Cap. 13
La Petición
-¿Qué? –Preguntó consternado sasuke soltando la mano del rubio -¿de que hablas? –volvió a preguntar algo confundido sintiendo como una gran furia se apoderaba de él.
-lo que escuchaste, sasuke, por favor terminemos.
-pero ¿por qué? ¿Hice algo que te molestara?
Interrogó mientras se arrodillaba frente a naruto cambiando su expresión, se veía tan dolido que casi podías tocar su “dolor”, algo perfecto para ganarse el premio al mejor actor.
-no es así –puso una mano en su pecho, el rostro de sasuke le causaba dolor en ese punto –yo conocí a alguien mas…
Al escuchar esas palabras sasuke sintió como su furia asesina crecía, tenia tantas ganas de masacrar a quien sea que le haya quitado al rubio de su lado, pero mas aun, tenia ganas de hacerle cosas inimaginables a quien estaba frente suyo, pero trato de conservar la calma.
-¿Quién es?
Preguntó con algo de dolor fingido en su voz, lo cual hizo que naruto sintiera de nuevo la punzada en su pecho, no estaba seguro de decirle, algo le decía que no lo hiciera, pero sasuke era bueno con él, después de todos esos años al menos le debía eso.
-Es un compañero de la universidad… -calló por un momento –veras, yo tengo un hijo con él…
Al oír eso el azabache no lo soporto mas, levantando su mano en contra de naruto dándole un puñetazo con toda su fuerza, haciendo que el rubio cayera de la cama.
-¡ERES UNA PERRA!
Gritó sasuke colérico, pero al ver lo que hizo reaccionó, no, eso no debía ser así, de inmediato fue a socorrer al rubio.
-lo siento, lo siento, no sé que me pasó, por favor perdóname.
Rogaba sasuke mientras levantaba al rubio, que aun después de eso le sonrió.
-no te preocupes, fue mi culpa, sé que lo que dije es algo muy cruel hacia ti, traicione tu confianza, hace cuatro años te engañe con otra persona y en consecuencia tengo un hijo, lamento haberte engañado, pero no lamento a mi hijo.
Dijo de forma firme limpiándose la sangre de los labios, viendo que sasuke de nuevo se arrodillaba frente a él, para voltearlo a mirar, sus ojos estaban llenos de lágrimas, lo cual hizo que naruto se sintiera aun peor.
-por favor no, Naruto, por favor no me dejes.
Suplicó sasuke con una expresión lastimera.
-No… sasuke, por favor entiende, debo estar con mi hijo.
-Si es por eso, te dejaré estar con el, pero no te dejare irte de mi lado.
-Pero, sasuke… yo quiero estar con su madre, no quiero que mi hijo este sin mi.
Ante esto sasuke guardo silencio preocupando al rubio quien puso una mano en su hombro.
-Preséntamelos.
Ordeno sasuke tomando la mano de su rubio.
-pero…
-así podre saber quien es quien te aparta de mi lado, así podre saber si te dejare en buenas manos.
Al escucharlo naruto dudo un poco, pero de nuevo cedió con una sonrisa.
-pero antes te pediré otra cosa, una despedida, al menos en este fin de semana sé mio, solo mio, solo dame estos tres días, es lo único que pido y te dejaré ir.
-lo haré, no quiero que la expresión que tienes ahora sea la ultima que recuerde.
Susurro el rubio mientras una lagrima resbalaba por su mejilla y de la cual naruto no sabia su causa, pero si sabia que era lo que causaba la opresión en el pecho; tratando de olvidarlo besó los labios del azabache, sintiendo como este correspondía comenzando a recostarlo en la cama, lo harían de nuevo, esta vez naruto trataría de disfrutarlo, pero no podía, cada toque que sasuke le daba solo hacia que escalofríos recorrieran su cuerpo, que miedo y asco se apoderaran de su ser, pero ignoraría lo que sentía, esto seria la ultima vez que sentiría los toques de sasuke, o al menos eso es lo que el creía, estaba saldando parte de una nueva deuda, se entregaría completamente por esos tres días, para que sasuke se sanara de él, luego le presentaría su nueva familia, para que el viera que estaba en buenas manos y luego todo estaría bien; sasuke podía ser muy infantil, pensó naruto escapándosele una pequeña sonrisa, mientras seguía sintiendo las caricias del mayor sobre su cuerpo, a las cuales el comenzó a corresponder sintiéndose sucio, como si su orgullo se fuera con cada toque.
Sasuke sintiendo que naruto correspondía, continuo con sus caricias, sus lagrimas habían funcionado muy bien, pero no podía negar la opresión que en estos momentos sentía en su pecho y cabeza, tanta que comenzó a nublarle la vista, su instinto sádico iba a salirse de control, no debía permitirlo, debía ser suave, si volvía a lo que era antes tal vez naruto no le presentaría a la perra esa que le dio un bastardo a su propiedad, por que para él alguien que no fuera si mismo y naruto era basura y eso es en lo que se convertiría esa perra y el mocoso luego de que terminara con ellos, ¡EN BASURA! ya estaban comenzando a girar los engranajes del plan maestro en su cabeza mientras seguía con sus caricias; en estos momentos tenia al rubio de espaldas frente suyo mientras terminaba de quitar su camisa viendo la marca en su omoplato derecho, la cual lamio mientras sus manos comenzaban a bajarle el pantalón con una lentitud extrema angustiando aun más a este, que hacia lo posible por no vomitar.
Poco tiempo después naruto se encontraba totalmente desnudo sobre sasuke, éste lo había acomodado de una forma en que pudiera ver como su miembro entrara dentro del rubio y se notara cada uno de sus movimientos.
-pero que linda vista.
Se burlo sasuke a espaldas del rubio mientras le tomaba los muslos y hacia que su miembro llegara mas profundo haciendo que el rubio sacara un pequeño grito, pero nada mayor; en ese momento sasuke estaba aburrido de muerte, de solo pensar que los siguientes dos días serian así le entraba sueño, así que se le ocurrió una idea.
-oye, Naru ¿no crees que esto es aburrido?
Pregunto como desinteresado sin parar las lentas embestidas.
-… ¿q-qué?
Apenas podía hablar el rubio, la sensación de tener algo extremadamente caliente es su interior no le dejaba conectar bien sus neuronas, de lo cual el azabache se dio cuenta sacando una pequeña sonrisa para tirar abajo a naruto y continuar penetrándolo, esta vez mas fuerte.
-lo haré como te gusta.
Susurró excitado comenzando a embestir más y más fuerte, haciendo que el rubio se tuviera que sostener de lo que fuera con todas sus fuerzas.
ah!No…para…sa…sasuke…para…e…es…d…dema…siado…ra…rápido…ah!
Gemía el rubio sintiendo como su interior era invadido de forma ruda, llegando rápidamente a su punto, a su glándula prostática sintiendo como de inmediato su miembro comenzaba a responder, se estaba dejando llevar por sasuke, su mente se nublaba por completo, ahora solo quería sentir el placer.
Sasuke continúo con sus duras embestidas sintiendo como el rubio comenzaba a gemir, haciendo a su pene agrandarse mas mientras la fuerza con lo que lo introducía en el blondo se hacia mayor, parecía animal en celo se veía la rudeza con la que sasuke penetraba a naruto, era tanta que la cama comenzó a moverse con ellos y el rubio a gemir, no entendía lo que pasaba, solo que su cuerpo quería dolor, lo anhelaba tanto, quería sentir aun mas que las dolorosas embestidas, quería sentir su cuerpo arder.
-ah! ¡MÁS DURO!
Grito naruto sacando el miembro de sasuke por un momento para luego volver a meterlo solo cambiando su posición, ahora estaban frente a frente y el rubio pedía con todo su cuerpo las violentas movidas del azabache, el cual gustoso acepto tal invitación moviéndose aun mas fuerte que antes, sintiendo como su rubio le rodeaba la cadera con las piernas sonrosado.
-ah!...ah!... haz que… duela… ¡PARTEME EN DOS!
Ordeno suplicante el rubio sin saber que lo controlaba para decir esas sucias palabras, sintiendo como de inmediato era obedecido, el azabache tomo su miembro masturbándolo mientras se acercaba a su cuello enterrando sus colmillos, para la suerte del rubio, las marcas que Gaara le había dejado desaparecieron a tiempo, tan solo ese toque de dolor hizo que el rubio se corriera, recuperándose poco tiempo después al sentir como sasuke enterraba mas sus colmillos, no sabia que decir, la excitación era mucha y mas cuando después de sentir un cálido liquido caer por su hombro sasuke bajo sin dejar de embestir o masturbarle para comenzar a morderle los pezones, en donde él se había dado cuenta era bastante sensible; sasuke casi le arrancaba los pezones a mordiscos, podía ver la sangre bajar de su pecho a su abdomen, era esplendido el sentimiento que daba, quería más dolor, mucho mas y como si fuese un adivino sasuke se lo dio, lo volteo y continuo embistiendo, entre mas duro los sonido de placer del rubio eran mayores, y eso excitaba mas al azabache que embestía mas fuerte, era un circulo vicioso en donde se daban placer.
Sasuke estaba concentrado, su fuerza incrementaba mientras sus colmillos volvían a marcar la piel del rubio, afirmando de nuevo que era suyo sobre la marca hecha a hierro vivo cuatro años atrás, escuchando como el rubio gemía de placer, parecía que los traumas sufridos en ese entonces, aunque naruto no los recordara su cuerpo si lo hacia, optando por disfrutar el dolor en vez de sufrirlo, lo cual le facilitaba mucho mas las cosas a sasuke, por que no creía que esa mujer le diera el placer que el cuerpo del rubio imploraba; después de que la espalda del menor quedara completamente marcada por los dientes del azabache este se corrió en su interior a la vez que naruto lo hacia en las sabanas, cayendo sobre estas seguido de sasuke quien aun en su interior le abrazo, naruto estaba agotado y solo quería dormir, aunque se viera que otro día había llegado.
Después de que despertaran o al menos de que naruto despertara ya estaba anocheciendo y sasuke no se encontraba por ninguna parte, lo cual lo preocupo haciendo que se levantara y cayera, por un momento sus caderas se desbalancearon recordando lo que ayer hasta hace unas horas había estado haciendo, provocándole nauseas y haciéndole ir rápidamente al baño a vomitar; después de que lo hizo sintió como alguien le ponía la mano en el hombro.
-¿estas bien?
Pregunto un sasuke desnudo y recién salido de la ducha, además de con un muy buen humor; naruto desvió la mirada un momento.
-si, solo me sentí un poco mal.
Respondió asqueado y apenado a la vez, lo cual le saco una sonrisita al azabache.
-ven bañémonos.
Invito sasuke con una sonrisa mientras le levantaba del suelo y se encerraban en la ducha, comenzando con unos cuantos besos.
-no… acabo de vomitar.
Objetó naruto tratando de evitarlo al sentir como le comenzaba a recorrer el cuerpo, pero se perdió toda razón al sentir como la lengua del azabache abría la herida de su cuello perdiéndose de nuevo en el placer.
Así, entre repetidas escenas de sexo violento y sangriento pasó el fin de semana, ya era lunes por la mañana cuando el rubio despertó en los brazos del azabache, el cual se notaba no había dormido, lo había estado observando toda la noche, lo cual dio algo de miedo, olvidándolo rápidamente al ver como sasuke se levantaba.
-también deberías levantarte, si no, llegaras tarde a la universidad.
Al oír eso, el rubio obedeció sintiendo su cuerpo demasiado adolorido, pero soportable, fue un momento al baño a quitarse los residuos de semen en su interior, lavarse la cara, los dientes y luego vestirse, para luego salir junto con sasuke después de tomar un desayuno ligero; pero le preocupaba algo, sasuke estaba demasiado callado, se veía triste, sabia el por que, así que no tenia el valor para hablarle.
-hoy me los presentaras ¿no?
Sasuke rompió el hielo con esa pregunta recibiendo la afirmación del rubio.
-según sé, Gaara y Nagato están hoy juntos ya que la directora tenia que salir por unos asuntos y no podía cuidarle.
Decía nervioso por los movientes del auto el rubio.
-¿Quién es la madre?
-Sabaku No Gaara.
-ese es un nombre de hombre ¿no?
Pregunto sorprendido.
-por que lo es –se puso nervioso – él es uno de los resultados de un accidente que hubo tiempo atrás, según sé, son llamados donceles.
-ya veo –Fue la corta respuesta del azabache –un momento ¿Sabaku No? Así que es el hijo de la directora, no sabia que el fuera uno de ellos, ¡ah! –Suspiró –no importa –cortó la conversación, al momento que llegaron a la construcción; naruto estaba listo para salir cuando una mano lo detuvo.
-un último beso.
Ordeno sasuke a lo cual fue obedecido, el beso duro uno cuantos segundos, sasuke lo iba ha convertir en mas, pero el tiempo se lo impidió, ya era hora de entrada para estudiantes y profesores; sasuke terminó de parquear el auto para salir junto al rubio, el cual lo guio por los pasillos a su habitación, en donde después de abrir la puerta se veía a un chico y a un niño, ambos recibiendo a naruto con una sonrisa y un abrazo, para luego percatarse del invitado.
-él es sasuke –hablo naruto –es mi tutor –aclaro con una sonrisa, para su futuro compañero y su hijo.
-ya sabia quien era –hablo Gaara –pero no imagine que fuera tu tutor, ¿Por qué está aquí?
-quería presentárselos, él ya sabe todo sobre ustedes y lo acepta ¿cierto sasuke?
-así es, y aunque ya nos conocíamos, lo diré de nuevo, es un gusto el conocerlos, a ti y a su hijo.
Sonrió el azabache estirando la mano con su mejor sonrisa en el rostro, lo cual causo felicidad en Gaara, que gustoso acepto el saludo.
-para mi también es un gusto, este es Nagato nuestro hijo.
Respondió Gaara también poniendo su mejor sonrisa mientras presentaba a su hijo.
-si, realmente es un gusto el conocerles.
Termino de decir con una amable sonrisa, mientras en su mente ya estaba hecho “el plan”, el cual convertiría a naruto en algo que ni el mismo imagino y seria uno de los peores crímenes cometidos en Tokio en el siglo XXI, ahora solo era cuestión de tiempo.