor cerró la puerta de su habitación el empresario dio un largo suspiro, para después dirigirse a la suya; durante toda la noche el rubio no fue capaz de conciliar el dueño pues en su mente aún existía esa gran interrogante la cual era: el tatuaje en la espalda de Zhiend, en cierta forma nunca se lo hubiese esperado ya que el victoriano poseía una belleza exótica bastante rara e inusual, así que nunca puso especial atención en ese tipo de detalles, pero como demonios hacerlo cuando el chico tenía el cabello blanco, la piel como porcelana fina, vestía conjuntos de la época victoriana europea y sus ojos era de diferente color por la heterocromia que sufría.

Pero... Bien tal vez estuviese exagerado las cosas, es decir, ahora que se tomaba un momento para pensar aquello no era nada fuera de lo normal, muchos músicos llegaban a tatuarse o perforarse en algún punto de su carrera, de ser así el que el victoriano lo hiciese no era nada impresionante. Al demonio a quien quería engañar estaba muerto de la incertidumbre, quería saber como era el tatuaje pero... como demonios lo haría.

Su objetivo no sería fácil considerando múltiples factores:
1. No podría sacar el tema tan directamente, ya que tendría que admitir que el americano soltó la sopa y eso podría terminar en un bombardeo si no cumplía su promesa de guardar el secreto.
2. Considerando lo reservado que era el menor, muy probablemente se molestaría con el por inmiscuirse en algo tan personal como eso.
3. Aunque el tema saliera a flote por simple casualidad y el victoriano confesara lo cual no era ni un poco probable que tenía un tatuaje en la espalda dudaba que al pedírselo llegase a mostrárselo.
4. Zhiend consideraba la curiosidad un defecto bastante rebajado y el mostrarse tan interesado en el tema, lograría que pensara lo peor de su persona.
5. Ganarse la confianza del albino estaba resultando muy complicado y de cometer el mínimo error podría ser contraproducente.

- Maldición - pensó el rubio revolviendose entre las sábanas, - La única alternativa es llevar a Zhiend a la piscina o al mar - medito uno momento llegando a la conclusión que esa era su única oportunidad.

Mañana después del ensayo, invitaría al menor a darse un chapuzón en la alberca o tal vez en el mar; era evidente que el chico tendría que usar algún bañador y por ende su espalda quedaría al descubierto lo que le daría una vista perfecta de su tatuaje.

- Thouma Seguchi - sonrió el empresario para sí mismo - Eres un genio - de esa forma continuo auto elevando su ya inflado ego, sin embargo en la vida no hay que dar las cosas por hecho.

Al día siguiente...

- Esto tiene que ser una broma - menciono el empresario que parado sobre la arena ya en su traje de baño azul marino miraba con los ojos en blanco como su tan perfecto plan se iba al demonio.

Desde muy temprano ambos músicos se habían hecho cargo de las tareas que les correspondían en el escenario donde un día después el victoriano iniciaría su gira en Japón, el rubio se dedicó a organizar la parte promocional con la prensa y el menor de ensayar con su banda además de probar el sonido; afortunadamente terminaron temprano ya que por extraño que pareciera eran en extremo responsables y buscaban la perfección en todo lo que hacían; pero el caso es que una vez que regresaron al hotel para descansar el empresario propuso disfrutar de la tranquilidad del mar un rato y por obra de algún Dios misericordioso el victoriano accedió a bajar con el, eso sumado a que había alquilado la playa entera dándoles mucha más privacidad fue lo que logró que el tecladista se sintiera como su hubiese ganado algún premio o medalla al ver como su plan marcho a su conveniencia pero la fortuna no estaba tan de su lado como llego a creer.

- Sr. Seguchi, ya estoy aquí - saludo el albino que con paso tranquilo se acercaba hasta se jefe para después quitarse sus lentes de sol y sonreír un poco.

- Hola Zhiend - saludo con una amplia sonrisa, aunque por dentro lloraba a cataratas su mala suerte.

El albino muy ajeno a todo como de costumbre, había arruinado el plan de su jefe con su vestimenta, pues a pesar de que llevaba un lindo bañador oscuro con una franja color verde aguamarina como detalle, el cual hacía lucir los encantos de su bien formado trasero, mantenía cubierto su dorso con una camisa color crema misma que mantenía abierta por el frente sólo dejando a la vista los cuadros bien marcados en su abdomen pero ocultaba totalmente su espalda y por tal motivo frustraba el plan del rubio.

- Zhiend - llamo al menor el cual ya se había sentado en una silla de playa bajo una palapa, disfrutando de la brisa y de una botella de agua casi congelada - Quieres que te ponga bloqueador en la espalda - pregunto sujetando una pequeña botella en su manos dispuesto a ayudar al prójimo (si como no).

- Es usted muy amable - agradeció el menor desde su silla - Sin embargo lo considero innecesario cuando me encuentro usando una camisa.

- Tal vez pero... Aún así debes usarla, podrías quemarte cuando vayas a nadar - expuso el mayor con seriedad.

A pesar de que el victoriano intentase ocultar su espalda usando esa molesta camisa, tendría que quitársela cuando ingresará al mar y ese sería el momento perfecto para inspeccionar el misterioso tatuaje.

- Le reiteró mi agradecimiento pero... - el albino volvió a recargarse completamente en la silla - Quisiera descansar un poco, tal vez después.

Con esa respuesta el empresario suspiro derrotado para sentarse justo al lado de su adoración, quien sólo se mantuvo en silencio.

Una hora después...

- Zhiend - llamo el mayor al darse cuenta de que el victoriano de levantaba de su lugar para empezar a caminar acercándose más al mar - Vas a entrar?

- No... - respondió el más joven con un gesto sereno para así colocarse los lentes de sol - Sólo deseó acercarme un poco para disfrutar del sonido de las olas.

El empresario sólo pudo observar como el oji bicolor se acercaba un poco logrando que las olas mojarán sus pies, de un momento a otro se retiró sus gafas de sol, dando una vista muy bella, pues era como si un ángel hubiese bajado del cielo para disfrutar de la brisa marina. De improvisto una idea macabra surgió en la mente del empresario.

El rubio se levanto de su silla de playa, sonriendo ante la idea que se le acababa de ocurrir, con sigilo comenzó a avanzar hasta el albino, teniendo especial cuidado de no ser percibido. Cuando el empresario se encontró a una distancia prudente del joven de ojos bicolor, respiró profundamente para después comenzar a correr a toda velocidad con la intención de derribarlo en el agua a forma de juego, con eso era evidente que el menor tendría que quitarse aquella molesta camisa.

- Te atrape - anunció el rubio muy alegre, disfrutando su victoria sin embargo nada ocurrió como esperaba.

En el momento en el que sujetó al menor por la espalda listo para derribarlo contra el agua, el victoriano reacción velozmente liberandose del agarre de su jefe para así entrelazar uno de sus pies tras la pierna del rubio, tomó el brazo del rubio se inclinó un poco para así lanzar al mayor directo al suelo, donde el agua salpico por el impacto.

El tecladista no pudo reaccionar ante la velocidad de lo ocurrido, simplemente se dejo derribar para terminar chocando con el suelo donde se mojó totalmente, tuvo que levantar el rostro para no ahogarse.

- Sr. Seguchi - confeso el menor al darse cuenta de lo que había hecho, de inmediato ayudo al rubio a levantarse - Se encuentra bien

- Si... Si... - contesto el mayor un tanto atontado por el golpe, levantándose ayudado por el cantante.

- Le ruego me disculpe - pidió el victoriano llevando el brazo de su jefe alrededor de su cuello, para llevarlo a descansar a la palapa donde hacia un momento ambos se encontraban - Siéntese, le hará bien.

El albino ayudo a su jefe a sentarse en la silla para después buscar un poco de agua al mismo que rogaba que el golpe no hubiese sido demasiado fuerte.

- Zhiend... - llamo el rubio relativamente alegre por las atenciones del albino para con el.

- No sabe como lo lamento, pero... - el menor estaba hincado al lado de su jefe un tanto preocupado por todo - Si alguien se acerca por atrás de mi... Mi reacción es instintiva - le extendió la botella de agua a la espera de que bebiese un poco.

- Gracias - el rubio sonrió con ternura al ver el gran arrepentimiento en los ojos de su estrella - Vaya, nunca me imagine que tuvieses tanta fuerza - río un poco para después preguntar - Y he comprobado en carne propia que sabes defenderte.

- K me enseño - confeso el menor con tranquilidad logrando que un gesto de terror apareciera en la cara de su jefe - Debido a mi pésimo sentido de orientación, K creyó conveniente que aprendiera a defenderme.

- Ha... Ha... - el rubio río con temor al imaginarse a esa par entrenando - Hubiese sido bueno hacerlo sabido antes - río un poco más contagiando al menor, sin embargo el golpe en la cabeza comenzó a doler con más intensidad - Ouch... - se quejó el mayor llevando se mano hasta su cabeza.

- Se encuentra bien - pregunto el menor al mismo que se acercaba a su jefe - Me permite - pidió recibiendo un asentimiento del mayor, a lo que comenzó revisar su cabeza para verificar la magnitud del daño - Me temo que la parte afectada ha comenzado a inflamarse.

Con velocidad el victoriano busco entre las cosas que se encontraban esparcidas bajo la palapa, en busca de algo pero por lo visto todo fue infructífero.

- Que buscas? - pregunto el mayor bastante curioso ante lo que ocurría.

- Necesitaba una pequeña toalla, pañoleta o un algún trozo de tela - contesto suspirando con pesadez ya que no había nada de utilidad en aquel lugar.

El victoriano cansado de todo regreso al lado de su jefe para así comenzar a quitarse la camisa que cubría la parte superior de su torso, se giró para dirigirse a la hielera de la cual tomó algo de hielo, mismo que envolvió en la prenda que acababa de quitarse, durante todo ese tiempo el empresario se deleitó con la increíble vista del tatuaje en la espalda del victoriano.

Al día siguiente...

Faltaban a penas minutos para que el primer concierto de la nueva estrella de NG récords iniciara, el escenario estaba a reventar, los fanáticos había llegado desde muy temprano a ocupar sus lugares al igual que uno que otro decepcionado que aunque no lograse conseguir boleto para la presentación se conformaban con escuchar la bella voz del joven de ojos albinos y tal vez con un poco de suerte verlo aunque fuese un momento.

- Ya estas listo Zhiend - pregunto el empresario quien se encontraba en el camerino de su estrella contemplando como terminaba de vestirse.

- Perfectamente Sr. Seguchi - el menor lucía un bello traje victoriano color blanco con detalles en color dorado -

- Tenía curiosidad en ver como sería tu vestimenta para esta noche, considerando lo complicado del clima - el empresario pensaba que el menor lucha encantador como de costumbre, pero como no hacerlo cuando su belleza era algo natural en su persona.

- Debido a malas experiencias me encuentro preparado para casi todo - el albino confeso mientras revolvía un poco su cabello para que luciese mucho mejor.

Por los altavoces se escucho al presentador anunciando la segunda llamada por lo que ambos hombres se dispusieron a ponerse en marcha al escenario, al llegar el equipo técnico monopolizo la atención del cantante, quien era fijamente observado por su jefe. Pronto la tercera llamada fue anunciada y el telón comenzó a subir al mismo que la música de fondo se escuchaba.

- Buenas noches Okinawa - la voz del victoriano resonó en todo el lugar - Están listos para el show? - pregunto muy alegre al mismo que su expresión cambiada, ahora era mucho más firme y llena de fuerza - Yo soy Zhiend... Y esto es "Trigger"


El espectáculo continuo por una hora más, el menor hizo vibrar al público con "Blood Color" y "Fallin" principalmente, por su parte el dueño de NG se encontraba bastante feliz por como su había suscitado las cosas a pesar de que hubiese terminado con un chichón en la cabeza pero al final el haber visto el tatuaje de Zhiend bien valía la pena.

Flash Back...

Los ojos del empresario estaban como platos al contemplar la espalda de su estrella, el diseño del tatuaje era en verdad impresionante ahora entendía porque K menciono que elaborarlo tomó cerca de un año, era una figura en verdad compleja e impresionante, pero algo en su interior le decía que aquello tenía un significado.

- Un tatuaje - se atrevió a hablar finalmente, aún sentado el la silla sin que su asombro disminuyera - Eso es un tatuaje.

El cantante al escuchar a su jefe, giró levemente su cabeza para después suspirar y acercarse a su lado colocando de camisa llena de hielos a su cabeza, esperando mitigar el dolor y la inflamación.

- Si... - contesto el menor muy tranquilamente mostrando una suave sonrisa - Puede que crea que es algo extraño pero...

- Es hermoso Zhiend - confeso el rubio atrayendo la atención del victoriano quien por primera vez lucía sorprendido.

- Como ha dicho? - pregunto el menor un poco impresionado por la respuesta que le dio se jefe.

- He dicho que es hermoso Zhiend, es tan complejo, fluido, misterioso y bello... Como lo eres tu - miro aquella gemas bicolores logrando que el más joven sonriera con más tranquilidad.

Ahí estaba esa expresión serena, que lograba encantar a cualquiera ese era Zhiend un joven que podría parecer misterioso y un tanto frío pero la realidad discrepaba mucho.

- Dime una cosa? - se atrevió a preguntar el empresario incorporandose en su silla para quedar sentado y poder contemplar mejor el tatuaje - Tiene algún significado?

- Así es... - respondió el menor levantándose para girarse dándole la espalda a su jefe, con el fin de que admirara mejor el grabado.

- Puedo saber... cual es ese significado? - pregunto al mismo que con timidez delineaba las marcas con sus dedos absorto en todas aquellas, líneas y formas.

- Claro - confeso el menor girandose nuevamente, inclinándose para quedar de frente a su jefe logrando que los ojos de ambos se mirasen fijamente; por su parte el cantante sonrío con ternura para después... - Liberación - admitió logrando atraer la atención de su jefe - Son mi expresión de libertad.

Con suavidad pegó su frente a la del rubio cuyo corazón comenzó a acelerar de como si se tratase de un auto de fórmula 1, los cabellos de ambos se entrelazaron con fluidez, era como una cascada de oro y plata perfectamente incorporada.

- Estas son... - continuo el de ojos bicolor acercándose un poco más a su jefe, manteniendo sus ojos cerrados - Mis alas de libertad.

El tatuaje del victoriano no era ni más ni menos que un par de enormes alas que iniciaban en la espalda alta del menor, eran tan complejo puesto que eran combinación de las alas de un ángel con una mariposa y un hada, todas seguidas una de la otra, eran tan hermosas.

- Sr. Seguchi - llamo a su jefe con tranquilidad, separándose un poco de aquel abrazo - Me gustaría pedirle un favor - espero un segundo para después - Le rogaré que mantenga esto en secreto- pidió separándose totalmente con una mirada de preocupación - No deseo que las personas, principalmente la prensa se entere de algo tan privado y personal - lo miro directo a los ojos riendo con suavidad al mismo que cubría con delicadeza su boca como ocultando alguna travesura infantil - De hecho... usted es la primer persona que lo ha visto así que...

- No tienes de que preocuparte - contesto el mayor con firmeza tratando de tranquilizar al menor, quien continuaba un tanto angustiado - Guardare tu secreto - levanto la mano como dando a entender que se trataba de alguna clase de juramento - Te doy mi palabra de que esto seguirá siendo un secreto.

- Se lo agradezco - con eso una sonrisa de gratitud apareció en el rostro del victoriano, misma que contagió al rubio quien le sonrió con alegría.

Fin del Flash Back...

El concierto acababa de terminar, el cantante se despedía del público mientras recibía una enorme ovación, con tranquilidad camino hasta la parte posterior del escenario donde su jefe ya lo esperaba con una sonrisa de satisfacción ya que todo había salido a la perfección.

- Es hora de irnos Zhiend - comento el empresario colocando una de sus manos sobre el hombro del menor.

- Si - fue todo lo que el cantante contesto para así seguir a su jefe en dirección a la salida.

Ya en el exterior caminaban por una pequeña alfombra, donde a sus extremos algunos fanáticos saludaban a su ídolo, pedían un autógrafo o deseaban tomarse alguna foto, el albino intentó complacer a todos sin embargo eso sería imposible, así que después de unos minutos ambos subieron a la limosina que los llevaría al hotel.

- Por los comentarios del público - comento el rubio revisando en su móvil la página oficial de la gira de Zhiend donde los fanáticos de Okinawa ya había comenzado a hacer declaraciones, subir fotos y vídeos de la reciente presentación - Todo ha resultado un éxito - una amplia sonrisa se formó en los labios del mayor - Que opinas Zhiend? - pregunto al victoriano quien durante todo el trayecto se había mantenido en silencio - Zhiend... - llamo una segunda vez.

Sin embargo el empresario no recibió respuesta alguna, en cambio sintió un peso sobre su hombro, al girar su cabeza su gesto se suavizo al darse cuenta de que su adoración se había quedado profundamente dormido.

En una ocasión tuvo la oportunidad de observarlo dormir y si algo caracterizaba al albino era aquel gesto sereno mientras descansaba, era extraño pues cuando estuvo sobre el escenario demostró ser alguien fuerte, determinado y sin temores todo lo contrario de su actual imagen la cual era similar a la de un niño descansando con serenidad bajo la protección de sus padres.

- Dulces sueños Zhiend - comento con suavidad el mayor para después pasar una de sus manos para estrechar un poco más al cantante y depositar un casto beso sobre su frente, dicho gesto logró que el victoriano sonriera ante aquella muestra de cariño.

El empresario cada vez iba descubriendo más cosas acerca de la persona que más le importaba, todas eran bellas sorpresas provenientes de una persona con una belleza externa tanto interna, sin embargó la idea de que algo bastante malo le sucedió al cantante creció exponencialmente y la prueba fehaciente de ello era el tatuaje con un significado tan especial "Alas de Libertad", pero que era aquello de lo que el de ojos bicolor quería liberarse o mejor dicho dejar atrás, esa duda aumentaba día con día sin embargo aunque deseara con todas sus fuerzas conocer esa interrogante para poder brindarle apoyo a su adorado Zhiend, sabía que no debía presionarlo era mejor esperar hasta que el tiempo desentrañara las sombras pasadas.

Notas finales:

Bueno eso es todo por el momento, espero que lo disfruten mucho y la sorpresa que les tenía preparado es el siguiente. 

He aqui por primera vez la imagen de como debería lucir Zhiend... Cabe mencionar que el diseño no es mío, se trata de un personaje de un juego en línea llamado Corazón de Melon, cuya creadora es ChinoMiko, el nombre de este personaje es Lysand ro de igual forma les dejo la imagen del tatuaje. 

 

Zhiend imágenes

https://www.google.com.mx/search?q=lysandro+cdm&prmd=ivn&source=lnms&tbm=isch&sa=X&ved=0ahUKEwjUktGErOfLAhWGGR4KHSwOBK0Q_AUICCgB&biw=320&bih=404#imgrc=EeTG3oKanNfIdM%3A


https://www.google.com.mx/search?q=lysandro+cdm&prmd=ivn&source=lnms&tbm=isch&sa=X&ved=0ahUKEwjUktGErOfLAhWGGR4KHSwOBK0Q_AUICCgB&biw=320&bih=404#imgrc=3pnHefs7JQfG3M%3A

Zhiend tatuaje

https://www.google.com.mx/search?q=lysandro+cdm&prmd=ivn&source=lnms&tbm=isch&sa=X&ved=0ahUKEwjUktGErOfLAhWGGR4KHSwOBK0Q_AUICCgB&biw=320&bih=404#tbm=isch&q=lysandro+cdm+tatuaje&imgrc=4UeSX_Bbvqc85M%3A

https://www.google.com.mx/search?q=lysandro+cdm&prmd=ivn&source=lnms&tbm=isch&sa=X&ved=0ahUKEwjUktGErOfLAhWGGR4KHSwOBK0Q_AUICCgB&biw=320&bih=404#tbm=isch&q=lysandro+cdm+tatuaje&imgrc=1KxkDQFWHuOuFM%3A


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