Pasaron todo el día juntos incluso Milo se quedo a dormir en acuario, sin embargo el dueño del templo no podía conciliar el sueño la preocupación lo dominaba, Milo dormía en su pecho, el amaba dormir ahí por el hermoso sonido que el corazón de su amado producía dándole paz, Camus retiro con sumo cuidado a Milo, haciendo lo posible para no despertarle, se coloco sus zapatos y salió en silencio por la parte trasera de su templo dirigiéndose a piscis con rapidez, sabía que el guardián del este templo dormía, mas necesitaba hablar con el, tenia la intuición que este sabia algo sobre lo ocurrido con el patriarca, se adentro a los aposentos privados del caballero de piscis, se encontraba frente ala puerta dudando en tocar, cuando de la nada esta se abrió.
- ¿Camus? ¿Qué haces aquí ha esta hora?
Dijo sorprendido afrodita el cual se dirigía por un vaso con agua a la cocina.
- perdona afrodita pero necesito preguntarte algo no se si puedas ayudarme.
Afrodita bajo la mirada sabia muy bien a que venia Camus.
- ¡tememos un te!
Fue lo único que dijo afrodita dirigiéndose ala cocina con Camus tras suyo, poco tardo para estar listo aquel te el cual sirvió y coloco frente a Camus en total silencio.
- muchas gracias por la amabilidad afrodita, pero necesito preguntarte algo.
Dijo Camus sin prestar atención a lo que se le había servido .
- cual es tu pregunta. –contesto sereno piscis mirando fijamente su taza de te.
- se de antemano que tu, Deathmask y Shura son los más cercanos al patriarca últimamente, asi que quiero suponer que estas al tanto sobre lo ocurrido en mi reunión con el patriarca esta mañana.
Afrodita solo asintió con la cabeza, sin apartar la vista de su te.
- bueno. – continuo Camus- quiero preguntarte ¿Quién ha sido el maldito que ha arruinado mi vida? También quisiera preguntarte ¿si sabes lo que planea el patriarca en caso de que nosotros le desobedezcamos?
Afrodita guardo silencio, aun miraba su taza de te,
- Por favor afrodita dime algo, estoy a punto de enloquecer, no puedo ante esta situación, no puedo mas.
Afrodita dejo finalmente su taza de te y poso sus hermosos ojos celestes en Camus.
- yo estuve ahí cuando le informaron , el patriarca únicamente dijo que cualquier acto como aquellos solo podría ser castigado con la muerte, que tu y Milo tiene suerte de ser caballeros dorados ya que de otra forma estarían muertos… y sobre quien ha sido.. temo informarte que ha sido Aioria, el no solo ha dicho eso si no que te acusa a ti de haber convertido a Milo en, según el, en un anormal, dice que el no era así cuando lo conoció, que todo esto es tu culpa. – guardo silencio un momento y regreso la vista a su taza de te. - en verdad lo siento Camus.
Camus se quedo en silencio, recargando su espalda por completo contra la silla que ocupaba, procesando la información que había recibido, no creía lo que escuchaba, cierto era que el y Aioria tenia una relación únicamente de compañeros, las únicas palabras que solían intercambiar era un saludo o una despedida de ser necesario pero nunca habían tenido problemas, sin embargo con Milo era otra cosa, el y Milo eran grandes amigos desde mucho antes que este llegara al santuario, Milo lo estimaba bastante, como era posible que el lo traicionara de esa manera, pensaba atónito Camus.
- Lo siento mucho Camus, yo hubiera querido ayudarlos pero - suspiro- no puedo enfrentar al patriarca, perdóname en verdad.
Comento afrodita con tristeza en su tristeza en su voz, Camus volvió a abrir sus ojos turquesa posándolos en su compañero, guardo silencio un instante y con duda cuestiono.
- ¿ acaso tu no crees lo mismo que el patriarca cree de nosotros? , eso que somos enfermos y anormales.
- no – contesto con rapidez - no creo eso, ni nunca lo creeré yo no crecí con sus ideas estúpidas aun que intentaron imponérmelas, nunca creí que eso estuviera mal, es estúpido pensar de esa manera en especial en estos tiempos sin embargo así es este lugar, sus mentes están cerradas con un único objetivo en frente un objetivo carente de sentido por mucho que lo quieran adornar, no estoy de acuerdo con que nos obliguen a morir por “una causa justa” y aun así no nos permitan elegir quien amar.. maldición ¿dar nuestra vidas a cambio de la felicidad o las vidas de los demás no es ya demasiado para que aun nos hagan obedecer reglas tontas?.
Nuevamente el silencio reino en ambiente, Camus se levanto de su silla retirándose del lugar después de haberle dado las gracias a piscis, regreso a paso rápido a su templo queriendo estar con Milo lo antes posible, al llegar encontró ha este aun durmiendo con sumo placer en su lecho, se quito la ropa por completo quedando desnudo, amaba al igual que Milo dormir asi, se acerco ha este por la espalda cubriéndolo con un sobre protector abrazo.
Aquella noche no pudo dormir, no podía dejar de pensar en las cosas que pasarían a partir de ese momento, culpándose por no haber convencido a Milo a entrar a su templo, de haber sido así, todo aquello no estuviera pasando. Una lagrima broto de sus ojos en medio de sus pensamientos un recuerdo horrible de los primeros días que estuvo en el santuario llegaron a él, llenándolo de miedo, tenia que proteger a Milo costara lo que costara.
Las horas pasaron rápidamente y el sol de un nuevo día resplandecía por las ventanas de acuario, despertando a Milo, el cual miro sorprendido la cama al encontrarse solo en esta, se rasco ligeramente su nuca, al tiempo que tomaba sus pantalones del suelo colocándoselos de nuevo dejando su pecho desnudo, comenzando a caminar por aquel templo buscando a Camus , encontrándolo en la cocina.
- buenos días Milo, amor mío por fin te has despertado, toma asiento, desayunemos para después ir a entrenar .
Decía Camus con una sonrisa aparentando tranquilidad, Milo miro la pequeña mesa que se encontraba en el lugar en ella se encontraba un sencillo desayuno de huevos con tocino, jugo de naranja y un plato de manzanas cortadas en forma de orejas de conejo. Milo suspiro con pesadez acercándose a Camus, con un poco de fuerza lo tomo de la mano jalándolo hacia su cuerpo, besándole profundamente al instante.
- todo estará bien, Camus tranquilo yo te protegeré y no dejare que nadie te aparte de mi, entendido Camus, nadie te tocara, asi que tranquilízate y deja de preocuparte… todo estará bien… ya lo veraz.. te lo prometo.
Aquellas palabras fueron un susurro del heleno en la oreja del francés, mas aquel susurro logro tranquilizar un poco a Camus, el cual no dijo absolutamente nada, únicamente abrazo a su amante con fuerza, sabia que era inútil querer ocultar su preocupación a su escorpión, este lo conocía por completo , entre ellos los secretos no podían existir.
Tomaron aquel desayuno con lentitud prolongando lo mas posible salir de acuario.
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Por otro lado en el santuario afrodita y Shura se encontraban en el templo de cáncer desayunando plácidamente lo que el guardián de este les había preparado.
- pues en lo personal, no acepto todo esto, porque el patriarca tiene que ser así con ellos es injusto… todo esto es una total idiotez
Decía enojado piscis mientras cortaba un trozo de hot cakes cubierto de frutas y miel.
- tranquilízate afrodita. – tomo la palabra Death, al tiempo que acercaba su taza de café a su boca- igual no puedes hacer nada y sinceramente no entiendo por que te afecta tanto no eres allegado a ellos.
- bueno –contesto el peli celeste. Se que no somos amigos ni nada parecido pero no me siento a gusto con esta situación, si no hago algo es como si estuviera dando la razón a seguir con estos actos tan estúpidos, aparte sabes como son los demás en el santuario conmigo, tal vez por eso me afecta un poco, los mismos insultos que han usado con ellos, lo he escuchado una y otra vez desde que llegue aquí asi que se cuanto duele, es por eso que no me gustaría que alguien en especial compañeros míos sintieran el dolor que causa las palabras llenas de odio y rechazo… es por eso que lo he decidido los ayudare lo mas que pueda.
Death bajo su taza de café y con delicadeza coloco su mano en la de dita brindándole una ligera sonrisa.
- -suspira- dita.. dita… dita.. que podemos hacer contigo.. pero si eso es lo que quieres esta bien hoy tengo entendido que iré a investigar con Milo sobre unos supuestos desertores, si alguien le dice algo solo por ti ayudare ok …. Y que considerado que hagas esto por el como te trataron ati aun que pensé que eso estaba en el pasado sabes muy bien que mientras yo este aquí nadie volverá a molestarte… te lo prometí hace mucho… y nunca romperé aquella promesa
Afrodita también le sonrió a Death, mientras Shura el cual hasta el momento había guardado silencio miraba de reojo aquella escena, su corazón le dolía y se llenaba de celos y tristeza , al ver como los ojos de Death brillaban con tal intensidad al dirigirlos hacia afrodita, mas como era su costumbre desde hace muchos años tenia que disimular.
- hablando de aquellos dos – dijo finalmente Shura- me he enterado que alguien ha estado divulgando su relación en todo el santuario y muchos caballeros incluso aspirantes a caballero fueron repitiendo esto como un gran eco, sinceramente tengo el horrible presentimiento que algo malo les pasara, así que, afrodita como un consejo si vas a ayudarlos ten precaución ya que te conozco y terminaras metiéndote en problemas y junto a ti también meterás en problemas a Death, sabes lo que el se preocupa por ti.
Afrodita arque su ceja al tiempo que ponía una ligera mueca por lo que había escuchado de Shura
- no me meteré en problemas Shura, pero gracias por el consejo.. aun que no puedo creer que tan maldito debe de ser aquel estúpido que ha hecho eso, de seguro será un pobre diablo que no sabe lo que es amar sin condiciones… aun que no creo que muchas personas en este lugar lo sepan.. mmm ¿ustedes si lo saben? ¿Saben lo que es amar a alguien?
Ante aquella pregunta, Shura fingió tomar un sorbo de su café mirando a Death, llenándose de nostalgia al notar que este miraba de reojo a afrodita.
- no…
Contestaron capricornio y cáncer en unisonó, mientras afrodita con una mueca mas visible les contesto.
- típico de ustedes… pero bueno yo si se que es amar a alguien, asi que no me importa y hare hasta lo imposible por ayudarlos sin importar nada… pero bueno –mirando el reloj – tengo que irme tenia que llevar unas cosas a rodorio antes del entrenamiento si me apresuro llegare a tiempo nos vemos.
Afrodita dio el ultimo bocado de su comida, sin embargo al levantarse de su lugar dispuesto a irse Death le detuvo tomando suavemente su brazo.
- espera.. espera… espera.. como es eso que tu si sabes que es el amor.. ¿estas enamorado? ¿de quien? Dime lo que escondes pescadito.
Cuestiono Death intentando sonar amigable sin embargo sus celos eran mas que notables… afrodita le brindo una sonrisa traviesa y posando su dedo en su laio fingiendo pensar contesto.
- ¡ella!
- ¿ella? -Interrumpió Death-
- o tal vez el… su sexo no importa.. lo que importa es que es una persona especial para mi, le amo en verdad y ustedes le conocen pero no les confirmare quien es.
Sentencio piscis para soltarse del agarre de Death , regresando a sus planes de salir de templo, como Shura y Death le miraban marchar este ultimo bajo la mirada mostrando un mueca de tristeza, no esperaba que afrodita estuviera enamorado de alguien o mas bien no aceptaba que alguien que no fuera el pudiera estar con dita, Shura noto esto y en un intento de distraerlo se le acerco limpiando con su dedo un poco de mies que descansaba en el los labios dl italiano.
- tal vez – dijo lamiendo la miel de su dedo- dijo eso para poder ver si el te gusta, yo creo que deberías de confesártele, asi dejarías de sufrirle tanto ya que yo creo que tu también le gustas, aunque lo que si no estoy seguro es que le gusten por completo los hombres, pero de que tu le gustas es seguro y si no será un estúpido, dejaría ir ala persona mas maravillosa del mundo.
- imposible – contesto Death con una pequeña mueca – quien quisiera estar con alguien como yo. Solo mírame soy un desastre y el.. el es tan perfecto… y aun que hipotéticamente pudiéramos estar juntos este maldito lugar nos terminaría separando igual como lo hará con escorpión y acuario…
- no eres un desastre Death y si conozco a alguien que quisiera estar contigo, alguien por estar a tu lado pelearía con cualquier enemigo.
- ja! claro Shura, hare como que te creo eso… ya que eso solo puede pasar en sueños… no se correspondido en el amor ese es mi único destino.. aun que no creo que lo entiendas.
Shura solto un gran suspiro y regreso su mirada ha su taza y con una gran nostalgia contesto.
- tienen razón Death, no lo entiendo.
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Camus estaba apunto de llega al coliseo para poder entrenar, caminaba solo dado que Milo tenia asuntos que revisar junto con Deathmask, sin embargo el camino el camino no fue placentero podía sentir la mirada de aquel que pasara a su lado, al grado de que empezó a sentir incomodo , respiro hondo y con mas rapidez comenzó a caminar llegando por fin al coliseo. Dado que mu, Shaka y Aldebarán se encontraban fuera del santuario, opto por dirigirse hacia Shura y afrodita ya habían comenzado a entrenar, a lo lejos miraba a Aioria el cual platicaba plácidamente con los caballeros de plata, al verlo sintió la sangre arder, mas intento controlarse enfocándose únicamente en acercarse a sus compañeros, sin embargo al casi llegar con estos fue interrumpido por Aioria.
- ellos ya están entrenando en parejas acuario, que te parece si tu entrenamiento de hoy lo haces conmigo - le dijo en castaño con tono burlo
Camus lo miraba con ira, sin embargo acepto tomando esa como una oportunidad para golpear a leo con el pretexto de que estaban en entrenamiento.
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Milo caminaba junto a Death solo alguno paso mas alejado de de este, estaba irritado desde que había salido de los doce templos había sentido las miradas de odio y asco que incluso los practicantes a caballeros le brindaban.
- ¡hey! -escucho que uno de los soldados le gritaba a lo lejos- al parecer alguien olvido salir sin su máscara,
Tras escuchar esas palabras una mascara similar alas que portan los caballeros femeninos cayo a sus pies, Milo ardió de rabia , nunca le habían humillado de tal forma, saca su Antares acercándosele a aquel soldado dispuesto a matarlo, cuando sintió como Death le tomaban por el brazo llevándoselo lejos de aquel lugar.
- maldita sea Deathmask por que demonios me has detenido, tenia que matar a ese maldito para dejar claro a el y a todos en este lugar que con Milo de escorpión no tiene que meterse.
Milo lucia sumamente alterado tras decir aquello, sin embargo le miraba mostrándose totalmente inexpresivo.
- de hacer Milo – le respondió al escorpión – hubieras dado pase a que cualquiera tuviera el derecho a matarte, solo piensa no es que ahora seas exactamente del gusto del patriarca así que el aprovechara cualquier error que cometan para poder deshacerse de ustedes.
Milo bajo levemente la mirada estaba consciente de ello mas no dejaría que cualquiera se atreviera a querer pisotear su orgullo .
- a ti que mas te da Deathmask de seguro piensas que soy una abominación… solo por el hecho de estar con otro hombre.
Death únicamente se cruzo de brazos y desvió la mirada de Milo.
- ami –contesto- sinceramente me da igual, lo que ustedes o cualquiera haga me da igual, con quien se acuestan sinceramente no me importa, solo que como un consejo tu decides si lo tomas o no.. tienes que cuidar tu carácter ya no solo eres tu si cometes una estupidez te acusaran de traición, te mataran y dejaras a Camus sobrellevar todo esto solo y no creo que quieras eso.
Milo miro asombrado a Death sin creer que fuera este quien le estuviera aconsejando.
-puedo entender –continuo Death- lo difícil que es el ser pisoteado , humillado y tratado como lo peor y aun asi tener que seguir y guardar compostura, de antemano te digo aun que se que tu ya lo sabes es que ambos sufrirán y sufrirán bastante,… si quieren tranquilidad tu y Camus tendrán que aprender a bajar la cabeza.
Nuevamente la ira se apodero de Milo.
- ¿Qué bajar la cabeza? Nunca soy Milo de escorpión un guerrero sumamente orgulloso yo no bajo la cabeza a nadie, maldición soy un jodido caballero dorado simplemente por eso ya merezco respeto, que demonios importa el con quien este.. maldición..
- si – interrumpió Death- asi es como debería de ser pero no es asi. El que seas un caballero dorado ya no importa en este lugar tu y Camus no son mas que maripositas o al menos eso es lo que he escuchado decir de ustedes antes de vernos esta mañana, también he escuchado que muchos piensas que han deshonrado la armadura y que deberían expulsarlos del santuario, ya nadie les respeta ni les respetara aun su rango como dorados y si fuera poco también tiene el patriarca dándoles la espalda, por eso entiende Milo tienes que hacer eso, por Camus.. por ti o acaso no sabes que paso con la ultima pareja homosexual que apareció en el santuario?
Milo negó con la cabeza.
- bueno supongo que es normal que no lo sepas a pesar de todo yo llegue primero que tu… el mismo día que yo llegue al santuario mi maestro me obligo a ver como asesinaban a dos jóvenes caballeros de plata, ellos fueron privado de su cosmo el patriarca se os bloqueo y los demás incluso aquellos que se hacían llamar sus amigos, los asesinaron mas no fue rápido, ni piadoso vi como los golpearon hasta el cansancio incluso los sodomizaron con un objeto, pasaron horas para que murieran desangrados, fue todo un espectáculo para los demás, todo fue por el patriarca el los convirtió en carne para buitres al bloquear su cosmo y si ustedes colman su paciencia les hará lo mismo.
Milo desconocía por completo esa historia, cerro sus ojos con fuerza lleno de impotencia, mordiendo su labio haciéndolo sangrar,
Death fijo su mirada al coliseo el cual no estaba muy lejos de ellos miraba como Shura y afrodita entrenaban, mas también noto como Camus parecía tener una pelea con alguien a quien reconoció como Aioria
- Milo, vamos rápido al coliseo Camus esta en problemas ya veré que le invento al patriarca para justificar nuestra presencia en ese lugar.
Milo abrió los ojos mirando en dirección al coliseo logrando ver como Aioria de un fuerte golpe lanzo a Camus por el aire cayendo con violencia contra el piso, sin esperar ni siquiera a Death comenzó a correr en aquella dirección.
- detente Aioria esto ya esta siendo mucho mas que un entrenamiento .
Dijo afrodita poniéndose en medio de Camus y Aioria mirando como este ultimo estaba sangrando Camus le había soltado varios buenos golpes, mientras que el de acuario se levantaba con dificultad del piso dispuesto a atacar a muerte a Aioria mas fue Shura quien lo detuvo.
. ustedes no se metan -les grito Aioria- y déjenos continuar… que este marica se defienda solo.. fin al cabo se lo merece.. todo esto es su culpa, Milo era normal hasta que el llego convirtiéndolo en un pervertido enfermo el es el culpable de todo, la culpa es suya asi que quítense de en medio y dejen ala florecita defenderse solo … fin al cabo solo es un entrenamiento
Algunos guerreros de plata comenzaron ha acercarse mas divirtiéndose con aquello, colocándose tras Aioria burlándose al mismo tiempo de Camus, este estuvo de nuevo a punto de golpear a leo mas nuevamente fue detenido por Shura.
. Aioria esto ya es mas que un entrenamiento…
Decía afrodita sin moverse de su lugar siendo interrumpido por un caballero de plata.
- pero miren nada mas quien ha salido a la defensa del marica, su amigo el afeminado.. que pasa afeminado tu también te lo coges, por eso te molesta tanto.. ja ya sabia que de niña tenias mas que la cara eres igual a el..
Afrodita fulmino con la mirada a aquel caballero mas se tranquilizo, fin al cabo no era la primera vez que lo llamaban de esa forma.
- ¡ja! con que derecho un guano de plata se atreve a insultar a un caballero de oro, seguramente solo eres un imbécil que busca una muerte horrible.
Se escucho decir a Death quien junto a Milo llegaba al lugar colocándose frente a afrodita quedando cara a cara con Aioria y aquellos caballeros quienes por miedo guardaron silencio. Mismo que reino en el lugar, mientras que no muy lejos el patriarca observaba todo aquel escenario , Milo miraba el labio sangrar de Camus limpio a este con delicadeza sintiendo un nudo en la garganta no creía que Aioria fuera el responsable de eso, sero su puño con ira y camino con paso rápido hacia el león empujándolo con fuerza haciéndole caer con violencia contra el piso.
- levántate hijo de puta. – le grito con odio - que eso se va arreglar de una vez por todas, pero quiero que sepan que si creen que dejare que lastimen y humillen a Camus están muy equivocados primero tendrán que matarme, así que si quieren vengan todos ala vez y acabemos con esto.
La uña de Milo comenzaba a alargarse tomando un color carmesí, Aioria se levanto con mirada altanera limpiando la tierra de su ropa , miro a Milo unos segundos cuando por mucha seriedad le dijo.
- Milo, amigo tu no deberías de estar defendiendo a este marica, tu no eres como el tu no…
-¡ ja! – le interrumpió Milo- no digas estupideces que si somos lo que tu dices o no a ti te da igual, por que tu y no lo olvides tu solo eres el hermano de un traidor, no.. perdón de un ¡vil traidor!.
Aioria se sorprendió ante lo que escuchaba Milo nunca le había llamado asi, la ira se apoderaba de el , camino en dirección a Milo estando a punto de golpearlo cuando una voz autoritaria le detuvo.
- basta ya, Aioria retirate de aquí, Milo, Camus vayan directo a la sala principal tengo que hablar con ustedes.
Era el patriarca, al verlo todos se arrodillaron en señal de respeto.
- esto me la pagaras Milo, si quieres verme si quieres verme como enemigo espero logres enfrentar las consecuencia.
Sentencio Aioria antes de cumplir la orden del patriarca, Milo y Camus también obedecieron y en silencio comenzaban a dirigirse a l salón principal siendo acompañados por el patriarca, Shura, afrodita y Death solo les miraban marchar con impotencia.
Poco tardaron para llegar a su destino, el patriarca se coloco frente suyo sentándose en una trono que supuestamente tendría que estar Atena, se arrodillaron en señal de respeto.
- me imagino -les dijo el patriarca con tranquilidad- que tu Camus ya debiste de haber puesto a Milo al tanto sobre lo que hablamos ayer, asi que quiero conocer ¿si están dispuesto a continuar con su pecaminosa relación y están dispuesto a caminar por el camino correcto?.. pero antes que respondan, quiero que sean consientes de que si deciden continuar con su relación, que yo les ayude en algo o les defienda de sus compañeros, las burlas y agresiones serán su castigo y si se vuelven una amenaza para alguno de sus compañeros me tendre que ver en la obligación de bloquear su cosmo, sin embargo si deciden curarse de esta enfermedad, nadie en el santuario volverá tan si quiera a atreverse a mirarlos desde abajo, tendran su estatus en alto y el respeto que se merecen… asi que ahora díganme ¿Qué han elegido?
Milo y Camus se mantenían en su posición observándose de reojo, Camus asintió ligeramente con la cabeza en muestra a Milo que podía tomar la palabra.
- creo, -comenzó ha levantarse- que hablo por Camus y por mi al decir que no nos doblegaremos ante su normas arcaicas y sin sentido, somos caballeros dorados, nuestra fuerza esta en nuestra armadura no en nuestra sexualidad, su santidad yo amo a Camus señor lo amo con todas mis fuerzas y si es necesario daré mi vida por el…
Camus también se levanto de su posición colocándose mas cerca a Milo, el patriarca les miro atreves de su inexpresiva mascara azul y con decepción en su voz dijo.
- esta bien, si eso es lo que quieren lo tendrán, por ser caballeros dorados yo los quise ayudar, sin embargo ahora están solo, sinceramente tenia pensado separarles mandándolos a una larga misión pero no creo que eso sea lo mejor.. fin al cabo su castigo lo recibirán a mano de sus compañeros. Ahora retírense y no olviden si se convierten en una amenaza para alguien bloqueare sus cosmos.
Sentencio el patriarca a lo que cual a regañadientes Camus y Milo obedecieron, comenzaron a bajar en silencio hasta acuario, ni siquiera se miraba cada uno estaba envueltos en sus pensamientos,
- ¿te duele?
Pregunto finalmente Milo a Camus señalando el labio de este.
- no –respondió tranquilo- Milo… -guardo silencio unos segundos y continuo.- perdóname mon amour perdona en verdad al parecer te he metido en problemas, yo no quería que esto pasara, si ese día yo te hubiera insistido mas para entrar al templo esto no hubiera pasado… yo no….
Sus palabras fueron interrumpidas por los suaves labios de Milo.
- no digas eso, por favor.. esto era algo que tenia que pasar algún día y lo sabíamos, pero te juro que todo estará bien, nadie va ha separarnos, nadie va a lastimarte, te lo juro primero tendrán que matarme.
Se separo para decir eso y volvió a besar a Camus una lagrima broto por sus ojos mas ese beso no finalizo, sus beso comenzó a tomar intensidad, miro comenzaba a sentirse desesperado al tener el cuerpo de Camus tan cerca, introdujo su mano dentro del pantalón del francés tocando el sexo de este, mientras ahora devoraba los labios de su amante,
- Camus. –Dijo con voz quebrada mientras tomando aire- te necesito, quiero olvidarme de todo, por favor has con tu cuerpo que olvide todo.. por favor.. quiero sentirte dentro de mi, para después ser yo quien te posea, como siempre ha sido, solo ser tu yo yo y nadie mas… por favor ya no quiero pensar… quiero olvidar.. ¿ me dejarías?
Camus abrazo a Milo con fuerza, sabia que Milo tendía a uir utilizando el sexo cuando se encontraba en una situación de estrés tremendamente fuerte, dejo que Milo siguiera tocando su cuerpo con desesperación quitándole la ropa mientras lo llevaba a su lecho, no tardo mucho para encontrarse ambos totalmente desnudo, tumbados en la cama, devorándose a besos, Milo se disponía a entrar dentro de Camus, cuando este con gran ternura lo miro y le dijo
- e t'aime de tout mon cœur et ne nous sépare .. est une promesse. (te amo con todo mi corazón y nadie nos separara... es una promesa.)
Milo entendía ala perfección cuando Camus hablaba en francés, incluso amaba cuando hablaba así , lo abrazo con fuerza y de forma protectora mientras poco a poco comenzaba a entrar en el escuchando sus exquisitos gemidos que provocaban cada envestida que le brindaba, Camus decidió no darle la vuelta aquella vez lo amaba y solo queria que estuviera tranquilo, consumiendo su amor ente fluidos y gemidos olvidándose de todo, en un mundo donde solo existían ellos dos.
La noche por fin dominaba, ambos después de largas horas de amor dormían plácidamente como siempre Milo colocaba su cabeza en el pecho de Camus escuchando el latir de su corazón. Todo era tranquilidad hasta que sintieron una presencia en el templo, se vistieron con rapidez, saliendo ha ver de quien se trataba encontrándose con afrodita, Shura y Death, estos lo miraban con preocupación.
- chicos – dijo afrodita- perdón la hora pero acabamos de venir del salón principal, solo queríamos informarles que Aioria se ha encargado en poner a todo el santuario contra de ustedes, no solo eso si no que hoy hablo con el patriarca, quiere convencerlo que son una amenaza y que bloque sus cosmos, quiere y hará hasta lo imposible para ustedes queden indefensos y sean considerados traidores..