El día de la cirugía fue algo muy extraño, pues todos estaban mas nerviosos que shaka, y eso era contrario a lo que seria normal, mi hermano no dejaba de revisar la maleta por si hubiera olvidado algo, preguntándole si seguío las indicaciones del medico, tal vez esa era su manera de desearle suerte no era una cirugía segura, había el 50% de probabilidades que no pudiera ver a pesar de todo, cuando ikki bajo la maleta por las escaleras y pudo tener un momento a solas con migo me atrajo a su cuerpo
-¿estarás ahí cuando me quiten las vendas?.- me pregunto en un susurro a mi oído
-estaré ahí desde que salgas de quirófano duraras una semana con las vendas,¿ crees que soportare tanto tiempo sin verte?- le contesto pícaro
-bueno, yo he esperado mas para verte- shaka apretó aquella cinturita
-pues espero que ahora que me veas, me sigas queriendo.- mi vos fue algo temblorosa
-claro que te seguire queriendo shun, eso no lo dudes, te lo prometo.- me dijo antes de soltarme pues ikki nos apresuraba
-creo que ya llego milo, debes de estar emocionado.- shun camino hacia la puerta.- yo se que todo saldrá bien
Agradeció aquellas palabras, no era lo mismo que un doctor te lo dijera, o que milo se asegurara… el que shun se lo dijera le daba aun mas seguridad y confianza así pues avanzo, mas seguro que nunca que esta vez lograría recuperar la luz en sus ojos
Complejo medico “el Partenón”
Shun y milo permanecían en la sala de espera, la operación solo duraría unas tres horas, pero no sabrían si funciono hasta que las vendas fueran retiradas, aun así las expectativas eran altas, y el doctor saga se mantenía confiado con el procedimiento
-eres un buen amigo shun, le has hecho bien a shaka, y te lo agradezco.- el amigo de milo me dice eso y llama mi atención
-no hice nada especial, yo…- que le podría decir, el no sabia que shaka y yo éramos novios
-has hecho mas de lo que crees shun, shaka se había resignado a su ceguera, si esta oportunidad se hubiera dado antes hubiera rechazado la cirugía, tu le devolviste las ganas de luchar
-no, yo no hice tanto… el es quien decidió eso, solo estuve ahí para apoyarlo.- shun trato de quitarle importancia al asunto, pero le daba cierta calidez que milo dijera que era alguien tan importante para el rubio
Tenemos ya tres horas en esta sala milo se a parado a caminar en un par de ocaciones e incluso me ha ofrecido algo de beber, pero no lo acepto quiero que el doctor saga y me diga que podemos pasar a verlo solo quiero que el este bien y por fin saga hace su aparición, sonriendo
-doctor gemini.- me levanto casi de un salto
-todo esta bien, no se preocupen ahora esta en recuperación en una media hora lo subiremos a su habitación y podrán pasar a verle, pero me atrevo a decirles que la operación fue un éxito shaka podrá volver a ver
Podrá volver a ver, si hubiera sabido lo que ello conllevaría tal vez no me hubiera puesto tan feliz, pero que digo claro que estaria feliz por el… los siguientes días retomamos las lecturas, se aburría mucho estando en aquella cama de hospital… y al parecer siempre había una enferma lista para aparecer cuando planeaba dar un paseo
-no debe salir, cualquier choque en este momento o caída podría desprender la retina…- aquella frase la había escuchado ya tantas veces que ahora incluso les imitaba la voz
-shaka es su trabajo.- trato de comprender a mi pobre rubio, pero estoy de parte de ellas nada que lo ponga en riesgo no cuando esta tan emocionado por ver de nuevo
-es que ni ir al baño me dejan, en cuanto salgo se la habitación me agarran del brazo como a un viejito
-amor, tienes baño en la habitación asi que eso no es buena escusa.- le contesto con humor
-¿tengo?.- me pregunta con sarcasmo.- no lo vi
Ahora ambos reimos, contra eso no tengo ningún argumento, pero igual no lo busco, el me toma con su brazo y me jala haciéndome caer junto a el en la cama abrazandome
-shaka nos vas a meter en problemas, no tardan en venir a verte.- le digo tratando de soltarme pero el me aprieta mas fuert6e y desisto se que esta nervioso dentro de un momento vendrá saga a quitarle las vendas ambos estamos nerviosos pero se que todo saldrá bien
-¿estaras aquí? Cuando me quiten las vendas… quiero que seas o primero que vea.- su vos por primera vez suena débil nunca lo había escuchado asi y eso me preocupa
-claro que estare aquí shaka te lo prometi... además quiero ver tus ojos .- le respondo en su cuello cuando escuchamos voces en el pasillo son milo y saga asi que me levanto de la cama regresando a mi silla y tomando el libro para que piensen que solo estaba leyendo como siempre
-buenas tardes shaka, es hora de quitar esas vendas, espero que estes listo… al inicio solo veras manchas y el cuarto estará a oscuras pues podría la luz hacer que te doliera la cabeza, te pido que no te desesperes hasta que tu visión se aclare
-no te preocupes saga, todo esta bien, me lo has dicho varias veces ya.- suspiro pesadamente antes de sentarse en la cama dejando colgar sus piernas demostrando así que estaba listo
-de acuerdo ven pásate a la silla es hora, shun cierra las persianas por favor
Me apresuro a obedecer, milo se ha quedado en la puerta abierta que es lo único que da luz a la habitación, mientras el doctor comienza a cortar aquellas vendas, mi corazón se aceleraba cada vez mas mientras me acercaba a ellos…
Lentamente aquella venda se retirada y se liberan los parpados cerrados de mi rubio, me siento muy nervioso cuando le veo parpadear un par de veces y cerrar de nuevo violentamente sus ojos la poca luz lo marea y solo ve manchas pero luego de unos momentos por fin logra mantenerlos abiertos lo suficiente para comenzar a enfocar su vista… sus ojos, aquellos ojos azules calmos como el lago en un dia soleado me miran directamente
-shun, te tengo una mala noticia.- aquellas palabras hacen que mi corazón casi se detenga, no le gusto lo se… siempre me han dicho que parezco niña que…- creo que me morí en la cirugía por que estoy viendo un ángel
-shaka baka!!.- sin importarme nada me lanzo a sus brazos llorando de alegría, puede ver… lo logro
-eres un ángel shun.- la voz de shaka se cuela en mi oído mientras milo carraspea para que nos separemos, yo me sonrojo ahora debe haberse dado cuenta de lo nuestro
-disculpa shun pero la fila para abrazarlo es larga y sigo yo.- me dice con humor mientras se une al abrazo.- sabia que lo lograrías shaka, siempre lo supe
Fue un momento muy emotivo, incluso ikki paso a ver a shaka llevaba unas flores de loto, para que “por fin conociera a su vicio” shaka adora esas flores aun que nunca las ha visto, sobra decir que las amo en cuanto las tuvo en sus manos, aun ahora me pregunto de donde las saco ikki, y por que tanto interés en alguien a quien ni siquiera le habla mas que para decirle un “buenas tardes”… aun asi shaka no dejo el hospital hasta al otro da cuando sus ojos estuvieron mas acostumbrados al cambio de luz y al movimiento pero llevaría sus gafas oscuras una semana mas, su visión aun era delicada
Estamos en su departamento, hablando de cómo fue cuando perdió la vista, me conto que tenia 11 años y que estaba montando cuando una serpiente asusto a su caballo y lo tiro, no solo fue eso si no que aquel desbocado animal lo piso, y de esa forma perdió la vista… no se si lo sepan pero shaka tiene 28 años, esos fueron 17 años de oscuridad
Al inicio.- me comenta mientras acaricia mi pelo.- fue muy difícil para mis padres… mi madre culpaba a mi padre por haberme comprado aquel animal, y yo no les hacia las cosas fáciles me volvi una persona mandona, enojona y gritona… siempre usaba mi cegera para conseguir lo que quería, mis padres terminaron separándose… mi madre tomo el coche y salió de casa desgraciadamente el coraje, el dolor y la carretera no se llevan a partir de ese dia mi padre nunca fue el mismo y se dejo ir… muriendo en dos años de tristeza, fue entonces que comprendi que nadie estaria conmigo, no siendo el muchacho en que me había convertido… asi que aprendi a vivir con mi ceguera y conoci a milo… desde entonces somos amigos
-deviste sufrir mucho en aquel tiempo.- le susurro cerrando mis ojos
-shun, ¿Cuántos años tienes?- la pregunta si bien me saca de onda, no me sorprende ya la esperaba pero no crei que la haría en ese momento, ahora me ha visto…
-tengo 14 shaka.- si, solo tengo la mitad de su edad, y esa era presisamente la razón de que no le permitiera tocarme mucho mas alla de aquellos besos que nos dabamos no quería que se diera cuenta
-eres un niño shun, un jovencito hermoso…- me acomoda en su regazo y algo me dice que no me gustara lo que oire a continuacion.- deberias estar con chicos de tu edad, jugando… saltándote las clases
-me estas echando de tu lado.- no puedo evitar que mi vos salga quebrada y un solloso la acompañe
-claro que no amor.- me besa.- nunca lo haría… solo no entiendo como es que estas con un viejo como yo
-Por que te amo.- le respondo sin penzarlo mucho, el no tiene por que saber lo que ocurre eso ya no me importa
-yo también te amo shun.- se deja caer en la alfombra y quedo recostado sobre su pecho.- eres mi angel
Sonreí al ver que ya no haría mas preguntas y me permiti el leve penzamiento que todo estaria bien cuan equivocado estaba… al otro dia shaka se entero de por que siempre estaba en mi departamento… y lo peor es que yo no me di cuenta hasta tiempo después aquel dia shaka había ido a caminar, observando los alrededores conociendo a la gente que no había visto aun que solo con oir su voz la ubicara
shura el carnicero… con su delantal de un impecable blanco a pesar de siempre estar cortando carne, aldebaran el vigilante del complejo… un hombre amable contrario a su ruda apariencia y sorprendente talle pero fue cuando paso cerca a la escuela que los escucho
-la niña… shun es una niña que la falda no se pone por que se le ven los chones¡.- aquella canción horrible, esa burla molesta que siempre me acompañaba en la salida de la escuela… e incluso en el patio del edificio
-shun¡ olvidaste tu uniforme!!.- una falda ondea en manos de jabu quien se ha subido a la jardinera para que todos lo vean, las risas lastiman mis oídos mientras camino sin voltear mordiendo mis labios para no llorar, no debo darles el gusto y tal ves es por eso que no vi a shaka… el, que siempre rio y dijo “no bromees” cuando me preguntaba como era y yo le decía que tenia cara de niña… ahora el esta ahí escuchando esa burla, mirando el dolor que me persigue mientras los que deberían ser mis amigos se mofan de mi delicada apariencia… el se molesta pero sabe que si sale a defenderme empeorara las cosas… así que regresa a casa, entra a su departamento y toma un te, ahora sabe de donde sale aquella necesidad que tengo de llegar y abrazarme a el durante toda la tarde, y se promete no dejar que aquella burla me lastime, sin saber que pronto será el quien lo hará
Tenemos casi dos semanas desde que lo operaron, y tres meses desde que llego a aquel departamento así que hoy he decidido darle una sorpresa, tengo planeado ir a algún lado, pobre de mi shaka a pesar que ya ve sigue encerrado en ese departamento y eso no es justo asi que estoy planeando un día de campo mi hermano salió de viaje de la escuela y regresaran hasta tarde así que me apresuro a regresar para verte, sin embargo algo es diferente este dia tu puerta esta abierta, y hay varias personas dentro, solo reconozco a milo, pero por lo que logro escuchar parecen ser conocidos
Están hablando de tiempos en escolares, y como milo era el guardian legal de shaka entre aquellos comentarios sale a relucir una vez que golpeo a un tal aioria, quien lo estaba molestando y se burlaba que no le atinaría
-fue muy gracioso shaka, le rompiste la nariz.- un chico pelimorado comentaba entre risas.- creo que después de eso, nunca te volvió a molestar
-oh cállate borreguito, fue solo suerte.- aquel sujeto castaño le regaña en broma
-si, bueno como sea, el echo es shaka que venimos a sacarte de este claustro, anda vamos a tomar algo a un bar cerca de aquí ¿te parece? Ya hace tiempo que no salimos.- un hombre con el pelo en puntas como si fueran las patas de un cangrejo deja oir su voz
-pero shun no tarda en venir, siempre llega a estas horas.- shaka les dice con voz casual
-anda shaka, es solo un niño, no podemos llevarlo a un sitio asi, vamos el entenderá.- milo le responde
Bueno en eso tienen razón pero solo un rato, recuerden que no bebo.- veo que comienzan a tirar de shaka para levantarlo de su sillón y yo corro a mi departamento no debo darle importancia es normal que quiera pasar tiempo con sus amigos, esta bien, se lo merece
Una semana después
Me encuentro sentado en las escaleras a los departamentos, no he podido salir con shaka… ayer ni siquiera regreso a dormir ¿Qué como lo se? Bueno recuerden que somos vecinos lo escucharía llegar, sobre todo por que se ha comprado una moto y créanme hace ruido… no me molesta eso, simplemente que me ha estado ignorando y… allá viene me levanto para recibirlo pero el pasa por mi lado y solo frota una de sus manos en mi cabello
-hola shuni, vengo de paso solo me cambio y me voy, iré con los chicos a unas carreras de coches.- el continua subiendo y yo me quedo parado en el escalón, ya hace una semana que ni siquiera me dice “te quiero” , es mas hace dos días que solo me saluda ya no hablamos, ya no me necesita para leerle… subo desanimado las escaleras y me quedo observando su puerta, ¿debería tocar y tratar de hablar con el?, tal vez sea lo mejor pero en cuanto levanto mi mano para llamar la puerta se abre es el, ha cambiado aquel pantalón de lino por uno de mezclilla y lleva el casco de la moto en la mano pasa a un lado mío y ni siquiera se despide, cuando escucho el ruido de la moto salir del aparcamiento camino a mi depa y abro con desanimo, entro y me dejo car en el sofá…
-lo prometiste.- es lo único que digo cuando siento como las lagrimas caen de mis ojos.- que me seguirías queriendo…