Los días, las semanas y los meses pasaron rápido. Ya era 28 de junio y me encontraba en mi trabajo, caminando por los pasillos, comprobando que todo esté limpio y en orden.
Había trabajado en la fábrica, de mesero, bar tender, vendedor de ropa, cadete, cocinero -por cierto, ese salió muy mal, no pregunten- y ahora estaba en un supermercado.
Aquí me iba realmente bien, hacía tres meses que había comenzado como cajero, luego como cajero principal, luego como monitor, luego sub gerente y ahora como gerente.
Me di cuenta que tenía madera para liderar y mantener todo organizado, y al parecer mi jefe lo había notado también, así que de a poco fue ascendiéndome y así es cómo terminé aquí. Revisando los pasillos, saludando a los demás empleados, acomodando una que otra cosa y conversando ligeramente con los cajeros.
No era el mejor trabajo del mundo, pero era algo. Algo bueno, siendo que no contaba con un título universitario y el sueldo me era suficiente para pagar las cuentas, el alquiler, la comida del mes y uno que otro capricho ligero.
El ambiente de trabajo también era bueno. Los cajeros eran todos muy amables, hablaba regularmente con ellos, e incluso habíamos salido todos juntos en grupo unas cuantas veces. Incluidos LuHan, el sub gerente, y JongDae uno de los chicos que trabajaba en stock.
En general, habíamos formado un lindo grupo de amigos. Irene, la cajera principal, era la única mujer del grupo. Nos cuidaba a todos muy bien, como una madre y la apreciábamos mucho por eso. Luego seguían JongIn y Sehun, los más pequeños, cajeros también. Molestos, burlistas pero muy divertidos. Luego se unieron JongDae, muy molesto también, Luhan, el mayor de todos pero con una cara de ángel impresionante, bastante tranquilo, y de vez en cuando se incluía el jefe Minseok.
Una vibración en mi bolsillo delantero me sacó de mis divagaciones y saqué el celular para comprobar qué era.
Channie
Su nombre brillaba en la pantalla y sonreí por ello.
Con los meses, Chanyeol y yo nos habíamos vuelto algo así como "cercanos". Todavía no nos conocíamos en persona pero ya estaba pensando en algo para solucionar ese tema.
Hablábamos diario, a la mañana cuando nos despertábamos, en nuestros descansos por la tarde y a la noche antes de dormir.
Sabía que Chanyeol vivía solo, sus padres vivían en su anterior casa en Daegu, amaba el color rojo, odiaba la comida picante, tenía una hermana mayor llamada YooRa, tenía un pequeño gato llamado Bobby -que por cierto, le dije que era nombre de perro pero me ignoró.- tenía 23 años y su cumpleaños era el 27 de Noviembre, era un poco más chico que yo en edad, pero de igual forma mucho más grande en tamaño porque me dijo que medía cerca de un metro noventa, había estado en el club del hurón cuando era pequeño y no sabía andar en bicicleta.
No había día que no haya hablado con él desde aquel 11 de Julio del año pasado y me parecía perfecto.
—Oye, Yeollie, falta poco para nuestro """"aniversario""""
—JAJAJAJA ¿por qué tantas comillas?
—No lo sé, déjame en paz.
—Está bien, está bien ¿tenemos aniversario? ¿aniversario de qué?
—¡Por supuesto que lo tenemos! Aniversario de habernos conocido
—¿Desde cuando y según quién? —Sabía que me estaba molestando, así que simplemente sonreí y me senté en una de las sillas que descansaban en los cambiadores.
—Desde el 11 de Julio del año pasado y según YO, quién más.
—Jajajaja Bien, bien. Tenemos aniversario, entiendo ¿debería darte un regalo?
—Jajaja, no es necesario, pero tenía pensado que, no sé. Tal vez podríamos conocernos en persona ¿qué te parece? :) — Esta vez su respuesta no llegó tan rápido como las anteriores, y supuse que estaba ocupado o algo así, de todas formas me dijo que había estado estudiando para un examen que tenía mañana, así que me limité a guardar mi celular de nuevo y terminar de cambiarme, para poder retirarme.
—Hey, Luhan!
—BaekHyunie —Respondió el rubio, sin mirarme. Muy concentrado en su celular.
—Hoy necesito retirarme antes, me preguntaba si podías cerrar todo. —Sus ojos castaños me miraron directamente y una sonrisa leve le adornó el rostro de porcelana que tenía mientras asentía.
— Si, Baek. No hay problema
—Muchas gracias, Lu. Te debo una
—Sí, y te la cobraré así que no te hagas. —Reí luego de ese comentario y me dirigí a la salida, terminando de saludar al resto de los empleados.
Luhan era un chico muy atractivo, de rasgos faciales delicados, delgado y de piernas largas. Su cabello rubio y peinado pulcramente, tapando a penas sus ojos, lo hacía aún más llamativo y me sentía un poco celoso por ello. No es por ser envidioso, Luhan realmente me caía muy bien, era amable y divertido. Pero estaba un poquitiiito celoso porque, antes de que él entrase a trabajar, el centro de los coqueteos tanto de clientes como de los mismos empleados, era yo. Y ahora lo era él.
También sentía un poco de lástima por él, ya que se notaba a leguas que no le gustaba recibir tanta atención.
Al salir por la puerta de entrada, miré las calles casi solitarias y me decidí por caminar hasta mi hogar. No sólo tenía nuevo trabajo, sino que también tenía nuevo departamento. Me había mudado a unas seis manzanas del supermercado, y aún estaba desempacando, por eso pedí salir un poco antes. Mañana era mi día libre, así que pensaba terminar de desempacar entre esta noche y mañana por la mañana, para no desperdiciar todo mi día libre sólo haciendo eso.
Al entrar, me quité el abrigo y los zapatos y me tiré en el sofá, junto al lado de las pocas cajas que quedaban, a mirar mi celular.
—Mmm, Baek. Creo que no podré verte ese día —Mentiría si dijera que ese mensaje no me decepcionó.
—Oh ¿por qué? :(
—Lo siento, pero sabes que estoy en exámenes y no salgo por ello.
—Si, tienes razón. Lo entiendo.
—Lo siento :(
—No hay problema, podremos vernos en otro momento ¿verdad? :)
—Sí, por supuesto que sí!
—Genial~
Nos despedimos por esa noche y me dediqué a terminar de armar una segunda biblioteca de madera y acomodar los libros en los estantes.
Para entonces ya eran pasadas las doce de la noche, y el número de cajas había disminuido bastante. Tenía demasiados libros, pero por suerte entraron todos en las dos bibliotecas que había armado y acomodado en mi sala.
Antes de acostarme a dormir, revisé un nuevo mensaje en mi celular que me subió el ánimo considerablemente.
—Tal vez que no podamos vernos ese día en persona, pero tengo una laptop, vieja. No le funcionan los parlantes ni el micrófono, pero podría descargar Skype y al menos vernos en video y chatear cuando tenga un descanso ¿qué te parece? —¿Que qué me parecía?, claramente me parecía una idea excelente. Al menos iba a poder interactuar así con Chanyeol hasta que podamos vernos en persona.
—Algo es algo —Murmuré antes de tipear mi mensaje de respuesta.
—Me parece una buena idea :)
—Bien, entonces te hablo mañana, Baekhyunie. Buenas noches :)
—Buenas noches~