Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

You Gave Me A Home por KuroAshi_ZxS

[Reviews - 28]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Los personajes de Marvel y sus historias no me pertenecen.

¡Hola a todos! Es un gusto verlos una vez más. La suerte ha estado de mi lado, por lo que no tardé mucho en traer continuación de este fic. Como mencioné en el capítulo anterior, inicia oficialmente aquí la primera interacción y encuentro entre Steve y Tony.

Como advertencia, me gustaría señalar lo que dije en el primer capítulo: habrán menciones de StrangeIron, pero no será en realidad una pareja. Ahora lo entenderán.

Saludos especiales a: Shofi21 ¡Muchas gracias por comentar!

Disculpen cualquier posible falta de ortografía.

Realmente esperaba equivocarse, no quería creer que ella (Mary, su nombre es Mary) era hija de Steve. Pero todas las evidencias estaban frente a sus ojos: el parecido físico, el modo en que este le había abrazado, su profunda mirada.

Y ahora, solo ahora, empezaba a sentir el peso de la situación, de lo que había hecho.

Debió primero revisar esos papeles, pues ¿Qué derecho tenía él de arrebatarle a Steve la oportunidad de ser feliz?

xxxxx

“Entonces… ¿Roberta es tu madre?”

Tras casi cinco minutos completamente a solas con la pequeña, la naturaleza de Tony empezó a jugarle una mala pasada. Era hiperactivo, incapaz de mantener las manos quietas: tanto su mente como su cuerpo estaban en constante movimiento. Ya había recorrido con la mirada la sencilla habitación en que se encontraban cerca de siete veces, acariciado a los gatos que vivían allí al menos una docena, dado que se habían instalado cómodamente en sus rodillas.

Por la sonrisa (estaba seguro que tenía al menos un deje de maldad en ella, fuera solo una niña o no. Era la hija de Steve, después de todo) de Mary, seguro no se había encargado de ellos solo para molestarlo. Dos estaban en su regazo; mientras que el tercero, el gato al que le faltaba un ojo, estaba jugando con la niña, quién se encontraba sentada en el suelo frente a él.

Tony estaba lo suficiente seguro que la había jodido en grande en esa ocasión, por lo que la pregunta tenía al menos algo de sentido. Necesitaba saber en que se estaba metiendo, recabar algo de información. No tenía intención de hacer sentir a Steve peor por algún comentario suyo. Y Natasha seguro lo mataría cuando supiera todo de aquel lío, o cuando le golpeara durante los entrenamientos hasta lograrlo.

Era una mujer mortal y terrorífica, pero nada era peor que cuando alguien obviamente ignoraba sus consejos de espías. O de sentido común, si era sincero consigo mismo.

Pero claro, no había tenido en cuenta la reacción de la pequeña. Doblemente idiota se sentía solo al escuchar su respuesta, su tono entrecortado por el dolor de la perdida. Sobre todo, porque era un sentimiento con el que sentía identificado.

“Roberta es nuestra vecina, una gran amiga. Siempre me cuida los viernes en la noche, y prepara unas galletas deliciosas” Mary sonrió ampliamente ante la mención de la mujer. Pero luego agachó su cabeza, deslizando sus dedos distraídamente por el pelaje de su mascota “mamá está muerta. Ella se fue cuando tenía seis meses. Frank me ha cuidado desde entonces”

Oh, estaba tan jodido. Steve le mataría si sabía que estaba haciendo sentir mal a su hija.

De haber sido posible para él, habría golpeado su propio rostro. Sabía que el tacto no era lo suyo, pero en esos momentos la estaba jodiendo. En letras mayúsculas y con muchos signos de exclamación adornando esa palabra. Solo faltaba un enorme cartel de neón para que fuera más obvio.

Aunque por respeto a los amigos felinos de Mary, pues sabía que Steve prefería cientos de veces a los perros, no se movió un ápice de su lugar. Además, las pobres mascotas de la niña no se lo merecían. Solo un leve temblor delató su conmoción interna, pero al parecer fue suficiente para que ella detectara sus pensamientos. Una habilidad por demás molesta que creía, solo su Capitán era capaz de poseer. Cuan malditamente equivocado estaba.

“No tenías como saber eso, así que no te culpes” Mary se abrazó a sus rodillas, mirándolo fijamente a través de su rubio cabello. Tony hizo una mueca en cambio, pues en realidad, claro que podría haberlo sabido. Lo haría si hubiera leído el maldito informe que FRIDAY había preparado para todos. Pero no, tan imprudente como siempre, ni siquiera había llevado consigo el maldito teléfono celular. Su único escape, la opción de poder excusarse para fingir recibir una llamada, dejar que su IA explicara todo para él, había escapado de sus manos “pero eso no quita que sigas siendo un idiota”

Tony había llevado el vaso a sus labios, pensando ganar tiempo mientras bebía el agua lo más lento que era capaz, aunque fuera un truco ridículo. Solía usarlo durante las juntas de Stark Industrias, solo para evitar insultar a algún socio y esperar su sentencia luego a manos de Pepper.

Cuando hacia eso, por lo general, la gente solo ponía los ojos en blanco, lo ignoraba olímpicamente o lo insultaban.  Aquel comentario le hizo escupir, logrando que los mentados gatos escaparan siseando de su regazo. Siendo la hija de su anterior líder, y recordando su primer encuentro, por supuesto debía ir con la última opción.

Malditos genes.

“Ni siquiera me conoces para afirmar que soy un idiota”

Vale, si lo pensaba fría y detenidamente, realmente no tenía motivo alguno para ponerse al nivel de un niño. Era infantil e inmaduro. Pero Mary frunció el ceño a cambio, aceptando sin duda aquel desafío.

“No necesito conocerte para saber que lo eres” Un golpe bajo, demasiado bajo, sobre todo sabiendo de quién venían esas palabras.

Tony gruñó en respuesta, trasladándose al suelo para poder seguir con aquel duelo de miradas. Se mantuvo firme, sin siquiera pestañear, cuando una voz le hizo perder su precaria concentración y otorgándole la victoria a la pequeña “ahora entiendo a qué problema te refieres, Frank. Sin duda esto es ridículo”

En el umbral se encontraba una mujer morena, de mediana edad y de espeso cabello azabache. Una ruda expresión cruzaba su rostro, así como un deje de sorpresa “lo entiendo de ti, querida ¿Pero usted? Se supone que es un adulto ¡Debe hacerse respetar como tal! En cambio…” se cruzó de brazos, entrando a la habitación para recoger un bolso, sin duda perteneciente a la niña, si las pegatinas de gatos podían indicar algo “ponerse a la altura de ella. Literal y figurativamente” negó con la cabeza en repetidas ocasiones, sin lograr salir de su estupor.

Un enorme rubor cubrió las mejillas de Tony, dándose cuenta tardíamente, que aquella mujer era Roberta, la vecina de Steve. Se puso de pie de un salto, tendiendo su mano y ofreciendo una sonrisa galante, intentando salir a flote en esa situación “Tony Stark, madam” hizo una pequeña mueca, al notar como la mujer solo le miraba con las cejas alzadas “Yo…uhm…me disculpo por eso. Fue id…” de ser posible, la expresión de Roberta fue aún más aterradora que la de Natasha. Groserías, claro. No se suponía que debía decirlas frente a una niña, aunque ella le hubiera tratado así primero “fue torpe de mi parte, un desliz. Prometo que no volverá a suceder”

Mientras Roberta estrechaba su mano y se presentaba, aunque aun ciertamente dudosa, fue una risa entrecortada la que le hizo fruncir el ceño, sabiendo exactamente porque su Capitán estaba riendo. Una vez había ocurrido algo parecido con los mini espías… (los hijos de Clint, Tony. Pero es tan difícil pensar que tenga tres, viviendo en una granja secreta con tractor y todo) y ningún miembro de su equipo lo había dejado caer en el transcurso de los años “Dudo que eso sea posible” el resplandor de Roberta hizo que las carcajadas de Steve se detuvieran en seco, pero mantuvo una sonrisa divertida “Lamento pedir este favor, te diría que tomaras mi camioneta, pero siempre dices…”

“…que esa máquina te matará un día de estos. No puedo fiarme del todo de un vehículo que está hecho de más partes que Frankenstein”

“Lo sé, lo sé” Steve le lanzó su cartera, la que Roberta atrapó con facilidad “déjame pagar esta vez, después de todo me estás haciendo un favor”

“Nunca es un favor si se trata de Mary. Siempre estaré encantada de cuidar de ella” dejó que la niña se despidiera antes de tomarla de la mano. Aunque Mary parecía feliz de ir con Roberta, también su expresión delataba lo abatida que estaba, al no poder quedarse a escuchar su conversación y resolver sus dudas. La tan temida curiosidad infantil “tus conocidos…Frank, tus conocidos ¿Siempre son así de extraños? Desde Evelyne hasta…este caballero” hizo una breve pausa antes de escoger aquel apelativo, insegura de saber cómo llamarle. No sabía quién era ese tal Tony Stark ni que pintaba en la vida de Frank, pero cuando este llamó a su puerta con una expresión tan incrédula y atemorizada…a veces, estaba bien no confiar del todo.

Aunque el hombre era ridículo, y ciertamente bien parecido. Eso podría dárselo.

Aquel comentario les hizo sonreír nuevamente, tanto a Steve como al propio Tony. Si supiera la verdad, sabría qué tal definición era en realidad bastante pequeña para los Vengadores. Quizás se ajustara más la palabra increíbles, considerando su línea de trabajo y sus trajes “No te imaginas, Roberta. Gracias otra vez”

“Un placer conocerla” y con esas palabras, Roberta se alejó al trote, dejando a ambos solos en la habitación.

Ambos se miraron, inseguros, sin saber qué hacer en medio de aquel incomodo silencio. Tony volvió a tomar asiento en el sofá, imitando a Steve, quien había optado por mantener la distancia y ocupar una de las sillas que pertenecía a la cocina.

“Lo recuerdas todo…” murmuró Tony, maravillado al percatarse de tal transcendente e importante detalle. Había recorrido la distancia que separaba el Quinjet de la casa de su líder pensando, planeando mil maneras de convencerlo de lo que ocurría, de quien era en realidad. Pensó hacerse pasar por un amigo, saludar, ver si su cara traía recuerdos…aunque fueran esos recuerdos, a su mente.

Pero Steve tenía su memoria intacta, al parecer. De otra forma habría reaccionado distinto.

O quizá…si lo pensaba detenidamente, hubiese intentando reaccionar distinto, si la sorpresa no le hubiera vencido. No era un tipo que dejara ver sus emociones así como así, pero suponía que si recordaba todo, debió pensar que era imposible regresar. Y tenía una hija ahora de la cual preocuparse. Fingir ya no era posible, ni tampoco una pregunta que quisiera hacer, pues temía la respuesta. Esa era una de las pocas ocasiones en que realmente prefería dejar la curiosidad sepultada en lo más hondo de su interior.

 “Sí, desde que tenía catorce años. Quince quizá. El tiempo es un concepto borroso para mí, incluso ahora” Steve le dedico una tímida sonrisa antes de rectificar sus palabras “más bien, es un concepto borroso, sobre todo ahora”

El rubio se alzó de hombros, restándole importancia al asunto, o intentándolo al menos. Pero Tony podía ver como jugaba con sus manos y su respiración era un poco más acelerada de lo normal. Era natural que se sintiera nervioso, sobre todo considerando su tormentosa relación.

 Nuevamente el silencio incomodo se instaló entre ambos, y otro detalle que antes no había considerado escapó de la boca de Tony, hablando antes que pudiera darse cuenta “También te llamas Frank. Francis. Oh, la ironía. Es lo menos patriótico que podría haber esperado. Charles te hubiera convenido más”

Sin poder evitarlo, Steve estalló en carcajadas, disipando con ello el aura que los había estado asfixiando. Se sentó más relajado en la silla, apoyando su espalda contra el respaldo de madera, un poco inestable por el paso de los años y el uso constante “bueno, eso no estaba entre mis elecciones de vida”

“Puedo entenderlo. Apostaría que tu cumpleaños tampoco es el cuatro de julio, ahora”

“No, lamentablemente. Mi madre…bueno, mi madre aquí, seguro se hubiese vuelto loca”

“eso es…raro” Tony le miró con la cabeza ladeada, sin poder dar sentido a sus palabras “es un día de descanso y celebración... ¿Quién puede odiarlo?”

“Ella” reafirmó Steve, divertido “es británica. No sabía mucho de esas celebraciones hasta que mi padre intentó montar un espectáculo con fuegos artificiales. Algo salió mal y provocamos un pequeño incendio. Se quemó una caja con sus documentos que estaba en una bodega en el jardín. Desde entonces fue una discusión de cada año”

“Bien, eso es doblemente raro”

Esta vez fue el turno de Tony para reír, pero más temprano que tarde, vio como la expresión de Steve se ensombrecía. Y la pregunta que tanto temía se deslizó por sus labios “¿Qué estás haciendo aquí, Tony?” su expresión se torció, y el miedo refulgió en sus profundos ojos azules “La piedra…la Gema del Alma ¿No dio resultado? ¿Ellos no…?”

“No, todos están a salvo. También recuperamos la Gema del Tiempo, y trajimos a cierto dios mentiroso de la muerte. Él nos guio hasta ti, con la ayuda de Wanda y Stephen” algo, Tony no supo explicarse a sí mismo qué era, se deslizó por el rostro del rubio durante un instante. Sin saber cómo reaccionar, prefirió seguir adelante “Solo Visión…necesitamos la piedra de la Mente para poder revivirlo. Dentro, estamos seguros, sigue su personalidad. Siempre podemos crear otro cuerpo con vibranium. T’Challa nos otorgó el permiso real para extraer cuanto necesitáramos de sus minas…” conforme hablaba, su voz se tiñó de dolor y culpa, alzando la voz casi sin darse cuenta “todo gracias a ti, maldito idiota. Frenaste a Thanos, le quitaste la piedra. Eres el puto héroe del día ¡¿Nunca te detuviste a pensar que sentiríamos al ver sacrificar tu vida por la nuestra?!”

“Hice lo que tenía que hacer” Steve cuadró los hombros y alzó la barbilla, en una clara expresión de reto “he visto a personas sacrificarse por mí, como…como Buck” su voz se quebró, pero siguió adelante con la misma determinación “el doctor lo dijo, solo había un universo en que ganábamos”

“No entiendo que tiene que ver Stephen aquí” Tony negó con la cabeza, confundido “seguro debió haber otro camino ¡uno en el que nadie moría! Thor o Hulk pudieron tomar la gema sin morir”

“Thor estaba ocupado con Natasha y Clint, evitando que el portal los arrastrara directo al agujero negro. Hulk ni siquiera fue capaz de presentarse, al menos…hasta que yo me fui. Era una oportunidad única”

Cada argumento de Steve destrozaba sus suplicas, la demoledora lógica contra su ira y la tristeza que él sentía a cambio. Cuando el rubio volvió a hablar, lo hizo en un tono tan suave, que estuvo a punto de no captar sus palabras “Una persona por miles de millones, es un intercambio razonable…”

Eso rompió su corazón, porque de todos, Tony creía que Steve era quién menos merecía ese final. Ya había hecho suficiente por todos, ya había perdido su vida una vez por el bien de la humanidad “¡No me vengas con esa mierda, Rogers! ¡Rhodey me contó lo que ocurrió en mi ausencia cuando estaba en Titán! ¡Tú mismo le dijiste a Visión que no valía la pena hacer tal sacrificio si se tenía una opción!”

“¡No teníamos otra opción, Stark!” Steve se puso de pie, enfrentándolo “¡además, no entiendo porque sea importante para ti! ¡Te traicioné, te hice daño y entiendo que no hayas querido hablarme! ¡Pero tu comportamiento y tus palabras no tienen el más mínimo sentido!” lágrimas de frustración brillaban en sus orbes, pero el rubio negó en todo momento a derramarlas “¡Lo hice por ti, para que estuvieras con Strange!”

“Stephen… ¿qué? ¡Eso es imposible!”

Steve rio amargamente, cubriendo su rostro con sus manos, claramente frustrado. Si era consigo mismo o con ambos, no era algo que pudiera saber con seguridad “Te pasaste los meses posteriores a la batalla hablando de su sacrificio, de lo genial y valiente que era. Que romperías tu compromiso con Pepper cuando pudieras traerla de regreso. De lo mucho que querías que el también volviera”

Tony se quedó sin palabras, acercándose lentamente a su líder. Colocó una mano en su hombro, incapaz de hablar, pero deseando con toda su fuerza conocer la verdad tras aquel comentario. Se mantuvo así durante unos minutos, hasta que Steve volvió a dirigirle la palabra “quería reparar mis errores, Tony, que fueras feliz luego de años luchando como un héroe. Por una ocasión, necesitaba…” hizo una pausa, quitando su mano y mirándole directamente a los ojos “Tenía que estar a la altura”

Notas finales:

Espero les haya gustado, cualquier duda es bien recibida en los comentarios. En el siguiente capítulo, que si tengo suerte traeré el día miércoles, vendrá la segunda parte de este encuentro. Espero tengan presente que ambos se hicieron daño y su relación no fue la mejor desde la Guerra Civil, incluso desde Ultron. Y Mary, por otra parte, solo intenta proteger a su tío.

Lo que si puedo prometerles en que en el siguiente capítulo algo interesante pasará, y cierto malentendido finalmente será aclarado. Nos vemos entonces ¡Cuídense mucho!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).