Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Casa Rosso por VinsmokeDSil

[Reviews - 11]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Buenas!! 

Hace poco estuve de vacaciones en esta preciosa ciudad (en serio, es realmente hermosa) y, paseando por sus calles y por el Barrio rojo se me ocurrió la idea para el fic. 

Como ya había avisado en algun comentario o nota, aquí está mi siguiente ida de olla!! 

Como podréis ver, algunos de los lugares citados son reales. 

Tengo hecho el primer capítulo, está pensado para ser una historia corta, de un total de tres capítulos. Como los voy escribiendo cuando me viene la inspiración, no puedo asegurar ninguna periodicidad, tanto puede ser que tarde dos o tres semanas como dos o tres días. 

Espero que os guste!!

Notas del capitulo:

Me disculpo de antemano con los lectores que esperan actualización de University Tour!! Para ese fic ahora mismo estoy out de inspiración, pero prometo que sigo pensando en ello!! 

Como he comentado anteriormente, Casa Rosso va a ser un fic cortito, de más o menos tres capítulos que ya tengo estructurados. A continuación, os presento el primero.

Espero que os guste!!

Los cinco amigos se encontraban sentados en la mesa, tomando cada uno sus bebidas.

Algunos se conocían des del instituto, otros de toda la vida. Llevaban varias semanas sin verse, era lo que tenía estar en el último curso de la universidad estudiando en distintas facultades, así que habían quedado después de largo tiempo. 

De hecho, no estaban todos los integrantes de su peculiar grupo de amigos, faltaba uno.

– ¿Dónde coño se ha metido Zoro? –preguntó un pelirrojo con el pelo de punta y sin cejas. –Llevamos aquí treinta minutos, y avisó por el grupo que fue el primero en salir –dijo, habiendo revisado su teléfono móvil.

–Se habrá perdido, ese idiota no reconoce las calles de su propia ciudad. –dijo un moreno lleno de tatuajes.

–Yo no me pierdo. Son los edificios que se mueven solos. –respondió el joven de pelo verde, apareciendo por la espalda de estos dos.

– ¡Zoro! –dijo una chica con el pelo rosa, la única mujer del grupo.

–Hola, cariño –respondió Zoro a su abrazo, besándola apasionadamente.

–Joder, Zoro, Bonney, iros a un hotel. –se quejó un tipo castaño con tupé.

–Cállate, Drake. –dijo éste.

–En serio Zoro. Eres el único que ha vivido toda su vida en Ámsterdam. ¿Cómo puede ser que sigas perdiéndote? Es tu maldita ciudad natal –dijo Kid, picado. Odiaba la impuntualidad, y ese hecho en su amigo le sacaba de sus casillas.

–Los canales cambian de sitio cuando no miro. –respondió secamente.

–Déjalo, Kid. Hay que aceptarle como es y punto. –respondió el chico rubio de pelo largo al que no se le veían los ojos por su flequillo.

–Killer, ya sabes que no puedo con eso. –respondió Kid, referente a la impuntualidad.

Kid y Killer. Killer y Kid. Un dúo inseparable. Eran amigos de toda la vida, se conocían des de pequeñitos. No había un sitio al que fuera Kid y no Killer. Quizá por eso los dos estudiaban la misma carrera, ingeniería mecánica.

Zoro pretendía ser policía, concretamente de narcóticos. En una ciudad como Ámsterdam, donde la mayoría de estupefacientes se vendían de forma legal, podía parecer algo inútil, pero debían vigilar mucho con el contrabando por este hecho.

Drake, el último miembro en unirse a ellos y el más responsable, iba a clase con Zoro. Se conocieron en la academia y se llevaron a las mil maravillas, aunque la mayoría del tiempo se lo pasaban peleando.

Los del grupo tenían la teoría que Zoro quería dedicarse a eso para quedarse él todas las sustancias, incluso su novia estaba de acuerdo en eso, y Drake sería el encargado de controlarle. Todos, excepto el de pelo verde, coincidían en eso.

Bonney se decidió por una escuela de cocina, que buena falta le hacía a la ciudad. Países Bajos, un país que su cocina consistía en pescado, patata y col. Y más patata. Para no hablar de la increíble variedad de quesos. Tenían la esperanza que ella pusiera remedio a su gastronomía.

O eso, o arrasaba con todas las reservas alimenticias del país, porque su apetito era insaciable.

Y, finalmente, Trafalgar Law. El más inteligente del grupo, estudiante de medicina. Moreno, ojos grises, tatuado hasta las falanges. Él era el que menos tiempo libre tenía de todos ellos, no solo su carrera le quitaba la mayor parte de su tiempo, sino también su trabajo.

Muchas de las veces que quedaban a tomar algo, el moreno no podía ir debido a eso. Necesitaba el dinero para pagarse la carrera.

Él, Kid y Killer empezaron el grupo, al poco de empezar el instituto. Poco después se unieron Zoro y Bonney, que habían empezado a salir hacía algo más de un año, y un par de años atrás se unió Drake.

Todos tenían la misma edad, veintidós años, y aunque la mayoría de sus conversaciones fueran a gritos e incluso a golpes, no podían estar más unidos, por mucho tiempo que pasaran sin verse. Por eso atesoraban e intentaban aprovechar cada momento que podían encontrarse, ya que cada vez era más difícil encontrar situaciones como estas.

Kid tomó su Amstel y se la acabó de un trago. Era su tercera cerveza. Podía parecer borde y huraño, pero era a quien más le dolía este distanciamiento con sus amigos. Quería hacer algo, remediarlo. Alguna experiencia fuera de lo común.

–Chicos. He tenido una idea alucinante. –dijo de golpe, ilusionado.

–Miedo me das. –dijo Killer, viendo la mirada en los ojos de este. Sabía que no sería nada bueno, la última vez que tuvo una “idea alucinante” acabaron bañándose en uno de los canales. En pleno diciembre.

–¡¡¡VAMOS A CASA ROSSO!!! –dijo el chico, gritando de alegría. Sus amigos le miraron sin comprender nada, todos menos Law, que escupió su cerveza de la impresión.

– ¿Dónde? –preguntó Drake.

–Ni de coña. No podemos ir ahí. –dijo el estudiante de medicina.

–Oh vamos, ¿por qué no? –le preguntó el pelirrojo. Le parecía una idea alucinante, y quería compartirla con sus amigos.

– ¿Cómo que por qué? Pues porque no y punto. –ese no era un argumento demasiado convincente para ninguno de los que había por ahí.

–Vamos, será divertido, nunca hemos ido a un sitio así. –seguía insistiendo el otro.

–Esos antros son una mierda. –replicó Law, en un intento desesperado de quitarle la idea de la cabeza, pero solo consiguió cabrear a Kid.

– ¡No es un antro! –Law sabía que si seguía así, solo conseguiría que fuera por pura terquedad.

– ¿No has ido nunca, verdad? –preguntó.

–No, pero…

–Entonces cállate. Busca otra ida de olla, pero no eso. –Law debía reconocer que no estaba siendo demasiado agudo para intentar convencer al grupo de no ir ahí.

–Chicos, ¿alguien sabe de qué están hablando? –preguntó Bonney.

–Ni idea –respondió Zoro.

–Joder Zoro, ¿realmente eres de Amsterdam y no conoces el Casa Rosso? –preguntó Kid.

–Aquí pone –dijo Killer, mirando des de su celular –que es un teatro situado en el barrio rojo donde ofrecen… “espectáculos”.

– ¿El barrio rojo? Oh vamos, eso es un sacacuartos para turistas. –dijo Zoro, entendiendo de qué iba el tema.

– ¿Espectáculos? –preguntó Drake esta vez. No solo era el más responsable, sino también el más inocente de todos.

Iba a preguntar si era una especie de circo, donde hacían malabares y esas cosas, pero antes de poder hacerlo, Killer le ahorró las bromas del resto de sus compañeros.

–Ves striptease y sexo en directo. –respondió Killer, leyendo todavía una reseña en el móvil. Drake se puso rojo como un tomate, pareció congelarse en el tiempo.

–Pues tengo cierta curiosidad, nunca he visto uno de estos –respondió la chica.

– ¡BONNEY! –dijo Zoro, sorprendido.

– ¿Qué pasa? –preguntó ella, sin entender la reacción de su novio. Eran una pareja muy liberal, en algunas ocasiones se habían incluso acostado con otras personas o participado en intercambios de parejas.

–Nada, no sabía que te gustara eso. –dijo, con un ligero sonrojo en sus mejillas. Fuera lo que fuera lo que pensaba, no era nada bueno.

–No lo sé, no lo he visto, solo siento curiosidad. –respondió ella, con una sonrisa dulce en sus labios.

–Vamos, Bonney se apunta y el estirado de Law pasa. ¿Killer? ¿Zoro? ¿Drake? –preguntó Kid, mirando al resto.

–No soy un estirado. –dijo Law, de mal humor. ¿Por qué diablos no se le ocurría nada bueno?

–Yo paso. –dijo Zoro, en tono neutro.

– ¡ZORO! –se quejó su pareja. Realmente tenía ganas de ir, y más con él. Quién sabe lo que podrían ver.

–Prefiero que vayamos a solas… –respondió Zoro en voz baja, acariciando su pierna.

–Hm… me gusta como piensas… Lo siento, Kid, paso. –dijo ella, aceptando contenta el contacto y olvidándose de sus amigos en ese instante. Su excursión privada podía ser mucho más interesante.

–Capaces sois de montároslo ahí en medio y hacer vosotros el show… –dijo Kid, dándoles por imposibles. Vaya par de locos pervertidos han ido a juntarse…

–Yo me apunto –dijo Killer.

– ¡Perfecto! ¡Sabía que no me fallarías! ¿Drake? –preguntó Kid, que seguía completamente rojo, mirando a un punto infinito.

–Creo que le hemos perdido –dijo Bonney, pasando una mano enfrente de su rostro varias veces. No parecía responder a los estímulos visuales y auditivos.  

–Mejor que no venga, todavía no está preparado –respondió Kid por él.

Law había estado extrañamente callado durante toda la conversación. Parecía realmente enfadado. Kid se sorprendió mucho.

Trafalgar no era para nada un puritano. Podía parecer serio, pero normalmente era el primero a apuntarse a alguna de sus aventuras locas, las cuales acostumbraban a incluir sexo e increíbles cantidades de alcohol.

–Estáis fatal. No deberíais ir. –respondió, mientras se levantaba.

–Vamos Law, ¿dónde vas? –preguntó Zoro al ver que se iba.

–A estudiar. Tengo examen en dos días. –dijo secamente. No parecía que fuera a cambiar de opinión.

– ¿En serio? Llevábamos semanas sin vernos, el cabeza de musgo acaba de llegar, ¿y ya te vas?

–Habló el cabeza de pinchos –respondió Zoro al insulto gratuito.

–Al menos no parezco un alga con patas. –le contestó Kid, desviando su vista hacia él.

Kid y Zoro tenían mucho carácter, rara era la vez que no se peleaban. En verdad, rara era la vez que alguno de los dos no se peleara con quien fuera.

–Kid, déjale en paz, ya le conoces. –dijo Killer, refiriéndose a Law, intentado que su mejor amigo no se desanimara más todavía.

Law, mientras estos discutían, ya se había ido de ahí, dejando unas monedas encima de la mesa para pagar su Heineken.

–Qué mosca le ha picado ahora a éste…

 

–Llegamos –dijo Kid, emocionado como si de un niño se tratara.

A Killer le dio la sensación que parecía más un niño yendo a ver un espectáculo de globos que un joven adulto yendo a ver un espectáculo de sexo en vivo.

Había pasado una semana des de que lo hablaron y, al final, tal y como había parecido, solo fueron Kid y Killer. La verdad era que al pelirrojo no le hacía especial ilusión sin estar todos presentes, pero ya se le había metido en la cabeza ir.

Agradecía profundamente a Killer que fuera con él. Sabía que no era precisamente fan de ese tipo de entretenimiento, pero por él lo había hecho. No se podía decir lo mismo de Trafalgar…

El tío solo se había ido, sin dar ninguna explicación, tratándole de loco. Entendía las razones de los otros, ¿pero Law? De verdad le había cabreado su actitud. Quizá por eso ahora quería ir sí o sí.

Desde entonces, no habían vuelto a hablar. Ni siquiera se había pronunciado por el grupo de Whatsapp, parecía desaparecido.

Desgraciadamente, no era la primera vez que hacía algo por el estilo. Cada vez que se enfadaba o se molestaba por algo, desaparecía durante unos días, y después volvía como si nada. Esa sería otra de esas ocasiones.

–Dos entradas, por favor –dijo Killer al hombre que esperaba en la entrada.

– ¿Con consumiciones?

–Claro, si se hace, se hace bien –respondió Kid.

Recibieron las dos entradas y entraron al interior del edificio. Les habían comentado que el show duraba una hora, y que estaba a punto de empezar. Pidieron cada uno una cerveza y se sentaron en las butacas.

Se sorprendieron tanto del sitio como del público. Se trataba de una pequeña sala que imitaba perfectamente un teatro, todo lleno de filas de butacas con un escenario al fondo, con escasa iluminación.

Tal y como había dicho Zoro, eso tenía pinta de estar todo hecho para los turistas. La sala no estaba llena ni mucho menos, pero las pocas personas que la ocupaban claramente no eran holandesas. Ellos eran los únicos.

A Killer le sorprendió ver que en la sala había más mujeres que hombres, le pareció un tanto curioso.

Sonaba música de fondo, pero de golpe se detuvo.

–Ladies and gentleman! –en inglés, como no –Let’s begin! For all of you… Sexy Andrea!

Empezó a sonar una canción distinta y una chica apareció en el escenario, bastante ligera de ropa, dispuesta a empezar su número.

Los dos amigos se acomodaron en sus asientos, disfrutando del espectáculo. La verdad era que la chica era una auténtica belleza, era imposible no fijarse en cada uno de sus sensuales movimientos de cadera, ni estar pendiente de nada más.

–Oye, Killer.

–Que quieres ahora.

– ¿Por qué se pondría Law de esa forma?

– ¿Otra vez con eso? Déjalo, ya se le pasará. Siempre ha sido rarito.

–Ya…

La chica acabó su número al cabo de unos cinco minutos, y dejaron un par más de pausa.

–Let’s say hello to Max and Sexy Ruby! –anunció la misma voz de antes. Empezó a sonar una canción, tranquila, relajada, y muy sensual. Ahora tocaba el sexo en vivo.

El chico estaba de pie, de cara al público, y su cara lo decía todo. Mientras, la chica estaba agachada, enfrente de él, practicándole una felación. Había un colchón en el suelo encima de algo que parecía una especie de plataforma.

–Drake hubiera muerto de un infarto si hubiera venido. –pronunció Killer, en una carcajada.

–Ya te digo. –estuvo de acuerdo Kid.

Siguieron observando a la pareja mantener relaciones sexuales encima del escenario. Ya había empezado la penetración, y observaron maravillados que esa plataforma del escenario también era giratoria, y podían verlo todo des de todos los ángulos.

Ni en clase Killer había estado nunca tan atento.

– ¿Estará en contra de éste tipo de espectáculos? –preguntó Kid a su amigo.

– ¿De qué hablas?

–Trafalgar. Quizá le parecen demasiado sexistas, por lo de tratar a la gente como objetos sexuales y eso.

–Joder Kid, ¿quieres dejarlo estar? Estás obsesionado con Law. Ya se le pasará.

–Supongo…

Los actores cambiaron de postura. Hasta ahora, el chico había estado encima de ella, y se pusieron a cuatro patas. Killer se removía en su silla, parecía que le estaba gustando un pelín demasiado el espectáculo.

–Pero y si… –volvió a empezar Kid.

–Cállate o te hecho a patadas –respondió su amigo, intuyendo por dónde iba.

La pareja terminó su número, y dio paso otro descanso de un par de minutos. Los dos chicos ya se habían terminado su bebida, así que pidieron otras dos cervezas.

–The people it’s too hot here… like if they have a fever, so… let’s see our sexy and dirrty Doctor Love! –anunció la voz de los megáfonos.

La música volvió a cambiar, sonaba dirrty de Christina Aguilera. Le recordó a Bonney, ella era muy fan de la cantante, y por su culpa él y todos conocían casi todas sus canciones. No era una mala canción para un striptease, aunque quizá hubiera sido mejor la de Lady Marmelade, o Express.

Esta vez era el turno de un chico, vestido con una bata de doctor, de espaldas al público. Podían ver como contoneaba sus caderas al ritmo de la música. Empezó la letra de la canción.

Ladies, move. Cadera a la derecha

Gentleman, move. Cadera a la izquierda.

Somebody ring the alarm, a fire on the roof, ring the alarm. Más movimientos de cadera, subiendo y bajando su cuerpo, dejando caer ligeramente su bata por uno de sus hombros.

And I’m throwin’ elbows.   ¿Eso era...?

Ring the alarm

Ring the alarm

Ring the alarm.

El chico se giró hacia el público, dejando caer su espalda por la barra central a medida que hacía movimientos muy sugerentes con su cadera hacia ellos. De esta forma, pudieron ver que iba únicamente vestido con una bata y unos pantalones blancos largos muy apretados.

También pudieron ver que llevaba un estetoscopio colgado del cuello y un gran tatuaje en el pecho, en forma de corazón, con una carita sonriente en el centro.

Ring the alarm.

Todas las alarmas sonaban en la cabeza de Kid, que no daba crédito a lo que estaba viendo.

–Killer… creo que tienes razón.

– ¿Ah? –preguntó su amigo, que no apartaba los ojos del escenario.

Let me get f-
Oh, I'm overdue
Give me some room, I'm coming through

–Estoy obsesionado con Trafalgar.

–Ah…

Paid my dues, In the mood
Me and the girls gonna shake the room

–Estoy seguro de estar viéndole bailando en el escenario, restregándose contra la barra.

–Ah…

DJ's spinning, show your hands
Let's get dirty, that's my jam

– ¿Killer?

–Ah…

I need that, uh, to get me off
Sweat until my clothes come off

Al decir esta última frase, el chico que se desenvolvía realmente bien en el escenario, se quitó la bata, dejando completamente su torso al descubierto, junto con un patrón de tatuajes exactamente igual al de Trafalgar D Water Law.

–Dios. Estoy muy mal, ¿verdad?

–Ah…

It's explosive, speakers are pumping
Still jumping, six in the morning
Table dancing, glasses are mashing
No question, time for some action

El doble de Law hacía unos pasos de baile que parecían casi imposibles. Bailaba realmente bien. No era únicamente saber verse completamente deseable, sino que a parte el tio bailaba muy bien.

Realmente le hacía verse muy… excitante.

–Dí algo, joder!

–Ah… es Trafalgar…  

Temperature's up (can you feel it)
'Bout to erupt

– ¿Cómo? No, imposible. No puede ser él.

–Kid, mírale. Es el, no hay duda.

Gonna get my girls, get your boys
Gonna make some noise

Law levantó su pierna hasta encima de su cabeza y se dejó caer al suelo, abierto de piernas, y luego se volvió a levantar mediante esos sugerentes movimientos de cadera que ya había utilizado.

Daba la sensación que había alguien tumbado debajo de él y le estuviera penetrando. Consiguió hacer todo eso sin el más mínimo esfuerzo.

–Pero… Joder joder joder joder joder.

–No sabía que fuera tan… elástico.

–Joder joder joder joder joder.

Se quitó los pantalones de un tirón, dejándolos abiertos por detrás. Eran de esos que iban a botones, y ahora solo lo cubría una fina tela de cuero negro a modo de ropa interior.

Want to get rowdy
Gonna get a little unruly
Get it fired up in a hurry
Want to get dirty, It's about time that I came to start the party

Se enganchó a la barra y trepó por ella, enganchado únicamente por sus piernas. Bajó por ella dando vueltas a su alrededor, mostrando sin pudor alguno su cuerpo al público.

Sweat dripping over my body

Se dejó caer sensualmente al suelo, quedando tumbado sobre unas sábanas rojas, de donde cogió un botecito que parecía contener líquido y se lo echó por encima. Aceite.

Dancing gettin' just a little naughty

Se incorporó un poco, quedando de rodillas, esparciendo todo el aceite por su pecho acompañado de sus movimientos.

Want to get dirty, it's about time for my arrival

La música bajó el volumen, sonando muy de fondo. Law tomó un micrófono para hablar.

–And now… It’s about time for my arrival, ladies and gentleman… Who needs to see a doctor? –definitivamente, era su voz.

Kid ya no tenía dudas: uno de sus mejores amigos era stripper, y uno realmente bueno. Ahora tocaba el momento de que cogiera a alguien del público y siguiera su espectáculo con él y…

¿Por qué cojones estaba delante de él?

– ¿Kid? –preguntó Law, fuera del micro, visiblemente alucinado.

– ¿Law? –preguntó Kid también, por si las moscas, aunque estaba más que confirmado.

Esos dos se miraban fijamente, durante unos segundos, cada cual más sorprendido. No sabían qué decir, ni qué hacía el otro ahí. Esto era demasiado fuerte para los dos chicos.

–Hola –saludó cierto rubio que se sintió completamente ignorado.

–Mierda, Killer, ¿tú también? ¿No os dije que no vinierais? –preguntó Law, al percatarse de su presencia.

Law vió a su jefe, al fondo de la sala, mirándole muy mal. Sabía que le estaba diciendo que cogiera a ese chico de una vez y lo llevara al escenario, que no podía estar tanto rato parado.

Cuando el moreno se había acercado a él, ni siquiera le había reconocido, estaba demasiado centrado en su número, y sencillamente se acercó a alguien al azar. Ahora deseaba haberse fijado más, porque las cosas iban a complicarse mucho.

–Mierda… da igual. Tú, te subes conmigo. –le dijo a Kid, tomándole de la muñeca.

– ¿CÓMO? –preguntó el pelirrojo con los ojos como platos.

–Ya me has oído. Arriba. –Law, igual que siempre, hablaba de forma autoritaria y brusca, pero su lenguaje corporal parecía decir exactamente lo contrario.

Había hecho levantar a Kid de su butaca con un movimiento rápido y se lo puso enfrente, muy pegado a su cuerpo, restregándose contra él y permitiendo sentir el olor del aceite corporal que llevaba encima. Coco.

En cuanto Law vio que Kid estaba medio en fuera de juego, aprovechó para llevárselo encima del escenario, en el que ya le habían sacado una camilla.

Y Killer, como buen amigo que era, sacó el móvil para grabarlo todo y tomar fotos.

Le echaron al instante.

Law sentó a Kid en la camilla, de cara al público. La música volvió a subir de volumen.

Rowdy
Gonna get a little unruly
Get it fired up in a hurry
Want to get dirty, it's about time that I came to start the party

Law estaba situado detrás de Kid, utilizando por primera vez su estetoscopio para ponérselo por el pecho y escuchar sus latidos, que estaban completamente desbocados. Estaba completamente acojonado.

–Te noto un poco nervioso… –dijo Law en su oreja.

– ¿Y cómo coño se supone que esté?

Ooh, sweat dripping over my body
Dancing gettin' just a little naughty
Want to get dirty, it's about time for my arrival

–Como me jodas el número te mato

– ¿Disculpa?

Here it comes, it's the one you've been waiting on
Get up, get it up, yup, that's what's up
You can just put your butt to the maximum

Law, haciendo caso de la letra de la canción, situó su trasero encima de la entrepierna de Kid, apoyado en el suelo con las piernas abiertas, y empezó a moverlo a gran velocidad. A Kid nunca le habían perreado de esa forma.

Uh-oh, here we go (here we go)
You can tell when the music starts to drop

Law se tumbó encima de Kid, cogiendo sus manos y obligándole a abrazarle, a que recorriera todo su cuerpo, mientras él se iba deslizando hacia el suelo, lentamente. Kid sentía todos y cada uno de los músculos de Law a través de su resbaladiza piel.

That's when we take it to the parking lot
And I bet you somebody's gonna, call the cops
Uh-oh, here we go, here we go

Una vez hubo llegado al suelo, se quedó de rodillas, con el cuerpo echado para atrás, de cara al público y volvió a incorporarse, quedando recto.

Oh-oh-oh, oh-oh-oh, oh-oh-oh

Apoyó sus manos en el suelo y levantó su trasero, echándolo hacia atrás, para que encajara a la perfección con la cara de Kid.

Yo, hot damn, Doc a Jam like a Summer Show

Durante el rato que duró el rap de Redman, Trafalgar se dedicó a bailar encima de Kid, restregándose contra él, permitiéndole sentir cada centímetro de su cuerpo, de una forma muy sensual y elegante, nada sórdido.

Parecía que había querido aprovechar ese momento, en el que predominaba el ritmo marcado por la voz, para mostrar sus habilidades como bailarín.

Incluso consiguió que Kid pudiera relajarse un poco y disfrutara de los movimientos del moreno.

It's like I'm ODB, the way I'm freaking (want to get rowdy? (rowdy)

Para su desgracia, Christina volvió a cantar, y dejó de ser baile estético y sensual para ser única y exclusivamente sensual.

Gonna get a little unruly (ruly)

Law cogió la mano de Kid y la situó en su entrepierna. La tela, por muy cuero que fuera, era muy fina. Mucho. O sea, demasiado.

Get it fired up in a hurry (hurry)

Hizo que Kid paseara sus dedos por encima de su miembro, recorriendo todo lo que la gente veía.
Want to get dirty, it's about time that I came to start the party (party)

Law hizo que los dedos de Kid empezaran a jugar con el borde de su lencería, a lo que Kid se tensó e intentó apartar su mano. Law ya había previsto esa posible reacción en el pelirrojo, por lo que aguantaba fuertemente su mano, sin dejarle escapar.

Sweat dripping over my body (body)
Dancing gettin' just a little naughty
Want to get dirty, it's about time for my arrival

Kid se sorprendió todavía más si cabía. Law estaba empalmado. Muy duro. Se lo había parecido antes, cuando se había quitado los pantalones, pero ahora estaba seguro. Y el calor empezaba a apoderarse también de su cuerpo.

Law parecía disfrutar obligando a su amigo a meterle mano, y joder si se la metía. Obligó a Kid a agarrarle completamente el miembro, rodearlo y mover su mano de arriba abajo.

Rowdy
Gonna get a little unruly

Law sacó la mano de Kid de dentro de sus calzoncillos y le hizo que se los bajara un poco, jugando al juego de si quedarse completamente desnudo o no un par de veces antes de arrancarse él mismo los calzoncillos, igual que había hecho antes con sus pantalones.

Get it fired up in a hurry

Hizo un par de movimientos antes de volver a Kid con el bote de aceite que había utilizado antes.

Want to get dirty, it's about time that I came to start the party

–Vamos, Eustass, ensúciame… –dijo mientras dejaba caer más aceite sobre su cuerpo y tomaba otra vez la mano de Kid, llevándola a su pecho y haciendo que el otro se lo esparciera por su pecho, y más abajo… 

Oírlo hablar en ese tono, tan sensual, tan sucio, le provocó una erección. Trafalgar le estaba excitando de sobremanera, y no era de los que se detenían a la mitad.

Ooh, sweat dripping over my body
Dancing gettin' just a little naughty

La mano de Kid volvía a estar en el miembro de Law, embadurnándole de aceite, masturbándole con él. Law ya no guiaba sus movimientos, Kid solo sabía hacerlo bien. Las miradas de asombro y sorpresa habían cambiado por las de deseo.

Want to get dirty, it's about time for my arrival

Law, sintiendo lo mismo que Kid en ese momento, fue la primera vez en toda su carrera de stripper que tuvo que detener a un espectador.

No porque se propasara, no era nada de eso. Era porque si seguían así acabaría por correrse, y eso no entraba en el contrato y no quería que le echaran la bronca o le despidieran.

Rowdy
Dance and getting a little unruly
Gonna get fired up in a hurry

Aun así, se dejó ir un poco y siguió bailando pegado a Eustass, restregándose contra él, permitiendo que el chico hiciera uso de sus manos tanto como se le antojara.

Gonna get dirty, it's about time that I came to start the party

En un momento que Law había vuelto a sentarse encima de Kid, de espaldas a él, éste aprovechó para meter un dedo en su trasero sin que nadie lo viera. Law se sobresaltó, no esperaba tal atrevimiento por parte del pelirrojo después de lo tímido que había sido al principio, pero no dijo nada.

Le gustaba que el otro fuera tan directo.

Las manos de Kid, al igual que el trasero del moreno, estaban llenas de aceite, por lo que pudo introducirse con suma facilidad. Le encantó ver como Law se estremecía, pero no se negaba a ello.

Sweat dripping over my body
Wanna get a little naughty

Al contrario, empezó su movimiento de cadera, penetrándose él mismo con el dedo de Kid, completamente en su interior, que aprovechó para meter un segundo. Un gemido, que solo Kid oyó, salió de la garganta de Law.

Want to get dirty, it's about time for my arrival
Uh, what?

Notas finales:

Y hasta aquí el primer capítulo!! 


¿Qué os ha parecido? Se trata de mi primer fic dedicado a esta pareja (sin contar el capítulo de UT, claro), que desde Wano les he cogido un apego especial, a Kid sobre todo.


Cuando se me ocurrió la idea del club de striptease, no tenía ni idea sobre quién hacerlo. ¿ZoSan? ¿LawAce? ¿MarAce? Demasiadas posibilidades. Pero al final, los que me convencieron más fueron esta parejita de locos!! Creo que es a quien más les pega. 


Esperaré con ansias vuestras reviews, para que me hagáis llegar vuestras opiniones!! 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).