Aún queda una hora para salir, yo debería estar terminando los reportes, pero los termine en la semana, no tengo nada que hacer y le he pedido a alguien que me cubra si algo pasa si no estoy. Y por cubrir me refiero a que diga que tuve alguna emergencia. Susan está afuera, como siempre. Demonios, no sé cómo voy a escapar ahora. Quizá pueda escaparme en la parada de autobús, corriendo, como siempre.
Tengo tan mal humor últimamente, que no me cuesta nada fingir que ella no está ahí parada, y que comienza a caminar a penas me ve. No he hablado con ella desde hace tanto tiempo, y ni siquiera fue una conversación tan larga como para decir que hablamos. Me detengo, esperando a ver si se acerca o no. necesito, realmente necesito desquitarme con alguien.
— Harvey…— ella esta agitada, como si hubiera corrido para alcanzarme— por fin te detienes.
— ¿ahora qué quieres, Susan? ¿Sigues creyendo que tenemos algo? por favor…— resoplo, fastidiado.
— tú no crees eso, solo…
— lo creo, no hay nada entre nosotros. Hace meses que no hablamos, solo me sigues, ni siquiera te he volteado a ver, y no entiendes. Susan, deja de hacerte esto ¿quieres? es suficiente.
— no, no lo es… ¿Qué te…? Dime que necesito ¿Qué me falta para poder estar contigo? hare lo que sea, ¿Qué le ves a los demás? Es obvio que…
— Susan, eso no es así…
— ¡Sí! si lo es, ¿Qué me hace falta? ¿Qué necesito para que vuelvas a salir conmigo?
— tsk, obviamente te falta tener algo entre las piernas— me giro tan bruscamente que me hago daño en el cuello. Ahí está, ese otro idiota. También quiero decirle algunas cosas a él, no mejor aún, golpearle. Si no lo hago es porque aún estamos en la calle— Harvey…— me toma del brazo y me aleja tan pronto de Susan, que apenas y reacciono. Me suelto de un tirón.
— a ti tampoco quiero verte.
— No tienes muchas opciones— doy la vuelta por otro lado. Le escucho suspirar— Harvey…
— nada de Harvey, tú no eres mejor que ella. Aléjate de mí— nunca había pensado que podría caminar tan rápido alguna vez. La otra noche que salí del hotel también camine tan rápido que Noah no me alcanzo. Sigo molesto con este idiota por eso, entiendo que quiera burlarse de mí, y que sea tan cruel como es, pero eso está a otro nivel.
— nunca dije que lo fuera… oye, ¿quieres escuchar?
— no. Jodete— Noah suspira otra vez, sigue caminando, intentando alcanzarme. Desde entonces, no le había visto, con la experiencia que tuve con Susan, fue fácil evitarlo unos días, no conteste sus llamadas tampoco.
— Hey, estoy intentando hablarte…— me sujeta otra vez. Es pura inercia cuando me giro le estrello el puño en la cara— maldición…— sigo caminando. Nunca había golpeado a nadie, me siento extraño haciéndolo por segunda vez— esto no es nada propio de ti, cenicienta.
— deja de llamarme así.
— Aunque admito que merecía eso— le dirijo una mala mirada ¿en serio sigue burlándose de mí? Noah alza las manos, como pidiendo paz— tranquilo…
— ¿vienes a burlarte de mí? Ya estoy cansado de ser tu burla, y si solo vas a estar haciendo eso…
— no, no venia a burlarme— Se detiene, y por primera vez, me detengo yo también. Golpearlo si me hizo sentir mejor. Noah deja de mirarme, pasa su mano por su cabello, y aprieta los labios. Esta… claramente incomodo— mira, la…lamento lo que hice el otro día.
— ¿Cómo?
— Lamento haber hecho eso— le miro, entrecerrando los ojos. No le creo. Siento revuelto el estómago. La valentía que sentía se ha comenzado a esfumar al estar frente a Noah— No sé qué fue lo que paso.
— ¿Qué no sabes?— murmuro. De nuevo me siento molesto— ¿No sabes que paso? ¿En serio es lo único que dirás? Me llevaste a un hotel, en una mala zona y tu intentaste…— el enojo vuelve al recordar— ¿Y no sabes que paso?
— eso…
— mejor déjame en paz.
— Ah, joder, no te pongas así.
— ¿Y qué quieres que haga? ¿Qué finja que nada paso?
— Eso ayudaría mucho— ah, no lo puedo creer. Sigo caminando, dejándole atrás por unos breves momentos. No sabía que esperar de este encuentro, ¿Qué demonios hizo ese día? Fuera de lo obvio, no logro entender porque lo hizo. Creo conocerle lo suficiente para saber que si fue una broma o algo para burlarse de mí, lo llevo muy lejos— ¿Ahora qué?
— solo deja de hablarme.
— no seas estúpido.
— ¿Ahora yo soy estúpido? Yo no fui el que casi obliga a alguien más a…
— Yo no iba a hacer eso.
— ¿No? entonces dime ¿Qué ibas a hacer?— Noah se queda callado. Le miro un largo rato, tampoco digo nada. Finalmente tuerce la boca.
— no sé.
— ¿Por qué hiciste eso?— Noah niega con la cabeza, no se si no lo sabe o no quiere responderme. Resoplo, poniendo los ojos en blanco— me queda claro que solo quieres burlarte de mí.
— ¡No!
— ¿Entonces?— no me dice nada otra vez. Le sostengo la mirada, él parece desesperado… no, no parece, está desesperado. Creo que tiene razón al decir que no quería burlarse de mí de esa manera, y ciertamente, Noah nunca hizo alguna broma de cómo esa antes, nos besamos y nos tomamos de la mano, pero nunca intentó nada más. ¿Por qué esta así? si no se burló de mí, si no era una broma entonces significaría que…— ay, no.
—…— viendo la expresión que pone, que no me dice nada, y recordando algunas cosas que han pasado, solo se me ocurre una cosa.
— De verdad… dime que no… ¿te enamoraste de mí?— Noah aspira de pronto, mis palabras le han sorprendido mucho. Noah no me dice nada, me sigue mirando. Se me escapa una risa. Esto es ridículo— Por favor, dime que no es así. Esto solo era una farsa, jamás fue real ¿en serio creíste que podía pasar?— aún me parece divertido, me cuesta no soltarme a reír a carcajadas.
—… no.
— ah, bien… eso sería muy tonto. Creo que podemos parar eso de una vez, ya no te necesito, se arreglármelas sin ti con Susan. Muchas gracias por haberme ayudado— Noah me mira, sin decir nada.
— bien. Entonces, haz lo que quieras— se da la vuelta y se va por dónde veníamos. Doy una mirada alrededor, pero no hay rastro de Susan. Sigo caminando tranquilamente hasta la parada, que está a unas calles, porque por culpa de Noah me pase la otra parada. Por fin siento que las cosas están poniéndose como debieron hacerlo hace meses.
— Wow, Harvey, pareces de buen humor— Le sonrió a Chris, que viene entrando a la cocina, recién levantado.
— estoy de buen humor. No he visto a Susan en cuatro días— eso ha sido un alivio tan grande, porque ya había pensado que tendría que vivir con ella siguiéndome toda la vida— se fue, amigo, simplemente ya no está.
— ¿se cansó al fin?
— eso parece. Ya no tendré que mudarme al otro lado del país— han sido unos días realmente buenos.
— ¿Cómo lo hiciste?— me encojo de hombros. Le observo buscar en el refrigerador— ¿ya no hay postres?
— termine con eso también.
— oh que mal, eran deliciosos. Dime donde los conseguías para ir por algunos.
— no te lo diría ni aunque me pagaras, créeme, no vale la pena lo que tendrás que hacer por uno de esos. ¿Y porque sigues casi desnudo? Deberías ponerte algo de ropa— dejo los trastes en el fregadero. He tenido unos días realmente tranquilos a comparación de hace unos meses. Me siento tan bien, que ahora me pregunto cómo demonios termine como termine. No sé si Susan se cansó por lo que dijo Noah o solo me está acosando de otra forma, pero como la veo por ningún lado, es mucho mejor.
¿Qué más podría esperar? al final, las cosas casi se arreglaron por si solas. Si quiero, ahora puedo comenzar a salir con alguna chica al fin, salir con amigos sin tener que soportar los acosos. Mi vida es normal otra vez.
— Harvey, vamos a salir esta noche, ya sabes, una salida de fin de semana, mucho alcohol y música, ¿Quieres venir?
— suena… bien. Si, iré.
— estupendo, puedes llevar a alguien si quieres.
— Estupendo— No tengo con quien ir, creo que podría comentarle a Chris si quiere venir. Sin duda, cuando te sientes bien las cosas también salen bien. Chris no ha sido el único que noto que mi humor mejoro estos días.
Sin Susan por aquí, volver a casa es tan rápido que apenas tengo tiempo para disfrutar el recorrido. ¿Qué habrá pasado con Noah? Bueno, sin duda sigue siendo tan cruel como siempre, y no es un mal pensamiento, sé que disfruta ser así. Sin él, creo que me habría vuelto paranoico o sufrido un ataque de ansiedad. Admito que a veces me la pase bien, por más idiota que él sea.
— Oye, Chris… ¿Qué estás haciendo?— pregunto. La cocina es un completo desastre, que ni ocupo preguntar qué estaba haciendo.
— ah, hola, solo… un poco de cocina.
— ¿a esto le llamas hacer cocina?
— sí, bueno… no fue muy bien.
— Como digas, pero yo no pienso limpiar nada— dejo las cosas en la mesita, adentro esta cálido, y puedo quitarme el abrigo también— esta noche me invitaron a salir, una salida de amigos, ya sabes.
— oh, está bien. Hace tiempo que no vas a fiestas.
— ¿Me estas espiando?
— Vivimos en la misma casa, es difícil no notarlo— él se encoge de hombros. Ah, eso es verdad, yo también noto las horas en las que llega, o si llega.
— casi no hemos hablado, pensé que querrías ir. Sé que los demás se van a embriagar y van a ligar con alguien, y me voy a quedar solo en la barra.
— entonces me estas invitando por qué no quieres quedarte solo y no porque me quieras allá.
— si no te quisiera allá, créeme que ni mencionaría la salida. ¿Entonces? ¿Vas a venir o qué?— él me mira, aun con los trastos de la cocina. Finalmente asiente— bien, entonces deberías apurarte con eso.
— sí, si…— como no tengo nada que hacer, me quedo viendo televisión toda la tarde, incluso pido comida a domicilio. No sé qué hace Chris en la tarde, porque después de limpiar la cocina, no le veo más. Es raro tener una salida de este tipo, después de todo lo que ha pasado.
Vuelvo a ver a Chris a eso de las siete, ya está cambiado para una salida. Yo todavía tengo que asearme. De cualquier modo no me tardo mucho. El bar donde nos reunimos es grande, y no está lleno todavía. Me dirijo hasta donde están mis amigos, que ya tienen la mesa llena de vasos y botellas. Después de presentar a Chris, nos sentamos también. No estoy del todo cómodo aquí, creo que fue una mala idea haber venido después de todo. Con el tiempo, no es raro que los demás comiencen a desparecer, invitados por alguien más. ¡Incluso Chris está bailando con una chica en la pista! No pienso quedarme tampoco a bailar.
— oh, Harvey, ¿ya te vas?
— eh, no… solo…
— ah, ¿vienes con tu novio?
— Mi novio…— oh dios, está hablando de Noah— No, nosotros… terminamos— alguien me sujeta del brazo. Casi entro en pánico al pensar que Noah este aquí también, pero solo es Chris— ah, hola, Chris, estaba…
— ¿Puedo hablar contigo?— apenas y me puedo despedir de los demás, Chris me hace ir con él afuera, los oídos me zumban por estar tanto rato dentro con la música tan fuerte. Me suelto y le sigo yo mismo. No vamos tan lejos, solo nos alejamos lo suficiente para que la música no moleste.
— ¿quieres decirme ya que te pasa?
— umm, mejor dime tu. ¿Qué te pasa?— le miro, sin entender— ¿te referías a ese chico? ¿Qué fue lo que paso?
— ¡Solo era una mentira! Para alejar a Susan, como dijiste. Pero ya… ya no lo necesito. ¿Por qué tenías que sacarme de ahí para preguntarme eso?
— ¿desde qué Susan se fue?
— sí.
— has estado muy raro desde entonces. ¿Tiene que ver con esa persona? ¿Noah?
— ¿raro? Christian, estoy feliz de que ella ya no me acose y no tener que ir por la calle tomado de la mano de un chico o besarme con él solo para fingir que tenemos algo.
— ¿y cómo estuvo eso? ¿Cómo le dijiste que acabo?
— solo… le dije que ya era suficiente, no ocupaba decir más. Habíamos acordado que cuando Susan se fuera, terminaríamos eso.
— ahí está.
— ¿Qué?— ¿piensa que eso estaba mal?
— eso que haces… no suenas como tu… no sé cómo explicarlo. Tú no eras sarcástico, ahora abusas demasiado de eso. Suenas hasta un poco…
— ¿Cruel?— murmuro. Siento que me congelo. No lo sabía… no me había dado cuenta de que estaba haciendo eso.
— ¡Exacto! Es como si hablara otra persona. Es extraño… ¿Seguro que estas bien? quizá… no sé, ¿necesitas hablar con él?— ¿hablar con Noah? ¿Para qué? de seguro el solo se estará burlando de mi por creer que necesito despedirme adecuadamente— solo es una sugerencia, parece que lo necesitas.
— estoy bien.
—… Deberíamos volver a casa— aún es temprano, pero no tengo ánimos para quedarme en el bar, y por el comentario de Chris, él tampoco— pero vámonos rápido, escape porque la chica con la que bailaba tenia novio, no quiero que me golpeen— ah, típico de Christian. Sin embargo… lo que me dijo… ¿en serio me estoy haciendo cruel? Solo puedo decir que esas palabras me hicieron sentir como si me estuviera convirtiendo en alguien como Noah, y eso no puede pasar ¿cierto?
Si yo me estoy convirtiendo en alguien como Noah, ¿Qué debería hacer? ¿Despedirme adecuadamente? Algo así como un cierre. Quizá sea verdad, pero… ¡la última vez que nos vimos las cosas salieron bien! Ir ahora y decirle otra vez que ya nos vamos a ver… Noah ni siquiera merece que sea amable con él, después de lo que hizo no quiero verlo a solas para nada. No conozco donde estudia, no sé a dónde va y solo sé que trabaja en algunas reuniones cocinando postres. No iré a su casa.
Apenas puedo dormir pensando en eso, ¿Qué tan cruel fui? Espero que no se notara tanto, ahora que se cómo me comporte, me siento un poco mal. Nunca quise ser como él, le reclamante tanto por ser como era, y ahora yo… podría llamarle por teléfono y pedirle que nos veamos en algún sitio, pero quizá ni me responda el teléfono. ¿Por qué tengo su número todavía? No voy a llamar.
El lunes que vuelvo al instituto, al menos me sorprendo con la noticia de que puedo quedarme cuando termine la universidad. Es una excelente noticia, demasiado buena, porque es justo lo que estuve esperando desde que vine aquí, saber que soy bueno en esto, y que me pagaran… sin embargo, creo que debería estar más feliz por eso, vamos, ni siquiera porque Susan no está aquí… por costumbre miro al lugar donde Susan esperaba siempre y justo cuando estoy mirando, mi teléfono suena. Pego un brinco cuando siento la vibración, luego me quedo congelado mirando la pantalla.
Es Noah.
— ¿Si?
—… debes estar pasándola genial sin tu acosadora ¿No?
— ¿Cómo?— ¿Cómo sabe que Susan ya no está acosándome? Estoy tan traumatizado con lo de Susan que comienzo a mirar a todos lados. Solo me faltaría que Noah también me esté siguiendo ahora.
— Te veo en el parque de siempre en media hora— me cuelga. ¿Qué acaba de pasar? Por un lado, me siento aliviado de que no me esté siguiendo, y sin duda, la forma en que me pidió, ordeno, ir, es sin duda como el Noah que conozco. ¿Para qué quiere que vaya? No sonaba molesto. ¿Debería ir? Podría llamarle ahora mismo y decirle que no puedo…
Suspiro, derrotado, y comienzo a caminar hasta el parque. No me dijo en que parte del parque nos veríamos, y no le encuentro cuando llego. Doy tres vueltas por ahí, esperando verle, pero nada, y ya paso la media hora que me dijo. Ah, espero que no sea solo una maldita broma y me haya hecho venir para nada. ¿Esa es Susan? Dios, si, es Susan. Me doy la vuelta rápido, intentando huir de ahí.
— ¿A dónde tan rápido?
— Noah… ¿Dónde estabas? Maldición… Ella está ahí, vámonos antes de que…— Noah me toma de la mano, como si nunca hubiera pasado nada entre nosotros.
— lo sé, me está siguiendo a mí.
— ¿A ti?— Por eso sabía que no estaba conmigo. Me cuesta caminar a su lado, y me siento muy incómodo por su presencia, no porque estemos tomados de la mano, vaya, al final termine acostumbrándome a esto— ¿Porque tú?
— ni idea, dime tu ¿quizá porque lo que le dije la última vez? Quise hablarle, pero ella se va a penas ve que quiero acercarme. No sabe donde vivo, pero ha hecho lo mismo que hacia contigo, con la diferencia de que yo no tengo miedo de ella— Noah me lleva hasta la heladería. De nuevo, en la mesa más alejada de todas y me deja ahí mientras va a pedir. Esta vez me sorprende al traer no un par de helados como esperaba, sino dos banana Split. Son tan grandes que me siento lleno solo de verlos. Pone uno delante de mí.
— Yo no tenía miedo de ella— más bien de lo que hacía— ¿Para qué me llamaste? No pretendes que te ayude con ella ahora.
— claro que no. De hecho, pienso que está intentando averiguar cosas sobre mí para decírtelas a ti— suena tan sarcástico que sonrió.
— dudo que pueda decirme algo peor de lo que ya se de ti.
— Lo sé. Y de hecho, estoy haciendo esto por ti.
— ¿Por mi? No entiendo.
— ¿A quién más le vas a pedir ayuda cuando ella regrese a acosarte?— no había pensado eso ¿Susan va a volver? Si lo hace, me quedare sin opciones— si vuelve a hablar contigo, dime que te dijo, me quiero divertir de lo lindo con eso.
— eres malo. Y yo que pensaba que estabas molesto por lo de…— me interrumpo. No quería mencionar eso. No le tengo miedo exactamente, pero no quiero hacer algo que él haría, no quiero ser como él.
—… tú tenías todo el derecho a hacer eso. Estoy intentando disculparme por eso— miro el plato frente a mí.
— ¿esto es una disculpa?
— Lo intento— debe ser difícil para alguien como él disculparse. Se nota que está haciendo un gran esfuerzo. Es gracioso y raro, porque no parece él. ¿Así es como le ven los demás? Quizá.
— ¿Por qué no nos olvidamos de eso?— Noah no me dice nada, ha comenzado a comer primero que yo. Suspiro y comienzo. Lo bueno es que no he comido— Noah ¿Qué pasa? Creí que estaría bien olvidarnos de eso, no me digas que tú no quieres olvidarlo— le señalo con la cucharilla.
— Ese no es el problema, Blancanieves— me sonríe— puedo hacer como si no lo recuerdo, no estoy orgulloso de eso. Pero no puedo… ah, esto te parecerá un chiste, ya me canse de fingir.
— oh, es eso. Bueno, podemos dejar de hacer esas cosas, solo vernos ocasionalmente, y eso.
— no estás entendiendo, cenicienta. No me molesta fingir, ya me canse de fingir contigo— pero si se está contradiciendo, ¿Cómo que se cansó de fingir pero no le molesta? No entiendo— ah, quiero seguir contigo, pero ya no quiero fingir… ah, eres tan idiota. Quiero estar contigo en serio, tomarnos de la mano en serio, besarte en serio.
— ¡Ah!..— Ya entendí…— espera…— ¿Acaso está sugiriendo que…? Noah solo sonríe, comiendo tranquilamente— Dijiste que tu no… ¿Por qué?
— Pff... ¿Necesitas preguntar? No te escuche quejarte cuando nos besábamos— abro la boca para decirle que si me queje, pero… no lo hice en sí— y no parece que te guste fingir. Dejemos de fingir.
— quieres decir… ¿Qué salgamos? ¿Cómo pareja de verdad?
— lo que hemos hecho no es muy diferente, esto solo es formalizar. Ah, claro si quieres— ¿Qué clase de propuesta rara es esta? Me le quedo mirando un rato, sin decir nada. ¿Ésta bromeando? Él me sostiene la mirada.
No está bromeando. ¿Salir con él de verdad? O sea que todo lo que dijimos e hicimos ya no sería una mentira. Me pongo a reír, tanto que me duelen las costillas y se me salen las lágrimas. Noah sigue comiendo como si no me hubiera vuelto loco.
— vas a… ¿Vas a seguir burlándote de mí?
— por supuesto.
— Entonces supongo que está bien— Ya no es solo por Susan, porque creo que ella volverá y no tendría sentido que salga con alguien más que va a salir corriendo apenas sepa sobre Susan. Pase tanto con Noah, que ya es extraño no salir con él. No extraño que me tenga de esclavo, ni que se burle mucho de mí— pero tengo condiciones.
— Pff, lo esperaba. Habla.
— primero, nada de burlarte demasiado de mí.
— pensé que dirías eso. Pero es que eres tan idiota que es inevitable— también podría añadir que él es un completo imbécil— pero lo intentare. Menos burlas.
— Segundo, tendrás que pagarme más por los eventos a los que vaya— Noah hace una mueca, pero asiente— y nada de intentar lo del hotel de nuevo.
— bien. No pensaba hacerlo de todos modos. No hare nada que no quieras.
— entonces es todo. Estamos saliendo desde hoy.
— No, cariño, tenemos más de tres meses saliendo ¿Cómo puedes olvidarlo?— me pongo a reír. Debo estar loco para aceptar esto, pero creo que fingir que sales con alguien al final termina por volverse una verdad. Los sentimientos no conocen de mentiras.