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Escritor VS Escritor por yukimonik

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Notas del capitulo:

Hola!!! Eh! Me van a matar je, otra vez es un capitulo corto, pero es que no he terminado mi tarea… ustedes dirán… “mañana es sábado, no hay escuela”, pues que creen? De lunes a viernes voy a clases de inglés, solo gramática, y los sábados voy a inglés, pero solo de vocabulario. Ah!! y así me la pase todas las “vacaciones” y el lunes ya entro a la universidad de nuevo… mi quinto semestre je je. Pero ni modo así son las cosas. Solo les pido que me tengan paciencia.

 

 

 

Los personajes no son míos sino de Maki Murakami y de Shungiku Nakamura

Cuando Shuichi salió de aquella oficina se sentía muy confundido y algo temeroso, no podía apartarse de la mente las palabras que el ojiesmeralda le había dedicado ¿a que se referiría?  Cabizbajo se dirigió al estudio de grabación pero se sorprendió al encontrar solamente  a Hiroshi, revisando unas partituras.

 

Cuando el pelirojo vio la cara que traía su amigo, se preocupo y de inmediato fue a donde el ojivioleta.

 

-Shu ¿estás bien?

 

-Si –respondió escuetamente- ¿Dónde están los demás?

 

-fueron a almorzar, pensamos que tardarías más

 

-¿Qué pasa? ¿Qué te dijo Seguchi?

 

-

 

-Shuichi –con un tono un tanto represivo al ver que su amigo no quería hablar-

 

-El… estaba muy enojado

 

-¿Por lo que sucedió anoche? –el pelirosa asintió- ¿Pero que fue exactamente lo que paso?

 

-Pues Usa-chan y yo fuimos a cenar pero… en ese mismo restaurante estaba Yuki… con…

 

-¿Con quién? –Lo insto el mayor-

 

-Con un conocido de Usa-chan –mintió el pelirosa-

 

-Pero… entonces ¿lo que dicen los medios es verdad? ¿Usami-san golpeo a Eiri-san?

 

-Hai

 

-WOW, que bien, hasta que alguien le dio su merecido a ese desgraciado

 

-¡Hiro!! No digas eso, además Yuki le devolvió el golpe a Usa-chan

 

-¡Ah! Tenía que ser –un tanto desilusionado- pero explícame bien ¿cómo fue que llegaron a los golpes?

 

-

 

-

 

-No te puedo contar Hiro

 

-¿Por qué?

 

-Es… muy delicado, tiene que ver directamente con Usa-chan y con el muchacho que iba acompañando a Yuki

 

-

 

-

 

-mmm pues no entiendo nada, pero está bien no te voy a obligar a contarme

 

-Pero

 

-¿Pero?

 

-Seguchi dijo que las cosas no se quedarían así y que haría que Usa-chan pagara lo que le hizo a Yuki

 

-

 

-Ya sabes cómo protege a Yuki

 

-Ya entiendo. Así que Seguchi Tohma vuelve al ataque mmm… no te preocupes shu –dijo el pelirojo con una sonrisa, para transmitirle confianza a su amigo- no creo que Seguchi-san pueda hacerle daño a Usami-san

 

-¡Hiro! Parece que no lo conocieras

 

-Lo sé, lo sé pero mira, Usami Akihiko no es un “don nadie” es decir, independientemente de la fama que tiene como escritor, su familia es una de las más ricas e influyentes de todo Japón

 

-¿Lo dices en serio? –Cuestiono incrédulo el ojivioleta-

 

-¡Ay shu! De verdad que no te enteras de nada –bromeo el pelirojo al ver que su amigo ya estaba más tranquilo- Así que lo mejor será que no te preocupes tanto ¿de acuerdo?

 

-Hai

 

-Bien, ahora hay que ir por los demás para ponernos a trabajar

 

-¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡Siiiiiiii!!!!!!!!!!!!!!! –Grito emocionado el menor-

 

 

 

 

 

Mientras tanto en el departamento de Yuki Eiri

 

 

 

Este se encontraba incontrolable, simple y sencillamente tenía ganas de matar al primero que se le atravesara. Su editora ya lo había llamado unas 20 veces por el “incidente” pero él no quería saber de nada ni de nadie. Intentaba razonar todo lo que había sucedido la noche anterior, por que el definitivamente no era un hombre que hiciera las cosas sin pensar. Anoche había sido una excepción, y es que el ver a Shuichi con el tarado de Akihiko lo había sacado de sus casillas.

 

 

 

Una vocecita dentro de él le decía que todo estaba perdido pues por fin el pelirosa había encontrado a alguien que si lo apreciaba pero… otra le decía que ese bastardo no podía ser la pareja idea del ojivioleta, por dios estaba hablando de Usami Akihiko, el mayor idiota que jamás había conocido en su vida.

 

 

 

-¡¡¡¡¡MALDITA SEA!!!! –Grito el rubio, arrojando el florero que estaba sobre la mesa- Cálmate Eiri –se decía así mismo el rubio- cuando Shuichi se dé cuenta de la clase de cabeza hueca con el que esta y lo mucho que se diferencia de mi, regresara corriendo a mis brazos y entonces me vengare. Por lo pronto que hagan lo que se les dé la gana

 

 

 

En verdad el rubio estaba que trinaba, no quería ni pensar en la posibilidad de que el menor ya se hubiera acostando con el peligris, que Shuichi fuera de alguien más era algo que le trituraba los nervios. Él era el único que tenía derecho a probar el delicioso cuerpo del moreno, había sido el primero en la vida del pelirosa, lo comprobó la primera vez que se acostó con él y había planeado que sería el UNICO.

 

Pero por qué diablos había tenido que ocurrir todo aquello. Eran tan felices; por qué lo eran ¿no? Por lo menos él era feliz. Claro que a veces al pelirosa se le ocurría reclamarles tonterías que eran producto de sus estúpidos celos, la verdad es que desde el momento en el que habían comenzado a vivir juntos nunca se había acostado con nadie más. Por supuesto no era porque le faltaran candidatas y candidatos, era que meramente no le daba la gana, todas las personas que se le ofrecían no se le antojaban ni una decima parte de lo que se le antojaba Shuichi.

 

 

 

-Y PENSAR QUE ESE DESGRACIADO PUDO HABERLO TOCADO YA –recordó una vez más su frustración- Pero no importa, tengo que controlarme, esto no me llevara a ningún lado. Shuichi volverá, se que lo hará, tiene que hacerlo. Pero… no me voy a quedar con los brazos cruzados, ESTA ME LA PAGAS USAMI–menciono el escritor mientras se paraba frente a un espejo y veía el resultado del golpe que le había dado Akihiko, una pequeña abertura en su labio de no más de un centímetros. Pero lo que le dolía no era la herida sino el orgullo.

 

 

 

En eso se escucho el timbre, el mayor se dirigió a la puerta dispuesto a patear los traseros que fueran necesarios con tal de que lo dejaran en paz. Pero al abrir se encontró con su pequeño asistente.

 

 

 

-¡Buenas tardes Yuki-san! –Saludo en el umbral de la puerta el menor. El ojimiel se le quedo viendo por un par de segundos trayendo a su mente la forma en la que había comenzado la “pelea”-

 

-mmm… ¿Qué haces aquí? –Cuestiono el escritor-

 

-Pues… bueno ayer ya no me dijo lo que tendría que hacer, es decir me había dicho que le tenía que llevar unos manuscritos a la señorita Mizuki –El rubio suspiro, pensando detenidamente en su siguiente movimiento-

 

-Pasa –dijo parco el mayor y dando media vuelta para dirigirse a la cocina en donde se acerco a la nevera y saco una cerveza. Cuando regreso a la sala vio que el castaño estaba parado casi en la entrada, muy nervioso-

 

-¿Cuál es tu relación con Usami Akihiko? –pregunto conciso el escritor y clavando su mirada gatuna en el ojiverde, aun con cerveza en mano-

 

-¿Eh?

 

-Es obvio que ustedes se conocían de antes, quiero saber qué tienes que ver con él

 

-Yo… -el castaño estaba sorprendido aunque de alguna manera ya había imaginado que el rubio le haría esa pregunta después de que el peliplata lo ataco así nada más. Bajando la cabeza contesto casi en un susurro- él y yo no tenemos nada que ver el uno con el otro –enfatizando esta última oración

 

-No mientas –le ordeno el rubio-

 

-

 

-¿Me crees idiota o qué?

 

-

 

-Tengo derecho a saber por qué el imbécil ese me golpeo ¿no crees? –Yuki intuyo que ese chico era de los que preferían guardarse las cosas. Pero esto era algo que el necesitaba saber, era vital conocer hasta el último detalle si quería recuperar al pelirosa. Así que decidió ser un poco atento con el menor y ver si de esa manera le sacaba algo-

 

 

 

El ojiemeralda no sabía qué hacer, no planeaba contarle TODO a su jefe, además eran demasiadas cosas y de seguro que él no estaba dispuesto a escuchar toda la historia. Pero veía en aquella mirada que no lo dejaría en paz hasta que tuviera alguna respuesta que lo dejara conforme.

 

 

 

-Usagi, es decir Akihiko-san es amigo de mi hermano y era mi casero, viví con él un tiempo –dijo el chico tratando de contar las cosas de la manera más general posible-

 

-

 

-

 

-¿Y? Estoy seguro que eso no es todo. Al parecer… pensó que yo te estaba cortejando, lo cual quiere decir que entre ustedes hubo algo más que una simple relación de arrendador-inquilino de otra forma no hubiera reaccionado como lo hizo

 

-

 

-¡Vamos! Cuéntame, ¿qué piensas que voy a hacer? ¿Qué lo publicare en los diarios o algo así? Sólo quiero saber por qué una persona como él me ataco, ¿acaso no es justo?

 

 

 

Yuki sabía jugar muy bien sus cartas y aprovechar las palabras al máximo, por algo era escritor, y Misaki cayó en la trampa pues después de pensarlo detenidamente no le hallo problema alguno, es decir era Yuki Eiri que podría pasar si le contara un par de cosas, nada malo según él, entonces ¿Cuál era el problema? Le diría, aunque definitivamente omitiría “pequeños detalles”

 

 

 

-Está bien –escucho decir al castaño. El rubio lo invito a sentarse con un ademán y el hizo los mismo, quedando frente al chico-

 

 

 

Misaki fue el grano sólo estaba dispuesto a contar lo que pensó que quería saber el rubio, le dijo que tiempo después de vivir con el peligris habían comenzado una relación de pareja, la cual había sido rota cuando él tuvo que viajar a Inglaterra para visitar a su abuela.

 

 

 

-¿Y sólo por eso terminaste con él? –Pregunto escéptico el escritor-

 

-S… más o menos

 

-Explícate

 

-Yo… pues quería probar nuevas cosas –el castaño trataba de ocultar la verdadera razón por la cual se había ido, lo que menos quería era dar problemas y causarle lastima a su jefe- Akihiko-san era un tanto sobreprotector y yo me sentía asfixiado. Eso es todo

 

-¡¡¡Vaya, vaya!!!! es una verdadera sorpresa, ¿así que ese id… Akihiko –se corrigió el ojimiel- te tiene un gran aprecio?

 

-No creo que sea así –lo contradijo el menor con una mirada triste y voz apagada- Usted mismo lo dijo, él y Shuichi están… saliendo

 

 

 

El rubio estaba pensando en lo que le había sido revelado. El no era ningún tonto, sabía perfectamente bien que ese “ataque” había sido de celos, lo que significaba que Usami seguía sintiendo “algo” por aquel castaño.

 

Y de pronto una idea macabra cruzo por su mente, Usagi le había robado lo que él mas apreciaba ¿no?, le había quitado a Shuichi.

 

 

 

-Ojo por ojo –susurro el rubio, por lo que su acompañante no alcanzo a escuchar.

 

 

 

Continuara…

 

 

 

 

Notas finales:

Ah!!! Como los últimos dos capítulos han sido súper cortitos prometo que el siguiente, que toca el próximo viernes 13, será al menos de 15 hojas vale?

 

Ah!!! Voy a incluir lemon en el fic… aunque más bien serán un intento pues son los primeros que escribo, en fin… me gustaría que me dijeran de quien con quien lo quieren:

 

a)    UsagiXMisaki

 

b)    UsagiXShu

 

c)    YukiXShu

 

d)    YukiXMisaki

 

 

 

Escojan dos ¿sí? Y me dicen también cual quieren leer primero vale?

 

Tienen hasta el día viernes 13 para emitir su voto

 

Bueno ia me voy a la skul, se me cuidan!!!!


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