La noche era oscura, la luna era tapada por una gran nube gris, unos grandes ojos rojos se encontraban posados en una persona que caminaba por las calles vacías, con un ágil movimiento el portador de aquella mirada rojiza se posó tras el hombre, el cual no alcanzo a reaccionar y fue apresado por los brazos del de rojizo mirar que sonrió sádicamente mostrando unos afilados colmillos que los enterró en el cuello de su presa bebiendo hasta la última gota de su sangre, luego dejó el cuerpo en un callejón y se fue del lugar.
Un nuevo día comienza y Sasuke se despertaba ya que los rayos de sol le pegaban de lleno en el rostro, se levantó, cambio de ropa y se fue al bar ya que el vivía en ese asqueroso lugar al igual que sus demás compañeros, iba entrando cuando uno de los miraba la televisión y llama a Sasuke.
- ¡Sasuke-kun ven rápido!- el chico que lo llamo tenia largo cabello rubio y ojos azulados.
- ¿Qué ocurre Deidara?- pregunto entrando por completo al lugar.
- Sasuke-kun ¿Ese no era el hombre que anoche estuvo con tigo?- pregunto apuntando al artefacto, el Uchiha lo contempló y se sorprendió, en definitiva era el hombre.
- Si… es el- dijo sorprendido intentando captar lo que decía la televisión.
*****TV*****
- Un asesinato a sangre fría, el gran empresario Kakusu-sama ha sido encontrado muerto en un callejón, al parecer su causa de muerte fue desangramiento ya que en su cuerpo no había ninguna gota de sangre, su cuello tenia dos extrañas marcas y…
*****Chicos**
- Esto es muy raro- dijo Deidara apagando la TV.
- Esas extrañas marcas las eh visto antes… en algún lado- comentó el azabache con la mirada pérdida.
- Sasuke-kun ¿Estás bien?- preguntó preocupado el pelirubio.
- Si, no te preocupes, no es nada- se dio la vuelta y se encaminó nuevamente hacia su cuarto en donde se encerró completamente.
*****vagos recuerdos.
Un chico corría rápidamente, como si se estuviera partiendo la tierra en dos, siendo perseguido por una silueta.
- ¡N-no te acerques!- gritó al caer al piso- ¿Q-qué le hiciste a mi familia?- una sonrisa macabra aprecio en el rostro del hombre.
- ¡Jajajaja!- rió malévolamente- …baka todos están muertos, yo los eh matado.
- ¡MIENTES!- gritó desesperado.
- Sasuke-kun eres tan idiota- se acerco y le mordió el cuello- no lo olvides muchacho, mi nombre es…
*****fin vagos recuerdos.
- ¡SASUKE ES HORA DE TRABAJAR!- le hablo una voz grusa.
El azabache reacciono y se cambio de ropa un poco aturdido por ese recuerdo, arregló su cuarto y salio de el un poco más repuesto.
Por otro lado en una casa de estilos detallados y antiguas se encontraban dos personas hablando en la sala, uno era alto de tez morena cabello negro amarrado en una cola baja, ojos de igual color negro y unas ojeras en su rostro, y el otro era un poco más bajo de dorados cabellos un tanto alborotados, grandes y hermosos ojos azules y tres pequeñas marquitas en cada mejilla.
- ¿Lo encontraste Naruto-kun?- preguntó el mayor.
Si Itachi-san…- contesto cortésmente.