Un nervioso pelinegro llegaba a su departamento junto a YoungBae. Al notar a pocos metros de distancia cómo las blancas paredes estaban manchadas por el hollín y que aún el lugar humeaba, no pudo evitar llorar apretando con fuerza la mano que tenía entrelazada con su novio.
Se detuvieron frente a la puerta y justo cuando el rubio iba a hablar, un bombero salía del lugar.
-¿Ustedes viven aquí?-
-Yo vivo aquí…- respondió nervioso el menor.
-Hace media hora logramos apagar el fuego. Era muy intenso y cuando llegamos, había consumido gran parte del lugar por lo que lamento decirle que no ha quedado nada para rescatar pero si quiere, puede entrar a ver. Aunque si lo hace, trate de hacerlo rápido porque el lugar corre peligro de derrumbe- suspiró sintiéndose mal por Seungri quien lloraba mirándolo triste.
-G-Gracias señor. Entraré sólo un momento-
-¿Se sabe cuál fue la causa del incendio?- preguntó un serio YoungBae mientras que sin poder evitarlo, su novio soltó su mano para ingresar al departamento.
Iba a ir tras él pero necesitaba primero saber la razón del incendio.
-Según testigos de la cuadra, han visto a una persona que ingresó al departamento. Creyeron que era el muchacho pero no lo podían distinguir porque vestía una campera con capucha logrando que no se apreciara su rostro. Luego dicen que olieron algo quemándose y la vecina del frente nos llamó inmediatamente pero pese a que no demoramos ni cinco minutos, el lugar estaba completamente en llamas. Como nos dijeron que el muchacho estaba adentro, ingresamos a rescatarlo pero no había nadie por lo que ahora supongo que no era él ya que se acaba de enterar- miró a un pensativo rubio quien fruncía el ceño cada vez más.
-No. Él estuvo todo el día de ayer conmigo por lo que supongo que esto fue provocado intencionalmente- rápidamente sacó su celular para mandarle un mensaje a su hermano de que lo llamara cuando estuviera desocupado.
El bombero hizo una mueca de disgusto y miró a YoungBae sin saber qué decir.
-Muchas gracias por haber venido y evitado que al menos el fuego no consumiera las demás viviendas- le intentó sonreír y luego hizo una leve reverencia.
-Es nuestro deber pero lamento que no haya quedado nada sano. Cualquier ayuda que necesiten, cuenten con nosotros-
-De acuerdo. Gracias nuevamente-
Sonriéndole, el bombero caminó hacia el camión hidrante donde los demás estaban terminando de ordenar la gran manguera y una vez que estuvieron listos, se retiraron del lugar.
YoungBae miró a su alrededor con claras intenciones de localizar a algún vecino para preguntarles mejor sobre lo ocurrido pero no había nadie por lo que suspirando, ingresó con cuidado al departamento escuchando de inmediato a Seungri llorar por lo que corrió hacia donde sus sollozos se hacían más audibles.
Y ahí estaba su novio, en la habitación cerca del armario, arrodillado en el suelo llorando junto a una pequeña caja de madera totalmente quemada.
Iba a hablar mientras se acercaba a Seungri pero éste se secó un poco sus lágrimas con la manga de su abrigo dando un gran suspiro.
-Aquí estaba mi más grande tesoro y a-ahora ya n-no existe- hizo un puchero sintiendo que volvería a quebrarse de nuevo.
YoungBae se arrodilló a su lado y acarició su espalda.
El pelinegro lo miró y YoungBae sintió una opresión en su pecho al notar los ojos completamente rojizos en su novio.
Seungri rápidamente se arrojó en sus brazos siendo correspondido rápidamente por el mayor quien lo contenía acariciando su espalda para calmarlo ya que comenzaba a temblar.
-Las únicas f-fotos que tenía con mis padres y-ya no existen Bae- llorando, susurraba como podía en el oído de su novio.
YoungBae sintió cómo su corazón se oprimía. Odiaba verlo sufrir y más por algo que seguramente Gain tuvo que ver.
Esta vez no sabía qué decirle al respecto por lo que peinaba con sus dedos el cabello de Seungri quien tosía un poco producto de tanto llorar.
Al sentir cómo el pelinegro se relajaba poco a poco, YoungBae besó su cabeza y suspiró.
-Debemos irnos, pequeño-
Seungri negó sin despegar su rostro del hombro de su pareja.
-Recuerda que el bombero nos dijo que podría derrumbarse y no quiero que nada malo te pase-
-Pero… ya no tengo a dónde ir. Perdí todo… mis ropas, muebles, accesorios, mis pocos ahorros…-
“Justo cuando tenía planeado regalarle algo a YoungBae”
Hizo un puchero.
-Lo único que no desapareció fue mi mochila con mis herramientas para la academia ya que Daesung lo tiene por pura casualidad. ¿Debería de preguntarle si puedo hospedarme en su casa hasta que pueda hacer algo al respecto? Porque con Yang no hablaré ya que seguramente me dirá que soy un manteni…-
Al sentir las manos de YoungBae capturar su rostro, hizo silencio.
-Me duele que no pienses en mí. Sabes muy bien que no voy a permitir dejarte solo en esta situación. Eres mi novio y obviamente vendrás a mi casa-
-Pero… no quiero molestarte hyung. Además, debo de conseguir dinero para poder recuperar todo lo que perdí-
-¿Tú molestarme? Eso jamás sucederá mi amor-
Al notar el leve sonrojo del pelinegro, YoungBae besó su frente.
-Te ayudaré a comprarte ropa. Obviamente puedes usar las mías también-
Seungri lo miró pensativo y el rubio lo tomó de los hombros.
-Vivamos juntos como una primera prueba para que a futuro, cuando nuestra relación sea mucho más unida, nos mudemos a otra casa luego de casarnos. También, seremos unos expertos en la música y… podremos formar una familia- sonrió dulce logrando que Seungri se sonrojara aún más.
“Vaya… tiene todo planeado para el futuro”
-P-Pero… ¿realmente no seré una molestia? Digo, tú querrás tener tus momentos a solas y no podrás porque estaré en tu cas…-
Hizo silencio al sentir los dedos de YoungBae tocar sus labios.
-Ya te lo he dicho. NO serás una molestia. Además, mis mejores momentos son cuando las paso junto a ti mi amor- susurró.
Seungri no pudo evitar sonreír y besar al rubio con dulzura. Realmente no podía con ese hombre tan bueno y amoroso.
Al escuchar un crujido, YoungBae miró hacia el techo notando cómo las paredes se quebraban aún más por lo que deslizó sus manos sobre los hombros del menor acariciándolo suavemente hasta llegar a sus frías manos y entrelazarlas suavemente.
-Vámonos de aquí antes de que suceda lo peor-
El pelinegro notó lo que YoungBae observaba y asintió mientras que rápidamente salían de allí.
Una vez afuera, Seungri no pudo evitar mirar con tristeza su departamento y dar un gran suspiro hasta que sintió unos cálidos abrazos tomarlo por detrás.
Como ningún vecino estaba afuera observándolos, el pelinegro se dejó abrazar sin problemas.
-Sé que parece imposible ahora pero ya verás que todo mejorará mi amor- susurró besando su mejilla.
“Eso espero…”
Dio un último suspiro para luego asentir al comentario de YoungBae.
Dándose la vuelta rápidamente, apoyó su frente sobre el hombro de su novio quien no dudó un segundo en acariciar sus cabellos para contenerlo.
-¿Vamos a comprar algo de ropa para ti?-
Seungri negó y finalmente enderezó su cabeza.
-Debo ir a la academia. Yang me dijo que cuando viniera a ver mi departamento, luego lo vaya a ver…- hizo una mueca de preocupación.
-Entonces vamos juntos porque obviamente no te dejaré solo- acarició su rostro dedicándole una sonrisa.
-Gracias Bae- tomó la mano que acariciaba su mejilla para depositarle un dulce beso.
YoungBae besó sus labios y luego el menor decidió tomar su mano para luego ir caminando juntos hacia la academia.
**
Seungri se estremeció al notar la mitad de la academia quemada por lo que apretó con fuerza la mano de su novio quien lo miró deteniéndose en el pasillo para abrazarlo.
-Tranquilo mi amor. Todo saldrá bien- susurró acariciando la espalda de Seungri quien asintió dando un suspiro.
Ambos se separaron y el pelinegro lo miró.
-No creo que salga bien viniendo de él pero al menos el que estés a mi lado, me alivia. Gracias Bae- sonriéndole levemente, acarició el rostro del rubio para luego besar sus labios.
YoungBae sonrió y besó su frente para finalmente retomar su caminar e ir hacia la oficina de Yang.
Una vez que el menor tocó la puerta, escuchó la seria voz de su tío autorizándolo para que ingresara por lo que Seungri miró a su novio e ingresaron juntos.
-Sabía que vendrías acompañado- Yang miró al menor y a YoungBae.
-S-Sabes que estamos saliendo…-
-Sí y por tu culpa, has provocado este desastre que menos mal que estaba aquí o sino, la academia se hubiera quemado en su totalidad- se quejó dando un golpe en su escritorio.
-¿M-Mi culpa?- lo miró sorprendido mientras que YoungBae fruncía el ceño.
Yang tomó un papel que tenía cerca de él y se los mostró a la pareja.
-Esto lo recibió mi esposa cuando salí de la casa. Se suponía que hoy me tomaría el día libre pero como me gusta trabajar, vine aquí. Cuando sucedió lo del incendio, ella me llamó para avisarme sobre esa carta. Mientras los bomberos hacían su trabajo, fui a ver y leí el contenido de regreso aquí y por eso te he llamado para que vinieras…-
Carraspeando, comenzó a leer el corto pero exagerado escrito.
-“Lee Seung Hyun, maldito homosexual. Sedujiste a mi futuro marido y has destruido nuestro sueño de formar una familia normal. Una basura como tú, sólo merece ser quemada”-
“Definitivamente fue Gain quien hizo todo esto… ¿pero cómo?”
Yang miró a un boquiabierto pelinegro.
-Por lo visto, esa persona sabe nuestro lazo de sangre y creyó que estabas con nosotros como para enviar esta carta a mi casa… ¿me puedes explicar qué has hecho? ¿Acaso esta persona se refiere a que sedujiste a Dong al propósito?- comentando sin problemas de que él y Seungri eran familia ya que YoungBae le había dicho que jamás divulgaría esa información, lo miró y luego a su sobrino frunciendo completamente el ceño.
-¡Por supuesto que no! Déjame explicart…-
-¿Sabes que por lo que has hecho, sólo has logrado arruinar los sueños de cientos de jóvenes que deseaban ser profesionales en la música? Es imperdonable Lee Seung Hyun. Eres el peor de los Lee. Has defraudado a tus padr…-
-No le hable así a Seungri- al notar que Yang no dejó hablar al menor, se vio obligado a interrumpirlo.
-¿Lo defenderás?- elevó una ceja mientras que el pelinegro mordía su labio inferior para evitar llorar ya que estaba muy nervioso por todo lo que le estaba sucediendo.
-Por supuesto que sí. Usted no sabe lo que realmente sucedió aquí y está juzgando a Seungri cuando él no ha hecho nada malo. Ni siquiera lo ha dejado hablar- lo fulminó con la mirada acercándose a Yang.
Seungri se tensó y pese a que aún no podía siquiera hablar, logró tomarlo del brazo por si el rubio golpeaba a su tío. Eso sí sería un gran problema.
-Pero si ni siquiera puede hablar. Sólo se la pasa llorando para dar lástima- miró al menor quien frunció el ceño.
-¡Eso no es verdad!- miró desafiante a un serio Yang.
-Bueno, entonces habla de una vez antes de que piense en un severo castigo para ti por lo sucedido en esta academia y obviamente, olvídate de estar junto a tu supuesto novio-
“No quiero que esto suceda… seguramente querrá enviarme a otro país…”
Recordó que hace un par de años, Yang lo había amenazado con que si no estudiaba como se debía, iba a mandarlo a una escuela en otro país en donde jamás saldría de ese lugar hasta que se convirtiera en un joven estudioso.
YoungBae no pudo evitar sorprenderse y sentir temor a la vez ya que él estaba lo suficientemente enamorado del menor como para que alguien quisiera separarlos.
Al sentir su celular sonar, rápidamente lo sacó del bolsillo de su pantalón notando que era su hermano por lo que miró a Yang completamente serio.
-Sólo espere un momento- al notar cómo el hombre mayor elevaba una ceja y Seungri lo miraba confundido, atendió la llamada.
-Hola. Sí, es exactamente por ese inconveniente y Yang quiere castigar a Seungri con algo que no ha hecho. ¿Puedes venir?-
Mientras escuchaba a su hermano hablar del otro lado de la línea, miró a su novio y le sonrió dulce acariciando sus cabellos ignorando completamente que Yang los observaba.
-De acuerdo. Te esperaremos. Adiós-
Finalizó la llamada y miró al serio hombre frente a él.
-¿Es capaz de esperar cinco minutos a que mi hermano mayor llegue?-
-¿Por qué debería de esperarlo?-
-Porque es abogado y tiene muchas cosas que puede decirle para que vea que su sobrino no es el malo en esta historia- tomó la mano del menor quien ahora observaba atento a su tío.
Yang los miró y suspiró.
-De acuerdo. Pero sólo serán cinco minuto…-
Al escuchar tres sutiles golpes en la puerta, Yang frunció el ceño pero dio permiso para que quien fuera que estuviera del otro lado, pasara.
-Que sea en un minuto y medio- rió ingresando con una gran sonrisa.
-HyunBae hyung- susurró el menor.
-Buenos días señor Yang…. Hermanito, cuñadito- saludando formalmente al dueño de la academia, se acercó a su hermano para palmearlo del hombro mientras que miraba a Seungri para saludarlo de igual manera.
“Está muy tranquilo”
Pensó el menor mientras que sintió una caricia en su mano por lo que miró a YoungBae quien no quitaba su sonrisa, transmitiéndole tranquilidad.
-Soy Don Hyun Bae y vengo a aclarar todo lo que ha sucedido desde el comienzo con la responsable de la que le escribió esa carta junto a su cómplice- al notar el papel sobre el escritorio logrando leerlo a distancia, se lo señaló a Yang.
-¿Quién es? ¿Y por qué ha provocado todo esto?-
-Primero quiero pedirle un favor para poder relajar un poco el ambiente…-
Yang lo miró con seriedad esperando a que continuara hablando.
-Necesito que Seungri y mi hermano esperen afuera un momento ya que debo hablar sólo con usted- sonrió mientras que YoungBae fruncía el ceño y el menor no podía estar aún más confundido.
-De acuerdo. Retírense- ordenó.
Como Seungri no parecía con ganas de retirarse, el rubio lo jaló suavemente para poder salir del lugar mientras que HyunBae tomaba su portafolio colocándolo sobre el escritorio de Yang.
El menor volteó para intentar ver algo pero la puerta se cerró rápidamente por YoungBae cuando salieron de allí.
-Vamos a sentarnos allí, Seungri- comentó señalándole una banca que estaba sana.
-Pero… ¿por qué no nos quedamos con ellos? Quería saber qué le diría HyunBae hyung a Yang para que pudiera entender que yo no he hecho nad…-
Sus labios fueron silenciados por un beso mientras que YoungBae aprovechó que el menor se distrajo para hacer que se sentara en la banca junto con él.
-Mi hermano tiene las pruebas que le ha mostrado a mis padres y, al parecer, unas actuales en donde un cómplice de Gain fue el responsable de incendiar esto y tu departamento-
-¿De verdad? ¡Entonces entremos!- gritó desesperado y el rubio negó.
-Déjalos que hablen ellos solos. Tú te encuentras muy nervioso por lo sucedido y seguramente cansado. Por eso, necesito que no te estreses más. Me preocuparía demasiado si te enfermas, mi amor- susurró acariciando el rostro de un levemente avergonzado Seungri para luego besar su frente.
El pelinegro desvió su vista un segundo hacia el brillante hilo rojo que los unía y se sintió aliviado al notar que definitivamente el hilo negro había desaparecido, por lo que en ese caso, no debía de preocuparse porque alguien se interponga a su relación.
Dando un suspiro, miró a un sonriente YoungBae por lo que besó tímidamente sus labios y finalmente apoyó su frente sobre su hombro.
YoungBae con una de sus manos, acarició con suavidad sus oscuros cabellos mientras que con la otra abrazaba a su novio para transmitirle tranquilidad.
-Ya verás que todo saldrá bien, pequeño-
-¿Cómo puedes asegurarlo, hyung?- preguntó sin moverse de donde estaba.
-Una corazonada… además, eres el hombre más hermoso y talentoso que conozco por lo que no mereces sufrir como ahora. Al contrario, mereces todo lo mejor y ser feliz junto a la persona que te ama con locura-
Ante la confesión, Seungri enderezó su rostro logrando que las dudas del rubio de que su pareja lloraba, se hiciera evidente al notar las mejillas del menor un poco húmedas.
-Tú eres el hombre con esas cualidades, no yo… tú eres hermoso y talentoso-
YoungBae negó.
-No sé cómo puedes pensar que tú no eres talentoso. Tu voz, tu capacidad para componer canciones, tu concentración y esfuerzo para aprender algo nuevo, todo eso te hace un completo hombre con talento- deslizó sus manos hacia el húmedo rostro de su novio para acariciarlo con suavidad.
Seungri hizo un adorable puchero por lo que el rubio le dedicó un beso esquimal.
-Además, otro talento que tienes y vuele loco a cualquiera es tu gran y destacado trasero- bromeó un poco logrando que el pelinegro riera bajo.
-Todos mueres por ver y tocar mi trasero- comentó.
El rubio no pudo evitar fruncir levemente el ceño y Seungri lo besó abrazándolo por el cuello.
-Pero sólo tú tienes el privilegio de tocarlo y verlo cuando lo desees mmh- no pudo evitar jadear bajo al sentir una leve caricia en su nalga derecha.
Ambos sonrieron y dejando las bromas a un lado, se dieron un cálido abrazo mientras que YoungBae acariciaba con suavidad la espalda de su novio sintiendo cómo poco a poco se relajaba en sus brazos.
Estuvieron de esa manera durante unos largos minutos hasta que escucharon la puerta abrirse logrando que HyunBae asomara su rostro buscándolos.
-¿Puedes venir un momento, Bae?-
-Ya voy- al notar que su hermano sonreía asintiendo mientras cerraba nuevamente la puerta, deshizo el abrazo besando los labios de un asustado Seungri.
-Voy contigo, Bae hyung- al ver que su novio se puso de pie, intentó hacer lo mismo pero el mayor lo detuvo.
-No es necesario. Quédate aquí y espérame-
Seungri frunció el ceño en total desacuerdo.
-Sólo será un momento. Prometo salir en menos de cinco minutos. Sólo necesito que esperes aquí, ¿sí?- acarició los oscuros cabellos del menor quien finalmente suspiró derrotado.
-Está bien pero si te demoras más de ese tiempo, entraré- hizo un puchero pero se sorprendió al sentir un beso más íntimo por parte de YoungBae.
-Mi lindo pandita. Te amo tanto- confesó y besando ahora su frente, finalmente caminó con rapidez hacia donde su hermano y Yang estaban.
Seungri no pudo evitar sonrojarse y sentir un poco de calor debido al demandante beso que su novio le había dado. Realmente le costaba adaptarse a su manera tan dulce de ser tratado.
Dando un gran suspiro para calmar a su agitado corazón, decidió tomar su celular para controlar los cinco minutos que YoungBae le había prometido que no se demoraría más que eso.
“Espero que Yang entienda que Gain es una mala e interesada mujer y que no intente separarme de YoungBae ya que me he adaptado tanto a él que me será imposible no estar a su lado…”
Suspiró con miedo mientras observaba casi sin parpadear y completamente impaciente, el cronómetro en su celular.
**
Observando atento el cronómetro, Seungri se puso de pie un segundo antes de que se cumplieran los cinco minutos y se exaltó al escuchar la puerta abrirse logrando que su novio junto a HyunBae salieran de allí.
El pelinegro miró cómo los hermanos les sonreían dulce y se sonrojó levemente al sentir una sutil caricia en su cabello por parte de HyunBae logrando que el rubio frunciera levemente el ceño para luego abrazarlo posesivamente.
“Me gusta cuando es un poco celoso… lo hacen ver adorable”
Pensó pero recordó el por qué estaban allí por lo que miró a su novio.
-¿Qué sucedió al final?-
YoungBae miró a su hermano y éste asintió para que hablara.
Por un momento, Seungri sintió miedo ante ese cruce de miradas hasta que la mano del rubio acariciando su rostro, lo tranquilizó.
-Está todo solucionado- sonrió.
-¿Eh?- confundido, frunció el ceño.
-Yang ha comprobado que eres inocente y lo del reciente suceso, mi hermano junto a Jiyong y Seung Hyun, lograron que Gain con su cómplice cayeran en la trampa-
Al notar la expresión completamente desorientada en Seungri, HyunBae se acercó a ellos.
-Ayer mientras nosotros estábamos en el restaurante junto a nuestros padres y Gain, Jiyong y su pareja estaban instalando un par de cámaras y micrófonos fuera de tu departamento y todo este establecimiento ya que me había asesorado de los antecedentes de ella por lo que sabía que algo malo se encargaría de hacer cuando saliera del restaurante. Al subirse al taxi, el chofer era un amigo mío por lo que escuchó la conversación de Gain con su cómplice. Gracias a todo eso, hemos logrado conseguir todas las pruebas necesarias pero corrimos el riesgo de que este lugar se quemara la mitad y tu departamento por completo… por lo que no sé cómo pedirte perdón al respecto Seungri- suspiró mirando al menor con súplica.
El pelinegro suspiró.
-Me impresiona cómo han estado trabajando tanto para poder descubrirla a ella y a su cómplice… ¿qué ha sucedido con ellos?-
-Gain fue arrestada cuando llegó al aeropuerto y Eric, su cómplice, en su departamento ya que logré encontrar su ubicación. Y pierde cuidado que no saldrán de allí por unos cuántos años- respondió HyunBae.
-Sé que sonará como un malvado pero me alegra saber eso. Ahora no serán capaces de extorsionar y arruinar familias de nuevo- frunció el ceño al recordar lo venenosa que era la mujer y se estremeció al sentir un beso en su mejilla.
-No suena malvado y mucho menos lo eres, Ri. Esas personas merecen pudrirse en la cárcel- comentó el rubio.
-Además, casi arruina la felicidad de mi hermano y tú. Ustedes son una verdadera pareja y no se merecían que esa mujer se interpusiera entre ustedes así- intervino HyunBae con el ceño levemente fruncido.
Seungri no pudo evitar sonrojarse levemente ante el comentario y más al sentir cómo su cintura era tomada por su novio para poder apegarlo más a su cuerpo y abrazarlo.
-G-Gracias HyunBae hyung por tu ayuda. También debo de agradecerles a Jiyong hyung y Seung hyung- pensó en la posibilidad de ir a visitarlos más tarde.
-No es nada. Ya he dicho, lo hicimos por ustedes. Porque su amor, se nota a leguas que es verdadero… destinado- sonrió.
El pelinegro se confundió ante la posibilidad de que HyunBae también viera los hilos pero se sorprendió al ver al abogado arrodillarse frente a él.
-Realmente siento culpa por lo ocasionado con tu departamento. Perdóname Seungri- hizo una reverencia pegando su frente al suelo y el menor rápidamente le dio un suave empujón a YoungBae para que lo liberara y así se inclinaba a ayudar al abogado para que se pusiera de pie.
-No es necesario que supliques perdón de esa manera HyunBae hyung. No debo de perdonarte nada porque has ayudado mucho- nervioso, logró que se pusiera de pie y se sorprendió al ser abrazado con fuerza por el mayor.
-Sabes que Seungri te perdonó. Deja de actuar y dile los demás detalles buenos, hermano- gruñó ante sus incontrolables celos.
-¿Detalles buenos?- al ser liberado, Seungri volteó su rostro para mirar a su celoso novio y luego a un sonriente HyunBae quien asintió ante el comentario de su hermano.
-Yang ha aceptado el que te quedes a vivir con mi hermanito-
-¿De verdad?- no pudo evitar preguntar asombrado y levemente sonrojado.
-Sí. Además sabe que ustedes se quieren mucho por lo que aceptó su relación. También me ha dado esto para ti aclarándome de que mañana vayas al banco- le entregó un papel con unos cuantos números que Seungri al tomarlo y leerlo, no supo qué era.
Iba a preguntar pero HyunBae se le adelantó.
-Es un regalo que él mismo dijo que te merecías-
“Conociéndolo, no va a decírmelo personalmente ni aunque entre ahora a hablarle…”
-¿Y por qué debo de ir al banco?-
-Piensa un poco y te darás cuenta- le sonrió.
El pelinegro pensó en la posibilidad de que su tío le haya dado dinero que le pertenecía a la herencia de sus padres pero negó mentalmente ya que Yang sólo le daba lo justo y necesario para sobrevivir por mes.
-¿Y qué sucederá con la academia?- preguntó ya que estaban a nada de realizar unas importantes pruebas de canto y baile.
HyunBae miró al rubio un momento y sonrió de lado.
-Esa tarea se la dejaré a mi hermanito para que te cuente mejor en privado pero tranquilo que no es nada malo, Seungri- decidió acotar esto último debido a la expresión de terror en el menor por lo que acarició sus cabellos con suavidad logrando que su celoso hermano lo fulminara con la mirada.
Al escuchar su celular sonar, el mayor de todos lo revisó y se exaltó.
-Debo irme y estar al otro lado de la ciudad en quince minutos o de lo contrario, mi más bello tesoro se enojará- comentó mientras escribía un mensaje rápidamente.
“¿Su más bello tesoro?”
Sintió la necesidad de preguntar pero notó cómo HyunBae lo abrazaba cálidamente por última vez para luego saludar de la misma manera a su hermano.
-Cualquier cosa llámenme que aún estaré aquí en Seúl por unos días más, ¿sí?- miró a YoungBae y luego al menor.
-De acuerdo, gracias HyunBae hyung- le sonrió dulce.
-Gracias hermano por todo lo que has hecho- comentó el rubio palmeando su espalda.
-No hay nada que agradecer, a menos que quieran invitarme a comer a algún lugar antes de que regrese a Inglaterra- bromeó riendo.
La pareja sonrieron y Seungri asintió ya que pese a que lo dijo en broma, él lo invitaría a comer pronto.
-Debo irme ya. Cuídense, ¡adiós!- caminando apresurado hacia la salida, agitó su mano a modo de saludo mientras que Seungri y el rubio se despedían de la misma manera.
Al escuchar un gran suspiro en el pelinegro, YoungBae se acercó a él para besar su frente mientras tomaba su mano.
-¿Nos vamos?-
-Déjame saludar a Yang…-
-No es necesario. Él dijo que te saludara ya que estaba muy ocupado con los asuntos de la academia por lo que prácticamente cerró con llave su oficina-
Seungri no pudo evitar fruncir el ceño debido al comentario de la academia.
-¿Puedo saber qué sucederá con este lugar, hyung?-
-Sí pero te lo diré cuando estemos en casa y que te hayas relajado completamente. Necesito que primero liberes tanta tensión y estrés- acarició sus hombros masajeándolos suavemente al sentir sus músculos duros.
“¿A qué se debe tanto misterio?”
Dio un suspiro de derrota.
-De acuerdo-
YoungBae lo besó para luego tomarlo de la mano y así caminar hacia la salida.
-Antes de ir a casa, vayamos al centro comercial a comprarte algo de ropa. Almorzaremos allí y luego compraremos algunos ingredientes para lo que desees cenar-
Seungri asintió e hizo un puchero, pensativo y el rubio lo notó rápidamente.
-¿Hay algo que desees? Sólo dímelo, pequeño-
-¿Podemos comprar algo dulce para merendar en tu casa, hyung?-
Ante la pregunta, el cual le pareció muy adorable a YoungBae, se detuvieron a metros fuera de la academia mientras esperaban que algún taxi se hiciera presente.
-¿De qué tienes antojo?-
“Eso se escuchó como si fuese una mujer embarazada”
No pudo evitar sonrojarse y morder su labio inferior.
-U-Un pastel de chocolate… pero si no se puede no importa-
-Compraré todos los ingredientes necesarios para prepararte uno-
-¿De verdad?- lo miró asombrado y el rubio asintió.
-Amo verte degustar mis comidas y por eso, deseo cocinarte siempre mi amor- susurró dulce logrando que Seungri desviara su vista apenado.
“Siempre tan bueno… no bromeo cuando digo que me mal acostumbraré a que me mime así”
Miró a su alrededor y al no notar ninguna persona cerca, besó los labios de su novio de manera tímida.
-Gracias por consentirme Bae hyung. Eres un sol- susurró sobre sus labios y al perderse en aquella cálida mirada, volvió a besarlo pero esta vez de manera más intensa.
YoungBae no tardó en reaccionar y tomar la cintura del menor para apegar su cuerpo al de él mientras ladearon sus rostros amoldándose mejor al beso.
Como le pareció escuchar un vehículo acercarse, el pelinegro abrió sus ojos divisando un taxi aproximarse a ellos por lo que forzosamente deshizo el beso sonrojándose un poco.
-A-Ahí viene uno, hyung- lamió sus propios labios.
El rubio volteó su rostro divisando el vehículo y rápidamente se encargó de detenerlo.
-Tienes buen oído, pequeño- sonrió dulce mientras se subían al taxi y él le indicó hacia dónde se dirigían al chofer.
Ambos sonrieron y un Seungri ahora un poco más aliviado, se atrevió a entrelazar su mano con la del rubio importándole poco que el chofer lo notara ya que se sentía bien sentir la calidez de su novio…
**
Luego de ir al centro comercial, conseguir algo de ropa y calzados para Seungri, almorzar y comprar los ingredientes que necesitaba el rubio para preparar lo que su novio quería comer, finalmente llegaron a la casa de YoungBae.
Una vez dentro, el menor dejó con cuidado las bolsas de ropa y calzados en el suelo dando un gran suspiro.
-¿Cansado?- preguntó el rubio mientras cerraba la puerta y dejaba las llaves sobre un pequeño mueble que tenía cerca.
-Sí. Olvidé lo mucho que me agotaba comprar ropa. Hacía tiempo no compraba tantas cosas para mí… aunque lo has pagado tú. Prometo que cuando Yang me dé dinero o logre conseguir empleo, te lo devolve…ré- hizo una pausa ya que YoungBae lo abrazó.
-No hace falta que lo hagas. Es un regalo, Ri- susurró besando ruidosamente su mejilla.
-Pero… has gastado mucho dinero hyung- lo miró preocupado y el rubio sonrió dedicándole un beso esquimal.
-No te preocupes por eso. El dinero va y viene. Además, el poder comprarle cosas a mi adorable novio para verlo feliz, es lo que más importa para mí-
“No puedo con él y su dulzura”
Lo abrazó por el cuello apoyando su frente contra la de YoungBae.
-Gracias Bae por todo lo que haces por mí- le sonrió.
El rubio acarició con suavidad los costados de la cadera de Seungri mirándolo con amor.
-Pronto te haré obsequios también, eh- hizo un puchero.
-El mejor regalo que me has dado es el que hayas correspondido a mis sentimientos, mi amormmh- jadeó bajo ya que se sorprendió al sentir la boca de Seungri atacar la suya.
Ladeando sus rostros para amoldarse mejor a los labios del otro, YoungBae llevó sus manos hacia el trasero de su novio quien se estremeció jadeando entre el beso.
Pero Seungri se sentía cansado como para comenzar a ser más íntimo con el rubio por lo que deshizo la unión de sus bocas.
-Bae mmh- jadeó al sentir un camino de besos por su cuello junto a una sutil mordida para finalmente detenerse.
-Sé que estás cansado. Lo siento pequeño- lo soltó notando un leve sonrojo en el pelinegro.
-No… tú perdóname pero realmente estoy cansado pero querré que me mimes más tarde- hizo un puchero logrando que YoungBae sonriera y besara tiernamente sus labios.
-No debes de pedir perdón, es entendible. ¿Quieres darte una ducha e irte a dormir un poco o directamente te quieres ir a dormir?-
Seungri pareció pensativo ya que deseaba quedarse más tiempo junto al rubio.
-¿Y tú qué harás hyung?-
-Yo prepararé lo que querías así cuando despiertes, podrás merendar un rico té con una porción del pastel de chocolate- acarició su rostro admirándolo embelesado y más al notar la mirada de emoción de Seungri al saber que prepararía pastel.
-¿No quieres ayuda?-
YoungBae negó y besó su frente.
-No hace falta. Vamos, así descansas que te hará bien, ¿sí?- tomando las bolsas que Seungri había dejado, entrelazó su mano libre con la de su novio para ir hacia la habitación.
El pelinegro asintió y se dejó guiar.
Una vez en el dormitorio, YoungBae soltó su mano para acomodar las bolsas al lado de uno de sus muebles.
-Después lo acomodaremos mejor. Ahora recuéstate en nuestra cama- susurró de una manera tan ronca que Seungri se estremeció.
“¿Nuestra cama?”
Pensó mientras se sentaba al borde del cómodo colchón y miró al rubio.
-¿Qué sucede, pequeño?- se acercó a él moviendo las sábanas y acolchado para que su novio se acomodara mejor.
-¿Puedo dormir así vestido?-
-Claro, ¿por qué no?-
-Porque… tal vez te molestaría-
-Para nada. Puedes dormir como más te sea cómodo- acariciando sus oscuros cabellos, se inclinó frente a un tímido Seungri para quitarle el calzado así se recostaba en la cama.
-Gracias hyung- antes de recostarse, besó la mejilla del rubio quien le sonrió dulce mientras lo arropaba.
“Me siento un niño…”
Hizo un puchero al sentirse de esa manera pero se relajó al sentir un fugaz beso en sus labios.
-No eres un niño. Tu novio te está mimando y es lo que más me gusta hacer-
“Creo que YoungBae conoce todas mis expresiones a la perfección o estoy siendo muy abierto con mis gestos”
Seungri mordió su labio inferior y sintió unos cuantos dulces besos por su rostro.
-Descansa. Te llamaré para merendar mi amor- susurró dulce y al notar cómo el pelinegro asentía cerrando sus ojos lentamente, besó la frente de su novio para finalmente irse del dormitorio.
El pelinegro no tuvo tiempo siquiera de avergonzarse por su dulce novio que se quedó dormido al instante.
**
Después de que merendaran y obviamente Seungri no dejó de elogiar el pastel de chocolate que su novio preparó, las horas comenzaron a pasar rápido por lo que ahora YoungBae se encontraba preparando la cena mientras que el pelinegro se había decidido por ir a darse una rápida ducha ya que deseaba poder ayudar a su novio.
Estaba todo muy tranquilo y Seungri comenzaba a relajarse poco a poco mientras la tibia agua de la ducha mojaba su cuerpo.
“Mañana comenzaré a buscar empleo. Necesito ayudar a YoungBae ahora que comencé a vivir con él…”
Ante ese pensamiento de la convivencia, Seungri no pudo evitar sonrojarse.
“Pensar que hace un tiempo atrás, precisamente antes de que mi hilo rojo se formara, lo odiaba sin razón o más bien porque sentía celos de que fuera más talentoso que yo. Y ahora somos una pareja que conviven juntos”
Mordió su labio inferior ya que pese a que no era como lo esperaba el poder convivir con su destinado, se sentía bien.
Dando un suspiro para calmar a su agitado corazón, decidió cerrar la llave del grifo de la ducha ya que no quería demorarse demasiado debido a que realmente quería ayudar a YoungBae aunque sea un poco.
Con cuidado de no resbalar, tomó la toalla y se secó rápidamente para poder salir.
Al recordar que se había olvidado lo más importante, maldijo por lo bajo pero como sus nuevas prendas estaban en el dormitorio, se apresuró en salir del baño.
Una vez afuera, dirigió su vista hacia donde había vistos las bolsas y frunció el ceño al no ver ninguna.
-Estaban aquí…- susurró y comenzó a buscarlas por toda la habitación, sin éxito por lo que llamó a YoungBae alto para que viniera ya que no quería que le diera frío al salir del dormitorio con el cuerpo húmedo.
Unos apresurados pasos se escucharon por el pasillo y finalmente el rubio se hizo presente con un gesto de preocupación hasta que notó a Seungri cubriéndose sólo con una toalla en su cintura por lo que desvió su vista un momento para controlarse ya que el cuerpo de su novio era demasiado sexy y tentador para él.
-¿Q-Qué sucede, pequeño?-
-¿No estaban aquí las bolsas con las prendas nuevas? Porque iba a vestirme y no las encuentro- miró alrededor ignorando lo nervioso que YoungBae estaba.
-Ah… mientras dormías, decidí lavarlas para que se le quite el aroma a nuevo por lo que se están secando afuera. Puedes tomar cualquier cosa que quieras vestir del armario- le señaló el mueble.
“Con razón no estaban aquí. Me recordó a mi madre que solía darle una lavada simple a las prendas nuevas por su peculiar olor…”
No pudo evitar sentirse un poco triste al recordarla por primera vez en un largo tiempo.
-De acuerdo, ahora tomaré prestadas una camiseta y bermuda… ¿y la ropa interior también la has lavado?- preguntó un poco avergonzado.
-No. Como sabía que te sentirías un poco incómodo por usar pantalones sin ropa interior, las dejé en la tercera cajonera de allí- le señaló otro mueble en donde tenía cinco cajoneras.
Seungri suspiró aliviado.
-Gracias hyung- le sonrió y al notar la mirada que le dedicaba el rubio, se acercó a él por instinto con claras intenciones de besarlo si no fuera porque el ruido de una olla hervir alertó a YoungBae.
-¡Olvidé que dejé hirviendo agua! Estaré en la cocina, cualquier cosa me llamas, ¿sí mi amor?- al notar cómo el pelinegro asentía, besó su frente para retirarse rápidamente.
“Me dieron ganas de tocarlo justo en el peor momento ya que cuando él cocina, está muy concentrado en lo que hace”
Mordió su labio inferior ya que sentía un cosquilleo en su entrepierna alertándolo que necesitaba tocar y ser tocado por YoungBae. Pero primero debía vestirse, calmarse y luego pensaría en qué momento sería ideal poder estar más íntimo con su novio.
**
La noche había pasado extremadamente rápida para Seungri ya que en un abrir y cerrar de ojos, estaban acostados descansando en la gran cama.
Eran las tres de la mañana y no hacía mucho que habían logrado acostarse debido a que estuvieron viendo un par de películas juntos en el living hasta que el menor sintió sueño por lo que YoungBae decidió que era mejor dormir en el cómodo colchón. Además, quería que el pelinegro descansara adecuadamente y que se relajara luego de un estresante y feo día.
Ante un extraño sueño, Seungri abrió sus ojos abruptamente y sintió cómo el rubio lo abrazaba por detrás, durmiendo plácidamente.
Como pudo, volteó su rostro para poder ver a YoungBae dormir y sonrió dulce al notar la tranquila expresión junto a un muy suave ronquido.
Sin poder evitarlo, acarició sus rubios cabellos logrando que el mayor se removiera un poco escondiendo su rostro sobre su pecho.
“Es muy tierno”
Sonrió y dio un suspiro mientras que desviaba su vista hacia el reloj despertador que YoungBae tenía sobre la mesita de luz notando que eran las siete de la mañana.
“Dudo poder dormir de nuevo”
Suspiró y comenzó a sentirse inquieto de nuevo por lo que apegó su cuerpo lo más que podía con el de YoungBae sintiendo cómo sus entrepiernas se rozaban levemente.
Al notar que el rubio también estaba levemente erecto, Seungri se aventuró a deslizar una de sus manos hacia la entrepierna de su novio metiéndola dentro del bóxer ajeno sintiendo cómo el pene de YoungBae crecía ante su tacto por lo que sonrió victorioso.
Pudo escuchar un jadeo ronco por parte de YoungBae por lo que mordió su labio inferior mientras que una morbosa y excitante idea se le cruzaba por la mente.
“No debería de molestarlo mientras duerme pero realmente quiero chupársela”
Pensó y al sentirse ansioso por hacerlo, poco a poco movió su cuerpo para poder descender debajo de las sábanas hasta que su rostro quedara frente al ahora duro pene de YoungBae.
Acariciándolo un poco más, le dio unas cuántas lamidas en toda la extensión sintiendo las notorias venas sobre la piel y se estremeció.
Abrió su boca para introducirse todo el miembro a la boca comenzando a succionar suavemente logrando que un dormido YoungBae jadeara ronco su nombre.
“No sé si es porque no veo pero puedo escuchar y sentir mejor a tal punto que lo despertaría para que me haga el amor”
Cerró sus ojos, pese a que no veía, para concentrarse mejor en succionar con más rapidez el miembro del rubio que poco a poco se humedecía dentro de su boca.
Desesperado, Seungri descendió su mano hacia su pene para poder quitar su miembro de su bóxer y así masturbarse rápidamente.
Sintiéndose ido por el placer, el menor ahora acariciaba los testículos de YoungBae con su mano libre.
De pronto, las sábanas se hicieron a un lado y abrió sus ojos lentamente para observar cómo YoungBae le dedicaba una mirada llena de lujuria.
-¿Tan temprano y ya m-me estás atacando, pequeño? Mmh- intentó sonreír pero jadeó ronco al sentir cómo sus testículos eran masajeados con un poco de fuerza.
Seungri quitó el pene de su boca y bajo la atenta mirada de su novio, lamió la punta mientras dejaba de masturbarse.
-N-No pude resistirme… te deseo hyung mmh- jadeó al sentir cómo el pie de YoungBae acariciaba su pene.
-Ven mi amor- susurró en un tono tan sensual que Seungri gimió bajo pero obedeció y en vez de colocarse a su lado, se subió sobre él ya sin su ropa interior que al parecer se quedó debajo de las sábanas.
Como pudo, YoungBae se colocó boca arriba para admirar la expresión de deseo del pelinegro.
-Te amo Seung Hyun- deslizó sus manos desde las rodillas de su novio hacia su trasero, masajeándolos con fuerza.
-T-También te amo mmh Young Bae aah- gimió al sentir un dedo tantear su entrada.
El rubio iba a prepararlo mejor pero Seungri lo detuvo mientras deslizaba su mano hacia atrás para tomar el húmedo y caliente pene de YoungBae.
-Estoy listo para recibirte, hyung- elevó un poco su cadera para poder guiar el miembro hacia su ano y así sentarse sobre él auto-penetrándose lentamente.
“Se siente tan bien”
Mordió su labio inferior mientras terminaba de meterse todo el miembro de su novio quien lo observaba embelesado.
-Realmente estás con ganas. Nunca te he visto así, pequeño mmh- jadeó al sentir cómo su miembro era apretado por el ano del menor.
-¿E-Eso es malo? Mmh- meneó su cadera de adelante hacia atrás.
YoungBae negó.
-Para nada. Ya te he dicho que amo cada faceta tuya y conocer las nuevas que sólo yo puedo apreciar, me fascinan- sonrió mientras se aferraba a la cintura del pelinegro, acariciándolo lo más que podía recibiendo a cambios, tímidos gemidos de satisfacción.
Seungri sonrió y colocando sus manos sobre el duro pecho del rubio, comenzó a subir y bajar lentamente.
-Mmh Bae aaah es tan bueno mmh- cerró sus ojos mientras aumentaba poco a poco el ritmo del sube y baja.
-Siempre que hacemos el amor se siente tan bien mmh Seungri- lo llamó en un jadeo provocando que el menor abriera sus ojos para observarlo.
Al notar la mirada que YoungBae le dedicaba, supo lo que quería por lo que inclinó su cuerpo para poder besarlo de manera lenta pero intensa.
El rubio saboreaba la boca de Seungri mientras deslizaba sus manos desde su trasero hacia la espalda baja de su novio quien jadeó entre el beso comenzando a mover su cadera con más rapidez.
“No sé qué me sucede pero me siento más sensible a su tacto”
Deshizo el beso y gimió alto al sentir una sutil mordida en su labio inferior junto a una ruda embestida que tocó su punto dulce.
-Aaah Bae ahí mmh aah- enderezó su cuerpo para montar mejor a YoungBae y tomó las manos ajenas que yacían en su trasero para llevarlas hacia su pecho.
-T-Tócame aaah mmh tócame más hyung aaah mmh- sin quitar el contacto visual, mordió su labio inferior completamente extasiado.
-Te ves tan mmh erótico mi amor- pellizcando con suavidad los pezones de su novio, lo embestía con rudeza cuando Seungri bajaba provocando que su pene tocara lo más profundo en el menor.
-AAAH MMH MÁS HYUNG MMH ERES TAN AAH JODIDAMENTE SEXY MMH- gimió más alto sintiendo cómo su vista se nublaba poco a poco.
YoungBae no lo resistió más y abrazó por la cintura a su novio moviéndose rápidamente para intercambiar posiciones quedando él sobre Seungri.
-Te amo demasiado Seung Hyun- confesó y atacando su boca en un salvaje beso, comenzó a penetrar como un poseso al menor quien enredó las piernas alrededor de su cadera haciendo presión para que no dejara de embestirlo con rudeza.
Jadeando ahogado entre el beso, Seungri clavó sus uñas en la ancha y sudada espalda del rubio dejando unas visibles marcas logrando que éste sintiera ardor pero poco le importó ya que estaba sumido en el placer.
Al sentir cómo Seungri comenzaba a tener espasmos de placer apretando su pene cada vez más, el mayor deshizo el beso provocando que el pelinegro gimiera ahogado.
-B-Bae mmh me vengo aaah tan bueno aaah mmmh más más aaah mmh- lo abrazó por el cuello mientras que el rubio se sujetaba de su pecho para no detener el ritmo de sus certeras embestidas.
-Hagámoslo j-juntos Seungri mmh- dio una ruda y profunda embestida logrando que el menor gimiera alto y ahogado mientras se corría sobre ambos abdómenes.
YoungBae apoyó su rostro sobre el hombro del pelinegro, mordiéndolo suavemente mientras que llenaba a su novio quien jadeó ante la sensación del semen recorrer su interior.
Respirando agitadamente, se quedaron abrazados sin moverse de la posición en la que estaban y de pronto, Seungri recordó algo importante.
“¿Cómo pude haber olvidado algo como eso?”
Frunció el ceño y cuando se sintió un poco más aliviado para poder hablar, dio un suspiro mientras acariciaba la rubia cabellera de su novio.
-Hyung- lo llamó en tono cansado, parpadeando lentamente.
YoungBae enderezó su rostro para mirarlo atento esperando a que hablara.
-¿Qué sucedió con la academia?- mordió su labio inferior al sentirse avergonzado por preguntar sobre ello justo después de hacer el amor.
El rubio rió al adivinar el por qué Seungri se había avergonzado y no pudo evitar besar sus labios con dulzura al notar el adorable puchero junto a un ceño fruncido que le dedicó por haberse reído.
Sin poder evitarlo, Seungri bostezó.
“No quiero dormirme ahora”
Pensó al sentir cómo su cuerpo comenzaba a relajarse nuevamente y más al sentir una suave caricia en sus cabellos.
-Será trasladada a un lugar más grande cerca del centro comercial y a partir de ayer, el dueño soy yo- confesó sin titubeos.
-¡¿Qué?!- lo miró sorprendido.
Necesitaba saber todo con lujos y detalles. Tenía muchas preguntas que hacer pero su cuerpo estaba comenzando a sentirse cansado por lo que no pudo evitar comenzar a parpadear pesadamente logrando maldecir mentalmente por lo que estaba haciendo un esfuerzo sobrehumano por mantenerse despierto y escuchar lo que YoungBae tenía para contarle pero le fue imposible ya que las caricias que su novio le dedicaba, sólo logró que cerrara sus ojos quedándose dormido al instante...