-¿Qué es eso?- se preguntó Ron mirando con atención esa carpeta amarilla que decía "privado".
El joven completamente nervioso apuntaba el control con que manejaba esa pantalla grande. Y decidió abrir esa carpeta.
En ese momento apareció Draco, este se apoyó en la ventana para mirar hacia dentro, y sus ojos se clavaron en esa pantalla grande. Ron no se dio cuenta de la presencia del rubio que estaba detrás suyo.
Ron apretó esa carpeta y la misma se abrió.
Ambos jóvenes vieron el contenido secreto de Harry Potter.
Los vídeos eran bien notables, Harry y Ginny abrazados, juntos en una cama, semidesnudos. Eran muchos videos grabados con el celular de Harry.
-Ginny no entiendo porque te prestas para hacer estás cosas con este idiota- se quejó Ron, desanimado y un poco asqueado, sus manos temblaban y el corazón le latía porque le pedía a gritos ver esos vídeos.
Sin voluntad propia el pulgar apretó y uno se reprodujo. En aquel vídeo se vio Harry acercando sus labios a esa piel para besar y acariciar los brazos de Ginny. La voz del joven Gryffyndor se escuchaba en toda la habitación.
Justamente cuando Ron tenía la vista hacia otro lado porque se negaba a ver aquello entró Harry por la puerta, y se dirigió a él.
-¿Qué estás haciendo Ron?- preguntó mirando de reojo la pantalla- ¡deja eso!- le arrebató de un tirón el control.
Sus ojos se encontraron con la presencia de ese joven que estaba detrás de su amigo, aquellos ojos grises que en su vida habían sido maravillosos porque le habían dado tanto amor, aquellos que le fueron inolvidables en su existencia, ahora ahora esos ojos lo miraban con tristeza, dolor, rabia y enojo. El corazón de Harry le latió demasiado fuerte y no solamente eso, sino que sintió que este se le saltó del pecho dejándolo vacío, parecía que el tiempo se había detenido. Pudo moverse de ese pequeño trance al ver cómo Draco corría horrorizado de lo que había visto. El joven rubio corría con el corazón destrozado, le había brindado todo ese amor durante años, cariño, pasión, todo su mundo, y en un segundo, Harry lo había matado.
-¡Draco!- gritó Harry, sintiendo esa vos resquebrajarse en su realidad- ¡Draco!,¡Draco!.
El joven salió corriendo de ese cuarto para seguirlo, pero lo perdió de vista. En ese instante mientras corría desesperado notando a lo lejos como ese amor se marchaba dolido, comprendió, por fin comprendió lo que había perdido. Nunca había amado a Ginny, siempre lo supo, solo era diversión y había sido tan imbécil en animarse para firmar esas cosas, ahora ya no tenía a la persona que tanto amaba. Todo estaba roto.
-¡Draco!,!Draco!- gritaba mirando a lo lejos a aquel joven que no se detenía- !Draco!,¡Draco!.
Fanfic inspirado en un sueño que tuve en la noche de navidad.
Descripción: Ron se encuentra en una habitación apuntando la pantalla donde estaba las cosas que Harry guarda en la computadora, claro, Ron conectó la computadora a la pantalla grande y encontró una carpeta amarilla que decía ''privado'', justamente antes de abrir, apareció Draco por la ventana y este no dijo nada, solo miró lo que Ron hacía, y cuando la carpeta se abrió vio todos los videos que Harry firmó con su celular, en ellos aparecía él con Ginny. Justamente en ese momento que estaba viendo esos videos llega Harry y le quita el control a Ron. Después de eso, mira a Draco, el joven estaba completamente destruido.
Es una historia corta que trata de centrarse en el dolor que ocasiona muchas veces una infidelidad, ya sea cuando las personas lo descubren por el celular. Es un sentimiento triste y destructivo.