—Niko… ¿Cuánto más vas a seguir ignorándome?— como los últimos dos días, Niko me ignora. Suspiro, sentándome lo más alejado que me permite le habitación, no vaya a ser que se le ocurra clavarme algo de pronto— no puedes hacer esto toda la vida— él solo me dirige una mirada desafiante. Ah…— ya te dije que lo siento— Niko sigue afinando la guitarra. No le puedo decir que la otra noche me pareció demasiado lindo y no pude evitar besarle. Si le digo eso, entonces sí que voy a morir…. O volver a morir.
—Drew ¿otra vez aquí? hola Niko— Él también ignora a Anya desde que dedujo que ella me había contado lo que paso antes de que llegara. Tengo un serio conflicto con eso. Niko nunca me conto eso, se que quizá no tenia porque contarme, pero ¡Es mi amigo! Debí haber sabido algo como eso.
— Anya… no hay mucho que hacer en los túneles— Isolde y Lorraine siguen cubriéndome, aunque no hay mucho que cubrir que digamos, a nadie parece interesarle que no aparezca por ahí en toda la noche.
— ¿has hecho lo que te pidió Soren?
— Sí, pero no he visto nada que pueda servir— me asusta saber lo próximo que esta todo esto. Por medio de Anya, Soren me pidió que viera alguna forma de vacía los túneles. ¿Vaciarlos? Son enormes, pero entendí cual es su punto. Separar. Soren me está pidiendo una forma de separar a los vampiros, de permitir su entrada. Siempre hay vampiros por ahí, cuidando, haciendo las rondas.
— apresúrate, Soren se esta impacientando— me estremezco, recordando la golpiza que me dio. No sé cómo puede entrar, siempre están cuidando. Sin más vampiros, es una locura entrar ahí.
— me está pidiendo demasiado. Ya he hecho todo lo que me pidió— me quejo. Claro que a comparación con lo que le pedí. Volteo a ver a Niko. No cabe duda de que si le digo lo que planeo, me va odiar. Después de enterarme de lo que pasa con él, estoy más convencido de que se convierta, aunque lo odie.
— solo es eso, nada más.
— Bien— podría preguntar a Isolde. También debería pasar más tiempo allá, pero esos debería no son importantes, no cuando quiero pasar tiempo con Niko, asegurarme de que no haga otra cosa como drogarse— ¿sabías del juego que hacen? Ese de cazar humanos.
— algo sabia. Te seguí ese día, que estuviste jugando.
— Ah ¿quizá eso funcione?— ella niega.
— Nunca juegan demasiados— tiene razón, además, sugerir un juego a gran escala seria mucho. Escuchamos los pasos de alguien acercándose, y nos quedamos callados.
— Nikolai, ¿estás listo?— Niko solo resopla, dejando la guitarra sobre la cama.
— ¿Por qué carajos tengo que ir yo?— ¿ir a donde? Le miro, pero él no me está viendo, se inclina a abrochar las agujetas de las botas. No sabía que Niko iba a salir hoy. Volteo a ver a Anya, pero ella esta tan confundida como yo.
— Niko— susurro, pero él me ignora. ¿A dónde va? Anya me toca el codo, y me señala la ventana. Antes de que llegue, Niko ya ha cerrado la puerta. Anya cae con gracia al suelo, en cambio yo... bueno, al menos caigo de pie.
— ¿Qué haces?
— Seguir a Niko— antes, habría tenido muchos peros, ahora no tantos. Niko y su padre salen un rato después, escucho a Niko quejarse.
— qué raro.
— ¿Qué?
— bueno, Niko y su padre no tienen buena relación, no sabía que… salían.
— no lo hacen. Nunca lo han hecho cuando estoy aquí— entonces esto es nuevo. Espero que no sea tan malo para Niko— vamos— Anya corre. Puedo ver su movimiento ligero. Me cuesta un poco seguirla, pero confió en ella porque yo no tengo idea de por dónde ha ido el auto del padre de Niko. Ella se detiene, y me detengo justo a tiempo para no chocar contra ella.
— ¿Dónde están?— pregunto. Ella señala el auto. Es… ¿ese es Niko? no lleva sus ropas comunes, trae un saco elegante, negro sobre una camisa blanca. Me cuesta reconocerlo. Nada de accesorios góticos. ¡Incluso su cabello esta peinado! Y trae zapatos, zapatos de verdad, y no botas militares.
— Drew, deja de babear.
— no estoy babeando.
— te estás comiendo a Niko con la mirada.
— Cállate— pero no puedo quitarle los ojos de encima. Es tan diferente al Niko que conozco, que quiero conservarle en mi memoria. Solo la expresión de inmenso fastidio que trae es lo que tiene en común con el Niko de siempre— ¿Qué están haciendo?
— supongo que vienen a cenar. Eso hacen los humanos cuando vienen a lugares como este— eso ya lo sé, es más bien ¿Por qué en un lugar elegante? Una mujer se les acerca y les saluda antes de que entren todos juntos— ¿quizá es una concertación de matrimonio?
— eso ya no se usa— le digo. No se usa ¿cierto? Vamos, eso no… ya no se hace. ¿Qué no tendría que venir una chica más joven? No puede ser una cita para matrimonio, Niko jamás vendría a una de ser así.
— ¿Por qué no te habla? Entiendo que este molesto conmigo porque te conté lo que me dijo, pero tu…
— le bese— ¿Dónde quedo mi anterior vergüenza? Supongo que mucho tiene que ver que ahora no me duele cuando me golpea. Anya comienza a reír.
— entiendo. De verdad estas muy loco por él. Estas haciendo muchas locuras por alguien que no te quiere.
— gracias por recordármelo.
— descuida, creo que a Niko le gustas más de lo que quiere admitir.
— ¿En serio?— ella sabe algo, si no, no diría algo como eso. No creo que Niko venga a mí como en las películas o las novelas, pero algo es algo.
— No lo dijo, pero te echo de menos cuando dejaste de venir. Estaba de mal humor, más que de costumbre— eso no puedo imaginarlo— además, tienes algo que él no puede resistir.
— ¿ah, no?— ¿de qué me está hablando? ¿Seguimos hablando del mismo Niko?— ¿y qué es eso que dices?— digo, con más sarcasmo del que pretendo.
— eres un vampiro.
— Ya lo sé ¿Qué tiene que ver eso con Niko?— ella me golpea la cabeza— oye.
— que a Niko le fascinan los vampiros.
— Ya sé, pero no significa que vaya a aceptarme solo por eso— ella sonríe, y vuelve a mirar al restaurant.
— vámonos, estará bien esta noche— si, no creo que Niko vaya a otro lado con ropa como esa. Anya camina tranquilamente, como si fuera una humana mas— ¿sabes? me hubiera gustado tener un amigo como tú. Eres un buen amigo.
— ¿no somos amigos?
— antes. Soren es realmente una persona increíble, pero le gusta estar solo— eso no es justificación para nada— ¿has pensado que vas hacer cuando acabe todo?
— Irme a un lugar sin vampiros— ella suelta una carcajada, más alta de lo que un humano haría.
— ese es un buen plan. ¿Te llevaras a Niko?— ah, Niko. Será muy difícil convencerle. Solo espero que no sea tan difícil. ¿Será tan fuerte? Siendo humano es fuerte, no imagino que será si esa fuerza se conserva.
— Si— ¿podré vivir cargando con la vida de Niko? si él va a morir, será por mi culpa. Y aun así, egoístamente me lo pienso quedar.
— Es una buena elección— la voz de Anya me saca de mis pensamientos— todos los vampiros son creados por que son queridos. Alguien nos quiso tanto que nos convirtió… o casi todos. Tu no.
— No quiero ser querido por Soren— me estremezco.
— el caso es que no está mal lo que haces.
— gracias, supongo— eso no me hace sentir mucho mejor, pero no pienso cambiar de opinión tampoco— ¿Qué vas hacer?
— pasear por ahí. Tú vas quedarte en casa de Niko ¿verdad?
— sí, quizá vuelva a hablarme. Me sorprende como puede fingir que esta solo— suspiro. En serio que Niko están terco.
Niko regresa como tres horas después, azotando la puerta. Su cabello ya no está peinado, le sigo con la mirada, como arroja el saco y se sienta en la cama para quitarse los zapatos también. No se ve molesto.
— emm…
— mi viejo va a casarse otra vez.
— oh, eso es genial Niko— el me dirige una mirada que me dice que no está pensando lo mismo que yo— hey, eso es algo bueno— me da la espalda, y luego le veo ir al baño con un montón de ropa.
— Esta mañana me dijo que iríamos a cenar, me obligo a ir— eso debió gustarle tanto como yo— ¿sabes que no tenía idea de que había estado saliendo con esa enfermera? La que me encontró robando.
— ah…— no la conozco, pero recuerdo que gracias a ella no había pasado a ser un escándalo.
— no me molesta que lo haga, o sea si mi viejo quiere casarse otra vez está bien— la puerta del baño se abre, Niko vuelve a ser él— pero no creo que pueda jugar a la familia feliz— ah, eso es. Claro, esa mujer será la madrastra de Niko.
— no debe ser tan malo.
— no tengo ni puta idea de que esperar. Ella tiene una hija, llego poco después.
— Sigo sin pensar que sea malo— Niko sonríe, una sonrisa burlona, esta burlándose de mí.
— para ti solo es malo matar a alguien para beber su sangre.
— Claro que no, también hay muchas otras malas— respondo, indignado. Niko ríe. No entiendo del todo a Niko, siempre ha sido así, voluble. Hace unas horas no me hablaba, y ahora parece que nada hubiera pasado. ¿En realidad le importo más de lo que parece? Quizá en serio, Niko necesita un amigo.
Me siento egoísta con mis sentimientos.
— ¿Cómo puedes seguir vivo?... un momento, ya no estás vivo.
— que gracioso. Ahora es culpa mía por ser como soy.
— Exacto— no, no podría culpar a Niko por todo lo que me ha pasado. Seguramente si él supiera todo lo que he hecho, me daría una golpiza peor que la de Soren. Pensar eso me hace sonreír— ¿y cómo es tu nueva hermana?
— ¿para qué quieres saber? Solo es una chica.
— en serio Niko ¿estimas a alguien?
— ¿mi guitarra y mi perro cuentan?
— No— reímos otra vez— vamos, Niko ¿ni siquiera yo?— ah, no debí decir eso. Estoy preparado para salir corriendo otra vez, pero Niko no se mueve de la cama. Me dirige una mirada larga, que no puedo entender. Sus ojos parecen más oscuros de lo normal.
— ¿alguna vez has sentido la necesidad de molestar y golpear a alguien solo porque te parece divertido?
— No— ¡claro que no! eso no está bien de ninguna manera. Niko se pone a reír bajito.
— eso pasa cuando estamos juntos. Me divierto molestándote— ni siquiera puedo responder a eso ¿Qué clase de explicación es esa? ¡No tiene nada de sentido!
— eso no tiene sentido.
— Siempre tengo ganas de golpearte y borrarte la sonrisa estúpida de tu cara— me lo dice tan tranquilo, que no me cabe duda de que es verdad— ¿te sorprende?
— me das miedo, Niko.
— Sí, debería— un momento ¿acaso está intentando asustarme para que me largue? Le observo, entrecerrando los ojos. Él no parece prestarme atención.
— Entonces fue bueno que me convirtieran en vampiro ¿no?— me mira, parece divertido ahora. Incluso hay una tenue sonrisa en sus labios. Me es imposible no querer besarlo cuando le veo así.
— Detente ahí, idiota— ¿en qué momento me levante?— si te acercas más, esta vez no importa que tan rápido corras, vas a sufrir.
— Ya entendí, no ocupas ser tan dramático— me vuelvo a sentar. Está claro que Niko aún recuerda lo que paso la otra noche. Ah, no debería hacer cosas como esas otra vez, Niko realmente…— no es para tanto— refunfuño. Al fin y al cabo solo es un beso. No es que hubiera hecho algo malo.
— ¿Qué?
— nada.
— ¿acaso dijiste que no es para tanto? Me beso un marica, si no te patee el trasero fue porque saliste corriendo como rata.
— oye, no deberías hablar así— él rueda los ojos y se gira— en serio, eso suena muy homofóbico.
— ¿Y? eres el único que se queja. No lo hagas de nuevo— ojala fuera tan fácil hacerlo. No puedo controlarme, ni siquiera me doy cuenta de lo que estoy haciendo. Supongo que obedezco más a mi instinto que a mi mente.
— ¿y que si de pronto quiero hacerlo otra vez?
— ¿quieres morir?
— Ya estoy muerto— me encojo de hombros— tal vez… pueda hacer…— no, es una mala idea seguir con esto. Niko está muy calmado hoy como para poner a prueba su temperamento.
— ¿estás diciendo algo?
— no, pensaba en que nunca te he visto salir con alguien, en forma romántica.
— claro, soy el puto dios del amor en persona. Realmente no me interesa salir con nadie, ni estar con nadie. Contigo no tengo opción, en serio serias ceniza si no te hubiera encontrado aquella noche.
— claro que no— le observo. Es obvio porque las personas no se le acercan mucho, cualquier chica normal saldría huyendo. Ni hablar de los chicos. Por supuesto, aunque Niko sea un poco como su apariencia dice, en realidad no es tan malo— ¿Por qué no has tenido novia?
— ¿quieres que tenga una?
— no.
— ¿o estas insinuando que solo por eso seré como tú?
— ¡No!— No del todo, pero no se lo diré— mira, solo estaba pensando eso— no sé qué hubiera hecho si Niko hubiera salido con alguna chica— creí que… no ibas a hablarme más después de que te enteraras.
— no iba hacerlo. Pero carajo, siempre estás aquí, poniendo caras idiotas y usando esa voz como de perro apaleado. Además, he pasado mucho aguantándome las ganas de golpearte, que es automático.
— ¿eh? ¿Entonces no estás enojado?
— ¡Claro que estoy molesto! Es asqueroso que me besaras.
— ¡Oye! No es asqueroso.
— lo es.
— ¡Hare que cambies de opinión!— chillo, Niko me mira, igual de indignado que yo, pero hay un ruido afuera, en la casa. Como si su padre se hubiera levantado. Niko también lo oye, porque no me dice nada.
— imbécil, en serio si sigues con esas estupideces…
— no son estupideces. Ya me canse de que siempre estemos así. Me gustas, y tú realmente eres imposible, nada te hace feliz, no sales con nadie, y tienes una horrible tendencia a ser violento.
— ¿pero qué mierda…?
— ¿tan malo es que alguien este enamorado de ti? Da gracias al menos de que le importas lo suficiente a otro ser vivo en este mundo para que se preocupe por ti.
— estás hablando de Mishka, ¿cierto? Tu no calificas precisamente en “ser vivo”
— ¡Niko!— siseo.
— no vas a obligarme a nada. Habla todo lo que quieras, ni siquiera vale la pena golpearte por eso.
— Deja de ser tan indiferente— me hace una seña grosera con la mano— Niko…
— Si tanto te molesta, lárgate, nadie te obliga a quedarte— pero que terco, en serio ¿Cómo pude ser tan paciente? Es como intentar razonar con alguien que no habla tu idioma.
— No voy a irme, ¿entiendes?— me observa, sin expresión alguna— voy a quedarme todo el tiempo que quiera, aunque tú no quieras. Aunque me digas cosas crueles, o me golpees, ignores o cualquier otra cosa que se te ocurra. Voy a quedarme— hablo lento, claro— quizá no pueda hacer que te enamores de mí, pero aun así, voy a quedarme.
— entonces…
— la única forma en que te libraras de mi es que me convierta en ceniza.
—… inspirador, realmente inspirador, Drew— le veo acostarse, darme la espalda y taparse con una sábana. Arg, me siento demasiado alterado por su culpa, no me puedo quedar quieto.
— Me voy a quedar contigo— se me escapa. Ah, eso… espero que no entienda lo que quise decir con eso, que solo lo interprete como que no me voy a ir, y no como que me lo quedare cuando él también sea como yo.
—… has cambiado.
— ¿Qué?
— que no eres el mismo idiota que tenía miedo de todo. Estás diferente— me habla aun dándome la espalda. Ah, lo noto. Sabía que después de todo lo que he pasado, no sería el mismo, vamos, me siento diferente.
— Aún tengo miedo, pero me asustan otras cosas— como que te hagan daño por ejemplo— creí que no era notorio que había cambiado.
— te conozco. Nunca hablas de esta manera, pienso que es genial, pareces un poco más vampiro— eso me hace sentir un cosquilleo. ¿Anya tenía razón?— pero de todos modos voy a golpearte por decirme esas idioteces.
— ¿ah?
— que voy a patearte el trasero cuando menos te lo esperes, idiota. Ahora déjame dormir— refunfuña, y le veo acomodarse mejor en la cama. Ah en serio esto es menos complicado de lo que pensé. Que Niko no esté golpeándome o intentando clavarme un cuchillo ya es un gran progreso.