Marsh Mallow Reed_ 22:12
¿Sabes cuales fueron las canciones que tocaron? Quisiera saber los nombres porque solo me dijiste la que tú tocaste. Por cierto, fue un concierto increíble. Muchas gracias por invitarme, lo disfrute mucho.
Grey Son Jun_22:34
¡Genial! Puedes venir cuando quieras, quizá incluso te invite a un concierto real <3
Oooh deja recuerdo que canciones fueron.
Grey Son Jun_22:48
Winter—Vivaldi
Suite No. 1 (Prelude) — Bach
Titanium…
Cuantas canciones, no creí que fueran tantas o en el concierto no parecía que fueran muchas. Quiero escucharlas otra vez, pero es tarde y si busco las canciones en internet me quedare despierto más tiempo. Solo las voy a anotar en mi cuaderno y mañana sigo con esto.
— Marcell, se hará tarde— Ay, Yamir no podía ser más inoportuno ¡Tenia un sueño muy agradable! Incluso estoy sonriendo. Oh, espera, no era un sueño erótico.
— ¡Ya voy!— ¿y mi alarma? ¿No la escuche? Maldición… gracias al cielo que soy ordenado y puedo encontrar mis cosas sin tener que correr de un lado a otro. No creo que alcance a desayunar hoy, tendré que conformarme con galletas de avena y jugo de lata— estoy listo, vamos, vamos.
— ¿te quedaste dormido?
— sí, mi alarma… no la escuche o no la puse anoche, no lo recuerdo.
— es raro, Ingrid ¿vienes?
— Ya, dame solo un momento— ella sale del baño, con un peinado elegante y un vestido sencillo— tengo una presentación hoy— nos dice cuando los dos nos quedamos viéndola sin decir nada— no tienen que mirarme como si fuera a ir a la luna.
— la luna seria menos elegante, ¿iras así en el autobús?
— se me termino el dinero de este mes. No tengo de otra, es eso o ir caminando y no voy a sudar solo por no quererme subir al autobús— ah, otra discusión. Si no supiera que Yamir tiene novia y que salen seguido, y que Ingrid no está interesada en una relación pensaría que ellos tienen algo… oh esa idea me gusta mucho, la tengo que anotar para una historia. Mi sueño… estaba soñando ¿Qué soñaba? Era algo tranquilo, nada que ver con los sueños eróticos y que recuerdo bien por la mañana ¿estaba en un concierto? Sí, eso creo, o un teatro, pero quien tocaba era Jun, cierto… otra vez estaba soñando con él. Anoche después de que terminaran de tocar intente esperar a Jun para decirle que me había gustado mucho y regresarle la chaqueta, pero antes de que pudiera acercarme a decir algo la chica del violonchelo recibió una llamada y Jun solo pudo decirme que tenían que ir con el profesor. Regrese a casa después.
— ¿llegaras tarde hoy, Marcell?
— ¿eh?
— has estado llegando más tarde… No es que te este revisando la hora de llegada— me dice cuando le dirijo una mirada.
— estaba en la universidad, en la exposición cultural.
— Oh ¿Fuiste a escuchar a Jun?— Ingrid se interpone entre nosotros— he ido algunas veces después de la práctica de debates. Es muy relajante y hermoso.
— ¿escuchar?
— Jun toca el violín— explico— creo que hacen algunos conciertos en la universidad por las tardes, con otros chicos. Ayer estaban tocando con un violoncelo, el violín y el teclado.
— ¿Aun te ves con él?
— Somos amigos— intento decirlo sin sonar extraño ni ponerme rojo— a veces viene al edificio o hablamos por mensajes. Lo normal— traigo su chaqueta y los comics que me prestó porque quiero regresarlos ya, no me gusta tener cosas que no son mías aunque me las prestaran. Cuando bajamos del autobús, una chica se nos acerca, o a Yamir mas bien. Ella es morena y tiene el cabello negro y muy rizado. Yamir se va con ella, Ingrid sigue de largo después de despedirse de mí dándome un beso en la mejilla.
Jun no ha venido en el primer descanso, ni mando mensaje. Aunque no quiera admitirlo es bastante difícil no notar que ahora casi espero los mensajes de Jun. Ah, bien, mandare yo un mensaje diciéndole que tengo sus cosas aquí. Siento el jalón que me da alguien, y casi dejo caer mi teléfono.
— pero que… Jun.
— Hey. Lamento haberme ido así anoche, pero ocupábamos ir a hablar con el profesor.
— Entiendo— además yo decidí ir por mi cuenta, él no me llevo ni nada como para molestarme porque me dejo— estuvo muy bien el concierto.
— solo es un ensayo, no lo hacemos tan bien.
— ¿Bromeas? Si estuvo perfecto— Jun se ríe, comienza a toser y tiene que beber de una botella de agua para poder hablar de nuevo.
— dices eso porque nunca has ido a un concierto de verdad. No nos queda mal, pero estamos lejos de ser como los profesionales.
— ¿No eres bueno? He visto muchos videos de niños que tocan el violín y que suena muy bien.
— umm… no estoy muy seguro de si soy bueno o no. nunca he entrado a competiciones ni he ido a solicitar audiciones para lugares importantes, solo… toco el violín. He tocado el violín desde niño porque no tenía nada más que hacer y me mantenía ocupado para no pensar en que estaba enfermo o en un hospital.
— ¿Cómo lo sabrás?
— ¿Saber qué?
— si todo tu esfuerzo ha valido la pena. Si solo es un hobbie estaría bien, pero estas estudiando música ¿Acaso ser reconocidos no es lo que buscan la mayoría allí?
— Supongo.
— imagino que pasaste mucho tiempo con clases y ensayos y más horas de tocar.
— pues sí, tuve maestros privados cuando logre sostener bien el instrumento y hacer algo de música. El violín es lo más importante que tengo— acaricia la correa del estuche del violín, y se queda callado, imagino que esta recordando algo sobre eso— creo que si hago una audición y soy rechazado, ya no querré tocar más.
— Ah, es eso… entiendo. También me da miedo escribir. Nunca he enviado lo que hago a un concurso.
— ¿y el que mencionaste antes? Ibas a enviar un cuento.
— Aún faltan unos meses, y no sé si participare…— Jun vuelve a toser y a tomar más agua— ¿estás bien?
— Si, comí galletas de nuez y siento que se me pegaron en la garganta pero más importante ¿no enviaras nada? habías decidido que sí.
— decidí escribir algo, nunca dije que lo enviaría.
— ¡Tienes que enviarlo! Escribes genial, es una buena oportunidad, sé que es difícil que publiquen un libro si no eres reconocido y esos concursos podrían ayudarte si es lo que quieres, Marcell…. Oh, eso es lo mismo que has dicho sobre los conciertos.
— Sí. Es… creo que entiendo porque no quieres hacerlo. Yo aún no sé si es lo que quiero… me gusta escribir y sé que no lo hago tan mal ¿pero cuánto tiempo esperare? ¿Cuánto tiempo tomara que yo me rinda con publicar si nadie quiere hacerlo? por eso te entiendo… Ah, traje tus cosas, gracias por la chaqueta. Y nunca imagine que la historia de Venom fuera tan interesante.
— ¿Te gusto?
— la historia del simbionte fue un poco confusa, pero el periodista… bueno, demuestra que las cosas siempre pueden ir peor, o mejor ¿Qué tan bueno es que de pronto tengas poderes geniales pero solo puedas usarlos para el mal?
— Marcell, esa parte no la entendiste— se ríe— aunque creo que es mi culpa por no decirte que eran historias diferentes, algunos tomos son del Spiderman, otros de Anti-Venom.
— ¿Y yo debía saber eso? pff que charla tan freak es esta, estábamos hablando de tu concierto ¿seguro que estas bien? estas tosiendo mucho.
— galletas y no era un concierto fue una presentación de ensayo, debería prestarte las historietas de Batman, también son cool— Uff me imagino la habitación de Jun rodeada de libreros llenos de historietas, posters de superhéroes y figuras coleccionables en sus cajas— Estoy feliz de que al fin tenga con quien hablar sobre comics y que me entienda— de verdad se ve muy feliz.
— Solo he leído ese— ah, no puedo mirarle a la cara, maldición ¿Por qué me estoy avergonzando? Solo leí un par de historietas.
— Solo ese hasta ahora— Seguimos discutiendo sobre los comics y películas, cualquier cosa que vaya saliendo. Una vocecilla en mi cabeza pregunta porque me siento tan cómodo ahora con Jun, mucho más cómodo que con mis compañeros de clase, casi igual que con Ingrid y Yamir, solo que me divierto mas con Jun. Bah, no es importante. Acallo esa voz con otro comentario sobre Batman.
Mis sesiones de terapia son una vez por semana, al menos por un tiempo, eso fue lo que dijo Erick cuando vine la primera vez. Ya me acostumbre a la decoración llamativa de la sala de espera y a la ausencia de cosas en el lugar de las terapias y su olor a café. Casi dos horas por semana es el tiempo que estoy aquí. Me gusta que no esté cerca de la universidad ni de casa, aunque tampoco está lejos.
— ah, casi lo olvido ¿Cómo ha ido por la noche?
— eh…
— con las crisis que te despertaban.
— Ah…— ¿Cuándo fue la última vez que paso?— la semana pasada me desperté por eso. Pero ya no están pasando diario.
— Eso es bueno— Erick sonríe, y las gafas naranjas se le resbalan un poco— pero no suenas muy feliz por eso.
— lo estoy… ya no tengo la sensación de que me ahogare y moriré, pero… he estado teniendo sueños— el calor me sube por el cuello, al recordarlos. Aunque tampoco he tenido sueños en tres días, que no me pregunte por ellos, que no pregunte por eso.
— Ya veo ¿Puedo saber qué clase de sueños?
— N-no lo recuerdo. S-solo sé que me despertaba, pero no asustado.
— umm supongo que podríamos trabajar con eso ¿Te parece si intentas escribir tus sueños?— ay, por favor… ¿Acaso disfruta hacer sufrir a los demás?— o al menos lo que recuerdes, los sueños son interesantes para interpretar.
— ¿Eso existe? Creí que solo eran charlatanerías.
— obviamente no te voy a decir que soñar con comida significa que te vas a casar o que significa que tendrás buena suerte. Los sueños ayudan a la regulación fisiológica a nivel emocional, en tus sueños sientes emociones que reprimiste y para la tomar decisiones, ya ves, en tus sueños te encuentras frente a los problemas de forma más directa, emocional, sin escape, de tal forma que tenemos que tomar decisiones rápidas— oh… oh, no…— no pongas esa cara, no es tan malo como suena.
— Es peor— otra risa, no, es una carcajada.
— Tú solo escribe, te gusta hacerlo ¿no?— suspiro, cerrando los ojos para reprimir el pánico que siento. Erick no me dirá nada si no lo hago, no estoy obligado a hacerlo pero él siempre está empujando al límite con sus tareas. Suspiro otra vez— bueno, dejémoslo aquí por hoy.
— Bien— me levanto. La alfombra amortigua mis pasos hasta la puerta— ¿la próxima semana la misma hora?
— así es.
— ¡Aaahh! ¡Erick!— escucho el grito, un poco ronco. Jun está aquí… ah, cierto, su hermano— no me dijiste… ¿Marcell está viniendo contigo? Porque… ¿Por qué no me lo dijiste antes?— Erick sigue sonriendo.
— porque no tenía porque decirte. Él es mi paciente y su caso es confidencial…por otra parte, no sabía que eran amigos.
— Supongo que estoy esforzándome— me encojo de hombros cuando me mira, aunque no me siento tan tranquilo. Es fácil olvidar que ellos son hermanos y que Erick podría decirle a Jun sobre sus pacientes… no, no, él no haría eso ¿Cierto? Lo acaba de decir, y Jun parece muy sorprendido de verme aquí— tengo que irme, nos vemos después.
— nos vemos, Jun ¿Qué demonios pasa con tu voz? ¿Estás enfermo?
— no, tuvimos actividad física y estuve gritando para apoyar al equipo— alcanzo a escuchar, pero yo quiero irme rápido de aquí.
La tarea de escribir mis sueños tiene un pequeño problema, porque aunque si los escribo, no quiero mostrarlos ¿Tendría que inventar algo? ah, no creo que funcione así. Erick no lo hace con mala intención. Creo que lo mejor sería no hacer nada. Me reclino en la pared de mi pasillo, mirando por la ventana. Creo que lloverá de nuevo.
Para la tarde está lloviendo tanto que cuando llego a casa estoy con los zapatos empapados. Ya hay un charco de agua en la entrada, así que ellos ya debieron llegar. Ingrid está en la sala, secándose el pelo con la secadora y una toalla.
— hola, Yamir está usando el baño de arriba, si quieres secarte usa el de abajo.
— solo me moje los zapatos.
— que suerte, comenzó a llover cuando baje del autobús. Yamir vino mojándose todo el camino. Vamos a pedir comida italiana ¿Quieres?
— ¡Sí!— la casa se siente calientita, y como ella no tienen la televisión encendida, yo la enciendo y busco el canal para ver series. Ingrid pide la comida, al parecer ya tenían preparado todo para llamar porque no me pregunta que es lo que quiero. El programa sobre investigación que estoy viendo es un poco interesante, pongo más interés en el drama amoroso que hay. Una chica que no sabe a quién elegir para una cita ¿Acaso siempre es complicado enamorarse? ¿Cuándo pasa el ser amigos a ser algo más? ahí tenemos a Dorian y sus coqueteos que nunca sé si son en serio o no y los sueños que tengo también son extraños y no creo que sea normal tener tantos, ni con la misma persona— ¿Cómo sabes si alguien te gusta?
— umm, cuando alguien hace latir fuerte tu corazón, o te calienta la sangre… quieres estar mucho con esa persona y el tiempo nunca es suficiente cuando están juntos. Además de que hace que sonrías como idiota cuando lo ves, o cuando tienes mensajes de esa persona… o algo así, creo— hable en voz alta… creí que lo había pensado.
— si tienes que preguntarte si estas enamorado de alguien entonces ya estas jodido— Yamir salta sobre el otro sofá y queda sentado— normalmente lo sabes, pero no quieres saberlo, así que… ¿Estas enamorado, Marcell?
— Preguntaba por la televisión— señalo con el control remoto, pero sus palabras me dejan el estomago frio ¿Me termine metiendo yo solo en una novela Bl? Ah, de verdad siento que si comienzo a buscar escusas para negarlo, el resultado será peor. Hay tantas novelas y fanfics que inician de esta forma, que hacerlo yo será caer en lo mismo ¿No es mejor vivir en ignorancia? Además, no gano nada con saberlo porque será peor para mí, no podre verle a la cara de nuevo, y será muy incomodo encontrarnos frente a frente justo cuando yo estoy feliz por haber encontrado a alguien que me ayude con lo que escribo. No, prefiero no saber nada, como dijo Yamir.
Ay, no, no… no hay para donde huir. Las puertas, las aulas…
— Pareces un tierno ratoncito, Marcell— la mano de Dorian como siempre es más rápida que yo y me acaricia el cabello antes de que pueda apartarme.
— Basta— gruño, moviéndome— ¿buscas algo?
— a ti, por supuesto. He estado muy solo en la enfermería estos días— pasa su brazo por mis hombros, otra vez— mi lindo y tierno Marcell ¿ya no quieres visitarme?
— no estoy enfermo— aah, no puede ser, es un… es un… maldito ¿Cómo puede decir eso como si nada? ya me siento nervioso— n-no tengo por-porque ir.
— Si, tan lindo ¿Te molesta si te llamo lindura?
— ¡Claro que me molesta!— se está riendo, el muy tonto— ya en serio ¿Qué haces aquí?
— ¿Por qué piensas que no soy serio?— porque yo no quiero que lo sea. Suspiro, y él parece entender— estaba aburrido, no mentí— da una mirada alrededor— ¿has visto a Jun?
— ¿Por qué? ¿También vas a decirle lindura?— otra vez está sonriendo. En serio es tan…
— no, para él tengo otro apodo, pero no lo digo por eso. Ayer le preste unos comics, nos vimos un rato en la cafetería porque él tenía ensayo y un concierto por la tarde, pero se escuchaba bastante mal. Si lo ves dile que le estoy buscando ¿bien? ahora que ya lo dije ¿vamos a comer? la cafetería servirá porque no puedo irme aun.
— Ah, bien— otra risita.
— ¿sabes porque eres aún más lindo? no te alejas, aunque dices que te molesta, no me dices que no en serio o ya no estarías aquí.
— Soy educado, que es diferente— pongo los ojos en blanco mientras camino a la enfermería. Tiene un poco de razón, claro, porque sería muy fácil evitarlo y decirle que no, irme y dejarlo, pero no se… no quiero hacerlo. Creo que estoy cansado de estar escondiéndome de todos.
— Tonterías, lindura. Admite que no puedes resiste a mí— no hay nadie haciendo fila en la cafetería, así que Dorian pide sus cosas para llevarlas a la enfermería. Yo me conformo con un jugo y un sándwich.
— Al menos usa mi nombre ¿y no es poco ético que un doctor coquetee de ese modo con sus pacientes?— le digo cuando estamos solos de nuevo, de camino a la enfermería. Dorian se detiene, parándose frente a mí.
— uno, aun no soy doctor. Dos, tú no eres mi paciente mi dulce Marcell
— Oh por todos los infiernos, no lo digas así que suenas como un demente sexual— le empujo para pasar. Ah, comeré esto rápido y me largare.
¿Cuánto tiempo llevo sentado? Me duele la espalda. Jun no vino en el rato que estuve con Dorian, era mi única salvación para no ser el objetivo de él. Ah, termine el capítulo. Unos cuantos más y terminare otra historia ¿Qué debería escribir a continuación? ¿Algo dramático? No creo que me salga algo muy dramático en este momento ¿suspenso? Umm me atrae más eso mezclado con algo de fantasía ¿vampiros? llevo tiempo dándole vueltas la idea pero ¿no es algo común ahora? No me gusta alejarme mucho de las tramas de las series. Mejor hare algo de superhéroes, a Jun le gustaría….
… y otra vez estoy pensando en Jun… ah, allí esta y… Dorian. Al otro lado de la ventana del pasillo donde siempre me siento ¿Qué hacen? Oh, parece que discuten. Jun se ve algo molesto. Así como los vi, se van. Ya no les veo. Bueno, no me interesa mucho, ya están grandes para arreglarse de cualquier cosa por la que pelean, además ¿Por qué pelearían? ¿Por si el traje de Superman es rojo y azul o azul y rojo?
— Aquí estas— apenas escucho la voz de Jun.
— Si… oye tú...— se sienta a mi lado como siempre, está un poco rojo y se ve un poco decaído— ¿está todo bien? te vi discutir con Dorian.
— no es nada. Tengo calor…
— ¿Vamos afuera?— Jun se levanta, yo recojo todo antes de salir— nunca he usado las bancas de allá ¿quieres ir?
— Como sea ¿y si mejor vamos a comer?— damos la vuelta y caminamos un poco. De verdad se ve cansado y no hemos caminado mucho. Me detengo.
— Sentémonos un momento— señalo un espacio libre en el pasto, a un lado del camino— estuve con Dorian más temprano, es un poco molesto a veces ¿también te dice cosas raras?
— ¿eh? ¿Qué? oh, si… esta insistiendo en que cosas que no le importan— comienza a toser, es la tercera vez que lo hace.
— Jun ¿estás bien?
— Si, no es nada— ha dicho eso muchas veces. Suspiro, y saco mi teléfono, porque es obvio que no está bien ¿no dijo que tenía no que se enfermedad que le hacía más enfermizo? Si estuvo en hospitales debe ser importante. Tengo el número de Erick, le llamare para decirle que Jun está un poco…
— ¿Jun?— siento el peso de su cuerpo en el mío ¿Qué paso?
— Lo siento, de verdad… yo…— otra vez tose— lo siento, me siento un poco mal, Marcell— es obvio, tonto. Su cara está muy roja y respira agitado— no quería…
— Tienes fiebre— le digo cuanto toco su cara— ¿desde cuándo estas así? ¿Jun? Oh, vamos, no me asust… ¿¡JUN!?— SE HA DESMAYADO. Oh, dios, o dios…— Jun, hey… mierda ¿Qué hago?— si llamo a Erick tardara en venir ¿cierto? Una ambulancia, un hospital, si eso, un hospital… Ah, la pulsera médica ¿Qué dice? ¡No veo el maldito numero! Y mis manos tiemblan tanto que no podre marcar…. Marcell, vamos, no puedo tener un ataque de pánico ahora. Jun aun esta respirando, aunque parece que le cuesta mucho hacerlo, no se morirá ¿Verdad? Mis manos aun están temblando cuando logro marcar el número que viene en la placa del brazalete.