Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Orgullo vs Amor por Shinjimasu

[Reviews - 15]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Eran alrededor de las seis de la tarde. Shitagi estaba en la habitación de Vegeta, esperándolo. Él no se había aparecido por la casa en todo el día, sin embargo tenía que regresar en cualquier momento puesto que al parecer no había comido y debía tener hambre, por lo que calculó que no faltaba mucho para que regresara.

Salió del balcón y recargó sus brazos sobre la barda, pensando, tratando de averiguar qué era lo que en verdad sentía por él: tanto tiempo de vivir juntos, tantas noches cuidándolo…

“¿Qué me está pasando? ¡Se trata de Vegeta!” ¿Ese arrogante saiyajin que en algún momento intento matarlo ahora estaba ocupando un lugar especial en su corazón? Difícil de aceptar, pero no imposible.

-¿Qué demonios estás haciendo aquí?- gruñeron a sus espaldas.

Shitagi volteo y se encontró con un Vegeta cansado y lastimado que débilmente se mantenía en pie.

-¡Vegeta! ¿Qué te sucedió? ¿Dónde estabas? ¡Me tenías preocupado! ¿Te encuentras bien?- le pregunto angustiado.

-No t-tengo por qué darte explicaciones <Hump> y no creas que tienes derecho a en-entrometerte en mis a-asuntos- le dijo cansado.

-Espera ¿Estás herido? ¿Qué sucedió?- le dijo acercándose a él.

<Grr>-No estoy de humor para es-escuchar tus reclamos, así que de-déjame solo- contestó débilmente mientras entraba a la habitación sin dejar de hacer presión con su mano de su costado derecho.

-Solo quiero saber si…- dijo, pero de pronto el guerrero cayo de rodillas al suelo – ¡Vegeta!- exclamó avanzando hacia él – ¿Estás bien?- pregunto angustiado, arrodillándose a su lado.

<Grr> -No necesito d-de tu ayuda- gruño observando el piso, apoyándose débilmente con su mano izquierda.

-¡Por favor Vegeta! Este no es el momento para demostrarte orgulloso, solo déjame revisarte- respondió el chico observando al saiyajin quien comenzó a retirar su mano, que tras dejar de ejercer presión, comenzó a sangrar abundantemente.

-Oh, no- susurro Shitagi llevando su mano a su boca – ¿Acaso no pensabas decirme? ¿Estás loco? ¡Podrías morir desangrado Vegeta!- lo regaño –Necesito atender eso de inmediato- dijo ayudándolo a levantarse para recostarlo sobre la cama para que lo revisara.

El príncipe gruñía y se quejaba constantemente pero no era para menos, pues Shitagi tuvo que suturar la herida y el orgulloso saiyajin se negó a que lo anestesiara. Por más que trataba de hacerle el menor dolor resultaba casi imposible.

-Vegeta, si sigues quejándote nunca poder terminar- le dijo mientras daba las últimas puntadas.

<Argg> -Podrías mejor concentrarte en lo que haces y dejar de…- <Grr>

-¿…Y dejar de hablar? Sí, creo que eso debes hacer tu-

<Hump> -Cierra la boca- gruño.

-No hables más, necesitas guardar energías- contestó él mientras cortaba el hilo y limpiaba la herida.

-Tu no  vas a decirme que hacer-

-Claro que lo hare- le dijo preparando una jeringa con un poderoso sedante  -Te dolerá un poco, pero el dolor desaparecerá pronto- dijo antes de inyectarlo, robándole un gruñido que termino en algo similar a un ronroneo –Bien eso es todo, te apliqué un calmante y te hará dormir. Cuando despiertes te sentirás mejor-

Pasaron algunos minutos hasta que el guerrero le habló <Hump> -¿Por qué lo haces?- preguntó cerrando sus ojos.

-¿A qué te refieres?-

-Me comporto como un maldito contigo pero aun así estas aquí… no te he dado motivos para que seas amable-

-Vegeta, el sedante está surtiendo efecto, será mejor que descanses-

-No terrícola, estoy consciente de lo que digo. Esos estúpidos medicamentos primitivos tuyos no me han hecho nada-

Shitagi sonrió –Duerme-

-No me trates como un maldito niño, no estoy muriendo-

-No me obligues a sedarte de nuevo-

-Te arrepentirías de hacerlo- respondió adormilado.

-Entonces te dejo descansar- le dijo él mientras se ponía en pie.

-Shitagi- lo llamo.

-¿Si…?-

-No te vayas- pidió.

El chico sabía que su actitud se debía al analgésico que le había dado y que dentro de poco se quedaría dormido, por lo que no encontró inconvenientes en su petición. Regresó y se sentó a su lado, acariciando su frente con cariño mientras sonreía dulcemente.

Vegeta tomo y beso su mano con una seductora mirada – ¿Vas a decirme por qué me besaste?-

-Quería saber que se siente besar a un saiyajin- respondió burlón

-¿A si? ¿Y qué tal? Maravilloso ¿No crees?-

-Estuvo bien. Tu sabor es… interesante-

-Sigues siendo igual de vulgar y mentiroso, sabes que estás loco por mí- respondió con una sonrisa –Pero no te culpo, por el contrario, deberías sentirte afortunado por haber besado al Gran Príncipe Vegeta-

Shitagi rio –Aun sedado eres igual de orgulloso-

-Ya te dije que esa patética medicina no funciona conmigo- le dijo débilmente –Estoy consciente de lo que hago- afirmo acercando al chico a él –Pero dime ¿Qué tanto puedes resistirte a mí?-

-Vegeta, yo…- contestó él pero fue interrumpido por los dulces labios del guerrero contra los suyos nuevamente. Su unión resulto ser igual de dulce y tierna como la pasada, pero ahora fue un poco más intensa.

Podía sentir como chupaba sus labios con gentileza, jugueteando con su lengua dentro de su boca: a pesar de estar medio drogado, se mantenía en compostura. Después de unos segundos el agarre del guerrero comenzó a aflojarse, quedándose dormido víctima del cansancio y del medicamento, ante la mirada dulce del chico.

 

Pasaron algunas horas hasta que por fin despertó. Miró a Shitagi dormido en un sillón frente a él y se quedó pensando por un momento “¿Por qué esta aquí?”

Intentó levantarse pero fracasó, expulsando un gruñido que hizo despertar al chico – ¡Vegeta! Aún no debes levantarte-

-Cállate, estoy bien, no necesito seguir aquí-

-No tienes que hablarme de esa forma, después de todo soy yo el que tiene que estarte cuidando- respondió un poco molesto.

-En ningún momento te he pedido semejante cosa, si lo haces es porque quieres-

-Entonces podría irme y ver si tú puedes atenderte solo-

-¡Por supuesto que puedo!- respondió enderezándose –No requiero de un humano-

-Piensa lo que quieras Vegeta, por ahora no tengo intensiones de pelear contigo- contestó él mientras tomaba sus cosas del mueble a un lado de la cama –Si quieres entrenar hasta morir, hazlo-

-Entonces vas a ignorarme-

-¿Vez? ¡Eres tú el que siempre quiere estar en conflictos conmigo!-

-Lo encuentro grato y relajante- respondió con una sonrisa –Después de todo eres lo más parecido a una mujer saiyajin-

-Por supuesto- se quejó por la comparación –Pero digas lo que digas estoy seguro de que ninguno de los saiyajin de tu planeta era tan inteligente y guapo como yo-

-No, ninguno- dijo, sonrojándose al momento de darse cuenta del error que acababa de cometer. No pudo evitar mirar al chico, quien mostraba una dulce sonrisa <Grr> -¡Deja de verme así!-

-¿Realmente crees que lo soy?-

Vegeta no sabía que responder, estaba completamente sonrojado y apenado –No tengo por qué responder eso-

-Entonces sí lo crees y por eso no lo dices- contestó él, encantado por la expresión nerviosa y apenada que mostraba el príncipe –No te preocupes Vegeta, con una vez basta- contestó mientras se dirigía a la puerta para salir –Por cierto, te vez muy lindo sonrojado- agregó.

El saiyajin ya no le contestó y solo se quedó ahí, completamente ruborizado “Maldita sea ¡A buena hora se me ocurre cometer semejante estupidez!” pensó mientras se recostaba de nuevo.

Pasaron algunas horas y Shitagi ya se encontraba en la sala, acariciando a Tama sentado sobre sus piernas. No dejaba de pensar en lo que el guerrero le había dicho “Puede ser que… ¿Vegeta en verdad sienta algo por mí? ¿Puedo gustarle? Sería una opción ¿O no? Después de todo no ha tenido otro tipo de contacto más que conmigo y es posible que al no encontrar mujeres de su especie tenga que adaptarse a lo que le rodea ahora…” pensó, justo cuando alguien toco a su puerta. Se puso en pie y avanzó junto con Tama para abrir, descubriendo a su inesperado visitante.

-¿Yamcha…?- 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).