Región de Lanling. Torre de la Carpa Dorada.
La habitación que le habían dado era hermosa, con baño propio, elegante y de gran tamaño. Habían llegado ahí hacía unos días porque todo estaba casi listo para realizar la ceremonia de matrimonio, no era común que dos hombres o dos mujeres decidieran enlazar sus vidas y considerando la posición de ambos en sus clanes el evento estaba siendo mucho más grande de lo normal. Siguiendo la tradición Lan Zhan y él dormían en habitaciones separadas, tampoco podrían verse hasta el mismo día de la boda lo que era un fastidio pero respetaría las reglas por su Jade aunque la cama se sintiera tan fría sin él a su lado.
Jiang Yanli: Estas muy callado… ¿Estás nervioso por la ceremonia?
Wei Ying: Estoy aburrido… no puedo hacer nada interesante… ya deseo que esto termine y volver mi nueva rutina.
Jiang Yanli: Te escuchas como una persona madura… si A-Cheng te escuchara.
Wei Ying: Pensaría que algo anda mal conmigo.
Se quedaron viendo a través del espejo unos momentos para luego reírse. En cuanto su hermana terminó de cepillar sus cabellos se levantó y se acercaron en la mesa donde les esperaba una cesta roja. Había pasado la mañana con ella y unas costureras, ya habían terminado sus ropas ceremoniales pero necesitaban los últimos ajustes o al menos eso habían dicho mientras tuvo que quedarse de pie quieto como una estatua por un tiempo que le pareció interminable.
Jiang Yanli: A mí me ha gustado tenerte aquí - Comienza a sacar los tazones y cucharas, sirve la comida en uno de ellos y se la pasa a su hermano - Soy feliz de compartir contigo como antes.
Wei Ying: También me alegra compartir contigo tanto tiempo… - Toma el tazón con sopa de costilla y raíz de loto, se toma su tiempo para oler el tan familiar aroma y suspira - Ha pasado tanto tiempo… literalmente otra vida.
Sonríe con melancolía al recordar esos días, cuando el Clan Jiang no había sufrido la masacre que acabó con casi todos ellos y sus tíos seguían con vida, porque a pesar que la señora Yu le había traicionado no la odiaba, en parte su destino también había sido culpa suya en cierta manera. Antes de la muerte de Jiang Fengmian ella era estricta y seria con él pero nunca lastimó a ninguno de los tres.
Su cambio y todas las desgracias que ocurrieron posteriormente habían sido por el simple hecho de nacer. La mano de su hermana le hizo reaccionar, ella se veía preocupada así que palmeó esa mano con la suya para confortarla.
Wei Ying: Jiejie… estoy bien.
Jiang Yanli: Te quedaste callado viendo a la nada y en tus ojos puedo ver tristeza… vas a casarte con el hombre que amas… ¿Qué te puso triste?
Wei Ying: Pensaba en la masacre a nuestro Clan… siempre será algo que pese en mi corazón.
Jiang Yanli: Nada de lo que ocurrió fue tu culpa A-Xian… también mereces ser feliz.
Wei Ying: Soy consciente de eso… y a pesar de que a veces los recuerdos me invaden no voy a dejar que afecte mi futuro con Lan Zhan y mis hijos.
Jiang Yanli: Me alegra que pienses así… ahora come antes de que se enfríe.
Wei Ying: Gracias Jiejie - Toma el tazón y comienza a comer - Menos mal que Jiang Cheng no está aquí… comeré hasta reventar.
Su hermana se rió para luego servirse un poco de sopa, comenzaron a comer mientras su hermana le contaba todos los detalles que había planeado de la ceremonia que sería en pocos días. Habían ensayado los pasos de la misma a diario y ya los tenía memorizados pero ella insistía en seguir ensayando para que no cometiera errores.
Jiang Yanli: Normalmente tomaría alrededor de un año organizar todo… pero he recibido mucha ayuda.
Wei Ying: Me cuesta creer que sólo han pasado dos meses… no me explico cómo pudiste tener todo listo tan rápido.
Jiang Yanli: Es sencillo cuando tienes tantas personas ayudándote… son muchos los que desean verlos felices finalmente.
Sintió sus mejillas arder ante la sonrisa de su hermana, después de despertar le había tomado casi una semana el recuperarse del todo. Cuando finalmente pudo salir de la casa y recorrer los pasillos de Receso de las Nubes sintió calidez en el corazón al ver como era recibido por los demás miembros del Clan, todo parecía volver a la normalidad, como en el tiempo en que llegó a estudiar con sus hermanos.
Fue una gran sorpresa cuando el mismo Lan Qiren se le acercó un día y simplemente le pidió que instruyera a los juniors en las artes prácticas de la espada y el arco, habilidades en las que siempre había destacado y sólo Lan Wanji lograba igualarle. Seguía siendo un hombre callado con él pero podía ver en su mirada que de alguna manera le había aceptado en el Clan Lan y para él eso era más que suficiente.
Rápidamente se acostumbró a una rutina, algo que nunca creyó posible. Despertar en las mañanas con el ruido de sus hijos en la cocina mientras preparaban el desayuno y la calidez de Lan Zhan a su lado, dar clases a los juniors durante las tardes y compartir las noches con su Jade. Así habían pasado esos dos meses hasta que recibieron el mensaje de su hermana para que viajaran a Lanling porque todo estaba listo, sólo faltaban pequeños detalles como el de esa mañana con sus ropas.
Wei Ying: Estuvo delicioso jiejie - Puso el tazón vacío en la cesta, había terminado con cuatro de ellos, al parecer tenía más hambre de la que creía - No puedo comer un bocado más - Se acarició el plano vientre.
Jiang Yanli: No te había visto comer así desde que eras un adolescente - Se pone de pie y toma la cesta - Descansa un poco… volveré más tarde para que ensayemos de nuevo los pasos de la ceremonia.
Su hermana se acercó y le dio un abrazo que correspondió por largo rato, se sentía tan feliz y agradecido de volver a tener esos pequeños destellos de felicidad que a veces sentía miedo de que todo fuese un sueño. Y tal vez por ese miedo era que había comenzado a tener pesadillas a los pocos días de despertar, en estas revivía partes de su pasada vida, aquellos momentos que desearía poder olvidar.
No le dijo a nadie para no preocuparlos, creía que sería algo pasajero y sin importancia, pero descubrió una noche que Lan Zhan lo sabía, no había manera de ocultarle alguna cosa a su Jade. Una noche despertó particularmente agitado al recordar vívidamente el tiempo que estuvo encadenado después de revivir, fue esa noche cuando supo con certeza que su compañero sabía de su aflicción.
& FLASK BACK &
Se sentó en la cama respirando agitadamente, a pesar de su desnudez su cuerpo estaba bañado en sudor. Se giró para ver a Lan Zhan pero este seguía dormido, sonrió aliviado de no haberlo despertado, se levantó de la cama para tomar un poco de agua, era muy tarde pero sabía que no podría volver a dormir así que decidió salir a dar un paseo.
Después de vestirse salió por la ventana y sus pasos lo guiaron a la laguna, se sentó en el borde de la roca y tomando a Chenqing comenzó a tocar la melodía que le traía tranquilidad y buenos recuerdos. También el recostarse sobre el pecho de Lan Zhan para escuchar su corazón le brindaba paz pero esa noche le apeteció más salir y despejar su mente un poco.
Lan Zhan: Wei Ying.
Se detuvo y bajando los brazos giró la cabeza para mirar hacia el sendero, ahí estaba su Jade, con su mirada impasible y serena, sosteniendo una linterna.
Wei Ying: Lan Zhan - Se puso de pie - ¿Te desperté?
Lan Zhan: Ya estaba despierto.
Se sonrojó un poco porque había sido descubierto, sabía que debió hablarlo con él antes y seguramente estaría molesto aunque sus facciones no lo demostrasen en ese momento.
Wei Ying: Yo…
Lan Zhan: ¿Las tienes seguido?
Wei Ying: ¿Eh?
Lan Zhan: Las pesadillas.
Wei Ying: No… no realmente - Se acercó y le dio un beso en la mejilla - Sólo son pesadillas… no te preocupes.
Lan Zhan: Siempre tienes pesadillas…
Wei Ying: ¿Qué?
Lan Zhan: Yo - Dijo sonrojándose un poco - Escuché a tus hermanos una vez…
Wei Ying: Lan Zhan - Estaba realmente sorprendido - Siempre he tenido problemas de sueño… ya estoy acostumbrado no es importante.
Supo en ese instante que fue un error restarle importancia porque su compañero se veía bastante molesto ahora, el brillo en sus ojos era inconfundible. Le tomó de la mano y apoyó la frente en su pecho, el familiar aroma a sándalo fue tan relajante que por unos segundos se olvidó de todo.
Lan Zhan: Wei Ying.
Wei Ying: Lo siento… no quería preocuparte - Le mira - Algunas memorias de mi pasado regresan a veces cuando duermo… seguramente con el tiempo se desvanezcan.
Lan Zhan se quedó mirándolo, como analizando su expresión, estaba poniéndose algo nervioso ante la penetrante mirada hasta que de pronto dejó la lámpara en el suelo para abrazarlo y besarlo, no fue un abrazo o beso suave, los brazos alrededor de su cintura le apretaron fuerte y el beso le quitó el aliento. Recordando vívidamente esa noche cuando se dieron su primer beso, al separarse su respiración era agitada y no pudo evitar reír.
Wei Ying: ¿Lo recuerdas? - Le acarició la mejilla y el labio inferior con el pulgar - En una noche como esta me robaste un beso… fue primer beso ¿Sabías?
Lan Zhan: Yo…
No le gustó la mirada de arrepentimiento que puso, como si lamentara sus acciones, y no podía permitir que pensara así porque ese era uno de los recuerdos más hermosos de su vida pasada y no quería que su Jade se sintiera mal por ese bello momento.
Wei Ying: Lan Zhan - Le toma el rostro con ambas manos - Ese beso fue lo que nos trajo hasta donde estamos ahora…
Descendió las manos lentamente, acariciando sus mejillas, su cuello, sus hombros, recorriendo los brazos y finalmente tomando sus manos.
Lan Zhan: Wei Ying.
Wei Ying: Nunca lamentes las muestras de afecto que me hayas dado… tu amor es lo más bello que me ha podido pasar… mis hijos y tú son mi tesoro.
Sonrió al ver las mejillas teñidas de rojo de su Lan Zhan, a pesar de que últimamente hablaba más, cuando guardaba silencio igual podía saber lo que estaba pensando. Ahora al rememorar todo el camino recorrido sintió que tenía la necesidad de preguntar algo.
Wei Ying: Lan Zhan - Dudó un poco pero decidió continuar - Su hubieras tenido una manera de saber todo lo que íbamos a vivir… ¿Me habrías besado esa noche?
Lan Zhan: Si.
La respuesta fue inmediata, clara y su rostro no mostraba ninguna duda. Su visión se volvió borrosa por las lágrimas, el nudo en la garganta le impidió hablar por lo que sólo le abrazó desahogándose. Su Jade se limitó a acariciar su cabello y espalda, esperando tranquilamente a que se calmara, al separarse de su abrazo se limpió las lágrimas con la manga de su túnica.
Lan Zhan: Volvería a pasar por todo… pero.
Wei Ying: ¿Pero?
Lan Zhan: No cometería los mismos errores… no hubieras dejado mi lado nunca.
Wei Ying: Sin esos errores no tendríamos a Xie Yun… y él vale la pena cada lágrima que derramé… volvería a pasar por todo sólo por poder darte ese hijo.
Lan Zhan se inclinó y abrazándolo le dio un beso. No valía la pena seguir pensando en lo que no podían cambiar, ahora sólo tenían que pensar en el futuro que tendrían juntos. Sin decir nada más le tomó de la mano y tiró de él para acercarse a la orilla del agua.
Wei Ying: ¿Lan Zhan? - Se dejó guiar algo confundido - ¿Qué haces?
& FIN DEL FLASK BACK &
Jiang Yanli: A-Xian - Se separa y le acaricia la mejilla sacándolo de su recuerdos - Te vez cansado… duerme un poco.
Wei Ying: Lo haré… gracias jiejie.
Abrió la puerta y la vio marcharse por el amplio corredor, no cerró la puerta hasta que la vio doblar al esquina. Se quedó pensativo mientras tenía la vista fija en la cama sin muchas ganas de recostarse en ella, así que tomando a Chenqing cruzó la habitación y abriendo la ventana se sentó en el marco para mirar hacia el paisaje que tenía delante.
Llevando la Dizi a los labios comenzando a tocar la melodía que más recuerdos le traía, ya no sólo con su madre sino también con el hombre que llenaba su corazón, el cual extrañaba enormemente. Faltaban pocos días para que la boda se realizara y sólo tenía que resistir un poco más esas pesadillas.
Wei Ying: Lan Zhan…
Al terminar de tocar la melodía se quedó en silencio mirando hacia las montañas lejanas, la actividad de la ciudadela llegaba hasta sus oídos pero esa ala de habitaciones estaban alejadas así que sólo podía ver vegetación y el cielo despejado. Estuvo así por un rato hasta que escuchó el familiar sonido del aire cuando Hei Lang sobrevolaba, le vio llegar desde el horizonte y entrando por la ventana se quedó viendo su maestro.
Wei Ying: Reporte - Dijo sin dejar de mirar hacia el paisaje.
Hei Lang: “Todo está tranquilo… los lobos que ha dejado ahí no han reportado entradas del exterior y la cueva sigue tapada por el derrumbe… el sello que pusieron los líderes de los Clanes es fuerte.”
Wei Ying: Aún no debemos bajar la guardia… después de la boda iré a poner uno yo mismo para reforzar la seguridad.
Se bajó del marco y cerró la ventana, se dio la vuelta caminando hasta la cama y se sentó haciendo girar a Chenqing en su mano mientras que sus pensamientos volvían a los días pasados. Desde que despertó tuvo la preocupación de que algo se saliera de control en los Túmulos Funerarios ahora que Ming Hu no estaba con ellos y por eso había mandado a varios lobos que permanecieran en el lugar, custodiándolo sólo por si acaso.
Si bien la esencia de Hei Lang y sus Lobos nacieron de esas tierras maldecidas por una cruenta guerra. Si todo el poder de ese valle se descontrolara de nuevo sólo con ayuda del Sello del Tigre Estigio podría controlarlo.
Hei Lang: “Ming Hu apaciguó las energías con su poder antes de irse… hasta su regreso no creo que haya problemas.”
Wei Ying: De todas maneras no pienso bajar la guardia… no podemos confiarnos que no habrá otra persona con ambiciones de poder.
Hei Lang: “Luce cansado… ¿Siguen las pesadillas Gongxi?”
Wei Ying: Si… ahora las tengo cada noche… sin Lan Zhan a mi lado sólo han empeorado.
No tenía caso mentirle, Hei Lang lo conocía demasiado bien como para detectar cuando le ocultaba cosas. Lan Zhan le había preguntado sin descanso qué soñaba que lo ponía tan mal, así que en grandes rasgos le dijo que eran recuerdos de sus dos vidas, agregaba que no debía preocuparse porque eran muy esporádicas entre sí lo que era verdad en ese momento. Pero desde que había llegado a Lanling y comenzado a dormir sólo estas habían aumentado en frecuencia e intensidad.
Wei Ying: Tal parece que mi pasado no quiere dejarme ir.
Hei Lang: “No detecto ninguna energía extraña que las provoque.”
Wei Ying: No es por culpa de energías o maldiciones amigo mío…
Tal vez debería hablarlo con Wen Qing, sus memorias habían regresado del todo y ciertos eventos eran complicados de superar. La sanadora podría aconsejarle algo o darle algún medicamento que le ayudase.
Sintiéndose un poco cansado se recostó en la cama y trató de dormir un poco, con suerte no tendría pesadillas. Cerró los ojos, sintió como Hei Lang se subía a la cama y se echaba a sus pies, se quedó tratando de conciliar el sueño pero sin éxito y sus pensamientos volvieron sin poder evitarlo a esa noche en la laguna.
& FLASH BACK &
Wei Ying: ¿Lan Zhan? - Se dejó guiar algo confundido - ¿Qué haces?
De un tirón fue arrojado a la laguna cayendo de espaldas al agua, le había tomado con la guardia baja y cuando se puso de pie apartándose los cabellos de la cara apenas pudo hilar dos pensamientos juntos porque al enfocar la mirada en Lan Zhan este estaba a un paso de él en el agua.
Los brazos rodearon su cintura con firmeza y lo acercó estrechamente, por instinto sus manos se deslizaron por los hombros y le abrazó por el cuello, sus rostros tan cerca que podía sentir el calor de su aliento. El calor de su cuerpo se filtró por su ropas húmedas.
Wei Ying: Lan Zhan…
Sus mejillas ardieron al sentir como las manos de Lan Zhan le acariciaron el trasero, su rostro no se veía para nada perturbado. Lo empujó levemente hasta que se adentraron a una parte poco profunda, oculta tras unas rocas y comenzó a quitarle la túnica. Al tiempo que comenzó a darle besos por todo el rostro hasta llegar a sus labios los cuales tomó apasionadamente, su ropa pasó a ser un recuerdo así que también comenzó a desatar las de Lan Zhan.
Dejó libre sus labios para ayudarle con esa tarea y luego siguió su camino de besos y leves mordidas por su cuello y hombro. Sus pezones estaban duros por causa del frío y también por las atentas caricias que estaban recibiendo, su respiración agitada dejaba escapar gemidos cada vez más fuertes así que buscó la boca de Lan Zhan para silenciarlos con sus besos.
Los dedos de Lan Wanji le hicieron brincar por le sorpresa cuando uno de ellos comenzó a acariciar su entrada, esparciendo una sustancia que tenía un aroma dulce y que no tenía idea de donde había salido. Al tiempo que mordía su hombro ese dedo se hundió en su íntima cavidad, siento estirado suavemente para luego ser tomado.
Rodeó con sus piernas las caderas de su amante y este se adentró de una sola envestida. Sintió un poco de dolor porque había pasado un tiempo, pero su Jade le dio tiempo para adaptarse antes de comenzar a moverse despacio al principio pero acelerando cada vez más.
Wei Ying: ¡Ah!… ¡Lan Zhan! - Se mordió el labio para no gritar, no quería alertar a alguna persona que estuviera cerca de casualidad.
Lan Zhan: No - Le acarició el labio maltratado - Nadie vendrá… quiero escucharte.
Wei Ying: ¿Cómo estás tan seguro?
Lan Zhan: Antes no te hubiera importado… ¿Por qué ahora sí?
Wei Ying: Yo… no lo sé.
Frunció los labios, pensando que tenía razón. El Wei Ying de antes no le hubiera importado nada, pero había cambiado mucho desde ese tiempo, ya no era el chico alegre, travieso y despreocupado de antes. Ahora pensaba mucho más las cosas y parte de su inocencia nunca regresaría.
Lan Zhan Wei Ying - Fijó sus ojos en él - Te amé por como eras… y te amo como eres ahora.
No pudo decir nada porque sus palabras fueron ahogadas por un beso, una lágrima descendió por su mejilla, feliz por las palabras que su Jade le había dicho pero no pudo seguir pensando en nada porque las embestidas volvieron más intensas y apresuradas, entregándole toda la pasión que había acumulado por varios días.
Ya sin miedo a ser escuchados o importándole muy poco dejó libre sus gemidos y gritos. No sabía donde poner sus manos porque no quería lastimar sin querer las cicatrices de su espalda, Lan Zhan pareció leerle los pensamientos porque tomando su cinta lo ató, saliendo de él lo cargó y salieron a una pequeña área de suave hierva, de rodillas fue cubierto por el firme cuerpo de su amante y su interior volvió a ser llenado casi hasta el extremo.
Wei Ying: Lan… Zhaan…
Lan Zhan: Mi Wei Ying…
De rodillas sólo podría escuchar a Lan Zhan susurrando su nombre, sentir los besos y leves mordidas en sus hombros y espalda. Las manos de su Jade sostenerlo fuertemente de las caderas y atraerlo hacia su cuerpo con rápidas y profundas embestidas, con cada una llegando más profundo y llenándole tanto que no soportaría ese ritmo mucho tiempo.
Y con una última arremetida inclinó su rostro para buscar los dulces labios de Lan Zhan y ahogar el grito de su orgasmo con ese beso, llegando sin la necesidad de tocarse o que su Jade acariciara su miembro.
Como si fuera un rayo que le atravesara todo el cuerpo, sintió que no podía respirar a la vez que una conocida calidez le llenaba. Sus brazos cedieron pero Lan Zhan le sostuvo y terminó recostado sobre su pecho, aspirando el aroma a sándalo que le traía paz y seguridad, sintiendo el frío de la noche erizar su piel aún húmeda.
& FIN DEL FLASH BACK &
Wei Ying: “Genial… ahora voy a necesitar remojarme en agua fría…”
Esa había sido la última noche que habían estado juntos de esa manera, no eran muchas las oportunidades cuando su hogar estaba casi siempre lleno con sus hijos y sus compañeros, además a los pocos días llegó la carta de su hermana y partieron de inmediato a Lanling. Una vez que llegaron fueron puestos en áreas separadas porque no se verían hasta el día de la ceremonia.
Un ruido le llamó la atención así que se levantó de la cama, algo estaba golpeando levemente la ventana así que la abrió para ver entrar una mariposa mensajera que se posó suavemente en su mano. Sonrió al escuchar en su mente la hermosa voz de Lan Zhan.
“Wei Ying… te extraño… sólo el saber que pronto serás mi esposo me mantiene alejado por las noches para cumplir con la tradición.”
“¿Siguen las pesadillas?… si estás sufriendo iré a tu lado de inmediato sea tradición o no tú eres más importante para mí.”
“Sólo dilo”
“Te amo”
Wei Ying: Lan Zhan…
La mariposa desapareció después de entregar su mensaje así que fue al escritorio y creó un hombre de papel, aplicando un sello dejó impreso un mensaje y abriendo la puerta de su habitación lo dejó salir.
Wei Ying: Ve con Lan Zhan.
El pequeño hombre de papel se fue aprovechando la ligera brisa, sonrió al ver hacia el cielo y luego cerró la puerta, su hermana no tardaría en regresar y comenzaría la innecesaria práctica para la ceremonia, ya lo había memorizado todo y no había necesidad pero ella era una mujer muy obstinada.
& & &
Estaba tocando su Guqin para canalizar su energía y no pensar, sabía que Wei Ying tenía pesadillas, recuerdos de su pasado que no le dejaban descansar bien y ahora que estaban durmiendo por separado no podía vigilarlo, ayudarlo a despejar esos fantasmas cuando llegaban en su sueño.
Un movimiento captó su mirada y pudo ver un hombre de papel terminar de pasar por debajo de su puerta y acercarse a él, dio un salto y con pasos torpes comenzó a subir por la manga de su túnica hasta llegar a su hombro. Acercó la mano a su hombro y este se sentó en su palma, de inmediato se reprodujo un mensaje.
“También te extraño Lan Zhan… las noches son largas sin ti a mi lado pero ya falta poco tiempo y pronto podremos regresar a casa…”
“No te preocupes por las pesadillas… cada vez son menos intensas y puedo tolerarlas hasta que vuelva a verte.”
“Mi antiguo yo mandaría al diablo las tradiciones y te raptaría… pero esto es importante no sólo para nosotros…”
“Sueña conmigo que yo lo haré contigo… descansa.”
“Te amo”
El muñeco de papel desapareció después de entregar su mensaje, le agradó escuchar la voz de Wei Ying pero seguía preocupado por esas pesadillas. Podría estar mintiendo para no preocuparlo y casi se levanta para ir a su habitación, pero sabía que su compañero no le abriría la puerta.
Lan Zhan: “Wei Ying… tenías que ser tan obstinado.”
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Desde muy temprano su hermano Jiang Cheng le ayudó a vestirse y su hermana Jiang Yanli se encargó de ayudarle a peinarse y colocar los adornos finales los que incluían una cinta roja con el patrón del Clan Lan en hilos dorados.
Jiang Yanli: No estés nervioso A-Xian… lo harás muy bien.
Wei Ying: ¿Quién dijo que estoy nervioso? - Esas mariposas en el estómago no era nervios, al menos eso quería creer.
Jiag Yanli: No me engañas - Le pica la nariz - Sólo respira profundo.
Para finalizar puso sobre su cabeza un velo rojo que apenas le permitía ver, sus hermanos le tomaron de las manos y lo guiaron por los pasillos hasta llegar al salón principal de la Torre de la Carpa Dorada donde se realizaban las reuniones más importantes como las bodas.
Al llegar a la entrada principal pudo ver a Lan Zhan esperándole, se veía tan impresionante con sus ropas ceremoniales, el rojo resaltaba mucho su piel blanca y sus ojos dorados, era perfecto.
Su hermana se paró frente a ellos, colocó una cinta con un lazo en sus manos y el otro extremo en las manos de Lan Wanji, luego les hizo una reverencia e ingresó al salón. En cuanto se les indicó entraron, caminando lentamente recibiendo las sonrisas y reverencias de todos sus amigos, sus hijos y gente de los clanes. Al final les esperaba el nuevo Jefe Cultivador, elegido por votación entre los clanes Zewu Jun había sido escogido para liderar a los Clanes de Cultivo.
La ceremonia comenzó y más rápido de lo que se dio cuenta estaban en el Salón Ancestral de rodillas frente al altar. Lan Zhan le quitó el velo y acariciando su mejilla le sonrió dulcemente.
Encendieron incienso y realizaron las tres inclinaciones para dejar claro antes los antepasados que ahora eran una pareja casada, tendrían que hacer lo mismo en Muelle de Loto y Receso de las Nubes pero desde ahora serían considerados ante todos como una pareja casada.
Wei Ying: Supongo que ahora tendremos que ir al banquete.
Lan Zhan: Hn…
Wei Ying: Sé que no te gustan demasiado los eventos con muchas personas - Le toma de la mano y se ponen de pie - Por eso le pedí a mi hermana que estuvieran sólo lo familiares cercanos.
Lan Zhan: Gracias.
Se inclinó y le besó la frente, se giraron para salir del salón donde muchos les esperaban para dirigirse al salón donde estaba todo preparado para el banquete. Todo estaba bellamente decorado y una mesa al fondo especial para ellos tenía gran variedad de comidas.
En cuanto estuvieron frente a la mesa todos se pusieron de pie para brindar, sus hijos estaba cerca de ellos con tanta alegría y orgullo en sus miradas que sintió un nudo en la garganta. Lan Zhan le tomó de la mano para que prestara atención frente a ellos donde Lan Qiren decía unas palabras, ni siquiera le prestó atención a lo que estaba diciendo, sólo sintió que finalmente era aceptado y que ahora pertenecía por completo al Clan Gusu Lan.
Pero eso no era importante para él, lo que realmente le importaba ahora era que pertenecía a Lan Wanji y que este le pertenecía completamente. Ante todos ahora eran una pareja casada y el orgullo de sus Clanes.
Horas más tarde…
Estaban sentados en la gran mesa que les habían asignado, ya no podía comer o beber más y estaba algo cansado por todos los preparativos de la ceremonia, aparte que por sus pesadillas llevaba días sin poder dormir decentemente. Pero no veía cómo marcharse de la fiesta porque todos estaban pasando un buen momento y parte de él no quería que terminara.
Lan Zhan tomó su mano y al mirarle pudo notar que este se había dado cuenta de su agotamiento porque se veía algo preocupado, así que le sonrió negando levemente y volviendo su mirada al frente.
Lo que no se esperaba es que su Jade se pusiera de pie y tirando de su mano le hizo levantar, sin más rodeó la mesa y salieron del salón por uno de los accesos traseros que usaban los sirvientes para traer la comida y vino desde la cocina.
Fue guiado por los pasillos hasta llegar a un jardín bellamente decorado e iluminado para la ocasión, su hermana realmente se había esmerado para que toda la residencia estuviera ataviada para la boda, ella era la mejor.
Wei Ying: ¿A dónde vamos?
No le respondió nada lo cual era lo normal lo que le levantó la curiosidad porque la habitación preparada para su noche de bodas no estaba en la dirección que estaban tomando por lo que no tenía idea de qué pretendía su esposo.
Wei Ying: “Esposo” - Pensó fijando su mirada en el cielo estrellado - “Todavía me parece una ilusión que todo esto esté pasando.”
Al mirar de reojo a Lan Zhan su corazón se aceleró, después de todo lo que habían pasado finalmente podían relajarse y preocuparse por ellos mismos, en vivir su amor sin obstáculos a cada paso, algo que había perdido la esperanza de tener.
De pronto se detuvieron y mirando al rededor se dio cuenta del lugar al que habían llegado, estaba tranquilo y no había nadie alrededor como si las personas al verlos deliberadamente se marcharan para darles intimidad.
Wei Ying: Lan Zhan… ¿Por qué me has traído aquí?
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A pesar de que habían comenzado desde muy temprano con los preparativos finales y la ceremonia ya la noche había caído. La fiesta era muy animada pero no se sentía incómodo porque estaba rodeado de familiares y amigos cercanos, verlos tan felices celebrando por su felicidad era algo que llenaba de calidez el corazón.
Miró a su ahora esposo el cual bebía un poco de vino, entonces notó lo cansado que parecía, tomó su mano y este le miró, sus ojos plateados reconociendo que se había dado cuenta de su agotamiento.
Wei Ying le sonrió y con un gesto le comunicó que estaba bien para luego voltear a ver hacia el frente, pero no le engañaba, sabía que en días seguramente no había dormido casi nada por culpa de las pesadillas así que se puso de pie y tirando de él salieron del salón, la fiesta podía continuar sin ellos porque ni siquiera notaron que se marchaban y si lo hicieron no les importaba lo que estaba bien para él.
Caminaron por los pasillos decorados y los sirvientes despejaron al zona por donde pasaban para darles su espacio, quería llevar a Wei Ying a la habitación para que durmiera pero antes de eso había algo que quería hacer primero.
Wei Ying: ¿A dónde vamos?
No le dijo nada hasta llegar a uno de los jardines principales del área donde se ubicaban las habitaciones familiares, caminaron hasta un puente de madera que servía de paso por un estanque con flores de loto. Las estrellas brillaban como joyas preciosas y su brillo se reflejaba en la hermosa mirada de Wei Ying quien observaba el paisaje aún algo confundido.
Wei Ying: Lan Zhan… ¿Por qué me has traído aquí?
Se quedó ahí en silencio un tiempo, simplemente tomados de la mano, sin hablar y observando el hermoso paisaje.
Wei Ying: Lan Zhan - Susurró sin poder contener más su curiosa mente - ¿Realmente deberíamos estar aquí? - Le mira con esa calidez en los ojos que le hacía arder por dentro - Quiero decir… no es muy educado dejar a nuestros invitados solos.
Lan Zhan le toma de ambas manos y se colocan frente a frente. Finalmente estaban solos, habían sido días de preparación para la ceremonia y estar separados aunque fuera por ese corto tiempo fue una tortura, después de estar dieciséis años alejados no quería pasar ni un sólo día sin Wei Ying a su lado. Pero la espera había terminado, ahora podía estar junto a su esposo por el resto de su existencia.
Aún no podía explicarse cómo podía sentir tanto amor por alguien que no fueran sus padres, hermano o su tío. Cuando lo conoció pensó que era un maleducado sin remedio aunque reconoció su habilidad en el cultivo esa misma noche, con la convivencia comenzó a sentirse atraído por esa sonrisa y mirada pícaras, por esa inagotable energía que parecía iluminar la estancia a donde entrara.
Durante mucho tiempo se negó a sí mismo esos sentimientos y por culpa de sus dudas su luz se había apagado, aunque parte de ese brillo había regresado no tenía la misma intensidad que en esos días. Pero dedicaría todo el tiempo que pudiera en hacer que ese brillo volviera del todo a sus ojos, ambos habían cambiado pero su misión sería hacerlo feliz, escuchar su risa todos los días.
Lan Zhan: Wei Ying.
Wei Ying: ¿Si?
Le miró con ojos brillantes y le regaló esa sonrisa que le daba calidez, estaba esperando pacientemente por sus palabras.
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Soltó una de sus manos para acariciar el pecho de Lan Zhan, apreciando los detalles bordados con hilos de oro en las ropas ceremoniales de color rojo carmesí. Parecía que su Jade quería decirle algo pero no eran sencillas las palabras así que inició una conversación para hacerle las cosas más sencillas.
Wei Ying: Te vez muy guapo de rojo - Se ríe - Cuando te conocí pensé que era extraño… ya sabes… vestir de blanco… - Sube la mano y le acaricia la mejilla - Pero ahora a pesar de que te vez muy bien… me gusta más verte de blanco.
La brisa se intensifica haciendo que el cabello de ambos ondee y los jardines parecen cobrar vida con el danzante follaje y sonidos de pequeñas formas de la vida nocturna. A lo lejos se llegaba a escuchar la música y a la gente feliz que seguían celebrando sin enterarse aparentemente de su ausencia lo que le provocó reír desenfadadamente.
Wei Ying: Mañana muchos van a tener una resaca horrible… nadie tiene una resistencia al vino como la mía - Dice pavoneándose con orgullo y sonriendo de oreja a oreja.
Lan Zhan: Hm…
Wei Ying: Ahora - Susurró con algo de coquetería - ¿Cuáles son las intenciones de traerme a este apartado lugar Hanguang Jun?
Sólo buscaba molestarlo un poco, tratando de hacer aparecer ese leve tono rosa en sus mejillas, mismo que pocas veces había logrado ver, casi siempre cuando estaban entregándose y dejándose llevar por la pasión. Pero su Jade parecía más serio de lo normal, comenzó a preocuparse al ver que seguía en silencio.
Wei Ying: ¿Lan Zhan? ¿Qué ocurre?
Le acarició la mejilla y se inclinó para darle un beso suave y lento, que le provocaron mariposas en el estómago. Finalmente después de lo que le pareció una eternidad habló.
Lan Zhan: Tus pesadillas… - Acaricia su labio inferior con su pulgar - No has dormido en días…
Wei Ying: ¿Eh?
Lan Zhan: Quiero que me permitas sondear tu mente…
Wei Ying: ¿Quieres entrar en mi mente? - Lan Zhan asintió.
Lan Zhan: Si… esas pesadillas no pueden continuar.
Wei Ying: Estoy bien… ya te dije que no son tan graves.
Lan Zhan: ¿No confías en mí?
Sabía que era manipulador pero sabía que su Wei Ying terminaría cediendo si insistía un poco, finalmente le vio suspirar y mirarle sonriendo.
Wei Ying: ¡Claro que confío en ti!
Lan Zhan: Entonces cierra los ojos… abre tu mente y concéntrate en mí.
Cerró los ojos y respiró profundo, Lan Zhan colocó sus dedos índice y anular en su frente y pudo sentir la energía espiritual comenzar a rodear su cuerpo. Como le dijo se concentró en esa energía para permitirle a su Jade entrar a la parte más profunda de su mente y con suerte encontrar el verdadero motivo por el que esas vívidas pesadillas no dejaban de torturarle.
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Wei Ying cerró sus ojos confiando enteramente en él, observó su hermoso rostro levemente empañado por las ojeras de días sin descansar adecuadamente. Tocando su frente comenzó a utilizar su energía, su idea era poder ver dentro de su mente para descubrir el motivo de esas pesadillas y poder resolverlo.
No le tomó mucho tiempo en adentrar su mente en la de su compañero, era sencillo para ambos al tener una relación tan cercana y confianza plena. Al estar dentro pudo finalmente ver la forma de esas pesadillas.
Cuando abrió los ojos nuevamente estaba dentro de un campo abierto, era de noche pero su energía le había resplandecer lo suficiente para ver alrededor. No reconocía el dónde estaba así que era un lugar creado por el subconsciente y no un recuerdo de algo real. Sacó un pergamino y al activarlo una llama azul apareció en la punta del papel sin llegar a quemarlo.
Lan Zhan: Búscalo.
El pergamino se convirtió en una mariposa celeste y comenzó a avanzar por el campo, guiándole hasta llegar a una choza de madera la cual se veía en muy malas condiciones, abandonada por muchos años la madera parecía podrida y las ventanas no tenían cortinas o maderas para protegerlas, el monte había crecido alto a su alrededor.
La mariposa avanzó hasta atravesar la puerta de madera, al acercarse e intentar abrirla esta cedió y calló al suelo con un ruido estridente. Dentro de la propiedad no había nada además de polvo, muebles rotos y unos juguetes hechos a mano sucios. Vio a la mariposa llegar a una vela en el piso, la encendió para luego desaparecer, dejándole ver con claridad a la persona que estaba sentada en el piso.
Le tomó un momento reconocerlo porque no era más que un niño, con sus cabellos enmarañados y ropas sucias.
Lan Zhan: Wei Ying…
El niño levantó la mirada, esos grandes ojos grises le miraron con sorpresa y miedo. Se arrodilló sin acercarse demasiado, su alta figura podía ser intimidar a un niño pequeño y necesitaba que confiara en él como la versión adulta ya lo hacía.
Lan Zhan: ¿Eres Wei Ying no es así?
Wei Ying: ¿Quién eres? - Se puso de pie y retrocedió un par de pasos - Mi mamá me ha dicho que no hable con extraños.
Lan Zhan: Mi nombre es Lan Wanji… no tengas miedo.
Wei Ying: Mis padres no están… salieron de cacería nocturna… volverán en cualquier momento.
Los ojos del pequeño se llenaron de lágrimas y tuvo que reunir toda su fuerza para mantenerse lo mismo y no hacer lo mismo, conocía el pasado de su esposo y sabía que esta representación en su mente era de la época en que perdió a sus padres y vivió en las calles.
Lan Zhan: No llores - Estiró la mano - Ven conmigo… no tengas miedo.
Podía ver el miedo y la duda en sus ojos, tragó al sentir el nudo en la garganta pero esperó pacientemente a que confiara en su energía, mantuvo una presencia serena para inspirarle confianza.
Wei Ying: No… no quiero dejar mi casa… ¡Mis padres regresarán!
Las lágrimas le partieron el corazón, el pequeño Wei Ying se alejó y corrió para esconderse bajo una maltrecha cama. Al asomarse bajo esta lo vio acostado y echo un puño como si quisiera hacerse invisible para el que consideraba un intruso.
“¿Por qué?”
Se puso de pie al escuchar la voz de Wei Ying atrás de él, esta parecía venir de todas partes pero no lo veía.
Lan Zhan: ¿Wei Ying?
“¿Por qué no me odias?”
Lan Zhan: ¿Por qué debería de odiarte?
“Mi existencia es una maldición… mis padres murieron… la familia que me acogió fue casi arrasada por completo… casi mueres por protegerme… nuestro hijo estuvo a punto de morir al nacer por causa de lo que soy…”
“¿Por qué sigues a mi lado?… ¿Por qué no me odias?”
¿Ese era su miedo más profundo? ¿Por ese motivo las pesadillas no lo dejaban tranquilo?
Ahora que tenía las preguntas sabía que sus palabras debían ser las indicadas para acabar con esas dudas, para que las pesadillas desaparecieran tenía que terminar con ese profundo miedo.
Lan Zhan: Jamás podría odiarte…
Wei Ying: ¿Por qué?
Al girarse la casa había desaparecido, frente a él estaba un adulto Wei Ying, uno que estaba usando las mismas ropas negras que llevaba la noche en que lo conoció. Se abrazaba a sí mismo como si tratara de calentar su cuerpo del frío viento que comenzó a soplar.
Wei Ying: Muchos me odiaron… muchos murieron por mi culpa…
Lan Zhan: Wei Ying - Le alcanzó y lo abrazó fuertemente, su cuerpo estaba frío y temblaba incontrolablemente - Te amo… nada podría hacer que te odie…
Wei Ying: ¡No te creo! - Lo empujó y se alejó unos pasos - ¡Nadie es tan bueno! ¡Nadie es tan noble!
Imágenes del pasado se mostraron como flashes en su cabeza, los gritos y llantos de un pequeño abandonado en las calles mientras huía de los perros callejeros. Imágenes de personas que sus padres habían ayudado y que ahora le daban la espalda porque nadie quería hacerse cargo de un hijo ajeno.
Lan Zhan: Wei Ying… ¿Jiang Fengmian no era bueno?
Wei Ying: Shushu… él era bueno… y por eso lo mataron… por protegerme.
Se acercó de nuevo y tomó el rostro de Wei Ying entre sus manos, sus mejillas estaban bañadas en lágrimas.
Lan Zhan: Él te amó como un hijo… tú estuviste dispuesto a dar la vida para salvar a Xie Yun… Jiang Fengmian dio la suya por proteger a sus tres hijos… te amaba tanto como tú amas a Xie Yun y Sizhui… ¿Acaso has hecho diferencias entre ellos?
Wei Ying: No… para mí los dos son mis hijos…
Lan Zhan: Y jamás podría odiarte Wei Ying… sin importar lo que hagas.
Wei Ying: ¿Por qué?
Le seca las lágrimas y tomándole por la cintura lo acerca para darle un beso en la frente.
Lan Zhan: Creí que te había perdido para siempre - Le toma de la barbilla para mirarse íntimamente a los ojos - Cuando regresaste a mí todo quedó atrás… pero eso no es todo… hay algo más.
Wei Wuxian: ¿Y… qué es?
Lan Zhan: Nací para ello… - Le da un ligero beso - Yo nací para protegerte - Susurra acortando la distancia y tomando sus labios en un beso demandante.
Wei Ying gimió por la sorpresa, lo que le permitió a Lan Zhan besarlo profundamente y explorarlo con su lengua. Poco a poco le sintió relajarse, rodeando su cuello con los brazos y correspondiendo el beso.
Al separarse de esos labios limpió el rastro de saliva de su labio inferior. Sus ojos grises brillaban y sus mejillas estaban rojas como manzanas maduras.
Lan Zhan: Te amo… todos te aman Wei Ying… eres la luz de nuestras vidas… nunca olvides eso…
En respuesta le regaló la más hermosa de las sonrisas, al mismo tiempo que la oscuridad desaparecía y la luz de una soleada mañana iluminaba el cielo. La cálida energía que lo rodeaba le dijo que todo estaba bien ahora y cerrando los ojos salió de la mente de su esposo.
Al volver a abrirlos Wei Ying tenía los suyos todavía cerrados y sus mejillas estaban húmedas por las lágrimas, respiraba agitadamente mientras que sostenía fuertemente la parte superior de sus ropas ceremoniales.
Lan Zhan: Wei Ying - Tomó sus manos y las llevó los labios para besar sus nudillos.
Wei Ying: ¿Realmente ese era mi miedo más profundo? - Abrió los ojos y le miró - Y lo que me dijiste…
Lan Zhan: Es lo que siento en el fondo de mi corazón…
Wei Ying: Lan Zhan - Le abraza, apoyando la frente en su pecho - Agradezco al destino que te pusiera en mi camino… no sé que hubiera hecho sin ti.
Besó su cabeza y se quedaron así, abrazados, por un rato más. Hasta que la noche comenzó a enfriarse un poco así que tomándole de las manos lo guió para salir del jardín y tomar rumbo a su habitación nupcial.
Al llegar frente a la puerta la abrió y se giró para cargar a Wei Ying el cual se rió, lo llevó hasta la cama. Mientras regresaba para cerrar la puerta su esposo se puso de pie para servir el vino que estaba junto a la cama en una mesa auxiliar, al acercarse le extendió una de las copas.
Wei Ying: Le dije a mi hermana que buscara el vino más suave que pudiera encontrar… espero que te guste.
Tomando la copa la acercó a los labios de Wei Ying, darse mutuamente del vino era parte de la tradición aunque para ese momento no era que le importara en realidad. Bebieron y luego de dejar las copas en la mesa se dispuso a desvestir las múltiples capas de la ropa ceremonial. Cuando sólo quedaban las túnicas inferiores le tomó de la mano y al acostarse lo abrazó por la cintura, besando sus labios, sintiendo el dulzor del vino en ellos.
Wei Ying: Lan Zhan… yo.
Lan Zhan: Duerme… estás cansado.
Wei Ying: Pero.
Lan Zhan: Ya habrán otras noches… ahora me lo que más deseo ahora es que descanses - Besó sus labios - Te amo…
Wei Ying: También te amo.
Su esposo se acercó lo más que pudo a su cuerpo, le tomó de la cintura para acercarlo y apenas cerró los ojos se quedó profundamente dormido. Sonrió al verlo, su semblante tan tranquilo le decía que finalmente Wei Ying podría descansar sin pesadillas que le robaran la tranquilidad.
Lan Zhan: Dulces sueños… mi Wei Ying.
& & &
Tierras cercanas a la ciudad de Moling.
Seis años después.
La carreta avanzaba a buen ritmo, en pocos minutos vería el familiar camino que conducía a la casa de sus padres, el sol brillaba y una suave brisa ayudaba a que el calor no se sintiera demasiado, era un buen lugar para vivir fuera de Receso de las Nubes. La cortina se movió y su esposo salió para sentarse a su lado, recibió un beso en la mejilla acompañado de una sonrisa hermosa.
Xie Yun: ¿Siguen dormidos?
Jiang Chanseng: Si… estaban tan emocionados la noche anterior que no durmieron nada…
Xie Yun: Muqin estará feliz de verlos… espero que se despierten porque estamos por llegar.
Jiang Chanseng: Todavía no entiendo porqué decidieron irse a vivir en medio de la nada… ¿No sería más sencillo si vivieran en Gusu?
Xie Yun: Eso le pregunté a Die la última vez que nos visitaron…
Jiang Chanseng: ¿Y qué te dijo?
Xie Yun: Estuvo buscando durante semanas la tierra perfecta para ellos… quería un lugar tranquilo y que les permitiera moverse entre los clanes con más libertad… para poder visitarlos o que los visiten cuando quisieran.
Jiang Chanseng: Eso tiene sentido - Mira el camino comenzar a curvarse por lo que se gira y abre la cortina - A-Yu… A-Ying… despierten… ya vamos a llegar.
Se detuvo frente al puente de madera que separaba el río de la propiedad de sus padres, del otro lado había un gran jardín con sembrado de varios vegetales y al fondo una hermosa casa de dos plantas. La cortina volvió a moverse y dos pequeños de siete años asomaron sus cabezas.
Eran gemelos idénticos y sólo los podían diferenciar gracias a sus niveles de energía, A-Ying tenía demasiada energía mientras que A-Yu era muy tranquilo. Después de que sus padres se marcharon a vivir por separado su hogar se había sentido muy vacío, incluso después de casarse con Chanseng sentía que a pesar de su felicidad algo les hacía falta, y supo qué era ese algo cuando llegó a una villa por un pedido de auxilio que había recibido Zewu Jun.
Habían llegado demasiado tarde, había sido arrasada por bandidos y no había nadie con vida, comenzaron a enterrar a los muertos y estaban a punto de irse cuando un ruido llamó su atención. De un establo vio salir a dos pequeños tomados de la mano que no parecían tener más de tres años.
En el momento en que los sostuvo en sus brazos supo que no los dejaría ir, y cuando regresó a casa con ellos Chanseng los recibió de igual manera, sin preguntarle siquiera supo que pensaban igual, esos niños necesitaban unos padres y ellos eran los elegidos por el destino. Nadie objetó y su Muqin se puso tan feliz que lloró, sabía que durante un tiempo vivió en las calles y que era algo delicado para él por lo que simplemente dejó que los consintiera lo que quisiera.
Ahora estaban frente a la casa de sus padres para darles una corta visita antes de continuar hacia Muelle de Loto para que los niños asistieran a un festival infantil. Se bajó y ayudó a sus pequeños a bajar, tomó a Chanseng de la mano y los niños caminaban por delante tomados de la mano también.
Cuando iban a mitad del puente la puerta de la casa se abrió de golpe y una niña de larga cabellera rojo fuego y ojos dorados salió corriendo hacia ellos. Sonrió al verla y como se lanzaba a abrazar a sus hijos.
Xie Yun: Buenos días Mimi.
La pequeña le miró con ojos feroces y se acercó para darle una patada que apenas esquivó, riéndose se inclinó y la cargó en brazos.
Xie Yun: No te enojes… te digo Mimi de cariño.
- No me llamo Mimi… soy Ming Hu…
El puchero y brazos cruzados de su hermana pequeña eran adorables, le dio un beso a su regordeta mejilla y la bajó al suelo.
Xie Yun: Entiendo Ming Hu… ¿Muqin está despierto?
Eso pareció calmar a la pequeña fiera de cinco años porque sonrió y tomando a sus hijos de las manos los comenzó a guiar hacia la casa.
Jiang Chanseng: A veces olvido que dentro de ella hay una tigresa…
Xie Yun: Aún es muy joven así que le cuesta controlar sus emociones… pero Die se encargará de controlar ese carácter.
Siguieron avanzando por el camino mientras pensaba en la sorpresa que se llevaron todos al enterarse de que su Muqin estaba esperando de nuevo, casi desde el inicio les dijo que sería una niña, que era la manera en que Ming Hu había decidido regresar al mundo para ser la guardiana de la justicia, independiente de todos y sin tener que obedecer a la figura del Yiling Laozu.
Ambos había conseguido la libertad que tanto anhelaban.
Jiang Chanseng: Creo que tú Muqin se ha despertado.
Sonrió al escuchar las risas desde dentro de la casa, su padre les abrió la puerta y al entrar pudo ver a sus niños en el suelo mientras que su Muqin jugaba con ellos junto a la pequeña pelirroja.
Su padre se acercó al lado de su Muqing y le acercó un plato con dulces para los pequeños. La calidez y amor en sus miradas era tan grande, finalmente habían conseguido la tranquilidad y felicidad que merecían después de años de sufrimiento.
Tomando a su esposo por la cintura se acercaron para unirse al juego y para asegurarse que sus hijos no se excedieran con el azúcar porque aún les esperaba un largo viaje hasta Yunmeng. Llevarían a su hermanita a su primer festival y le emocionaba mucho la idea de mostrarle un poco de las costumbres de uno de los clanes a los que pertenecía por relación familiar.
Wei Ying: Pensé que Sizhui vendría con ustedes…
Xie Yun: Ese era el plan… pero recibió un mensaje de Jin Ling para pasar unas semanas en Lanling así que partió hacia ahí antes de que saliéramos…
Jiang Chanseng: Nos retrasamos porque los niños se quedaron dormidos…
A-Yu: A-Ying no paraba de saltar en la cama… no me dejó dormir.
A-Ying: Estaba muy emocionado…
Sonrió al escuchar a los pequeños y siguió con la conversación con él.
Wei Ying: Así que nuestro Sizhui prefirió ir a Lanling que a unas vacaciones familiares - Miró a Lan Zhan y se rió - Bueno parece que pronto tendremos que comenzar a preparar otra boda… aunque pensándolo bien mi hermana será la que haga todo.
Xie Yun: Jamás pensaría que ese niño terminaría siendo realmente serio con Sizhui… ha cambiado tanto que apenas lo reconozco.
Jiang Chanseng: El amor suele hacer eso… nos hace mejores personas.
Xie Yun: Eso es verdad.
Se inclinó para darle un beso lo que hizo que su esposo se pusiera rojo como tomate lo que provocó que los niños y su Muqin se rieran. Su familia había crecido y estaba regada por varios clanes, pero estaba llena de amor como siempre deseó.
En especial por su padre, durante años vio el dolor de la ausencia del amor de su vida, pero ahora que lo tenía de regreso su semblante era totalmente distinto, la paz en su mirada y amor que irradiaban sus ojos, era todo lo que quería y finalmente lo había conseguido, su familia estaba completa de nuevo.
& & &
Wei Ying: Te portas bien Ming Hu - Le ajusta bien el abrigo y besa su frente - Nunca sueltes la mano de tu hermano mayor ni corras sola entre la gente.
Ming Hu: Si - Le dio un abrazo y beso en la mejilla - No tengas miedo mama…
Sonrió y vio como se acercaba a Lan Zhan el cual la cargó para que le abrazara y le diera un beso también. Se acercó al lado de su esposo y este le rodeó la cintura con un brazo mientras los miraban partir.
Ming Hu: ¡Nos vemos en dos semanas!
Xie Yun: ¡Te mandaré una mariposa mensajera en cuanto lleguemos a Muelle del Loto!
Wei Ying: ¡Que tengan bien viaje!
Los vio subir a la carreta con ayuda de Xie Yun y alejarse por el camino. Era la primera vez que estaría sin su pequeña a su lado y aunque estaba un poco nervioso no dudaba que su hijo la cuidaría bien. Cuando la carreta se perdió de su vista regresaron a la casa y Lan Zhan cerró la puerta.
Se puso de rodillas para recoger los juguetes que habían dejado en una cesta de mimbre, recordando con una sonrisa el momento en que se enteraron de que serían padres nuevamente.
& FLASH BACK &
Una semana más tarde viajaron hacia la región de Yunmeng con su hermano y sus familias. Las pesadillas habían desaparecido pero aún así disfrutaba de las atenciones que su Jade le prodigaba constantemente.
La primera noche no habían hecho más que dormir y al día siguiente despertó a medio día con mucho apetito. Pero las noches posteriores durmió muy poco porque su Lan Wanji lo mantenía despierto de varias deliciosas maneras.
Cuando finalmente llegaron a Muelle de Loto estaba más cansado de lo normal así que después de refrescarse tomó una pequeña siesta. Al despertar Lan Zhan estaba preparando un poco de té, le miró desde la cama como se movía de manera tan tranquila y elegante lo que era un total contraste con el otro lado de su esposo, ese lado descontrolado que le encantaba sacar a la luz con provocaciones.
Lan Zhan: ¿Tienes hambre? - Preguntó sin mirarlo.
Wei Ying: No mucha - Se sentó en la cama y se estiró - Estaba cansado más que hambriento - Se puso de pie y se acercó para darle un beso - Me prepararé para ir al Salón Ancestral…
Lan Zhan: Hn - Asintió - El baño está listo.
Wei Ying: Gracias…
Después de prepararse fueron al Salón Ancestral para hacer las tres reverencias para honrar a los ancestros de la familia que le había dado un hogar, era algo especial que no podía esperar para él porque sobre todo quería presentarle a su tío Jiang Fengmian a Lan Zhan como su esposo.
Frente al altar donde se quemaba el incienso sintió que sus ojos se aguaban al pensar en él, en cómo le hubiera gustado tenerlo ahí para que compartiera su felicidad. Juntó sus manos elevando un agradecimiento por todo. Hacer las tres inclinaciones junto con su Jade fue mucho más emocional de lo que hubiera pensado.
Lan Zhan: Wei Ying - Le miraba algo preocupado al verlo llorando.
Wei Ying: Estoy bien… sólo hubiera deseado que mi Shushu estuviera vivo… ver su expresión de alegría cuando nos casamos - Se secó las lágrimas.
Lan Zhan le tomó de la mano y sólo eso necesitó para sonreír. Terminaron sus agradecimientos y le dio una última mirada al altar antes de salir. Pero estando afuera sintió de pronto que su visión se volvía borrosa, se sintió mareado y tuvo que sostenerse de la pared para no caer. Su esposo le sujetó de inmediato y pudo ver en su rostro la preocupación.
Lan Zhan: Wei Ying… estás pálido - Le tocó la frente.
Wei Ying: No lo sé… me sentí mareado de pronto.
Su visión se volvió borrosa como si mirara con los ojos entrecerrados por un túnel, sólo escuchó a su Jade llamarle alarmado antes de perder la conciencia.
Cuando recobró la conciencia estaba en cama y Wen Qing le estaba tomando el pulso, su otra mano la sostenía un preocupado Lan Wanji. Sonrió y apretó su mano para darle algo de tranquilidad.
Wei Ying: ¿Me desmayé?
Wen Qing: Si - Terminó de examinarle y buscó en su bolsa médica una pequeña botella de la que sacó dos pastillas blancas - Tómalas…
Lan Zhan le ayudó a levantarse y apoyar la espalda en el respaldar de la cama, tomó las pastillas y luego tomó un poco de agua. Se quedó en silencio esperando lo que le diría su amiga la cual se tomó su tiempo para responder lo que le puso algo nervioso.
Wen Qing: Tienes un poco de debilidad - Tomó la botella y se la dio a Lan Zhan - Debe tomar dos después de cada comida… también tienes que alimentarte mejor así que te escribiré una dieta que debes seguir.
Wei Ying: ¿Debilidad?
Wen Qing: Tu cuerpo no está recibiendo los nutrientes necesarios… tienes que alimentarte mejor.
Wei Ying: ¿Y? - Había algo más, podía verlo en sus ojos - Estás omitiendo algo.
La sonrisa que puso lo confundió más, si eran malas noticias no estaría tan aparentemente feliz.
Wen Qing: Van a ser padres…
Wei Ying: ¿Eh?
Tenía que escucharlo de nuevo, podría no haber escuchado bien. Lan Zhan le abrazó y besó un costado de la cabeza, una de sus manos descansó en su vientre así que no necesitó que volviera decirlo.
Wei Ying: ¿En serio?
Wen Qing: Si - Tomó su bolsa médica y se puso de pie - Y todo se ve normal… esta vez supe qué buscar y puedo sentir dos núcleos dorados dentro de tu cuerpo.
Uniendo su mano a la de Lan Zhan en su vientre dejó salir sus lágrimas, cuando su cuerpo fue reconstruido un nuevo núcleo dorado había sido implantado dentro de él, alguna de esas personas sacrificadas había sido un cultivador y aunque no tenía tanta fuerza como en su anterior vida con ayuda de entrenamiento podría fortalecerlo.
Wen Qing: Descansa… le diré a mi hermano que te traiga algo de comer.
Lan Zhan: Gracias.
Su Jade despidió de la habitación a la Sanadora y cerró la puerta, de inmediato regresó a su lado y se sentó en la cama tomando su mano y besándola. Los ojos dorados de su esposo estaban llenos de calidez, sonreía y se veía tan feliz que sin poder evitarlo siguió llorando.
Wei Ying: Malditas hormonas - Susurró mientras secaba sus nuevas lágrimas.
Se quedó viendo su plano vientre, no podía esperar para darle la noticia a todos pero en especial a sus hijos, ya quería ver sus caras. Y casi como un rayo se dio cuenta de lo que realmente había pasado.
Wei Ying: Ming Hu… - Lan Zhan le miró sin entender - Cuando estaba inconsciente dijiste que ella prometió regresar de alguna manera… pero jamás me imaginé que lo haría así.
Lan Zhan se sentó en la cama a su lado y le abrazó, recostó le cabeza en su hombro y se dejó mimar por las caricias en su cuello, hombro y antebrazo. Permanecieron en silencio un buen rato, simplemente procesando la noticia que acababan de recibir.
Wei Ying: Cuando Xie Yun estaba naciendo en lo único que podía pensar era que no estabas a mi lado… en lo mucho que deseaba que estuvieras conmigo… me sentí muy sólo en ese momento.
Lan Zhan: Wei Ying.
Sonriendo levantó la cabeza y le dio un beso.
Wei Ying: Esta vez estarás a mi lado…
Lan Zhan: De ahora en adelante… nunca dejaré tu lado de nuevo.
Su Jade selló esa promesa con otro beso.
& FIN DEL FLASH BACK &
Lan Zhan: Wei Ying…
Levantó la mirada para ver a su esposo mirarle, sonriendo terminó de guardar los juguetes y dejó la cesta en su lugar en la habitación de su niña. Al regresar Lan Wanji estaba sentado en la mesa calentando agua para preparar el té mientras abría una jarra de Sonrisa del Emperador para él, sentándose esperó a que le sirviera una copa.
Wei Ying: Estaba pensando en cuando nos enteramos que Ming Hu estaba de regreso… y la curiosa manera que eligió para regresar.
Lan Zhan: Lo recuerdo…
Recibió la copa de vino y bebió de un trago el contenido, mirando los elegantes movimientos de su esposo mientras preparaba las hiervas para la infusión de té y agregando el agua caliente.
& & &
Lo recordaba perfectamente, fue una sorpresa pero también una gran alegría para los dos. Y en cuanto regresaron a Gusu se instaló en su mente la idea de vivir en un lugar más tranquilo y con mejor clima, Receso de las Nubes era muy frío y sus inviernos podrían ser bastante difíciles para alguien de Yunmeng, por eso había comprado la propiedad en la que vivían ahora para que su esposo y su bebé estuvieran más cómodos.
Con el tiempo se dieron cuenta de lo práctico que era porque estaban a buena distancia de sus dos clanes lo que les permitía visitarlos o recibir visitas de ellos en cualquier momento del año.
Wei Ying: Podríamos salir de cacería nocturna… o quedarnos en casa - Tomó la copa después de que la rellenara para él - ¿Qué opinas?
Lan Zhan: Lo que decidas estará bien.
Wei Ying: Sabía que dirías eso.
Sonrió levemente mientras servía en una copa un poco de su mezcla de té favorita, una que cultivaba él mismo en el amplio jardín que había construido para que su familia disfrutara.
& & &
Terminaron sus bebidas y Lan Zhan se llevó las tazas a la cocina mientras que él subió a la segunda planta, entró a la habitación y se acercó a la pared donde sus armas descansaban. Bichen, Chenqing y Furia Carmesí, la espada que heredaría su hija cuando tuviera la edad adecuada para entrenar con ella.
El nombre de la espada se la había dado la misma Ming Hu, poco antes de nacer le había hablado en un sueño, dándole el nombre de su arma de primera clase y anunciando que pronto volverían a estar juntos, por eso al nacer no le sorprendió que fuera una niña y decidió mantener su nombre porque era perfecto para ella en su nueva vida como lo fue en la anterior.
Sonrió al sentir el calor y firmeza del pecho de Lan Zhan. Sentir el calor y la fuerza de ese brazo alrededor de su cintura le provocaron mariposas en el estómago, lo giró sin soltarlo y tomó sus labios en un exigente beso. Este contrastaba totalmente con la personalidad serena y tranquila de su esposo.
Pudo sentir su propio cuerpo estremecerse y entregarse totalmente, como cada vez que Lan Zhan lo tomaba de esa manera. Finalmente la falta de aire les hizo separarse no sin antes de sentir una mordida en su labio inferior, apenas unos centímetros, para respirar. Entonces puede notar la sonrisa algo arrogante que poseía su Lan Wanji.
Wei Ying: ¿Qué es lo gracioso?
Lan Zhan: Tú…
Wei Ying: ¿Eh?
Lan Zhan: Besarte - Acaricia el labio inferior de Wei Ying rojo he hinchado por la pequeña mordida que le había dado - Siempre reaccionas como que la primera vez que te besé.
Wei Ying se ríe y apoya la frente en el pecho de Lan Zhan, respira profundamente para inhalar la esencia de su cuerpo. Su corazón late a un ritmo acelerado sin poder evitarlo. Permanecen así un tiempo, sin necesidad de palabras, sin necesidad de nada más que estar en los brazos del otro, sintiendo sus almas consonar juntas.
Wei Ying: Espero nunca acostumbrarme…
Lan Zhan: ¿Hn? - Se separa un poco para mirarlo a los ojos.
Wei Ying: A tu brazo alrededor de mi cintura… al calor de tu cuerpo contra el mío… a la suavidad y dulzura de tus labios - Susurra dándole un beso - Nunca voy a cansarme y siempre voy a anhelarlo… a cada momento… mientras viva.
FIN
NOTAS FINALES
No sé mucho sobre las ceremonias antiguas Chinas así que perdonen si esta parte quedó muy sencilla n_nU
Ahora si ha llegado el final, tengo una sensación agridulce porque fue un camino tan bonito.
Gracias por su apoyo y por leer cada semana, ha sido un camino más largo de lo que pensaba y dudo que alguna vez vuelva a escribir alto tan largo, más de 600 páginas me sigue pareciendo una locura porque mi historia más larga antes de mi bloqueo no llegaba a las 290 XD
Muchas gracias n_n