Tras aquel beso realmente inesperado por parte del peli oscuro, Emrrys tenía la cara tan roja que se podría decir que en cualquier momento iba a estallar.
El beso se cortó y Zeref delineo el contorno de la cara del menor, desde su frente hasta su mentón, seguía siendo tan lindo, con esa cara de niño pequeño. Paso su mano al pelo rubio, las finas hebras le cosquillaban la mano.
El cuerpo de Emrrys se estremeció por el contacto, sabía que la razón de ello era la mano del mayor, era tan cálida y suave que deseaba que esta no se separara de su persona.
Zeref por su parte, tenía unas enormes ganas de poder recorrer todo el cuerpo del contrario, pero muy en el fondo no quería lastimarlo y mucho menos hacer que le odie.
-Zeref- su nombre pronunciado por esos dulces labios era lo más hermoso que había escuchado.
Su cuerpo se dirigía solo, su cabeza acostó la distancia hasta rozar las narices, era una atmosfera hermosa y tierna, terminaron de acortar la distancia para al fin besarse de verdad, sin culpa. Sin vergüenza, la mano de Zeref se acercó al cuerpo del menor, pero se detuvo.
-No quiero hacerte daño- Soltó el ex mago oscuro arrepintiéndose de lo que iba hacer.
Sin embargo…
-No lo harás- Emrrys agarro la mano de Zeref apoyándola en su cuerpo. -Por favor- Emrrys pidió y Zeref al fin accedió.
***
Mientras tanto en el gremio, algunos de los miembros comenzaban a irse a sus casas ya. Lucy y Jack se despidieron de los demás y partieron rumbo al domicilio de la rubia; Hikari junto a Andrés, Gin y Eugeo se fueron también, pero antes de eso irían a cenar, ya que tanto el peli plata como el rubio tenían apetito, por supuesto que la peli rosa acepto de primeras, pero su novio estaba algo incómodo de tener que tolerar a ese par de niñitos.
Justo en ese momento llegaron Ren y Yoshi, pero al ver que todos se estaban retirando, pues eso arruinaba sus planes. No fue hasta que cierto peli rosa los vio y se acercó a ellos.
-¿Qué hacen ustedes aquí? ¿No deberían estar con Emrrys?- Pregunto Natsu a ambos chicos.
-Bueno, dijo que quería estar solo- Explico el azabache cuando en eso se le ocurrió una maldad. –Natsu-san, ¿Podríamos dormir en su casa? Quizás Emrrys necesite estar solo por una noche-
Al escuchar eso, el castaño se puso rojo y miro acusadoramente a su hermano. Este último se burló por lo bajo, no estaba mal darle un pequeño empujón a su hermanito para que avanzara con el peli rosa.
-Bueno, no tengo problema con eso, no estaría mal tener algo de compañía para variar ¿No crees Happy?- Dijo el peli rosa a su compañero exceed.
-¡Aye! ¡Tendremos una noche de juegos!- Menciono entusiasta el pequeño minino azul, pasando a posarse en los brazos del más joven del grupo. -¡Vamos!- Ordeno el gato alado, provocando que tanto al GS del agua como a los dragones les recorriera un goterón en la cien.
-Muy bien, andando- Dijo simple el peli rosa, partiendo rumbo a su domicilio junto a los otros dos y su compañero minino, el cual paso a volar al lado de su compañero DS.
-¿P-Por qué propusiste esto, Nii-san?- Pregunto Yoshi en tono bajito para que Natsu no le escuchara.
-Te estoy haciendo un favor. Serias el único que estaría soltero en casa, y eso no lo voy a permitir- Explico el azabache de mechón blanco con el puño en alto.
-Tonto- Soltó el menor con las mejillas rojas y desviando la mirada. A veces su hermano podría ser un entrometido si se lo proponía.
-¿De qué hablan?- Pregunto Happy acercándose a ambos.
-De nada- Dijeron tanto heterocromatico como oji jade.
Sí que estos supieran, Natsu ahora se preguntaba una cosa, y esa era de donde venía ese extraño ahora que emanaba de ambos chicos. Por alguna extraña razón, se le hacía bastante familiar…
De tanto pensar, el grupo llego a la casa del oji verde. Todos ingresaron y comenzaron a planear que jugarían primero en esta “noche de juegos”.
***
Las ropas de ambos fueron desapareciendo mientras los dos se unieron en un beso tímido, o al menos empezó siendo tímido, ya que paso a ser algo más hambriento y desesperado cuando el oji oscuro introdujo su lengua en la cavidad ajena.
Emrrys gimió al sentir la mano de Zeref deslizarse por su espalda haciendo que se tensara y la piel se le pusiera de gallina, ahora mismo si este era un sueño, no quería despertar.
El peli oscuro dejo tranquila la boca del rubio y comenzó a repartir besos por el cuello y pecho del chico, este último se cubrió la boca para evitar que más gemidos salieran, pero esto resulto ser inútil ya que cada cosa que hacia Zeref a su cuerpo provocaba un sinfín de sensaciones placenteras.
Por supuesto, el ex mago oscuro sabía a la perfección lo sensitivo que era el oji esmeralda, no por nada había convivido con él por unos años hasta que este pudiera cuidarse por sí solo. Y ya que este había crecido, ya no había razón alguna de contenerse ¿Verdad?
Zeref se vio tentando al ver el miembro semi erecto del menor, y después de pensar “¿Por qué no?” este se metió el miembro del mago natural a su boca, lo cual hizo que el rubio gimiera más fuerte al sentir la lengua húmeda del oji oscuro pasar alrededor de su falo. El mayor continúo en lo suyo, chupando de manera lenta y tortuosa el miembro del rubio, mientras este último sentía que en cualquier momento eyacularía.
El pelinegro se detuvo y paso a ver a su querido oji esmeralda, el cual tenía la cara tan roja que se podría decir que parecía una manzana ya madura y lista para ser comida. Esto le provoco ternura, pero de un momento a otro, Emrrys le tumbo y quedo encima de este.
-Y-Yo… déjame hacerte… lo mismo- Dijo con voz tímida el oji esmeralda.
Zeref solo sonrió y le dio un pequeño beso para luego darle permiso. Con algo de morbo, Emrrys se acercó al falo de Zeref, el cual estaba ya erecto, y acerco tímidamente su boca. Este le dio una pequeña lamida a la punta y lo introdujo lentamente en su cavidad bucal para comenzar a chuparlo sin mucha prisa.
El rubio continuo en lo suyo mientras un avergonzado pelinegro se preguntaba en que momento este aprendió a hacer esas cosas. Pero lo que le llamo la atención fue ver como el oji esmeralda introducía dos dedos en su propio ano, comenzando a prepararse el solo.
-¿C-Cuando aprendió a hacer eso?- Se preguntó así mismo el oji oscuro cuando en eso sintió que en cualquier momento iba a soltar toda su semilla dentro de la boca de Emrrys.
Por supuesto, este detuvo al menor justo antes de que ese delicado límite se rompiera. Al fin y al cabo, lo que el quería era terminar dentro del contrario, por muy pervertido que eso fuera.
-¿Q-Que ocurre? ¿-L-Lo hice mal?- Pregunto algo apenado el mago natural, retirando sus dedos de su entrada.
-N-No, solo que aún es muy pronto para terminar- Dijo esto último en un susurro. – Además, ¿Cuándo aprendiste a hacer eso con tus dedos, pequeño pervertido?- Pregunto el ex mago oscuro.
Y-Yo… bueno…- El pobre oji esmeralda no sabía cómo explicarse. Bueno, él había escuchado sin querer acerca de cómo dos hombres pueden tener relaciones por parte del pervertido de Pancho, pero vamos, nunca espero que esa información le fuera a ser útil.
Con un poco de vergüenza, este se sentó y acto seguido abrió sus piernas, dejando ver su entrada ya lista para recibir el miembro del contrario.
-Emrrys…-
-H-Hazlo, p-por favor, Zeref- Dijo con voz tentadora el chico de hebras rubias.
Zeref solo acepto aquello y se acercó al contrario, beso la frente del menor y acto seguido, acerco su ya duro miembro a la entrada del oji esmeralda. Con un poco de fuerza, este comenzó a introducirse en el menor, provocando que el mago natural soltara algunos quejidos hasta que finalmente todo el falo del ex mago oscuro entro en él.
Zeref espero que Emrrys se acostumbrara a la intromisión, pudiendo notar lo hermoso que era el rostro del chico con aquel sonrojo que decoraba sus mejillas. Cuando vio que este ya se había acostumbrado lo suficiente, comenzó a embestir lentamente al rubio, provocando que algún que otro jadeo saliera de la boca de Emrrys.
Por supuesto, esto excito al oji oscuro, el cual se perdió por completo y comenzó a embestir más rápido al chico, provocando que más gemidos salieran de la boca del mago natural, además de que una pequeña hilera de saliva saliera de la boca de este último.
El ex mago oscuro se acercó para unir sus labios nuevamente con los del menor, besándose de forma tierna a la par que lujuriosa. Emrrys por su parte, y tentado por su propio morbo al querer sentirse aún mejor, comenzó a masturbarse mientras tenía unas ganas tremenda de gritar del placer al sentir como el contrario le daba en el punto exacto.
No fue mucho para que, tras unas cuantas estocadas más, ambos terminaran corriéndose, siendo el rubio quien mancho su propio pecho mientras el mayor llenaba su interior por completo.
Ambos jadeantes, y con poco de sudor y calentura recorriendo sus cuerpos, se dieron un último beso para quedar profundamente dormidos.
***
Ya era un poco tarde, probablemente las 2 de la madrugada. Tanto Ren como Yoshi y Happy se habían quedado dormidos en el sofá que tenía Natsu en su casa, abrigados con una frazada que les proporciono el mayor.
El peli rosa por su parte, abrió la puerta del domicilio y salió sin hacer ruido. Al fin había identificado de quien era ese aroma, y para su suerte, aun podía percibir la presencia de ese individuo en la ciudad.
Sin perder tiempo, este fue rápido a un punto que él sabía dónde podía interceptar a esa persona.
***
En casa de los chicos, Emrrys se encontraba durmiendo tranquilamente en la cama del GS del agua. Zeref estaba parado a su lado, ya vestido y admirando la dulzura del rostro contrario.
Este se acercó y beso en la mejilla al contrario, dejando también una nota en la cómoda al lado de la cama. Con sumo cuidado salió de la habitación sin hacer ruido y procedió también a irse del domicilio.
Una vez afuera, este procedió a irse de la ciudad, aprovechando que no había gente y la calle estaba silenciosa. No estaba preocupado en lo absoluto por su pequeño mago natural, este estaba protegido por sus amigos y por el resto de Fairy Tail. Le vendría a visitar de vez en cuando, pero debía ser cuidadoso de que nadie le viera o se armaría la grande.
Cuando Zeref ya estaba fuera de la ciudad y se encontraba caminando por la carretera, vio una silueta muy conocida que lo esperaba sentado en una roca, lo cual lo dejo casi pálido.
-¿Natsu?- Dijo incrédulo el peli oscuro al ver al peli rosa ahí como si fuera lo más divertido del mundo.
-Así que no me equivocaba, eras tú el que tenía ese aroma- Menciono el peli rosa levantándose. –Pero ahora que lo noto, es algo diferente, ¿Qué te traes viniendo aquí?- Pregunta serio el oji verde.
-Yo… vine por motivos personales… -Dice firme el oji oscuro. –Si me disculpas, debo irme…-
Justo cuando el ex mago oscuro pasó al lado del DS de fuego, este lo agarro de la túnica fuertemente. Acto seguido, Natsu saco una cuerda de quien sabe dónde y amarro fuertemente a Zeref para impedir que escape.
-¿Q-Que crees que haces, Natsu?- Pregunto confundido el peli oscuro.
-Primero, ya me di cuenta que te falta un brazo; segundo, ¿Por qué tienes el olor de Emrrys alrededor de tu cuerpo?; y tercero, más te vale que expliques porque no tienes magia- Dice firme el oji verde.
-¿Qué? ¿Cómo… te diste cuenta?- Pregunto nuevamente el oji negro asombrado.
-No subestimes la nariz de un DS- Responde orgulloso el oji verde. –Pero eso no soluciona mis preguntas, ¿Por qué tienes el aroma de Emrrys alrededor de tu cuerpo?-
-B-Bueno…-
El ex mago oscuro comienza a decirle al DS de fuego todo, desde la parte cuando se dio cuenta de sus errores, hasta llegar a la parte donde conoció a Emrrys y viajo temporalmente con él, de su pelea a muerte con Acnologia donde logro matarle y librarse de su maldición, al mismo tiempo que perdió su brazo izquierdo y quedo sin la posibilidad de ser mago nuevamente.
Por supuesto, Natsu escuchaba todo sin perder detalle. Algo le decía que todo eso era verdad, ya que las pruebas estaban a la vista, mejor dicho, él las podía oler.
-Ya veo, ¿Así que te acostaste con Emrrys, no?- Cuestiono sin vergüenza alguna el peli rosa.
-Sí… y… hay otra cosa que no te he dicho…- Menciona el pelinegro preparándose para decirle la verdad al contrario. –Tu… y yo… somos… hermanos- Soltó finalmente, dejando al oji verde con una notoria cara de “¡¿Qué mierda acabo de oír?!-
-¡¿Qué?! ¡¿Tú y yo somos hermanos?!- Pregunta incrédulo el DS de fuego. -¡¿Me quieres ver la cara de estúpido?! ¡Te creo todo lo anterior, pero esto si es pasarse de pen...!-
-Te puedo explicar todo, pero primero desátame ¿Quieres?- Pidió algo adolorido e incómodo el mayor.
Natsu libero a Zeref y este comenzó a decirle todo lo de su origen e incluso se tomó la molestia de decirle que no solo el venia de otra época, también los otros DS, menos los artificiales y los jóvenes, fueron enviados con la misión de aniquilar a Acnologia. Pero como el hizo el trabajo, ahora podrían vivir tranquilos sin preocupaciones.
-Es mucha información…- Menciono el peli rosa impresionado. –Pero, te creo. No pareces de las personas que mientes… hermano- Dijo esto último con algo de rareza, después de todo no esperarías que el temido mago oscuro Zeref, el cual era temido por muchos, fuera tu hermano mayor.
-Gracias Natsu, o debería decir, hermanito-
-¡Tampoco te pases, no te doy confianza aun!- Exclamo el peli rosa dándole un golpe en la cabeza al pelinegro. –Dejando de lado eso, espero no lastimes a Emrrys y le hagas feliz, es un gran chico, el cual acaba de pasar por algo terrible… pero por lo visto, lograste “hacerlo” feliz- Menciono burlón, sonrojando al contrario.
-C-Cállate, Natsu- Dijo avergonzado el mayor, sobándose donde fue el golpe.
-Bueno, creo que debo regresar a casa o Happy se preocupara. Más te vale tener en cuenta mi advertencia, y procura venir a visitarnos- Dice esto extendiendo el puño.
Ambos Dragneel chocan los puños y se despiden, uno regresando a su casa y otro partiendo para poder expiar sus pecados pasados.
***
La mañana había llegado con el tan sutil y hermoso cantar de los pájaros. Emrrys acababa de despertar, notando que Zeref no estaba, pero viendo la nota encima de la cómoda.
Este tomo la nota y la leyó:
“Vendré de vez en cuando a verte, mi pequeño. Pensare en ti en todo momento”
-Zeref-
Emrrys dibujo una sonrisa en su rostro al mismo tiempo que algunas lágrimas de felicidad decoraban su rostro. Apego la nota a su cuerpo, no pudiendo contener la felicidad.
Este se levantó de la cama y justo cuando iba a abrir la puerta…
-Emrrys, ya despertas…-
Ren y Yoshi habían llegado antes que su compañero despertara, habiendo preparado estos un desayuno especial que el heterocromatico llevaba en manos para levantarle el ánimo al oji esmeralda. Ni bien estos vieron al rubio desnudo, y con notorios rastros que se había “divertido” con Zeref, al cual por cierto no vieron en ningún lado, pues…
-Sí que te divertiste anoche, Emrrys- Dijeron ambos, el mayor con burla y el segundo con sorpresa.
-¡C-Cállense!- Exclamo avergonzado el mago natural corriendo al baño para poder darse una ducha.
-Bueno, parece que Zeref-san soluciono el problema- Menciona el castaño.
-Sí, y ahora debo lavar las frazadas de mi cama- Explica el azabache notando la mancha que habían dejado ambos chicos.
Con una nueva razón para vivir…
El futuro de nuestros magos es brillante y prometedor…
Saga terminada.