— Taehyung baja del techo y de la lámpara — Seokjin estaba cansado que el chico de la sonrisa cuadrada se transformará en mono, simio, orangután, entre otro... Y subiera al techo del comedor.
Taehyung había conseguido el poder de transformarse en cualquier animal o cosa, pero el prefería a los animales porque era más creativo, desde una hormiga a una ballena azul. Para alguien que fue niño explorador y sabia una gran cantidad de animales y sobre todo los venenosos y peligrosos, además de los que tenían sorprendentes habilidades, era una gran ventaja. También que podía usar esas habilidades sin cambiar de forma, desde la habilidad de los gekos que se adieren a cualquier superficie, la piel venenosa de algunos sapos, la velocidad de un guepardo, la fuerza de una hormiga, entre otras cosas que el chico sabia muy bien de los animales.
— Que aburrido eres, Hyung. Siempre quise subirme al techo y hacer una fiesta en una lámpara como un mono — El chico solo se había soltado y cuando cayó al piso era humano de nuevo, claro que estaba desnudo pero no le importaba.
— Si pero después dañas la lampara y tendremos que comer en la oscuridad, sabes que los malditos no nos repararan las cosas si lo dañamos — se quejó con evidente odio sin importar que lo escucharan.
— Igual Jimin no utilizaba su cama, todas las noches se mete en la cama de Yoongi Hyung — Taehyung recordaba como Jimin sin querer rompió su cama.
Él de cabello rosa tenia la habilidad de tomar el estado físico de cualquier cosa, una asimilación de cualquier material sin que su físico cambiara y intangibilidad. Desde ser incorporeo, que su piel se vuelva tan dura como un diamante, fria o caliente para soportar altas o bajas temperaturas. Nada mas un golpe con sus puños cuando su piel es tan dura con el diamante podia atravesar una puerta de metal y fácilmente romper cráneos. Cuando estaba aprendiendo a utilizar sus poderes Jimin se lanzó a su cama tratando de ser incorpóreo y terminar abajo de ella pero se volvió de acero, su apariencia no cambio un poco, pero su peso rompió la cama y el piso.
— Apurense, llegaremos tarde de nuevo a historia de la maldad — Seokjin acomodaba su uniforme, vigilando que todo estuviera perfecto hasta que vio una macha de sangre en su camisa, pequeña pero una molestia para él. Pasó su mano por la camisa y la mancha desapareció a los ojos de los demás.
El mayor de todos tenia el poder de la ilusión, podía hacer ver infiernos o cielos si el quería y también ocultar cosas. Seokjin hacia las ilusiones tan fuertes y buenas que la mente del que las sufriera creía en el fuego o en las cortadas que nada más el dolor de ellas aunque era mental era lo suficiente para volver a loco a uno y llevarlos hasta la muerte.
— No quiero ir — Se quejó Yoongi mientas Jimin lo cargaba en su espalda con una sonrisa — Jiminie no vayamos a clases y tengamos sexo desenfrenado. — propusó el chico al oído del chico, aunque no era necesario aquello ya que Jimin siempre haría todo lo que Yoongi quisiera.
— Bueno no vayas, a mi no es quien le freirán el cerebro.
— Hoy hablaremos de los castigos en la antigua Roma. No me lo perderé por nada — Jhope cargan una espada y por su forma claramente se podía decir que era de aquella época. Un Gladius, una espada corta, recta y de doble filo que era usada por los gladiadores.
— Yo quiero ver eso — susurró Jimin, pero igual se quería quedar con su Hyung.
— Ves lo que haces, cuando Jimin quiere hacer otra cosa ya no es tan bueno en el sexo — se quejó Yoongi y apuntó un dedo contra Hoseok soltando una pequeña onda sonora que aturdió al chico.
Hoseok quien tenia la habilidad de aparecer cualquier arma que él quisiera y que supiera de su existencia, como poder aprender a utilizarlas en pocos segundos. Desde manejo con la espada perfecto con una perfecta puntería con cualquier arma de fuego y una capacidad sorprendente de aprender a utilizar cualquier arma que creaba y dibujaba Jungkook. Desde una katana, claymores, lanzas, cadenas, mazos, revólvers, ametralladoras, todas las armas que el supiera de su conocimiento. Claro que cada noche navegaba en internet hasta altas horas para llenar su conocimiento y horas en la sala de prácticas para mejorar su puntería y habilidades.
Mientras Yoongi tenia la capacidad de controlar el sonidos. Las ondas sonoras que podía crear de sus manos, tanto como hacer vibrar un objeto hasta que pueda transpasar un objeto, flotar con ondas de sonido, quitar la capacidad de escuchar a alguien y dejarlo en un estado de silencio que los volviera locos y otras cosas que iba descubriendo día a día.
— Vas a ir — soltó Namjoon mientras se acomodaba su cabello y su tono era fuerte. A todos queria ir a la clase ahora.
Namjoon tenia el poder del habla y una inteligencia que iba creciendo día a día. Todo lo que ordene con cierto tono hacian lo que les ordenaba, lo que fuera. Claro que tenía que estar firme y mirar fijamente a quien se lo dijera para que la persona lo haga, además de su inteligencia que le daba telepatía.
— Igual siempre llegamos tarde — Jungkook tenia ojeras y callos en sus dedos ya que no había dejado de dibujar.
Los chicos habían estado practicando por un mes, sin descansar todavía tenia muchos problemas. Jimin todavía se quedaba atrapado en las paredes y terminaba por destruirlas, Hoseok tenían un limite de 20 armas en un día sin cansarse, Taehyung todavia le costaba mucho controlar sus transformaciones y despertaba como un zorro todas las mañanas, Yoongi a veces perdía el control de las ondas y había llegado a herirse a él mismo, Seokjin le costaba mantener las ilusiones por más de 20 minutos y Namjoon a veces su voz no era lo suficiente para controlar a los demás.
Muchos problemas todavía y faltaba bastante para él gran día.