Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Alas por ZafiraKz

[Reviews - 8]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Si quierea saber un poco mas del dom/sub pueden buscar en wattpad o facebook "Información introducción al universo dom/sub, sub-género" Como es mi primer intento puede que flexibilice las reglas o las cumpla según entendí XD En todo caso, no usaran palabras en inglés porque soy muy mala en ese idioma y en español suenan bien XD Muchas gracias por sus comentarios! Los contestare cuando pueda pero realmente me encantan y por ello me apure a escribir en mis ratos libres aunque comparto ese tiempo en escribir no te metas con el lobo también. Muchos besos!

Se levantó tratando de quitar esos pensamientos de su mente, era ridículo sentir curiosidad por Malfoy ahora que su vida parecía un caos otra vez.
No, realmente solo debía encontrar otras cosas que hacer.
Aunque no pudo evitar prestar atención a lo que sentía por el vínculo, pero siempre era el mismo dolor sordo, lo ignoró con éxito hasta que Dora le pidió hablar.
-Remus… Me invitó a conocer a su familia. “ Sabía que sería algo serio cuando ella no trajo a Teddy pero no pudo evitar sentirse desestabilizado al escucharla.
Agarró más fuerte su taza, tratando de que no se notara el temblor en su respiración.
-Oh.- No pudo decir más, sintiendo el nudo en la garganta.
Debería estar feliz por ella, pero no podía borrar sus sentimientos de la noche a la mañana y ver que seguía doliendo se sintió casi injusto.
Sabiendo que ella no me diría si no fuera importante para ambos o para Teddy se esforzó por darle una mirada de comprensión.
Dora suspiró y miró a su taza de té.

-Serán dos semanas y yo… no puedo dejar a Teddy aquí. Se que lo cuidarías muy bien pero yo… es tan pequeño, no puedo…- Ella mordió su labio con fuerza, dejando la taza sin beber nada.
-Esta bien.- Trató de tranquilizarla aunque sentía que él mismo estaba a punto de tirar la taza.
No se sentía enojado, solo… angustiado. Él tampoco quisiera no ver a su bebé por dos semanas.
-Te lo compensare, lo prometo. - Ella agarró sus manos pero él las apartó rápidamente, tratando de mostrarse más calmado de lo que se sentía.
Respiró profundo y acarició ligeramente la taza.
-Dora, no pasa nada. “ Su voz sonó más sincera de lo que sentía y eso lo hizo sentirse un poco mas tranquilo.
-Sé que todo esto está siendo más duro para ti que para mi.- Negó con la cabeza y dejó la taza, sabiendo que tendría que tener cuidado con lo que diría.
No quería que ella se preocupara.
Tal vez si se mostrara molesto, si insistiera, ella le dejaría a Teddy pero entonces no disfrutaría del viaje. Incluso seguramente volvería antes.
Pero no era eso lo que quería.
Eran amigos a pesar de todo.
-Edward es perfecto, estoy feliz por ti.- Sonrió un poco más sinceramente, sintiéndose algo extraño al decirlo.
-Lo sé, pero me hubiera gustado… - Remus se levantó y agarró su mano con cariño, presionándola con un poco de fuerza para hacerla callar.
-A mi también. Pero es bueno que el destino no se haya equivocado contigo.- Besó sus nudillos cariñosamente antes de soltarla.
Ella le devolvió la sonrisa con tristeza, una que seguramente él estaba reflejando también.
-Entonces… ¿Puedo verlo hoy?-
-Puedes ir a casa a verlo todo el tiempo que quieras, te lo he dicho.- Remus iba a señalar de que ahora podía ser distinto, ya que Edward seguramente la ayudaría a empacar y trataría de llevarse mejor con Teddy, pero prefirió asentir en acuerdo.
Realmente quería disfrutar del tiempo de su hijo si no lo vería en tantos días.



oOo


oOo


A pesar del máximo tiempo que había disfrutado con Teddy en cuanto se fueron se sintió bastante desconsolado. Podría llamarlo por red flu antes de dormir, pero no sería lo mismo.
Por primera vez se preguntó que tanto le quitaría Edward en la vida de Teddy.
Por ahora, su bebé no parecía reconocer especialmente a la alma gemela de su madre, la forma de decir Edward era apenas un balbuceo pero ya decía bien “Papá” dirigido a él, pero ¿Por cuánto tiempo mantendría esa exclusividad? ¿Cuánto tardaría Edward en volverse “papá” también?
Agitó la cabeza tratando de no estresarse pero al hacerlo sintió un pequeño mareo que lo hizo quedarse congelado en su lugar.
Oh, no era suyo, Lucius de nuevo.
Trató de ignorarlo mientras preparaba el té, algo sorprendido de que la sensación del vínculo fuera tan palpable, hacía varias semanas que no lo era.
Respiró profundo y cerró los ojos, concentrándose mejor en esa molesta sensación pero no había mucho más.
¿Qué había sido de Lucius Malfoy?
No debería importarle.



oOo


oOo


oOo


Ordenó cuidadosamente sus plumas, peinándolas. La magia lo ayudaba a llegar a sitios donde sus manos no pero no dejaba de ser algo incomodo.
Sirius hubiera bromeado que peinar sus alas era lo equivalente a peinar el cabello de Rapunzel.
Sonrió ante el recuerdo pero luego la tristeza lo siguió.
Se levantó y abrió completamente sus alas, sintiéndose algo cansado luego de haberlas limpiado y peinado meticulosamente, pero satisfecho con el resultado al mirarse al espejo.
Irónicamente, la mayoría no podía volar con sus alas. Solo podían planear y aterrizar.
Pero él si podía.
Sobre la escoba le gustaba abrirlas y luego soltarse, la sensación de libertad era abrumadora y al terminar, siempre sentía sus alas adoloridas porque pasaba demasiado tiempo en el cielo pero valía la pena.
La adrenalina, la sensación de estar vivo.
Pero las alas tenían mucho que ver con los vínculos y siempre al aterrizar sentía sus propias alas temblar un poco, tenía que concentrarse para no aparecer en otro lado.
Lucius tenía las alas lo suficientemente amplias para al menos volar un poco, siempre le había dado curiosidad si él sentía lo mismo, si incluso le gustaba volar o lo consideraba poco estético.
No conocía nada de Lucius además de lo que todos sabían.
Respiró profundo.
No, no necesitaba meterse en otro problema solo porque estaba triste. Pero Malfoy… debía estar igual o peor que él.
Miró al cielo saliendo de su casa hacia su jardín, se había comprado varias hectáreas para que el lobo pudiera correr.
Siempre despegar era lo más difícil pero cuando estuvo de nuevo en el aire, sonrió. Las había estirado por completo, podía sentir el viento contra él y también el poder.
Esa sensación abrumadora de tener el total control, como que si por unos momentos no hubiera limites.
Amaba esa sensación.
Cuando bajó a tierra, sintiendo toda la magia rodeando, erizando sus alas y sus plumas, no evitó aparecerse.
Miró hacia las rejas, la mansión ya no estaba oculta por orden del Ministerio. Solo tenía salas de protección y también anti muggles.
Habían muchas cosas tiradas frente a las hermosas rejas, mitad de escritura borrada, seguramente mucha gente había tratado de dejar rastro de su repudio contra la familia.
No pudo evitar sentirse un poco enojado pero trató de aplacar esa parte.
Lucius podía ser un sub pero era peligroso.
El anterior patriarca Malfoy había sido un sub conocido porque no le obedecía a nadie. Incluso se creyó que era dom hasta que su alma gemela apareció.
Todo volvió a la normalidad, Abraxas quedó catalogado como un sub que solo respondía a su dom y estaba bien.
Luego, un año después, ese dom estaba muerto. Todo apuntaba a Abraxas pero no hubo pruebas contra él, ya que casarse solo tres meses de la muerte de su pareja destinada no era un crimen, incluso si se casaba con otra sub.
Lucius no había hecho su género público pero podría tener la misma resistencia que su padre.
Bueno, Lucius no podría matarlo. Incuso sin pruebas apuntarían hacia él luego de que supieran que pasó tiempo en su Mansión.
Aprovecharse de eso se sentía bastante mal pero tal vez ni siquiera lo dejaran pasar.
Sintiéndose idiota por estar parado ahí tanto tiempo pidió permiso para entrar.
Era muy mala idea.
¿Qué iba a decir?
“Ey… se que no tienes alas, tu vida es un desastre, mi vida es un desastre.”
Y ya. No había forma de decir de manera bonita que estaba ahí porque se sentía triste y frustrado, y que sentía que tal vez ver que había del otro lado del vínculo lo distraería.
-Señor Lupin.- Se sobresaltó y miró al elfo, haciendo un pequeño asentimiento. -Por aquí.- La criatura abrió las rejas y empezó a caminar, Remus se apuró a seguirlo sintiéndose de pronto muy incrédulo.
¿Realmente lo habían dejado pasar?
Notó que la mansión estaba remodelada, los jardines estaban preciosos y varios pavos reales salieron corriendo al verlo pasar.
Cuando el elfo abrió la puerta dudo unos segundos en entrar, agarrando su varita con fuerza por las dudas.
Realmente no sabía que le esperaba del otro lado.
-Que sorpresa, un león entrando al nido de la serpientes.-
Miró directamente al patriarca, notando su arrastre en las palabras. Era extraño verlo sin sus grandes alas plateadas en su espalda y se dio cuenta que era la primera vez que lo veía desde que las perdió.
Notó también su cabello más largo pero descuidado, al igual que una sombra de barba que le decía que no se había afeitado en algunos días.
Por la forma en que se apoyaba en su bastón supo enseguida que estaba borracho, a pesar de que el mayor se había deshecho del aroma a alcohol.
Incluso agarraba su varita de forma descuidada aunque estuviera apuntándole y Malfoy en sus cincos sentidos no hubiera dejado que eso pasara.
A pesar de como se veía sus voz sonó desdeñosa.
-Malfoy. “ No alzó su varita, sintiendo que se estaba enfrentando más a un animal herido que a uno verdaderamente peligroso.
Lucius realmente estaba demasiado borracho como para ser un problema en combate.
-¿Vienes a burlarte? ¿Tu? ¿Cuándo tu esposa te abandonó?- Se burló, sosteniendo aun con fuerza su bastón.
-Creo que no estás en las facultades…- No supo como sentirse ante la ola de afecto que lo inundó.
Tuvo ganas de rodearlo con sus brazos y con sus alas, simplemente protegerlo. Se veía tan perdido como alguien que no había sido cuidado adecuadamente.
Pero ni siquiera pudo terminar la frase.
-¡Claro que lo estoy! ¡Tu, maldito desgraciado!- Lucius no se acercó y siguió apuntándolo, pero no parecía probable que pudiera hechizarlo. Sin darse cuenta abrió mas sus alas sosteniendo mejor su varita, sintiendo algo de enojo al ser interrumpido, a pesar de que sabía que era ridículo sentirlo.
-Creo que puedo ayudarte.- Trató de calmar las cosas pero Lucius río de una forma que le revolvió el estómago. Tuvo ganas de acercarse y tirar de su antebrazo para hacerlo arrodillarse, hacerlo disculparse, pero controló todo eso sabiendo que sólo empeoraría la situación.
-¿Ayudarme a mi? ¡No te necesito! ¡Nadie te necesita!
Ve a llorar a otro maldito lado ¡No estoy para tolerar a un estúpido niño Gryffindor! ¡Tienes alas! ¿Y que?
En estos momentos eres mas perdedor que yo, y cuando tu hijo te deje de llamar papá veremos quien es el mas herido.-
-¡Arrodíllate!- Alzó la voz, sintiendo su corazón latir en sus oídos al verlo caer de rodillas.
Lucius enseguida levantó la mirada mirándolo con mucho odio, parecía que los efectos del alcohol lo habían abandonado en ese simple gesto. No temblaba, pero tampoco se levantó, su bastón había caído a su lado como su varita pero sabía que no se estiraría a agarrarla.
Remus se pegunto si debería disculparse pero el empujó la inseguridad que sentía y se acercó, acariciando ligeramente la mejilla del mayor al quedar frente a él.
-Si no me quisieras aquí, no me hubieras dejado entrar.-
Notas finales:

Gracias por leer!

Los guiones pequeños es porque escribí este capítulo en celular y no en la compu como acostumbro D": 

Espero que les guste :D 

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).