Un padre en apuros por Katsumiloveles

PARTE 4

Hay momentos oscuros que cuando uno creer al fin encontrar su camino termina cayendo aún más profundo, con una sensación de desesperanza que cuando otro ser vivo te viera a los ojos superaría y diría “Ya no está vivo, solo es un cascaron vacío”, sin saber que esas palabras te seguirán lastimando.

Eso le pasaba a Obito, quien por unos efímeros momentos pensó que al fin podría tener amor, el amor que había perdido cuando tenía 10 años cuando sus padres murieron. Aunque no lo admitiese, buscaba amor, la soledad lo lastimaba, pero también era su mejor amiga.

Ante tal escenario de burlas y desesperanza un chico cualquiera llega a tocar sus fibras sensibles, talvez él dijo lo que necesita escuchar, le brindo aquello que pensó no merecer y lo hizo sentir vibrante, bello y hermosos, por ello su traición se sintió como la peor mierda del universo.

Cuando al fin pudo entender que lo amaba y se entregó completamente a un acto que lo hizo sentir vivo y completo, sin perjuicio, dónde solo era Obito y Kakashi y no el doncel Obito y el joven Hatake. Aquel momento también fue el más cruel.

¿Cómo paso de un cálido amarillo a un desagradable gris?

Tal vez se veía por venir el día que se detectó que era un doncel.

Un simple chequeo cambio todo   el sexo de Obito de: Masculino a Doncel, durante aquella “redada medica”, se encontré a 13 donceles, lo cual fue un chisme picante. No fue difícil darse cuenta, después de todo aquella preparatoria mostro un gran interés por los jóvenes con “la condición de doncel” que invitaron a una médica de renombre, la discípula de Tsunade.

Shizune decidió tomar aquel empleo ya que deseaba desenvolverse en un ámbito profesional donde Tsunade no estuviera presente, no porque odiase el título de discípula del gran médico, al contrario, se sentía orgullosa de ello, pero deseaba ser independiente en algunos aspectos, no podía confiar siempre en su amada madre-a si la consideraba, una madre-.

Así que acepto gustosa, lo primero que hizo fue pedir los resultados de los muchachos y estudio sus expedientes, luego los sito y hablo con ellos.

-Miren muchachos, sé que ahora es difícil digerir, pero no es nada fuera del otro mundo, no los hace seres diferentes.

Shizune miro la cara en blanco de los muchachos, obviamente la mayoría pensó en ser un joven rico con una esposa y un futuro brillante y arreglado, decir que podían tener un bebé era algo chocante, es decir si fueras una mujer y de la noche a la mañana te dijeran que puedes embarazar a otra mujer ¿eso no es una premisa impactante?

-Verán ,mi maestra ha trabajado con varios casos, y la verdad no hay mucha diferencia entre ustedes y  los otros muchachos, simplemente tienen una capacidad extra, la de concebir-uno de los muchachos ricos se paró exaltado, obviamente no podía aceptar aquel hecho, Shizune suspiro -Chico, que puedas concebir no significa que debas solo acostarte con otro varón, puedes seguir saliendo con una mujer y no hay ninguna perdida, claro que depende de tu decisión, ser un doncel no te da un paso automático a ser una incubadora de bebes. Aunque, ciertamente tener uno es complicado. Por ello me gustaría compartir mis experiencias y ofrecerle mi ayuda.

-¡Dijiste que no nos hacía diferente! ¿porque deberíamos tener cuidado extra?-otro de los muchachos hablo muy frustrado.

-Es cierto. Si bien dije que son como cualquier otro ser vivo en la tierra, también debo recalcar que deben de tener cuidados, por ejemplo: durante este tiempo es común que los dolores estomacales se hagan presentes, obviamente un chequeo rutinario no les dirá que tienen una úlcera estomacal o una gastritis ¿pero saben qué hacer?, simplemente trato de darles los cuidados a tener en cuenta.

-¡Es indignante!-otro chico tenía la cara roja de la furia, ¿decía que eran chicos como otros?, si deben tener cuidados extras obviamente los hacia diferentes ¡esa doctora solo se contradecía!

-¡Suficiente!-Shizune quien al ser criada por cierta rubia temperamental ,adquirido cierto temperamento. Estampo su puño contra la mesa y los miro penetrantemente- ¿Es que son pequeños bebes?, ¡obviamente incluso los bebes entenderían!, por el hecho que otras personas no se cuiden no significa que ustedes también lo deban hacer, ¿Qué pasara cunado se embaracen? ¿Qué harán?, y no chico, no siempre para que el embarazo se lleve a cabo debe hacerse por medio del contacto carnal directo.

Obito quien estaba callado junto a los demás chicos detuvieron su alboroto, ¿Cómo que sin contacto carnal?

-Bueno, verán hay casos que se producen y no es por el espíritu Santo. Como habrán oído, una mujer puede llegar a embarazarse solo por el líquido pre - seminal u tener contacto con cualquier objeto con dicho líquido, lo cual no significa un embarazo seguro, pero si hay una tasa de posibilidad.

Shizune sonrió al ver que tenía la atención de los muchachos. Ojojojojo lo aprovecharía muy bien.

Luego de unas dos horas de charla introductoria los dejo ir felizmente, mientras sacudía la mano con una sonrisa los muchachos salieron tambaleándose.

Obito fue jalado por una mano, antes de que pudiese gritar del asombro la cara atractiva de Kakashi se asomó en sus ojos, este hizo el gesto de silencio, estaba tan cerca que podía ver las pestañas rizadas del albino.

Obito sintió como un Babump se precipito en su pecho, ¿Por qué se sentía así?, desde que se enteró que era doncel aquel sentimiento se hacía cada vez más presente, difícil de ignorar, tal vez la premisa de estar con Kakashi no parecía imposible…Obito negó en su mente ¿Qué estaba pensando?

-¿Qué sucede?-Kakashi alejo n poco su rostro mientras sonreía -¿Te comió la lenga el gato? O ¿es que la nueva enfermera te dijo algo impactante?

Obito se sonrojó furiosamente, tenía la sensación que Kakashi podía ir sus vergonzosos pensamientos, lo hacía sentir vulnerable…desnudo.

Kakashi rio por lo bajo, su voz era ligeramente profunda, talvez cuando pasase de los 17 su voz sería más profunda y sexy. Obito se apartó tratando de no pensar en tonterías.

-N-no te concierne, es privado.

El albino seguido a Obito, para este punto los demás chicos que lo acompañaron en la enfermería ya se habían ido a sus salones. La enfermería se encontraba algo alejada de las aulas, con harás de ser un sitio silencioso y relajante así que el tramo era algo largo y era bueno para conversar.

Obito podía conversar tranquilamente con Kakashi sin ser molestad con las vistas chismosas y la mirada sofocante de Rin.

-Es molesto. -mascullo el azabache-Ni siquiera podremos terminar el proyecto.

Kakashi asintió, desde que salió el resultado de la prueba los tíos de Obito pegaron el grito al cielo y se lo llevaron alegando que ya no podían estar juntos, algo así como los niños y las niñas no pueden estar a solas durante mucho tiempo, incluso su padre quien era muy trabajador vino de urgencia para pedirle, no, exigirle que rompa con su amistad y se mantenga alejado del chico.

-Sí, es una tontería.

Obito miro el perfil del Hatake - ¿Tu padre no te dijo algo? -murmuro.

-Si, ya sabes, es una tontería de todos modos ¿Por qué deberá hacerle caso?

-….-Obito apretó sus manos. El clima era normal y el sol se filtraba por las ventanas dando una sensación tranquila- ¿No te meterás en problemas?

Kakashi desvió la vista y miro fijamente a Obito, sabía que el chico estaba siendo algo receloso, ahora ya no podían estar tranquilos como antes, ¿Por qué debería ser así?, cuando solo eran “dos chicos” al menos podían conversar tranquilos, pero ahora que uno es un doncel ya no podía ni mirarse porque supuestamente deseaban encamarse.

No importaba nada, si solo era Obito estaba bien, no le gustaba que el chico estuviese triste.

-Se ha ido, no sé cuándo volverá ni me importa.

El viento sacudió ligeramente el cabello plateado de Kakashi, parecía hilo de plata ondeando con el viento.

Obito sintió que no podía seguir mirándolo, su corazón palpitaba fuertemente y sentía la sangre en sus mejillas, entre más pensaba si estaba sonrojado el sonrojo aumentaba de volumen.

-Obito, no me gusta que me evites, ya te dije antes, no me importa si eres un doncel o no, tú eres mi amigo más preciado.

Amigo.

Esa palabra lo dejo helado.

Fue como si el calor se hubiese drenado. Sabía que Kakashi lo apreciaba, pero aquella palabra le dolió.

Antes que Kakashi dijese más Obito solo susurro algo antes de irse rápidamente, Kakashi solo suspiro, a veces no podía entender al muchacho, pero tampoco era un caqui suave así que decidió ir tras este. Ya había sido alineado cuando Obito supo de que era doncel, no le gustaba eso, además no era su estilo ser tan reservado.

Obito se sentía frustrado, obviamente estaban hablando normalmente, pero de la nada reaccionó de esa manera ¿era un tonto?, tal vez estaba frustrado.

En casa no podía estar tranquilo, las miradas molestas eran más pesadas ,Oyama en un principio trato de alejarlo de la cocina como si tocar los platos u algún ingrediente transformaría a todos en especies raras, aunque no se llevaba bien con ella aun si dolía ese trato, incluso lo alejaron de Kakashi como si fuese una especie de mujerzuela que trataba de subirse en su cama y ascender como un fénix, sospecho que los adultos veían demasiadas novelas de ese estilo…aunque no podía negar que se sentía diferente con respecto a la palabra de simple amistad.

Ahora no solo era el huérfano que fue acogido por sus benevolentes tíos, ahora era el doncel huérfano de ojos blancos (*) que solo arrastra a la familia de su tío y trato de seducir a un chico de segunda generación.

Frustrante.

El sonido de pasos lo despertaron, conocía muy bien a quien le pertenencia, pero realmente no deseaba verlo a la cara, se había portado tan extravagante ¿Cómo no avergonzarse?

-A qui estas.

Kakashi al no recibir respuesta del azabache suspiro sonoramente, no sabía cómo consolar a los demás, era un joven brusco e impulsivo, el azabache que tenía delante suyo era especial y deseaba abrasarlo y decirle palabras reconfortantes como haría cualquier caballero, pero temía al rechazo y con la adición de que el chico era un doncel ¿Qué pasaría si Obito lo malentendiera y pensara que es un pervertido que deseaba solo experimentar? Prefería dejarlo, así como una simple amistad, el factor de “quizás” era más esperanzador que un rechazo contundente.

-Oye, Obito ,yo…

-Yo puedo tener un bebe…¿puedes creerlo? , yo aun no… apenas puedo subsistirme y ahora tendré que lidiar con esta etiqueta de doncel por toda mi vida. Realmente me saque la lotería en la vida.

Obito simplemente derramo sus preocupaciones, había actúa imprudente hace un momento y pensó que jamás volvería a verle la cara a Kakashi, pero en un segundo después ya le estaba abriendo su corazón nuevamente , a veces le aterraba lo fácilmente que podía olvidar el dolor(aunque nunca lo olvidara simplemente este volvería nuevamente y con fuerza cuando se derrumbase),ya no tenía a Rin a la cual había considerado como un ángel y su mejor amiga, no tenía padres y sus tíos no lo consideraban como una familia, solo tenía a Kakashi. Quiso reír. Un amigo era más valioso que sus lazos sanguíneos, que irónico y espeluznante.

Las emociones de Obito eran un lio sumando las hormonas, simplemente en un momento comenzó a sollozar. Kakashi no sabía cómo responder, hace poco el chico parecía molesto, luego pensativo y finalmente triste y adolorido.

Aunque siempre estuvo rodeado de personas(Kakashi) nunca estuvo completo, esos solo eran aduladores o simplemente pensaban que estar con una cara bonita ya era un punto extra para ellos, simplemente no le importo pero todavía era una persona, aunque no le importarse no tener un amigo cercano siempre pensó en sus padres, su hermosa madre quien en público le tomaba la mano y besaba suavemente su mejilla, al yo de 5 años de Kakashi le gustaba esa madre pero solo la podía ver durante los banquete y eventos donde había mucha gente, cuando regresaban a casa simplemente era dejado en una esquina, su tierna mente siempre ansiaba esos eventos pero al final entendió el actuar de su madre y de su padre, se resignó a buscar cariño y decidió buscar algo que lo hiciera feliz y vibrante esa era una meta en su vida y lo hallo en la fotografía, podía  captar lo más bello y revivirlo cada vez con deleite, cuándo estaba deprimido y miraba su álbum de fotos siempre sus ánimos subían, eventualmente fue codicioso y quiso atrapar todo lo bello y fascinante en el lente de una cámara. Hasta que conoció a Obito, tuvo un amigo eventualmente supo que esa amistad no era simple, era como tomar una magnifica foto a un atardecer perfecto, así que al verlo tan triste simplemente pensó en el acto que siempre anhelo de sus padres. Le dio un abrazo y lo apoyo en su pecho.

Ha veces las acciones dicen mil palabras y las mil palabras se reducen a una acción.

*************

 Rin llego a su casa, hace meses que dejo de ir con Obito a clases y ahora ni siquiera podía hablar tan seguido con Kakashi, este último dejo de verla.

“Seguro le aterra estar cerca de mi casa por su culpa”

Rin miro amargamente el ático - habitación del azabache y sus labios se apretaron.

Ella fue buena, apoyó a este chico problemático y lo defendió cada vez que se metía en problemas, pero una vez que los maestros se enterasen de que era huérfano inmediatamente se ablandaban, ¿Qué importaba si ella sacaba altas calificaciones? Todos consolaban a Obito el cual apenas se esforzaba. Incluso sus amigos.

Cuando se enteró que este era un doncel solo pensó que era retribución, cuando vio que todo volvió como era en un inicio se sintió calmada era como si las piezas estuvieran devueltas en su lugar.

Ella volvió   ser feliz.

Pero Kakashi ya no la veía.

Rin no se rindió, él    la había fotografiado y la trato dulcemente, ella era su musa y ni Obito ni nadie le arrebatarían ese lugar.

La puerta de la entrada de la casa se abrió, al girarse vio aparecer a Obito, esta tenía los ojos hinchados y lucia cansado.

Rin pensó que este era un hipócrita, hoy habían tenido un examen sorpresa y tareas extenuantes ya que se acercaba el festival, pero el chico solo fue a la enfermería y fue escusado ¿Por qué tendría que estar cansado?

A regañadientes Rin le hablo-Madre dice que prepararas la cena, Yuko vendrá de visita, no hay verduras en la despensa tendrás que ir al supermercado, dentro de poco serán las 7, debes darte prisa.

Luego se giró y encerró en su habitación, ella ya nunca lo ayudaría. Miro sus manos algo cuarteadas y frunció el ceño, sus demás amigas tenían las manos tersas como perlas y ella por querer ser una buena prima estropeo sus manos, su madre tenía razón debía ser cada vez más hermosa así Kakashi solo la vera a ella.

La niña abrió un cajón de su cómoda y saco una crema humectante, esta era un poco cara, pero tenía un olor muy rico y refrescante, antes ella adoraba esta crema y era un poco reacia a gastarla, pero hoy supo que esta cosita era basura en boca de sus amigas. Si deseaba tener resultados debía dejar de conformarse con algo barato, necesitaba ser bonita, necesitaba estar radiante porque ella estaba enamorada y merecía ese amor, ya no sacrificaría nada a nadie.

Tiro la botellita a la papelera y busco su celular.

-Madre-una vez el otro lado se conectó hablo-Si acabo de llegar, sí ya le dije lo que tienen hacer. Claro. Madre, se acaba mi crema de manos…no, no compres nada, solo dame el dinero yo iré a comprarlos personalmente junto a mis amigas. Sí, gracias madre.

Tras colgar suspiro, si deseaba algo realmente caro siempre que mencionaba a sus conocidas ricas sus padres inéditamente le daban dinero sin chistar.

                                                                          *********

Obito hizo la cena, ignoró las miradas insidiosas y solo comió su parte, no tenía mucha hambre, en realidad solo estaba aturdido.

Tras terminar de lavar y secar los trastes arrastró su cuerpo a su habitación.

Haber llorado lo saco tanto que ni siquiera podía mover un musculo, pero tenía tareas así que tenía que estar despierto.

Su celular vibro contra su cuerpo. Generalmente no se despegaba de este aparato y lo escondía en su cuerpo cuando se quedaba en casa de su tía.

Inmediatamente miro la pantalla led.

Al ver que era Kakashi, inmediatamente se sintió suave por todas partes.

Luego de llorar en sus hombros algo cambio, no sabía bien que, pero ahora ya no podía ni mirarlo fijamente antes de sentir la sangre en su mejilla y desviar la mirada. Antes no era tanto pero ahora era imposible ignorar el latido de su corazón y le preocupaba ser descubierto por el albino.

Pero Kakashi fue suave con él.

Estaba asustado, pues sentía que aquel extraño sentimiento podría ser correspondido.

El sueño fue olvidado y charló con el albino vía mensaje, tras despedirse de este, sentía que podía terminar sus deberes e incluso dar una limpieza profunda a esa casa.

Esa noche soñó con sus padres.

Las caras antes borrosas y difusas hoy eran perfectamente claras, él nunca había olvidado sus caras, pero era doloroso recordar los bonitos ojos de su amable padre y la cara amorosa de su madre, pero hoy los vio y sintió nostalgia y cariño.

-Mi pequeño príncipe-su padre tenía ojos claros y cejas redondas, una cara de un caballero de antaño y amable, siempre lo llamaba el pequeño príncipe y adoraba leerle el cuento del” principito”, aun estando cansado siempre trataba de ser la montura del apuesto príncipe y jugar en la sala.

Su madre tenía el cabello negro y suave como la seda, generalmente lo ataba en una coleta baja y suelta y le encantaba las faldas largas que podían extenderse cuando daba vueltas, siempre se agachaba a la altura del pequeño Obito y le preguntaba expectante- ¿Hoy a mamá le queda bien esta falda?, él pequeño Obito que opina.

Y como siempre él decía que su madre era el hada más bella del mundo, su madre al oírlo siempre sonreía y curvaba los ojos, le daba un beso en la mejilla y lo abrazaba con ternura.

Incluso a veces la elegía el vestido para su mamá, le gustaba aquel vestido rosado que la hacía ver como el hada de las flores de cerezo.

Amaba a sus padres y sus pares lo amaban.

Ese día habían decidido ir de viaje, papá alisto las cosas para el picnic y la guardó en el carro, mientras que su madre vestía el vestido rosado que Obito previamente eligió.

Lo tomo de la mano y ese día juntos se divirtieron.

Al final cuando regresaban, comenzó a llover, su padre aparco y espero que la lluvia cesase, tenía miedo de accidentarse si conducía en medio de la llovizna una vez que esta termino reanudo su camino, pero al final él no era quien debía tener cuidado.

Solo recordó cómo se sacudió el auto, pero en el sueño pudo revivir todo con claridad como un espectador.

Un auto los envistió y el pequeño vehículo de su padre giro y patino, su madre grito asustada y abrazo a su bebé, instintivamente lo hundió dentro de su pecho antes de que el auto se estrellara contra la pared sólida.

Ese fue el último abrazo de su madre.

Cuando Obito pensó que despertaría de aquel sueño tan doloroso, fue abrasado dulcemente, ese abrazo le recordó a su madre, cuándo vio su entorno se dio cuenta que era el mismo sitio de esa mañana y quien lo abrazaba era Kakashi, este lo miro con los mismos ojos que tenía su padre para su madre.

Ahhhh….entiendo. Pensó Obito. Entonces despertó.

Al día siguiente Obito despertó temprano y aspiro el aire fresco, se sentía liviano como en una nube, se alisto  para la escuela, inesperadamente pensó que el uniforme era muy soso, entonces al percatarse que deseaba arreglarse recordó a su madre, quien a pesar que siempre era guapa se daba un tiempo peinándose suavemente mientras reía.

Obito no lloro ante aquel recuerdo, solo rio bajamente como si le digiera a su madre que la entendía y se sentía igual.

Estaba enamorado.

De un chico, pero le daba igual. Después de todo siempre fue problemático ¿no?

-Y a este ¿Qué le pasa? -su tío noto a Obito casi bailando, se veía distinto.

-Algún bicho le pico-kouichi se encogió de hombros, pero sus ojos miraban furtivamente al chico, talvez era por que el chico era un doncel, pero su rostro lucia suave y brillante y sus ojos redondos eran como uvas negras reluciente, incluso su uniforme bien arreglado parecía darle una nueva apariencia. No era una mujer voluptuosa como Yuko pero supuso que todos los donceles tenían el atributo de ser hermosos.

Rin frunció el ceño levemente al ver a su hermano, luego miro a Obito y se perdió en sus pensamientos.

Cuando fue hora del receso, Obito se dirigió “al lugar secreto” que Kakashi le había mostrado una vez luego le mensajeo y espero pacientemente con las manos detrás de su espalda, sus dedos se entrelazaban y el dueño de estos solo se movía nerviosamente.

Cuando diviso a Obito una sonrisa involuntaria fue suprimida.

-¿Qué sucede—

Las palabras del albino fueron interrumpidas por el repentino abrazo de oso del azabache, Kakashi tenía dignos de interrogación en la cabeza hasta que sintió un latido ensordecedor del pecho de Obito, estaban tan cerca que aquel latido traspaso su camisa y perforo sus poros.

Bump-bump-bump

Como un lenguaje predeterminado, su corazón empezó a latir rápidamente como si estuviera respondiendo a esos latidos.

Ambos latidos se fundieron y llenaron sus oídos y sus cabezas.

Obito alzo la vista y cruzo la mirada con Kakashi.

Entonces sonrió ampliamente, tanto que sus ojos casi se vuelven una línea.

Kakashi se sonrojó, sus orejas se vieron afectadas y giro nerviosamente la cara.

Obito quien bio aquella reacción estaba algo sorprendido y luego rio bajamente.

Se sentía un tonto, un tonto muy feliz.

Ese día ambos fueron los últimos en salir, cuándo no vieron a nadie furtivamente se tomaron de las manos hasta el coche que siempre recogía al albino.

-Yo…¿puedo llevarte a casa?

Obito asintió energéticamente, sus ojos estaban acuosos y suaves. Kakashi se atragantó.

-…¿podrías dejar de mirarme así?

-¿Qué pasa?¿te molesta?

Kakashi simplemente giro el rostro avergonzado, Obito miro esto y rio alegremente.

-No sabía que el gran joven amo Kakashi fuese tan tímido como una doncella jajaja

-…Cállate.

El chofer miro la interacción de ambos tomo su móvil, pero tras unos segundos lo volvió a guardar, tras mirar el retrovisor noto la mirada fría de Kakashi quien al ver que el chofer no llamo a su padre hablando su expresión y murmuro un gracias entre sus labios.

El chofer negó suavemente.

El conocía a este joven maestro tanto como el viejo mayordomo de la casa, ambos sabían cuánto anhelaba el amor de sus padres.

Mientras conducía, el chófer recordó un incidente en particular.

Su joven amo en aquel entonces tenía 5 años y llevaba puesta una chaqueta exquisita y lloraba tristemente, el mayordomo trataba de consolarlo.

-No llore joven amo, no decía usted que no le gustaban esas personas extrañas y de mirada fea.

El niño negó mientras seguía sollozando.

-Quiero que mamá me bese la mejilla…hick…papá me lleve de la mano…

El viejo mayordomo arrugo el rostro, sus arrugas parecían fundirse con su piel dándole a sus ojos una mirada adolorida. El mayordomo abrazo al niño y lo consoló.

Entonces en aquel entonces tenía poco de 25 años y tomaba el trabajo de su padre quien fue el anterior chofer de la casa, comprendió que el niño que parecía mimado y arrogante era después de todo un niño que anhelaba el beso de su madre y el abrazo de su padre.

El chofer detuvo el auto en la entrada del vecindario del barrio donde vivía Obito, miro como los chicos se despedían con la mirada; antes de que el joven de cabello negro se fuera se volteo rápidamente y le dio un beso fugaz al albino antes de salir corriendo.

El joven amo tenía una sonrisa tonta durante todo el camino de regreso.

Los jóvenes eran tontos enamorados y el chofer creía firmemente que verlos le daban años de vida, decidió que volviendo a casa junto a su esposa reviviría su época de juventud desvergonzada y le recogería flores del campo.

Shizune como enfermera siempre se reunía una o dos veces a la semana con los donceles para darle charlas y concejos, incluso a veces parecía una consejera emocional, pero al final se encariño con esos chicos en especial con los dos muchos becados.

Uno era Obito de 15 años y el otro Bore de 17 años, a ellos les daba un poco más de atención considerando que no eran tan ricos y s eles dificultaría tener citas médicas, después de todo el campo con respecto a los donceles era un área en ciernes y muy pocos estaban dispuestos a profundizar y dar una ayuda desinteresada, generalmente solo los veían como nuevos humanos experimentales. A la chica le desagrada aquella idea, obviamente era algo shockeante enterarse que podían dar a luz a niños, pero al final en vez de recibir ayuda solo eran vistos como bichos raros, por eso ella dio todo su corazón en hacerles entender que era seres normales, que podían enamorarse de quien sea sin importarles los demás y pocos a poco estaba lográndolo.

Se sintió feliz.

Otro que era feliz era Obito quien ahora hablaba sin falta con su novio. Era su primera relación y no sabía qué hacer, pero las boberías fluían tan suavemente que daba miedo.

Ahhh era un tonto enamorado.

Solía reunirse en secreto en la preparatoria, incluso se daban ligeros besos y reían de sus caras luego. Solían pedirle al chofer que les regalara una vuelta extra en el carro e incluso una vez se dieron una escapada al cine.

Claro que después de que Oyama se enterase de que no asisto a clases le dio una cachetada que lo tumbo al suelo, Obito siguió sonriendo aterrando a la mujer ¿acaso había creado a un mutante masoquista?

Dia tras dia, Obito parecía volverse cada vez más brillante y hermoso, aquello no pasó desapercibido por Rin quien no entendía porque el chico parecía volverse más bonito si ella era quien tenía que esforzarse por verse linda, comenzó una dieta y a correr, humectaba su cabello y hacia una rutina durante el día y la noche para cuidar su piel, no veía que Obito se esforzase, pero todos decían que el chico se veía cada vez más lindo.

¿Por qué?

Un día Rin se escabullo al cuarto del chico, aunque volcase todo no hayo nada, solo un par de botellas de bonito aspecto, pero bacías ¿Obito se estaba interesando en el reciclaje?, no le dio importancia.

Pero Obito parecía querer verla infeliz.

Todos los maestros decían que el chico era agradable. ¿No fueron ellos los cuales lo criticaban por vago y la ponían a ella como un buen ejemplo?

¿Qué les pasaba a todos?

¿Qué le pasaba a kakashi? ¿porque no la veía? Talvez no era suficientemente largo su cabello o su piel aun no era tan lisa y suave como un huevo…ella se siguió esforzando, llamándolo con su mente, Kakakshi nótame, estoy aquí ¡Kakashi me gustas por favor mírame!

Pero al final termino humillada…el día de la exposición de las fotos ¡Obito la humillo!

Dejo que ella pensara que era la única modelo, que era la única para kakashi y en secreto lo sedujo con aquel cuerpo deforme….¿cómo un hombre podía compararse con una mujer?

Pero todos decían que las fotos donde salió Obito eran superiores, hermosas.

Entonces Obito siempre supo eso y se reía de ella al pensar cómo se ilusionaba ¿verdad?, él sabía que le gustaba Kakashi así que lo sedujo al igual que a su hermano, si, ella lo descubrió, este sin vergüenza siempre se paseaba a los ojos de su hermano mayor y por eso lo volvió así ¿no?

Mientras Rin lloraba amargamente, Óbito miraba con deleite las fotos, todas ellas eran preciosas incluso donde Rin salía, se veía el amor de Kakakshi en cada toma y se avergonzó al verse en ellas, el lucia tan ordinario, pero Kakashi las exhibía con orgullo.

Él lo presumía con orgullo y amor, a él, lo atesoraba y apreciaba.

Tras culminar aquel evento, Kakakshi se llevó a Obito a su casa, a veces solían reunirse allí pero hoy estaba feliz, ya que sus padres dijeron que no volverían por varios días así que tendrían todo el tiempo del mundo sin temor a ser descubiertos.

Al principio Obito era tímido al estar en la habitación de su pareja, pero ahora podía rodar libremente, ambos charlaron felizmente.

-Oí que Bore dejara los estudios -Obito se lamentó, había formado un pequeño lazo con el grupo de donceles-dijo que ya no podría costarse la matrícula y deseaba ayudar en casa.

-Parece penoso-Kakashi acomodo su trofeo del primer puesto-

-Aja, lo dices así porque no sabes cuan caras son las matrículas-Obito se quejó.

-Pero lo valen ¿no?-Obito frunció el ceño, en efecto lo valían, así que solo le lanzo la almohada. Kakashi rio alegremente mientras se acercaba a contratacar.

Ambos tuvieron una pequeña pélela de almohadas mientras reían, finalmente quedaron acostados en la gran cama del albino, sus ojos se conectaron y se dieron suaves besos, ya lo habían hecho antes y solo aquel simple roce les bastaba.

Obito en un inicio creyó que el albino iba ser más manos sueltas y pervertido, pero inesperadamente era tímido tanto que se sorprendió ¿no fue este quien lo masturbo mientras miraban una revisa parara adultos?

¡inesperadamente era adorable!

Si bien su romance no tenía ni un mes, Obito quería fundirse con Kakashi, el amor lo llevo a la octava nube así que decidió darle un regalo por su primer puesto, claro que se sentía nervioso, pero también era una prueba, si lo amaba debía aceptar su cuerpo, aquel cuerpo capaz de tener un bebé.

Así que activamente profundizo torpemente el beso ,kakashi correspondió al inicio pero al ver que el azabache estaba dispuesto a pasar a la siguiente fase lo detuvo en seco.

-¿Por qué?...no te gusta-Obito parecía herido ,miro su pecho plano y pensó en las revistas prono de esa vez, ellas tenían cuerpos subes y curvilíneos  y el solo un cuerpo flácido.

Kakashi negó, parecía que el gato se comió la lengua, no sabía que decir así que simplemente le lanzó una mirada lamentable.

-Es muy temprano-susurro, quería decirle que deseaba mimarlo más.

-Pero yo quiero-Obito se armó de valor, talvez era su imprudencia juvenil, talvez estaban ciegamente enamorado-quiero que me abrases.

-Pero…¿y si después no te gusto?-Kakashi parecía inseguro, y si después de consumir el acto Obito lo encontraba repulsivo, eso lo aterraba, podía hablar vulgarmente del sexo pero también era su primera vez, tenía miedo.

Obito pareció entender y se disculpó, ambos se miraron unos a otros.

Así también parecía estar bien.

Kakashi acaricio suavemente las mejillas del chico, sus dedos se deslizaron por la mejilla de este.

-Me gustas.

-A mí también.

Se besaron tiernamente.

Al final Obito volvió a su casa, ya había pasado tres horas con su amando, pero solo parecían tres segundos, simplemente se miraron y rieron, pero fue suficiente.

El problema fue que olvidaron a Rin ,la niña estaba llorando en brazos de su madre, se sentía humillada y triste, Oyama la abrazo y maldijo a Obito.

Su tío también estaba molesto y ni hablar de Kouichi.

Le habían prohibido reunirse con el albino y resulta que lo hizo y encima se burló de Rin, ella que fue buena con el ¿Cómo se atrevió?

Así que cuando Obito llego a casa recibió una golpiza.

Su tío era un hombre corpulento así que los golpes fueron más duros que Oyama,Rin miro fríamente como Obito se encogió, antes hubiese sentido lastima  pero ahora tenía rabia, este chico fingía ser lamentable y le arrebataba todo, ya lo entendía así que solo miro como recibía su merecido, su madre no dejo de abrasarla y decirle bonitas palabras ,Obito no pudo evitar gemir de dolor hace un tiempo que no recibía esos golpes y su cuerpo estuvo muy sensible, incluso suoichi parecía estar particularmente deseoso de descargar su ira.

Tras aquello Obito falto una semana   clases, Oyama creo una mentira al azar y Rin dio fe de ello.

Se difundió el rumor de que Obito había sido pillado con un chico al azar y fue castigado sin salir de casa, nadie sabía que estaba tendido en su cama con fiebre.

Kakashi intentó contactarlo, pero Obito no respondió. Durante la pequeña sección de golpes se percataron de aquel aparato, lo cual solo despertó ira. Rin aconsejo desechar el objeto alegando que estaba inservible, la pantalla estaba algo quebrada por el impacto y no encendía, pero podría contactase con un técnico y revisar los registros, su sexto sentido le decía que descubriría algo o mejor dicho confirmaría algo.

Cuando Obito volvió a clases no hablo con Kakashi y se retiró de las clases adicionales que ofrecía Shizune la chica solo asintió no podía obligar al chico a quedarse, aunque sospechaba que este no deseaba dejar las lecciones y consejos médicos que ella daba.

Durante el recreo el albino se pacato que Obito no estaba así que supuso que se reunirían en su lugar secreto y allí lo encontró.

El jovencito ni bien lo vio comenzó a llorar y le dijo que le quitaron el teléfono. Kakashi quiso abrasarlo, pero al ver la mueca de dolor que hizo se alarmo.

-Déjame ver tu cuerpo-pidió, pero Obito negó, Kakashi lo hubiese dejado pasar, pero conocía a esos tíos y sabía que pudo haberle pasado.

Así que insistió incluso en un momento de ira casi le arranca la camisa solo se detuvo al ver al chico romper en llanto.

-Lo siento, lo siento-Kakashi se disculpó sinceramente, apoyándose sobre el chico-yo debí buscarte antes.

Sus padres ya se habían dado cuenta que siguió contactándose con Obito y habían puesto restricciones más severas, después de todo estos eran sus tutores legales solo podía obedecer, pero tuvo miedo así que no fue a buscar a su novio pensando que empeoraría las cosas, era un cobarde, miró con pena los moretones que tenían un color verdoso y marrón.

Obito solo cubrió su rostro y dijo que se veía feo.

Kakashi sintió pena y rabio ¿alguien que sufre maltrato podía decir que se veía feo?, los golpes, las cicatrices todos ellos fueron infligidos por otros ¿Por qué decía que estaba feo? Odiaba ver llorar al chico, él siempre debía sonreí r. Le había fallado como novio, se disculpó mientras tiernamente besaba los moretones, trataba de decirle que no era feo, le gustaba y sentía ser tan miedoso.

Entonces audazmente propuso-Huyamos-miro con ardor al chico que tenía debajo suyo-huyamos legos y seamos felices.

¿Cómo dos adolescentes, sin estudios, sin dinero, podrían ser felices huyendo?, era una idea estúpida, pero para ambos fue la mejor salida.

Kakashi en caso no tenía padres, si sus padres decían algo los empleados debían obedecer y eso incluso se trasfería para él, debía ser un buen chico y orgullo de la casa así decían que debía dejar su amor por la fotografía, así debiera dejar a Obito. No quería.

Obito ya no tenía a nadie, sus padres estaban muertos, sus tíos lo odiaban, ni contar con sus primos. Ahora solo tenía a Kakashi.

¿Qué podían perder?

Se tenían, era suficiente.

Así que ambos decidieron huir, no pidieron ayudad a nadie, ya que sus tutores legales estaban ahí nadie los ayudaría, no podían confiar ni en los maestros después de todo ¿Por qué ellos se molestarían en dos mocosos?

Así que ambos chicos decidieron huir, querían hacerlo en ese instante, pero sabían que necesitarían prepararse. Ambos rieron suavemente y planearon su huida.

Aunque a Obito le dolía un poco los moretones, pero estaba feliz, estaría con la única persona que lo amaba, así que decidió aguantar.

Obito espero a que Kakashi volviese a clases y decidió salir cuando no hubiese ningún alumno, desde ese día fingirían distanciarse, pero ya habían acordado su huida, incluso se dieron un largo beso de refuerzo para no sentirse tristes.

Como la camisa del chico estaba algo floja por el jalón de Kakashi este había perdido un par de botones y con el caminar algo inestable del chico cualquiera pensaría que fue intimado.

Rin y sus amigas vieron el lamentable estado de Obito y susurraron, Rin sintió sus labios temblar de la risa, talvez como ya no tenía el apoyo de Kakashi se convertiría en el juguete perfecto para algunos chicos ricos que les gustaba jugar salvaje.

Rin fingió apartar la vista y lucir nerviosa.

-¿Qué sucede Rin?-sus amigas la rodearon preocupadas, Rin fingió no querer hablar y al final cedió.

-Bueno, verán, la razón por la que Obito no vino una sema es….bueno, pensé que ya lo dejaría pero*suspiro*

Las amigas de Rin abrieron los ojos luciendo desconcertadas y luego algo asqueadas.

Cuando Obito llego a casa, en la sala estaban Yuko y suoichi,al parecer se reconciliaron, incluso Yuko lucia “hidratada”, cuándo vieron el estado del chico, Yuko se tapó la boca-¡Oh,my!¿qué te paso.-fingiendo preocupación dijo inocentemente-Tus labios están rojos e hinchados ¡y tu camisa!, Dios mío ¿Quién te golpeo así?

Obito quiso rodar los ojos, oye tu lucias muy hidratada, debía saber que le paso, pero decidió arrastrase a su cuarto y prepararse.

Kouichi  se puso de pie, lucia molesto y furioso, a pasos fuertes s ele acerco y le tomo de los hombros-¡¿Quién fue?!

Sus dientes rechinaron, sus ojos veían los labios regordetes y rojos del chico, parecían haber sido besados y chupados, sus ojos recorrieron el cuello del chico en busca de más indicios, Obito forcejeo.

-¡¿Qué es todo este escándalo?!-Oyama salió con un mandil.

Kouichi volteo y se quejó con su madre-¡Madre! Se volvió a ver con ese chico-Obito se estremeció, no, no debían darse cuenta ¡o sino su plan…!

Oyama arrugo la cara, ya habían recibido la visita de la secretaria del padre de Kakashi amenazándolos con alejar a esa cosa de su hijo, miró con furia al chico.

Rin hizo su aparición a tiempo-Madre, he vuelto-la niña parecía muy elegante, un poco diferente a la Rin animada del pasado -Oh,no te preocupes por el- susurró sonriendo suavemente, había adquirido ciertos hábitos de las chicas que la rodeaban -.Kakashi ni lo miro.

-¿Entonces…

Rin rio por lo bajo- Kakashi no lo miro, pero talvez si le preguntas te dirá “quienes” fueron.

Yuko abrió los labios en señal de sorpresa, Kouichi sintió como la sangre le hervía “quiénes” resonó en su mente, una vena gruesa se formó en su frente.

Oyama dio una mueca asqueada pero no sorprendida, había oído que estas criaturas anómalas solían tener un apetito insaciable.

-Ahh, madre deberíamos darle algo de comer, se estuvo tambaleando en clases y los maestros parecían notar algo, ya sabes solo fue unos días, pero parece que no ha comido durante una vida.

Rin sugirió sabiamente y miro a Obito parecía decir” agradéceme”,Obito solo quiso bufar. Al final ceno un plato frio, no tenía hambre su estómago estaba particularmente entumecido, pero se obligó a tragar esa porción de comida, debía sanarse, debía hacerlo y así huiría junto a su novio. Oyama frunció el ceño al ver la cara de esfuerzo del chico.

-Dramático-murmuro ignorando el hecho de que cualquiera le disgustaría el arroz frio y verduras apena pasables.

Tuvieron que pasar dos semanas, dos semanas donde Kakashi fingió no conocer a Obito pero en secreto se dejaban notas en su lugar secreto, uno iba y lo dejaba y el otro luego lo encontraba y lo leía.

El maestro de matemáticas noto “la falta de voluntad de Obito” y hablo con él, le dijo que podía confiar en él y lo ayudaría en lo que pudiera, el niño negó, estaba algo conmovido, pero negó a quejarse simplemente dijo que tenía problemas de entender algunos ejercicios.

-Puedes contar conmigo-el maestro le dio un suave apretón en uno de los hombros del chico y no insistió, aunque sus ojos siempre lo vigilaban.

Obito asintió, antes de irse a casa se deshizo de la nota de ese dio ,Kakashi dijo que ya era hora, lo harían durante las clases de educación física.

Obito solía pedir permiso y como los donceles eran considerados como criaturas inentendibles y nuevas el profesor le cedía la hora para que descansara, ese día Obito hizo lo mismo y se dirigió al salón de clases, Rinn lo vio alejarse y sonrió. Mientras ella era rodeada por muchas personas la figura solitaria de su primo se alejaba lentamente.

Rin despego los ojos y los dirigió a Kakashi.

Ahhh,el chico era muy guapo y brillaba como el sol.

Ambos eran brillantes eran el dúo perfecto, ella se sonrojó y corrió frente al albino ofreciéndole una toalla y un termo de agua fría.

El chico le agradeció y tomo las cosas, Rin se conmovió.

Ah, todo estaba en su sitio, todo era como debía ser.

-Kyaaa, Rin acepto tu toalla-la amiga cercana de Rin la animo.

Rin sintió las miradas de celos y envidia y sonrió tímidamente.

-Solo es amable-murmuro.

Yeri,la niña que tenía una enemistad con Rin solo chasqueo la lengua, obviamente Kakashi la rechazo lo dejo en caro durante la exposición de fotos, pero ahora que ya no hablaba con Obito se daba aires, ¿en serio? Ella no era la única chica del sitio.

Kakashi se excusó con que iría al baño, tras obtener el permiso fue a su casillero en los vestidores de este saco una mochila que había guardado de antemano; durante esas dos semanas siempre solía traer una muda de ropa adicional la cual dejaba almacenada, hoy era el día que guardaría todo eso en su mochila, también trajo la ropa que había comprado para el chico cuando este vivió con él. El dinero de bolsillo que tenía ahorrado también serviría de algo.

Nervioso saco sus cosas y se dirigió a aquel sitio donde solía intercambiar notas con su novio, allí Obito lo esperaba, su mochila que solo debía traer libros ahora tenía un poco de ropa más que nada poleras manga larga que solía ponerse cobre la camisa con la excusa de ocultar los moretones, Oyama estaba de acuerdo después de todo no deseaba que se exponga el maltrato físico, en cuanto al dinero…solía no comer mucho en la cafetería además desde que Kakashi  empezó a comer con él y Rin ahorro aquel pequeño dinero.

Ambos se miraron y sonrieron.

                                                                      *********

Para cuando notaron que algo andaba mal, ya había pasado casi una hora, el profesor solo suspiro pensando que el chico(Kakashi) volvió a saltarse su clase.

Rin quien era más sensible pidió permiso y fue al salón de clases, no encontró la mochila de aquel doncel, el mal presentimiento creció.

-Buscas algo-Yeri apareció recostada en el marco de la puerta tenía un gesto burlón.

Rin solo le dio una mala mirada, las amigas de Rin llegaron poco después preocupada.

-¿Qué pasa Rin?

-Obito no está-Rin rechino los dientes.

Yeri alzo una ceja sin entender bien.

-No me digas que…¡ese resbaloso está seduciendo a kakashi!

-No puede ser ¿no le basta ir jugando con otros hombres?

Yeri estaba confundida, había oído rumores del comportamiento “desvergonzado de Obito” pero pensó que solo eran rumores ¿acaso esas chicas esparcieron ese rumor?, miro con sospecha a Rin.

-¿De qué hablan?-Yeri pregunto a una de las amigas de Rin.

-Bueno, veras-la niña susurro-vimos a Obito saliendo desarreglado y con labios hinchados ¡y siempre desaparece en el recreo!, es muy sospechoso.

-Suena muy normal para que hayan sacado esas conclusiones-Yeri suspiro.

Rin simplemente miro a Yeri y paso de largo, esas amigas suyas la siguieron. Yeri pensó que en un inicio Rin parecía una asistente bien educada ante estas señoritas en algún punto esas señitas ahora parecían las asistentes de Rin.

-Que aterradora-murmuro.

Para cuando todos supieron que la cosa era seria ya había pasado unas tres horas, en ese punto Kakashi y Obito habían tomado dos buses, y cuando empezaron a movilizarse para buscarlos por sospecha de fuga los dos muchachos se instalaban en un hotel de una ciudad algo alejada del sitio, el lugar era bullicioso.

-¿Y si nos encuentran por el carnet de identificación?-Obito estaba nervioso, era la primera vez que estaba fuera de casa además de un hotel.

-No te preocupes, use identificaciones falsas -al ver la cara de duda de Obito rio suavemente. Ya sabes era un chico salvaje y tenía ciertos conocidos. Además, nos moveremos de hotel en hotel hasta despistarlos, luego podemos trabajar en tiendas independientes.

Obito se rio mientras se sacaba el sombrero-Me siento algo estúpido utilizando esto-murmuro quitándose una peluca-Parece una dramatización.

Kakashi sonrió al ver tan feliz a su novio y lo abrazo suavemente.

-Te extrañé-susurro Obito.

-Yo también.

 Ambos se miraron fijamente, parecía como si no fuese suficiente así que esa misma tarde durmieron profundamente en un abrazo íntimo.

¿Qué importaba lo que después sucedería?

En sus mentes bastaba aquel momento.

*******

Ya había pasado una semana.

Ambos estaban algo cansados pues siempre estaban en un estado de alerta, ya se estaban comenzando a adaptar   aquella rutina de moverse constantemente.

En las noticias solo se hacía voz de un pequeño doncel que huyo de casa, básicamente pintando a Obito como un pequeño lob de ojos blancos, su “queridísima tía” lloraba sosteniendo una foto de si mismo.

Mientras que por el lado de Kakashi no había muchas noticias, sus padres decidieron mantener el silencio deliberadamente para evitar los reflectores sobre sus caras, en cambio, decidieron empujar todo el peso mediático sobre Obito mientras que en secreto buscaban a Kakashi.Obito estaba seguro que sus tíos habían recibido una jugosa comisión para salir en Tv nacional.

-Esto es agotados…-Obito suspiro mientras se tiraba en la cama del nuevo hotel.

Kakashi se agacho ayudándole a masajear los pies del chico-¿Te arrepientes?

Pregunto sin levantar la cabeza, sus manos nunca dejaron de moverse.

Obito negó rápidamente, a pesar de que era un fastidio estar moviéndose constantemente, también había creado hermosos recuerdos entre ambos.

-Para nada.

Kakashi suspiro cansado a lo cual el azabache le devolvió la misma pregunta-¿Te arrepientes?

-No, en ningún momento.

Kakashi se masajeo los hombros y negó-Tomare una ducha. Descansa un poco.

Obito frunció el ceño, realmente estaba cansado del teatrito de su tía, solo deseaba que todo el asunto terminase y poder estar tranquilo, al ver la cara exhausta de su novio pregunto tentativamente si podían tomar un baño juntos. Kakashi solo rio bajamente, conocía la mentalidad de Obito y no deseaba ninguna pequeña recompensa por sus acciones.

-Ohhhh

Obito suspiro decepcionado, aún tenía un complejo por su cuerpo masculino, al ver el gesto desanimado del muchacho Kakashi lo abrazo afectuosamente.

-No te fuerces. Sabes que me gustas mucho así que no pienses demasiado-Obito enterró su cabeza en el pecho de Kakashi.

-Pero…¿Por qué no me tocas?

Kakashi se tensó, ¿cómo que no quería tocar a Obito?,¡realmente deseaba abrazarlo!, pero sentía que si lo hacía de manera precipitada podría lastimarlo hasta romperlo. Sólo deseaba atesorarlo, sostenerlo sobre su palma y bañarlo de ternura sanando lentamente sus heridas de su cuerpo y cuando el azabache este lo suficientemente gordito y saludable como un bollo rechoncho entonces consideraría comérselo entero, esa era su idea, aunque parecía que no lo estaba haciendo del todo bien ya que solo notaba que la inseguridad del chico crecía.

El Hatake beso el frete del azabache.

-Realmente me gustas, pero me gustarías aún más si engordase un poco más, sería realmente agradable abrasar a un pequeño oso como tú.

Óbito levanto una ceja, sabia que estaba siendo persuadido y que en la última semana no había podido comer correctamente pues todo el asunto era realmente estresante, pero internamente se estaba debatiendo si a Kakashi le gustaba los rellenitos ya sabes con curvas.

Al ver la cara confusa de su pareja una carcajada llena de vida se deslizo de la boca del peliblanco provocando la ira de Obito.

¡Ahhhh, Kakashi solo le gustaba intimidarlo ¡pero cuando quería otro tipo de intimidad inmediatamente se volvía un avestruz.

Tras una breve pelea de almohadas el Hatake pidió tiempo fuera.

-Jajajaj,no te enfades-Ambos chicos estaban respirando con dificultad sobre la cama-Acabó de encontrar un sitio interesante cerca al hotel ¿vienes?

Obito rodo los ojos per estuvo de acuerdo, si bien no podía forzar el tipo de momento intimo que deseaba eso no significaba que no disfrutase aquellos momentos junto al peli blanca. Su enfado se desvaneció y espero ansioso por su cita con este, claro que le hubiese gustad no salir con esas pelucas que le hacían sentir ridículo, rezaba para que aquel escándalo de las noticias sea olvidado.

Eran las 6:30 cuando ambos salieron del hotel, el sitio estaba en un lugar bullicioso cerca de la autopista, juntos pasaron hacia la acera del frente y llegaron a una cafetería simple al parecer no había abierto hace mucho.

-Aunque parece recién abierta, el olor del café es muy bueno-Kakashi entrelazó sus manos con las de Obito quien se sonrojó ante las miradas curiosas de los transeúntes-Además no parece estar muy lleno podemos disfrutar de un café y una tarta sin problemas.

Obito sonrió enternecido, Kakashi pensó en él y lo trajo a un sitio agradable.

Ambos entraron, la campana de la entrada produjo un agradable tintineo.

-Oh, Bienvenidos-un rubio de cabellera larga los recibió, lucía joven y algo apático, pero se podía ver que era una persona atractiva, si sonriese más su apariencia seria como un pequeño sol.

Apear de parecer apático, el chico fue educado (a su manera) y pronto fue a la cocina con la lista del pedido. Obito miro el entorno de la cafetería, aunque los colores eran algo discordantes la atmosfera era fresca y tranquila era muy agradable, las mesas eran redondas y apenas había dos o tres personas más pero ciertamente el olor del café y los dulces eran muy cómodos.

- ¿Te gusta este sitio?

Obito asintió.

-A qui esta su pedido.

esta vez el que los atendió fue un muchacho de largos cabellos color castaño , este parecía tener entre 18 y 19 años ,Kakashi se le quedo observando brevemente lo que provocó una punzada en el pecho de Obito, ciertamente odiaba ser visto sobre todo si esos ojos eran de su primo pero ansiaba la mirada de Kakashi así que ciertamente estaba celoso y triste.

-¿Mmm? ¿qué sucede? -al ver la mirada herida de Obito el peliblanco pregunto dudoso a lo que el azabache simplemente lo ignoro. Kakashi tardo unos segundos en darse cuenta de los celos del chico -Jajaja, no sabía que mi pequeña pareja fuese tan celosa-una mano traviesa trato de peñiscarle la cara a lo que el chico lo alejo enojado -No te pongas celoso solo parecía que el chico era dueño del lugar.

-Tan joven? -Obito parpadeo confundido.

-Aunque sea dueño parece a ver recibido ayuda de sus familiares, además-el peliblanco señalo un cartel en una esquina-buscan empleados. Podríamos pedir trabajo, dijiste que te gustaba este sitio. Es perfecto.

Luego el peliblanco expuso las razones por que el sitio parecía ideal, siendo uno de ellos que el jefe era joven y parecía accesible, además de estar en un sitio algo poblado. Era perfecto.

Obito se emocionó, aunque el trabajo no era aseguro era más tranquilizante tener una fuente fija de dinero.

Tras terminar su café y postres respectivos, Kakashi abordo al jefe.

-¿Oh?, me parece bien pero me gustaría entrevistarlos el miércoles ¿les parece bien?-el muchacho se presentó como Hashirama y de su breve intercambio se enteraron que el sitio había apertura do sus puertas hace unos tres meses y el negocio lentamente iba creciendo siendo las mañanas las más ajetreadas llegando al punto que dos manos ya no eran suficientes.

-Muy bien, gracias-Kakashi sonrío relazando algunos puntos fuertes a su aspecto, Deidara se sonrojó al verlo, después de todo Kakashi era apuesto, Hashirama rio por lo bajo al ver el ceño fruncido de Obito,el chico parecía un pequeño pollito inflando sus plumos mientras actuaba protector con su maíz, poco sabía que el polluelo evolucionaria a una mamá gallina en el futuro.

Tras salir del sitio el cielo ya estaba oscuro y las luces de la ciudad alumbraban cada rincón, ambos jóvenes aún se sentían rebosantes de energía luego de tomarse el café y los pastelitos inclusive llevaban un paquete para comer dentro del hotel.

Al final los chicos pasaron por los alrededores comiendo de los puestos instalados en las calles, inclusive fueron a un parque de diversiones, cuando decidieron volver al hotel ya eran cerca de las 10 de la noche, ambos estaban riendo graciosamente.

-¡Hufff!-Obito se abalanzó sobre la cama acolchonada como si fuese un saco de papas.

-¿Cansado?-Kakakshi puso el paquete con los pasteles en una de las mesitas de noche.

-¡Para nada!-Obito sonrío-No estoy cansado y tampoco tengo sueño ¿vemos una película?

-En, ¿Cuál vemos?

- ¡Una de acción!

Ambos chicos se acomodaron y prendieron la Tv, pasaron los canales hasta encontrar una en particular y la miraron mientras comían los macarrones de colores, la cabeza de Obito se acurruco naturalmente sobre el hombro de Kakashi.

En aquel pequeño cuarto era como un pequeño mundo, un mundo solo para ellos dos, en algún momento de la película Obito beso los labios de Kakashi, este correspondió gustoso pronto el delicado beso se tornó acalorado, aunque Obito no intentaría llegar tan lejos esa noche no impidió querer ser un poco travieso así que al final terminaron dándose un masaje de manos mutuamente, la película quedo olvidada por ambos.

Al día siguiente ambos despertaron algo sudorosos por el pequeño ejercicio nocturno, ambos rieron al verse en ese estado y finalmente Kakashi accedió tomar una ducha junto a Obito. Aunque en un inicio fue algo vergonzoso enfrentarse desnudos pronto terminaron en la bañera relajándose.

-Mañana haremos esa entrevista ¿nervioso?

Obito asintió mientras dejaba que Kakashi lo abrase, los pies de ambos se frotaron íntimamente.

-Si, aunque no sea un trabajo tan estricto es mi primer trabajo…nuestro.

Los chicos se sonrojaron en sincronización perfecta.

Luego del breve sonrojó ambos sonrieron, ese día decidieron no moverse de hotel, solo sería un día más, además que hoy se les apetecía estar juntos así que toda la mañana se la pasaron hablando y mirando películas, solo cuando tuvieron mucha hambre salieron a comer en un restaurante cercano, luego de comer y llevarse un poco de comida regresaron al hotel.

Ambos platicaron de lo que harían luego de conseguir el trabajo, estaban tan llenos de expectativas que incluso no pensaron mucho en problemas mayores, simplemente parecía que ambos podían salir adelante juntos.

 Era tan perfecto como un sueño mágico.

Mientas hablaban el ambiente se fue tornando ambiguo así que ambos se besaron sin reserva, cuando Kakashi sintió que la situación se estaba tornando difícil quiso detenerse, pero Obito simplemente lo abrazo, lo miro a los ojos y con el rostro sonrojado pido por más, fue tan seductor que kakashi cedió poco a poco, los besos eran cada vez más profundos e intensos y en un punto ya no quisieron parar.

Kakashi beso el cuello, la clavícula y los labios de Obito, sintió un gran placer al darse cuenta que podía pintar el cuerpo blanco del azabache de un tierno rosa, Obito fue cooperativo e incluso ayudo a desnudarse al peliblanco.

Cuando ambos estuvieron desnudos se miraron fijamente uno a otro. La calentura disminuyo un poco y dio paso a la vergüenza, era su primera vez así que era comprensible sus dudas.

Al ver que Kakashi estaba a punto de volverse un avestruz tímido, Obito decidió tomar iniciativa, tomó la cara del chico entre sus manos y le susurro:

-Quiero hacerlo, quiero que tú y yo tengamos sexo-al terminar la palabra sexo se sonrojó violentamente, pero siguió-tú me gustas muchísimo y estoy dispuesto a hacerlo, no porque me presionas si no porque quiero hacerlo.

Kakashi sintió su sangre hervir, beso el rostro de Obito, aunque en un inicio hablo libremente de leer libros de adultos también era su primera experiencia se podría decir que estaba igual de nervioso que Obito,no sabía si su siguiente movimiento erra el correcto o no  ,pero ciertamente deseaba ser uno con su chico.

-Yo, yo me disculpo de antemano.

Al verlo tan cohibido y tímido Obito rio con ganas, realmente le gustaba todo de Kakashi, este podía ser desvergonzado, pero también tímido, era una maravilla.

Ambos muchachos se abrazaron profundamente, la sensación de los labios del otro sobre su piel y el cosquilleo fueron experiencias nuevas, vergonzosas e intimas.

Ambos fueron torpes pero apasionados, especialmente cierto albino quien agarro un gusto de marcar la piel blanca y suave del chico, en cada parte que tenía un moretón el posaba sus labios como si deseara que sus marcas de besos cubriesen y disipasen esos días difíciles, al ver esto Obito contuvo las ganas de llorar.

Se sentía amado… hace mucho tiempo no se sintió así, tenía miedo y anhelo asique se aferró a Kakashi temía que si se descuidaba este se esfumaría como un sueño.

Durante su unión ambos entendieron tácitamente el temor del otro así que ambos se aferraron mutuamente; yo te cuidare, yo te amare.

Ese fue el significado de su primera vez.

Una entrega considerada inmadura para muchos, pero un momento memorable y hermoso para ambos, mágico como un par de piezas encajando perfectamente.

Mientras Kakashi movía su cadera, Obito soltaba jadeos y sollozos, ambos se besaron mucho, deseaban tener sus labios unidos, así como sus cuerpos, aunque Kakashi era inexperto y le causo dolor e incomodidad en un inicio pronto ambo se hundieron en la pura dicha.

Para cuando cayeron dormidos el sol aún se alzaba fuera de la ventana, sus tenues rallos se filtraban por la cortina dándole a la habitación una sensación acogedora como si estuvieran en una nube mágica ambos cerraron los ojos y durmieron juntos como un par de bebes.

El primero en despertar fue Kakashi, este quiso abrasar y darle un beso en la frente a Obito pero inmediatamente se sintió extraño su cuerpo reacciono antes de darse cuenta de lo que realmente sucedida.

-Despertaste-la voz profunda y carente de emoción de su padre resonó, baja pero penetrante.

Kakashi abrió los ojos, ¿Qué? Instintivamente quiso cubrir tras suyo a Obito quien seguía durmiendo plácidamente.

Al ver aquella reacción exagerada su padre quiso rodar los ojos, pero se contuvo ya que aquella acción seria impropia para él, un hombre de negocios de la más alta elite.

-Mas te vale salir en silencio, no deseo escándalos y tú tampoco-sus ojos miraron a Obito claramente insinuando que si Kakashi hacia ruido o se resistía medio mundo se enteraría de que un doncel se había estado revolcando con un muchacho.

Kakashi se quedó inmóvil, sólo cuando vio los ojos fríos de su padre una vez más obedeció mecánicamente, en silencio se vistió mientras su padre nunca aparto de la vista, cuándo Kakashi se puso el pantalón el señor se puso de pie y salió, al abrir la puerta una mujer entro al cuarto.

-Sal-ordeno la madre del albino- No querrás empeorar las cosas si sabes lo que te conviene.

Kakashi al sentir el aire opresivo se mordió el interior de sus labios, aunque tenía fama de rebelde en la preparatoria ciertamente temía a sus padres después de todo solo era un muchacho joven que una vez los añoro con fuerzas.

Cuando Kakashi salió de la habitación fue conducido por el secretario de su padre hacia el coche estacionado fuera del hotel, algunos curiosos se preguntaban porque un auto tan lujosos estaba aparcado en ese lugar, al ver extraños reunidos a su alrededor Kakashi aspiro aire frio, si no actuaba con cuidado humillarían a Obito,de eso estaba seguro.

Una vez dentro del auto el padre del albino lo abofeteo, su padre rara vez lo golpeaba inclusive lo miraba, solo recordaría que tenía un hijo durante los eventos públicos.

Tras golpearlo saco un pañuelo y se limpió la mano con la cual abofeteo a su hijo, sus ojos nunca dejaron de ver a su objetivo.

-Tomaras un vuelo por la noche, terminaras tus estudios en la ciudad T  y te preparar para ingresar a la universidad de A city y si en algún punto se te ocurre desear contactarte con ese doncel me asegurare que termina como la prostituta que es ¿entendiste?- Kakashi se estremeció, deseaba golpear a ese hombre, no conocían  a Obito y aunque lo hicieran ¿cambiaría algo?, odiaba todo  esto ,odiaba sentir miedo, odiaba a su padre y se empezaba a  odiar por ser cobarde .Él podría golpear a este sujeto y huir nuevamente con Obito pero…los ojos  de ese hombre lo presionaban en su sitio…él no podía moverse y solo podía seguir las órdenes como una marioneta -¿Entendido?

Kakashi apretó sus manos en un puño y dijo suavemente un “si”

Mientras ese intercambio ocurría en el auto, dentro de la habitación la madre de Kakashi miro al doncel plácidamente dormido, sus labios se fruncieron y un “TSK” se filtró de estos, ella deseaba golpear al chico, a ese muchacho quien causo todo ese lio y enveneno la mente de Kakashi,su único hijo y heredero de los Hatake…por su culpo ella seria el hazme reír y la burla de las damas de la sociedad e incluso recibiría el hombro frio de su marido ese hombre quien ella comenzaba a odiar por que la menospreciaba.

Pero ella era una dama.

Una dama de alcurnia no reaccionaria como esas cosas de clase baja, recordó a la tía del doncel y se estremeció asqueada, ella no debía rebajarse en esa medida, así que se santo con gracia en la silla donde previamente su esposo estuvo y miro al doncel, si bien no podía golpearlo aún podría reducirlo en un manojo de basura ya lo había hechos antes y no tenía miedo de meterse con un muchachito de 16 años.

Para cando Obito abrió los ojos, el sol se había puesto y el cielo estaba oscuro, las luces del cuarto estaban encendidas y daban una sensación como una suave tarde, el doncel se sonrojó al pensar en lo que había hecho previamente con kakashi estiro su mano y busco a tientas a su novio, pero al sentir la cama fría despertó de su estupor.

Inconscientemente busco a Kakashi con la mirada y al no encontrarlo su corazón se estremeció.

-Oh,despertaste-una voz femenina lo saco de sus pensamientos, al alzar la vista cayo en cuenta de la existencia de esta y se sobresaltó, la mujer delante suyo sonrió de manera artificial-Bueno, ahora que estas despierto podremos hablar tranquilamente.

******

Obito salió del auto de su tío, estaba cayado y cabizbajo, Oyamam no podía esperar entrar en su casa y descargar sus frustraciones n esta pequeña cosita maloliente.

Una vez que las puertas de su casa fueron cerradas la pesada palma de la mujer cuyo sobre las mejillas de Obito, en la sala kouichi se puso de pie, Rin estaba a su lado observando aquello

con ojos rojos de la ira retuvo a su hermano quien quiso apresurarse al lado del fugitivo Obito.

-¿Qué-

-Kouichi-Rin miro duramente a su hermano- ¿Qué piensas hacer? -el agarre de Rin se apretó sus ojos parecían indagar en su hermano quien se puso ligeramente nervioso, era como si Rin supiese de aquellos vergonzosos pensamientos que tenía…si aquellos pensamientos que no debería tener.

-Rin…¿Qué te pasa?-una gota de sudor se deslizo sobre la frente de este mientras se zafaba del agarre de su hermanita, era como si el sonido de los golpes y el jadeo amortiguado de Obito no se oyera.

-Tú sabes. Kouichi tienes una novia ¿no?, es mejor dejar esto así. Es mejor ¿no crees?

Rin miro inexpresiva el miserable estado de Obito y apretó sus manos en un puño. Kouichi no insistió.

Ambos miraron el escarmiento de sus padres cada uno sumido en sus pensamientos.

Por su parte Obito estaba ido, su cuerpo reaccionaba a los golpes, pero su mente estaba divagando, rebobinando las palabras de aquella elegante dama.

“-No lo encontraras…

- Él es un jovencito particularmente travieso y ávido de nuevas experiencias todo un pequeño bebé rico ¿sabes no? Yo lo sé porque soy su madre.

-No me mires así, debes saber que no eres su primera pareja. Bien, te preguntaras porque monto toda esta escena…bueno es simple, eres un doncel, un chico necesitado así que te tomo como un desafió ya supero el desafió así que naturalmente termino el juego. Sabes lo que quiero decir, ¿verdad?, lo sabes bien así que muchacho vuelve a tu casa y no hagas un melodrama.

-No llores, eres joven así que tómalo como una experiencia. No me mire así niño, yo solo digo la verdad pues así es mi hijo.

-No lo busques, pero si estas tan convencido espera que te llame, si de verdad se toma esto enserio naturalmente te contactara si eso sucede entonces mi marido y o daremos un paso atrás ¿vale? Te doy mi palabra.”

Kakashi no podía dejarlo ¿verdad?, él se fugó con el e incluso estaban pensando en tantas cosas juntos no podía ser todo aquello solo porque deseaba acostarse con ¿verdad?

Kakashi parecía un delincuente juvenil, pero era la mejor persona de su vida además de ser su novio…el sabia más que nadie de su dolor no podía jugar con eso, no podía hacerlo, así que decidió esperar.

Después de todo era muy bueno esperando. Mira que incluso siempre espero que su tía lo llamara tiernamente y que su tío le diera palmaditas en la cabeza mientras asentía con orgullo.

Para cuando Obito volvió abrir sus ojos estaba en su cuarto, las punzadas en su cuerpo lo sobresaltaron, pero se incorporó como pudo e intento abrir su puerta.

Esta hizo un sonido amortiguado y no cedió, estaba cerrada como se esperaba. Obito suspiro, no era la primera vez que lo encerraban, pero era la primera vez que las emociones de incertidumbre eran así de fuertes.

¿Cómo Kakashi lo contactaría si no tenía un teléfono?

Las palabras de la mujer volvieron a resonar, Obito negó y decidió pensar en otras cosas, debería prepararse en caso de que Kakashi volviera con él, si debía hacer eso.

Obito miro alrededor de su habitación, todo estaba patas arriba obviamente sus tíos habían puesto la casa al revés luego de irse, miró con pena los frascos que estaba coleccionando, sus dibujos y fotografías también estaban desparramadas y algunas ya no eran servibles, el azabache limpio lo que pudo y volvió a recostarse sobre su cama.

Le dolía el cuerpo, pero no se permitió dejarse influenciar por los demás, pensó en los días que estuvo con Kakashi y se rio imperceptiblemente.

                                                      ****

Villa de los Hatake

Las luces iluminaron toda la mansión, la madre de Kakashi estaba ojeando una revista cuando su marido entro, este dejo su saco y se aflojo la corbata.

-¿Ya te ocupantes de eso?

Tranquilamente paso otra página de la revista, al verla así el Sr Hatake frunció el ceño quería recriminarle que por su culpa el niño que le prometieron sería un ejemplar heredero salió un fiasco, pero no podía hacerlo, después de todo él también era su padre y muy en el fondo sabía que también era su culpa.

-Si, acaba de abordar el vuelo junto a mi secretario de confianza, los tramites de trasferencia también se dieron y a más tardar comenzara desde el lunes.

-Mmm ya veo…Oh, mira, ya es oficial el divorcio de Mikoto Uchiha de su marido-El peliblanco miro la revista de su esposa, normalmente no le interesaría esos asuntos faranduleros, pero debía tener siempre un ojo sobre la competencia y sobre los socios. -¿No es hilarante?,Mikoto planea abrir una empresa separada del nombre de su esposo ,jajaja ¿Cómo eso tendría éxito?

El patriarca de los Hatake asintió en acuerdo, Mikoto solo era la esposa de Fugaku incluso ahora con su divorcio seguiría siendo la ex mujer del Uchiha,no podría escapar de aquello.

-Al menos ya no está en la portada el asunto del doncel.

Al oír las palabras de su esposa, el hombre asintió en acuerdo, aquel asunto se estaba enfriando eso les convenía. Miro a su mujer, esta era preciosa pero no la amaba no importaba si esta era dueña de un cuerpo hermoso o era hija del gran circulo social, esta mujer no podría considerarse una dama certificada pero no podía decirle nada después de todo en el fondo sabía que también era su culpa que su hijo haiga causado un embrollo.

-No deberías preocuparte-la dama paso otra página, sus labios formaron una sonrisa conmovedora-si te sigue molestando este asunto, simplemente tengamos otro niño después de todo no podemos confiar en Kakashi ¿no?

El sr Hatake frunció el ceño- Tienes razón, no le des vueltas al asunto. Se terminó.

La mujer se estremeció según el tono de su marido este parecía saber que ella estaba intimidando al chico (Obito), le estaba ordenando dejar ese asunto, ¿pero ¿cómo ella podría? ¡por culpa del muchacho su esposo la miraba mal!  ¡Ella era una burla!, aunque no pudo influir en la dichosa preparatoria para que lo expulsen y no podía insistir por temor a ser muy obvia decidió atacarlo por otros medios, se estaría  asegurando que el chico no entrase a una buena universidad y de  arruinarle la reputación por completo.

Molesta lanzo su revista y se cruzó de brazos, estaba agitada y le picaba las manos, si su ingrato hijo hubiese estado en el país ya lo hubiese golpeado hasta que sus manos se entumezcan.

Tras tranquilizarse decidió acatar las órdenes de su esposo, no deseaba ser la próxima dama divorciada pero no quería dejar pasar su ira, decidió usar a esa familia para intimidar al chico después de todo estos seguían siendo sus tutores legales si se aseguraba de que estos lo hundiesen  así estaría algo satisfecha .Tomo su móvil, comenzaría con la chica llamada Rin,la niña parecía estar muy enamorada de su hijo si le daba un empujoncito talvez podría usarla para ver un buen drama, si bien no era elegible como su nuera sí que le daría un buen espectáculo con solo imaginar la cara dolorosa del doncel se sintió a gusto

****

Obito suspiro, ya habían pasado siete días y aun no sabía nada de su amado y se sentía muy solo, quería sentir su calidez y cariño su cuarto no podía igualarse a la calidez que este le proporcionaba.

Su tía le había dicho que volvería a clases después de todo no podía desaparecer de la faz de la tierra porque sí, claro que esta vez realmente estaría muy limitado, pero con saber que volvería ver al peliblanco se sentía feliz.

Para su infortunio no fue como él pensó.

No solo las miradas de todo el mundo lo incomodaban, no solo parecía que lo alineaban y dejaban de lado, todo eso era pasable, pero al ver el asiento vacío del chico le dio un vuelco en el corazón.

Aunque se sintió ansioso decidió esperar.

El peliblanco le había demostrado que realmente lo amaba, si no podía esperar entonces seria mezquino.

Pacientemente ignoro os cotilleos y se centró en clases.

Pacientemente trato de no llamar la atención y fingió que todo estaba bien, no deseaba un nuevo escándalo y que alejasen más al peliblanco, así que hábilmente mintió a su maestro de matemáticas y a aquella doctora de cabello corto.

Espero y espero, ignoró el trato cada vez más perverso de su tía o las miradas cada vez más pesadas de su primo.

Una semana se convirtió en dos y esas dos sumaron tres, pero nunca recibió ninguna mínima señal de su novio.

Pero espero. Practicaba una dulce sonrisa para cuando este llegases y decidido ser un buen estudiante así ambos no tendrían problemas para postular a una buena universidad, se empeñó en fabricarle escusas y espero con diligencia, si se sentía muy solo hasta el punto que era doloroso ,recordaba los momentos que ambos estuvieron juntos y se imaginaba como seria su futuro, quizás por ello fue un golpe aún más tortuoso cuando se dio cuenta que Rin se hablaba con la madre de Kakashi, no sabía de qué hablaban pero solo podía especular ya que su prima nunca le volvería a dirigir una palabra.

Al final la espera llego a su fin…

Dos meses y medio de expectativas se fueron al caño, no quiso creerlo cuando Rin lo dijo, pero todos los sucesos recientes apuntaban a que si era viable.

Ella dijo que Kakashi había ido al extranjero, no sabía cómo surgió ese tema de discusión en clases o quien lo inicio pero Rin soltó las respuestas una a una :Kakashi estaba estudiando en el extranjero y no volvería hasta nuevo aviso, el muchacho decidido asistir a una universidad en ese mismo sitio y terminando haría una pasantes en una sucursal de una de las múltiples empresas de su familia.

-Jajaja ¿Cómo sabes tanto Rin?, digo, Kakashi desapareció de la faz de la tierra, pero tú sabes mucho.

Rin sonrió cortésmente-La madre de Kakashi es una excelente persona, tenemos muchos temas en común y hablamos de vez en cuando.

Las niñas de alrededor se emocionaron después de todo quien no conocía a aquella glamurosa madame, seria mentira si no aceptaran que deseaban ser como ella, asique miraron con envidia a Rin.

Cuando la pequeña rival (Yeri) de Rin quiso farfullar sobre el asunto de que no exageraran el asunto o se decepcionarían con la realidad fue acallada por las demás niñas que deseaban saber más de su amor platónico.

-Lo siento chicas solo se eso por ahora ero si me entero de algo más se los diré.

Rin rio suavemente, sus ojos miraron discretamente a Obito,al ver la cara perdida de este se regocijo ¿ y que si la humillo antes?, ahora ella era amiga de la madre de Kakashi aunque no dijo nada la dama le prometió impulsar su carrera y ayudarla con Kakashi,Rin estaba encantada y decidió presumir ,no deseaba ser evidente así que comenzó a atacarlo discretamente.

Ella se alzaría gloriosamente y pisotearía a Obito,a ese bicho que se atrevió a querer pasar por su encima.

Aunque Obito no dio una escena como se imaginó, no la decepciono cuando la a bordo en su casa, ella deliberadamente corrió hacia su hogar y monto un espectáculo digno de un Oscar, dejó que Obito la interceptará y fingió no saber la razón del porque este parecía tan alterado.

-No sé nada más, ya te lo dije-desvió la mirada como si guardase muchos secretos e intento subir a su cuarto, cuando Obito intento detenerla fingió caer al suelo justo en el momento que la novia de su hermano mayor salía a ver el ruido.

-¡Dios ,Rin!-Yuko no la defraudo y actuó como la reina del drama que era, su voz termino atrayendo a toda la familia hacia la sala y todo un malentendido se gestó.-Obito empujó a Rin…¡eres un hombre ,pudiste lastimarla!

Oyama frunció el ceño y corrió a ayudar a su hija a levantarse al ver las rodillas bancas tornarse rojas se enfurcio-¿Hombre?, esa cosa ni siquiera es un humano normal…

El padre de Rin intervino antes que su esposa dijera algo impropio frente a la novia de su hijo, decidió esperar a que la niña se fuera antes de empezar a interrogar al chico después de todo su niña no podía ser agraviada y ese chico salirse con la suya.

-Padre, Madre no fue apropósito…solo…me caí-nadie pregunto porque Rin quien hace poco daba el hombro frio a Obito ahora parecía muy cercana a este.

-¡Tsk! ¡seguro fue por el niño ese! -Inesperadamente su hermano fue quien se dio cuenta del eje central de “la discusión” entre Rin y Obito.Los padres de Rin fueron iluminados y miraron con mayor reproche a Obito quien solo deseaba irse del sitio y buscar a Kakashi…

Al ver la aptitud de ave enjaulada y abandonada de Obito enojo de sobremanera al joven peli marrón, todo el cumulo de duda y sentimiento confuso exploto en ese instante, corriendo se dirigió frente a Obito y lo tomo por el cuello de su camisa, sus ojos estaban abiertos de ira y empezó a cuestionar al azabache.

El padre de este tuvo que interrumpir, separó a su hijo y con la mirada indico a Obito que se largase.

Oyama fue muy sensible esta vez, ella podía ser una mujer mezquina pero conocía a sus hijos quizás los tenía en filtro materno por ello a sus ojos ellos eran unos angelitos pero sin duda su sexto sentido se amplificó ¿Por qué su amado hijo actuaba tan posesivo con el doncel?, ni con Yuko era de esa manera. Rin apretó los labios y decidió que no le daría el gusto a Obito,no dejaría que engatusase a su hermano, si alguien tenía que pagar por sus actos ese era Obito mismo.

-Madre,no le prestes atención solo desea separarnos-la niña tomo de las manos a Oyama-yo caí una vez en sus trucos pero esta vez será diferente ya verás, después de todo ¿Qué más puede hacer Obito?

-Si, sí tienes razón mi niña, esa cosita no puede hacer nada mejor que abrir las piernas. Me alegra que te haigas dado cuenta-con una mirada cariñosa palmeo la cabeza de su hija-ahhh,ya será hora de cenar, iré a preparar la comida ve y alístate.

-Si madre.

Una vez que Oyama se aseguró de que Rin se hubiese ido borro la sonrisa de su cara. Aunque no estaba 100% segura de sí su hijo tenía esos pensamientos hacia Obito lo mejor sería cortar aquello de raíz, decidió habar con su marido después de la cena.

El transcurso de la cena fue silencioso e incómodo para la familia de cuatro miembros, por su lado Obito no salió de su habitación seguramente su cena estaría esperándolo fuera de su puerta, no tenía apetito y se sentía muy cansado.

Kakashi no lo buscaría…negó con la cabeza, solo eran dos meses seguramente este lo buscaría, sería paciente…

Sus ojos volvieron a enrojecerse, se sentía muy solo y muy triste, deseaba que el peliblanco lo abrasase tiernamente.

Su ensoñación se vio interrumpida con su puerta siendo abierta, se sobresaltó ¿no había cerrado la perta? Quizás por estar distraído se le olvido, vio a su primo asomándose, este parecía particularmente sombrío y callado. Ambos se miraron fijamente.

Obito sintió como cada cabello de su cuerpo se alzaba y su piel se adormecía, su instinto le decía que este primo suyo no estaba bien pero no se movió de su sitio, se sentía como un conejo siendo acechado por un tigre en cualquier paso este animal se lanzaría y l e arrancara la garganta. Sus ojos negros miraban imperceptiblemente hacia la puerta.

-¿Por qué…

El chico se tambaleó ,sus ojos solo reflejaban a Obito quien lucía pálido y era delgado, no tenía aquellas curvas ni un pecho suave como las de Yuko pero aun así su sangre hervía al pensar que esa suave clavícula fue succionada por otro hombre, se sentía molesto y furioso con solo imaginar al achico siendo invadido y llevado al éxtasis por  otro, cuánto más  lo pensaba más quería estrangularlo ,si él no podía hacerlo ¿Por qué otro si?. Quizás su cordura se había roto en el instante que supo que este chico se había fugado con otro o quizás fue mucho antes cuando tuvo un sueño primaveral con este, ¿Quién sabia?, como la cuerda ya estaba floja simplemente se rompió.

Oyama y su esposo estaban charlando, Obito pronto tendría que ingresar a la universidad y no deseaban desembolsar en este chico, pero tampoco podían impedirle ir a la universidad no querían ser blancos de críticas.

Ni siquiera podrían aflojar el año del enlistamiento obligatorio en el ejército, ya que por ser un doncel estaba exento a esto, una regla dada hace dos años y ambos no podían ir contra el gobierno así que tenían que buscar una excusa para no invertir en la educación universitaria del chico, ignoraron que sus vidas dieron un vuelco a lo mejor de lo mejor gracias al dinero por la muerte de los padres del niño, quizás egoístamente consideraron que darle un techo ya los eximia de cualquier cosa.

Surgió el tema de casarlo con algún hombre con un fetiche extraño que estuviese dispuesto a pagar por el chico, esta idea absurda surgió de Oyama su marido la miro y negó. La preparatoria ya había confirmado que el chico era un doncel si este desaparecía obviamente los ojos se volcarían sobre ellos sumándole el factor de la edad, el chico aún era un menor de edad.

-¿Por qué no?

-Miras muchas novelas-el hombre suspiro- ¿Quién desearía casarse con un hombre?, además de que si el chico desapareciera de la noche a la mañana sería muy problemático considerando a los vecinos chismosos que tenemos.

La anciana chasqueo la lengua, ¿Qué otro uso podría darle?, la discusión se vio interrumpida por el sonido estridente del segundo piso, ambos padres se miraron y corrieron escaleras arriba solo para ver a una Rin pálida.

-¿Qué sucede..-Oyama corrió hacia su hija y miro hacia la fuente del ruido. Al ver la escena ante sus ojos la sangre se dreno de su rostro.

Su integro hijo estaba sobre el objeto de discusión, cualquiera con dos ojos podía saber que estaba tratando de hacer y llegar a aquel entendimiento fue muy desolador. Por suerte su marido era un hombre robusto y pudo separar a su hijo de Obito quien solo se arrastraba como queriéndose fundir con la pared muy lejos de kouichi.

Oyama sintió un tirón en su corazón al ver a su hijo actuar de manera salvaje como si ignorase que toda la familia estaba presente y desease volver a subir encima al chico, sus palabras no ayudaban.

Al final luego de un largo rato pudieron calmar al chico.

Esa noche nadie pudo dormir.

Al final la pareja llego a un conceso su  hijo iría al ejercito solo por un tiempo, lo primordial era separar a ambos chicos, aunque Oyama deseaba retrasar el tiempo para que su hijo se enlistase tuvo que aceptarlo, al final despidieron al muchacho quien lucía muy abatido y molesto ,el día de su despedida estuvo su novia quien con lágrimas dijo que lo esperaría pero su novio solo miraba al segundo piso, el causante de todo su sufrir nunca le dedico una segunda mirada y no lo volvería a ver hasta tiempo después.

Obito soltó un suspiro de alivio luego de que su primo se fuera ,Oyama fue más violenta con el pero para su suerte no podía matarlo de hambre ni golpearlo como antes después de todo aún tenía aquellas reuniones medicas con Shizune y el resto de donceles.

Aun no sabía nada del peliblanco y aunque no lo admitiese su corazón parecía irse enfriando, como si la llama de la esperanza se tambalease. Era muy doloroso esperarlo y no  tener ninguna señal de vuelta, pero Obio era obstinado y creía firmemente en las palabras del peliblanco así que preservo. Sin embargo, el muchacho realmente ignoraba el hecho de que había personas que se preocupaban por él, un ejemplo era el maestro de matemática y Shizune quienes trataban de acercarse al joven, pero este los repelía sin darse cuenta.

Aunque lo ayudasen de maneras sutiles eso no significaba que no se esforzaran por ayudarlo, Shizune siempre trataba de brindarle asesoramiento medico e incluso persuadir al director en traer a un psicólogo, claro que fue toda una odisea para convencer a los muchachos de tomar las secciones con este. Al final el psicólogo ayudo a sobrellevar todo el asunto a Obito,al menos con el tiempo se sentía algo a gusto como para tener breves charlas algo sinceras con el psicólogo.

Por su lado el maestro de matemáticas trato de alentar al chico con sus pasatiempos ,con este último si se llevaba mejor que con Shizune y había más confianza pero sus interacciones eran cada vez más limitadas ya que como Obito era un doncel siempre habría algunas habladurías tratando de dejar mal la relación maestro-estudiante.

Pero sin duda aquellas personas le dieron los ánimos que realmente le faltaban. Obito volvió a disfrutar de las  clases de arte y su empeño académico mostraba ligeros progresos, todo aquello le dio nuevas expectativas al chico como si de una buena ilusión se tratase.

 Y así el tiempo hizo lo suyo, quizás Obito no era feliz en esa casa con sus tíos y prima pero al menos podía sentirse reconfortado con su pasatiempo, con la ayuda de su maestro  y Shizune(con el apoyo del psicólogo) se implementó talleres donde los alumnos en general podrían desenvolverse, si bien Obito ya no tenía la cámara podía quedarse con las fotografías de los talleres que tomaba, aquellos paisajes que retrataba lo guardo en un cuaderno que el mismo personalizo y siempre que se sentía dolido ya sea porque la situación en casa no era buena o extrañaba demasiado a Kakashi simplemente miraba aquellas fotos y se trasportaba en ese momento mágico cuando fueron tomadas.

Para cuando se cumplieron cinco meses desde la partida de Kakashi finalmente Obito tuvo noticias que no fueran de los susurros de Rin. Una tarde mientras Rin y Oyama miraban la tv y Obito se encargaba de la limpieza de la casa,se vio un especial sobre los famosos en la tv, en un principio Obito solo se concentraba en trapear el piso pero cuando escucho vagamente aquel nombre familiar no pudo evitar prestar atención.

Su pecho se tensó al verlo finalmente, lucia bien, extrañamente bien, su rostro seguía siendo tan apuesto sin ninguna señal de un desvelo o preocupación, a su lado una niña le sostenía del braso, la voz de la presentadora resonó nítidamente en su cabeza.

-Se acaba de confirmar el compromiso del joven maestro Hatake con miss Yurika,recordemos que la linda señorita es hija del presidente de Fwer la gran marca de cosméticos que toda mujer desea tener en su tocador. ¡Valla noticia!

-Pero Cristim ¿no son muy jóvenes? -la otra presentadora se unió a la charla alegre de la primera promotora-

-No para nada Sully  ,recordemos que parejas mediáticas como los Uchihas se casaron a los 23 años y su compromiso fue dado desde los 15 años.

Las cámaras disparaban locamente a ambos jóvenes, la niña lucia feliz mientras que Kakashi tenía un rostro serio.

En aquel momento Obito se dio cuenta de dos cosas: la primera era que Kakashi había vuelto a Japón y la segunda era que tenía prometida. Pero sin duda la primera cosa le dolió más que la revelación de su compromiso, si el volvió en algún punto ¿Por qué no lo busco?, hubiese estado bien incluso si le decía en persona que solo jugo con el pero tuvo que enterarse por medio de un simple televisor ¿si eso no pasaba, cuánto tiempo hubiese seguido esperando?

Rin giro la cabeza para ver a Obito,sin duda se sentía dolida ya que la madre de Kakashi no le dijo nada de ese compromiso, se sintió abofeteada al pensar que la mujer la consideraba una buena candidata para Kakashi,pero ante ese pequeño dolor pensó en su primo, si el viese eso sin duda seria miserable, ella no podía ser miserable como este así que giro la cabeza para verlo y tomar nota de sus expresiones. Ese sería como un recordatorio de la humillación que paso en el festival y la humillación de la mujer que considero como confidente, para su desconcierto Obito no puso una cara miserable simplemente siguió trapeando.

Lo que Rin no sabía era que ciertamente Obito estaba dolido, pero ya se había dado cuenta de que si ponía todo su ser solo en Kakashi definitivamente se hundiría sin remedio. Quizás las consultas con el psicólogo le hicieron ver cuan dependiente estaba del peliblanco, si bien no había nada de malo en añorar a alguien poner todo por delante olvidándose de sí mismo también era perjudicial para sí mismo. Está bien odiar, amar y añorar, pero también es bueno dejar ir y seguir adelante.

Obito termino de trapear y guardo las cosas en su sitio, una vez finalizado todo subió a su habitación, ya solo se aseguró de que su puerta este bien asegurada y hecho a llorar. Amaba mucho a Kakashi y no sabía cuánto tiempo más lo haría, se sentía decepcionado y traicionado, deseaba tener un abrazo y que alguien le dijera que todo estaría bien, pero en ese momento estaba solo, no había ni un padre amoroso ni su amable madre, no había nadie

Tras sollozar suspiro tratando de calmarse.

Si bien no había una persona cerca si tenía algo especial.

Saco de debajo de su cama aquel álbum de fotos que había hecho durante los talleres, miro aquel gato gordito que le dio ternura, o aquel par de aves juguetonas en una rama de un árbol. Todo eso le saco una sonrisita y lo inspiro. Tomo un cuaderno de quien sabe que curso se puso a dibujar, simplemente dejo fluir todo lo que sentía y cuando culmino su dibujo se hecho boca arriba en su cama, se sentía cansado asique durmió profundamente hasta que fue hora de cenar.

El maestro de matemáticas tenía una idea de lo que le pasaba a Obito,si bien los Hatake movieron sus conexiones para no dejar que aquel escandalo se filtrara más allá de los rumores el viejito se hizo una vaga idea, le preocupo que el joven doncel se desganara y perdiera su brillo pero para su sorpresa este parecía bien no muy diferente a otros días. El ancianito suspiro impotente, no presionaría al chico para que le dijera todo el asunto simplemente le haría saber que podría confiar en el cómo un amigo. Bajo el apoyo de este maestro Obito pudo decidirse por estudiar diseño gráfico, claro que termino esta carrera de manera apresurada y segura ya que tomo clases virtuales ¿Cómo se las arregló?, haciendo malabares entre, trabajos de medio tiempo, estudio vía virtual y trabajos académicos mientras atendía en una tienda y todo esto sin que su tía se enterase, claro que bajo tanta presión no pudo ser considerado como un alumno excelente pero si recibió su certificado y ni bien lo hizo se fue de la casa de su tía. Toda una odisea.

Claro que antes de llegar todo el aspecto de la universidad tuvo que primer terminar la preparatoria.

Lo primero que tuvo que despedirse fue de Shizune quien tras capacitar a nuevas enfermeras se retiró del sitio, aunque quisiera quedarse más tiempo invirtió su horario para poder alentar a los muchachos donceles a no avergonzarse de su situación, se ganó su cariño asique cuando se fue los niños se sintieron algo perdidos y tristes eso incluía a Obito,pero las nuevas enfermeras fueron muy educas con ellos asique no se sintieron muy incomodos durante sus sesiones  y reuniones por las tardes.

Cuando finalmente Obito termino ese año tuvo que “despedirse” de su maestro quien ya estaba por retirarse, las razones del retiro no solo fueron por la edad de este sino por el rumor desagradable que circulaba de que estaba teniendo preferencia por un doncel, en un inicio Obito realmente se sintió afectado por esto, pero el ancianito simplemente negó divertido.

-Jajajaja,que niños tan delirantes-palmeo la cabeza del pelinegro-no les prestes atención, tú y yo solo somos dos grandes amigos ¿Qué importa lo demás?, no estés desanimado niño. Siempre habrá rumores y palabras desalentadoras, pero o dejes que estos hagan mella en ti, confía en ti mismo porque si no lo haces no podrás levantarte la próxima vez.

Obito,lo que más me apena es que no pueda ayudarte tanto como quisiera, simplemente lamento eso. Por ello te pido que me permitas tenderte una mano por esta vez.

Obito estaba cabizbajo. Se supone que hoy sería el día más feliz de su vida pues terminaba el año, pero ahora también debía despedirse del maestro que lo apoyo. Si bien admitía que era testarudo seguía teniendo un corazón blando y se sentía particularmente culpable de los desagradables rumores. Si no fuera por él, su maestro no tendría que retirarse de esa manera tan vergonzosa. Así que ante el pedido del ancianito cedió.

-Me gustaría apoyarte en el estudio, si bien aún estas atado a restricciones legales por tu edad, no me siento muy seguro dejándote a manos de tu tía Así que me gustaría seguir en contacto contigo si no te molesta.

Bajo la persuasión del maestro Obito acepto, de alguna manera dejo entrar de contrabando a su casa un nuevo celular, por este año Oyama accedió dejar al chico buscar trabajo ya que lo consideraba una pérdida de dinero, el primer trabajo que consiguió fue en una tienda de conveniencia que atendía hasta muy tarde, la paga no era mucha pero lo que Obito buscaba era un lugar donde le permitiese quedarse sin la necesidad de pasar tanto tiempo con su tía.

Aunque Rin se sentía herida por culpa de la madre de Kakashi accedió a seguir en contacto con esta, actuando como una suerte de espía e informante del día a día de Obito, tomando las palabras de Rin la mujer se regodeo al imaginar el estado miserable de Obito,ya había puesto el nombre de este en la lista negra de las buenas universidades así que considero que con esto el chico estaría perdido. Cuándo se sentía amargada y molesta escuchar la desgracia del muchacho la animaba bastante, todo esto la tuvo satisfecha así que magnánimamente le ofreció una beca en el extranjero a Rin quien acepto la limosna, fingió ser servil pero por dentro hervía de ira. Así que al final Rin se fue al extranjero.

Oyama se sintió muy sola cuando sus dos hijos dejaron el nido, la única satisfacción que encontró fue regodearse del éxito de Rin ante Obito e invitar a Yuko a su casa de vez en cuando. Yuko,la aun novia de su hijo siempre accedía a ir y alentada por su suegra se comunicaba activamente con su pareja. Ambas mujeres en algún punto se entendieron también que cuando una enaltecía a Rin frente a Obito la otra añadía más leña al fuego. Claro que esto si bien dolía en un inicio pronto fue cayendo en oídos sordos por parte de Obito, quizás el chico ya se estaba volviendo inmune o solo estaba muy cansado que solo pensaba en dormir.

Esa rutina trabajo-casa-estudio secreto-hablar con el profesor en secreto siguió hasta que su primo se tomó unas vacaciones, durante ese mes tuvo que salir de la casa ya que Oyama no se sentía segura teniéndolo presente, para su suerte encontró un lugar barato, el profesor de matemáticas quiso ayudarlo pero en algún punto su familia se enteró que Obito era el doncel de los rumores de la preparatoria así que para evitar la fricciones el chico decidió buscar un hotel temporal. Esos meses en solitario fueron los mejores de Obito, tanto así que la idea de dejar finalmente esa casa de locos se sedimento en su mente. Aunque deseaba irse rápidamente decidido pensarlo fríamente, no tenía que pagar el alquiler ni el agua y la luz si se quedaba en esa casa, en cuanto al dinero…aunque parte de su mensualidad se lo quedaba Oyama este tenia una cuenta de ahorros abierto por su maestro de matemáticas ,Oyama nunca dudo de si el dinero que recibía era correcto ya que estaba muy confiada en que el chico no tenía donde esconderlo, si bien pensaba que era una miseria seguía siendo “dinero extra” asique nunca dijo nada más.

Cuando su primo tuvo que regresar al servicio militar Obito volvió a la casa. ¡Al fin!, aunque odiase ese sitio aun sentía pena por el dinero gastado durante ese mes fuera.

A todo esto sería mentira afirmar que nunca pensó en Kakashi, a veces lo utilizaba como una especie de combustible que alimentaba sus fuerzas, a veces era ira y en otras ocasiones cuando no podía evitarlo tecleaba aquel nombre  en el buscador   al final se refrenaba pensando ”¿Por qué gastas mis megas en ese idiota?” solo para ver formas de olvidarse del innombrable.

Talvez esto le impedido enterarse que Kakashi rompió el compromiso y renuncio al nombre de su familia y se enlisto al ejército, esto último con afán de que no lo obligaran a hacer algo que no le gustaba. Ahora sin dinero ni carrera que lo apoyara básicamente subsidia en ese servicio militar, si no fuese por su vieja conocida Ten Ten talvez su situación hubiese sido mucho más difícil.

Volviendo con Obito, este aprendió a vivir con su tía y cuñada e incluso desarrollo la sobre habilidad de ignorar sus tonterías talvez fue por el hecho que sabía que muy pronto dejaría aquel sitio.

Sin embargo su vida dio un tercer vuelco cuando su amado maestro, quien lo apoyo a pesar de todo ,murió, su muerte se debió a causas naturales, nadie predijo que iba a morir simplemente sucedió, pero para la familia de este había un responsable y ese era Obito después de todo uno no sufre un ataque cardiaco de la nada ¿verdad?, por ello cuando el muchacho se enteró y quiso visitar la tumba de su maestro la familia de este se lo impidió e incluso sin reparos le dijeron que él fue la principal causa del deceso. Obito no iba a negar que aquellas palabras lo afectaron, era sensible, pero ya no era el niño de 10 años ni el tonto enamoradizo de 15, asi que no dejo que aquellas palabras hicieran mella, las palabras de aquel buen hombre siempre lo acompañarían, no era su culpa ¿Por qué siempre debería ser su culpa?

No dejaría que nadie lo pisase nunca más y decidió proteger a aquellos que estaban dispuestos a entrar en su vida como su maestro lo hizo. Quizás en ese momento se formó su personalidad de una madre gallina con sus seres queridos.

Así que Obito nunca dejo sus estudios y siguió intentándolo, a pesar de que había momentos en que deseaba tirar todo por la borda ya sea porque extrañaba a su maestro o recordaba a Kakashi, incluso cuando Rin solía jactarse de sus logros y se lo restregaban en la cara, nunca se rindió y siguió, en el momento que solo faltaba un año y medio para culminar su carrera una noticia sacudió la casa de sus tíos, su cuñada, la señorita Yuko estaba embarazadas aquella niña quien se dijo así misma que solo estaba con su chico(kouichi) por su dinero y lucia prometedor se embarazo, su relación con el chico no era muy buena desde lo sucedido antes del servicio militar pero de alguna manera esa relación se extendió durante cuatro años y finalmente la niña se embarazo para este momento su primo solo visitaba su casa durante las vacaciones y los días festivos y luego de enlistarse en el ejercito ingreso a la universidad donde pasaba sus días en los dormitorios de la facultad. El embarazo de la chica supuso dinero y un momento equivocado ya que ambos chicos no estaban casados así que al final se realizó una boda rápida ,durante la celebración Obito aprovecho su tiempo a solas en casa para tomar sus cosas e irse, si bien no deseaba dejar ese sitio hasta terminar sus estudios el embarazo de Yuko supuso una carga extra sobre él, su tía implementó el pago de su instancia en esa casa ignorando completamente el hecho de que Obito le daba parte de su sueldo, cosa que el muchacho no iba a permitir.

Cuando salió de aquel sitio aspiro aire por primera vez en mucho tiempo.

Observo por última vez aquel sitio ates de irse.

Lo primero que hizo fue dejar su trabajo y buscar uno nuevo, lo segundo en su lista fue alejarse de ese sitio lo más lejos posible, así que agarro un bus y se embarcó en un viaje largo, mientras dejaba ese sitio no pudo evitar sentirse muy triste, quizás recordó aquel suceso con cierto chico, se rio para sus adentros ya habían pasado cuatro años, ya no deseaba seguir desperdiciando  sus sentimientos, con pena se preguntó porque ese chico estaba tan metido en su corazón si habían pasado un periodo tan corto de tiempo.

Ya sea inconscientemente o no llego al mismo sitio donde termino la última vez, había edificios nuevos y las calles parecían haberse trasformado en ese pequeño lapso de tiempo pero aquella pintoresca cafetería seguía en ese sitio e incluso vio un papel solicitando nuevo personal .Obito quiso reír pero decidió que haría la entrevista, fue gracioso, luego de cuatro años se presentaría a una entrevista que cierto chico dijo que harían…irónicamente ese sería el primer paso para encaminarse en su nueva vida.

Y así el doncel conoció más a fondo a sus futuros amigos, se dio cuenta que Hashirama a pesar de lucir muy joven ya tenía su edad y que el niño rubio que le daba ligeras miradas a Kakashi en el pasado ya era todo un jovencito, si en su etapa de fiestas y algo rebelde, pero de buen corazón, ambos le dieron una mano, a él, un desconocido le permitieron quedarse un tiempo en la habitación de ambos chicos. Por razones personales, Obito decidió mudarse en cuanto junto lo suficiente después de todo no deseaba incomodar demasiado. Al final se graduó pero no uso sus habilidades hasta más tarde cuando decidieron darle un toque más hogareño a la cafetería, el diseño el logo de la entrada y junto a sus nuevas personas más importantes renovaron el café el cual llego a expandirse de tamaño hasta adquirir dos pisos y mucha clientela, con la llegada de más clientes su salario aumento y durante esta época el niño fiestero Deidara se mudó a un apartamento propio.

Antes de darse cuenta 8 años pasaron, de alguna manera su tía seguido llamándolo ¿Cómo encontró su número?, bueno resulta que cuando cumplió 23 tuvo que asistir con su tía para firmar  unos papeles donde la propiedad de sus padres pasaba completamente a las manos de sus tíos-algo tonto pero de alguna manera mágica los papeles parecían ser “legales” y el abogado que estuvo a su cargo(uno público ya que el privado era muy caro) navegaron a favor de sus tíos, algo un poco triste para los tíos quienes ya habían dispuesto de la casa hace mucho así que no recibieron ni ninguna ganga extra ni ningún regaño por sus malas acciones -, en ese tiempo se emtero que debía recibir dinero por la compensación por la muerte de sus padres y resulta que sus tíos recién se dieron cuenta que su pequeña mina de oro ya había expirado y no se percataron que el receptor de dicha plata debía firmar una constancia donde cerciorará que recibió el dinero.

 Claro que Obito se sintió enfadado y furioso ¿cuán descarados fueron esos parientes suyos?, bueno la cuestión es que no dijo nada no porque fuera un caqui suave, simplemente le dio pena sus sobrinos, el mayor tenía apenas cinco y  medio y era muy lindo tanto así que en cuanto lo vio por primera vez el pequeño se le pego afectuosamente, al ver que se ablandaba su madre(yuko) quien había sido infectada con el carácter de Oyama decidió manipular ese afecto a su favor, esas intenciones fueron vistas por Obito pero fingió ignorancia, al final firmo la constancia no pidió nada a cambio se podría decir que corto decisivamente sus lazos con ellos ,si, aunque Obito haya sufrido mucho durante ese tiempo con sus tíos si albergo una mínima esperanza de que ellos cambiarían, recordaba las palabras aparentemente sinceras de su tío en el funeral de sus padres…quizás cuando veía esos ojos muy similares al de su gentil padre tenía el impulso de ceder, pero ya no. Sin embargo sus tíos creyeron erróneamente que podían seguir exprimiendo a Obito,primero actuaron con prepotencia y descaro cuando Obito amenazó con tomar medidas legales se callaron un tiempo, ese tiempo se cortó cuando Rin quien ya era más versada en el mundo exterior por seguir de cerca a la madre de Kakashi,dijo que Obito no podía proceder pues ya había firmado una constancia que avalaba a ver recibido el dinero, ese acto volvió a despertar las ganas de usarlo nuevamente en su tía…esta vez usaron el pretexto del afecto para atarlo e incluso amenazaron que no volvería  a ver a su sobrinito, lamentablemente el pequeño niño de cuatro años parecía a ver sido embrujado por el guapo doncel y no paraba de preguntar por este al final cedieron con el niño quien hablaba unas veces por semana con su tío claro que todo era monitoreado por su madre quien anqué no lo admitiese tenía recelo de Obito sentía que ese doncel codiciaba a su marido.

Así que de vez en cuando Obito recibía la llamada presumida de su encantadora tía por su puesto que el chico no hacía mayor caso, el negocio de su jefecito se expandió e incluso ahora hacían delivery  y con sus ahorros Obito se compró una motito blanca usando la excusa de uso personal para que Hashirama no se sintiera culpable, si bien hacia recados con respecto a su carrera la mayor parte del tiempo estaba en el café, el sitio donde encontró una nueva vida y familia y así el chico pensó que sus días seguirían hasta que un buen día soleado cuando cumplió 26  años, cierto chico de cabello plata ingreso por la puerta del café.

                                                                              Fin de los recuerdos