Me detengo justo antes de entrar en el ascensor, esto era algo en lo que no había reflexionado antes - ¿Me siento más seguro con Kuba-san que con Kanou-san?
Me sorprendo mucho, es una gran revelación para mí. Entro al ascensor para dirigirme al apartamento. No puedo dejar de analizarlo, cuando estoy con Kanou-san me siento protegido, especial y parte de una familia, y aunque conmigo es muy amable siempre debo tener precaución de no hacerlo enojar, y no deja de recordarme la estúpida deuda.
Por otro lado, Kuba-san siempre se preocupa por mí, me cuida, ha desafiado a su jefe por mí, me trata como una persona, no lo he visto enojado conmigo y, por primera vez en mucho tiempo, siento que puedo ser yo mismo con alguien. Con el me siento tan tranquilo, tan feliz, tan libre. Me gusta pasar tiempo con él, pero se de sus sentimientos por mí y no le puedo corresponder.
Llego al apartamento, hoy ha sido un largo día lleno de revelaciones y solo quiero dormir. Me dispongo a tomar un baño caliente, mañana es lunes y Kanou-san regresara de su viaje. Debo de dejar de pensar en Kuba-san y mis sentimientos por el... ¡¿Sentimientos?! Tomo mi cabeza entre mis manos, me lleva, solo quiero dormir.
---------------Perspectiva de Homare-------------
- ¿Que estoy haciendo?
-Cavando tu tumba
-Cállate, tú no sabes nada
-Ni quiero saber. Si supiera que haces todas las noches después del trabajo con la propiedad del jefe estaría tan muerto como tu
-No es su propiedad! Es un ser humano... ¿Y tú como sabes eso?
-Soy tu hermano, no puedes ocultarme nada. Pero si de verdad lo quieres hazle un favor
-¿Cual?
-No permitas que se encariñe mucho de ti, será más difícil para él cuando el jefe te mate.
----------------------Perspectiva de Ayase-------------------
Ya es lunes y Kuba-san me está llevando a la escuela. Estoy en el asiento de copiloto, pero desde lo que paso anoche hay un silencio muy incómodo entre los dos. No podemos seguir así, hoy regresa Kanou-san y no tendremos otra oportunidad de hablar con tanta privacidad en las próximas semanas. Debo pedirle disculpas, es decir, fue un trato entre los dos y yo incumplí.
-Kuba-san, sobre lo que paso anoche...
-Le pido me perdone Ayase-san
Espera, ¿qué?, ¿él me está pidiendo disculpas a mí? Se estaciona a un lado de la acera. No me mira a la cara, solo deja su cabeza apoyada en el volante mientras lo aprieta con fuerza. Lo escucho suspirar y por fin levanta la mirada hacia mí.
-Me disculpo por aprovecharme así de usted. Vino a mí por ayuda y yo me aproveche de manera tan egoísta. Usted sabe de mis sentimientos, pero yo no considere los suyos . Si pudiera perdonarme quisiera continuar con las clases sin esa parte del trato. Para serle sincero... -baja la vista pero puedo notar una sonrisa y un ligero sonrojo en su rostro - pasar tiempo con usted es suficiente pago para mi
Siento como los colores suben a mi rostro, hace tiempo que nadie se preocupaba tanto por mis sentimientos al punto de dejar de lado los suyos. Eso es tan ¿dulce? ¿Kuba-san es dulce? Cada día aprendo algo nuevo sobre él y la verdad, me gusta. Le toco el hombro y cuando por fin me mira le sonrió. -Me gustaría continuar con las clases- me mira un poco sorprendido, y me sonríe con complicidad.
-Gracias Ayase-san
-Cuando Kanou-san no este, llámeme Ayase, ¿Puedo conducir de aquí a la escuela?
-Jeje claro…Ayase