En el hotel donde se hospedaban los miembros de Fairy Tail, el maestro y el resto se encontraban festejando por los buenos resultados del primer día.
Un banquete decente hecho a mano por Mirajane y algunas de las otras chicas era degustado por la mayoría del gremio. Además de eso, algunos bebían un poco de alcohol para hacer el ambiente más festivo y divertido, con excepción de los menores claro está.
Claro que, algunos de nuestros simpáticos protagonistas no estaban presentes.
-Oye Gin, ¿Dónde se metió Eugeo?- Pregunto Hikari al no ver al rubio por ningún lado.
-Ni idea, quizás ya se fue a dormir ¿No crees?- Respondió el peli plata.
-Por si no se dieron cuenta, vino el pervertido de su novio y se lo llevo a cenar- Soltó Andrés llamando la atención de ambos.
-Oh, qué lindo detalle de Loke-san- Agrego la peli rosa.
-Hikari, me temo que no entendiste- Menciona el pelinegro.
-¿A qué te refieres?- Pregunto algo confundida la oji carmín.
-Hikari, él se refiere que Loke se va a “cenar” a Eugeo- Explico el oji azul a su mejor amiga, la cual enrojeció ante aquello.
-Vaya, captaste rápido- Halago el oji morado viendo como su novia intentaba que la calentura se le fuera del rostro.
***
En una habitación, Loke tenía sentado a Eugeo en su regazo mientras le penetraba y masturbaba. El peli naranja había rentado una habitación en un hotel en otra parte de la ciudad, ¿Cómo lo hizo si la ciudad de seguro estaba repleto de turistas? Digamos que el líder del zodiaco tenía muy buenos métodos y contactos.
Ambos labios se conectaron tras lo que el espíritu de Leo introdujo su lengua en la cavidad ajena, jugando con la contraria y profundizando el beso. El rostro del menor era un poema, los ojos algo vidriosos y el sonrojo en las mejillas eran una mezcla muy excitante para el mayor.
Después de un rato y tras haberse “vaciado” ambos, ambos estaban acostados en la cama de la habitación. Bueno, en realidad solo el Loke, ya que Eugeo se encontraba comiendo un gran sándwich que el líder del zodiaco ordeno como servicio a la habitación.
-Lo hiciste muy bien durante el primer evento- Felicito el peli naranja.
-¿Estabas viendo el evento?- Pregunto curioso el rubio.
-Sí, ¿Acaso crees que me perdería como mi novio participa en un gran evento como ese?- Cuestiono con gracia el de orejas de gato.
-N-No, solo que me sorprendió- Respondió el oji azul volviendo a comer el sándwich.
En ese momento Loke se levantó y abrazo al Devil Slayer de la arena por detrás.
-Aunque acabaras en tercer lugar, eres y serás mi número 1- Soltó para luego besar la mejilla del contrario, provocando que Eugeo se sonrojara.
Curiosamente, en otra habitación, otras dos personas se encontraban haciendo lo mismo que los anteriores mostrados. Aunque… había un ligero detallito… y es que lo que hacían era demasiado intenso.
Pancho se encontraba montando sobre Leo, el peli oliva veía con gracia como el miembro de su novio se movía de arriba hacia abajo sin que este tuviera que masturbarse, ¿Qué si era realmente erótico ver como el peli arcoíris hacia todo el trabajo? Por supuesto que lo era, especialmente porque el más alto no tuvo que decir nada, fue el oji negro quien tomo la iniciativa.
-Parece que te gusta… estar arriba- Dijo algo jadeante el oji verde al sentir como su miembro iba cada vez más profundo.
-Al menos… esta es una buen recompensa…- Menciono el pervertido aumentando la velocidad. Debía admitir que le gustaba sentir como el falo de su novio tocaba esa zona que le volvía loco.
-Tienes razón, esta debería ser tu recompensa-
En eso Leo invirtió los roles y termino encima de Pancho, comenzando a embestirlo con bastante fuerza y provocando que gemidos salieran de la boca del contrario, más audibles que antes.
-Yo debo recompensarte- Dijo simple el mago de acero continuando en lo suyo.
El peli oliva y el peli arcoíris se besaron mientras continuaban en lo suyo, sintiendo el clímax llegar en cualquier momento.
Y como era de esperarse, Leo termino llenando a Pancho cual pavo de navidad, mientras la esencia del más bajo manchaba ambos pechos. Una vez que ambos se limpiaron, el oji verde cubrió a ambos con la manta, sorprendiéndose que el oji negro le abrazara de improviso.
-Nada mejor que tener sexo para cerrar el día- Dijo divertido el psíquico, acurrucándose en el pecho del contrario.
-Realmente eres único, al decir verdad nunca espere que ganaras el evento del primer día, pero de todo puede pasar- Menciono el mago de acero besando a su pareja. –Sera mejor descansar, mañana debes ir temprano o tus amigos te regañaran-
-De acuerdo, pero solo si luego tenemos una continuación-
Tras lo dicho, ambos se quedaron dormidos, uno abrazado del otro no importándoles que hicieran tanto ruido que traumaron a los que estaban en el cuarto vecino.
***
En el hotel donde se hospedaban los magos de Sabertooth, estos se encontraban celebrando que Rufus ganara algunos puntos para el gremio, pero cierta peli plata se encontraba algo deprimida de que no pudiera ganar el combate.
Kaien vio esto y se acercó a ella.
-Yukino-san, ¿Algo le molesta?- Pregunto el pelinegro.
-No es nada, Kaien-sama. Solo… me molesta que no pudiera ganar contra mi adversaria, me recordó cuando perdí aquella vez contra Kagura-sama- Explica algo triste la oji café.
-No se preocupe, Yukino-san. Ya vera que en los siguientes días nos ira mejor, quizás con suerte logremos ser el gremio número uno de Fiore- Animo el de coleta.
-Gracias Kaien-sama, tu realmente eres una gran persona. Ahora entiendo porque Sting-sama...- En eso la maga celestial se tapó la boca antes de que algo inadecuado saliera.
-¿Dijiste algo, Yukino-san?- Pregunto el oji verde.
-N-Nada jaja, deberíamos ir por algo de comer-
-Vale-
Ambos fueron a la mesa donde estaban ofreciendo algunos alimentos, sin darse cuenta que una pelinegra había escuchado la conversación y reía por dentro de que su compañera casi mete la pata con lo que les había contado el maestro con anterioridad.
-Felizmente no tuve que intervenir. Si Yukino arruina la sorpresa, Sting de seguro la mandara a cocinar para todo el gremio durante todo un año- Dijo simple mientras seguía bebiendo del ponche que tenía a mano.
La oji verde oscuro recordó aquellas palabritas que les dijo Sting unos días antes de que comenzaran los juegos mágicos.
*Flashback*
En el despacho del maestro de Sabertooth, este se encontraba conversando con sus tres más cercanos amigos sobre un tema delicado. Por supuesto que tras finalizar, los pelinegros ni se inmutaron pero la peli plata abrió la boca del asombro.
-S-Sting-sama, ¿Está seguro de lo que acaba de decir?- Pregunto Yukino.
-Estoy muy seguro de lo que dije, Yukino- Respondió el rubio desviando la mirada.
-¿Con que te gusta el dragoncito? Mira que te lo tenías bien guardado- Comento Minerva con tono sugerente.
-No es ninguna novedad, tú le gustas a Kaien desde hace mucho tiempo- Agrego Rogue en tono neutral. –Te has tomado tu tiempo para darte cuenta, menso- Continuo el oji rojo.
-Ya lo sé, ¿Quieren dejar de sermonearme?- Cuestiono de forma infantil el oji azul.
-Bueno Sting, ¿Qué tienes planeado para confesarte a Kaien?- Pregunto la pelinegra curiosa.
-Por el momento me iré a acercando a él poco a poco, no quisiera meter la pata confesándome de golpe- Explico el DS blanco.
-Eso es muy tierno de su parte, Sting-sama- Halago la maga celestial.
-Por fin haces algo sensato- Añadieron los pelinegros.
-¡¿Quieren dejar de verme como estúpido?!-
El maestro de Saber comenzó a discutir con el DS de las sombras y la maga del dios de la guerra mientras cierta peli plata solo veía la discusión y esperaba que no pasara nada grave.
*Fin Flashback*
-¿Cómo será la confesión de Sting? Debería preparar una lacrima para grabar ese momento-
Tras lo dicho, la mujer regreso a la celebración de su gremio.
***
Mientras tanto en el castillo Mercurius, la princesa Hisui se encontraba buscando algunas cosas en su habitación.
Fue ahí que Arcadios llego a la recamara, tras escuchar el ruido inusual que hacia la princesa.
-Princesa, ¿Qué ocurre?- Pregunto el caballero.
-No están, me hacen faltan 3 llaves- Explico la peli verde algo alterada.
-¿Qué le faltan 3 llaves? Pero princesa, usted es muy ordenada ¿Cómo ha podido perder tres de sus llaves con los que ha formado contrato?- Cuestiono el peli oscuro.
-No lo sé, ya intente comunicarme con los otros espíritus con los que he formado contrato, pero por alguna razón no logran localizarlos- Explico la joven preocupada.
-Tranquilícense princesa, será mejor que descanse y mañana las busque- Recomendó el caballero.
-Tienes razón Arcadios, mañana buscare más tranquila-
Tras lo dicho, el hombre pasó a retirarse dejando a la joven en sus aposentos.
***
Ya era más de media noche en la ciudad, y en las afueras de esta, Apothecary se encontraba mezclando lo que parecía una nueva pócima para su arsenal. A su lado estaba el libro que había robado anteriormente.
-Supongo que ya está lista, ya tengo los preparativos necesarios, solo me queda saber quiénes son esos usuarios- El encapuchado dejo la mezcla y paso a leer el libro con la magia referente. –Me cuesta creer que a nadie se le ocurriera algo como esto, pero supongo que nadie posee el poder o la valentía para hacerlo- Soltó como si nada guardando el libro.
En ese momento el chico sintió unos pasos acercarse donde él estaba, pero decidió ignorarlo y continuar trabajando en su pócima.
En ese momento aparecieron 5 personas, estas portaban armas mágicas y lucían bastante agresivos. En resumen, se trataban de mercenarios.
-Miren que encontramos aquí, un sujeto que cree que la noche es divertida- Dijo en tono de burla una pelirroja de ojos azules y ropajes atrevidos.
-Parece un muerto de hambre, no creo que tenga nada de valor- Opino un hombre de cabeza rapada y ojos café.
-Oye mendigo, entrega todo lo que tienes y no te haremos daño- Opino un pelinegro de ojos miel.
Por supuesto, Apothecary los ignoro y termino de mezclar su pócima, comenzando a verterla en un frasco de tamaño mediano.
-Maldito, ¿No estas ignorando o qué?- Dijo amenazante un peli morado sacando una espada.
-Parece que no le teme a la muerte- Dijo el último miembro, el cual era una chica de cabellos rubios alborotados y ojos ámbar.
El líder del grupo, el cual era el pelinegro, se acercó al encapuchado mientras sacaba dos espadas.
-Tienes agallas para ignorarnos, maldito. Pero de esta no te salvas- Soltó amenazante.
Rápidamente el pelinegro uso sus espadas para empalar al misterioso de capucha, pero este rompió una de las espadas con su mano solamente y acto seguido corto la mano contraria donde su oponente llevaba la otra espada con la misma.
El chico grito mientras se desangraba en el piso, mientras los otros cuatro veían con miedo la escena.
-Escúchenme con atención, señores mercenarios. Pueden llevarse a su líder idiota y vivir, o quedarse e intentar matarme, ¿Qué deciden?- Explico con tono frio Apothecary.
-¡Desgraciado!- La pelirroja salió al ataque seguida del resto de sus compañeros.
-Nunca eligen la opción pacifica…- Soltó suspirando el encapuchado.
Apothecary tomo al líder de los mercenarios y lo lanzo contra la pelirroja y el de cabeza rapada, tumbándolos con éxito. Acto seguido este se movió rápidamente detrás de la rubia, tomándola de la cabeza y estrellándola contra el piso con violencia, matándola de inmediato.
-¡Karina!- Grito el peli morado lanzándose al ataque con su espada.
Apothecary eludió los espadazos y pateo en el rostro a su oponente, este le quito la espada y la uso para atravesar la cabeza del peli purpura, eliminándolo.
-¡Ryuchi! ¡Pagaras por eso!- El de cabeza rapada se lanzó al ataque, pero de un momento a otro Apothecary desapareció.
-¡Edmund, detrás de ti!- Advirtió la pelirroja, pero fue tarde.
El oji café fue atravesado por la mano del chico de manto oscuro, viendo este con horror como su corazón estaba en la mano de su asesino.
Apothecary retiro su mano y el cadáver del hombre cayó al suelo, este vio el corazón del sujeto ese y lo aplasto sin ningún asco o piedad.
-Tu… ¡Jodido hijo de puta!- La pelirroja salió al ataque con una katana, pero de un momento a otro la katana de la chica ya no estaba en sus manos.
-¿Eh… pero qué?- Dijo confundida la chica cuando en eso giro la vista y vio que el encapuchado tenía su katana… cubierta de sangre.
-¡Rebecca!- Grito el pelinegro.
-Yuzo…-
De forma brusca la cabeza de la chica cayó al suelo mientras de la herida salía una gran cantidad de sangre. El cuerpo finalmente termino en el suelo, junto al resto de cadáveres.
-Solo queda uno…- Soltó el de manto negro mirando al último mercenario.
-T-Tú… ¿Q-Que demonios… eres?- Dijo asustado el oji miel.
-No tiene importancia decírselo a alguien que va a morir- Dijo secamente haciendo unos ademanes.
Dos círculos mágicos aparecieron, saliendo de estos aproximadamente 8 lobos corruptos por la magia del chico.
-Disfruten su festín- Fue la simple orden que dio Apothecary.
-¡NO!-
Los lobos comenzaron a devorar vivo al chico, empezando por cortarle la garganta para que este ya no gritara más. Al poco rato este dejo de moverse y los lobos continuaron disfrutando de los cadáveres de los mercenarios.
Apothecary vio las armas de los mercenarios y uso su humo verde para destruirlos por completo.
-Ni siquiera tuve que usar mis poderes contra ellos. Realmente patético que se crean matones y a la hora de la verdad no sean más que basura- Dijo este mientras veía el cielo. –Warden y los gemelos… espero que no estén haciendo desorden en mi laboratorio-
El encapuchado continúo viendo el cielo, esperando tener suerte con encontrar a los usuarios el día de mañana.
***
El segundo día para los juegos mágicos había comenzado, todos los gremio se veían animados, el público aún más por presenciar los combates y cierto espía ansioso por localizar a quienes poseían la magia que buscaba.
-¡Bienvenidos todos al segundo día de los grandes juegos mágicos! ¡En esta ocasión tendremos como invitado a la poderosa Titania de Fairy Tail! ¡La maga de la cabellera rojiza, Erza Scarlett!-
-Un gusto estar como invitada el día de hoy- Dijo educadamente la pelirroja.
Decir que era suerte que dos miembros de Fairy Tail fueran escogidos seguidamente como invitados del día… pues estaba en lo cierto. Por supuesto todas las hadas estaba felices por aquello, pero la más feliz de aquello era Lu.
Mato apareció en el centro del coliseo, y paso a anunciar el segundo evento de los juegos.
-Muy bien señoras y señores, la competencia del día de hoy será: “Maze”-
Tras lo dicho, el público grito eufórico mientras el hombre calabaza se preparaba para explicar el evento.
-Todos los competidores serán colocados en un laberinto del cual tendrán que salir mientras eluden una serie de trampas, entre ellas están bombas mágicas, trampillas de suelo, redes, entre otras. Si los competidores caen por algunas de las trampillas, estos caerán a un vacío que terminara tele transportándolos al coliseo y habrán quedado descalificados. El ganador será el que logre llegar al final del laberinto- Explico la mascota.
Una vez lo explicado, cada equipo paso a elegir a un representante para que participara. Una vez hecho, todos los elegidos fueron a donde estaba Mato.
Los que participarían en esta ocasión serian:
- Gin por Fairy Tail A.
- Emmrys por Fairy Tail B.
- Olga por Sabertooth.
- Sherria por Lamia Scale.
- Hibiki por Blue Pegasus.
- Risley por Mermaid Heels.
- Yaeger por Quatro Cerberus.
- Kazuma por Moon Song.
Los participantes en si ahora veían al nuevo chico elegido por el gremio misterioso. El cual era un chico de bastantes cicatrices en los brazos y piernas, de cabellos castaños oscuros desordenados y ojos negros, tez rosácea, vestido de un chaleco de ocre sin mangas, una playera de tirantes negra debajo de esta, unos shorts verde oscuro y unas botas negras.
-Muy bien competidores, ¿Alguna duda antes de empezar?- Pregunto Mato.
Todos negaron, estando listos para que la prueba comenzara.
-¡Animo Gin!- Animo el equipo de Fairy Tail A.
-¡Tú puedes, Emrrys!- Hizo lo mismo el equipo Fairy Tail B.
Los gremios también animaron a sus representantes, estando muchos de ellos animados.
-Espero que logren entretenerme-
-Muy bien…-
En eso todos los participantes fueron enviados al laberinto, estando cada uno de ellos en un punto específico.
-¡Que la prueba de inicio!-
El segundo día da inicio…
¿Podrán las hadas lucirse nuevamente en la competencia?