Hora y media después Ruki, Reita y Uruha estaban en el comedor del hotel desayunando.
- Aoi y Kai están tardando mucho.- comentó Ruki.
- Prefiero no preguntarme lo que están haciendo.- dijo Uruha sonriendo.
- Llegarán ahora… ¡Mira! Si antes lo digo… ¿Qué estabais haciendo?
- No te importa Reita.- le dijo Kai que se había puesto rojo.
- Es que descubrimos que había sales de baño y claro…- explicó Aoi.
- Gracias Aoi. No hace falta que me digas los detalles, ya me los imagino…
- ¿¡Qué te los imaginas!!? ¡No sabía que eras tan pervertido Uruha!- dijo Aoi fingiendo sorpresa de forma muy exagerada con lo que consiguió que todos se rieran.
Cuando acabaron de desayunar lo prepararon todo y subieron al autobús.
- ¿¡Estáis preparados para la aventura!?- gritó Reita con los brazos en alto.
Aoi gritó “¡Sí!”, Kai y Ruki se rieron y Uruha alzó una ceja antes de reírse él también.
Kai se sentó junto a Aoi, apoyó su cabeza en el hombro del guitarrista y agarró su mano. Aoi le dio un beso en la frente y le dijo buenas noches.
Ruki se sentó con Reita y Uruha delante de ellos. Ruki que había observado la escena de la pareja comentó:
- Como me gustaría a mí tener tanta suerte como esos dos…
- ¿Verdad?- dijo Uruha.- Parecen muy felices. Cuando conocí a Aoi no pensé que pudiera estar un año y medio con alguien.
Aoi, que no se había percatado de lo que estaban hablando al oír su nombre prestó atención.
- ¿Qué estáis cotilleando de mí?- dijo haciéndose el ofendido.- ¡Me habéis decepcionado!- alzó algo la voz.- ¡Mi amor por Kai es ETERNO!!!
Kai, que se había despertado por los gritos de Aoi le pegó una colleja y se acomodó en su asiento para seguir durmiendo.
Aoi puso cara de niño pequeño al que han reñido, se puso a escuchar música y a mirar por la ventana. De vez en cuando miraba a Kai y le acariciaba el pelo o sonreía.
El viaje transcurrió sin más percances. Esa tarde hicieron otro concierto y después una pequeña fiesta, porque era el ultimo concierto de la primera parte de la gira. Pero la fiesta no duró mucho ya que tanto el grupo como el staff estaban bastante cansados.
En el hotel cada uno se fue para su habitación menos Kai que se fue a la de Aoi. Según entraron el guitarrista se tiró boca abajo encima de la cama.
- Estoy agotado…Estos días de descanso me los voy a pasar durmiendo, y solo me levantaré para comer.
Kai sonrió lascivamente.
- Te digo yo que te levantaras para otra cosa además que para comer.
Se sentó en la cama al lado de Aoi y le empezó a dar un masaje en la espalda. Aoi ronroneó agradecido. Kai bajó sus manos por toda la espalda de Aoi, cuando las volvió a subir estaban debajo de la camiseta del guitarrista. Le fue subiendo la camiseta y siguió con el masaje mientras se acercaba a él. Cuando estaba casi pegado a Aoi le dio un beso en la parte de atrás del cuello. Este giró la cabeza con una sonrisa en los labios con la que le incitaba a seguir. En esta ocasión Kai besó ligeramente sus labios. Aoi se dio la vuelta y se incorporó un poco encima de la cama, con una mano agarró a Kai de la cintura acercándolo a él. Cuando estaban a menos de un centímetro Kai inconscientemente entreabrió la boca, esto, Aoi lo tomó como una invitación para invadir esa cavidad. Kai n pudo evitar sorprenderse durante una milésima de segundo. La lengua de Aoi jugaba dentro de su boca recorriéndola toda como si la explorara frenéticamente.
Cuando ya no pudieron aguantar más el beso se separaron, Kai siguió jugando con el cuello del guitarrista y le acabó de quitar la camiseta. La mano que tenía Aoi en la cintura del batería fue hasta su entrepierna, le desabrochó el cinturón, después el pantalón y tiró de este para abajo. Kai dejó el cuello de Aoi y empezó a bajar besándole cada centímetro de su piel. Al llegar al borde del pantalón le quitó el cinturón y lo tiró al suelo y el botón lo desabrochó con los dientes, lo mismo que la cremallera. Le metió la manos en los calzoncillos y le masajeó el miembro con una mano mientras con la otra la sacaba el pantalón. Al finalizar esta tarea Kai agarró el miembro de Aoi y lo lamió el guitarrista dejó escapar un sonoro gemido. Kai sonrió y repitió la operación, Aoi se mordió el labio inferior. Kai esta vez lo que hizo fue soplarle en la punta. Aoi cansado ya del juego del batería lo agarró, le quitó rápidamente la poca ropa que le quedaba y lo puso debajo de él. Kai abrió sus piernas, Aoi se acomodó entre ellas, se lamió dos dedos, los dirigió a la entrada de Kai e introdujo suavemente uno y luego otro. Después los sacó e introdujo despacio su miembro. Esperó a que Kai se acomodase y empezó a moverse dentro de él..
La habitación se llenó de gemido de ambos. Aoi no lo pudo resistir y aumentó la velocidad, oír a Kai susurrándole al oído su nombre le excitaba muchísimo.
Llegó un momento en el que no pudieron aguantar más y ambos se corrieron.
Aoi salió cuidadosamente de Kai intentando no hacerle daño. Una vez fuera Kai le besó apasionadamente y en un momento que se separaron para tomar aire le susurró:
- Te quiero…
Aoi le respondió al beso con la misma pasión y cuando se separaron le dijo:
- Y yo a ti.
Se abrazaron fuertemente y así se quedaron dormidos toda la noche tan agotados como estaban.
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