Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

1. La Pareja de Jongin por dayanstyle

[Reviews - 12]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Luhan se deslizó por el cuerpo de Jong In, bajando hasta sus pies. Cuando Jong In comenzó a desnudarse, Luhan sostuvo con sus manos ─ No te muevas ─Jong In curioso asintió.

Su pareja se levantó la camiseta y expuso uno de sus pezones, lamió su dedo y circuló el duro botón. Giró las caderas mientras bajaba la camiseta y cubría el disco café, entonces levantó el otro lado, repitiendo la acción. Esta vez se quitó la camiseta la movió como las aspas de un helicóptero en vuelo y se la lanzó a Jong In, golpeándole la cara. Jong In estaba con la boca abierta que ni siquiera notó el suave objeto que lo golpeó.

Luhan movía sus muñecas desabrochándose el botón de los jeans. Se giró y movió sus globos gemelos en rápidos movimientos. Sus manos lentamente bajaron por sus piernas, permitiendo que su trasero se asomara mientras se inclinaba pasando sus manos hasta sus tobillos y movió las caderas de nuevo.

Jong In estaba lleno de lujuria. Su pareja realmente estaba actuando para él. Abrió sus jeans y liberó su pene, tomando el duro eje comenzó a acariciarlo mientras lo veía fascinado.

Luhan movía sus caderas lentamente, dándole una traviesa sonrisa sobre su hombro. Jong In le dio una gran y tonta sonrisa. Veía las manos de Luhan trabajar al frente pero era incapaz de ver exactamente lo que estaba haciendo, Jong In quería ver, le rogaba con sus ojos a su pareja que le mostrara.

Luhan metió el pulgar en la pretina y lo deslizo a la derecha. Lentamente con dulzura, reveló uno de los gloriosos globos y entonces subió la tela.

Jong In gimió.

Luhan repitió el mismo movimiento a la izquierda de la pretina. Esta vez masajeó la expuesta carne. Jong In estaba derramando pre-semen sobre la alfombra, la bulbosa cabeza de su pene se alargaba y pulsaba.

Luhan bajó sus jeans hasta las rodillas se inclinó y separó sus nalgas. Jong In dio un paso, pero Luhan subió los jeans a su lugar, moviendo su dedo en reprimenda por el movimiento de Jong In.

Jong In dio un paso atrás.

Luhan bajó la mezclilla de nuevo. Ensalivó un dedo y comenzó a estirarse justo ahí en la mitad del cuarto.

Jong In se lamió los labios y gimió fuerte.

Luhan caminó a la orilla de la cama, balanceándose mientras se follaba con sus dedos. El pene de Jong In pulsaba en su mano mientras Luhan se quitaba los jeans y el resto de su ropa, movía sus caderas y tomó su pene aún empalado en sus dedos.

Jong In no podía aguantar más, cruzó el cuarto y apartó las manos de Luhan de su erótico juego, empujando al pequeño hombre arriba de la cama, separando sus rodillas, pero Luhan se rodó y le dijo: ─ Quiero montarte.

El pene de Jong In escurría más pre-semen, se acostó en la cama y separó piernas y brazos para la aventura de su pareja.

Luhan se lamió los labios y se arrastró lentamente arriba de las piernas de Jong In. La lengua de Luhan recorría la cara interna del muslo de Jong In en su viaje. La punta llegó a las bolas de Jong In entonces trazó un camino, circulando abajo y alrededor, chupó una de las bolas a la vez. Su camino siguió a la base del pene del moreno, deslizándose como si su lengua fuera una víbora. Luhan separó los muslos de Jong In, lamiendo la base de su pene con poderosa succión, recorriendo la piel hacia arriba. Jong In gruñó alto y tomó la cabeza de su pareja. No había visto a Luhan de esa forma antes, y amaba eso.

Luhan pasó su lengua a lo largo de la vena y descendió a la base. Sus manos seguían en la cara interna de los muslos de Jong In, manteniéndolos aparte. La lengua de Luhan recorrió el eje unas cuantas veces más antes de atacar la cabeza del pene, recorriendo la ranura y el perímetro alrededor de la corona. Luhan consumió el pene de Jong In antes de liberarlo y subir hacia el ombligo del moreno. Su pareja lamió alrededor de su ombligo y sus pequeñas manos se deslizaron por los costados de Jong In, moviéndolas hacia arriba.

Jong In pensó que perdería la cabeza. Luhan estaba torturándolo lentamente. La urgencia de girar a Luhan y entrar en él era fuerte, pero este momento era de su pareja, era su show.

Su pareja chupó sus pezones haciendo que se endurecieran. Luhan mordisqueó ligeramente cada uno antes de chuparlos, su lengua recorría las duras puntas. Su pareja besó la parte media del pecho de Jong In y subió al cuello, lamiendo el hueco en el centro de su cuello. Su pene se presionaba contra el abdomen de Jong In, dejando un suave rastro de pre-semen. Su pareja acunó la parte de atrás de la cabeza de Jong In mientras se presionaba contra el abdomen del moreno, mordiendo su cuello.

Jong In alcanzó el cajón por un lado y tomó la botella de lubricante, esparciendo algo sobre su pene. Dejó la botella y tomó la cintura de Luhan, suavemente empujó la punta de su pene hacia el arrugado agujero.

─ Bebé, por favor. Estoy demasiado cerca.

Jong In tomó su pene, sosteniéndolo, para que su pareja se empalara. Jong In levantó las manos y Luhan apoyó sus manos en ellas, usándolo como palanca mientras se rodaba. Los pies de Luhan plantados firmemente en la cama a los lados de las caderas de Jong In, su pareja se empaló totalmente, su pene escurría libremente pre semen sobre el abdomen de Jong In. Luhan lanzó la cabeza hacia atrás, sus ojos giraron. Jong In estaba consciente de las acciones de su pareja y veía a su bebé disfrutar de su pene.

Jong In estaba en un distante plano de otro reino, un reino de dicha sexual. Su pareja aumentó el ritmo golpeando su trasero duro contra la pelvis de Jong In. El sonido de piel contra piel rivalizaba con el de la tormenta en el exterior.

Jong In soltó las manos de Luhan y las llevó a las caderas mientras se empujaba dentro de esa dulce y apretada vaina. Luhan se apoyó en los antebrazos de Jong In, haciendo esos dulces sonidos y gruñidos, en esta ocasión fuertes. Oh, joder nada se sentía mejor que esto. Una violenta tormenta desgarraba el interior de Jong In, sensaciones y sentimientos recorrían todo su cuerpo. La abrumadora urgencia hacía que lagrimas cayeran de sus ojos, y sus caninos bajaran con las poderosas y contenidas emociones.

Luhan se inclinó hacia el pecho de Jong In, exponiendo su cuello hacia la boca de su pareja. Jong In detuvo las caderas de Luhan en su lugar y gruñendo se empujó duro hacia su cuello. Luhan gritó, disparando sus fluidos hacia el pecho de Jong In. Su pareja era gloriosa.

El orgasmo del Alfa fue algo más allá de este mundo, y sus bolas dolían con la dura fuerza de cada erupción. Soltó un poderoso grito junto a un gemido de placer carnal. La semilla de Jong In explotaba dentro de la vaina interna de su pareja. Jong In lamio el cuello de Luhan, cerrando la herida. Envolvió a Luhan en sus brazos, apretándolo en un gran abrazo.

─ Santa. Mierda. ─Jong In jadeó.

Luhan se acostó sobre el pecho de Jong In y se quedó dormido en cuestión de segundos.

 

 

 

Había pasado un mes desde que Luhan se había emparejado a Jong In. Había logrado conocer a todo el grupo de Centinelas muy bien. Baekho y Ricky seguían siendo sus favoritos. La casa de Jong In se había convertido en un lugar para jugar al billar, lanzar dardos, jugar cartas, ver los deportes en la televisión del estudio, mover sus caderas con el rock “n” roll y jugar video juegos. Los guerreros olvidaron que tenían sus propias casas. Algunos hacían los patrullajes y llegaban directo a uno de los dos sofás del salón.

Luhan había finalmente ganado la guerra acerca de preparar su propia comida. Aún no le gustaba que Jong In lo mimara con regalos, pero era una lucha que no quería repetir.

Nunca.

Él solo le pedía a Jong In que no exagerara, creía que su pareja no lo escuchaba. Aún seguía luchando por mantener su independencia. Era difícil cuando era escoltado por uno de los Centinelas a donde quiera que fuera.

Él iba a salir con E.Den hoy. El guerrero era del tamaño de un tanque Sherman. E.Den tenía el cabello castaño con corte militar. Sus ojos eran de un café tan profundo que parecían negros. Luhan le había preguntado cuánto medía. E.Den medía dos metros, casi tan alto como Jong In. El enorme hombre era puro músculo sin un gramo de grasa.

Ellos fueron al centro recreativo en donde Luhan se había ofrecido como voluntario durante cinco horas cada viernes. Pensaba que Jong In iba a discutir sobre eso. Sorpresivamente él pensó que era una gran idea. E.Den ayudaba a los pequeños niños levantándolos para que lanzaran la pelota a la canasta o todos ellos trataban de subirse a sus piernas. Luhan había solicitado específicamente a E.Den en esas ocasiones sabiendo que la montaña de hombre tenía un suave corazón para ayudar a los jóvenes necesitados.

Había un adulto que le llegó al corazón a Luhan.

Baekhyun.

Uno de los consejeros le había confiado que el joven hombre era ligeramente retrasado y que siempre se mantenía en sí mismo cuando estaba en el centro recreativo. Luhan sencillamente fue hacia él cuando oyó eso, quería que el chico tuviera al menos un amigo.

Fue un lento proceso llegar a ser amigo de él. Baekhyun no confiaba en nadie. Luhan se sentaba junto a él, mientras Baekhyun dibujaba o hacia collares. Un día Baekhyun finalmente le habló. ─ Me gusta el rosa. Es mi color favorito.

Desde entonces, Baekhyun se mantenía cerca de la puerta los viernes, esperando ansioso a que llegara Luhan.

Luhan le había comprado a Baekhyun un regalo esa semana. Había buscado en cada tienda de arte que pudo hasta que finalmente encontró el artículo que buscaba. Luhan había encontrado las letras del nombre de Baekhyun en imitación de un diamante rosa, él les hizo pequeños hoyos a cada letra, así Baekhyun podría hacer un collar con ellas. Usualmente los collares eran donados al hospital para los niños enfermos, pero él quería que Baekhyun se quedara con este.

El primer día que Luhan visitó el lugar, notó que los artículos para los collares eran muy escasos. Contándole esto a Jong In, su pareja se encargó él mismo de eso y se puso en contacto con la tienda de arte local comprando una gran selección a granel, donando la compra anónimamente al centro recreativo. Luhan mantenía una lista de los artículos que tenían que ser reemplazados de acuerdo a sus necesidades.

Hoy él vio a Baekhyun esperándolo en su sitio habitual, su cabello castaño desordenado mientras se movía de un pie al otro buscando en cada carro que pasaba a Luhan. Era un impactante jovencito. Los ojos de Baekhyun eran alegres, oscureciéndose cuando él era infeliz. A Luhan no le gustaba la malnutrición del chico. Sus huesos sobresalían en sus muñecas. Luhan se preguntaba si el resto de su cuerpo era tan delgado pero Baekhyun siempre usaba manga larga y cuello de tortuga, que le quedaba grande a su cuerpo.

─ ¡Luhan! ─ Baekhyun lo vio llegar al estacionamiento. Una gran sonrisa se formó en el rostro de Luhan cuando se aproximó a su amigo. Los mechones castaños saltaron cuando Baekhyun saltó de arriba abajo.

─ Te traje algo. No lo donaras, ¿está bien? Esto es solo para ti. ─Luhan levantó la bolsa de terciopelo negro moviéndola frente a los ojos de su amigo. Baekhyun la tomó, pero Luhan hizo que esperara hasta que se sentaron ante una mesa. Sacó el papel que estaba dentro de la bolsa y vio el regalo.

─ Lindas y brillantes letras rosas.

Luhan organizó las letras hasta que apareció el nombre del jovencito.

─ ¡Hey! Ese es mi nombre. Baekhyun. ─Señaló cada letra pronunciándolas.

─ Haremos un collar y podrás usarlo alrededor de tu cuello. Incluso te compré una cadena especial para colocarlas. ─Luhan sacó una delgada cadena de veinticuatro quilates de la bolsa. Se la dio y vio a Baekhyun concentrado en su tarea. Una vez que había terminado, Luhan cerró el pequeño broche. Ajustaba perfectamente en su cuello. Llevó a Baekhyun al espejo del cuarto de baño para que se viera.

─ Es lindo. ─Baekhyun pasó sus dedos por las letras, pronunciando cada una de ellas. Formó una gran sonrisa y le dio un gran abrazo a Luhan. Los ojos de Luhan se empañaron mientras palmeaba la espalda de su amigo.

─ Lo usaré siempre ─ dijo Baekhyun.

 

 

 

Jong In tomó otra banda de hule del escritorio y la estiró entre sus dedos y la lanzó, cruzando el cuarto golpeando en la pared y cayendo en el bote de basura.

Estaba tan aburrido Luhan estaba en el centro recreativo, en su tiempo de voluntario. Eso dejaba a Jong In contando cuantos clips para papel tenía en su cajón. Veinticinco.

Jong In tiró otra bola de papel cuando Chanyeol entraba en la oficina, golpeando el pecho de su comandante.

Chanyeol arqueó una ceja.

─ ¿Vienes a mí en el día en que mi pareja está en el centro recreativo a pedirme un favor? ─dijo Jong In con su mejor imitación del padrino.

─ ¿Estas bien, Jong In?

Jong In estiró los brazos en el escritorio y su cabeza cayó entre ellos. — Nooo. —Sus labios alargaron la O. — Yo quiero a mi pareja. Estoy aburrido.

─ ¿Por qué no eres tú también voluntario junto con él?

Jong In levantó la cabeza para ver a Chanyeol  como si estuviera loco. — Uh quizás porque mi tamaño podría causarle pesadillas a esos niño humanos.

Jong In suspiró pensando en el striptease que Luhan había actuado para él. Su pareja podía no ser un profesional, pero Jong In no vendería esa noche ni por todo el dinero del mundo. Sus descoordinados movimientos y sus provocadoras miradas hacían que la sangre de Jong In hirviera.

─ Entonces te sugiero que te busques un hobby.

Jong In agrió el rostro imitando en silencio a Chanyeol. Sabía que estaba actuando infantil, pero desde que se emparejó con Luhan, su vida había sido excitante, casi como si el pequeño hombre fuera el aire que llevaba a sus pulmones. Ahora, cuando su pareja no estaba alrededor, Jong In estaba perdido.

Lanzando la pila de, misiles, de bandas de hule al cajón del escritorio, Jong In se puso de pie. El Alfa Ji Hoon de la manada del Este había estado tranquilo últimamente. Ni siquiera su peanutgallery como él llamaba a su manada le habían causado problemas, no habían hecho nada.

Nada en absoluto.

Mientras Jong In salía de la oficina él fue atacado por, misiles, de bandas de hule en su espalda. Sonrió sabiendo que Chanyeol finalmente había encontrado el sentido del humor.

Quizás debería salir en su motocicleta. El aire estaba frio pero no tanto como para no disfrutarlo con su gruesa chaqueta de piel. Además, el cuerpo de los shifters era un poco más caliente que el de los humanos, podría soportarlo.

Tomando la chaqueta y el casco de la recamara, Jong In se dirigió hacia afuera.

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).