Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Chico heterosexual: Solo un poco Obsesionado por Mir_Min18

[Reviews - 0]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Capítulo 4

 

 

Tendido en la cama, Minho vio a Yoona cepillarse el pelo antes de acostarse. Ella estaba vistiendo sólo su ropa interior, por lo que miraba sus curvas con aprecio.

 “Dulzura,” dijo ella de repente. “ Vi a Taemin esta tarde y lo invité de nuevo.”

 Los ojos de Minho volaron a su cara.  “¿Qué?” 

 Yoona se removió, cambiando su peso de un pie al otro y dedicándole una  mirada  cuidadosa.   “Bueno,  me  imaginé  que  no  te  importaría.  El experimento salió bien, ¿verdad? Y él es un tipo agradable.”

 Minho  tuvo  que  hacer  un  esfuerzo  consciente  para  aflojar  su mandíbula antes de que pudiera hablar. “Ese no era el trato,”   dijo.  “Pensé que acordamos que sería una cosa de una sola vez.”

 Yoona se sonrojó y miró a sus pies.  “Lo siento.” 

 “¿Lo siento? Yo fui muy claro. No deberías haber hecho eso sin preguntarme a mí primero.”

 Los ojos de Yoona se llenaron de lágrimas, y Minho apretó los dientes, molesto con ella. Odiaba las lágrimas y odiaba las escenas.

 Él suspiró.  “¿Cuándo va a venir?”  

 El timbre sonó.

 Yoona le dio una sonrisa tímida.  “¿Ahora?”

 Excelente. Simplemente fantástico.

 Minho se apoyó en las almohadas mientras Yoona iba a abrir la puerta. Se echó un vistazo a sí mismo - él sólo llevaba sus boxers y consideró ponerse algo más, ¿pero cuál era el punto?.

Cruzó los brazos detrás de la cabeza y se quedó mirando la puerta, sus músculos tensos y en alerta.

 Finalmente, Yoona regresó al cuarto, con los labios pegados a los de Taemin mientras ella lo desnudaba.

 Algo desagradable ascendiendo en espiral desde la boca del estómago de Minho mientras miraba a Yoona empujar los pantalones cortos de Taemin fuera de sus estrechas caderas, apretando su firme, redondeado culo. 

 Todavía besando a Yoona, Taemin abrió los ojos y miró a Minho.

 Minho le devolvió la mirada.

 Taemin la maniobró hacia la cama. Yoona cayó sin gracia sobre el colchón, casi sin aliento, y Taemin se recostó al otro lado de ella. Se inclinó y lamió su tembloroso labio inferior, sin dejar de mirar a Minho, como diciendo: ¿Ves cómo está temblando ella?

 Minho observó la rosada lengua de Taemin golpeando en los labios  de  Yoona  y  sintió  a  la  desagradable  sensación  en  su  estómago extenderse hasta su pecho.

 Mientras Taemin se inclinaba para besarla de nuevo, Minho se movió rápidamente y cubrió los labios de Yoona con los suyos.

 Los húmedos labios de Taemin rozaron su mejilla.   “Tú no dijiste hola,”  él dijo, en apenas un susurro audible, sólo para sus oídos.  “Eres tan grosero.”

 Minho dejó de besarla y miró a Taemin. La punta de la lengua de Taemin asomó mientras se humedeció los labios. Su rostro estaba a unas pocas pulgadas.

 “Mi turno”. Taemin  se  inclinó  y  besó  a  Yoona  de  nuevo.  No dispuesto a ser la tercera rueda, Minho comenzó a besar el lado de su cara. Cerrando sus ojos, él aspiraba y mordisqueaba, moviéndose por la  mejilla de ella, su barbilla, hacia sus labios.

Minho chupó los labios gruesos y se adentró profundamente con su lengua. Hubo un gemido y entonces - Minho abrió los ojos y se encontró a sí mismo besando a Taemin.

Él se apartó.

 Se miraron el uno al otro, respirando con dificultad.

 “Oh, yo sé que fue un accidente, ¡pero eso fue tan caliente!”  dijo Yoona. Se sentía como si su voz viniera de muy lejos.  “Vamos, chicos, ¡háganlo de nuevo! ¿Para mí?.”

 “No me molestaría, cariño, pero creo que a tu novio sí,”  Taemin dijo con una sonrisa socarrona. Sus ojos brillaban mientras sostenía la mirada de Minho.  “Yo creo que él está asustado.”

 Los labios de Taemin estaban llenos y brillantes. Minho desvió la mirada.  “No estoy asustado. Solamente no quiero.”  Se limpió los labios con el dorso de la mano, tiró a Yoona más cerca y la besó.

 Sintió a Taemin inclinarse cerca de su oído y susurrar, “Mentiroso.”

 La palabra lo sacudió y siguió insistiendo en la parte posterior de su mente mientras él masturbaba a Yoona. Todavía estaba en la mente de Minho mientras él la follaba, cuidadosamente no mirando a Taemin mientras ella le daba al hombre una mamada.

 Para el momento en que Taemin se fue y Yoona estaba dormida, Minho todavía estaba pensando en ello. Mentiroso.

 Mentiroso.

 Se levantó de la cama, se echó una manta sobre los hombros y salió al balcón. El viento frío de noviembre golpeó a su piel desnuda, picando en su desnuda cara y manos y enviando escalofríos por su espina dorsal.

Mentiroso.

Un recuerdo, viejo pero no olvidado.

Mentiroso. La voz de su madre rota, histérica. Y entonces, las excusas de su padre y promesas de que sería la última vez, que nunca volvería a suceder. Su padre había mentido, por supuesto. Cada vez.

Minho había tenido cinco la primera vez que sucedió. Se despertó por el ruido de los gritos y sollozos procedentes de la habitación de sus padres. Confuso y asustado, se deslizó fuera de la cama, caminó por el pasillo oscuro y abrió la puerta una pulgada, lo más silenciosamente posible.

 “Lo siento - lo siento,”   SiwonChoi seguía diciendo. “¡Solo sucedió! No sé por qué - yo estaba borracho y no sabía lo que estaba haciendo.” 

 “¡Estabas lo suficientemente sobrio como para que se te pare y se la metieras por el culo!”  Su madre gritó, su precioso rostro enrojecido y la voz ronca de tanto llorar.  “¡Puto!”   Ella le arrojó un jarrón a su padre y falló. Se estrelló contra la pared, haciendo a  Minho estremecerse y clavar su mirada en las piezas rotas en el suelo.  “¡Puto! ¡Chupapollas!”

 En  ese  momento,  no  había  comprendido  lo  que  significaban  las palabras, pero como se volvió a repetir una y otra vez, y sus peleas se volvieron más ruidosas y feas, y más cosas se rompieron, él había aprendido el significado de esas palabras.

 Él había empezado a quedarse en casa de Onew, hasta que los padres de Onew finalmente lo aceptaron dentro, cuando tenía catorce años. A los padres de Minho no les importaba: su padre estaba demasiado ocupado follándose a alguien en un rincón y diciéndole a Yuri lo mucho que la amaba, y su madre era una mujer de rota - rota por las mentiras y por su propia incapacidad para soltar al hombre que no merecía su amor.

 Excepto  que  Minho  no  pensaba  que  era  amor.  Amor,  era  el tranquilo afecto y apego que sentía por Yoona. Él no estaba obsesionado con Yoona. Ella no lo hizo volverse loco. Si Yoona lo engañaba, sería... bastante molesto, pero le diría que se fuera y no regresara jamás. Él lo superaría. Él nunca compartiría a su pareja, pero nunca sería como la pegajosa, histérica patética en que su madre se había convertido. Yuri estaba obsesionada con el hombre, incapaz de dejarlo ir y ver a nadie más que a él.

A veces no estaba seguro de a cuál de ellos despreciaba más.

Mentiroso. La voz de Taemin hizo eco en su mente otra vez.

 Minho cerró los ojos y aspiró el aire frío dentro de él. 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).