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Amor Secreto por Angie404

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Notas del capitulo:

La canción que Ritsu va a cantar es la de "Gin no Bara" que es un character song de Subaru Sakamaki del anime Diabolic Lovers, porque pues, ya saben, es el mismo actor de voz y así, además me gusta mucho la canció, manténgala en sus mentes porque aparecerá más veces. 

Capítulo 21

⁃ N-No soy bueno ... s-solo cantaba para mi, nunca nadie me ha escuchado

⁃ ¿Entonces podría ser yo el primero?

Agachando la cabeza Takano buscó la mirada de Onodera, sonriéndole cálidamente cuando sus ojos se encontraron, gesto que Onodera regresó tímidamente. Asintió con la cabeza y se sentó correctamente en la mesa, tras cerrar los ojos y respirar profundamente comenzó a cantar.

Escondido en el desquiciado silencio pacífico... una cuna meciéndose con demasiada confianza

“Si hay un final ... quiero que me lo digas”, la respuesta sin sentido dentro de tus ojos puros.

Como aplastar suavemente una rosa plateada oxidada en mis manos. Si pudiéramos olvidar el cruel dolor del destino.

Podría drenarte sin darme cuenta de lo severamente letal que es. Esta oscuridad es... un ciclo sin fin...

Durmiendo tranquilamente, las cicatrices dejadas en tu cuello. Incluso en el punto en que las lagrimas se desbordaron, es una maldición eterna. Ahora esta preciosidad y dolor están durmiendo dentro de nuestros corazones.


La voz de Ritsu temblaba, al igual que sus manos mientras cantaba, y aún así Takano pudo sentir su piel erizar, no era si cantaba bien o mal, era el sentimiento que lo acompañaba. Parecía que ... ya se había roto.

⁃ N-No lo haces mal ... aunque realmente, ¿hay una cosa que no hagas bien?

Onodera río al abrir sus ojos, sorprendido de él mismo por cantar delante de alguien por primera vez en su vida sin sentir un verdadero temor, ese poder solo lo tenía Takano, hacer por primera vez algo completamente vergonzoso pero haciéndolo sentir realmente bien.

⁃ No se cocinar, es una de las cosas que no se hacer nada bien.

⁃ Ay, solo eso te faltaba para que fueras el paquete completo de una princesa de Disney, encerrada en un castillo sin conocer el mundo, lees, cantas, ¿de casualidad también bailas?

⁃ Claro, y soy un muy bien bailarín

Onodera cruzó sus piernas y colocó su mano libre sobre sus rodillas mientras sonreía de forma coqueta, obviamente siguiendo la corriente de la broma, provocando una fuerte risa en Takano.

⁃ Por Dios vas a matarme ... y esa canción, ¿sobre que trataba?

⁃ Es una antigua canción de cuna, de entre el siglo quince y dieciséis. Trata sobre un vampiro que se enamora de una mortal, ya sabes, la gente creía muchas cosas en aquel entonces

⁃ Wow ... creo que es una canción muy linda, aunque triste, me gusta

⁃ Si ... a mi también me gusta por eso ...

Se miraron atentamente unos segundos, perdidos completamente en el otro mientras sonreían. Aunque claro, ese sentido lógico hizo a Takano despertar de aquel trance, con esa voz en su cabeza diciendo que aquello no era normal, carraspeando un poco la garganta para regresar al otro al mundo real y cambiar de tema.

⁃ Por cierto, ¿no te sientes nervioso por la misión? Yo no se por qué, me he sentido algo inquieto ... ¿podrías no apartarte de mí allá adentro?

⁃ Que tonterías dices Takano, se supone que cada uno va a llegar por su cuenta, no deben saber que vamos juntos. Además dudo que yo llame la atención de Asami, como dije antes, soy como un fantasma, ni siquiera va a notarme. Seguro es Kisa-san quien se va a ir con él esa noche

⁃ Pero, ¿que pasa si sí te elige a ti?

La pregunta se mantuvo flotando en el aire, la respuesta a esa pregunta la había ignorado por completo, ¿que pasaba si lo escogía a él? Fue capaz de llegar al final con Takano de alguna manera extraña, ¿pero sería capaz de hacer lo mismo con Asami? Los segundos solo pasaban, y el silencio era más pesado, y de esa forma Takano terminó de vendar la mano derecha de Onodera.

⁃ ... Tengo una idea, ¿te gustaría practicar algo?

⁃ ¿Eh?

⁃ Si, como en Kagawa, quizá te ayude de algo si lo necesitas

El rostro de Onodera se encendió de inmediato en rojo vivo, ¿de verdad había dicho eso?

⁃ q-que ¿q-que vas a hacerme?

⁃ Oh no, esta vez tú me harás algo a mi

Takano sonreía de lo más normal, como si aquello no le afectara para nada, no como lo estaba afectando a él, y bueno, más le valía no demostrarlo. Después de respirar profundamente pudo adquirir un semblante calmado, y dirigirse al pelinegro con la mayor serenidad y seriedad que pudo conseguir.

⁃ ¿Que quieres que haga?

⁃ Tu misión el día de hoy será que logres ponerme duro tú solito aquí, después te diré que sigue

Una parte de él le decía que mandara al diablo a Takano y lo echara de casa, pero si eso pasaba quizá dejaría expuestas sus inseguridades al demostrar que aquello le afectaba, así que volviendo al papel de chicho malo decidió hacer frente a la situación lo mejor posible.

⁃ ¿Podré hacer lo que yo quiera?

⁃ Todo lo que tú quieras

⁃ Muy bien ...

Ritsu se levantó de la mesa solo para sentarse de nuevo en las piernas de Takano, desabotonando ligeramente su camisa. Actuar, era uno de sus puntos fuertes, actuar como si no pasara nada, actuar como si no sintiera que su corazón se saliera de su pecho, actuar como si no estuviera ansioso. Besó sus labios lentamente, mordiendo el inferior y jalando un poco de él mientras sus manos exploraban el pecho del mayor. No era el único que actuaba ahí, Takano tomaba fuerzas de donde pudiera para no evidenciar lo bien que se sentía, aunque claro, tarde o temprano su cuerpo lo delataría. Él mismo intensificó el beso, tomando a Onodera por las mejillas para evitar que se separara. Sus lenguas entraron en una batalla que ninguno de los dos quería perder, viendo quien provocaba más en el otro, quizá como una situación morbosa de la cual podrían burlarse después cualquiera de los dos, pero ninguno ganó. Jadeos , suspiros y pequeños gemidos salían de ambos, completamente perdidos en el otro, hasta que Onodera recobró la compostura separándose del otro bruscamente.

⁃ Mi condición es, que tú no harás absolutamente nada, no quiero ver que tus manos se muevan

Dijo de forma seria mientras acariciaba los labios de Takano con uno de sus dedos, acompañada por esa mirada coqueta y altanera que Takano le había visto aquel primer día en su departamento, cuando lo acorraló en el sillón, como había extrañado a ese Ritsu seguro y atrevido, y al recordarlo le fue imposible no sonreír.

⁃ De acuerdo ... yo no haré nada

Bajó sus manos y las escondió detrás de su espalda, haciendo a Onodera sonreír de lado por la victoria, quien continuó con un camino de besos y caricias por su mandíbula y cuello hasta llegar a sus hombros y clavícula, dejando marcas pequeñas de mordidas y chupetones. Mientras hacía aquello comenzó a mover sus caderas frotándose con Takano, de adelante hacia atrás y de derecha a izquierda, haciendo de vez en cuando movimiento circulares. El que Takano dijera que no le gustaba aquello era demasiada falsedad, a ese punto ya no podía pensar con tanta claridad, y es que, rebuscando en sus recuerdos, ninguna chica lo había llegado a tocar como ese chico lo estaba haciendo. Fue traído de vuelta a la realidad cuando sintió un ligero dolor entre su hombro y cuello.

⁃ ¡O-oye! ... e-ese si dolió

⁃ Te llamo y no me escuchas, ¿en que estás pensando?

Onodera le había estado hablando y era ignorado por completo, así que había decidido morderlo en ese preciso lugar para despertarlo, tal cual como si hubiera sido un vampiro dispuesto a cenar esa noche. No sabía a qué se debía, pero había algo de decepción en esos ojos verdes, la verdadera pregunta sería qué estaría pensando él en esos momentos. Pero claro, Takano tampoco le iba a decir la verdad.

⁃ Eso no importa ... ¿para que me llamabas?

⁃ Bueno es que, no se si ya te diste cuenta pero ...

Ritsu llevó una mano hasta la entre pierna de Takano, apretando ligeramente el bulto que se encontraba ahí.

⁃ Ya cumplí la primera parte de la misión ... ¿ahora que sigue?

Al darse cuenta de la situación y con una sonrisa maliciosa formándose en sus labios, Takano sacó sus manos de la espalda y atrajo hasta él el rostro de Onodera, dándole un rápido beso en los labios.

⁃ Te vas a hincar en el suelo, entre mis piernas, abrirás mis pantalones y los bajarás ligeramente, igual con mi ropa interior, y bueno ... creo que ya supones lo que sigue

Fue imposible para Onodera no exponerse con ese enorme sonrojo y sus enormes ojos sorprendidos, reponiéndose enseguida con esas características cejas fruncidas acompañadas de una mueca en su boca. En definitiva, Takano era un maldito, pero tampoco era que la idea le molestara del todo, así que bajó de sus piernas he hizo todo lo que le dijo. Entonces dejó expuesto el erecto miembro del pelinegro y de forma involuntaria pasó saliva, era quizá un poco más grande de lo que lo recordaba, y estaba seguro de que no entraría todo en su boca.

⁃ ¿Y bien? ¿Que esperas?

Tras dedicarle una mirada de reproche, se acercó hasta su miembro y comenzó lamiéndolo, de arriba hacia abajo, provocando en Takano incontables escalofríos. Recordó los “consejos” que Takano le había dado, y con ayuda de sus manos masajeaba sus testiculos y la base de su miembro mientras seguía lamiendo y chupeteándo. Apagó su cerebro como le había dicho, no pensaba en nada, pero no le era difícil, porque realmente no era del todo malo hacer eso con Takano. Su esencia, tan familiar, tan cercana, era algo que no le molestaría tener junto a él todo el tiempo. Entonces se llevó el pene a su boca metiéndolo de una sola vez casi por completo, arrancándole al pelinegro un fuerte y grave gemido. El saber que él estaba provocándole eso le hacía sentir victorioso, y no pudo evitar una sonrisa ladina llena de orgullo por lo que estaba logrando. Metía y sacaba el miembro de la boca, intentando hacerlo lo mejor y de la forma más rápida posible, y eso había sido suficientemente para Takano, quien rompiendo el acuerdo tomó a Ritsu por el cabello, tirando de él, y luego empujándolo por la nuca, “follando” su boca de forma más desesperada, pero claro, no podía esperar maravillas de la primera vez que Onodera hacía algo como eso, quien casi enseguida se separó tosiendo por la manera tan profunda en la que Takano lo había obligado a llegar.

⁃ ¡¿Q-que te pasa?! Casi me ahogo

⁃ Uy ... lo siento, lo compensaré

Takano se agachó quedando a la altura de Onodera, besándolo enseguida sin más, un modo de distracción mientras desabotonaba sigilosamente su camisa, para luego acariciar su pecho y pellizcar sus pezones. Onodera intentó separarse al sentir aquello envuelto en pánico, pero los brazos de Takano sujetándolo por los hombros no lo dejaron huir.

⁃ Tranquilo, quiero que tu también disfrutes un poco

Llevó su pie derecho hasta la entrepierna del castaño, “pisando” ligeramente el bulto entre sus pantalones, haciendo que Onodera soltara un ligero quejido, el cual se transformó en diversos jadeos y gemidos cuando Takano comenzó a masajearlo con su pie aún sobre la tela, pero paró en seco cuando un sonoro gemido le llegó casi a aturdir.

⁃ Ey, baja la voz, creo que los vecinos podrían escuchar algo ... tu continúa con lo tuyo, y yo con lo mío, pero no puedes hacer ruido

⁃ ¿Que quieres lograr con esto?

⁃ Te estoy entrenando para diferentes situaciones, nada más

Con un poco de duda en su rostro, pero confiando plenamente en sus palabras se agachó de nuevo para continuar lo que había empezado mientras Takano seguía jugueteando con su cuerpo, era un tortura, la felación estaba tomando más tiempo del que pensaba, y era como tener las manos atadas, hasta que por fin después de unos eternos minutos Takano terminó en su boca, obligándolo a tragar todo. Decir que no le daba algo de asco era mentir, pero lo hizo sin objetar nada, solo ganándose un “buen chico” como si le estuvieran hablando a un animal. Esas situaciones tenían algo de indignantes.

⁃ ¿Co-como lo hice?

Y se atrevió a preguntar tirando a la basura esa poca dignidad que le quedaba, mientras se incorporaba sentándose de nuevo en la mesa de centro, intentando cerrar de nuevo su camisa con un auto abrazo y juntando firmemente sus piernas.

⁃ Bueno, diría que fue algo torpe, pero no estuvo del todo mal

⁃ ¡B-bueno! No es como si pidiera practicar algo como eso

⁃ Claro que si, puedes practicar conmigo cuando quieras

Fueron algunos segundos los que le tomaron a Ritsu encender de nuevo su cerebro, cuando entendió al fin a lo que se refería sus ojos se abrieron enormes, su cara se encendió en rojo y abrió grande la boca listo para protestar, pero Takano lo interrumpió completamente divertido al ver la cara de espanto de su compañero.

⁃ ¡Es broma es broma! ... lo harás bien.

Sin atreverse a mirarlo a la cara Takano se levantó del sillón, subiendo su bóxer y pantalón para después cerrarlo, mientras se encaminaba a la puerta del departamento. Ritsu tampoco se atrevía a verlo, pero había algo que estaba dando vueltas en su cabeza desde la primera vez, y sabía que no tendría otra oportunidad para expresar lo que sentía.

⁃ Te compensaré, de verdad ...

Takano paró en seco, sin saber a lo que Onodera se refería, dando media vuelta para ver la figura del castaño dándole la espalda sobre la mesa.

⁃ ¿Que?

Fue lo único que pudo decir.

⁃ Hacer estas cosas con un hombre debe ser asqueroso, ¿no es cierto? Te compensaré por tener que hacer esto ...

Lo vio temblar mientras se aferraba a sus brazos de forma más fuerte, ahí fue cuanto Takano comprendió que no hablaba de los “hombres” de forma general, estaba hablando de él mismo, no podía creer que lo había orillado a esa conclusión.

⁃ No me debes nada, y no te voy a mentir, es asqueroso cuando se trata de hombres, pero no es asqueroso contigo, no eres asqueroso Ritsu, y no te atrevas a pensarlo. Descansa.

Cuando Onodera dirigió su vista hasta el genkan, su compañero ya había abierto la puerta y la atravesaba. Rápido se paró de la mesa y corrió hacia la puerta, pero para cuando llegó a mitad de la sala, Takano ya se había ido. Se quedó un momento ahí, pasmado viendo la salida, hasta que recordó el no tan pequeño “problema” que tenía entre las piernas, y cuando lo hizo salió corriendo al baño sintiendo como si su cara se estuviera derritiendo, no podía creer que ya fuera la segunda vez en la noche visitándolo para el mismo asunto.

Notas finales:

El mamadas locas ataca de nuevo xkdnkxkdkx ¿no creen que Takano se está como aprovechando demasiado? es re ventajoso el men, pero les juro que ya no se va a aprovechar así de ahora en adelante. Nos vemos en el siguiente capítulo que no se cuando será, pero espero que no muy lejos :" Cuídense mucho y los leemos luego<3


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