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Naruto observaba todo en un rincón con una sonrisa, no podía sentirse feliz ante la escena y es que algo así recordaba en su mente
“Sasuke Uchiha, no dejare que mates esto te sacare de ese hoyo así que prepárate que naruto llego y no se ira”
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Mientras tanto en el jardín itachi en compañía de Deidara se sentaban frente al pequeño rio que corría por el lugar, Dei sostenía la mano del moreno quien no dejo que se soltaran en todo el camino hacia ahí.
-Ita –Levanto su mano acariciando el cabello- Háblame, ¿Que sucedió?
Itachi lo atrajo hacia el abrazándolo nuevamente, nunca nadie había visto su lado vulnerable solo Deidara había tenido ese privilegio y es que el perfecto e impotente itachi Uchiha era un pilar solido que nunca se derrumbaba
-I…Ita
-Sasuke….sasuke hice una apuesta con el –Afirmo el abrazo.
-¿Qué apuesta?
-S…si naruto no logra curarlo y se rinde –Apretó sus labios conteniendo el llanto- Le prometí que lo ayudaría a matarse –Lagrimas comenzaron a caer- Prometí matar a mi propio hermano dei.
Deidara abrió los ojos y es que nunca pensó que esa promesa se realizara entre los hermanos, de pronto recordó la llamada y ahora todo tenía sentido, itachi estaba confiando plenamente en su hermanito para salvar al suyo, ese hombre en sus brazos estaba jugando con todo para sacarlo de ese hoyo, con una sonrisa acaricio los cabellos y es que nada había cambiado del tiempo que dejaron verse, seguía siendo ese hombre amable y honesto que hacia lo imposible por sus seres querido
-Ita –Ladeo su cabeza besando los castos cabellos a su alcance mientras seguía acariciándolo para contenerlo- No te preocupes, no tendrás que cumplir esa promesa, Naru no dejara que lo hagas y yo tampoco, no tendrás que hacer nada ya que el idiota de tu hermano volverá a caminar de eso nos encargamos nosotros, ¿de acuerdo? Ahora saca todo Ita, llora como nunca que ya me tienes aquí
Itachi presiono el agarre y esa eran las palabras que necesitaba escuchar, esas palabras eran las que necesitaba su corazón, sin dudar las acato llorando como un niño en brazos del único que lo había visto así, saco todo el sufrimiento que se guardó en esos dos años y dejaba que las cálidas manos de Deidara lo contuvieran.
En la sala Mikoto ponía al corriente en todo a Naruto quien ya sabía la complicada personalidad de su nuevo paciente, pero a medida que seguía relatándole algunos de los últimos hechos se dio cuenta que más que una personalidad de mierda era un crio mimado con tendencias al suicidio de eso no tiene duda.
-Eso sucedió esta mañana –Termino de contar la reacción que tuvo al tratar de sacarlo de su cuarto y de cómo seguramente ya no hubiera nada que se salvara a su ira, las lágrimas se aflojaron siendo Kushina quien la consolaba a su lado.
-Miko-chan, no es tu culpa –
-Veo hijo que la tendrás difícil –Minato observo al menor de sus hijos quien tenía cerrado los ojos- ¿Estás seguro que podrás?
-Mmmm –Abrió los ojos con una sonrisa en sus labios sorprendiendo a su progenitor- Pero que interesante –Dijo llamando la atención de los presentes- Miko-san creo que es hora de que conozca a mi nuevo paciente y papá no te preocupes sabes que no me rendiré tan fácilmente por que la personalidad de un niño pequeño.
-¿Niño pequeño?
-Cosas mías no te preocupes, ahora antes de que conozca a sasuke les advertiré que mis métodos no serán convencionales o los típicos de algún especialista, es por ello que les pido que haga lo que haga o diga no interfieran en mis métodos de tratamiento con él.
-¿Hijo que harás? –Minato estaba intrigado y es que su hijo tenía una expresión intensa.
-Papa ya te dije que no soy de darme por vencido por una personalidad de perro emo, además mientras más difícil es mejor para mi, hasta la fecha no ha habido paciente que me gane y este no será la excepción, más que un médico que trata con cuidado y delicadeza a sus pacientes seré todo lo contrario, así que me tomare las libertades de manejar a ese niño como se me dé la gana, por ello les advierto que no se metan ya que seré todo menos profesional, a pacientes perrunos medidas drásticas .
Se levanto dejando sin palabras a los adultos, Fugaku fue el primero en reaccionar levantándose y extendiendo su mano hacia el menor.
-No sé qué harás, pero tienes completa libertad de actuar con mi hijo, te prometo que no nos meteremos y que posees todo nuestro apoyo hijo –Naruto feliz estrecho la mano.
-Muchas gracias, bueno –Se estiro relajando sus músculos- Es hora de conocer al teme, donde está su dormitorio.
-Te llevo –Mikoto se ofreció de inmediato.
-O no es necesario, miko-san –La detuvo antes que se levantara- Déjenme a mi tratar con el no querrá que un florero le llegue por accidente.
-Hijo no sé qué harás pero muéstrale de lo que eres capaz –Kushina alzo su hombro- No te dejes vencer
-Por supuesto –Comenzó a caminar luego de recibir las indicaciones de fugaku- Nos vemos en un ratito, tengo un teme que diga paciente que conocer –Dijo dejando la sala para subir a la escalera con un solo propósito, ver a quien sería su nuevo desafío.
Los adultos observaban como el rubio subía sin dudas las escaleras, aunque suene raro sentían que ese chico podía sacar a su hijo de donde estaba.
-Vamos Fuku –Minato le toco el hombro- Confía en mi hijo pero te advierto –Lo miro con seriedad
-¿Q…que cosa?
-Guarda las cosas delicadas –Sonrió y es que su hijo le advirtió que sería una guerra campal este caso.
-Porque las debo guard… -No termino de hablar cuando escucho el primer golpe de algo rompiéndose, una gota de sudor bajo en su rostro.
-Naru nos dijo que sus métodos harán que las cosas corran peligro –Kushina aguanto la risa- Mejor hagan lo que les dice minato no nos hacemos responsable de los daños.
…………………………Minutos antes…………………………
Naruto subía por las escaleras con rumbo al cuarto de su nuevo paciente, sabía que era un caso complicado pero el no era de darse por vencidos y su honor estaba en juego, con una sonrisa llego a la puerta indicada por el patriarca uchiha, se detuvo un momento para suspirar por última vez dándose ánimo y con fuerza golpeo la puerta.
-NO QUIERO VER A NADIE -Gritaron del interior el rubio cerro los ojos con una sonrisa divertida y es que se esperaba eso “Sasuke Uchiha, comienza la guerra” pensó abriendo sus ojos y a pesar de la negativa abrió la puerta entrando rápidamente, sus ojos de inmediato se fijaron en los destrozos del cuarto.
-Pero vaya huracán paso por aquí -Exclamo siguiendo su vista hasta un muchacho de negros cabellos que lo miraba con odio.
-Dije que no quiero ver a nadie -Se giro molesto encontrándose con un chico de rubios cabellos y de unos ojos tan azules que el mismo cielo envidiaba- ¿Quién eres para entrar así?
-Bueno soy la persona que cuidara de ti desde hoy -Sonrió por la mueca de su paciente, no podía negar que era apuesto pero ya su personalidad superaba cualquier cualidad positiva- Namikaze Usumaki Naruto
- ¿Así que eres el intento de médico que trajo mi padre?
- ¿Y tú la niña con tendencias suicidas?
-¿QUÉ DIJISTE MALDITO?
-No puede ser -Con horror se tapó la boca chocando con la puerta- Además suicida eres sordo.
Apenas termino un florero paso por su lado rompiéndose en mil pedazos, por reflejo lo esquivo antes que le diera en plena cara.
-¿Quién te crees para insultarme? -Tomo ahora un retrato lanzándolo y es que estaba furioso, quien se creía ese inepto a faltarle el respeto- Hijo de…
-Hijo de un padre y una madre, veo que no eres tan tonto TEME
-FUERA -Grito lanzándole una revista- NO SOPORTARE QUE UN DOBE ME INSULTE, FUERA NO TE NECESITO LARGATE DE LA CASA.
-Pero que genio -Sonrió con burla acercándose un poco- lástima que tu no tienes ni voz ni voto para despedirme -Saco una paleta y la dejo en la mesa cercana todo ante la furiosa mirada del moreno que no tenía ya que lanzarle y aunque quería acercarse a romperle la cara los libros en el suelo se lo impedían- Por hoy es solo un hola ya mañana seré tu pesadilla -Abrió la puerta- ahh -Se giro con una sonrisa- comete la paleta a ver si asi se te pasa lo amargado buenas noches, Sasu-chan
-NO VUELVAS, LARGO
Cerro con una sonrisa y es que, aunque lo negara Uchiha Sasuke era la clase de pacientes que más le gustaban, todo berrinchudos y de un orgullo infinito pero él no se dejaría ganar, con una sonora carcajada bajo las escaleras mientras los insultos seguían hacia su persona.
En el jardín itachi había sacado todo de su cuerpo refugiándose en los cálidos brazos de Deidara quien en ningún momento lo soltó, ahora ya más calmado se ponían al corriente de todo lo sucedido en su separación.
-¿Así que tú te encargaras de la empresa? –Itachi sabia de la pasión del rubio por el arte, pero dejo eso de lado para tomar en un futuro la empresa de su padre.
-Si, naruto tenía un talento nato y no dejaría que se perdiera, además quien diría que seria bueno con los números –
-Pero –
-No te preocupes -Le guiño un ojo- Sigo con mi arte pero ahora es mi hobbie, aunque era mi meta eso cambio al ver el mundo de mi padre.
-Como siempre pones a los demás antes que a ti -Le acaricio la mano que tenía tomada- Pero me alegro de que no dejaras de pintar, con lo hermoso que lo haces.
-Gracias, ahora podrás verlas más seguido ya sabes que no solo Naru se quedara-
-Si -Sonrió bellamente- Mas que nunca te necesitaba dei, gracias.
-No podía dejarte solo en esto -Le acaricio el cabello.
Se mantuvieron en silencio unos minutos dejando que la noche los refugiara y es que Itachi ahora sentía como las esperanzas eran mas que un sueño y teniendo al rubio a su lado opinaba que vencería cualquier cosa.
Estuvieron unos cuantos minutos más en el refugio de la noche, pero el frio se hizo presente haciendo que ambos jóvenes caminaran hacia la mansión, acercándose escucharon los gritos del menor uchiha asustándose y con rapidez entraron llevándose una sorpresa, sus padres agrupados en el pasillo y aun rubio que bajaba con sonoras carcajadas mientras los gritos de cierto moreno retumbaban con claros insultos
-¿Que pasa aquí? -Itachi estaba confundido miro a los presentes quienes esperaban esa respuesta del rubio que aún se carcajeaba.
-Naru -Deidara se acercó al menor.
-Dei-nii -Se limpio las lágrimas- Nada grabe tranquilos -Indico viendo como lo miraban preocupados- Solo que conocí a una princesa con un carácter muy interesante.
-Hijo -Kushina sonreía y es que conocía esa mirada- Veo que saliste ileso.
-Por supuesto, quien crees que soy madre –
-Naru-chan -Mikoto se acercó preocupada- ¿Como te fue con mi hijo?
-Solo diré que la lucha ya comenzó, padre ¿ya les advertiste?
-Por supuesto -El rubio sonrió ante la mueca de su hijo- Fuku ya mando a guardar todo lo de valor.
-Excelente-
-Perdón, pero ¿Me podrían explicar que sucede? -Itachi no entendía nada
-Vamos a la sala a ponerlos al corriente les parece
-Pero sasuke-
-Déjenlo, solo esta haciendo berrinche -Naruto entro al salón sentándose donde anteriormente los había hecho siendo seguido por los demás quienes escuchaban atento las palabras del menor y de que sucedió en su primer encuentro, además de poner al corriente al dúo quien sonreían por los métodos que usara el rubio menor.
-Entiendo -Itachi dejo su café en la mesita- Prometo no intervenir en nada en cambio -Sonrió al no escuchar los gritos de su hermano- Tienes mi ayuda en cualquier cosa Naru-chan
-Igual conmigo Naru -Deidara estaba encantado con los métodos de su hermanito.
-Gracias les tomare la palabra –
-Bueno familia -Minato se levantó junto a su esposa- Nosotros nos marchamos antes que sea más tarde -Miro su reloj y pasan de las 11 de la noche- Fuku, miko dejamos a nuestros hijos a su cuidado.
-No te preocupes -Fuku sonrió- Estarán en excelentes manos.
-Mis niños -Kushina los llenos de besos- Se cuidan si, ya el finde semana nos vendremos a quedar.
-Mucha suerte con tu paciente naruto -Minato abrazo a su retoño- Gracias por esto.
-No es nada papá -Le devolvió el abrazo- Con gusto lo hago y lo sabes.
Entre besos y ánimos hacia la familia uchiha, el matrimonio namikaze se retiro con rumbo a su hogar.
Naruto sin poder evitarlo bostezo cansado.
- Bueno es hora de descansar mañana me espera un divertido dia -Miro a los mayores - ¿Dónde dormiré, miko-san?
-Vamos yo te llevo -Itachi le froto el cabello- Igual me retiro estoy algo agotado.
-Yo igual -Deidara siguió el ejemplo.
-Descansen chicos -Fuku junto a mikoto sonrieron- Cualquier cosa no duden en pedir están en su casa.
-Gracias –
-No gracias a ti Naru-chan -Mikoto le beso la mejilla- Gracias por traer esperanza a esta familia hijo.
-De nada -Sonrío- Bueno itachi vamos debo reponer energias para lo que viene.
-Descansen chicos.
El trio subió a sus respectivos dormitorios quedando naruto al lado del dormitorio de sasuke, deidara al lado de itachi quien como nunca durmió feliz de tener esa nueva esperanza y apoyo en su hogar.
“Mañana comienza el primer raund teme” Pensó nuestro rubio entregándose a manos de Morfeo con una sonrisa.
Mientras que en el cuarto de al lado un moreno recostado en su cama sonreía por qué haría que ese intento de medico durara menos de dos semanas.
“Nadie se burla de mi dobe, mañana será uno de los últimos que estarás en esta casa como me llamo Uchiha Sasuke”
Así la noche acabo dejando en silencio la mansión Uchiha, silencio que duraría hasta el amanecer donde muchas cosas pasarían, la guerra estaba declarada.
Continuará oWo