Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

A(R)MOUR (Traducción del fanfic de Sinnatious) por XIVA

[Reviews - 11]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

¡¡Hola de nuevo!! Perdón por la tardanza de meses. Debo ser sincera ya tengo todos los capitulos traducidos, el problema fue con el ingreso a esta plataforma que no me permitia actualizar la historia y estuve a punto de tener un ataque de panico porque ya tenia planeado incluso crear un nuevo perfil y subir de nuevo todo... Ademas hubo muchos cambios de planes, incluyendo el tener que iniciar un entrenamiento que me acaparaba tiempo en la semana, aparte de manejar un negocio y aparte cumplir con otras responsabilidades. Aparte (otro aparte) un mes de viaje que me atraso bastante en la entrega de este capítulo. Sin embargo, estoy feliz de por fin publicarlo y dejarlo para entretenimiento de las seguidoras de esta historia y estos personajes. Como anticipo, solo puedo decir que el rumbo de las cosas va de forma muy extraña, y sobre todo inesperadas… Una fantasía de vieja data se le cumplió a Hiroki y el no sabe como reaccionar a eso… No cuando ha vivido más cosas (y sufrido mucho más) siento que el pobre se va a volver loco con tantas cosas que le están pasando. Espero disfruten de este capítulo:

 

Yaoizando

GrupoUsuarioMensajes136ProcedenciaSomewhere only we know
EstadoOffline   ¡¡Hola de nuevo!! Perdón por la tardanza de meses. Hubo muchos cambios de planes, incluyendo el tener que iniciar un entrenamiento que me acaparaba tiempo en la semana, aparte de manejar un negocio y aparte cumplir con otras responsabilidades. Aparte (otro aparte) un mes de viaje que me atraso bastante en la entrega de este capítulo. Sin embargo, estoy feliz de por fin publicarlo y dejarlo para entretenimiento de las seguidoras de esta historia y estos personajes. Como anticipo, solo puedo decir que el rumbo de las cosas va de forma muy extraña, y sobre todo inesperadas… Una fantasía de vieja data se le cumplió a Hiroki y el no sabe como reaccionar a eso… No cuando ha vivido más cosas (y sufrido mucho más) siento que el pobre se va a volver loco con tantas cosas que le están pasando. Espero disfruten de este capítulo:

Capítulo 11





Tan pronto como Hiroki abrió los ojos la siguiente mañana con un pulsante dolor de cabeza y una boca que le sabia a espuma de relleno de sofá, él supo que había sido un error.

Le había tomado un largo tiempo, unido a la obstinación de Nowaki, para que finalmente Hiroki pudiera dejar sus sentimientos unilaterales por Akihiko a un lado. Para superarlo y seguir adelante con alguien que algún día podría en verdad importarle algo sus sentimientos. Para alcanzar al punto donde el podía ver a su amigo y pensar en el cómo nada más que un amigo, donde el pudiera leer sus novelas sin entretenerse con desesperanzadas fantasías o ser constantemente recordado sobre su incomoda historia juntos.

Y en un momento de embriagada debilidad, él había deshecho siete años de progreso.

Reviso el reloj alarma con ojos nublosos. No era particularmente tarde aun, pero lo suficientemente tarde para volver a dormirse otra vez.

Akihiko había colgado su brazo sobre su costado en algún momento. Hiroki logro deslizarse por debajo de este, cuando el brazo de repente se apretó alrededor de sus costillas, atrayéndolo de nuevo contra él. “Unnnnhhhh.”

Maldición, él había olvidado que tan acaparador era Akihiko en las mañanas. “Déjame ir tu gran idiota, necesito ir al baño.”

Akihiko solo le acaricio la nuca con su nariz. Hiroki se puso rígido, luego se apartó a la fuerza, cayendo torpemente fuera de la cama en una maraña de sábanas.

Akihiko finalmente abrió sus ojos una brizna. “¿Hn? ¿Qué estás haciendo?” Su voz se arrastraba con confusión.

“Al baño. Vuelve a dormir,” Hiroki le gruñó.

“¿…Hiroki?”

Cerró la puerta de la habitación de golpe detrás de él.

Su respiración no se tranquilizaba. A tientas busco los grifos, abriendo la llave del agua fría al máximo. Se salpico la cara somo si con el choque de temperatura pudiera ahuyentar ese persistente sueño – pesadilla – y reestablecer la realidad una vez más.

No lo hizo. Él estaba ahí parado frente al lavamanos del baño, mirándose al Espejo mientras el agua goteaba de su cabello.

Siete años, y el recuerdo aun quemaba como aceite caliente. Él lo había enterrado, reemplazado manos heladas por unas cálidas, pero las cicatrices nunca habían sanado del todo. Y ahora había abierto las heridas de nuevo y les había frotado sal, además.

La peor parte era que, él no sabía cuál par de manos le atormentaba más.


……………….


Para cuando Akihiko finalmente se había desprendido de la cama, Hiroki había batallado para recuperar lo suficiente de su compostura para empezar a hacer el desayuno.

El autor se desplomo en su silla, su rostro contraído en un sombrío gesto. Hiroki se dejó una taza de café frente a él, seguido por un plato.

Como estaba, Akihiko ya iba cerca de la mitad de su taza antes de que su mirada de aclarara lo suficiente para registrar apropiadamente la comida que se presentaba ante él. “¿Tostada?”

“Tengo resaca, no estoy con ganas de sea comer o hacer algo más elaborado que esto,” Hiroki le replico. “Si quieres algo más sofisticado, hazlo tú mismo.”

Akihiko se quedó mirando la tostada, y siendo viejos amigos o no, Hiroki no pudo interpretar esa expresión facial. ¿Decepción? ¿Sorpresa? ¿O solo era su acostumbrada mirada mortal matutina?

Sin embargo, al final, el la levanto y empezó a comerla sin ninguna queja. Hiroki se ocupó a si mismo con la limpieza. Normalmente no se hubiera molestado, pero… “Tu cocina esta asquerosa. ¿Cuándo fue la última vez que limpiaste este lugar?”

“Hmmm… ¿Hace tres meses?”

“Tre-” Hiroki se cortó a sí mismo. Él no podría estar sorprendido, en verdad. “Idiota. ¿Porque no has contratado a una ama de llaves?”

La luz en los ojos de Akihiko esta vez era inequívocamente testaruda. “Eso no es ordinario.”

“¿Aun sigues con esa idea de vivir el estilo de vida de un plebeyo?” El ojeo la esponja que tenía en su mano con disgusto. Su cabeza le dolía demasiado para lidiar con eso. “Tu vives de tu propio dinero, ¿No es eso suficiente?”

El silencio taciturno le respondía que no lo era. Hiroki solo puso los ojos en blanco y lleno el lavaplatos con agua jabonosa. Ninguno de esos platos se podría limpiar sin estar en remojo completo. Su estómago se sacudió al ver el estado de algunos de ellos en el fondo. Pensándolo bien, tal vez debería dejar eso hasta que su resaca hubiese pasado un poco.

“Hiroki, ¿Como te volviste bueno para esas cosas? Tu familia tiene dinero también.”

Hiroki le dio un palmazo en la parte de atrás de la cabeza cuando pasaba junto a él hacia la caneca de la basura. “Ni siquiera estamos al mismo nivel, idiota. Pasaste tiempo allá lo suficiente como darte cuenta de eso.” Él no era como si fuera un amo de casa, no de la forma como Nowaki había sido – el inesperado pensamiento aun le hizo comprimir su pecho – pero no era como si fuera ingeniería aeroespacial.

“Supongo.” Akihiko le dio un sorbo a su café, su rostro pensativo. “¿Que vas a hacer hoy? ¿Necesitas ir a la Universidad? Te puedo llevar.”

“Es mi día libre. Necesito salir a buscar un nuevo apartamento.” Incluso si lo último que quería hacer en ese momento era salir. Empezó a rebuscar en las alacenas. “¿No tienes tabletas para el dolor de cabeza?”

“En la alacena encima del lavaplatos,” Akihiko respondió. “Deberías quedarte. Extraño tener un compañero de piso.”

“No voy a ser tu mucama particular.” Incluso si el autor necesitara desesperadamente una.

“Tal vez contrate a alguien,” Akihiko medito. “Ya que esta también es mi oficina. Las oficinas también contratan servicios de limpieza.”

“Lo que sea que te parezca,” él le gruño.

Esto estaba bien. Esto era lo normal. Si Hiroki pudiera solo aferrarse a este chachareo familiar, el estaría bien.

Por supuesto, Akihiko no le dejaría salirse con la suya.

“Anoche. Dijiste que era un hombre cruel.”

Hiroki se congelo. Varios segundos después demasiado tarde para ser natural, el logro tartamudear, “¿Q-que estas trayendo a colación tan de repente? Yo estaba ebrio. No puedes ir por ahí citando lo que yo haya dicho cuando estoy embriagado, tú lo sabes.”

“Eres más sincero cuando estás ebrio. ¿Qué fue lo que te pareció cruel?”

“Nada. Ni siquiera se de lo que estás hablando.”

Akihiko Descanso su mentón sobre la palma de su mano. “Lo disfrutaste, ¿Cierto?”

Su rostro comenzó a arder. “¡I-idiota! No digas cosas raras.”

“¿Te ayudo?” Cuando Hiroki no respondió, atragantándose con sus palabras, Akihiko continuo, “No tenía expectativas, pero me ayudo. Tenías razón, es más fácil pensar con claridad cuando no estas sexualmente frustrado.” Le dio otro sorbo a su café. “Solo espero que fuera igual para ti.”

Esto era una trampa de la autoría del propio Hiroki. Hace siete años, ese había en buena parte el discurso que había usado para convencer a Akihiko en permitirse esa engañosa fantasía de juego de roles. Y para admitir la verdad ahora, para confesar lo mal que eso lo había dejado, tendría que revelar esos años de afecto no correspondido. “…Si,” le mintió.

“Deberíamos hacerlo de nuevo.”

Hiroki balbuceo y se dio vuelta. “¿Que?! ¡No! ¡Eso fue cosa de una sola ocasión!”

“¿Por qué tiene que ser así?” Akihiko pregunto.

“¿Que paso con el verdadero romántico que no podía dormir con alguien a menos que esta persona le importara?” Hiroki le desafió.

“Tú me importas,” fue la plana respuesta de Akihiko. “Y las cosas cambian, Hiroki. Tú lo sabes.” Él se levantó, camino hacia él, Hiroki retrocediendo hasta que el dio con el borde de la encimera. “Me sorprende que te alteres por eso.”

“¡N-No lo estoy! Solo es… inesperado.”

Hiroki nunca había sido idealista sobre las relaciones. Aunque el a duras penas era despreocupado con el sexo, él nunca había considerado el verdadero amor o algún compromiso como prerrequisito para algún encuentro. Él había tomado malas decisiones cuando se sentía solo, o cuando estaba excitado, o cuando estaba ebrio, pero en la fría y sobria luz del día, yacían acostones desacertados con Shinoda y Haruhiko que fueron interrumpidos tan rápido como había sido posible.

Pero ya había puesto el precedente, ¿Cierto? De que él estaba bien con el sexo casual. Y cuando Akihiko le pregunto si le había ayudado, él había dicho sí.

“Somos amigos,” Hiroki se estreso, un poco desesperadamente.

“Amigos con beneficios,” Akihiko le murmuro, y lo envolvió con sus brazos. Hiroki apenas pudo contener el estremecimiento.

Él estaba acorralado. Su cerebro había estado paralizado – las palabras no salían de su boca. Pero una parte de él registro que Akihiko era todo lo que le quedaba ahora. Todas las otras puertas se habían cerrado frente a el – y Hiroki se inmolaría a si mismo antes de cerrar esta última.

“…Yo supongo que está bien, entonces,” le murmuro. “sí También te está ayudando.”

Era solo sexo, se dijo a sí mismo, y no se creía una sola palabra.


……………….


Miyagi envolvió sus manos alrededor de su tercera taza de café de la mañana, su boca se estiro en un silencioso bostezo. Ese condenado Shinobu… él no tenía idea que el niño funcionaba durmiendo tan poco. Probablemente tomaba una siesta en la tarde cuando el aún estaba trabajando.

La puerta se abrió, dejando entrar una familiar nube tormentosa. “Buenos días Hiro-Kamijou~” Miyagi se corrigió a mitad del canturreo. El alegre saludo le sabia incomodo en su lengua, pero ya que su subordinado parecía estar determinado a retroceder el reloj, el solo podía actuar su parte. Con el tiempo lo que ahora es incómodo se volverá natural de nuevo.

Kamijou ojeó la habitación sentenciosamente. “¿No está el mocoso hoy?”

“Esta en el colegio.”

El cómo respondió al levantar la ceja era más elocuente que un ensayo de mil palabras. Miyagi encogió sus hombros se enfocó dramáticamente en su café. “Si debes saber, estamos manteniendo las cosas platónicamente por ahora.” El chico podría tener una edad legal, pero era apenas eso. El aún tenía escrúpulos.

“¿Sentarse en el regazo es lo que ahora los niños de colegio le llaman a tener algo platónico?”

Miyagi deposito su café en la mesa. “¿Lo vamos a hacer ahora? ¿Finalmente lo vamos a tratar?” Él había esperado a que pasara lo inevitable, pero la armadura de Kamijou se había mantenido firme, y la amabilidad profesional fue estrictamente impuesta. Esta había sido la primera vez en semanas que la conversación se había aventurado tan cerca del esperado ataque.

“Parece estar inusualmente ansioso por una pelea, Profesor,” Kamijou le respondió apaciblemente. “Solo estaba haciendo conversación.” Se sentó en su escritorio, sacando a la vista trabajos pendientes.

“Supongo que ser pasivo-agresivo es mejor de que has estado haciendo antes,” el meditó. “Aunque honestamente esperaba que tu gritaras y me lanzaras cosas.”

“Ha visto muchas telenovelas. Pero si le hace sentir mejor, yo podría ir de chismoso con el Decano.”

Miyagi le agito las manos rindiéndose. “¡No! ¡Así está bien! Ahahaha…”

Kamijou continuo diligenciando el formato, el sonido del bolígrafo contra el papel llenando los espacios vacíos entre las palabras. “En ese caso, podrías intentar ser más discreto si quieres mantener las cosas de bajo perfil.”

El no pudo evitar encogerse ante eso. “Cierto, cierto. Yo, ah, lo tendré en cuenta. Gracias por no decir nada al respecto.” Había sido una gran preocupación. Él era de planta, el Decano no podía despedirlo, pero fácilmente podía llevarse a Shinobu lejos y hacerles la vida difícil a ambos. Un ex un poco más vengativo podía causar muchos problemas ahí con muy poco esfuerzo.

“Ya no me concierne.” El tono de Kamijou era tan plano que podía presionar hojas secas. “Aunque a cambio, apreciaría si pudiera evitar involucrarse en mi vida en el futuro, Profesor.”

Así que de eso se trataba. “Todo lo que hice fue mencionar que la situación había sido algo difícil para ti últimamente, ¡Te lo juro!” Aunque el hecho de que había sido traído a colación al menos significaba que sus instintos habían sido acertados y el amigo Kamijou había actuado. “¿Por qué de todas formas me están culpando de eso?”

Como respuesta, Kamijou le deslizo sobre la mesa el formato que estaba completando. Miyagi la reviso y levanto una ceja. “¿Cambio de dirección de contacto?”

Kamijou se enfocó de nuevo en su escritorio, reuniendo los materiales para sus clases del día. “Es solo temporalmente. Yo espero encontrar un nuevo lugar donde vivir, pero está tomando más tiempo del planeado.”

“Aun así es mejor, ¿Cierto? Saliste de ese viejo lugar.” Ya no más ese apartamento oscuro lleno de espacios. “Para que son los amigos, apareciendo en los momentos difíciles.”

“Ya he tenido mi cuota de personas ‘apareciendo’ en mis asuntos.”

La amargura en su tono hizo que Miyagi pausara. Era mejor que la fría neutralidad de antes, pero no menos inquietante. Revisando a su compañero de trabajo con más detenimiento… El no parecía que hubiera mejorado mucho. El evidente manchón de maquillaje que permanecía bajo sus ojos, y el encorvamiento de sus hombros se veía casi turbador.

“¿Sucedió algo?”

“No pasa nada.” Una mentira, tan obvia como se veía.

“Kamijou…”

Su colega simplemente tomo las carpetas bajo el brazo. “Disculpe, Profesor, tengo clase.”

Notas finales:

Voy a subir los nuevos episodios y comentare ampliamente en el ultimo episodio. Esperemos a ver como termina esta historia... Nos leemos mas adelante!!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).