Shaka escuchaba atentamente lo que Camus le contaba mientras unas lágrimas crispaban su rostro. El acuariano hablaba con tono sombrío pero se notaba el dolor en las lagrimas que derramaba casi desde el inicio del relato, El Hindú no sabía que decir, si lo que el francés le decía era cierto la cosa más valiosa de Milo estaba frente a él, no echaría a perder la oportunidad de estar con el maestro de los hielos.
-Entonces los rumores no eran de todo falsos –Dijo por fin el rubio después de un largo silencio
-para serte sincero nunca escuche los rumores… No soy una persona que esté al tanto de todo lo sucedido en el santuario, claro al menos que me interese –contesto el Siberiano
-pues el más factible y que todos creían que había sido la culpable de su separación fue el del espectáculo del trío de Shion, libra y Milo… -Shaka reflexiono todo lo que había pasado -aunque pensaba que tu lo habías dejado a él… todo el mundo pensaba eso…
-Y el dejo que todos pensaran eso… -Parecía que el peli azul se había dado cuenta de algo
-¿te puedo hacer una pregunta personal? –Pregunto el rubio después de una pausa -¿Enserio solo te has acostado con Shura, Hyoga y Milo? –Interrogo
-No… después de un tiempo… estuve con Pisis, Dohko y Shun… -El rostro del peli azul formo una sonrisa -¿Por qué preguntas?
-Tal vez un rubio mas haga falta en tu lista… -Respondió con una sonrisa picara
~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*
~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*
Shaka se acerco al francés y lamio sus mejillas, borrando el rastro de las lagrimas derramadas y en un impulso Camus tomo la cara de su acompañante entre sus manos y lo beso con desesperación, el hindú contesto el contacto de los labios con fogosidad, los dos se fundieron en un abrazo y cayeron al piso. Camus recostó al rubio en el piso y desgarro la ropa que lo cubría, acariciándole el pecho, después tomo el miembro de Shaka y comenzó a masturbarlo mientras lamia las piernas de este. Shaka lo miraba extasiado, el rostro de su anfitrión se veía sumamente sensual. Se sentó y comenzó de nuevo a besarlo mientras le quitaba la ropa, sus miradas se cruzaban cada vez que un trozo de piel quedaba a la intemperie; Cuando por fin estuvieron desnudos se lamieron mutuamente, los gemidos se empezaron a escuchar. El hindú se coloco de espaldas al francés hincándose, Camus beso aquella espalda que le ofrecían y colocándose detrás de él en cuclillas comenzó a penetrarlo, al principio fue una posición un poco incomoda pero conforme aumentaba el placer se sentía cada vez más cómodo. Las embestidas aumentaron drásticamente, unas cuantas lágrimas surcaban el rostro del acuariano recordando las últimas palabras dichas en su narración. El rubio movió sus manos y comenzó a masturbarse para que el éxtasis llegara más pronto, justo después de que lo hizo un gemido en su oído indico que su anfitrión lo había imitado.
~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*
~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*
AL DÍA SIGUIENTE
Shun despertó por el ruido que hacia Shaka en la cocina, cuando el regreso, noto que su anfitrión no se encontraba en el sexto templo y suponía que apenas acababa de regresar, bajo a desayunar algo y dio los buenos días al rubio. Después del entrenamiento, Shun ignoro a su hermano y fue directamente con su amigo. Quería contarle unas cosas y aclarar un nuevo castigo para el perdedor.
-¿Cómo te ha ido? –Pregunto el ojiverde
-excelente… -contesto recordando el trío de la noche anterior
-pues creo que debemos modificar nuestra apuesta –Dijo sin preámbulos el menor
-No me digas que ya te dio miedo –Dijo el rubio entre juego y en serio
-No es eso… Solo que creo que después del regaño no sería buena idea pasear desnudos por el Santuario –Afirmo con una sonrisa Shun
-Tienes razón… humillación… Si yo gano, cosa que creo que haré serás mi esclavo –Dijo el ruso recogiendo los cabellos verdes que caían por el rostro de su amigo
-Jajaja estas muy equivocado… yo ya he probado a siete caballeros, incluyéndote –Los ojos verdes se cruzaron con los azules ^+^+^+^+^ ¿Por qué quiere la humillación? ^+^+^+^+^
-Igual yo he probado siete… -los ojos azules se desviaron ^+^+^+^+^acepto… ¿será que mi amigo es sadomasoquista? ^+^+^+^+^
-¿Ya has probado al escorpión? –Interrogo el peli verde
-No… maldito ¿ya lo hiciste con el escorpión?
-jajaja si… ayer… me conto su historia con Camus –Dijo mientras cuidaba que nadie más estuviera cerca
-Pues… yo no conozco bien esa historia –Dijo el rubio con un dejo de tristeza –Mi maestro nunca me la conto… nunca le pregunte…
El menor tomo un brazo del ruso y dirigiéndolo a un paseo largo le conto aquella triste historia de amor. Mientas tanto Aioria se encontraba furioso con Milo por su encuentro con el ave fénix, no podía soportar la presencia de el menor en su templo, nunca se había sentido tan celoso, tal vez era porque por fin había abierto su corazón. No quería llegar a su templo, sabía que Ikki se encontraría ahí y quería evitarlo a toda costa cuando se topo con su amigo, este lo miro, no le dijo nada, simplemente lo espero para que el peli castaño se acercara a él.
-Hola Milo –Saludo el león
-Aioria… perdón por haberte evitado estos días –se disculpo el bicho –Pero estaba furioso porque te vi con Shaka… pensé que me ayudarías con la apuesta pero… -La mirada azul se encontraba perdida en el vacio
-¿Me viste con Shaka? –Interrogo mientras unas imágenes pasaban por su mente
&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%
FLASH BACK
&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%&&&%&%&%&%
Aioria terminaba de hablar con su amigo y se quedo sentado pensando en que lo destruirá si pasaba algo similar con Shiryu y Milo como lo de Camus y su amigo. Decidió despejarse un poco, se dio un baño y fue a casa de Virgo para saber qué es lo que quería hablar con él. El rubio hindú lo recibió en la sala y le invito una copa, después de que los dos estuvieran cómodos comenzaron hablar
-¿Cómo te enteraste de nuestra apuesta? –Cuestiono el hermano de Aioros
-¿Por qué te preocupa tanto? –Contesto el ojiazul con otra pregunta -¿acaso querías a Milo solo para ti?
-No… Simplemente es una diversión que tenemos nosotros –Respondió el castaño
-Estas enamorado de el –Afirmo el budista
-No –dijo en voz alta casi al llegar a un grito –no… -repito pero ahora en un susurro
El rubio se acerco y le robo un beso, el amigo de Milo se separo rápidamente con las mejillas rojas tanto de ira como de vergüenza. De nuevo Shaka se acerco y esta vez lo abrazo mientras lo besaba, forcejearon un momento y una copa cayó al suelo derramando su contenido. El león fue vencido con aquel beso y se dejo llevar, su ropa desapareció sin que él se diera cuenta y sus labios se quedaron por unos momentos solos
-Yo haré que lo olvides –le dijo el rubio
-No creo que eso sea posible –respondió el Aioria
-Eso está por verse
Shaka bajo a besar el torso de Aioria y con una rodilla comenzó a masturbarlo, las manos del moreno acariciaron la espalda de su compañero, pero la ropa era estorbosa así que le quito la camisa y los pantalones de un jalón. El rostro del quinto caballero se trasformaba en una mueca de placer cuando Virgo acerco su boca a su miembro para darle atención. Después de un momento así el rubio se enderezo
-¿ya lo olvidaste? –dijo Shaka mientras se acerca al leonino
-por un momento –respondió su amigo un poco agitado
-¿Estas seguro? –contesto el budista acercándose a la boca del otro
-Si- Dijo firmemente Aioria y el rubio sello un beso apasionado
El hindú se quito los bóxers que aun quedaban en su cuerpo y tomo las piernas del león y las coloco encima de sus hombros para poder dejar expuesta su entrada, Shaka acerco u miembro y lo fue penetrando poco a poco, el castaño gemía con aquella intromisión. Las embestidas fueron suaves pero rápidas logrando que en poco tiempo los dos llegaran al orgasmo. Los dos se tumbaron en el sillón
-Me entere el mismo día en que la hicieron –Dijo Shaka con la voz entrecortada por la falta de aire
-¿de qué hablas? –pregunto Aioria desconcertado
-De la apuesta… estaban en un rincón y yo pasaba por ahí… los escuche… aunque la verdad solo creía que debían de ser los de bronce… y como estaba aburrido decidió que yo también quería entrar en la apuesta –Dijo el rubio sonriendo -¿Dime con cuantos más me debo acostar para que sean mis esclavos? –Los dientes del rubio asomaron por su boca en una sonrisa aun más amplia
-Con Kannon, Mu, Afrodita, mi hermano, y Camus –Dijo entre risas –y obviamente todos los de bronce presentes
Shaka se puso de pie y volvió a ponerse los bóxers y su pantalón – ¿Le vas a decir a Milo?
-¿Qué cosa? –pregunto Aioria imitando a su anfitrión
-que lo amas… no es que quiera acabar con la diversión pero tal vez te quite un peso de encima
-No lo sé… -El león se sentó en el sillón y bebió el contenido de la copa restante –Deseo decirle… pero tengo miedo al rechazo
-No importa el rechazo… Simplemente sacar esos sentimientos y liberarte –Dijo El rubio
&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%
FIN DEL FLASH BACK
&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%&%&&&%&%&%&%
-Si –Respondió su amigo
-¿Qué fue exactamente lo que viste… o escuchaste? –Cuestiono el leonino
-Solo los vi en el sillón… y él quería que te olvidaras de alguien –contesto Milo -¿de quién quería que te olvidaras?
-De ti… -Aioria miro al cielo ^+^+^+^+^Este no es el momento de decírtelo^+^+^+^+^ -La apuesta, decía que estaba muy preocupado porque ganaras y solo quería que me relajara
-¿Enserio? ¿Te sientes presionado amigo? –pregunto seriamente el bicho
-claro que no –estallo en risas el castaño -¿Cómo es posible que se te ocurra eso? Si es lo que siempre hemos hecho -Los dos amigos se miraron y se dirigieron al octavo templo para platicar todo lo que no se habían dicho en esos días.
Ikki Se encontraba en el quinto templo, dándose un baño. Sentía que el dueño de ese templo lo evitaba desde su encuentro con Milo y si el dueño de la casa no quería verlo, pues el trataría de estar lo menos posible en ese lugar. Iba en dirección del sexto templo, quería la compañía de un rubio pero a mitad del camino se encontró con su hermano y con Hyoga, al parecer solo daban un paseo. En cuanto Shun se percato de la presencia del fénix se disculpo con Hyoga y se encamino a la casa de Virgo. Hyoga se acerco al hermano de su mejor amigo y lo invito a un bar que conocía en el pueblo. Llegando al bar tomaron un whisky en las rocas y platicaron un largo tiempo.
-Es imposible que estés enojado con tu hermano… Después de lo que has hecho tú… -le dijo el rubio al moreno
-Pero es diferente. Yo soy mayor y se cuidarme solo –Contesto el fénix
-¿Por qué es diferente? Es tu hermano y tienen la misma sangre ¿Qué te hace pensar que no se sabe cuidar solo? –Razono el cisne
-El es diferente… es sensible y tierno y…
-¡¡¡No te atrevas a decir que es débil, porque no lo es!!! –interrumpió Hyoga
-No lo diría –Respondió Ikki
-¿lo piensas?
-¡Claro que no! El es muy fuerte –dijo el moreno en voz alta
-¿Entonces qué es lo que te preocupa? El podrá sobrellevar las criticas y todo lo demás –Dio Hyoga mientras entrelazaba las manos detrás de la cabeza quitándole importancia al asunto
-Tienes razón… pero dime ¿Tú crees que haya algo entre Shun y Shura? –Interrogo Ikki recordando las palabras de Milo
-¿Shun y Shura? ^+^+^+^+^ Si supiera de la apuesta^+^+^+^+^ Jajaja para nada, Solo fue aventura de una noche jajaja –Dijo el rubio recordando el día del bar “El ojo de Quimera”
-y lo dices tan Sínico… -Replico el fénix mirando hacia el techo
-Vamos Ikki… ¿no me digas que lo que hacías en Japón era algo enserio? –El rubio tenía una sonrisa picara –Claro que no, todas fueron aventuras de una noche, que tuvieras preferidos no significaba que tuvieras una relación amorosa con Carlos o Johnny –Se respondió a si mismo
-Bueno tú tuviste algo que ver con ellos –Dijo Ikki
-Por eso, relájate. No dejes que tus celos por tu hermano rompan esa relación que tienes con el
-Tienes razón… Crecen tan rápido… jajaja –Dijo el moreno en forma melodramática
-Jajaja, no empiezas de sentimental
Los dos amigos de bronce siguieron bebiendo cuidando de que ninguna cámara estuviera cerca, Sus ánimos ya estaban arriba. Pagaron la cuenta y pasearon por las calles evitando el camino de regreso al santuario. Ikki le contaba al pato lo sucedido con Aioria y analizaron la situación. Después se quedaron en silencio un largo rato mientras veían como caía la noche.
-Sabes… a pesar de todo lo que vivimos en Japón –Dijo el rubio mirando al piso –Tu y yo jamás tuvimos algo que ver…
-Cierto… Ni aunque estuvimos juntos en las orgias… ¿Por qué… -El moreno no pudo terminar su pregunta por qué la boca de Hyoga se lo impidió.
~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*
~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*
Las dos aves se encaminaron al santuario y fueron a la quinta casa (por que quedaba más cerca) e interrumpieron la cena de Aioria quien simplemente los miro y siguió comiendo. Mientras los dos subían por las escaleras ya arrancándose la ropa, cayeron estrepitosamente en la cama del Fénix. La ropa desapareció rápidamente, sus miradas se intercambiaron con lujuria, sus lenguas se enredaban y sus manos tocaban las partes más sensibles del otro.
-Dime patito (así le decía Ikki a Hyoga para molestarlo) ¿Te gusta? –Interrogo el hermano de Shun en un instante que sus bocas se separaron.
-Claro… Pollito (Forma en que le decía Hyoga a Ikki para molestarlo) ¿Y a ti? –Respondió el rubio con una carcajada mientras masturbaba a su amigo.
El moreno no respondió, volvió a invadir la boca del rubio, este sin dejar de besarlo ni de masturbarlo, se volteo para quedar encima del fénix, y para seguir su tarea, bajo a su cuello, besándolo, lamio su pecho entreteniéndose con sus tetillas, paso una mano por en medio del pecho del moreno y el ruso quedo absorto, contemplando el contraste de pieles, hasta que Ikki tomo su mentón y lo subió para besarlo; aprovecho el momento para voltearse y el quedar arriba. Así estuvieron por un rato, peleando el lugar de estar encima del otro hasta que el fénix cayo de la cama; Los dos rieron a carcajadas, el León menor se puso de pie con una sonrisa en el rostro, puso una rodilla sobre la cama y tomo las piernas del rubio y las abrió, mientras lo atraía hacia sí y quedar en medio de ellas, Hyoga se dejo hacer y lo miraba con lujuria. De una sola estocada lo penetro levantando un poco las caderas del rubio, el vaivén placentero comenzó, los gemidos guturales empezaron a escucharse.
-Pensé… que no querías diversión… la… otra noche… del bar… -Dijo el ruso entrecortadamente por el placer que sentía
-Ja… el… el otro día del bar… -De pronto Ikki cayó encima de Hyoga y comenzó a llorar copiosamente. Hyoga quedo impactado y lo único que se le ocurrió hacer fue abrazarlo.
-¿Qué tienes Ikki? –Pregunto Hyoga sintiendo como su erección chocaba contra el vientre del moreno.
-Ese día… no quería “diversión” porque… porque estaba deprimido por Shaka –El fénix tenía su rostro hundido en el hombro de su compañero.
-Shaka… ¿Qué sucedió con Shaka? –La erección del ruso comenzaba a dolerle por la interrupción tan súbita del placer.
-Dijo que no podíamos estar juntos… -Ikki dejo de llorar pero se escucho el dolor en su voz -… que debía esperarlo… que tenía que terminar algo antes de estar juntos… debía esperarlo… debo esperarlo…
-¿Lo esperaras? –Interrogo el rubio un poco molesto. El moreno asintió con la cabeza. –En ese caso… déjame acompañarte en tu espera… o te entregues al celibato, diviértete y no te mortifiques –Hyoga sabía que el amor de Ikki quería de verdad a al fénix pero quería un tiempo más de soltero y divertirse; esto enfurecía al rubio, no soportaba ver a su amigo sufrir –Vamos pollito… deja ya de llorar, si no tienes a Shaka, puedes tener a otro rubio entre tus brazos –El ruso levanto la cara del moreno y limpio el camino de las lagrimas con su lengua mientras el otro reía –Por favor pollito… no me dejes así –De verdad le dolía su miembro por la falta de atención en aquellas circunstancias.
-Perdón patito –Contesto el fénix riendo y sellando sus ocas con un beso pasional
Ikki llevo una mano a la erección adolorida de Hyoga y le dio la atención que necesitaba. Se sentía liberando por aquella confesión que acababa de hacer a su amigo. En aquella posición volvió a empezar a moverse logrando una penetración más profunda, los gemidos volvieron a escucharse y en poco tiempo Hyoga llego al orgasmo retrasado, seguido del Fénix.
~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*
~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*
La mañana llego rápidamente y Aioria fue al cuarto de Ikki a despertar a la parejita que estaba ahí. El leonino había superado los celos por el nuevo residente de la quinta casa. Toco a la puerta que estaba entre abierta pero nadie le contesto, así que entro; Los dos caballeros de bronce estaban desnudos, Hyoga abrazaba de manera protectora a Ikki, era una escena bastante tierna a los ojos de leo, quien deseo estar en su lugar junto con el escorpión.
-Hyoga, Ikki… Levántense –Decía Aioria mientras los sacudía, el moreno soltó un gruñido y el ruso abrió un ojo
-Aioria… ¿Qué haces aquí? –Hyoga bostezo, no se sentía incomodo por estar desnudo ante él, ya que ya lo había visto de aquella manera, pero Ikki… trato de alcanzar una cobija y cubrir el cuerpo del moreno.
Al ver lo que trataba de hacer el rubio, Aioria rio un poco –No te preocupes… ya los he visto… a los dos –Dijo el león –Solo vengo a levantarlos, recuerden que tienen entrenamiento, idea de tu maestro… El desayuno está preparado, los espero abajo.
El ruso miro como el griego salía de la habitación y sonrió. El entrenamiento acabo pasando el medio día, había sido largo y tedioso, además de que el sol no ayudaba mucho. Al terminar Shion había invitado a todos a comer, para limpiar su imagen ante Saori, hace que todos los caballeros debían comportarse correctamente.
Ya en la reunión del patriarca, todos los santos tomaron asiento, casi se podía escuchar el silencio. Shun se sentó al lado de Hyoga pero al ver que su hermano iba a sentarse junto a el movió la silla para levantarse, pero el moreno adelantándose a sus acciones, paso un brazo por sus hombros y en un secreto le ordeno –Quédate aquí- Shun lo miro con cara sonrojada, de pronto sintió una mano en su pierna y Hyoga se acerco a su oído e igualmente en un secreto le dijo .Tranquilo, está bien, quédate aquí- y Shun asintió. La comida fue rápida ya que casi ningún caballero hablo. Andrómeda estaba muy nervioso ya que la presencia de su hermano lo ponía así y además Hyoga no dejo de acariciar su pierna, como para relajarlo pero a la vez jugando. Cuando la comida termino, todos se levantaron para irse. Ikki paso un brazo por los hombros de su hermano y lo guio a casa de virgo, ninguno se dijo nada hasta llegar a la sexta casa
-Shun, yo… -Comenzó a decir Ikki
-¡Perdón hermano! –Interrumpió Andrómeda –Se que estas molesto por la foto…
-Shun escúchame –Interrumpió el fénix –no tienes que pedirme perdón… yo debería pedírtelo… -Suspiro –Te he ocultado unas cuantas cosas… yo actuaba igual o peor que tú en Japón… -Ikki no podía mirarlo – ¿Recuerdas que siempre me preguntabas que hacia cuando estaba fuera de la mansión? Pues… yo me iba a los bares y a fiestas… para… tener aventuras
-¿Aventuras? –Interrogo el menor, ya se imaginaba a lo que se refería pero tenía que preguntarlo
-si… aventuras… ¿Cómo decirlo?... sexuales –dijo el fénix sonrojándose
-¿enserio?
-si… te lo oculte porque… pensé que todavía eras un niño y… y… -El mayor callo súbitamente, ya no sabía que decir
-hermano –Dijo Shun abrazándolo –te entiendo y no tienes de que preocuparte, hay cosas que simplemente son tuyas y nadie más tiene por que enterarse –el peli verde no dejaba de abrazarlo –te quiero hermano
-y yo a ti Shun