Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Patitos... por Aiyuko

[Reviews - 12]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

¡Mucho gusto! nos alegra estar aquí.

¡Esperamos que disfruten el capítulo!

CAPÍTULO 2.

Esta ya no era una escena graciosa. Continuó estático asomado en la orilla del lago sin saber que hacer hasta que logró visualizarlo. El cuerpo de su amigo estaba flotando, boca abajo, y no daba señales de estar consciente. Kamijou se desesperó, el ritmo de los latidos de su corazón aumentó y sus manos comenzaron a sudar sin darle el valor suficiente para arrojarse por su mejor amigo.

Se sacó la camiseta y la arrojó sin importarle a donde fuera a caer. Respiró, y volvió a hacerlo antes de saltar al agua e ir en rescate de Nowaki.

Nadó, nadó con todas sus fuerzas, nadó en contra de la corriente que lo llevaba, nadó hasta tomarlo.

–... ¡Nowaki!...- lo volteó y pudo notar que sus ojos estaban cerrados y su respiración cortada, por lo menos aún estaba vivo. –¡Nowaki!- se desesperó, no reaccionaba, por más que lo hiciera entrar en razón, no permitía que Kamijou viera sus hermosos ojos. –¡NOWAKI!- no podía continuar allí quieto sin hacer nada, lo abrazó con fuerza, con toda la fuerza que tenía, y comenzó a nadar en busca de la orilla más baja.

Nadó tan rápido como su cuerpo se lo permitió, la diferencia de tamaños no era nada en comparación a lo que ahora estaba viviendo. Llegó a la orilla sin saber si la mejor decisión era subirse el primero o subir a su amigo, quizás sería más fácil subirlo por arriba o al menos eso creía, la desesperación lo estaba superando, no le daba tiempo de nada. Subió él, y luego tomó por debajo de los brazos a su amigo sufriendo un minúsculo infarto al sentir que la corriente volvía a llevarlo.

–¡Nowaki!- volvió a intentar que reaccionara –¡Mierda, despierta!- sonaba agobiado y soltó un leve quejido al ver la sangre brotar de su frente, ¿Qué haría ahora?

Rasgó un fragmento de su bermuda para colocárselo en la frente y evitar que la hemorragia continúe, esto lo había aprendido gracias a él. Luego de esto se paró con las piernas temblorosas y se apresuró en correr en busca de su celular, necesitaba llamar cuanto antes a una ambulancia.

–Hola- dijeron en un desesperante tono del otro lado de la línea.

–Hola, sí, disculpe- dijo con desesperación –Necesito una ambulancia cuanto antes, mi amigo se cayó al río- se detuvo, Nowaki no se había caído, él lo había empujado, él era el responsable ahora –Tiene una herida en la cabeza, no reacciona y está perdiendo sangre-

–Por favor, cálmese. Necesitamos que nos de su paradero para poder ubicarlo- aún consciente de la situación que Hiroki estaba viviendo no cambiaba su tonalidad.

–Sí, estamos en la laguna del pueblo- dijo irritado.

–Claro, en seguida mandamos una ambulancia. No se altere y no deje solo a su amigo- luego de esto Kamijou cortó la llamada y tiró su celular al suelo para volver con Nowaki.

Pero al llegar allí se decepcionó, seguía en la misma posición en la que lo había dejado, el recorte de su traje de baño pasó de blanco a bordo y aún no regulaba su respiración.

–Tranquilo, Nowaki. Vienen por ti… perdóname- se abrazó a él y luego tomó su mano en la espera de la ambulancia.

♠♣♥♦

A la ambulancia no le tomó más de 5 minutos llegar aquí, pero, sin duda alguna, fueron los 5 minutos más largos de mi corta existencia. Dos enfermeros bajaron y lo recostaron delicadamente en una camilla para luego subirlo a la ambulancia, donde fue asistido por un paramédico. Sólo me senté a esperar, a esperar resultados positivos, sentía una opresión inmensa en mi pecho, mi mejor amigo estaba grave, y lo peor es que era mi culpa, no podía evitar sentir angustia.

Inhalaba y exhalaba lentamente mientras veía como el inerte cuerpo Nowaki no regulaba su respiración y luchaba contra la muerte, ¿cómo podía estar pasando esto ahora?, no podía dejar de mirarlo, de sentirme miserable y egoísta mientras sostenía un miserable balón de hule, el cual momentos antes fue sostenido por… él. Nowaki tenía motivos para omitir tan decisivamente sus palabras, y yo, como mejor amigo, no supe entenderlo y darle unos momentos de meditación, sin embargo lo forcé, y ahora estamos dentro de una ambulancia camino a un hospital. No supe esperar unas horas, y ahora el miedo a que no vuelva a despertar era peor.

De algún modo habían logrado detener la hemorragia, pero aun así seguía sin reaccionar. Abracé con fuerza el balón y suspiré desviando la mirada, sentía una acidez que pronto me haría deshacerme de toda la comida de mi estómago, las manos me temblaban y era incapaz de llorar, estaba seco.

Los especialistas me miraron fijamente, me evadí sólo con la mirada, abrí mis ojos y ellos notaron cierta preocupación reflejada en ellos.

–¿Estás bien?- uno de los enfermeros se acercó lentamente, abrí la boca pero no dejé salir ningún sonido de mis cuerdas vocales, mi garganta estaba seca y convertía el hablar la tarea más difícil del mundo. –No te preocupes, se pondrá bien- sonrió, ¿cómo podía sonreír en un momento así?

Continué viendo a mi amigo, tenía unas fuertes ganas de acercarme, de tomarlo de la mano y disculparme de rodillas, de ver sus ojos, escuchar su voz, pero eso era imposible a no ser que reaccionara, pero por ahora no había señales que me dieran esa esperanza, y eso era lo que más me dolía.

Pero, él es fuerte, una persona caracterizada por la valentía, no podía morir así… ¡no puede abandonarme!, volvería a abrir los ojos de eso estaba seguro, pero ¿qué pasa si luego de eso me odia?, ¿si no quiere volver a verme?, ¿si se aleja de mí por el resto de mi vida?, eso era aún más desgarrador, simplemente no me imagino una vida lejos de él, mucho menos estando consciente de que nuestra separación es originada por rencor, además de que si alguien tiene la culpa, ese soy yo. Pero Nowaki no es así, él es comprensible y amable, tenía paciencia… algo que a mí me faltaba a montones.

Comencé a llorar, las lágrimas resbalaban por mis mejillas recordándome mi error, ¿cómo pude ser tan estúpido?, eran demasiados sentimientos encontrados y sólo pude aliviarme al observar que por fin habíamos llegado al hospital.

Entraron rápidamente con Nowaki, aún sobre la camilla, y se encerraron en una habitación para tratar su herida, ¿cómo pude haberle hecho eso? “Siéntate y espera, se pondrá bien, no te preocupes”, ¿cómo podían decirme algo así en un momento como este?, ellos no tenían ni la más mínima idea de cómo me estaba sintiendo justo en este preciso instante, y mientras él estaba inconsciente yo me desmoronaba por dentro, de alguna forma sentía su ausencia, me atormentaba no saber cómo acabaría esto, era difícil, apenas tengo 17 años y estoy solo en una sala de hospital esperando los resultados luego del accidente que yo le provoqué a mi amigo.

No podía evitar recordarme una y otra vez que esto era por mi culpa, por mis impulsivas e inmaduras acciones de adolescente estúpido, pero era agonizante, no fue para nada divertido. Cubrí mi rostro con ambas manos, no podía llorar, no en un lugar público, no tenía cara para hacerlo. Sentía vergüenza por mí mismo, la melancolía me estaba destrozando, y esto era sólo el principio.

–¿Quién viene con el joven de la herida en la frente?- no sabía en qué momento el doctor había salido de la sala de urgencias, pero, ¿no podía ser un poco más suave con sus palabras?, no sabe el daño que me está generando que diga esas estúpidas palabras, no, no podría entenderlo.

–Y-yo…- me sentí extraño al hablar, me paré para enfrentarlo, pero era incapaz de mirarlo fijamente a los ojos. En cambio él estaba tan neutral, aunque era algo natural sabiendo que era doctor y que probablemente no era la primera vez que le pasaba algo similar.

–¿Es algún pariente o algo similar?- se me quedó viendo un rato, en definitiva era extraño que yo sea la única persona que aguardaba en la sala de espera por noticias sobre un muchacho que llegó con una herida de cuatro centímetros a lo largo de su frente.

Negué con la cabeza –Sólo un amigo- dije.

–Con que amigo…- hizo una pausa –Bueno, a lo que venía, muchacho. Su amigo ha sufrido una lesión cerebral debido al fuerte impacto que tuvo como consecuencia su golpe, según lo que nos mencionó antes se cayó al lago y la posibilidad de que se haya golpeado fuertemente la cabeza con una piedra es alta, por ahora no hemos podido diagnosticar nada grave que ponga en riesgo su vida, pero… él aún no ha despertado, y eso es porque ha entrado en un periodo de coma- esto no podía ser peor, Nowaki estaba en coma por mi culpa, ¿cuánta probabilidad hay de que no vuelva a despertar?, he oído de varios casos de personas que nunca lo hacen, pero yo quiero que Nowaki despierte, que me miré, aunque sea con odio, pero que lo haga, que me hable, aunque me grite, que me toque con sus suaves manos, aunque sea para darme una merecida cachetada. –Por eso, necesitamos que nos diga el nombre y apellido del paciente, junto a su fecha de nacimiento y número de teléfono- atrajo una tabla y preparó un bolígrafo para anotar los datos que hipotéticamente tendría que dictarle.

–Emh, es Kusama Nowaki, su fecha de nacimiento es el 31 de septiembre de 1999, y… y…- pero, Nowaki no tenía padres a los cuales contactar, su única familia era… yo, él me lo había dicho un par de veces en el pasado, éramos como hermanos separados al nacer. –Le daré mi número, en caso de urgencias por favor avíseme de inmediato- mi mente se bloqueó y sólo por unos segundos había olvidado hasta mi nombre, los números se mezclaron y tuve que esperar para que todo se acomodara y pudiera hablarle con lógica. –Mi nombre es Kamijou Hiroki, sólo por si las dudas, y mi número es 81 3694231- el medico sonrió.

–Está bien, Kamijou, si llegara a pasar algo relevante se lo haremos saber de inmediato- ojeó su reloj de muñeca –Vaya a su casa y descanse, pronto oscurecerá y es muy peligroso que un adolescente ande por esta zona sin compañía de noche- se despidió con la mano y yo asentí para comenzar a caminar a mi casa.

El sol comenzaba lentamente a bajar por el oeste, sería algo realmente hermoso de ver si no fuera por la situación de mierda que estoy viviendo ahora, ¿cómo podría vivir con esto ahora?, mi mejor amigo estaba en coma, ¡en coma!

Mis piernas comenzaron a fallarme, temblaban como gelatina, ¡mierda!, odio la gelatina, me senté en una banca de un desierto parque, subí mis piernas a ella y las abracé fuertemente, este era su parque favorito, siempre veníamos aquí, emparejábamos a cualquier hombre sospechoso con otro igual, si Nowaki no estuviera conmigo y tuviera que reprimir esos pequeños placeres sería tan solitario, nadie haría esto conmigo, no hay mejor amistad que la que él supo brindarme, y ahora estaba desconectado de este mundo, que locura.

Comencé a llorar, a llorar como nunca en mi vida lo había hecho, jamás me agrado el hecho de llorar en la calle, mucho menos en frente de otras personas, pero hoy no puedo contenerme, no puedo dejar de culparme a mí mismo, estoy herido y siento una fuerte tormenta en mi interior. ¡Maldición!, necesitaba un pañuelo, Nowaki me hubiera ofrecido el puño de su campera, su amistad es tan pura y sincera, una separación me dolería peor que un golpe en el dedo del pie… que idiota fui. Me recosté en la banca ocupando el lugar que naturalmente era ocupado por él. Cubrí mi rostro, cualquiera que me viera pensaría que soy un indigente, pues las opiniones me importan una mierda, dejen sufrir a alguien sin molestar y ahórrense los comentarios.

Pero los ojos comenzaban a pesarme y se cerraban por cuenta propia, me senté y sequé mi rostro. Me paré lentamente y caminé en silencio hasta mi casa, aún sentía ese miserable nudo en la garganta. Pasé rápidamente a mi habitación y me acosté en mi cama, con mi almohada cubrí mi rostro, me sentía encerrado y se cortaba el aire, pero puedo asegurar que esta sensación es más llevadera que el hecho de descubrir mi rostro y no verlo a él junto a mí.

Notas finales:

Esto va de parte de Aoi, yo tampoco lo entendí muy bien... ¡Así que sientanse libres de preguntar si tienen alguna inquietud!

"Bueno, el cumpleaños se Nowaki se movió un par de meses ya que usé como referencia nuestro calendario escolar, pero tuve en cuenta sus estaciones. Ahora mismo están en verano, por ende deberían estar entre el mes de junio y el mes de septiembre, en este caso estamos en el mes agosto. Las clases comenzarían en septiembre y para que su edad concordara con el curso al que asistirían tuve la necesidad de moverlos, por ende, el cumpleaños de Nowaki sería el 31 de septiembre y el de Hiroki el 12 de junio, siendo Hiroki 4 meses mayor."

¡Reviews respondidos uvu!

¡Saludos, nos vemos el próximo sábado!~


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).