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En nuestro camino por RAMSIN

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Notas del capitulo:

Piensa mal y acertaras, de besos robados y burdeles de mala muerte, ser virgen es un peligro.

Este fic es un Gojyo x Hakkai ( los adoro ), también algo de Sanzo x Goku ( aun pienso si solo será algo shonen ai o no, lo veré en el camino del fic, otra cosa, lemon, acción, algo de violencia, Mpreg. si no les gusta o no saben qué demonios es pues tienen chance de devolverse o cerrar la ventana, no obligo a nadie a leer lo que no quieren y es bajo su propio riesgo si lo hacen, por lo demás ahora si les dejo en el fic.

 

En nuestro camino.

Capitulo 4

La virginidad es un mal.

 

Había perdido la cuenta realmente, no sabía en qué instante su mente estaba distrayéndose con la cantidad obscena de ruidos y gemidos que provenían de la pared tras él, el descubrir que dos de sus "niñeras" estaban en plan de futuros padres y de paso que su vida intima estallo como fuegos artificiales, descubrir eso era repugnante para sus ojos, oídos y demás partes de su cuerpo que sin querer se veían inmiscuidas con cada pueblo que visitaban gracias a  la mala suerte de que las habitaciones estuvieran una pegada a  la otra como era el caso esa noche.

-          Ohh...! Gojyo! ¡Sigue... sigue!. - aquel gemido lujurioso le taladro los oídos a un Sanzo que trataba de conciliar el sueño infructuosamente. -

-          ¡Mañana en la mañana les arrancare las &/&&$% para que no puedan volver a hacer sus cochinadas! - lanzo la almohada hasta la otra esquina de la habitación dando de lleno sobre un cierto mono que estaba durmiendo de lo lindo todo explayado en su cama. - como demonios no se despierta con esos ruidos.

Se preguntaran porque el todo paciente Sanzo no les mando a callar con su métodos de persuasión pistola + gritos, sencillo, no se atrevía a interrumpir las barbaridades que estaban haciendo Hakkai y Gojyo, además de que no tenia deseos de ver en vivo y directo ese tipo de cosas que hacían, le bastaba escucharlos en stereo, toda su vida estuvo en un monasterio, enclaustrado y lejos de las influencias o contactos íntimos, lo poco que pudo aprender fue después de crecer y salir en busca de las escrituras de su asesinado maestro y padre, pero a pesar de ello tampoco sintió atracción ni física o emocional hacia nadie, nada le despertaba pasiones hasta que una voz le hizo cambiar de parecer sobre los sentimientos de las personas.

-          Mono idiota... - se levanto de la cama  con fastidios, esa sería una larga noche. - ni dormido puede estar quieto.

Sin mucha prisa busco en la mesita de noche junto a la cama su cajetilla de cigarrillos, saco uno y paso a encenderlo, no podría dormir hasta que sus ruidosos vecinos culminaran su tanda de sexo, recargado de la pequeña ventana que tenia la habitación fumo tranquilamente sin pensar en nada en especifico hasta que sintió como Goku se estiraba más aún en la cama susurrando a cerca de lo que comió en la noche, dio un giro brusco hasta el borde de la cama consiguiendo venirse al suelo con todo y las mantas, ni el golpe contra el piso lo despertó, solo se estiro un poco mas y siguió durmiendo como si nada.

-          Baka. - apago el cigarrillo contra el marco de la ventana y camino hacia donde estaba el chico dormido, en un segundo sintió algo muy dentro de el despertando como en otras ocasiones. -

Sus ojos violetas se centraron en las líneas suaves y gentiles del rostro de Goku, tenia una expresión casi angelical mientras no estuviese roncando o hablando dormido sobre comida, sin darse cuenta ya había acortado la distancio lo suficiente como para sentir el cálido aliento del chico, se agacho junto a él para tratar subirlo a la cama otra vez, no tenía ganas de encontrar a un Goku la mañana siguiente todavía durmiendo como tapete en el suelo, con nada de suavidad paso sus manos por la espalda y piernas del dormido, en ese justo instante el mono se giro un poco abrazándose con fuerza al cuello de Sanzo, apoyo su cabeza del pecho del mismo y susurro algo que no pudo entender muy bien pero que tampoco su cabeza le dejo procesar, estaba con el corazón desbocado sintiendo el calor, la cercanía y el tibio cuerpo de aquel muchachito tonto que libero, con dificultad logro alzar el cuerpo de Goku para depositarlo en la cama otra vez, no quería que despertara y le vieran haciendo eso.

-          Suéltate mono idiota. - trato de alejarlo de él, pero el chico seguía aferrado a su cuello con una fuerza barbará para alguien que está dormido. -

-          Sanzo... - susurraron sus labios suavemente mientras que el mencionado dio un respingo dispuesto a dejar caer a Goku otra vez antes de que despertara y viera que lo tenía entre sus brazos por fuerzas mayores a sus razonamientos. -

-          Diablos. - miro los delgados labios que lo nombraron, su boca apenas abierta como invitándole a ser profanada por primera vez, ya había sentido esas ganas antes pero siempre se contuvo gracias al terror de las consecuencias de sus actos, el tan regio y fuerte no podía si quiera controlar sus deseos cuando tenía a ese mono cerca, era algo que le arrastraba a cruzar los límites de lo permitido, a descubrir que se sentía eso que llamaban deseo carnal. -

Negó unas cuantas veces con su cabeza como queriendo sacarse las ideas absurdas que nacían una tras otra mientras Goku permanecía en sus brazos, su cuerpo se sentía caliente, su estomago estaba como lleno de mariposas revoloteando, sentía como algo dentro de él le pedía a gritos besar a Goku, poseerlo,  cumplir con un sucio deseo que se incrusto en lo más profundo de su mente cuando descubrió que estaba más que salvándolo de un encierro, que su corazón sentía no solo lastima por él, también había algo más que le impulsaba a tenerlo a su lado, a soportar todo y en su extraño modo, a quererlo con rudeza apache.

-          No pasaría nada si te beso... estas dormido.  - mascullo como dándose el valor para saltar el último de los limites. - no pasara nada.

Bajo su cabeza poco a poco para acercarse a aquellos labios rosados y tentadores, el aliento embriagante de Goku le lleno los sentidos, le dio un impulso mas para cerrar sus ojos y sentir a plenitud como su cuerpo se deshacía en placer, un poco mas y estaría reclamando esa piel como suya... nunca había besado pero quizás no necesitaba de instructivos para el corazón, las ganas eran más que los miedos, así que dio el ultimo acercamiento juntando los labios suavemente contra los de Goku, fue un instante no mas, ese calor, esa sedosa sensación cálida, cuando se sintió satisfecho de su robo perfecto intento separarse de Goku pero este aun dormido movió sus brazos y apretó más aun sus rostros uno contra otro al tiempo que abría su boca un poco moviendo su lengua en el interior de manera provocadora.

-          AAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHH!!!. - un grito lastimero fue el cierre a ese robo fracasado. -

La mañana pintaba radiante a ojos de Hakkai, abrió los ojos al sentir como su infaltable dragón se revolvía encima de él, había pasado un mes desde que supieron de su condición y sin embargo Hakuryu seguía cuidándole el sueño cuando Gojyo no estaba,  también había aprendido a tolerar el contacto entre ambos o era que ya sabía que ese bebe era de los dos, al final todo lucia mejor para Hakkai estaba de muy buen humor después de que las nauseas matinales desaparecieron, su cuerpo solo daba indicios de mas apetito y energías, por sus propios cálculos sacaba la cuenta del tiempo de gestación así que para ese momento contaba con 3 meses de embarazo.

-          Buenos días Hakuryu. - acaricio la cabecita del animal con ternura. -

-          Kyu. - respondió suavemente ante el contacto. -

 Sin mucha prisa se levanto de la cama notando que ya Gojyo no estaba a su lado, dio unos pasos suaves por la habitación buscando su ropa que la noche anterior acabo regada por el suelo ante el encuentro amoroso que tuvieron, con calma levanto todo y comenzó a vestirse, sus pantalones fue lo último que intento ponerse pero para su asombro estos no cerraron, su vientre aun no se veía muy diferente pero si sentía como los músculos y huesos de su pelvis habían estado moviéndose últimamente causándole molestias e incomodidades.

-          Empezaste a acomodar todo. - sonrió con resignación y paso a buscar algo para sujetar sus pantalones sin cerrar el botón. -

-          ¡Buenos días! - la puerta de la habitación se abrió trayendo a un pelirrojo emocionado y con algo entre sus manos. -

-          Buenos días Gojyo. - se cubrió el estomago rápidamente con su camisa negra. -

-          ¿Porque la pena?... anoche vi más que eso. - camino seductoramente hasta el castaño rodeando con una de sus manos la cintura del mismo. - toma.

-          ¿Qué es eso? - tomo el pequeño paquete entre sus manos, era una cajita no más grande que su mano. -

-          Ábrelo. - beso el cuello de Hakkai con suavidad. - lo vi temprano en un puesto cuando salí a comprar mis cigarrillos.

-          Es... - saco de la caja un pequeño sonajero amarillo. - eres más dulce de lo que imagine.

-          Solo un detalle

-          Al bebe le gustara. - guardo el sonajero entre sus ropas. -

-          Es hora de ir a desayunar, muero de hambre...

-          Suenas a Goku.

-          Tanta acción anoche me dejo con las energías bajas. - sonriso descarado mientras pasaba una de sus manos por su cabellera rojiza. -

-          Gojyo.

-          Dime. - se detuvo de salir cuando escucho su nombre. -

-          Te amo.

-          Lo sé. - le guiño un ojo divertido. - yo también a ti.

La pareja salió rumbo al restauran de la posada de turno, todo parecía normal cuando vieron a Goku devorando como siempre su comida mientras Sanzo estaba sentado leyendo su periódico y tomando té, parecía el propio anciano como decía Gojyo, el resto se les unió y las acostumbradas peleas de Gojyo y Goku sobre la comida y la discusión sobre su ruta no se hicieron esperar.

-          Creo que debemos evitar las rutas de montañas. - Hakkai con mapa extendido sobre la mesa trataba de explicar sus ideas. - Sanzo, ¿me oyes?

-          Si oigo. - respondió de mala gana todavía con periódico en alto. -

-          Entonces necesito que mires esto. - Hakkai sintió que pasaba algo, el monje estaba muy esquivo esa mañana. -

Con su acostumbrada paciencia, tomo un par de palillos chinos y jalo un poco el periódico de Sanzo para que le mirara a la cara pero cuando logro verlo se quedo perplejo.

-          Sanzo... ¿qué te paso en la boca? - observo con asombro como el rubio tenía una especie de marcas rojas en el borde de su labio inferior. -

-          No es de tu incumbencia. - trato de alzar otra vez su lectura pero ahora era Gojyo quien se lo quito de una riéndose. -

-          ¿QUIEN TE MORDIO MONJE SUARTUDO?, JAJAJAJA!! - el pelirrojo no paraba de reírse como loco, aquello sin duda alguna era una mordida, se podían ver las marcas de los dientes bien definidas en la piel blanca de Sanzo. -

No pasaron más de dos segundo cuando el cabreado Sanzo empezó a jugar tiro al blanco con Gojyo, descargo toda su pistola ante la mirada atónita del resto de los comensales en la posada.

-          ¡BASTARDO! ¡CASI ME MATAS!. - el pobre pelirrojo estaba metido bajo una mesa para escapar de aquella balacera. -

-          Sanzo, te quiero pedir un favor. - Hakkai sonreía como si nada mientras el monje recargaba su pistola muy serio. -

-          ¿Qué?

-          Ten en cuenta que necesito a Gojyo vivo.

-          Esa cucaracha no se morirá con un solo balazo. - rezongo indignado.-

-          ¿Qué te paso en la boca Sanzo? - Goku muy inocente se atrevió a preguntar. -

-          ¡BAKAZARU! - le lanzo un abanicazo tan fuerte que el pobre Goku acabo estampado en el suelo sin poder evitarlo. -

-          ¡DUELEEEE!. - se sobo con dificultad. -

-          Soy yo o Sanzo - sama se levanto con el pie izquierdo. - Gojyo sale de debajo de la mesa al ver como el rubio se fue. -

-          Goku, ¿no viste que le paso a Sanzo anoche? - Hakkai pregunto curioso. -

-          Eh.... - se volvió a sentar en su silla mientras trataba de rememorar los acontecimientos de la noche anterior. - solo nos acostamos, como siempre me grita que no lo despierte y ya.

-          Solo eso. - Gojyo rasca su barbilla analíticamente hasta que una idea nada sana se le cruza por la cabeza. - oye Hakkai... que tal si el pillín de Sanzo se escapo a un burdel anoche mientras dormíamos.

-          Creo que Sanzo no tiene esos gustos Gojyo, no es como tú.

-          ¡Yo deje de hacer eso hace mucho tiempo! - noto como aquel comentario hizo que un aura negra rodeara a Hakkai. - y solo lo decía porque Sanzo es un monje y los monjes son célibes... pero... que tal si este monje quiere romper la última de las reglas.

-          Ya fuma, bebe, blasfema y mata gente... en verdad solo le falta eso, si no es que ya lo ha hecho. - analizo Hakkai muy tranquilo. -

-          ¿Con quien lo va a hacer Hakkai, quien querría acostarse con un monje apestoso y egocéntrico como él? - encendió un cigarrillo muy tranquilo. - ni Goku querría tener sexo con él.

-          ¡Gojyo! - Hakkai alzo la voz por las imprudentes palabras del kappa pervertido. -

-          ¿Qué es tener sexo?- la cara de inocencia total era un poema en Goku. -

-          Tienes razón. - susurro Hakkai con un dejo de pena -

El día trascurrió sin más detalles, Sanzo se mantuvo al margen del grupo, aquella mordida era una especia de chiste andante que tenia pegada a la cara, como maldecía la hora en que se le ocurrió besar al mono estúpido, nunca imagino que al abrir la boca se ganaría una buena mordida por parte de un Goku que seguía soñando que comía, no tuvo tiempo de evitarlo, solo después del mordisco su cuerpo reacciono de inmediato soltando al chico bruscamente en la cama y devolviéndose a la suya apaciguando el terrible dolor en su labio.

 El viaje debía continuar, pero Sanzo estaba demasiado molesto e irritable, parecía un demonio lanzando abanicazos, desenfundando su pistola desterradora y dando discursos hirientes a todos los pasajeros del jeep cuando siguieron su recorrido al siguiente pueblo, bueno esta vez era más que un pueblo, resulto sorprendente ver una ciudad con tanta vida delante de ellos, su siguiente parada era una ciudad bizarra, llena de gente que apostaba, con casinos y bares por doquier, hombres borrachos tendidos a su anchas, mujeres de la mala vida vendiendo su cuerpo por unas monedas, todo era una especie de Sodoma y Gomorra versión pueblerina.

-          No nos quedaremos en este hueco inmundo. - mascullo de una Sanzo al ver como un borracho casi se lanza sobre el jeep a su paso. -

-          Pero debemos descansar... - Hakkai lo decía mas por el que por el resto, su dolor en las caderas había empeorado un poco con las horas de manejo por terreno difícil. -

-          Busquemos un lugar decente y listo. - Gojyo se quedo mirando como unas chicas se ofrecían a su paso. - este es el paraíso de un pervertido.

-          Ese era tu pasado, no Gojyo. - Hakkai hablo con un tono solemne y serio. -

-          Creo..., que Sanzo tiene razón, mejor nos vamos inmediatamente.

-          Necesito descansar, no puedo seguir por hoy. - ahora sí que el castaño lucia sombrío. -

-          Sanzo paremos... no me gusta ese Hakkai, da miedo. - hablo Goku muy bajito para no alterar al nombrado. -

Hakkai gano la discusión, su mal humor por el dolor era motivo suficiente para que el resto se doblegara ante su petición, luego de recorrer casi todo el pueblo, descubrieron una pequeña posada casi al final de mismo, era la que menos lucia indecente, entre tantos burdeles y sitios de apuestas. Después de bajar del vehículo y registrarse, el grupo tuvo que compartir habitación, no había suficientes cuartos y en ocasiones como esas los cuatro dormían en uno solo.

-          Dos camas. - sentenciaron Gojyo y Goku a la vez. -

-          Este lugar es una porquería. - Sanzo pasó de largo y se hecho en una de las camas declarándola de una vez como propiedad suya. -

-          ¡ES MIA! - Gojyo y Goku se empezaron a pelear por quien se quedaba con la otra cama. -

-          ¿No han pensado que estoy realmente agotado por el viaje y en mi condición no debería dormir en el suelo? - la sonrisa del castaño no se borraba de su rostro mientras hablaba. -

-          Toda tuya. - los dos se bajaron de la cama sin decir ni a. -

-          Gracias. - se sentó cómodamente mientras sacaba el sonajero que seria para su bebe, estaba pensando en tantas cosas mientras que hasta Hakuryu se tornaba curioso por el objeto. -

-          ¿Es para el bebe? - Goku se arrodilló a los pies del castaño tan curioso como el dragoncito -

-          Así es. - movió el sonajero unas cuantas veces. -

Mientras Hakkai y Goku conversaba sobre el futuro bebe, Sanzo se salió de la habitación sin rumbo definido, estaba muy molesto aun por quedarse en ese pueblucho, pero su verdadera rabia nacía de una frustración amorosa, no comprendía o más bien no sabía cómo iniciar algo que su cuerpo empezaba a demandar a gritos, sabía que en físico Goku no era un niño, pero su mentalidad echaba por el suelo todo intento de algo serio, no supo en qué momento se enamoro de ese inmaduro ser, de que se descompusiera con cada contacto y cercanía que tuviesen, ya ni si quiera para dormir era cómodo, solo el hecho de verle allí acostado le excitaba, era como unas ganas enormes de ir y poseerle, ¿pero de qué modo?, se sentía estúpido de no poder dar un paso mas allá porque carecía de las reglas básicas de juego en el arte del sexo, nunca le intereso mucho y tampoco era de ese tipo de hombres que buscaban el calor de una cama como cierto kappa pervertido.

-          Gojyo... - susurro algo complacido por la idea que se le cruzo en la cabeza y que después se arrepintió de si quiera imaginarla. - Ese desgraciado solo se burlara...

-          ¿De qué me burlare? - la voz del pelirrojo resonó tras la espalda de Sanzo. -

-          ¡MALDITO IDIOTA CASI ME MATAS DEL SUSTO! - ya tenía la pistola desenfundada cuando Gojyo se le acerco por detrás. -

-          Y tú que, ¡casi me disparas! - bajo las manos al ver que Sanzo guardo el arma. -

-          ¿Qué haces siguiéndome?

-          No te seguía, estaba era tratando de escapar de tanta dulzura. Hakkai y Goku estaban en plan de solo hablar de cosas bonitas.

-          ........ - se llevo un cigarrillo a la boca con calma. - te tengo una pregunta.

-          De que será oh Sanzo - sama.

-          Es serio. - saco su pistola otra vez y la apunto al pecho de Gojyo. - si te ríes cuando la haga te pondré una bala justo allí.

-          Que incentivo mas lindo.

-          Cállate y escucha. - dio un hondo suspiro y paso a tomar todo el valor que podía para revelar un secreto algo vergonzoso de él. - quiero... como puedo.... Necesito... ¿cómo demonios le haces para acostarte con alguien?

-          Sanzo - Gojyo no hizo ni una sola mueca, solo sonrió algo malicioso y poso su mano sobre el hombro de Sanzo con mucha confianza. - esta noche te enseñare un nuevo mundo Sanzo - sama.

-          De que hablas cucaracha pervertida. - siguió apuntando a Gojyo con molestia. -

-          Lo sabía, ¡eres virgen!

-          ¡TE MATARE!

-          Dijiste que no me riera y no me reí, solo estoy confirmando tu pregunta con un hecho.

-          Habla. - bajo el arma.-

-          Mira donde estamos, que mejor lugar para que un célibe como tu pierda el miedo a las mujeres. - sonrío con morbo. -

-          No estoy interesa...

-          Silencio, ahora el maestro del amor Gojyo te guiara en el camino pecaminoso del placer.

-          Si Hakkai te escuchara te quitaría la lengua de un tajo.

-          Yo no voy a acostarme con nadie, TÚ te estrenaras esta noche.... Yo solo te daré unos tips prácticos. - sonrío mas lujurioso aun. - vamos a buscarte una buena chica que sea para ti... si es ciega mejor aun.

-          ¡MALDITO PERVERTIDO! - el pobre de Sanzo estaba todo rojo hasta las orejas por la palabras de Gojyo. -

-          Yo descubrí mi felicidad con Hakkai así que no te atrevas a decirle lo que haremos esta noche, creerá que estoy en mis antiguas mañas y  no quiero discutir con él.

-          No voy a hablar con nadie sobre esto. - mascullo resignado y algo arrepentido por revelar su secreto a un ser como Gojyo. -

El dueto se paseo por medio de una gama de lugares, para que Gojyo fuera una rata estaba ayudándole mucho, sin contar de las barbaridades que le decía cada dos por tres sobre como tocar o besar, era demasiada información para alguien como Sanzo, solo estaba mudo y de vez en vez ponía limites con su pistola o un buen insulto, entre tanta charla acabaron en un burdel que parecía muy prestigioso, al menos no tenia tipos morbosos tirados en la entrada ni borrachos latosos, adentro, los cegó las luces rojas y el sonido de música, algunas mesas pequeñas esparcidas por el lugar y sobre una improvisada tarima una bailarina exótica con solo un diminuto bikini se contorsionaba al ritmo de los aplausos y chiflidos de los hombres, el sitio estaba a reventar así que Gojyo llevo a Sanzo hasta la barra para preguntar algunas cosas.

-          Buenas noches señor. - el pelirrojo intercepto a un barman que estaba muy tranquilo fumando y limpiando un vaso. -

-          Diga.

-          Quisiera el servicio de una chica, ¿quien dirige aquí?

-          Allá. - el hombre solo se limito a señalar a una mujer realmente hermosa que estaba sentada al fondo con algunos hombres bebiendo. -

-          Estoy dudando de esto maldito pervertido. - a Sanzo le entro algo de pánico por lo que sucedería, y aun no estaba convencido de hacerlo con una mujer si lo quería era a Goku. -

-          Tranquilo, la primera vez da miedo pero si te consigues una buena maestra, será el paraíso. - codeo con morbo al monje y siguió caminando hasta la mesa de la mujer. -

-          ¿Seguro que te gusta Hakkai?

-          Ese tema es sagrado. - se puso serio ante la pregunta. - Hakkai es algo muy superior a esto monje apestoso.

-          Ya veo, eres gay.

-          Ja ja que risa me da tu comentario. - le miro con fastidio. -

-          Solo quería estar seguro de algo.

-          Cállate y aprende. - dejo a Sanzo un poco atrás para el acercarse a la mesa donde estaba aquella belleza. - buenas noches señorita.

-          Señorita... - la mujer alzo la mirada en un segundo hacia Gojyo. - hacía tiempo que nadie me decía así chico guapo.

-          Le tengo respeto a todas así que siempre les diré señoritas. - sonrío tipo galán. - necesito saber sobre los servicios de este lugar.

-          Quieres una noche inolvidable forastero. - sus labios rojo intenso se curvaron con suavidad al ver a Gojyo, el tipo no lucia nada mal para su gusto. -

-          No es para mí, el servicio es para mi amigo allí atrás. - señalo con su dedo a Sanzo. -

-          ¿Para él? - la mujer miro con asombro al monje, sabía muy bien que las indumentarias eran de uno y eso la descoloco más aun. -

-          no, no es monje... solo le gusta vestir como uno, cosas de su gustos, pero lo que quiere es... tú sabes, la noche de inauguración. - dio unas risitas contenidas ante lo que pasaría con Sanzo. -

-          ya veo... quiere su primera experiencia. - la mujer se puso de pie dejando al grupo de hombres solos. - yo misma le hare el favor a tu amiguito.

-          ¿Seguro? - miro asombrado como una mujer tan espectacular prefiriera un cliente como el monje. -

-          Dile que me espere en la habitación 3 al fondo de ese pasillo, voy a refrescarme primero. - se despidió de Gojyo lanzándole un besito al aire. -

Toda aquella conversación no la escucho Sanzo per si noto perfectamente las indicaciones de la mujer, eso le hizo que un nudo extraño se le hiciera en el estomago, nunca había sentido algo así, era una especie de miedo a lo inevitable y ni cuando estaba por morir en muchas de las veces que le toco, se había puesto así.

-          Tienes suerte monje apestoso, la manda más te quiere estrenar. - prendió un cigarrillo despreocupado. - te espera en la habitación 3 por ese pasillo. - señalo con el cigarrillo hacia el lugar indicado. -

-          Esa mujer quiere... - miro dudoso hacia el lugar. -

-          Quién sabe, quizás tiene fetiche por los chicos vestidos de monjes.

-          Bastardo pervertido.

-          No me agradezcas tanto y échate un buen polvo.

-          Te matare apenas regrese. - sus mejillas estabas rojas sin duda alguna, esos comentarios de Gojyo lo descolocaban de una.-

Gojyo se quedo bebiendo en la barra del local, estaba muy concentrado en no distraer su mente y menos aun cometer alguna estupidez, adoraba a Hakkai y ahora lo amaba más que nunca por lo que los unía, mientras, adentro de la famosa habitación 3, un nada cómodo Sanzo se preguntaba como había podido dejarse convencer por el kappa para estar allí, veía con asco todo el lugar, la habitación en si era desagradable con las paredes rosa chillón, una cama que quien sabe cuántos hombres dejaron sus genes allí regados, el techo estaba repleto de espejos que él ni sabía qué función cumplían pero si podía estar seguro que nada sano era, a pesar del asco se sentó en la orilla de la cama y se quito la parte de arriba de sus ropas quedando con su camisa negra ceñida al cuerpo, su pistola y su Sutra en un lado de la cama, no se separaría de ellas por nada del mundo.

-          Eres lindo. - la voz femenina le alerto de que las cosas empezaban a calentarse. - tienes una cara angelical.

-          ¿Te pagan por decir esas cosas? - su mal carácter siempre saliendo a relucir. -

-          Me pagan por dar placer. - camino hasta la cama donde estaba Sanzo sentado, dio una vista rápida notando la pistola desterradora. - las armas no pueden estar aquí dentro, reglas del local.

-          Si ella se va yo también. - miro indiferente a la mujer. -

-          Ya creo que se cuál es tu problema lindura, falta de cariño. - poso su mano sobre la mejilla del rubio, suavemente deslizándola hasta rozar el cuello de Sanzo. - empecemos, seré toda una buena maestra para ti.

Era surrealista, estaba tirado bocarriba en esa cama sintiendo como una total desconocida estaba sobre sus caderas, acariciando su cuello, pecho y bajando a donde antes nadie había estado, su cabeza se sentía estallar, era como si cometiera un terrible pecado con ello, su mente estaba llena de imágenes de Goku, de sus tonterías, sus líos y sus sonrisas, era como si le recordaran quien mandaba en su corazón, aun molesto por ello, quiso olvidarle así que se concentro en los detalles físicos de la chica que estaba sobre el ya quitándole las botas y desatando el nudo de sus ropas. Era una belleza sin duda alguna, con sus largos cabellos negro azabache, unos ojos azul oscuro muy rasgados, su piel realmente blanca que resaltaba más aun con las ropas que cargaba, un pequeño y ligero vestido rojo oscuro  que mostraba más de lo que cubría, en ese instante detallo la gargantilla color oro que colgaba del cuello de ella, era peculiar y en cierto modo le recordaba la diadema de Goku.

-          Quítate eso. - detuvo las manos de la chica que ya casi le quitaban toda la ropa. -

-          ¿No prefieres que me desnude primero?, las alhajas son de último.

-          Que te quites ese collar. - se sentó de golpe en la cama todavía con aquella mujer encima de él. -

-          Mis servicios no incluyen juegos extraños, tu amigo dijo que eras virgen pero pareces más un loco.

-          Me largo. - trato de tomar sus cosas pero la pistola y el Sutra ya no estaban en donde los dejo. - ¿DONDE ESTAN MIS COSAS?

-          ¡GENJO SANZO!! SIN DUDA TE TENGO DONDE DESEE....

En un segundo aquella bella mujer se deshizo del collar liberando su verdadera forma demoniaca, sus cabellos se hicieron más largos aun mientras que unas marcas negras en forma de lagrimas se dibujaban bajo sus ojos, aquel demonio alzo sus garras para clavarlas sobre el pecho de Sanzo pero este le empujo haciéndola rodar directo al suelo.

-          Este pueblo no es lo que parece... - el rubio miraba por todos lados para encontrar su pistola. -

-          ¿Buscas esto? - en un segundo la mujer demonio estaba parada lejos de Sanzo con la pistola y el Sutra en sus manos. -

-          Maldita perra... estas metida en un lio enorme.

-          Seré famosa por comerme al legendario Genzo Sanzo y de paso contare que eras virgen.

-          HIJA DE &&%& - se lanzo con toda sus fuerzas para golpear a la mujer pero algo le detuvo sus movimientos. - ¿qué demonios es esto?

-          No te muevas mucho porque cortan.... - toco delicadamente una fina y casi invisible hebra de cabello negro de los que sujetaban las manos, cuello y cintura de Sanzo. - esta es mi habilidad, manejo todo este pueblucho con mis cabellos.

-          Tanto trabajo solo por nosotros. - mascullo incomodo por la presión de los cabellos en su cuello. -

-          Quiero ser famosa, quiero ser el demonio más recordado de la historia por matar al grandioso grupo de Sanzo. - jugó con la pistola en sus dedos. - ya tus amigos en estos momentos deben estar muertos.

 

Continuara..........

 

 

Que capi más largo me salió pero me encanta!, ando con las energías a mil, recargada para seguir adelante y darles ahora un poco de acción y terror, jejeje que pervertido es sin duda alguna Gojyo XD... Sanzo tendrá que hacerle pagar por llevarlo a ese burdel con la mujer demonio. Pero ahora me pongo seria esto será fuerte, que paso con Goku y Hakkai? , Caerían en la trampa de igual manera y Gojyo? bueno les dejo esa de duda para el próximo capítulo!.

 

Próximo capítulo:

Por un pelo.

 

¡URASAI!

 

 

Goku y Hakkai seguían platicando amenamente con respecto a lo del bebe, para Goku era sumamente divertido pensar en que su amigo seria mama y sus preguntas no dejaban de sobrepasar la imaginación, pero una duda salida de otro lado seria más reveladora que cualquier otra cosa.

-          Hakkai  sabes que recordé algo de la noche cuando Sanzo termino mordido. - miro muy serio al castaño. -

-          ¿Qué recordaste Goku? - volteo a ver interesando al chico. -

-          Bueno, que estaba comiendo un gran filete pero este tenía la cara de Sanzo.

-          Eh... 

-          Si, era igual a Sanzo, con cabello rubio y mirada de enfadado.

-          Goku eso era una pesadilla.

-          Debió serlo porque cuando mordí el filete, este chillo y desperté tirado en el suelo, quizás me caí de la cama del susto.

-          Si, tuvo que ser una pesadilla. - una gotita resbalo de la frente de Hakkai -

 

Notas finales:

GRACIASSS Y CONTINUEN QUE CREO QUE SUBIRE OTRO ANTES DEL VIERNES HEHEHE!!


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