Ah, maldición. Odio despertar. Cuando duermo, nunca tengo sueños, o quién sabe, no me acuerdo si los tengo, y eso es algo jodidamente bueno, ya suficiente tengo cuando estoy despierto. Frio, joder ¿ahora hace frio? Como detesto los climas cambiantes, al menos en Rusia siempre podías contar con que hacia frio. Algo me toca la frente. Doy un manotazo y veo a Ann de pie a un lado.
— ¿Qué haces aquí?
— también me da gusto verte Niko— ¿Qué hora es? Estoy perdido, lo último que me acuerdo es haber visto a Drew, y ahora Ann.
— ¿Qué no ya no ibas a venir?
— siempre sí. Drew cambio de opinión, otra vez estamos en el mismo equipo— me dice, sentándose en la cama. Estupendo, ¿en que está pensando ese idiota?— ¿A dónde vas?
— no te importa— ni doy dos pasos y ella ya está en la puerta, impidiendo el paso— ¿Qué carajos te pasa?— arg, no tengo humor para molestarme tanto.
— Asegurándome que no te metas en problemas— ¿lo sabe? No tengo ni puta idea de que ha pasado desde que me dormí.
— voy a la cocina por agua. Dudo mucho que haya problemas a menos que quiera ahogarme en el vaso— ella no se ríe, pero me deja pasar. Ni que fuera a ir descalzo a la calle. Es lo que más me fastidia de las pastillas, que cuando pasa el efecto me quedo muy aturdido. Al menos no me siento como una mierda— muchacho— Mishka me salta, lamiéndome la cara— ¿quieres dar un paseo?
— yo lo llevare.
— ¿Qué, ahora eres mi carcelera?— la ignoro, mientras entro a la cocina. El reloj de microondas dice que son las diez. ¿Dormí todo el día? Mierda. Si Ann se larga, yo también me largo.
— sin problemas, eso fue lo que me dijeron.
— ah, si tú haces todo lo que te dicen— me bebo dos vasos de agua, y también saco una lata de soda del refrigerador— me da igual lo que hagas, solo no me fastidies— realmente no tengo ganas de salir. Regreso a bañarme y cambiarme la ropa, estos son las únicas cosas que puedo hacer sin que Ann este de mirona, y no me quedo convencido de que no lo haga.
Ann está en la entrada de la habitación, con Mishka sujeto con la correa.
— no iremos lejos ¿eh?
— iré a donde quiera.
— Niko, no me obligues a usar la fuerza— es una jodida desventaja ¿Cómo se supone que pueda hacer algo? Genial, tantas malditas peleas para que sea una chica quien me gane. A mi favor solo diré que es una vampira.
Solo camino, no le digo a donde voy porque ni yo lo sé, solo quiero tomar un poco de aire antes de volver a dormir. Ann no habla, lo cual es muy raro, porque ella siempre habla. Ah, aquí afuera no hace frio.
— entonces… ¿otra vez esta ese ridículo plan?
— No es ridículo— dice, arrugando la nariz— vamos a volver ya, siento vampiros cerca. Y solo para que sepas, pronto va a terminar todo.
— sí, claro, han dicho eso desde que llegaron.
— pero ahora si tenemos todo listo. O casi, Soren está planeado cual sería la mejor forma de entrar.
— ¿Por la puerta?— pregunto estúpidamente. Ella solo me entrecierra los ojos. Mishka anda casi corriendo, por eso no le suelto la correa. Regresamos a casa, no hemos salido ni media hora. Después de quitarle la correa al perro, me voy derecho a mi cuarto.
— ¿Estas cansando?
— No— siempre me pasa igual.
— lamento lo que paso con Soren, cuando se enoja hace cosas crueles. Lo de Drew…
— no me interesa.
— pero es…
— No quiero saber nada de Drew— ¿es muy difícil de entender? No voy a pensar en él y ya. Es un completo imbécil por haberse… ¿enamorado de mí? Tonterías.
— ah. Pienso que él es demasiado gentil, y un poco torpe. No debiste enterarte de esa forma, y por eso lo siento.
— que dejes de hablar de él— gruño. ¿Hubiera sido mejor enterarme de otro modo? Carajo, no, sigue siendo un asco— ¿lo sabías de antes?
— eh… si. Drew no es muy discreto.
— Ah, maravilloso— que mierda de situación. Ah, no quiero pensar, no quiero saber nada de Drew, nada de vampiros, y mucho menos nada de amor.
— estaba… sorprendido por lo que hiciste anoche— ah, también lo sabe, bien a ver si así termina por alejarse y dejarme en paz de una buena vez— ¿Por qué lo hiciste?
— ¿Por qué? Mierda, Ann, me entere de que mi mejor amigo está enamorado de mí y luego él va y me muerde— le señalo el lugar— ¿no es suficiente?
— no.
— mira, hay cosas con las que simplemente no puedo— y es todo lo que diré. Enciendo la televisión. Todo es más fácil cuando no puedes pensar en eso, o cuando puedes tener ayuda para pensarlas de manera “Feliz”.
— ¿Sabes? Cuando todo esto acabe, me gustaría seguir siendo tu amiga.
— ¿Somos amigos?— para empezar. Ella no hace caso de mi sarcasmo, y sigue hablando.
— si las cosas salen bien, vendré a verte antes de irme, y te diré a dónde iremos. Un lugar tranquilo y sin vampiros, seremos los únicos.
— aja.
— ¿seguiremos siendo amigos pase lo que pase?
— no te cansas nunca ¿verdad? No estoy interesado en tener amigos, haz lo que quieras— veo de reojo como me sigue mirando con insistencia.
— ¿Por qué estas tan molesto?
— no estoy molesto. Solo te ignoro porque me cansa lo que dices.
— no conmigo. ¿Por qué están tan molesto con lo de Drew?— ah, mierda ¿Por qué no se cansa nunca esta tipa?
— Hasta donde se no es ilegal molestarme por la mierda que sea— ella arque sus cejas ¿no puede dejarme en paz y ya?
— ahora estas evadiendo el tema.
— ¿acaso eres terapeuta? ¿Dirás que oculto algo y que por eso me molesté? Pues no, solo pienso que Drew es demasiado idiota.
— siempre has dicho eso. ¿Cambia algo lo que paso?— ¿pero qué pregunta de mierda es esa? Como odio a los vampiros.
— sí, que mi mejor amigo este enamorado de mi cambia todo— desde que me entere de que a Drew le gustaban los chicos, se lo dije, le dije que no se enamorara de mi. Y arg, la única cosa que le digo que no haga y él va y la hace.
— no es el fin del mundo, Niko. Estas siendo dramático— ¿yo, dramático? Jamás.
— ahora mismo solo quiero golpear a Drew. Y eso no es nada dramático— Ann se pone a reír, lo que me pone de malísimo humor. Ahora también quiero golpearla a ella, si no fuera una chica…
— eres muy divertido ¿sabes? Estuviste preocupado por Drew cuando todo esto inicio, es tu único amigo, y aun así ¿quieres alejarlo?
— Soy bueno alejando a las personas de mí— me sonríe, una sonrisa un poco tretica.
— no sabía que eras de las personas tímidas.
— ¿ah? ¿A qué mierda viene eso?
— nunca te han dicho eso ¿cierto? No sabes qué hacer con lo que te dijo Drew— de verdad, que detesto a los vampiros. Claro que se me ha confesado, no soy la personificación de la amabilidad. Nunca me interese por nadie. Pero es cierto, no tengo ni puta idea de que pensar sobre Drew.
— por si no lo has notado, no soy muy popular.
— oh eso lo note. Pero no creo que sea tan grave, lo de Drew.
— si fuera una chica, no sería grave. Hay mucha diferencia— la miro, recostándome en la cama— tú solo quieres convencerme de lo contrario ¿Qué jodida manía tienes con Drew? No, ¿en que no me enoje con Drew?
— quizá quiera jugar un poco a la celestina.
— Ni mierda, yo no soy un jodido marica— Ann suelta una carcajada cuando le arrojo el control remoto. Claro, ella lo evito con facilidad— ¿Qué carajos hay en tu cabeza?
— Niko, no tienes que ser un marica para…
— ¡Cállate! Solo no sigas, o en serio…— Ann sigue riendo, su risa en serio… en serio…
— pero en serio, no sé cuál es el problema, solo es una persona, Niko, querer a una persona no es nada del otro mundo— ¿querer? Ja, en serio no entiende nada.
— no necesito a nadie, no necesito querer a nadie.
— Niko…
— ¿Cuál es el jodido fin de querer a alguien? Dime— ella solo me mira, ha dejado de reír— todos terminan dejándote. Te dicen que te quieren y te dejan— lo debes de saber, Ann. Mejor que nadie— yo quería a mamá, y me dejo. Mi viejo también me dejo. A mis abuelos no les importó, me dejaron— si ellos son mi familia, ¿Qué será de las personas que no son parientes? Tuve amigos también, ¿Dónde están ahora? Te dejan, así de simple ¿para qué querer a alguien? Solo es una molestia.
— …
— ¿para qué querer a alguien si te va dejar? No necesito a nadie— solo te dejan y ya, no les importa cómo queda uno después. A nadie le importa que los extrañes, que duela mucho. A nadie le importa eso cuando se van. Dejan solo dolor, y no les importa.
— oh, Niko— maldición, estúpida Ann y sus estúpidas preguntas— no llores.
— Ja, ¿llorar? Ni que fuera la gran cosa para llorar— aparece a mi lado, sus manos me rodean y su cabeza descansa en mi hombro. Un abrazo. Aunque no me apretuja, me asfixio. Me echó para atrás. Joder, olvido que ella es fuerte, no puedo liberarme— Ann…— mierda, ¿esa fue mi voz?
— Ya lyublyú tibyá, Niko— ah… joder, joder, joder. ¿Estoy temblando?, no, debe ser ella. Se me escapa una risa, una jodida risa temblorosa. Ya no me siento asfixiado, aunque Ann esta fría, no se siente frio.
— De todos modos, no voy a llorar— le digo, apoyando mi cabeza en su hombro. ¿Hace cuánto no escuchaba esas palabras? No es que las necesite. No necesito a nadie.
— Yo no voy a dejarte— sonrió, aunque no pueda verme. Ella sigue abrazándome con la fuerza que ocupa para que no me aleje, pero ya no importa, no puedo alejarme. No voy a contestarle. Ah, maldición, estoy cansado.
— tonta. Suéltame.
— No, podemos quedarnos así otro rato— inútil discutir con ella. Ann huele como a fresas ¿o es el perfume que usa? Debería alejarla, hacer que me suelte.
— Estúpidas drogas— murmuro. Ann suelta una risita. No dice nada. Yo no tengo nada que decirle. Tengo sueño, empiezo a cabecear. Solo tengo las palabras de Ann en mi cabeza.
Te quiero, Niko.
Mucho ruido, ¿Qué hace todo el jodido ruido? ¿Qué no ven que estoy durmiendo? Con un carajo. Abro los ojos, y lo primero que veo es al idiota de Drew, sentando en la silla del escritorio frente a mí, mirándome con los brazos cruzados.
— Mierda— vuelvo a cerrar los ojos.
— Niko…— ah, no puede ser, ¿en serio ahora esto? ¿Dónde está Ann? La muy desgraciada no me soltó, me quede dormido con ella pegada a mí en la misma posición del abrazo— ¿quieres sentarte, por favor?
— No— realmente no quiero hablar contigo. Le escucho suspirar.
— tienes quince segundos para sentarte y hablar o te sacare de cama.
— ¿si? ¿Tú y cuantos más?— abro los ojos, justo para verle sonreír un poco. Cada que lo hace puedo ver sus estúpidos y geniales colmillos.
— no necesito a mas, Niko— arg, estúpidos vampiros de mierda.
— Atrévete a tocarme y te rompo la nariz— solo porque quiero ir al baño me voy a levantar. Drew vuelve a suspirar cuando ve que me alejo y no hago lo que dice. Yo nunca hago lo que me dicen a menos que sea un concierto.
— ¿Vas hablar conmigo?— me pregunta, cuando vuelvo a acostarme y le doy la espalda.
— no.
— hey, soy yo quien está molesto. Tú no tienes motivo para estarlo.
— ¿ah, no?— me siento, encarándolo, me está provocando. Lo único bueno de que sea un jodido vampiro es que puede sanar aun si le clavo un lápiz en el ojo.
— joder, Niko ¿drogas? ¿En serio?
— no, eran solo dulces de colores. Idiota— murmuro eso último. Eso le hace enojar, casi puedo ver lo que piensa en sus ojos.
— ¿podrías ser serio por lo menos una vez en tu vida? No estoy jugando— como detesto al señor moralidad.
— Solo son drogas, Drew— carajo, no recuerdo que mierda dije— y tú las tiraste por el inodoro— de eso si me acuerdo.
— ¡Claro que las tire! No deberías usar esas cosas, Niko. En serio no creí que fueras tan idiota para usarlas.
— Eso es culpa tuya— no quiero hablar con Drew, aunque admito que este tema es mucho mejor que el otro. A ver si se calla con esto.
— No me culpes por esto, Alekseev— me dirige una mirada fría. ¿Es el mismo Drew? incluso uso mi apellido. Mierda, no cayó en la trampa— ¿desde cuándo las usas?
— ammm…— cuando… cuando… no me acuerdo mucho. ¿Aún estaba en Rusia?— antes de mudarnos— sí, recuerdo algo así. Antes no las usaba con frecuencia. Ahora tampoco, solo cuando las cosas se salen demasiado de control. O cuando siento que he estado demasiado jodido.
— ¿Y nunca se te ocurrió decirme?— ¿le molesta que use drogas o que no le haya dicho?
— sí, claro. Pensé en decirte “Drew, mira, a veces me compro estas cosas, son droga y te hacen sentir realmente bien, ¿Qué piensas de ello?”— Él pone los ojos en blanco— mira, ahórrate el jodido sermón ¿quieres? Lo que sea que vayas a decirme ya lo sé.
— no voy a dejar que las uses otra vez.
— claro ¿y cómo porque tendría que pedirte permiso?
— No estoy pidiendo tu permiso, te estoy diciendo que no te dejare hacerlo más— ya quiero ver cómo va hacer eso— aunque tenga que pasar todo el tiempo contigo, no voy a dejar que las tomes otra vez— le miro aburrido. Eres un jodido vampiro, no puedes estar todo el tiempo sobre mí.
— ¿y cómo porque harías eso?
— Porque te quiero— carajo. Que estúpido soy, ¿tenía que hacer esa jodida pregunta? Se me olvido por completo lo que paso con el imbécil, estaba tan entretenido burlándome de su moralidad con las drogas que me olvide de este detalle— y no voy a dejar que te destruyas de esa manera.
— Hablaste con ella ¿cierto?— ¿de qué otra manera podría saber que soy débil ante esas palabras? Estúpida Ann y su gran boca.
— Anya no tiene nada que ver— claro, grandísimo imbécil, me acabas de decir que si hablaste con ella. Arg, aun siento la cabeza pesada— Niko…
— quiero golpearte.
— eso no resolverá nada ¿Cuál es tu problema?
— ¡¿Qué te enamoraste de mi?! Maldición, Drew, te lo dije ¿no? lo único que te dije que no hicieras ¿¡Que fue lo único que te dije que no hicieras!?
— ¡Pues no es como si pudiera evitarlo! Las personas no van por ahí eligiendo de quien se enamoran, si así fuera las cosas no serian tan complicadas— contra todo pronóstico, eso me hace reír. Maldición, no debo discutir con nadie después de drogarme. Drew esta diferente, algo ha cambiado en él. Ya no hay miedo en sus ojos. Vamos, antes no me hubiera gritado de esta forma— ¡Niko!
— estás mal de la cabeza.
— eres tu quien se ríe como loco— ah, pase tanto tiempo evitando golpearle, evitando molestarme en serio con él, que ahora no puedo golpearlo.
— ¿sabes? No es divertido golpearte si no va a dolerte.
— deja de decir tonterías. Estoy siendo serio con esto. No dejare que vuelvas a hacerlo— le tiro una patada, pero no alcanzo a darle, rayos.
— Si, como no ¿y cómo vas a evitarlo?— le digo, ni que fuera a pasarse todo el tiempo conmigo. Entre lo del imbécil y los otros vampiros, ni siquiera Drew se ha librado de irse. Él también se irá— ¿pero qué mierda…? No hagas eso— le gruño, sin retroceder aun cuando aparece de la nada frente a mí. Su mano me sujeta del cuello de la camisa. Ja, ¿quiere pelear?
— voy… Voy a besarte.
— ¿Ah?— ¿Qué carajos está pensando? Vamos, una cosa es que me diga que le gusto, realmente no pasa nada con eso, pero ¿Esto? Eso de ser vampiro le está dañando mucho la cabeza o es más idiota de lo que jamás pensé— Inténtalo y vas a arrepentirte toda tu miserable existencia— le miro con desprecio. Vamos, odio que me exijan, que me digan que hacer. Y este patético intento de amenaza suyo esta espabilándome al fin.
— lo hare si vuelves a tomar esas cosas.
— Hazlo y vas a amanecer con una estaca en donde no querrás saber— Drew no me da miedo, no lo hizo ni cuando me mordió. Jamás le tendré miedo a Drew.
— ese no es el punto aquí Niko. Hare lo que sea para que no hagas esas tonterías otra vez— ahora mismo solo quiero hacer tonterías con Drew, y todas involucran hacerle sangrar.
— no lo valgo, Drew. Solo déjame y vete de una vez. La verdad no quiero lidiar con esto— le digo, dejándome caer hacia atrás. La mano de Drew en mi camisa me lo impide.
— y- ya te lo dije. No voy a dejarte, me…me gustas, ¡Y ya lo dije!
— ¿puedes al menos soltarme? Me quiero dormir— sonrió antes de darle un golpe en la cara. Me suelta— ah, eso se siente realmente bien.
— Niko…
— te ira peor si vuelves a fastidiarme— suspiro, cerrando los ojos. Siento que Drew se mueve. De entre todas las personas tenía que ser este idiota el que me encontrara drogado.
— ¿Me odias, Niko?— ¿ehh? Creo que hace tiempo me hizo una pregunta parecida.
— te odio demasiado. Eres insoportable. Y también mi amigo— cada uno se destruye a su manera.
— ah, Niko. Esto salió realmente mal. Soren jamás debió decirte— no, no debió hacerlo el imbécil.
— me pregunto si lo hubieras dicho tú mismo. Quiero golpearte otra vez— debería agradecerle a las drogas que no tenga ánimos para usarlo de saco de boxeo.
— Mejor quédate ahí— eso me hace reír.
— Idiota— aun estoy riendo, cuando siento un poco de aire. ¿Acaso me está besando? ¡El muy idiota me está besando! Me giro, y ahora si logro darle una patada en la espalda, como está inclinado, le hago caer al piso y luego le doy un golpe en la cabeza— ¿se puede saber que mierda estabas haciendo?
— ah… yo…— odio más que nunca su cara de imbécil.
— carajo, voy a matarte Drew— él suelta un chillido, como cuando atrapas a una rata. Le veo lo suficiente para saber que sale corriendo por la puerta antes de cerrarla. Joder, maldito marica. La puerta no se abre— ¡Carajo, Drew! ¡Abre la maldita muerta!
— ¡No!
— ¡Abre, con un carajo!— ¿Dónde están los putos zapatos? No puedo patear la puerta sin ellos. Golpeo con los puños, mientras jalo también— abre la maldita puerta, Drew.
— No— la jodida puerta solo se abre hacia dentro, así que el imbécil de Drew la esta sujetando.
— ¡Deja de ser tan marica y enfrenta la consecuencia de tus actos!
— ¡¿Podemos hablarlo tranquilamente?!
— ¡Voy a matarte!—es un mal momento para recordar que deje mi navaja en la otra habitación. ¿Cuántos cortes puedo hacerle antes de que se desangre?