—Déjenme ver si entiendo lo que está pasando.
El hombre de tez oscura froto su único ojo con tensión, sabía que crear un equipo de superhéroes sería difícil, sabía que manejar sus egos y personalidades de algunos seria cansado, lo sabía bien. Y aun así había ocasiones en que quería arrancarse el inexistente cabello que ya no tenía.
—Creo que está enojado —murmuro por lo bajo el arquero.
—Shh te va a escuchar— dijo esta vez el hombre de hierro.
—Cállense los dos, desde un inicio debimos informarle lo que pasaba.
—No eres el indicado para decir eso capitán, fuiste el segundo en descubrirlo.
—Nat por favor.
—Ja, acaban de callarte anciano.
Los susurros comenzaron a hacerse cada vez más fuerte y Fury se pegunto si aquellos hombres y única mujer sabían lo que era hablar bajo ya que ahora estaban comenzando a gritar.
¿Qué había hecho mal? Tal vez tomar el mando el SHIELD o solo el haber creado ese equipo de niños para proteger el planeta, seguro era uno de los dos lo que provocaba ahora ese dolor en el estómago.
—Stark, solo déjame confirmar lo que dijiste.
—Soy todo oídos.
—¿Tienes a un prisionero Asgardiano que destruyo la ciudad en una ocasión, traiciono a su hermano y quiso robar la corona de su reino asesinando a su padre: viviendo contigo hace más de seis meses y todos los de aquí lo sabían y ninguno dijo nada?
—Bueno, si lo dices así suena mal.
—¡Stark!
—¡Ya! Sí, soy culpable de todo oficial.
—Esto no es una broma y lo sabes.
Por un momento el capitán pensó que nunca fue una idea genial esconder la ubicación de Loki, no debió de dejarse engañar por Stark. La espía rusa pensó que ocultar la ubicación del mentiroso podría traerle cierto ganancia y obtener algo de ello, Bruce se excusaba en su mente tratando de decir que él no tenía nada que ver con Loki por lo de Hulk; en la mente del arquero paso la pregunta más curiosa en ese momento ¿Cómo podría salir vivo del ataque de un hipopótamo estando en el agua? Clint pensó que apenas saliera de la oficina saldría a buscar la respuesta y Tony Stark solo pudo pensar en ¿Qué habrá de comer hoy?
Fury miro a cada uno y las ganas de tirarle un balazo a al menos dos de ellos se hicieron irresistibles. Cerro el único ojo que tenía tratando de pensar claramente en cuál sería el siguiente movimiento que haría, tener al dios Asgardiano no era un juego, estaba en riesgo su cuello y tal vez la de la mitad de la humanidad si es que a ese desquiciado se le ocurría la grandiosa idea de volver a traer todo un ejército Chitauri.
—Quiero que lo traigan aquí.
—Hey.
—Nada de ´´Hey´´ Stark, Loki es un criminal peligroso que debe de estar contenido en una celda especial solo para él.
—Ha estado cuatro meses aquí y no ha hecho desastre más que romper una ventana con Tony. —comento el capitán, portando todo ese aire de líder que en estos momentos era lo único que no tenía.
El castaño cerro los ojos, tal vez era culpa suya el que estén ahora frente al director del colegio siendo sermoneados, tal vez era culpa de Loki por ser tan malditamente genial, tal vez culpa del anciano Capipaleta por no detenerlos a tiempo.
—No creo que le guste la idea.
Fury lo miro con desconcierto, como si su único ojo hablara y le tirara un balazo en la cabeza y acabara con toda la mierda que tenía que lidiar por culpa de Stark.
—No pedí su opinión, tráiganlo aquí inmediatamente.
Una vez que todos se subieron en el quinjet pensando en silencio, sabiendo en lo próximo que pasaría; se prepararon para lidiar tal vez con una pequeña rabieta del dios.
¿Qué podría salir mar?
Grave equivocación.
Código rojo.
Alerta para toda la torre, fuego por doquier, las ventanas rompiéndose, Jarvis desconectado, Stark en una bacanal con donuts, Natasha buscando sus armas, Hulk corriendo por la torre en un partido de béisbol con el capitán y Clint comiendo pop corn desde los tubos de ventilación; o eso era al menos lo que se imaginaban que ocurriría al darle la noticia al dios Asgardiano, pero una vez más, este los sorprendió.
—No hay problema, ¿tengo que usar las esposas? Lastiman un poco mis muñecas. Comeré un emparedado antes de subir a su ave voladora.
Sus miradas incrédulas volvieron a recorrer el rostro de los presentes, sabiendo que posiblemente debieron de haber comentado la presencia del dios a Fury mucho antes, se hubieran ahorraron muchos otros problemas que esperaban no estuvieran en sus informes.
Una vez que Loki termino de vestirse con sus trajes asgardianos, subió tranquilamente presentándose ante el líder de SHIELD.
El hombre de un solo ojo lo miraba, como un director de escuela miraba a su peor alumno, Loki solo sonrió, a veces las travesuras siempre resultaban divertidas.
Oh sí, claro que Loki lo sabía a la perfección y Fury sabía que ese demente dios trataría de hacer cualquier cosa para salirse con la suya, ya tenía mucho con tratar con el hijo de Howard para soportar a otro chiquillo infantil.
—Es un gusto volver a verlo.
—Pues yo no diría lo mismo. —Aclaro el hombre.
Una vez más Loki volvió a sonreír bajando la mirada, los vengadores solo se quedaron en silencio a esperar cual sería el resultado de dicha reunión.
—Espero que recuerdes tu antigua habitación.
Las puertas se abrieron mostrando la que antes había sido la celda de resguardo creada especialmente para Loki, pero estaba vez, en palabras de Fury, estaba mejor equipada y resguarda, no había dejado ni un solo espacio para que el demente dios vuelva a hacerse de las suyas y nuevamente destruir otra de sus bases.
—Es todo un gusto volver a casa —comento Loki, atrás de ellos Stark comenzaba a preocuparse