Capítulo 3.- Despecho
Shun corrió por el pasillo pero obviamente no pudo alcanzar a Seiya al que del ventanal vio correr por el jardín a toda velocidad, el peliverde no había ni alcanzado a ponerse los boxers y desnudo como estaba miraba por la ventana al castaño que se perdió en la calle, Shaka si se había puesto una bata y llegó hasta Shun, le dio una bata también y le preguntó:
- Por qué no me lo dijiste?
- No somos exclusivos, no somos novios, no somos nada, solo… solo nos acostamos de vez en cuando, no es nada serio – respondió Shun en el tono más impersonal que pudo
- Seiya sabe y está consciente de lo que me estás diciendo? – Shaka frunció el ceño al preguntar esto
- Claro que lo sabe – respondió Shun en un susurro, pero la culpabilidad que sentía no pudo enmascararse, Shaka se dio perfecta cuenta de lo que estaba pasando
- Eso no fue lo que yo vi – Shaka siguió a Shun hasta la habitación, su aprendiz estaba claramente consternado por lo que había pasado
- Shaka por favor, mis asuntos con Seiya son mis asuntos con Seiya, no te incumbe lo que pase entre nosotros
- Si me incumbe, si me lo hubieras dicho… lo que pasó esta noche no habría pasado – Shaka estaba molesto y no lo podía ocultar
- No Shaka, olvida a Seiya, yo hablo con él mañana, las cosas son como te estoy diciendo, entre él y yo no hay nada, olvidemos que esto pasó, solo… olvidémoslo… - Shun abrazó al rubio y buscó sus labios, Shaka no estaba muy convencido que digamos pero se dejó besar y luego la pareja regresó a la cama en donde continuaron lo que dejaron a medias
Seiya corrió por lo que le pareció horas, cuando ya no pudo correr más se apoyó en una pared, puso sus manos en sus rodillas y trató de recuperar el aliento, el sol ya estaba saliendo cuando el castaño entró a una cafetería y ordenó un jugo con un pedazo de pastel, la tristeza en su semblante era en verdad notoria, se quería morir en este punto, simplemente se quería morir…
El día en la mansión Kido pasó sin pena ni gloria, los muchachos estaban por la casa porque todos habían terminado sus exámenes y en teoría podían dedicarse a descansar, dos gloriosas semanas antes de que empiece el nuevo ciclo, todos estuvieron por la casa a excepción de Seiya, el joven castaño no apareció el día entero, Shyru lo había llamado varias veces pero al parecer su camarada tenía el teléfono apagado, Shun también lo había llamado pero no… no obtuvo respuesta, Aioros estuvo molesto primero pero luego preocupado porque Seiya había hecho planes con él y con su hermano para pasar el día, pero Seiya nunca apareció por la casa, ni siquiera llamó
En la tarde, Ikky se fue a uno de los bares que frecuentaba con sus compañeros de universidad, era un bar por demás divertido, había una barra muy bien surtida, un par de mesas de billar, algunos blancos para jugar dardos, un toro mecánico, era el típico bar para universitarios que vendía cosas de picar, cervezas, cocteles y tragos. El muchacho de cabellos azules estaba pasándola bomba con sus compañeros de curso cuando vio a Seiya que estaba jugando billar con unos muchachos de la facultad de Agronomía, Ikky no los había tratado y no sabía que Seiya fuera amigo suyo, así que, con cerveza en mano se acercó al castaño a preguntarle:
- En dónde te metiste el día entero pony?, papá Aioros estaba molesto
- No me digas pony, en serio estaba molesto Aioros? – Seiya estaba claramente contrariado, pero la mención de su maestro pudo más en él
- Solo un poco, nos dijo en el almuerzo que habías hecho planes con él y que brillabas por la ausencia, en que te encuentras pony?, por qué plantaste a tu maestro?
- Ikky… no quiero discutir contigo, por favor déjame en paz – Seiya iba a responder algo pero lo pensó mejor, no tenía que desquitarse con Ikky sus broncas, el fénix no tenía la culpa de que su hermano sea un estúpido
- Wow Seiya, qué te hicieron amigo?, estás bien?, a quién tengo que matar?, tu solo dímelo y lo hago polvo – todo el tono fresco que Ikky tenía se le fue y salió a relucir su lado protector, eso hizo sonreír a Seiya que ladeó la cabeza y respondió:
- No tienes que matar a nadie, pero puedes invitarme una cerveza
- Claro… me vas a contar por qué tienes esa carita? – Seiya dejó el taco sobre la mesa de billar, iba a perder la partida de cualquier manera así que fue con Ikky hacia una de las mesas del fondo del bar, el peliazul miraba a su amigo con preocupación, muy pocas veces había visto triste a Seiya, menos veces lo había visto molesto o contrariado, su estado era extraño por decir lo menos
- Es la única que tengo Ikky – Seiya trató de sonreír pero no logró convencer a su amigo que solo le hizo una mueca pero con una mano llamó a una de las camareras
Ikky y Seiya bebieron cerveza primero, pero luego pasaron a beber tequila, el castaño había dicho que se quiere hacer tarro de borracho y a Ikky le había parecido una idea fantástica, así que los dos amigos bebieron, cantaron, lloraron, rieron y bebieron más, hasta en verdad perder todo control y conocimiento
***
Un portazo despertó de un salto a un joven castaño que lució por demás desorientado y perdido, no sabía en donde estaba, con quién estaba, o por qué estaba desnudo, lo único que pudo ver apenas abrió los ojos era luz cegadora en sus ojos que no le dejaba ver mucho a su alrededor, un almohadazo le cayó en la cara y luego otro portazo sonó
- Qué diablos?... Ikky?... dioses… - Seiya se volteó y vio a su peliazul amigo a su lado, él también estaba desnudo y lucía igual de desubicado, el castaño lo vio y se dejó caer en la cama cubriéndose con una almohada
- Pony?, qué pasó? – el fénix se movió lentamente en la cama, aún tenía música en la cabeza y estaba mareado
- Recuerdas algo de anoche? – Seiya se incorporó en la cama y miró a Ikky que tenía los ojos cerrados y un brazo sobre su cabeza
- Recuerdo partes solamente, Hyoga llegó al bar y nos trajo, recuerdo que tu querías comer uvas y yo te dije que tenía uvas aquí, así que vinimos y…
- Comimos uvas, luego… tuvimos sexo Ikky? – Seiya se acordaba un poco con lo que Ikky decía, de lo que estaba seguro era que ellos dos se estaban comiendo a besos en el bar, siguieron con lo mismo en la mansión cuando llegaron, en la habitación, se habían reído mucho al tratar de sacarse la ropa porque Seiya se había caído aparatosamente y se había quedado tendido en el suelo, hasta ahí se acordaba y daba razón
- No… si… creo que si… cómo está tu culo?
- Está fantástico – respondió Seiya con furia
- Entonces no lo hicimos – Ikky se encogió de hombros, suspiró y se acomodó de mejor manera en la cama, él no le veía el problema aparentemente
- Estás seguro?, cómo está tu culo?
- Mmmm… invicto creo yo, pero no te preocupes Seiya, estábamos tan borrachos que no creo que lo hayamos podido hacer, dudo que se me haya podido parar, nunca he podido hacerlo cuando me he pasado de copas, lo has hecho tu borracho?
- No… creo que no…
- Entonces no te estreses, lo podemos intentar esta noche mientras estemos sobrios – Ikky sonrió ante el prospecto pero Seiya le dio un almohadazo en la cara al decir:
- Yo ni muerto me acuesto contigo
- Preso por mil, preso por dos mil, ayer comprobaste por tus propios medios que yo beso muy rico pony y lo que te falta de comprobar es que hago el amor como uno de los dioses, tú te lo pierdes si no quieres
- No quiero acabar nuestra amistad Ikky, mejor dejamos las cosas así
- Como quieras, pero ya sabes… si quieres alguna cosita, aquí tienes este pechito – Ikky sonrió todo provocador lo que hizo sonreír a Seiya que meneó la cabeza y se levantó de la cama, fue al baño, se vistió y fue a su habitación, lo que el castaño necesitaba era un baño en tina o algo
Una vez dentro de la bañera y sumergido en burbujas, la realidad le pegó a Seiya y le pegó muy duro, las imágenes de lo que presenció la noche anterior se agolpaban en su mente y le destrozaban el alma una vez más, Seiya quería ahogarse en la bañera, eso era lo que quería en esos momentos, la noche anterior había tratado de ahogar sus penas en tequila, pero las desgraciadas sabían nadar aparentemente, mierda…
Una vez fuera de la tina, Seiya se vistió y bajó, no quería comer nada porque tenía el estómago revuelto pero si le apetecía un jugo o algo así, dónde estaba Shyru cuando lo necesitaba???, él y sus remedios mágicos aprendidos de Docko era lo que Seiya necesitaba ahora, así que fue por la cocina primero para luego ir al vivero, sin duda su amigo estaría en el vivero, pero… al bajar a la cocina, Seiya vio a Shaka que estaba sentado en una de las sillitas del desayunador y tenía a Shun sentado sobre sus piernas, la pareja se besaba con pasión y abandono
Seiya los miró y sintió su corazón estrujarse una vez más, puso su mano en su pecho porque le faltó la respiración y se apoyó en la pared, el castaño estaba pálido y debía haberse movido, quería irse pero las piernas no le funcionaban en ese punto, y así estuvo unos pocos momentos hasta que sintió una mano en su brazo, se volteó y era Shyru el que trataba de sostenerlo para darle apoyo
- Discúlpame… tengo que ir a vomitar – Seiya respiró profundo y caminó por el pasillo pero no fue al baño, sino que salió al jardín, pero su cometido de interrumpir a la pareja que rompió el beso fue cumplido, Shaka había alzado la mirada y se quitó a Shun de encima al ver los ojos tristes de Seiya
- Shaka… a dónde vas? – Shun miró a su maestro que estaba molesto en este punto y no lo podía ocultar
- Pensé que ibas a hablar con Seiya, lo hiciste?
- No… anoche no llegó sino hasta la madrugada, no he tenido oportunidad – Shun se encogió de hombros al decir esto
- Pues tienes la oportunidad ahora – Shaka señaló la ventana y a Seiya que estaba de pie junto a la pila de agua, el castaño estaba respirando profundamente tratando con todas sus fuerzas de no vomitar
- Shaka…
- No Shun, hasta que tú no arregles lo que sea que tienes que arreglar con Seiya, esto… no puede seguir, y en eso no estoy dispuesto a transigir
- No tengo nada con Seiya
- Pues díselo a él, porque no creo que le haya llegado el memo – Shyru intervino por primera vez en la discusión, él había estado de pie en el marco de la puerta
- No te metas Shyru – Shun se volteó y miró al caballero dragón con furia, Shyru levantó las manos y ya no dijo nada más
- Arréglalo Shun, o aquí queda todo, no me agradan los ultimátums pero esta situación es por demás incómoda – dijo Shaka en un susurro, él lo que menos quería era problemas con Aioros, o con el propio Seiya con el que tan bien se había llevado siempre
- Está bien, está bien… - Shun salió marchando al jardín, fue hasta el castaño que estaba apoyado en uno de los árboles junto a la pileta, tenía una mano en su estómago y respiraba profundamente, estaba jurando mentalmente no volver a beber, Shun se quedó de pie a una distancia prudencial y se cruzó de brazos, Seiya abrió los ojos y sonrió meneando la cabeza al decir:
- Y ahora qué quieres?, te vienes a burlar de mi o algo?, déjame advertirte que no estoy de humor para tus estupideces hoy
- Tú no estás de humor para mis estupideces???, eres un imbécil Seiya!!! – Shun gritó esto con toda la frustración que pudo demostrar
- Tu eres el que se está acostando con otro y el imbécil soy yo???, discúlpame por no ser un robot y sentir algo, el hecho de que tu tengas una uva pasa en lugar de corazón no significa que yo sea igual que tu – reclamó Seiya con furia
- Tú no tienes ningún tipo de calidad moral de reclamarme nada, si es verdad que yo me acosté con mi maestro, pero tú te acostaste con mi hermano!!! – Shun empujó a Seiya con furia cuando dijo esto
- Yo no me acosté con Ikky – respondió Seiya apoyándose en el árbol, fue un milagro que no se hubiera caído por el empujón de Shun
- Crees que soy estúpido???, yo mismo los encontré en la cama hoy en la mañana – los ojos de Shun brillaron con furia, Seiya recordó un portazo y un almohadazo, en verdad pensaba que lo soñó todo, estaba confundido en ese momento y ni siquiera podía abrir los ojos
- No me acosté con Ikky, dormimos juntos porque nos fuimos de tragos ayer y nos hicimos tarro de borrachos, pero no nos acostamos, no tuvimos sexo, no hicimos nada, no que a ti te importe en lo más mínimo lo que yo haga o no, porque yo no te importo y nunca te importé, no sé qué me reclamas ahora, si tú eres libre de hacer con tu culo todo lo que quieras, pues yo también
- Entonces amanecieron desnudos en la cama por obra y gracia divina?, rezaron el rosario anoche? – el muchacho de ojos verdes en verdad se sentía fúrico por lo que vio en la mañana, él se estaba sintiendo culpable de que Seiya lo hubiera encontrado en la cama con Shaka, pero… él se había acostado con su hermano, esas eran palabras mayores
- No… no rezamos nada, supongo que si intentamos hacerlo pero estábamos tan borrachos que no pudimos, o a ti si se te para cuando estás completamente ebrio?, que hábil eres Shun de ser así
- Eres un vulgar Seiya
- Yo puedo ser lo que me de la gana, no soy nada tuyo no?, eso es lo que le dijiste a tu nuevo amante, al que no te da vergüenza besar en la cocina para que todo el mundo te vea, el que si presumes delante de todos, en el que si estás interesado y lo has dejado entrar en tu vida, porque de mi nunca te preocupaste, nunca quisiste nada más conmigo, solo querías revolcarte conmigo y dejarme después, sexo sin complicaciones… eso es un chiste Shun, solo fui eso para ti… tú no eres el estúpido en esta situación, el estúpido soy yo por creer que me llegarías a amar como yo si te amo a ti
- Tanto me amas que te acuestas con mi hermano???
- Piensa lo que quieras, ya te dije que no me acosté con Ikky pero si eso es lo que quieres creer para que te puedas sentir menos culpable, pues allá tú, solo respóndeme una cosa, tan poca cosa soy para ti que acabas lo que sea que hayamos tenido por un revuelque con tu maestro?, ellos se van al final de la semana que viene, en eso no pensaste?
- Shaka no se va, se va a quedar aquí en Tokio
- Ohhh… vaya… perfecto, simplemente perfecto, ahora resulta que el estorbo soy yo… - Seiya cerró los ojos y meneó la cabeza, Shun respiró profundamente y habló en tono calmado cuando dijo:
- Las cosas no pueden seguir así Seiya, yo… yo quiero intentarlo con Shaka, él es tan diferente, con él me siento… - Shun iba a seguir hablando pero el castaño levantó la mano y dijo:
- Por favor cállate
- Seiya…
- Si me vas a decir que él es el hombre que siempre has esperado y que ahora estás bailando sobre una nube de algodón, por favor ahórratelo que no quiero oírte, si me vas a decir que es mejor en la cama que yo, en serio cállate porque eso es lo que menos quiero oír en la vida, si me vas a decir que esperas que podamos ser amigos luego de todo lo que pasó, muérete Shun, yo no quiero ser tu amigo luego de esto
- Este no era el trato Seiya, se suponía que nada interferiría en nuestra amistad, lo hablamos y quedamos de acuerdo – dijo el muchacho de ojos verdes en un intento de defender su posición pero eso lejos de tranquilizar la situación, irritó a Seiya al decir:
- Te repito, el hecho de que tú no tengas sentimientos no significa que yo sea igual que tú, lastimosamente yo si me enamoré de ti, me enamoré como un imbécil porque me ilusioné en un futuro contigo, esperaba que tú me amaras también y superaras lo que pasó con Milo, se nota que yo no fui lo suficiente para ti
- Seiya…
- No te atrevas a mirarme con pena que eso si que no lo tolero, espero que Shaka sea lo que en verdad quieres, que te de lo que según tú, yo no puedo, espero que te ame y no juegue contigo como tu jugaste conmigo
- Yo no jugué contigo – Shun frunció el ceño y se cruzó de brazos al escuchar esto
- Si lo hiciste pero eso tampoco importa ya, ya nada importa, ve con tu nuevo amante y tranquilo… ya no te voy a estorbar, si a ti no te importa, no tiene por qué importarme a mi
- Las cosas no son así Seiya – Shun dio un paso hacia el castaño que dio un paso hacia atrás para no dejarse tocar y dijo:
- Tienes razón, tú me dijiste que no me amabas, que querías solo sexo sin complicaciones, el que se complicó todo fui yo, pero tú… tú lo sabías, sabías que yo te amaba, sabías que me enamoré de ti, dejaste que me ilusionara contigo, hasta te pusiste celoso de Shyru!!!, me hiciste creer que… pero tienes razón, fue mi culpa porque tú nunca dijiste nada, yo lo imaginé todo, aunque no era necesario que me restregaras a tu nuevo amante en la cara, no era necesario ser tan cruel Shun
- Cruel?
- Si… cruel… pero ya no quiero hablar más contigo, ya todo está dicho, ya… ya nada ya… - Seiya se dio la vuelta y caminó hacia los árboles que rodeaban la mansión, Shun lo llamó sin seguirlo pero Seiya no se detuvo y continuó su camino:
- Seiya…
- Ya nada dije
***
En los días que siguieron, las cosas no estuvieron bien, Shaka habló de sus proyectos de mudarse a Tokio porque iba a liderar uno de los proyectos de ayuda humanitaria de Saori entonces iba a trabajar en la fundación, por ende se mudaría permanentemente a la mansión, eso Seiya ya lo sabía pero… esperaba que las cosas no fueran ciertas, esperaba que Shun no lo dejara pero… no… su relación con Shaka estaba viento en popa, así que el joven Pegaso se estaba muriendo
Al final la visita de los dorados llegó a su fin pero las cosas no salieron como todos pensaban, Seiya había ido a acampar en la Universidad estos últimos días, nadie sabía para qué, el semestre había acabado entonces no había razón para ello, pero los motivos fueron evidentes cuando ese viernes, no solo tres caballeros habían armado maletas, Seiya también estaba afanado en ello
- Por todos los dioses… es cierto lo que me dijo Ikky??? – Shyru había subido a la habitación de Seiya y lo miró clasificar su ropa en pilos, aparentemente no se iba a llevar mucho con él
- Qué te dijo Ikky?
- Que te vas de la casa, estás loco Seiya?
- No, no estoy loco, solo… necesito irme de aquí, eso es todo, no pongas esa cara que no es que no me vas a volver más en tu vida ni mucho menos, solo… me quiero ir de aquí, eso es todo – el castaño se encogió de hombros y siguió atareado doblando su ropa y poniéndola en una maleta no muy grande
- A dónde vas Seiya?
- A Grecia con mi maestro, Aioria me estaba ayudando con sus contactos en la Universidad y me dijo que me pueden ayudar con una transferencia, voy a perder uno o dos semestres pero no los voy a perder todos, voy a poder continuar en la Universidad, hablé con Saori y me dijo que la fundación va a seguir costeando mis estudios siempre y cuando luego trabaje para ella, ya sabes… el mismo trato que tenemos aquí lo que me parece bien, voy a vivir en Atenas en una de sus casas, Aioros no va a vivir conmigo, pero ellos van mucho por allá entonces no voy a estar solo, no me mires así Shyru
- Es que… me parece injusto que seas tú el que tenga que irse, que se vaya Shun – el caballero dragón estaba molesto en este punto, él iba a extrañar mucho a su mejor amigo
- No tiene por qué irse, mira… el que sale sobrando aquí soy yo, el que se siente mal mirando a Shun en los romances con Shaka, soy yo, así que el que se va, también soy yo, Shun tiene derecho de dar el culo al que le dé la gana, ese era el trato, yo no tengo por qué decir nada, pero no me pidas que siga aquí, eso no lo puedo hacer
- Pero tú lo amas
- Si… pero él no me ama a mí, así que… si me quedo aquí es solo para perder el tiempo y sufrir, y ninguna de esas cosas quiero hacer, un cambio de ambiente me va a venir bien, siempre puedes ir a visitarme, no?
- No es lo mismo – respondió el caballero dragón en un susurro y bajando la cabeza, era obvio la tristeza que sentía, Seiya dejó lo que tenía en las manos y lo abrazó al decir:
- Claro que no es lo mismo, pero es todo lo que ofrezco, lo entiendes, verdad?
- Si, no estoy de acuerdo pero lo entiendo
- Es todo lo que pido, y no le pongas mala cara a Shun, no es su culpa – Seiya volvió a afanarse en empacar su maleta, pero a esto Shyru se molestó y se cruzó de brazos al preguntar:
- Cómo puedes decir eso?, cómo que no es culpa de ese idiota?
- Yo me enamoré solo, no es su culpa
- Shaka no lo ama, no lo va a amar como lo amas tú, no se preocupará por él como lo haces tú, a Shaka le vale todo, no le importa nadie más que él mismo
- Bueno… por el bien de Shun espero que eso no sea así, ok., cuida el vivero, no mates a mis plantas, no mates a tus compañeros tampoco y ya sabes, cualquier duda estoy solo a una llamada de distancia
- Te voy a extrañar Pegasito
- Y yo a ti
Seiya abrazó a Shyru y así estuvieron cuando alguien se aclaró la garganta innecesariamente, al separarse los chicos vieron a Ikky en el marco de la puerta
- Mal me parece, no tienes que irte Seiya
- Si tengo que irme Ikky
- Si querías hacer rabiar a mi hermano, te dije que este pechito estaba disponible para ti, te voy a extrañar tonto – Ikky se acercó a Seiya y lo abrazó, esto le sorprendió al castaño que lo abrazó también, aunque empujó a Ikky cuando bajó la mano de su espalda y le palmoteó el trasero
- Oye!!!!
- Para que veas lo que te perdiste, cuídate pony y llámanos de vez en cuando, ven a visitarnos, no te olvides de nosotros – muy pocas veces en la vida Seiya había visto a Ikky algo conmovido y sentimental, y esta era una de esas ocasiones
- Sigues aquí?, que genial – Hyoga había llegado corriendo y sin mayores preámbulos abrazó a Seiya con fuerza
- También te voy a extrañar Hyoga
- Le voy a hacer bullying a Shun de tu parte
- Por favor no le hagas nada, o sabes qué… hazle todo lo que se te ocurra – respondió Seiya con una divertida sonrisa, en especial porque Ikky golpeó a Hyoga en el hombro y le miró amenazadoramente, el rubio solo sonrió y se encogió de hombros
Seiya cerró su maleta y bajó las escaleras, en la planta baja ya estaban Mu y Aioros en compañía de Aioria, tenían también ya las maletas listas y por eso sin más demora, subieron al taxi que ya había llegado y los iba a llevar al aeropuerto, Seiya iba sentado en el asiento de atrás y miró la mansión hacerse pequeñita mientras la distancia crecía, Shun no había salido a despedirlo pero… eso era bastante lógico. Aioros palmoteó la pierna de Seiya y le sonrió, el joven castaño suspiró, este cambio le haría bien, este cambio sería bueno en su vida, era lo que en verdad necesitaba, el tiempo y la distancia sanarían su maltrecho corazón