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La Manada por Zafira

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Notas del capitulo:

Ha pasado tanto tiempo, que no se si alguien aún lea esta historia... pero, de igual manera, la he avanzado un poco... mis musas han vuelto a llenarme de ideas, y pude plasmarlas en cada línea...

 

Capítulo 11º: Regalo del Destino

 

¿Y está seguro que esto podría servir? – no podía disimular la incredulidad de su voz, observó críticamente la muestra de sangre, antes de fijar su vista al tío de su hermano…

 

Por qué tanta desconfianza, criatura… en tu poder tienes la muestra de un descendiente de la más pura casta de licántropos – Dohko comentó sin apartar la vista de quien, a pesar de su juventud, poseía una mente brillante…

 

¿Pura casta…? – la ceja levantada indicaba que no le encontraba relevancia a esa información…

 

Exacto… uno por cuyas venas corre la sangre más pura de los licántropos… pero que, sin embargo, no se transforma – mencionó el castaño rojizo con soberbia… aquella criatura era demasiado parecido a su madre, no por nada su hermano se había enamorado de ella… - Quiero que la analices, estoy seguro que con esto… al fin podremos conseguir un suero que nos inmunice contra esa peste

 

Mis laboratorios no sirven a su organización, Dohko – comentó altanero el peli turquesa – No quiera involucrarme en su guerra… mis padres pagaron un precio alto por tomar partido en ella

 

Dita… respetamos tu postura – esta vez era Shura quien había hablado – Pero entiende, que este suero también podría ayudarte a ti…

 

Hermano, fue justamente esa idea la que condenó a nuestra madre y a mi padre… yo ya he aceptado mi destino… acéptala también – se levantó con tranquilidad dispuesto a dar por terminada aquella reunión.

 

Tan poco afecto me tienes, que también estás dispuesto a abandonarme – el peli oscuro no aceptaba un no de nadie, menos de su hermano, especialmente si se trataba de salvarle la vida… ambas miradas se encontraron, después de todo… se sabía la única debilidad de su pequeño, pues su enfermedad jamás le resultó un verdadero problema.

 

¿De dónde sacaron la muestra? – una vez más iba a ceder, pero realmente su hermano sabía que teclas oprimir…

 

Nadie está siendo lastimado… te doy mi palabra – Dohko sonrió al expresar… realmente lamentaba que ese niño fuera tan reacio a unirse a la organización, pues sería un importante elemento… sólo eso no había logrado conseguir su sobrino.

 

Tomó la muestra y sin decir más se retiró… - No se preocupe, comandante… ayudaré a Afrodita para sintetizar el suero – un rubio oji dorado habló al fin, pues se había mantenido al margen de la conversación.

 

Sé que lo harás Radamanthys… - comentó el mayor saliendo del despacho…

 

Te encargo a mi hermano, que no se sobre esfuerce – Shura también dejó la habitación.

 

Cuando el rubio iba a seguir el camino antes tomado por el menor - ¿Desde cuándo le dices comandante a Dohko?

 

No está bien escuchar tras la puerta, mi primavera – se acercó precavido, pues se notaba que el más joven lo miraba disgustado – Sé que quieres analizar esa muestra, tanto como deseas sintetizar ese suero… ¿por qué prefieres ponerles trabas, cuando prácticamente buscan lo mismo?

 

Porque no buscamos lo mismo… yo quiero ayudar con mis investigaciones a las personas… él quiere acabar con la raza de los licántropos – dijo al fin el joven – Realmente me gustaría que dejaras de contactar con ellos a mis espaldas… puede que esté desahuciado, pero en estas instalaciones no se mueve un tubo de ensayo sin que yo lo sepa…

 

Tu hermano y yo, solo queremos que te recuperes… y aunque lo veas como a una amenaza… Dohko también – hablo con tranquilidad el rubio – Apreciaba a tu padre… era un miembro importante de la organización… tú tío sigue siendo un miembro importante de la organización…

 

Folken era esposo de mi tía… a él no me une ningún lazo de sangre… - soltó con ironía, mientras le daba la espalda al mayor… - Pero lo haré… no porque crea que podrá ayudarme en algo, que te quede claro… ya renuncié a ese tipo de pensamientos… lo haré por mi hermano y Mime… para que al menos si alguna vez son atacados, no les vaya a pasar nada…

 

--. Fin del Flash Back .--

 

Sonrió por la ironía… el suero había resultado ser un fiasco, malo que para saber su efectividad necesariamente fuera necesario que alguien fuera mordido… ahora sabía que eran necesarios otros rituales más para que la transformación se lleve a cabo… eso explicaba su fracaso…

 

¿Te sientes cansado? – Kanon lo observaba preocupado… quería hacer gala de su orgullo, pero más que su cuerpo, era su mente la que estaba agotada.

 

Algo… - susurró y casi inmediatamente fue cargado en brazos…

 

Nos retrasas… - Saga no había esperado la respuesta, simplemente lo tomó en brazos… percibía la angustia de su niño, y aquello le disgustaba… después de que rompiera a llorar, no dijo más y se quedó dormido… pero era evidente que aquello lo tenía muy preocupado.

 

Ambos gemelos observaron cómo su joya se quedaba dormida… no dijeron más en todo el camino… pero era evidente que necesitaban hablar con su primo.

 

---

 

Creo que algo le pasa a mi primo… ¿tú crees que esos dos le hayan hecho algo malo? – Mime observaba nada disimulado hacia el trío, sabía que algo estaba sucediendo, aun no sabía que… pero iba a averiguarlo… - A ti también te pasa algo… será mejor que me lo digas…

 

No le hicieron nada malo, te lo aseguro… de haber sido yo… no se libraría de una buena tunda por haber huido… - Ikki intentó que con ese comentario su pequeño se disgustase y dejase a hacer preguntas…

 

Bruto… - soltó y se alejó de él… aquello tampoco le agradó, su lobo era extremadamente posesivo ahora que sabía lo del cachorro… él había renunciado a esa idea cuando hizo a Mime su pareja… eso explicaba por qué el oji magenta había cambiado de olor… y era más dulce…

 

Aun no entiendo cómo fue que… - susurró y Hades puso la mano sobre su hombro…

 

Debes tranquilizarte Ikki… es una bendición de los dioses… un regalo que debes agradecer, no cuestionar – el peli negro habló con calma… comprendía a su cuñado, ese tipo de situaciones no eran comunes, ni siquiera en su raza… - Hablaremos con el buen doctor, una vez que lleguemos…

 

Él no parece estar muy bien – a Ikki también le preocupó la reacción del primo de su esposo… y eso hacía que se sintiera aún más ansioso.

 

Tranquilo… superaremos lo que se nos presente – Hades se mostraba sereno… no por nada era ahora el líder de la manada, mientras tanto, Mime se había acercado a Shun…

 

A tú hermano le preocupa algo… así como a Afrodita… tú sabes algo, dímelo por favor – ambos jóvenes se observaron en silencio… hasta que por fin Shun sonrió

 

Hablaremos al llegar… no te preocupes Mime, todo está bien – el peli verde habló con tranquilidad… y al parecer, tuvo un efecto tranquilizador en su compañero… pues dejó de preguntar sobre el tema.

 

Siguieron el camino sin ningún contratiempo, el sol comenzaba a ocultarse, cuando llegaron al refugio… todos se sentían hambrientos, especialmente el peli naranja, quien prácticamente devoraba todo lo que tenía en frente… cuando al fin se sintió saciado, notó que su primo no había probado bocado…

 

Dita, ¿qué te pasa? – todos los presentes dirigieron su mirada al peli turquesa, quien simplemente parecía perdido en sus cavilaciones - ¿Primo?

 

No tengo hambre, si me disculpan… necesito dormir – el nuevo miembro de la manada se puso de pie, más antes de terminar de retirarse… - Me gustaría estar solo, si no les molesta…

 

¿Qué le hicieron? – gruñó observando a los gemelos, hasta sus orejas se transformaron sin querer… - ¿Eh… por qué se me quedaron viendo?

 

Te ves realmente adorable con tus orejas, cuñado – Shun comenzó a reír… sin entender por qué, rápidamente el ambiente se hizo más llevadero…

 

A pesar de que se sentía cansado… no fue directamente a su cuarto… había gato encerrado, y quería saber por qué… - Vengo para que hablemos… no me iré sin una buena explicación.

 

Descuida, estaba esperando tu llegada… siéntate… de todas maneras te lo tenía que decir – Afrodita sabía que, tras aquella puerta, estaban Ikki y los gemelos… quizás hasta Hades y Shun, pero él no los invitaría a entrar… - Lo que voy a contarte… entiendo que… es mi más grande fracaso…

 

¿Tiene relación conmigo? – el más joven se sentó un poco tenso… algo le decía que no era nada bueno lo que iba a escuchar…

 

¿Qué sabes del elegido de los licántropos? – comenzó diciendo el mayor, una vez que le respondiera, podría llevar aquella historia hasta el final.

 

Que es Shun… - contestó sin entender que tenía eso que ver con lo que pasaba, o con él…

 

Exacto… el elegido cuya muestra de sangre sirvió de suero que debía eliminar el gen lobo – murmuró el de ojos turquesas – Lo que la Organización sabia de este elegido, es que era de sangre ancestral y pura, pero que no se transformaba en un lobo… y claro, seguro en él debía haber alguna información genética… que pudiera ser utilizado para acabar con ese mal… - su voz sonaba monótona, como si estuviera leyendo el guion de un personaje muy malo – Yo analicé esa sangre, y noté las particularidades de su composición genética… me maravillé… y extraje aquello que según mi brillantez, podría servir como antídoto…

 

Pero, primo… mi padre me dijo que los experimentos fueron un éxito – Mime se puso pálido, no estaba entendiendo por qué Afrodita estaba en ese estado, ciertamente cuando se transformó él también se había percatado de que el antídoto… - Espera… ese antídoto es el que me aplicaron, ¿verdad?

 

Ciertamente, Dohko me dijo que el antídoto fue un éxito… cazadores que se lo habían inyectado, y posteriormente fueron mordidos… ellos no se trasformaron… pero Mime… eso solo demuestra lo poco que conoce la organización a los licántropos – de los ojos de su primo cayeron lágrimas de miedo… especialmente cuando sus miradas se encontraron…

 

Ellos no conocen todas las implicancias del ritual – murmuró al fin, con una sonrisa irónica – No me molesta que haya fallado el antídoto… no es para que lo tomes así, Dita… gracias a eso, tú estás vivo.

 

Pero… ese antídoto, si tuvo una consecuencia… una que no preví, porque no consideré una particularidad del elegido de los licántropos, justamente porque no imagine, que la muestra que me entregaron era de ese elegido, del que mi padre me había contado cuando era pequeño… - soltó y esta vez sí estaba sollozando… - Perdóname Mime… es mi culpa, no debí permitir que ese suero sea utilizado, sin hacer más pruebas…

 

Me estás asustando… me estás asustando mucho, primo – el oji magenta no sabía cómo actuar… realmente no entendía nada - ¿Qué te dijo mi tío del elegido?

 

El príncipe que posee la fuerza para dominarlos a todos, y que guiará al próximo líder y rey, no te parece raro, Mime, que si ese elegido será la pareja del próximo soberano, no haya nacido siendo mujer… ¿cómo se afianzará la nueva línea real, si no hay herederos con esa sangre? - habló monótonamente el mayor… - Quizás este elegido realmente sea aún más diferente de lo que todos pensábamos… la mayoría de ellos ha muerto en el ritual de emparejamiento…pero no todos, y créeme primo, de los que sobrevivieron, no eran todas mujeres.

 

No estoy entendiendo… háblame claramente - Mime sujetó la mano de su primo con fuerzas, para darle aliento… sus ojos en ningún momento se apartaron de la del mayor.

 

El elegido puede concebir… y estoy seguro que también se puede transformar, pero sólo después de que eso suceda - sus palabras salieron serias…

 

Pero qué dices… ¿de dónde sacas eso? - el oji magenta se asustó por lo dicho, aquello podría ofender a Shun o a Hades, y esa gente era muy orgullosa…

 

Mi padre me dijo que lo leyó en unos escritos que encontraron cuando me rescataron de niño… yo mismo leí también esos pergaminos… tu padre sabía de ellos, se los entregó a mi padre con la esperanza de que encontrara algo que sirviera para acabar con esta guerra - la celeste mirada se dirigió hacia la puerta… Ikki y Hades se habían metido, ambos con expresiones serias - Supongo que ellos lo sabían…

 

El peli naranja se volteó hacia los mayores - ¿Entonces?...

 

Es cierto… pero es un secreto de muestra raza - comentó Ikki sin apartar la vista del joven médico - Los cazadores, entonces… ¿no lo saben?

 

Ellos no… - contestó Afrodita poniéndose de pie y dirigiéndose al menor- De alguna manera el suero que sintetice, en lugar de evitar que se activara el gen lobo… ha propiciado que desarrollaras la misma habilidad del elegido… en tu vientre albergas vida, Mime

 

---

 

Shun se había quedado de piedra al escuchar aquello, su mano casi instintivamente se dirigió a su vientre… sintió casi la necesidad de tener una pequeña crisis nerviosa, aunque extrañamente todo su cuerpo estaba como anestesiado, no entendía cómo era posible que Afrodita supiera eso, y él no… aunque una vez más recordó que en muchas cosas su padre lo había mantenido en las sombras… comenzando con aquel ritual.

 

Cuando su mirada se topó con la del peli turquesa, no sabía bien que decir, notó la angustia que lo embargaba, y si lo analizaba, no era para menos… aunque, extrañamente, él se sentía muy tranquilo - No debes temer, Mime va a estar bien… cambia esa expresión, que es tu angustia lo que podría alterarle.

 

No puedo evitarlo, no estoy acostumbrado a que aquello que se considera mito, sea realmente una realidad – bajó la mirada notando lo absurdo de aquellas palabras, justo él, que ahora podía convertirse en lobo… pues acaso no era eso sólo fantasía – Quizás… debería examinarte también – soltó levantando los ojos, consiguiendo que Shun se ruborizara…

 

Sintió el calor en sus mejillas, aquellas palabras tenían sentido, podría suceder… ciertamente Hades no se había cuidado o contenido al estar con él… - Pero no tengo ningún síntoma como Mime – expresó luego de unos segundos…

 

Podría ser una excepción a la regla… no hay nada escrito sobre los síntomas… cada organismo es diferente – aquellas palabras tenían sentido… aunque no le agradaban mucho, era demasiado pronto… muchas de sus memorias seguían sin volver, y aunque le gustaba como nadie, el gran lobo, no se sentía del todo listo – Estás pálido, ¿Te sientes bien?...

 

Estoy bien, pero creo que fue demasiada información para un día… mejor comamos algo – el peli verde invitó a su amigo a seguirle, Hades salió de la habitación y los alcanzó…

 

¿Tienes solo hambre, o es un antojo? – el peli turquesa observó cuidadosamente al menor, mientras el oji jade se quedó de piedra…

 

¡Tengo hambre! – respondió colorado hasta las orejas, observando al mayor que aún no se manifestaba – Para con eso Dita, me pones nervioso…

 

Sólo para salir de dudas, ¿Podrías examinarlo? – Hades al fin se había pronunciado…

 

¡Hades, ¿tú también?! – el peli verde les dirigió la mirada con fastidio, antes de retirarse a gran velocidad, cuando ya no sintió a nadie a su alrededor, se detuvo… presionó ambas manos sobre su vientre, podía sentir cada uno de los desbocados latidos de su corazón en el pecho…"Tranquilo Shun… no debes alterarte, aquello podría ser una posibilidad, pero también podría no serlo"

 

Cuando esa noche volvió a su habitación, Hades ya lo estaba esperando - ¿Más tranquilo? - Shun agradecía que el mayor le hubiera dado su espacio, pues realmente lo necesitaba…

 

Creo que es tiempo… que me cuentes todo acerca de mí, Hades - el más joven se aproximó lentamente al lecho, ambas miradas no se habían apartado una de la otra…

 

Entre nuestra gente, incluso es considerado un mito… sin embargo, ciertamente nuestros registros indican que sí… - Hades estuvo un largo momento en silencio antes de pronunciarse – Se cuenta que fueron unos dos elegidos los que sobrevivieron al ritual, y que de ellos descendemos muchos de los clanes más antiguos… es un evento considerado poco común, pues en la generalidad, siempre han sido… mujeres.

 

El peli verde simplemente guardó silencio, desde que nació se le había dicho que era especial… aunque ahora que lo pensaba, quizás él era más un error de la naturaleza que un verdadero elegido – O sea… soy una especie de fenómeno…

 

El mayor levantó su mentón para poder enfrentar su mirada… siempre temió que pudiera albergar ese tipo de pensamientos – ¡Eres la encarnación de la misma Luna para nuestra gente… no quiero volver a escuchar esa palabra en tus labios!

 

Suspiro largamente, sonrió al notar la preocupación en esas jades – Descuida… estoy bien, algo sorprendido… más que sorprendido… me alegra tenerte a mi lado, Hades.

 

Y… con respecto al estudio que sugirió el buen doctor… - el peli negro se sintió ansioso, la verdad era que no había pensado en aquella posibilidad, y eso, que él si tenía esa información…

 

¡No! – su respuesta fue seria, miraba con firme convicción a su pareja – No quiero escuchar eso de nuevo… no al menos, que tenga algún síntoma… que no tengo…

 

Bueno… lo que ordenes – tan vez era demasiada información para tan corto plazo, no presionaría a su pequeño, al final de cuentas, no tenía ningún apuro… más temprano que tarde, esa posibilidad, sería una realidad.

 

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Hacía ya unas largas horas en que estaba sentado en esa misma posición observando hacia el horizonte… los gemelos observaban en la distancia, no deseaban perturbarlo más de lo que ya estaba. Les era evidente que se sentía por demás aturdido, y que sus pensamientos estaban más allá…

 

¿Crees qué intentará huir? – Kanon se sentía ansioso… estaba demasiado temeroso de que su joven pareja volviera a desaparecer.

 

No lo sé… ¿crees que esté pensando en ese sujeto? – Saga no podía evitar sentir ciertos celos… sin proponérselo, a su mente aún venía aquella confesión que le escuchara decir en su conversación con Mime. Ambos se habían perdido en sus pensamientos, no notaron que estaban siendo observados por el peli turquesa de manera extrañada…

 

¿Qué les preocupa?... – casi dieron un brinco de la impresión, su joven pareja estaba justo frente a ellos observándolos fijamente - ¿Y bien?

 

No sucede nada – Saga fue el primero en recuperarse – No queríamos importunarte… ¿Ya te sientes mejor?

 

No… pero no hay mucho que pueda conseguir martirizándome – murmuro con desgano – Lo mejor es que me encargue de velar porque todo vaya bien con el embarazo… así al menos, podre acallar a mi conciencia, por lo menos un poco – había meditado largamente, y realmente no podía cambiar el pasado, por lo que trabajar en el futuro le pareció más productivo – Por otra parte, hay cuestiones que debemos hablar…

 

La mirada de ambos peli azules se encontró, y una presión incómoda se alojó en sus gargantas - ¿A qué cuestiones te refieres?

 

¿Prefieres hablarlo aquí, o en nuestro cuarto? – Saga habló lo más serenamente que pudo, y realmente esperaba que el menor deseara hacerlo en la habitación…

 

Afrodita podía notar un cierto aire tenso en los gemelos, no comprendía muy bien la razón, y aunque una parte de él deseaba hablarlo ahí mismo, sabía que quizás iba ser más cómodo en un lugar lejos de testigos involuntarios – Podría ser en un lugar más tranquilo… pero debemos conversar, es necesario.

 

Tú nos guías – el mayor le dio paso al más joven para que indicara el camino, la verdad necesitaba toparse con la mirada de su hermano, esta le indicaba que tenían los mismos temores… intuían que aquella conversación no iba a gustarles…

 

Estuvo en silencio unos momentos más, luego de haber ingresado a la habitación, no sabía por dónde empezar aquella platica, suspiro largamente – Bien… no hay como dulcificar esto – murmuro con desgano, y los mayores se sorprendieron por aquellas palabras – Entiendo que soy su pareja ahora… pero, ya que no he muerto, no puedo dejar de lado mis obligaciones… hay una fundación que está a mi nombre, y por la cual debo velar hasta mi muerte.

 

Sintieron como una estocada de plata fría… no se habían visto venir aquellas palabras, ambos sabían que Afrodita era dueño de una gran fortuna, y que era cabeza de una fundación… solo que no esperaron que él aún quisiera hacerse cargo – Creí que entendías la implicancia de ser nuestra pareja… - habló con claridad Saga, esa conversación realmente terminaría mal.

 

No puedes volver a esa vida… es peligroso – Kanon había acotado… notó que su hermano estaba nervioso, él mismo se sentía disgustado

 

Realmente… no esperé sobrevivir… así que, no profundice en esas implicancias, Saga – el peli turquesa estaba siendo muy honesto, su mirada se mostraba un tanto cansada… ellos realmente no comprendían su situación – Si dejo la fundación, esta será absorbida por la de los cazadores… y todos los proyectos de servicio… podrían perderse… no lo puedo permitir, es el legado de mi familia – no claudicó ni un solo instante – Hay niños tan enfermos como yo, que sobreviven gracias a las donaciones que hacemos…

 

El mayor notó que había una cierta pasión apagada en las palabras del más joven, como si luchara contra una causa que sabía perdida, pero que de igual manera debía enfrentar… su instinto le exigía que terminara con ese tema, con una rotunda negativa… y, sin embargo, eso podría… - ¿Qué nos darías si cediéramos?

 

Kanon se había quedado de piedra… miró a su hermano como si le hubiera crecido otra cabeza… ese no podría ser Saga… su gemelo, el que no permitía que nada ni nadie se escapara de su dominio… - ¿Y cómo evitarías que corriéramos peligro… y que ese novio tuyo no se acercara a ti… y tu hermano?

 

¡Ex novio!… yo termine con Rada aquella misma noche – aclaró quien sonrió brillantemente, no esperaba ese giro… y no podía mentirse… lo ponía muy feliz.

 

---

 

Ikki no podía negarse… realmente pensó que Mime se lo tomaría de manera diferente… y ahí estaba él, risueño tocando su vientre y hablando para él mismo - ¿Necesitas algo?

 

Su mirada magenta se posó en él, y su sonrisa desapareció, lo que puso muy ansioso al mayor – Realmente espero que no se parezca a ti… sería tan injusto – una vez más el peli azul estaba impactado… - Aunque ciertamente, en el físico…

 

¿Entonces no necesitas nada? – no podía negar, cada una de las palabras del más joven calentaban su corazón, él no podría respirar sin su pequeña pareja…

 

Creo que no… - Mime volvió a mirar en dirección al techo, pues estaba acostado - ¿Es muy rápido para pensar en un nombre, ¿verdad?

 

Ikki se sentó a lado suyo… - Si, aún es pronto… pero puedes ir pensando en cómo te gustaría llamarlo o llamarla – el mayor realmente quería confesar, que él prefería un pequeño idéntico a su consorte… aunque, si era honesto consigo… eso le iba a causar muchos problemas…

 

¡Hay algo que quiero pedirte! – susurro el más joven con seriedad, ambos ojos se encontraron cuando este se acomodó para que pudieran estar frente a frente – Conozco a mi primo… por lo que más temprano que tarde, él va a solicitarlo a esos sujetos – el oji azul no estaba entendiendo muy bien, pero se mostró atento - ¡Quiero que apoyes a Dita… si te preguntan tú debes decir que si!

 

¿A qué debo decir que sí? – murmuró sin apartar la mirada… no le gustaba mucho las imposiciones… aunque, si era honesto consigo mismo… sentía que le debía mucho al buen doctor, su lobo hasta le guardaba cariño

 

Ya lo sabrás… - comentó con seriedad – Yo sabré recompensarte si haces eso por mi

 

Eso si sorprendió al mayor, que lo miró impactado, hasta temía preguntar cómo sería recompensado – Bien… entonces el buen doctor, ya tiene un voto asegurado… - definitivamente aquella sonrisa valía cualquier sacrificio, y se sentía como el mejor premio…

 

Mime fue a buscar a Shun luego de que se despidió de Ikki… se sentía hasta cierto punto, muy feliz… no podía negar que le gustaba las atenciones que le brindaba el peli azul… claro que sentirlo y admitirlo, no iban de la mano… no podía aceptar que le estaba gustando mucho su pareja… aunque lo que le hacía rechazar esa idea, era que no podía apartar de su mente, que lo que estaba sintiendo era producto del celo del apareamiento… se preguntaba, si aquello no hubiera sucedido, él podría haberse enamorado de Ikki… y él, se habría fijado en él - ¡Mimeeee!

 

Shun llevaba como diez minutos intentando llamar la atención de su amigo, y este se encontraba por demás distraído – Shun, disculpa… estaba a años luz de aquí…

 

¿Algo malo? – el peli verde se preocupó… - ¿Quieres decirme algo?

 

¡No, no, no… todo está bien!  - se apresuró a acotar… - Solo pensaba en cosas… ya sabes, nada serio… solo cosas

 

La claridad de aquella explicación lo dejó confundido… aunque sonrió, pues su amigo seguramente estaba pasando por demasiado, con todo eso del embarazo – Lo que digas, amigo… ¡cómo te estás sintiendo?

 

Oye Shun… ¿Crees que, en circunstancias normales entre tu hermano y yo, habría podido haber algo? -  … “¿qué había pasado con sus filtros… no podía estar preguntándole eso a Shun?” … la pregunta había salido sin que lo pensara mejor… ni si quiera constató si pudiera haber alguien más escuchando – Olvídalo… es una tontería…

 

Mime… ¿no estás feliz con mi hermano? – la pregunta la hizo susurrante… sintió estrujarse su corazón por aquella duda… realmente pensó, que Mime sentía algo hacia Ikki

 

No lo sé… cómo saber si esto que siento es lo que iba a sentir… o si es por el ritual – el joven de cabellera anaranjada comentó pausadamente – Ahora tendré un hijo suyo… y aunque eso me emociona… no era lo que yo había planeado para mi vida.

 

Ciertamente, el vínculo que se formó con el ritual, es fuerte… pero, ni aún el ritual más fuerte, puede contra el destino… - Shun hablo pausadamente, observaba con cierta angustia a su amigo… después de todo, Ikki no se tomaría muy bien aquellas dudas – Mi hermano nunca compartió un vínculo con nadie… porque él ya tenia una pareja… tú… y aunque sus métodos son cero ortodoxos… tú eres su vida.

 

Pero fue él mismo el que dijo que todo aquello fue por venganza – Mime murmuro con cierta amargura – Igual… ya no hay mucho que hacer, así que esta conversación es bastante estéril…

 

---

 

Se había quedado totalmente desconsolado luego de aquella conversación… Mime realmente dudaba de los sentimientos de su hermano… y no es que pudiera culparlo… ellos habían iniciado con el pie izquierdo…

 

¡Un dólar por cada pensamiento! – cuando aquella mirada turquesa se topó con la suya, se puso nervioso… - No te asustes… estabas muy concentrado, por eso no me sentiste…

 

¡Dita! – Shun se había puesto en guardia inmediatamente, pero aquello pareció divertir el mayor…

Parece que algo te perturba… si necesitas hablar, sabes que podría ser bueno escuchando – Afrodita tomó asiento, se había cruzado con su primo, y este tampoco había reparado mucho en él, así que suponía que quizás había peleado con su amigo…

 

Cuando terminó de relatarle todo, sintió el peso desvanecerse de sus hombros… - Me preocupa, que mi hermano se entere, y que eso mine más su relación – terminó de decir el más joven suspirando.

 

¡Enserio tu hermano es un patán!… – murmuró el mayor con seriedad… aunque muy en el fondo, comprendía el contexto, Folken había matado a su madre… obviamente, no sería fácil apartar el vínculo familiar… - Supongo que el tiempo curará esas heridas, y sabrá dar respuesta a esas inquietudes…

 

Shun observó a quien serenamente le respondía, debía admitir que le sorprendía su reacción, cualquiera reaccionaría con más enojo – Ciertamente mi hermano no estuvo bien… pero, adora a Mime…

 

Lo se… se le nota – sonrió el peli turquesa – Pero las dudas de mi primo son bastante válidas… muchas de las cosas que creímos sobre el amor, pues… digamos que son diferentes para ustedes… por lo general, primero se enamoran, después se casan… - siguió hablando – Y quizás, sea así mismo para ustedes, salvo ciertas excepciones…

 

Para nuestra raza, el amor viene después… el vínculo solo puede afianzarse con nuestra pareja destinada… - comentó el peli verde, intentando explicar su punto – Es como un matrimonio por compromiso…

 

Pues esas costumbres, hace mucho dejaron de realizarse… - sonrió al notar que el menor se sentía por demás ansioso – Salvo ciertos estratos… que, por su nivel social, renuncian al amor…

 

¡Claro que no renuncian! – Shun se había puesto de pie, se sentía demasiado contrariado… Afrodita no podía pensar así, entonces él tampoco creía en su unión con los gemelos…

 

Varios del clan se habían puesto en guardia, debido a que sintieron la angustia en su príncipe, incluso Hades salió a ver de qué se trataba… los gemelos lo acompañaban, y no les gustó que el motivo del enfado del elegido, sea justo su pareja - ¿Qué está sucediendo ahí?

 

Te exaltas porque tu hermano está involucrado… pero yo solo intento que comprendas el punto de vista de mi primo – el oji celeste jamás perdió la calma, aunque ciertamente percibía que a su alrededor todos se estaban poniendo alertas – Mime jamás se había enamorado, por tanto, no tiene parámetro para entender lo que siente… así que, yo considero que Ikki va a tener que tener mucha paciencia con él… y aunque ya sean pareja, bien podría, de igual manera, cortejarlo…

 

Se sintió avergonzado por su arranque… y más, porque Afrodita jamás perdió esa sonrisa tranquila… las palabras que dijera, tenían mucho sentido… pero había algo que se sintió muy mal en su interior… - Entonces… ¿piensas que podría enamorarse… aún?

 

¡Claro! – sonrió al responder – Estoy seguro que lo de patán, tu hermano lo puede superar… estoy convencido que en el fondo puede ser todo un príncipe azul… - afinó su mirada notando un cierto cambio de aura - ¿Por qué se apagaron tus esmeraldas?

 

Cuando mencionaste… que Mime no sabe lo que es amar… - murmuró con cierta agonía – Tú si…

Es diferente… así que cambia esa cara – sus palabras consiguieron que las miradas se enfrentaran – Como mi tiempo era limitado… yo me entregaba a todo lo que hacía, sin restricción… me entregué a mis estudios, a mis investigaciones… a mis amistades… y claro… a mis amores… eso es lo que pasa cuando cada día puede ser el último, no piensas si lo que sientes es real, o no… solo te dejas llevar.

 

¿Y ahora? – Shun observó profundamente a quien parecía aún mayor de lo que realmente era…

 

No estamos hablando de mi… así que aparta esos pensamientos trágicos y deprimentes… - el mayor simplemente se retiró… cuando Hades se acercó a él, lo observó seriamente…

 

¿Pelearon? – sus miradas se encontraron…

 

No… pero me doy cuenta que Dita es más intuitivo de lo que esperé… al final, su enfermedad le dio mucha sabiduría – se sentía más en calma, aunque aún estaba algo avergonzado por haber perdido un poco el control… supongo que la objetividad no era su fuerte, cuando involucraba a su hermano…

 

¿Me contarás? – el oji jade abrazó a su pequeña joya… quien inmediatamente asintió…

 

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Llevaba un buen rato, observando el horizonte… había sentido la presencia de sus parejas, pero supuso que no querían interrumpirlo… - ¿Acaso estoy en problemas? – preguntó sin voltearse…

 

¿De qué hablaron? – fue Kanon el que preguntó…

 

Se puso de pie lentamente… - No es algo que los involucre… - comentó partiendo rumbo a su cuarto…

 

Saga no se había manifestado… aunque una parte de él se sentía herido… su joven pareja tenía demasiados secretos… llegaron bien entrada la noche, el gemelo menor supuso que su hermano estaba demasiado disgustado, pero no quería pelear con Afrodita, quien, para sorpresa de ambos, parecía estarles esperando…

 

¿Hice algo incorrecto? – la mirada del peli turquesa era firme… realmente temió que ninguno aparecería esa noche…

 

Teníamos trabajo… - murmuró el mayor, y comenzó a desvestirse, mientras Kanon no perdía detalle de las reacciones del menor… - Deberías dormir ya…

 

Aquellas palabras lo hirieron un poquito… al parecer, ofendió a los mayores y estaban disgustados – Pensé… que podríamos pasar la noche juntos – murmuró, y sus palabras tuvieron un fuerte impacto en ambos gemelos… al notar que ninguno hacía ningún movimiento, se sintió un tanto inseguro, desvió la mirada buscando algo en qué distraerse…

 

La realización de aquellas palabras llegó al mayor, sin embargo, no tuvo tiempo de reaccionar, pues alguien comenzó a golpear fuertemente las puertas - ¿Qué demonios sucede?

 

¡Disculpe, señor!… Joven Afrodita, ¡necesitamos su ayuda! – la desesperación era clara en la mirada de aquel cachorro… Kanon observó a su pareja, quien se aproximó al niño…

 

¿Dime? – el peli turquesa tenía puesta una piyama bastante fina, y la noche estaba helada, por lo que rápidamente su piel parecía haberse erizado…

 

Mi madre… ella no está pudiendo dar a luz a mi hermano… el señor Milo no se encuentra… no sé qué hacer – el terror en esa mirada era evidente… más Afrodita sonrió tranquilo, y colocando ambas manos en los hombros…

 

No te preocupes… todo va a salir bien – dijo sonriendo – Llévame con ella…

 

No había volteado el rostro en ningún momento antes de partir…  Saga tomó un abrigo antes de seguirlo, junto a su gemelo…

 

Azael estaba con la mujer – Lamento haberte molestado… las cosas no están yendo nada bien – hablo el mayor con cierto pesar…

 

Descuide señor… sólo respóndame… ¿Los nacimientos son en forma humana? – Afrodita inmediatamente había comenzado a revisar a la mujer…

 

Sólo en muy contados casos no es así… sin embargo, no suele acabar bien – Azael observó a sus sobrinos, hizo un gesto de disculpa…

 

Salieron afuera por orden del oji celeste… el cachorro lloraba en brazos de Azael, una de las lobas del clan se había quedado a ayudar al doctor, Mime e Ikki se les había aproximado, al igual que Shun y Hades…

 

Mi primo no es especialista en partos – susurró el oji magenta, estaba preocupado… se estaban tardando mucho.

 

Saga escucho aquello en silencio, Kanon y él se observaron, pues en ningún momento notaron ni un atisbo de duda en su joven pareja… el fuerte llanto del bebé los sacó a todos de su ensimismamiento, aunque más de uno se puso alerta al sentir el peligro dentro del cuarto, por lo que no tardaron un segundo en entrar a toda prisa…

 

Tranquila… sólo escucha mi voz… tú bebé está bien… ahora necesito que vuelvas a ser tú – la mujer se había transformado en lobo, y cómo era de esperarse, su instinto quiso proteger a su cachorro recién nacido de los intrusos, Saga hizo notar su fuerza, al igual que Hades, de manera a forzar su cambio, Afrodita seguía manteniendo sus manos en las de la mujer, quien lentamente volvía a su imagen humana… - Has sido muy valiente… es un niño vigoroso, un pequeño milagro…

 

De aquello había pasado ya unas horas, casi todos fueron ya a descansar, salvo Afrodita, Azael y los gemelos, estos últimos debido a que su pareja estaba empecinada en verificar la evolución del niño… - Estaba mal posicionado, y no tengo la espertiz suficiente para posicionarlo bien, por lo que no vi mejor solución que una cesárea… supuse que ella sanaría más rápido si se trasformaba…

 

Pudo haberte atacado – comentó Azael, observando como sus sobrinos aún no había recuperado la calma – Sin embargo, te agradezco que nos hayas ayudado…

 

Descuide, es mi trabajo ayudar a las personas… no es mi especialidad… los partos por lo general, se los dejo a mi tío – comentó risueño… - Necesito dormir – murmuró poniéndose de pie, y observando por primera vez a los gemelos… - Pueden reñirme más tarde…  - suspiró dirigiéndose al cuarto, aquellas palabras los habían impactado…

 

Veo que les está costando – murmuró el mayor, a lo que sus sobrinos simplemente asintieron.

 

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Sentí a mi primo algo decaído – susurro Mime mientras se terminaba de alistar

 

También lo noté… - comentó Ikki, mientras no apartaba la mirada de su pareja… su hermano le había hablado la noche anterior sobre su plática con el buen doctor… - Dime una cosa, Mime… ¿podrás perdonarme alguna vez… todo lo que pasó?

 

No esperó aquellas palabras, por lo que se quedó momentáneamente mudo - ¿Importa eso? – preguntó sin dirigirle la mirada…

 

Si me importa… me gustaría que nuestra familia… sea feliz – comentó con algo de angustia, su pequeña pareja si lo odiaba… y vaya que eso le dolía…

 

Bien – dijo luego de unos momentos… y aunque una parte de él, le exigía rebelarse… la otra parte debía asumir que ambos iban a ser padres, y que lo mejor era un buen ambiente para su hijo – A mí también me gustaría tener una familia feliz… - susurró, aunque fue claramente escuchado por el oji zafiro.

 

Te juro… que no vas a arrepentirte – volteo lentamente al menor, quien tenía ligeramente sonrosadas las mejillas…

 

¿Y cómo está el bebé? – Mime había salido muy contento por aquella pequeña tregua… aunque aún no se sentía del todo convencido, debía ser honesto consigo mismo… él había añorado una familia toda su vida, no podía negárselo a su hijo - ¿Y la madre?

 

Shun notó el cambio de semblante de su cuñado, por lo que se puso más que feliz – Ambos están maravillosamente… aunque tu primo, sigue dormido… Milo llegó a primera hora, y ya los reviso.

 

Creo que este ha de ser el tercer niño que Dita trae al mundo – comento el peli naranja con expresión pensativa – Una vez que confesó que le provocaba mucha ansiedad, y que realmente lo odiaba…

 

Por lo que me comentó Hades, no parecía nada ansioso… manejo la situación maravillosamente – el peli verde se acomodó mientras hablaba… la verdad que la inclusión del del doctor a la manada, había sido muy bueno – Azael no ha parado de alagarlo… si no se hubiera emparejado con los gemelos, creo que mi suegro lo reclamaría…

 

Muy simpático, Shun… no digas eso ni en broma… sabes cómo son los gemelos – Ikki se les había acercado, y aunque encontraba divertido el comentario… no era apropiado decirlo tan a la ligera…

 

Disculpa – susurró el más joven apenado – Sólo encontré divertido imaginar a Dita como padrastro de Hades…

 

Lo se… solo se más discreto, recuerda que Azael es muy apegado a las costumbres, podría ofenderse – el peli azul abrazó a su pareja lo que incomodó un poco a Mime - ¿Quieres salir a dar un paseo?

 

Si… - habían ido a un manantial que era simplemente hermoso… Ikki incluso llevó una canasta con alimentos…

 

Espero que tengas hambre… porque traje de todo – no dijeron mucho mientras comían, Mime se había acomodado por el pecho del oji zafiro, mientras comía y disfrutaba de la vista…

 

¿Es una especie de cita? – preguntó luego de un rato…

 

¡Quizás! – aquella novedad sorprendió al menor… quien incorporándose se volteó para enfrentar al mayor, quien estaba por demás sonrojado…

 

Bien… en ese caso, supongo que podríamos hacer lo que las parejas hacen en una cita – Mime no se podía creer lo que estaba diciendo… y mucho menos, podía dar crédito a lo que estaba a punto de hacer.

 

Ni siquiera atinó a moverse cuando esos suaves labios se posaron en los suyos… aquella era la primera vez que su pareja daba la iniciativa desde su apareamiento – Mime… - susurró el mayor, justo cuando reclamaba esos labios con mayor ahínco.

 

Se habían quedado hasta bien entrada la tarde, ciertamente no habían pasado de los besos, pero Ikki debía admitir que esos besos habían sido los mejores de su vida… su pequeña pareja era realmente dulce si se lo proponía, y él realmente estaba esforzándose en evitar hacer o decir algo que pudiera enturbiar el buen ambiente…

 

Creo que debemos volver ya… quiero ver a mi primo – hablo el peli naranja con pereza…

 

Cierto… es bastante tarde… - y así terminó su primera cita, y el balance le había salido con números positivos al príncipe Fénix… - También quiero ver al buen doctor… y darle las gracias…

 

¿Y eso? – el menor volteó a ver a su pareja… una sonrisa estaba pintada en sus labios…

 

Por todo lo que ha hecho – acotó… a lo que Mime solo aceptó, pensando que se refería al nacimiento del cachorro.

 

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¿Así que te diviertes a mis costillas? – Hades había salido de la nada, ni bien Ikki se había llevado a Mime

 

¡Hades! – se sorprendió el peli verde riendo a carcajadas por la expresión de su pareja… su pequeño estaba mirando intrigado, aunque también sonrió feliz al escuchar su risa - Hola Pequeño Abel… ¿dormiste bien?

 

Su nombre es Lían – comentó el mayor… mientras entregaba al pequeño a su pareja…

 

Lían Abel… si, me lo dijo Ikki – habló con calma el peli verde – Yo se que mi hermana le puso Abel por nuestro padre… y mientras más lo miro, más se parece a su abuelo…

 

¿Enserio? – Hades reparó en su hijo buscando el parentesco que afirmaba el menor… su hijo tenía los cabellos oscuros como él, pero sus ojos… esos si habían salido a Pandora, y ella los había heredado de su padre… - Quizás un poco… ciertamente, tiene un cierto aire de Abel…

 

Mas entrada la tarde, se encontraron con todos en el comedor… como era de esperarse, el tema del parto, era la comidilla del día… aunque el oji esmeralda, no vio por ninguna parte a Afrodita, y sabía, pues los gemelos estaban ahí, que ya se había despertado – ¿Crees que los gemelos están disgustados con Dita?... los noto algo distantes…

 

Iré a sondear… - beso su cuello antes de retirarse, mientras que Shun buscó a su hermano o a Mime…

 

Un aroma lo llevó hacia la salida, y pudo notar que Afrodita estaba sentado, observando el horizonte… - Un dólar por cada pensamiento…

 

¡Te volverás rico! – murmuró el mayor, sin voltearse a ver…

 

¿Ocurre algo malo? – Shun se había sentado a su lado… ya había notado que al peli turquesa parecía gustarle mucho el ocaso…

 

Están enojados… y no entiendo ¿por qué? – murmuró y Shun sintió algo de pena por él… debía ser difícil lidiar con dos Alfas… - Me hace sentir fuera de lugar…

 

¿Y ya lo hablaste con tus parejas? – el oji esmeralda tenía una clara idea de lo que molestaba a los gemelos… y sospechaba que Dita también lo sabía… - Auto excluirte no va a conseguir que se aclaren las cosas…

 

No me estoy excluyendo… estoy pensando – Afrodita se mantenía serio, el más joven se preguntó si se había dado cuenta de los melancólico que estaba…

 

Ven… vamos a comer algo – ordenó el más joven tomando de la mano a su amigo – Con el estómago lleno, te será más fácil pensar…

 

Disculpe, señor – una loba se les había aproximado… - Muchas gracias por todo, Joven – Afrodita se sorprendió pues la mujer le ofrecía una especie de bebida, la que tomó con algo de renuencia… él no estaba muy familiarizado aún con las costumbres… - Acepte esta bebida, por haber salvado a mi hermana…

 

Claro… gracias – Shun notó inmediatamente el cambio de ambiente, Afrodita se mostraba cálido por el gesto, y eso no le estaba gustando a dos lobos muy grandes, que estaban mirando el acto con mucho disgusto…

 

Lo tomaré después de comer – mencionó el doctor, con una sonrisa antes de despedirse… Shun observó como Afrodita notaba la mirada de sus parejas, y como pareció confundido primero… molesto, después…

 

¿Amor? – Hades se le había aproximado… - Según ellos todo está bien… por lo que sospecho que se mueren de los celos… su pequeña pareja es muy reservada, y eso les crea inseguridad…

 

Creo que Afrodita ya lo notó, y que está molesto… - acotó preocupado… - Todo fue mal, luego de mi arrebato de ayer…

 

¡Shun! – Mime se le había aproximado presuroso… parecía radiante… Mientras a la distancia, se podía ver a Ikki, sentado cerca del peli turquesa.

 

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¡Dime que tienes buenas noticias! – Shura contestó la llamada luego de ver el identificador…

 

¡Te lo dije, cuñado… era cuestión de tiempo! – Radamanthys hablaba con petulancia…

 

No quiero fallas, Rada, él fue convertido… no quiero que pongas en riesgo su vida – el peli oscuro se mantuvo frío al hablar, a la distancia observaba al escuadrón que lo secundaría…

 

Descuida, Shura… hemos descubierto mucho de esa lacra… y las pruebas que hicimos fueron exitosas… el vínculo que se formó, quedará destruido – Diogo también escuchaba… - Beneficiará a Dita, Mime… incluso, a Shun…

 

Lo de Shun puede esperar… no pienso poner en riesgo a mi hermano – hablaba el peli azul con seriedad… cuando al fin la llamada hubo finalizada… - Realmente confías en él…

 

No… una vez que mi hermano este con nosotros, no permitiré que se le vuelva a acercar – el moreno mayor afirmó sin apartar la mirada de la de su primo, quien sonrió en respuesta…

 

¿Qué te parece entonces considerar mi oferta?… Incluso puedes pensar en la oferta de Folken… después de todo, Fika estará a salvo a su lado… y te prometo, que tu hermano, lo estará conmigo…

Notas finales:

Bien, hasta ahí llegue... la continuación creo que la subire pronto, ya avance mucho en su escritura... pero eso suele ser tan relativo, este capitulo lo tenia avanzado en seis parrafos casi por años... y luego en un dia... las musas son muy especiales.


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