"¿Estás listo?", Preguntó Baekho. Do Yeon se sorprendió al ver al lobo Timber de pie en el porche de los Moons.
Eric estaba de pie junto a Baekho. "Es el mejor maldito rastreador en estas tierras", dijo el mayor de los Moon.
"¿Puede realizar un seguimiento de un antiguo vampiro?" Do Yeon le preguntó mientras miraba al más grande de los Moon. Eran altos, musculosos, y vaya si todos ellos no se parecen. Ellos también estaban vestidos como un equipo táctico, todo negro... todo, desde las botas a sus pantalones a las chaquetas gruesas envueltas alrededor de sus amplios pechos.
Los hombres se veian como si estuvieran a punto de asaltar el recinto de algunos carteles de la droga.
"No será fácil", dijo Baekho.
Do Yeon lo sabía. No había esperado que fuera un día de campo. Pero Jae Min estaba por ahí, y estaba condenado y decidido a conseguir su compañero de vuelta. Él seguía golpeandose a sí mismo por no mantener una mejor vigilancia sobre el humano. Do Yeon debería haber sabido mejor.
"La vida nunca es fácil", comentó Eric. "Sin embargo, su compañero fue tomado, y estamos aquí para ayudar."
Do Yeon sabía que no era lo suficientemente fuerte como para luchar contra un antiguo por su cuenta. Sólo que no estaba seguro de si debería involucrar a esta familia de osos. Todos ellos se habían establecido, tenían familias, compañeros... una vida buena y sólida. Y Do Yeon conseguía que se involucren en una pelea que no era de ellos. Él les estaba pidiendo que ponga en peligro su vida por él.
"Gracias", dijo Do Yeon. No estaba seguro de si eso era suficiente para lo que estos hombres estaban haciendo por él. Esas dos palabras simplemente no parecen encapsular cómo Do Yeon estaba sintiendo ahora mismo.
No sólo fue su compañero Jae Min, pero Do Yeon también se sentía como si el ser humano representa una esperanza que no había sentido en mucho tiempo. Durante más de una década, Do Yeon había estado lidiando con la traición y la ira, el rechazo y el dolor. Jae Min era como esta luz blanca brillante de esperanza en los oscuros recovecos enterrados dentro de él.
Do Yeon tenía que traerlo de vuelta.
"¿Estás seguro de que sabes lo que estás haciendo?", Le preguntó Eric. Do Yeon tenía que saber que tenía una buena oportunidad de no sólo rescatar a Jae Min, sino también conseguir el hombre nuevo en una sola pieza, en su sano juicio. "Yo no necesito ningún margen de error."
Eric se acercó más, y llevaba la mirada de un padre, la misma mirada que el padre de Do Yeon solía usar cuando estaba enojado. "Yo no te conozco tan bien," dijo mientras se alzaba sobre Do Yeon. "Pero estoy dispuesto a llevar a mis niños, a las personas más valiosas en el mundo para mí junto a mi compañero, y ayudarle a encontrar la suya. No te puedo prometer una maldita cosa excepto que vamos a traerlo de vuelta. Pero si eso no es lo suficientemente bueno para ti, yo y mis hijos pueden entrar y ayudar al pueblo a prepararse para la celebración, mientras que la caza de Jae Min por su cuenta."
"Yo-"
Eric levantó la mano, acallar cualquier cosa Do Yeon podría tener que decir. "No sólo estoy ayudando a encontrar a Jae Min porque dices que es tu compañero. Te estoy ayudando porque resulta que me agrada el ser humano. Jae Min ha sido una parte de Villa Kim durante tanto tiempo como puedo recordar, y no quiero que sufra en manos de ese vampiro."
Do Yeon asintió. "Gracias."
Eric pasó el brazo sobre el hombro de Do Yeon y dio su brazo una palmadita. "Vamos a hacer nuestro mejor esfuerzo, hijo. Eso es todo lo que podemos hacer. Pero tienes que ayudarnos".
"Vamos a cazar, "dijo Soo Hyun mientras bajaba desde el porche. Do Yeon volvió a subir a su coche y siguió como cinco de los siete osos y Baekho se alejo de la hacienda.
Mientras Do Yeon conducia a través de la ciudad, contemplaba las decoraciones estaban poniendose en su lugar. No había celebrado la Navidad en tanto tiempo que el significado se perdió para él. Los adornos brillantes y buen humor no eran más que las bombillas de plástico y palabras vacías, un recordatorio de lo que había perdido hace muchos años.
Jae Min. El ser humano era la última esperanza de que Do Yeon no termine como Peniel, vacío por dentro y por siempre solo. Jae Min era el cálida, fuego crepitante que Do Yeon quería acurrucarse en torno y calentar sus huesos fríos y cansados.
Asi no era cómo planeaba pasar las vacaciones, temblando en las alcantarillas. Sí, Jae Min se había dado cuenta de dónde estaba. No hacía falta ser un genio cuando oyó el bullicio de la ciudad por encima de él, coches chapoteando por la calle, bocinas, la gente gritando. Lo único que podía decir él ya no está en Villa Kim. Incluso en un buen día sus calles no eran así de ocupadas.
"Ah, él llegó." Todo lo que Jae Min escuchó eran las tuberías con fugas y el ruido exterior. No tenía idea de lo que el vampiro estaba hablando. Haciéndose eco de los pasos por el largo y curvilíneo túnel llegó a los oídos de Jae Min. El que el vampiro estaba esperando finalmente estaba aquí.
La cabeza de los cazadores. Él aún no sabía lo que eso significaba.
Jae Min estaba teniendo un mal presentimiento, peor que el que ya tenía desde que fue secuestrado. Lo que iba a bajar, él deseaba que fuera a suceder. No es que él quería estar en el medio de... Jae Min ni siquiera sabía. Venganza. Eso era todo lo que había entendido.
Los pasos se acercaban, y los ojos de Jae Min se abrieron cuando Yi Xuan apareció de vuelta de la esquina. De todas las personas que podrían haber mostrado, este fue el último hombre Jae Min esperaba ver. “¿Qué haces aquí?
"Tu no eres el jefe cazador" dijo el vampiro, y el chico sonaba francamente lívido.
"No, yo no soy, pero hay algo que él quiere." Yi Xuan aún llevaba su traje caro, ni una mota de suciedad en él. El traje era negro con una corbata de seda roja. Demasiado con clase para el alcantarillado.
"Yo soy su segundo al mando, y usted puede negociar conmigo", Yi Xuan dijo como si estuviera sosteniendo una especie de reunión de la junta.
"¿Tu eres qué?", Preguntó Jae Min. Había estado aquí tanto tiempo que ya no estaba temblando. No podía sentir sus extremidades. Eso no podría ser bueno, pero esa era la menor de sus preocupaciones. Un vampiro y un... ¿cazador? estaban a punto de batallar, y Jae Min estaba sentado justo en medio de ellos. Asiento de primera fila. Suertudo.
"No pienses que he venido solo", dijo Yi Xuan. "Por lo menos media docena de cazadores están muy cerca, esperando mis órdenes."
" deberías haber traído más." El vampiro en círculos alrededor de la silla de Jae Min. Ojos de Jae Min se abrieron cuando Yi Xuan sacó un largo cuchillo. Del tipo de cortador de cabeza. Jae Min tiró de sus cuerdas, pero aún no logró liberarse.
Si Yi Xuan erraba, Jae Min perdería la cabeza u otras partes del cuerpo a las que les tenían mucho cariño. Estaban observándose con suficiente intensidad el uno al otro para hacer Jae Min extremadamente nervioso. "¿No podemos hablar de esto como adultos civilizados?", Preguntó Jae Min.
"No hay nada civilizado sobre el monstruo que te secuestró", dijo Yi Xuan. Volvió sus penetrantes ojos azules hacia Jae Min. "O en tu cita”.
"¿Monstruo? Su jefe inrrumpe la casa de un antiguo y le corta la cabeza al hombre. ¿Quién es el monstruo nuevo? "El vampiro argumentó.
Jae Min se encogió cuando el vampiro se puso de pie detrás de él y apoyó las manos en los hombros de Jae Min. Los dedos del hombre estaban helados. "Si yo fuera un monstruo, hubiera matado a este hombre."
" lo necesitabas para tener ventaja", dijo Yi Xuan. El hombre se rascó la barbilla y luego extendió sus dedos en frente de él. "¿Está jugando con su comida antes de comer?"
Jae Min iba a estar enfermo. ¿Cómo demonios había quedado atrapado en este mundo? Oh sí, Do Yeon. Iba a tener que enviar al hombre una tarjeta de agradecimiento.
"Eres un idiota funcionamiento", dijo el vampiro. " No he matado a nadie. Pero, por otra parte, "los dedos de -el vampiro se tensaron sobre los hombros de Jae Min-"planeaban secuestrar a este humano para obtener información de él. Usted puede apretar a este cerdo hasta que chille, pero me temo que no sabe nada."
"¿Qué?", Preguntó Jae Min. "Yo no quiero ser apretado."
El vampiro dio unas palmaditas en la mejilla de Jae Min. Era como tener un cubo de hielo bofetando contra su cara. "Parece que tu amigo quiere saber el nombre de todos los no-humano en Villa Kim."
"Pero no sé nada", argumentó Jae Min.
"Lo siento", dijo mientras Yi Xuan sonrió a Jae Min. "Yo estaba en realidad iba a utilizarte para sacar a tu novio."
“Todo lo que tenías que hacer era pedirlo." Do Yeon salió del túnel en el lado opuesto de Yi Xuan, con las manos ahuecadas delante de él en una mirada que decía que era tranquila, pero sus ojos marrones decian la verdad. Ellos se llenaron de ira.
Jae Min no estaba seguro de si estaba contento de ver a Do Yeon o si debía decirle al hombre que se fuera al infierno. Pero de los tres hombres de pie alrededor de Jae Min, Do Yeon era el más seguro, por lo que le daría al chico un pedazo de su mente después. Jae Min tenía que sobrevivir a esto primero.
Yi Xuan soltó una risa gutural mientras señalaba la punta de su largo cuchillo hacia Do Yeon. "Esto no es exactamente como había planeado las cosas. Pero te tengo ahora, así que al final, ni siquiera importa."
Una de las cejas oscuras de Do Yeon elevo ligeramente. "¿Me estás citando letras de Linkin Park?"
"Tengo media docena de hombres en estos túneles, que te masticaran como un puto juguete", dijo Yi Xuan. "No vas a escapar, Do Yeon. Tan pronto como me ocupe del vampiro, tú y yo vamos a tener una pequeña charla".
Do Yeon se rió entre dientes, y Jae Min se preguntó lo que el hombre encontraba tan gracioso. No había nada en la situación que Jae Min encontrara humorística. Había sido secuestrado en su propia casa, en pijama, hecho caer a una alcantarillada fria, infesada de ratas, y aprendió más en una noche de lo que quería recordar.
No, Jae Min no podía precisar el humor en eso. Él todavía tenía la esperanza de que se despertara y descubria que se trataba de otra cosa que una pesadilla.
"Es curioso, yo iba a decir lo mismo a ti", dijo Do Yeon a Yi Xuan. "A menos creo que mis amigos son los matones más grandes en el patio de recreo. Reducimos a sus hombres antes de que te encontrara. No puedo tener sus rifles entrenados en mi cabeza."
El vampiro echó la cabeza hacia atrás y se rió. "Voy a estar celebrando un banquete esta noche contigo y sus amigos", le dijo a Yi Xuan.
Esto era como una mala escena de una película de terror. Aunque Jae Min se acababa de enterar de que Yi Xuan le había mentido, y trató de utilizar como carne de cañón, todavía no quería ver al muerto. No asi. No mientras él estaba sentado allí. Jae Min no quería un asiento de primera fila para nada de esto.
"Así que ¿ha decidido usar a un ser humano inocente para sacar al la Cabeza de los cazadores?" Preguntó alguien desde atrás Jae Min.
La cabeza de Jae Min giro cuando otro hombre se unió a ellos. El cabello del chico era negro como la noche, alcanzando sus hombros en una onda suave. Era un hombre alto, elegante, y, para ser totalmente honesto, guapo como el infierno. Pero había algo en él que desató todas las campanas de advertencia en la cabeza de Jae Min.
“Ahn Jaehyo LeAnthony Espelimbergo." El otro vampiro declaró el título con desdén. "Sus puntos de vista sobre el ganado no han cambiado. Sigue siendo una vergüenza para nuestra especie."
¿Nuestra clase? Jae Min no le gustaba el sonido de eso. Él estaba en el medio de una convención de monstruo y quería que el infierno fuera de allí. Dos vampiros, un shifter, y un saco de mentira de mierda. Jae Min estaba de cabeza.
"Seung Hyub". Jaehyo le dio al hombre un medio arco.
"Uno de los principales jugadores del juego", Yi Xuan dijo como si el hombre estaba salivando. "Uno de los líderes Ultionem." La emoción en la voz del hombre era repugnante, al igual que el brillo en sus ojos codiciosos.
Jaehyo abrió las manos. "En carne." Hizo un gesto con el dedo a Seung Hyub. "Cuando Do Yeon me llamó para ayudar a encontrar a Jae Min, no tenía ni idea de que habías llevado al humano al sistema de alcantarillado justo debajo de mi club. Estás descuidandote, Seung Hyub. Parece que su necesidad de venganza está comiendo sus células cerebrales."
¿Do Yeon había llamado Jaehyo? Jae Min miró a Do Yeon, pero el hombre no veia en su camino. Sus ojos se centraron en Yi Xuan. Como Jae Min se sentó y miró intensamente al shifter gato, podía sentir una extraña conexión con el chico, como si él conociera a Do Yeon en un nivel más íntimo, lo que sería una locura. Do Yeon era casi un desconocido para él. Esta no era la primera vez que Jae Min había sentido esa conexión, pero nunca había sido tan fuerte antes.
Jaehyo volvió hacia Do Yeon. "Toma Jae Min y sal de aquí."
"Ellos no van a ninguna parte", dijo Yi Xuan a Jaehyo antes mirara a Do Yeon. "Es posible que haya tomado a mis hombres, pero hay otras personas que saben dónde estoy. Hay otras personas que saben quién y qué eres."
"Entonces voy a tener que ver mi espalda ", Do Yeon dijo mientras se acercaba a Jae Min.
Jae Min gritó cuando las uñas del vampiro se clavaron en sus hombros, extrayendo sangre. Él jadeó por el dolor, y su cuerpo era de repente ya no estaba entumecido. Jae Min empezó a temblar violentamente contra el frío.
"Ponlo en libertad", dijo Jaehyo en un tono bajo y mortal.
"Estoy cansado de que nuestro majestuoso líder trate al ganado como si importaran. Vamos a volver a las viejas costumbres, y no hay nada que puedas hacer para detenernos ", dijo Seung Hyub a Jaehyo. Seung Hyub clavó los dedos más profundo, haciendo gritar a Jae Min. "Nuestra raza se ha cansado de jugar bien con nuestra comida."
Los ojos de Jaehyo parpadearon a Yi Xuan antes de mirar hacia atrás en Seung Hyub. "Tienes dos opciones," dijo mientras su voz se hizo aún más baja. "Huir o morir."
"Creo que voy a -"
"Huir o morir", repitió Jaehyo.
Seung Hyub desapareció en el aire. Jae Min se desplomó hacia adelante, con los hombros sintiendo como si estuvieran en el fuego.
"Toma Jae Min y sal de aquí" Jaehyo repitio a Do Yeon.
Jae Min estaba demasiado frío y con demasiado dolor como para saber lo que iba a suceder a Yi Xuan. Además, ¿de verdad quieres saber? En realidad no. Ya iba a tener suficiente mierda para las pesadillas como para tratar con algo más. Jae Min no tenía necesidad de añadir más detalles a la olla.
Do Yeon se arrodilló delante de Jae Min y cortó las cuerdas en los tobillos y las muñecas. Jae Min se desplomó hacia adelante, y Do Yeon lo atrapó. "Lo siento mucho por esto", dijo Do Yeon bruscamente antes de caminar con Jae Min lejos de Jaehyo y Yi Xuan y por una largo y sinuoso túnel.
"Me puedes matar, pero eso no nos va a detener de cazar monstruos asquerosos", Yi Xuan dijo mientras blandía el cuchillo largo en frente de él.
Jaehyo sonrió mientras se frotaba la barbilla. Desde el túnel opuesto de donde Do Yeon había huido, Jongin, Changjo, y Nam Joon aparecieron. El lobo alfa Timber se acercó más, sus colmillos al descubierto.
"¿Secuestraste a mi chico favorito de la tienda de café?", Preguntó Jongin. " tomaste uno de los míos, y ¿esperas caminar sano y salvo?"
"Él es humano", dijo Yi Xuan con un gruñido. "Yo no lo habría hecho daño."
Jongin chasqueó la lengua. "Lo siento, no puedo decir lo mismo de ti. Debido a que planeabas en hacerle daño o no, Jae Min, junto con todos los demás en Villa Kim, está bajo mi cuidado."Jongin se movió tan rápidamente que Yi Xuan no tenía ninguna posibilidad. El lobo timber desarmado a Yi Xuan y tenía al ser humano se estrelló contra el muro de hormigón con moho en cuestión de segundos. "Jode con los míos y pagaras el precio."
A medida que los huesos de Yi Xuan crujían, Jaehyo volvió hacia Changjo y Nam Joon. "Tenemos un problema".
"Do Yeon encontró a su compañero," Nam Joon declaró. "Pero él esta unido a su juramento de sangre."
"Y si rompe ese juramento," Changjo dijo, "muere".
Jaehyo asintio. Do Yeon no moriría por sus manos. El Ultionem favorecia a que las criaturas sobrenaturales encuentran sus compañeros. No, Do Yeon no moriría por sus manos. Si el shifter gato rompia su juramento, el vínculo de sangre se volvería contra el hombre y la sangre de Do Yeon se convertiría en venenosa.
Jaehyo sabía que esto había sido una mala idea desde el primer momento. Pero el Ultionem había acordado que se trataba de astutos cazadores, bien disciplinados.
Hasta el momento, una docena de líderes de aquelarres de varios estados habían sido asesinados, decapitados y sus cuerpos quemados. Este J.Y. Park era determinado y hábil. Había pasado mucho tiempo desde que Jaehyo había tropezado con un digno adversario.
Y él estaba perdiendo.
Los seis vigilantes que habían entrenado habían sacado cinco de los hombres de J.Y. Park. Y eso no habia sido una tarea fácil. Más Vigilantes habían sido entrenados para diferentes áreas en todo el país. Los líderes de los aquelarres, manadas, y las tribus habían llorado por la justicia.
Y el Ultionem había respondido a esa llamada. Jaehyo no estaba seguro de si su solución había sido la correcta. Por lo que él sabía, Do Yeon fue el primer vigilante que encontro a su compañero.
Habían elegido hombres que habían vivido en el infierno y había visto la cara del diablo y la vida la tortura podría traer. Estos eran los hombres que habían elegido detenidamente.
Y ahora que iban a ver de primera mano cómo un vigilante reaccionaba a su compañero. Era como un experimento monstruoso del que Jaehyo estaba totalmente en contra. Pero la suerte estaba echada, y no había nada que Jaehyo podía hacer al respecto.
Se dio la vuelta y se alejó, dirigiéndose hacia su club ya sintiendo el dolor que Do Yeon sentiría y deseando poder revertir lo que Do Yeon había hecho. Porque si las cosas empeoraran para Do Yeon... dios tenga misericordia de la alma de ese hombre.
Debido a que el vínculo de sangre no lo haría.
Continuara..