Capítulo 10.- Tu y yo
Seiya pidió unos días libres en el hospital, quería pasar un poco de tiempo en casa con su hijo, además era en serio que quería dormir, se sentía exhausto y el ahora saber que su hijo estaba fuera de peligro por el momento, si había levantado sus espíritus y cumplió lo que le había dicho a Kanon, dos días pasó como fantasma en la casa usando pijama y moviéndose solo para comer, cuando se acordaba de comer, Kanon pasó más pendiente de Max, que en teoría podía volver a la escuela pero Seiya no lo quería mandar aún, así que se dedicó a jugar con él, hicieron galletas juntos, jugaron juegos de video, leyeron cuentos, en fin… los tres tuvieron tiempo de calidad juntos, como no habían tenido por mucho tiempo
- Hey… quieres una galleta? – Kanon había entrado a la habitación de Seiya que estaba dormido, pero a criterio de Kanon ya debería levantarse, así que le llevó una galleta para tentarlo
- Mmmmm… - Seiya se volteó y abrazó su almohada, el castaño estaba usando pantalones flojos de pijama y una camiseta sencilla, estaba destapado pero extremadamente cómodo
- Arriba flojo, Max quiere hacer un pic Nick, pero no lo queremos hacer sin ti, yo apoyo que duermas pero nos sentimos solos sin ti, vamos Seiya no me ignores – Kanon estaba moviendo suavemente a Seiya para despertarlo, pero el castaño no le estaba tomando en cuenta, así que Kanon continuó: - Te compro un helado si te levantas
- Mmmmmm…
- Te compro un pretzel?
- Mmmmm…
- Ok., ok., si no te levantas, te voy a dar de nalgadas – Kanon había estado acariciando la parte baja de la espalda de Seiya, pero al decir esto, su mano bajó hasta el redondito trasero del castaño y lo acarició antes de palmotearlo suavemente, Seiya saltó indignado y eso hizo reír a Kanon que levantó las manos y dijo en señal de paz: - Te lo advertí, no me digas que te agarré desprevenido
- Mano floja, eso no se hace Kanon – dijo Seiya con una sonrisa pícara en el rostro
- Qué no se hace?, esto? – Kanon le volvió a palmotear el trasero a Seiya, el castaño se sentó de golpe en la cama pero no pudo hacer mucho porque Kanon lo jaló de las piernas y prácticamente se le lanzó encima, Seiya reía y se contorsionaba en la cama tratando de escapar del agarre de Kanon que reía también y lo trataba de sujetar
- No no… suéltame Kanon… no… - Seiya continuaba riendo y trataba de someter a Kanon pero no podía, el peliazul era más grande que él y no le dejaba moverse mucho
- Hey… eso es trampa – Kanon se quedó quieto pero sonreía maravillosamente ante la osadía de su castaño, Seiya había metido la mano en el pantalón de Kanon y sostenía su miembro, eso logró el truco y dejó quieto al peliazul que no se esperó esto de Seiya
- En la guerra y en el amor todo se vale
- En el amor?, me amas pegasito?
- Tonto…
Seiya sacó su mano de los pantalones de Kanon e iba a moverse pero no lo logró, ellos se estaban mirando a los ojos y poco a poco dejaron de reír, el castaño bajó la mirada pero Kanon le levantó el mentón con la mano para que lo mire, le acarició la mejilla con el pulgar y lentamente, muy lentamente se acercó hasta rosarle los labios con su boca
Fue solo un roce, un muy leve roce, pero eso fue suficiente para desarmar las defensas de Seiya, Kanon sintió como el castaño relajó el cuerpo y cerró los ojos dejándose llevar, en ese momento sus labios se volvieron a unir en un muy suave beso, sus labios se movían como si fuera la primera vez que se besaban y un sentido de emoción los embargó a ambos, Kanon se acomodó de mejor manera en la cama y acarició suavemente los costados de Seiya que se estremeció entero, este beso estaba cargado de sentimiento porque Seiya sintió muchas cosas todas revueltas mientras Kanon lo besaba
El beso se fue profundizando cuando el castaño abrazó al peliazul y lo atrajo hacia su cuerpo, él estaba recostado sobre su espalda y no se inmutó cuando Kanon metió la mano entre sus ropas y le empezó a acariciar el pecho, Kanon sabía perfectamente cómo tocarlo, cómo acariciarlo para hacerle olvidar hasta de su nombre, sabía cómo estimular sus puntos sensibles para hacerlo gemir sin control, sabía amarlo, simplemente sabía cómo amarlo y eso es lo que estaba haciendo en estos momentos, paseaba delicadamente los dedos por su suave piel, rozaba muy muy ligeramente sus pezones logrando endurecerlos y complacido sintió como el corazón del castaño latía con fuerza mientras lo besaba con pasión y lo abrazaba con fuerza
Kanon estaba acomodado entre las piernas de Seiya pero no le estaba recargando su peso, pronto sus labios reclamaron el cuello del castaño mientras sus manos levantaron la camiseta que estaba usando, Seiya lo facilitó todo cuando Kanon tiró de la prenda sacándosela, para luego llenar su cuello y pecho de besos, Seiya tenía los ojos fuertemente cerrados y se contorsionaba ligeramente en la cama, gemía pero trataba de no hacer ruido, enredaba sus dedos en la azulada cabellera mientras Kanon lamía y chupaba sus pezones haciéndole ver estrellas con los ojos cerrados
- Lo quieres hacer Seiya? – Kanon preguntó mientras bajaba por el cuerpo del castaño y estaba besando su bajo vientre
- Mmmmmm…
- Ok., voy a tomar eso como un si – Kanon tiró de los pantalones del castaño dejándolo desnudo en la cama, pasó su mano desde su vientre, por su pecho entero, por su cuello hasta que finalmente le acarició la mejilla con el pulgar y le dijo en un tono muy sensual: - Abre los ojos – el castaño abrió los ojos y Kanon se quitó la ropa muy lentamente dejando ver su esculpido pecho, Seiya sonrió cuando se incorporó un poco y acarició una pequeña marca que tenía Kanon bajo el pezón derecho
- Recuerdas ese día? – preguntó el castaño sin quitar los ojos de la pequeña cicatriz, Kanon se había separado un poco para poder sacarse los pantalones
- Cómo podría olvidarlo, ese fue el primer día que me dijiste que me amabas, botaste a Aioria y a Aioros de la casa, cociné para ti, abriste una botella de vino y me apuñalaste con ella – Kanon sonrió muy divertido cuando dijo esto, Seiya abrió la boca e iba a responder algo pero no pudo hacerlo porque Kanon lo tomó de la cintura y lo acomodó sobre él buscando sus labios y fundiéndose en un muy apasionado beso
- No te apuñalé con la botella… eres un exagerado… - Kanon estaba sentado en la cama y Seiya estaba sentado sobre él acomodado con las piernas abiertas a sus costados, el peliazul estaba muy ocupado besando su cuello y acariciando su espalda en esos momentos
- Ok., no me apuñalaste, pero si me arrancaste la ropa e hiciste todo lo que quisiste conmigo en la cocina
- No no no, así tampoco fue – Seiya se separó un poco y sintió algo moverse en su interior al ver los ojos azules de Kanon, su mirada siempre tenía este efecto en él, se sentía calmado pero ansioso a la vez, se sentía deseado, amado, nadie lo tomaba en cuenta como Kanon si lo hacía, nadie lo había amado como Kanon lo había amado, nadie lo entendía como él, nunca hubo nadie como él en su vida
- Si fue… me sacaste la camisa y te veías tan adorable todo angustiado por la sangre, el roce de tus manos en mi pecho, tu aliento tan cerca del mío, tu voz tan preocupada, tu… todo tu… ese día fue espectacular – Kanon tomó la mano de Seiya y besó cada uno de sus dedos mientras hablaba y luego puso su mano sobre la cicatriz de su pecho, acarició su mejilla con el pulgar y lo besó en los labios otra vez, ese beso fue muy dulce, como había sido el beso aquel día en el que Kanon había hecho exactamente lo mismo
- No solo ese día – respondió Seiya con un susurro
- Claro que no, todos los días contigo tenían algo de espectacular
Kanon apretó a Seiya contra su cuerpo y se besaron con pasión, Seiya sentía que Kanon lo sostenía como si fuera a romperse, como si fuera algo precioso en sus manos, como si fuera la primera vez o la última vez, y todo esto era por demás intenso, su piel hormigueaba y su deseo lo estaba consumiendo, quería a Kanon ya, lo necesitaba en ese momento, así que bajó sus manos y empezó a acariciarlo aunque no tuvo que hacer muchos esfuerzos porque el peliazul estaba más duro que una piedra
- Despacio pequeño, he esperado este momento por mucho tiempo – susurró el peliazul besando y lamiendo el cuello de Seiya
- Ah si?
- El peor error de mi vida fue el haber dejado tu cama, ahora que estoy en ella, quiero hacer que cada momento cuente, así que… despacio que tenemos prisa – Kanon juntó su frente con la de Seiya y frotó sus narices, Seiya sonrió, ese era un gesto muy suyo que no habían compartido en mucho tiempo, el castaño lo abrazó y lo besó con pasión
Lo mejor del sexo siempre fueron los juegos previos, o por lo menos así era para Seiya, y Kanon era el rey de los juegos previos, porque usualmente dejaba a Seiya como pudín en el cama antes de poseerlo, y esta vez no fue la excepción, Kanon no solamente recorrió y llenó de besos y caricias su cuerpo, no… lo que hizo fue venerarlo de tal manera que Seiya solo podía gemir en respuesta, sus sentidos se nublaron, la sensibilidad en su cuerpo aumentó como nunca antes y cuando Kanon finalmente lo penetró, Seiya gimió en completo éxtasis
El peliazul cambió de posiciones en la cama dejando a Seiya sobre él, sentado sobre sus caderas, sus respiraciones eran agitadas en ese punto, Kanon acarició sus muslos y susurró:
- Vamos Pegasito… muévete… hazme el amor…
- Te gusta tenerme arriba verdad? – Seiya sonrió al preguntar esto y puso sus dos manos en el pecho de Kanon cuando empezó a mover las caderas, el peliazul se incorporó para poder besarlo en los labios y dijo:
- Me encanta como te mueves, así… despacio… así… Seiya…
- Kanon…
Kanon lo hizo suyo en cuerpo y alma, lo tomó hasta que Seiya pidió clemencia y lo llamó por su nombre varias veces en éxtasis, la habitación entera se llenó de gemidos, jadeos y palabras de amor, los cuerpos se movían sincronizadamente en la cama dándose placer como solo ellos sabían hacerlo, alcanzaron el cielo con las manos varias veces, estuvieron inspirados como pocas veces habían estado antes y cuando nuevamente el momento cumbre se acercaba, Kanon besó a Seiya en los labios, el cuerpo del castaño se empezó a contraer y se estremeció entero cuando llegó con fuerza al orgasmo, Kanon lo siguió poco tiempo después y ambos quedaron exhaustos en la cama
- Te duele la pierna? – Kanon preguntó algo preocupado porque Seiya la estaba flexionando levemente
- Tú y tus poses extremas me van a matar – Seiya respondió esto con una sonrisa, Kanon se incorporó, tomó la pierna de Seiya suavemente y empezó a masajearla
- No es tan extrema, es la falta de práctica mi vida, necesitamos ponernos en forma tú y yo, pasamos mucho tiempo en abstinencia
- Eso no es cierto y lo sabes – respondió Seiya poniendo una almohada bajo su cabeza, no sonaba molesto ni mucho menos, pero era un hecho que ambos tuvieron otras parejas sexuales durante su separación, no era conveniente ignorar esto, su relación se había basado en la confianza siempre y eso no tenía razón para cambiar
- Sorrento no cuenta, él era… no sé… bastante aburrido
- No quiero saber los detalles de tu relación con Sorrento, no quiero saber nada de él, ni me lo nombres por favor – Seiya retiró su pierna del agarre de Kanon pero el peliazul la volvió a tomar y siguió masajeándola al decir:
- Sorrento no era importante, él lo sabía, yo lo sabía, todos lo sabíamos… no representó nada importante, solo duró un poco más de lo que yo esperaba, él quería que funcionara pero… no… no funcionó
- No te creo, si eso era así, él no hubiera venido aquí cuando tú te demorabas en regresar a Asgard, no hubiera querido forjar una relación con Max, no nos hubiera aguantado a todos nosotros, no creo que no haya sido nada
- Él quería recobrar lo que alguna vez tuvimos pero… eso era algo imposible
- Ah si?, por qué?
- Porque el amor de mi vida eres tú
- No no no, a sus ojos, yo soy el otro, yo soy el que se metió en la relación de ustedes en primer lugar, eso me lo dijo muy fuerte y claro la primera vez que vino aquí – dijo Seiya y sonaba algo dolido por ello, y lo peor de todo era que las palabras de Sorrento eran ciertas, Kanon había estado por casarse con Sorrento pero lo pospuso todo cuando vino a Grecia y ellos se relacionaron, Seiya no lo supo en su momento pero… él si fue “el otro” en aquella relación, algo que Sorrento nunca había podido perdonar aparentemente
- Mi amor… Sorrento y yo salimos por años antes de que yo viniera a Grecia, nos íbamos a casar porque era lo lógico que había que hacer, pero no fue su culpa que el conocerte cambiara todas nuestras vidas, me enamoré completamente de ti, así como tú de mí, lastimosamente Sorrento es una víctima del camino y las circunstancias, así como lo es Shun
- Shun?
- Si… Shun – Kanon miró significativamente a Seiya cuando dijo esto, al castaño se le unió el cielo con la tierra cuando preguntó:
- Tú lo sabías?
- El hecho de que no haya dicho nada, no significa que no tenga ojos, además Max te vio besándote con él en la cocina y me lo contó en secreto, pero no te estreses que era lógico suponer que algo así pasaría al él venir a esta casa – el tono con el que Kanon hablaba era por demás tranquilo, hasta podría considerarse como algo impersonal
- Tú lo sabías y no te molesta?
- No es que no me moleste, nosotros estábamos separados en ese punto y mal puedo yo juzgarte por ello, si pudiera volver el tiempo y detenerte para que no lo hagas lo hubiera hecho aunque… pensándolo bien… no…
- No?
- Es bueno que pongas un fin a ese capítulo de tu vida, era un asunto pendiente, asumo bien?
- En parte si – admitió Seiya con un suspiro
- Ok., ya acabaste de jugar con tu asunto pendiente?, o vas a jugar un poco más con él?
- Qué harías si quisiera jugar un poco más con él?
- La paciencia no es mi fuerte pero… esperaría que te cansaras de jugar con ese niño, porque cuando te canses de él, y yo sé que lo harás, volverás a mí, a mis brazos, a mi cama, volverás a mí porque así como tú eres el amor de mi vida, yo soy el amor de la tuya, tú me perteneces así como yo te pertenezco, el hecho de que nos hayamos perdido en el camino, no significa que no nos podamos volver a encontrar y estar juntos de a de veras esta vez – Kanon sonrió y acarició el muslo del castaño significativamente
- Si quieres que te diga la verdad, no me duró mucho el juego y ya no estoy jugando con él
- Ah sí? – Kanon arqueó una ceja al preguntar esto, él sabía que Seiya terminaría todo eventualmente con Shun, pero no pensó que lo haría tan rápido
- Si… no fue lo que yo… ya no fue… solo dejémoslo en que no fue – Seiya no sabía cómo explicarse pero Kanon lo entendió, porque sonrió y dijo:
- Buen chico, dame un beso - Seiya se incorporó y abrazó a Kanon jalándolo hacia la cama mientras lo besaba profundamente en los labios, la pareja se volvió a acomodar en la cama y se fundieron en un nuevo encuentro lleno de pasión y amor
Max estaba sentado en la mesa de la cocina y pintaba su libro de colorear, Aioros estaba sentado a su lado y leía un libro de anatomía, Aioria y Shun venían caminando por el pasillo, el castaño acababa de salir de su turno en el hospital y estaba algo cansado, Shun había terminado temprano y había aprovechado el tiempo libre para venir y casa, su idea era hablar con Seiya, no había podido hacerlo en estos últimos días, y eso lo tenía intranquilo, Kanon estaba siempre en casa porque trabajaba desde su computador portátil y eso lo complicaba todo, Aioria mientras caminaba se sacaba los lentes de sol que estaba puesto, al ver al pequeño sonrió y se agachó para abrazarlo porque vino corriendo a sus brazos
- Hey bichito, cómo estás? – Aioria besó al pequeño en la mejilla y lo puso de nuevo en el piso
- Bien tío Aioria, hola Shun, estoy pintando, quieren ver?
- Claro, y dónde anda tu papá Seiya? – Shun acarició la cabecita al niño que le sonrió y tomó su mano para jalarlo también hasta la mesa en donde estaba Aioros que los saludó con una seña, la que los dos mayores correspondieron
- Está en la terraza – el niño señaló a Seiya que estaba apoyado en la pared y tenía un jarro en las manos, vestía pantalones flojos de pijama y una camiseta sencilla, se notaba que se había levantado de la cama hacía no mucho porque estaba despeinado pero al parecer esa era una de las cosas que menos le importaba en la vida, se veía por demás cómodo y relajado mientras conversaba tranquilamente con Kanon que igual vestía algo muy cómodo y sencillo, y también tenía un jarro en las manos, Shun frunció el ceño al verlo, Seiya si estuvo mucho más tranquilo ahora que su hijo estaba mejor, pero… por qué sonreía así?, no lo veía tan relajado desde su tiempo juntos en Japón, Seiya tenía esa sonrisita de estúpido que ponía luego de… hacer el amor… pero no… o si?
- Ya almorzaron? – preguntó Shun mirando su reloj, era temprano para salir pero tarde si aún no habían comido, él no había almorzado aún y se moría de hambre
- Nosotros ya, Seiya y Kanon aún no, es que recién bajan
- Mi papi estaba durmiendo – dijo Max inocentemente, Aioros sonrió y dijo:
- Si, estaba… durmiendo
- Mmmm? – Aioria preguntó sin realmente preguntar nada, Aioros respondió:
- Kanon lo estaba ayudando a dormir
- En serio?
- Así parece – respondió Aioros sin decir nada más, él solo sabía lo que escuchó de la habitación de arriba, pero no sabía en que habían quedado ellos, solo que Seiya bajó con una sonrisa de satisfacción única y ahora estaba hablando con Kanon en la terraza
Shun lo miró y se le fue el alma al piso, sus temores eran ciertos, pero eso no podía estar pasando, en serio Seiya se acostó con Kanon?, cuando su hijo estaba en casa?, despierto y pintando con Aioros???, en serio???, pero el muchacho de ojos verdes no pudo continuar con sus pensamientos porque en medio de su charla, Kanon tomó a Seiya entre sus brazos y lo besó como si no hubiera un mañana, Seiya lo abrazó y profundizaron el beso, Max los miró, sonrió y siguió pintando su libro. Shun los miró y casi se le va todo el aire de los pulmones cuando el beso se rompió pero ellos no se separaron, sino que juntaron sus frentes y rozaron levemente sus narices, luego sonrieron, Aioros arqueó una ceja, no los había visto así en mucho tiempo, vaya…
Kanon lo tomó de la mano y juntos entraron a la cocina, Kanon saludó a los recién llegados y se sentó junto a Max, Seiya igual los saludó pero fue directo al refrigerador, sacó algunas cosas y preparó rápidamente un snack para ambos, Max estaba sentado en las piernas de su padre y le estaba mostrando sus dibujos pintados, Seiya se acercó a ellos y puso el plato que tenía un sándwich y ensalada junto al peliazul, que pasó su brazo por la cintura de Seiya y lo atrajo a su cuerpo, metió la mano por su camiseta y le acariciaba suavemente la espalda, Shun no necesariamente lo soportó por mucho tiempo y amablemente se disculpó y salió de la casa, salió al jardín y caminó un poco por los árboles, se arrimó a uno, encendió un cigarrillo y cerró los ojos mientras lo fumaba, los abrió y se fijó en Seiya y en su sonrisa, era una sonrisa sincera que le llegó al alma, recordó cuando Seiya solía sonreírle de la misma manera a él, pero… las cosas ya no eran así, era Kanon… maldito Kanon…