Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Bienvenidos a Fairy tail!!! por Luz neko fullbuster

[Reviews - 334]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Asis: Hola :D

Nuevamente aquí con un nuevo capitulo. Sinceramente me disculpo, tuvimos algunos problemas técnicos y pues... Digamos que fue un milagro que podamos actualizar. Les explicaré mas a fondo en las notas finales si les interesa. 

Disfruten el capitulo. 

La atmósfera en el lugar era realmente confusa para el pelinegro de coleta, ¿Qué quería decirle Sting? ¿Por qué estaba sudando a mares? ¿Por qué su cuerpo comenzaba a temblar? ¡¿Por qué tenia que estar experimentando todas esas jodidas sensaciones en estos momentos?! ¡Maldita sean sus emociones en estos momentos!

-Lo que quiero decirte Kaien… es que yo…- La mirada del rubio era tan atractiva e intrigante que si este seguía observándole de esa forma, el oji verde terminaría desmayándose por estar expuesto a altas temperaturas.

-¿Q-Que es?- El DS de hielo esperaba que este martirio acabara ya o su pobre corazón no resistiría más.

-Bueno, quizás te parezca extraño y me dejes de hablar por esto, pero lo que te quiero decir es que tu… Tu…-

Justo en el peor de los casos, a Sting se le fue la valentía al ver la expresión confundida que tenia Kaien con ese lindo color rojo adornando las mejillas y facciones del rostro del pelinegro. ¡¿Por qué tenia que lucir tan inocente y lindo es este preciso momento?!

Las palabras no salían del líder de Sabertooth, era como si gato se hubiera comido su lengua y no pudiera entonar ni pío.

Fue en ese momento que el DS de luz pensó: ¡Al infierno las palabras!

De forma sorpresiva y sin que Kaien supiera en que momento ocurrió, Sting le jalo y termino besándole, provocando que el pobre oji verde se sobre exaltara y tuviera su mente hecha un horrible caos.

Los cálidos labios del rubio eran una sensación verdaderamente extraña y placentera para el DS de hielo, esto le estaba nublando el juicio casi por completo. Lo mismo pensaba Sting con respecto a tener sus labios unidos con los del chico pelinegro, era un momento bastante placentero y algo enigmático, por no decir que nunca pensó estar besándose con un hombre, y mucho menos que se haya terminado enamorando de uno.

Aunque bueno, era mejor dejar todos estos pensamientos estúpidos e irrelevantes para otro momento. Ahora mismo, sin que ambos idiotas enamorados supieran, estaban experimentando de un momento placentero mutuo.

Tras un largo momento que para ambos ojalá no acabara nunca, la necesidad de oxigeno por parte del menor hizo que tuvieran que separarse. Claro que, ahora mismo Kaien tenia el rostro mismo cabello de Erza por lo reciente ocurrido.

-¿P-Por qué lo hiciste, Sting?- Preguntó aturdido el pelinegro alejándose un poquito por si al rubio se le ocurría volver a hacerlo. Aunque en el fondo deseaba que volvería a suceder.

-Porque bueno… tú me gustas- El oji azul se rascaba la nuca al momento de decirlo. Para sus adentros se estaba regañando por no elegir mejores palabras para confesarle sus sentimientos al oji verde.

-¡¿He?! ¡¿Y-Yo t-te g-g-gusto?!- Como si la cara del DS de hielo no pudiera estar más roja, ahora parecía un volcán apunto e entrar en erupción.

-B-Bueno… no fue un flechazo al instante que digamos…- Al decir esto, el DS de luz se dio cuenta que la expresión del menor se entristeció un poquito. -P-Pero, conforme fue pasando el tiempo y fui conociéndote un poquito más, terminé… Bueno, desarrollando sentimientos por ti-

Al oír esto, lo único que atino a hacer Kaien… fue desplomarse en la cama al borde del desmayo mientras en su mente gritaba “¡Le gusto! ¡Maldita sea, le gusto!”. Claro que, esa reacción no era una respuesta que Sting esperaba.

-¡¿K-Kaien estas bien?! ¡Despierta por favor!- El rubio comenzó a mover desesperadamente al pelinegro para que reaccionara, pero el menor estaba perdido en el mundo de los sueños.

Sin que ambos supieran, afuera de la habitación se encontraban las féminas de Saber y la exceed del DS de hielo. La minina de pelaje rosa y la peli plata festejaban silenciosas de que el maestro se declarara al menor mientras que cierta pelinegra guardaba todo lo dicho en una lacrima de grabación para futuras extorsiones a su tonto maestro.   

***

En otra parte, Laxus se encontraba caminando junto a Nanatsu, observando como los preparativos para la celebración en la ciudad iban bastante bien.

La razón por la que caminaban era porque necesitaban privacidad (obviamente con el Raijinshuu cerca no la iban a tener) y aparte de esto, el peli purpura estaba… apenado por preocupar de sobre manera a su pareja (Aunque esto obviamente no lo iba a admitir)

-Deberías estar descansando en lugar de sobre excederte caminando- Regaño irónicamente el rubio, cosa que no le gusto al chico.

-Si me vas a regañar todo el camino mejor regresa al hotel con el resto- Dijo molesto el oji azul por tener que soportar que lo cuidaran como un niño.

-Lo hago porque me preocupo por ti, mocoso terco- Lo dicho por el oji verde hizo sonrojar al DS de agua.

-N-No necesito de tus cuidados, p-puedo valerme por mi mis…-

Para mala suerte de Nanatsu, el DS del rayo hizo un rápido movimiento para que cayera de forma vergonzosa. Aunque claro, terminó atrapándolo justo a tiempo, provocando que varias miradas curiosas vieran la escena con sorpresa, además que algunas mujeres veían eso con corazones a sus alrededores.

-¿Decías?- La pregunta del mayor hizo que el chico se apartara rápidamente con la cara más roja de lo usual.

El usuario del rayo sólo atino a sonreír levemente y revolver los cabellos del usuario de agua como si fuera un niño pequeño siendo felicitado.

-Ten más cuidado- Laxus dejó de revolver las hebras púrpuras.

-Eres un imbécil- Fue lo simple que soltó Nana como todo buen tsundere mientras seguía su camino seguido del mayor.

Bueno, Laxus debía admitir que joderle un poquito era satisfactorio para su persona, ¿Por qué no hacerlo? Total, el peli purpura era más lindo cuando se enojaba o cuando le veía dormir acurrucado a su persona después de que tuvieran un poco de intimidad.

Por su parte Nanatsu… digamos que ahora tenia un debate mental de si pedirle perdón a Laxus por ser grosero o dejarlo sin nada de relaciones coitales hasta que cumpliera los 50 años.

***

Mientras tanto, abriéndose paso por un sendero de un bosque, Succubus y Satyr continuaban con su recorrido, cuando en eso la oji amarillo giró la vista rápidamente al sentir una presencia repentina.

-¿Ocurre algo, Succubus?- Preguntó el oji dorado al ver la reacción extraña de su amiga.

-Nada…- En eso vio que esa presencia resultaba ser un zorrito que salía de un arbusto, lo cual le dio gracia por tratarse de un simple animalito. -Continuemos, aun falta un trecho largo pero al menos sirve para estirar las piernas-

-Estoy de acuerdo en eso, realmente es lindo poder apreciar la naturaleza y su… tan peculiar gente que la habita- Esto último lo dijo dejando soltar un bostezo.

-Si quieres podemos usar el pergamino que nos lleva a la guarida- Sugirió el súcubo.

-No veo la necesidad de apresurarnos, de paso veamos si hay algo de comer por ahí. Mi estómago necesita algo para poder continuar- Sugirió el de cuernos frotando su estómago con la mano derecha.

-Ojalá haya algún puesto de comida cerca, aunque siendo sincera las probabilidades son tan pocas cómo hacer que Apothecary y Warchief se lleven bien-  

Lo que ambos chicos no sabían, era que una silueta los estaba observando desde la rama de un árbol. Parecía algo… curioso de ambos chicos de extravagante apariencia.

-Estuvo cerca- Dijo aquella silueta en el árbol. -Son dos, pero no son parte de los que atacaron esa ciudad ¿Cómo se llamaba…? …. No importa, tuve suerte que no me detectarán. No se quiénes sean o que tienen en mente, pero sus auras son monstruosamente oscuras-

Tras lo dicho, la silueta paso a retirarse del lugar tranquilamente. Algo curioso era uno de sus ojos… la esclerótica era negra en lugar de blanca, además de las iris rojas intensas cual sangre.

***

En otro punto, en lo que parecía una especie de biblioteca destruida cubierta de escombros de la propia edificación, maleza, musgo y otras cosas un tanto difíciles de explicar, Far seer y Ornadus buscaban un libro en específico qué, según la misma vidente, se encontraba en ese lugar.

-Mi señora ¿Esta segura que este libro se encuentra en este lugar?- Pregunto el ser cuadrúpedo retirando la maleza del camino con solo caminar cerca de esta.

-Por supuesto que lo estoy, este lugar tiene muchos tomos mágicos con hechizos interesantes. Aunque, solo estoy buscando dos- Explico la mujer cubierta por un manto con capucha que impedía verle las facciones del rostro y cuerpo.

Caminaron un poco más hasta llegar a un salón donde se podía apreciar un librero en perfecto estado protegido por una especie de sello con forma de alas de ángel.

-Vaya, ¿Con qué los cronistas, sabios y videntes de este lugar pusieron sus últimas energías en un lindo sellito bendecido por la energía de seres divinos?- Soltó la mujer sorprendida.

-¿Seres divinos?- Pregunto la criatura con notorio interés.

-Algo como ángeles, espíritus, hadas y todos esos seres cursis que ponen en los cuentos para niños- Explicó la mujer acercándose al sello. -Esos seres débiles y asquerosos me enferman-

La vidente puso su mano sobre el sello y lo apretó fuertemente, destruyéndolo sin ningún problema para la sorpresa de Ornadus.

-¿Usted sabia acerca del sello, mi señora?- Cuestiono el de melena.

-Así es, no por nada mi poder consiste en ver el futuro. Aunque algunas veces las visiones no son al instante, son precisas y concretas- La mujer se acerca al librero y empieza a buscar los libros que buscaba. -Anteriormente habían dos hermanas que llamaban “Las hijas de la noche”, ellas estaban destinadas a ser las mejores videntes de este lugar, si mal recuerdo tenían el cabello blanco y negro-

-Debían ser muy fuertes si las menciona en este momento, mi señora-

-Si, pero su vida no les duro mucho. Murieron en este lugar durante la guerra, la hermana menor de cabellos blancos fue la primera en morir tras ser empalada viva, la mayor de cabellos negros murió después decapitada… Una pena-

La mayor encontró los libros que buscaba, siendo uno de estos de color negro con un símbolo que recordaba a la cara de una poderosa criatura mitológica.

-Hecho, será mejor irnos de aquí. Este lugar no es de mi agrado- Dijo la vidente haciendo un ademán.

-¿Y porque no tomar los otros libros que están aquí, mi señora? Seguro podrían sernos útiles- Sugiere la criatura.

-No es necesario, Ornadus. Aunque esos libros tienen hechizos muy fuertes, son realmente estúpidos y no van con nuestro objetivo- Explico ella finalizando el ademán.

Un portal blanco se abrió frente a la mujer y el centauro, ingresando ambos tranquilamente y desapareciendo por este. Acto seguido, el portal se cerró casi al instante.

***

Las horas fueron pasando en todo Fiore, lo cual era aprovechado para que la gente de Crocus pudiera terminar de preparar todo para que la gran celebración pudiera llevarse de la mejor forma para los participantes y salvadores de la ciudad.

Aunque, dejando eso de lado, nuestros protagonistas estaban listos para ir a la celebración, pero… había una pequeña excepción que no lucía muy animado por ir.

Ahora mismo tanto Ren como Emrrys se preguntaban que demonios le pasaba a Yoshito desde que despertó de su largo sueño. Este parecía como deprimido a pesar de que se alegró de que a los que consideraba como hermanos se preocuparan y estuvieran cuidándole toda la noche. Por supuesto, Natsu también estuvo presente durante toda la velada en cuidado de los DS (Al igual que Mirajane, Laxus y el resto del gremio), pero él había visto la actitud sospechosa del menor y se las dijo tanto al azabache como al rubio.

Ahora ambos tenían en mente entretener al menor del trio con las actividades del festival, no iban a permitir que el castaño estuviera con motivación baja. Lamentablemente, parecía que el castaño no tenía intención alguna de ir… así que no les quedo de otra que llevarlo a la fuerza mediante extorsión y chantaje.

***

El festival comenzó a penas el sol se ocultó, siendo el rey quién dio la inauguración de la celebración en honor al gremio ganador y salvador de la ciudad real, además de los otros gremios participantes que colaboraron con la defensa de Crocus.

Varios puestos de comida, bebidas, juegos y abarrotes eran visitados por la gente que caminaba en los alrededores. Por supuesto, nuestros héroes no eran ajenos a ello.

Gin, Hikari, Eugeo y Andrés se encontraban comiendo diferente variedad de comida chatarra que vendían en los diferentes puestos. Aunque siendo sinceros, el que menos comía era el pelinegro, y este último se estaba horrorizando un poco por ver la glotonería de sus compañeros y novia.

Jack, Alex, Luka y Zele jugaban en un puesto para intentar reclamar peluches u otras cosas. Lamentablemente, la suerte no estaba de parte de ninguno de los chicos del grupo ya que la peli rosa había ganado tres peluches seguidos mientras ellos… bueno, se podría decir que eran la burla del dueño del puesto.

Nanatsu se encontraba viendo unos peces que se podían atrapar para tenerlos de mascota. Claro, aunque pareciera que no estaba interesado en esos pequeños seres acuáticos, quería llevarse al menos a uno para cuidarlo. Lo gracioso fue que Laxus, quién estaba acompañándolo todo el rato, le consiguió tres peces al peli púrpura, cosa que hizo que el oji azul contra todo pronóstico terminara agradeciéndole al mayor con una bonita sonrisa, lo cual hizo que el rubio se pusiera un poco avergonzado. Después de todo, ese tsundere podía ser lo más lindo del mundo a un maldito dolor de culo.

Graciosamente, el equipo Filia se encontraban viendo las baratijas que se podían apreciar en los puestos. Mirajane y Erza veían algunos pendientes que a sus respectivas novias les podría quedar de maravilla, aunque Filia y Lu no lo veían necesario ya que la primera no era muy fanática de los accesorios y la segunda estaba un poco avergonzada por la atención que le brindaba su pelirroja pidiendo que se acerque para que pudiera ver si alguno era el elegido. Pancho y Leo por su parte… se podría decir que por primera vez estaban actuando como una pareja normal ya que habían algunos brazaletes muy llamativos que al peli arco iris le gustaron y estaban echándoles un ojo para poder comprarlas.

Finalmente, Ren y Emrrys estaban participando en un juego de lanzar anillos para obtener premios. Por supuesto, y aprovechando que el dueño no se daba cuenta gracias a Romeo (Él cual estuvo con ellos todo el rato y se encargaba de distraer al dueño), el rubio y el azabache usaban sus respectivas habilidades mágicas para que las anillas cayeran en el lugar indicado y ganaran.

A las finales, el heterocromatico  gano un oso peluche para su novio mientras el oji esmeralda obtuvo un sombrero playero que de seguro lo haría parecer una chica si daba la espalda.

En eso, cierto peli rosa se les acercó tranquilamente, pero parecía extrañado al no ver al último integrante del Trio elemental por ninguna parte.

-Oigan, ¿Dónde esta Yoshi? ¿Por qué no esta con ustedes?- Pregunto serio al no ver al oji jade con los otros dos.

Fue en ese momento que tanto GS del agua como mago de plantas se dieron cuenta que le habían perdido de vista. Incluso Romeo estaba asombrado, ya que podía jurar que el DS de fuego estaba aquí hace unos minutos.

-¿En qué momento se fue?- Preguntó un asombrado el oji esmeralda.

-Ni idea, pero sería mejor buscarlo- Propuso el heterocromatico.

-Si quieren yo lo puedo ir a buscar, ustedes quédense aquí disfrutando del festival-

Y tan rápido como una bala, el DS de fuego se fue a buscar a su aprendiz, dejando a los tres presentes sin poder oponerse o decir algo al respecto.

-¿Ustedes creen que lo encuentre?- Pregunto el mago de fuego de colores a los otros dos.

-Sí, seguro lo hará- Dijeron tanto azabache como rubio al mismo tiempo.

Así, el grupito siguió recorriendo los puestos para ganar más premios. No tenían que preocuparse en lo absoluto, sabían que Natsu podría encontrar a Yoshito incluso aunque a este se le hubiera ocurrido irse al otro lado de la ciudad.

***

Por otra parte, los miembros de Sabertooth estaban viendo los diferentes puestos con bastante curiosidad. Aunque claro, había dos personitas que no estaban absolutamente interesadas en aquello.

Tanto Sting como Kaien se habían escabullido para ir por su cuenta sin tener a nadie molestándolos por su repentina cercanía y demás, era la perfecta oportunidad para empezar su nueva etapa como una pareja, y casualmente era un lindo momento el que estaban disfrutando viendo variados accesorios o premios que se podían conseguir.

Sting decidió participar en un juego de lanzamiento para obtener algo lindo para su nuevo novio,  decidiéndose por un gracioso peluche de gatito que tenía el pelaje negro y el centro de la panza de color blanco.

Ya con su objetivo decidido, el rubio no dudo ni un segundo en dar su cien por ciento para ganar el peluche para su pelinegro. Tras un par de minutos, el premio ya se encontraba siendo recibido por el maestro de Sabertooth.

-Para ti- Dijo orgulloso el oji azul entregándole el peluche gatuno al oji verde.

-¡Gracias!- Exclama feliz el de coleta recibiendo el regalo del mayor con una linda sonrisa y expresión que para el DS de la luz era casi pecaminosa.

Ambos continuaron con su andar tranquilamente, pero fue ahí que Sting le dijo algo a Kaien… algo que el DS de hielo nunca pensó que el mayor le iba a proponer tan rápido.

-¿Qué tal si luego vamos a un lugar más privado?- Propuso un tanto avergonzado por ser tan repentino en querer… bueno ya saben.

-B-Bueno, está bien…- Respondió un poco rojo el chico de coleta.

Viéndolo desde una perspectiva normal, esto que iban a hacer quizás era demasiado apresurado, pero para los DS era un asunto de suma importancia. Con esto se daba la prueba de que ambos “dragones” estaban dispuestos a unirse en una vida de unión y amor reciproco; todos los dragones tenían que cumplir esto si deseaban dejar en claro que amaban a su pareja y querían pasar el resto de sus vidas juntos. Desgraciadamente, esto también se aplicaba a los cazadores de dragones.

***

Natsu se encontraba siguiendo el aroma de su rebelde discípulo, el cual por alguna razón se había escapado y el rastro de su aroma lo había traído a las afueras de la ciudad. Siguió el rastro sintiendo cada vez más fuerte la fragancia; le iba a dar al menor un buen sermón por escabullirse y estar actuando tan raro durante todo el día.

Finalmente lo encontró, ahí estaba Yoshito sentado en una roca mientras parecía ver nada más que la nada en el cielo cubierto por las estrellas. Se acercó cauteloso para darle un merecido susto a ese enano, pero cuando estaba a unos cuantos pasos… sintió un aroma como a sal provenir de donde estaba sentado el oji jade.

Supo inmediatamente que era, así que se dejó de rodeos con un ligero enojo dibujado en su rostro.

-Yoshito- Dijo sin más el peli rosa, provocando que el menor girara rápidamente la vista hacia donde él estaba.

-¡¿N-Natsu-san?! ¿Q-Que hace aquí?- Rápidamente el castaño trato de parecer normal, pero Natsu supo de inmediato que había ocurrido.

-Te estás perdiendo de la celebración, y que recuerde estabas con tu equipo cuando todos salimos del hotel para celebrar-

El peli rosa se acercó para verle de cerca, afirmando sus sospechas.

-¿Se puede saber qué haces aquí y por qué estabas llorando?- Pregunta sin más con una seriedad bastante extraña en él.

Bueno, decir que estaba molesto era una verdad a medias, también sentía una extraña incomodidad cuando veía al chico en ese estado, como si a él también le doliera.

-Y-Yo no estaba llorando- Dice este girando la vista. Con esto las sospechas de Natsu eran acertadas.

-Entonces…- Rápidamente el oji verde tomo el hombro del contrario y obligo a que lo vea. –Dímelo de frente y no evadas la mirada- Dicto serio hacia el menor.

Yoshito ya sabía que esto iba a pasar,  dudaba un poco si contarle la entera verdad de lo que le incomodaba al peli rosa, pero obviamente su maestro le iba a obligar a contarle todo si no lo hacía ahora mismo.

-¿Acaso soy útil para alguien sin ser un estorbo?- Soltó el oji jade.

-¿He?- Natsu no entendió nada, hasta que el chico decidió continuar.

-Siempre les causo problemas a los demás… Ni siquiera soy fuerte como usted, Erza-san, Laxus-san o el maestro… Solo traigo problemas a quienes me rodean…-

De los orbes jade comenzaron a caer lágrimas mientras los puños del menor estaban fuertemente apretados.

-Yoshi…- El peli rosa intento calmarlo, pero le descolocó lo que el castaño dijo a continuación.

-Si hubiera sido mas fuerte, no hubiera sido capturado por esas personas y usado contra usted y Nii-san… si hubiera sido mas fuerte, Nii-chan estaría… mi familia estaría… -Las lágrimas que derramaba el DS de fuego eran más notorias e intensas. -¡Si tan solo no existiera, no les causaría problemas a nadie!-

*Paff*

El sonido de la cachetada y la mejilla ahora roja del menor fueron casi al instante, Natsu se había enojado muchísimo con eso último dicho, su mirada reflejaba notoria molestia.

-Estas siendo muy cruel con lo que estas diciendo-

Rápidamente el oji verde término tumbando al menor en el piso, provocando que Yoshito se quedara paralizado por las acciones de su mentor.

-¿Qué no quieres vivir dices…?- El peli rosa asestó un puñetazo al lado del castaño, provocando que este se asustara. -¿Tienes idea de cuántos sufrirían si mueres? ¿Cómo se podrían tus padres, hermano, Ren, Emrrys y el resto por lo que acabas de decir? ¿Tienes alguna idea de como me siento yo por lo que acabas de decir?... ¡Responde!-

Ante aquello, el castaño no aguanto más y se término quebrando por completo en el suelo. Era cierto, estaba siendo egoísta por pensar de esa forma sin pensar en las consecuencias que podría haber en sus palabras.

-Lo siento *Sniff* Lo siento…- El DS de fuego tenia su rostro cubierto por sus brazos. -Sólo quiero dejar de estorbar a los demás, no hay noche en la que extrañe a Nii-chan y mis papás… ¡No quería perderlos! ¡No quería quedarme solo!-

Los lamentos de Yoshi eran notorios, perderlo todo de golpe y delante de tus propios ojos debía ser un trauma permanente que el castaño poseía. De seguro se maldecía por ser débil en ese momento, por depender del resto para seguir…

-Aunque ahora soy algo fuerte ¿De qué sirve eso? *Sniff* Sigo incordiando al resto y preocupando a los que me rodean. Solo causo más problemas en lugar de ser de ayuda en algo mínimo *Sniff* Incluso por mi culpa, mis amigos estuvieron en peligro y casi termino hiriéndolo a usted *Sniff*, ¡¡Quiero dejar de perder a las personas que aprecio!!-

Natsu al fin comprendió lo que ocurría, sintió una punzada en su pecho como si los lamentos del castaño fueran agujas afiladas que se incrustaban poco a poco en la zona. Esta sensación era jodidamente molesta, sentía que estaba fallando como amigo y mentor al oji jade, a pesar de la promesa que se hizo cuando lo encontró.

Así es, el peli rosa encontró a Yoshi en una misión bastante importante que realizo con su equipo, el castaño era uno de los muchos niños esclavos que un gremio oscuro obligaba a trabajar de mineros para recolección de minerales y demás. Recordó que la mirada que tenía Yoshito en ese entonces era vacía y sin vida, pero cuando el mago de FT le salvó, aquella mirada recuperó el brillo esperanzador, el brillo de seguir viviendo.

Natsu estaba equivocado, pensaba que el oji jade ya no era ese niño que encontró como esclavo… pero estaba aun hueco por dentro, con una gran grieta en su corazón que quizás no podría ser cerrada tan fácilmente. No era de menos, aún recordaba como de la nada Yoshito se apareció un día en el gremio, aun llevaba puestas los trapos harapientos que eran sus ropajes y su cabello castaño estaba bastante crecido y descuidado, llegando incluso a los hombros.

Aun recordaba cómo el chico le buscaba con la mirada, temiéndole a todo al mundo (Inclusive a Mirajane) debido a los traumas que acarreaba por ser esclavo durante años. Le asombró cuando este se hizo bolita y comenzó a rogar para que no lo golpearan, ya que sin querer el maestro intento ser amable con él pero el castaño lo tomo a mal.

Natsu tuvo que intervenir rápidamente, provocando que el chico reaccionara rápidamente y buscara protección en su persona, ya que al parecer como fue Natsu quien le rescato, Yoshito solo confiaba en él en ese momento.

El peli rosa recordó cómo le costó que el menor se acostumbrara un poco a los demás, afortunadamente el oji jade confiaba en los que eran cercanos a su edad. Fue así que poco a poco aquel chico termino abriéndose al resto, encontrando un modelo a seguir, una figura fraternal y muchos amigos que le ayudaron a salir de ese abismo.

Por esas razones, Natsu no quería que el Actual Yoshito siguiera sufriendo. Al menos… él trataría de ponerle fin a las pesadillas y lamentos que acarreaba su discípulo, de una forma u otra.

-Lo siento…- El peli rosa comenzó a decir. -Es solo que no me gusta verte así, triste y culpándote por algo de lo que no tienes la culpa- Explico serenamente levantándose.

El oji jade observó como el mayor le extendió la mano, la cual aceptó mientras se limpiaba las lágrimas que aún recorrían sus mejillas. De la nada, Natsu le jaló y lo apegó a su cuerpo, abrazándole de forma protectora como si su vida dependiera de ello.

-No quiero que vuelvas a llorar nunca más, ni que te lamentes por lo que ocurrió en el pasado. A partir de ahora quiero que aspires a un futuro feliz… uno donde vivas pacíficamente, uno donde aspires a ser el mejor, uno donde confíes en ti y tus compañeros… y sobre todo, uno conmigo-

Casi de la nada y sin que el menor supiera en que momento su rostro estuvo frente al de Natsu, el peli rosa conectó sus labios con los del castaño, sorprendiendo notoriamente a Yoshi por aquello y provocando que las mejillas del chico oji jade se volvieran carmín al mismo tiempo que el corazón de este último se acelerara por la situación tan repentina.

Las palabras del mayor rebotaban en la mente del chico, aquellas lindas cosas que le había dicho eran una verdad que solo todo el tiempo que el menor paso en Fairy Tail podía confirmar. Por alguna extraña razón sentía las ganas de llorar nuevamente, pero esta vez no por tristeza, sino porque la persona que amaba, de la cual había quedado prendido desde que fue rescatado de las garras del infierno, tenía sentimientos recíprocos hacia su persona.

Así, ambos estuvieron así un rato, un momento en el que al fin los sentimientos de ambos dragones de fuego eran claros y precisos, donde solo el cielo nocturno era testigo del suceso.

 

La felicidad y la tristeza son caras de la misma moneda…

Tan fáciles de cambiar, pero muy difíciles de preservar…

Notas finales:

Asis: Bien, esto en realidad es una mala noticia:

Mi ordenador sufrio un apagón y crasheo repentino hace dos semanas y obviamente entre en crisis porque ahí estaban guardados todos los capitulos y cosas que Luz y mi persona manejamos (Ideas para el fic, etc.). Mientras no tenia ordenador, tuve que escribir por el celular ya que obviamente no iba a dejar que este problema los dejara a ustedes sin capitulo.

La cosa es que justo ayer en la noche lograron repararlo, pero el costo fue que TODOS los archivos se terminaron perdiendo. No quedo absolutamente nada de lo que Luz y yo teniamos, eso incluye avances, caps anteriores, etc. Bueno, felizmente las fichas ella las tenía, así que eso fue lo minimo que pudimos salvar. Aún así, fue algo que me desmotivo bastante, pero ni modo, la vida sigue.

Bueno menos quejarse y más acción, he aquí una nueva pista de la siguiente saga:

"Cuando la niebla misma quite algo valioso, un rayo cual oro se abre paso" 

En fin, nos vemos :D


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).