Cuando Mello estaba en el hospital yo siempre fui a verlo, solo que él no me veía, ya que cuando él estaba despierto me negaba a entrar a su habitación. Prefería verlo dormir profundamente. Admirando lo que podía, ya que la mitad de su rostro estaba cubierta por unas vendas.
Cuando le quitaron las vendas, (unas horas antes de decirle que se podía ir) Mello grito, maldijo, lloro… simplemente no podía creer que eso le estaba pasando a él. ¨Quedo marcado¨; aunque no estuve con él cuando eso paso…lo sé, porque estaba afuera de la habitación escuchando todo. No tuve el valor para entrar y consolarlo. Mejor me fui. Hui de la situación, cosa que Mello no podía hacer, pero de verdad quería…
...
Cuando salimos del apartamento de Matt, yo estaba sumido en mis pensamientos….hasta que una vos me saco de ellos…
-Near...- Me dijo Watari. Voltee a verlo -¿En qué piensas?- Me pregunto. Yo baje la vista.
-En nada- Conteste
-¿Estás seguro?- Insistió
-Si- Respondí -Quiero ir a dar un paseo- Lo que dije pareció tomarlo por sorpresa, pero asintió.
-¿Quieres que te acompañemos?- Pregunto
-No…- Respondí
-No llegues tarde- Dijo. Yo asentí y me fui de allí.
No estábamos lejos del apartamento de Mat, solo unas cuadras. Así que retrocedí, en dirección a un parque. Me senté en una banca y espere que L y Watari desaparecieran de mi vista. Cuando ya no los vi me puse de pie y camine hasta una tienda cercana. Entre a ella y compre una barra de chocolate, para el rubio. Luego corrí hasta el apartamento de Matt.
No estaba seguro de por qué volvía a halla, pero lo hice. Claro que no era para ver a ese maldito fumador, sino para ver a Mello. No sabía porque, pero necesitaba verlo. Me urgía hablar con él.
Llegue. Me acerque a la puerta. Entonces escuche que alguien la abría. Me escondí detrás de unos arbolitos artificiales esperando que no fuese bastante obvio mi más que tonto escondite. Pero por alguna razón, Mello no se dio cuenta de mi presencia, parecía perdido en su mundo.
Salí de mi ¨escondite¨ y lo seguí a una distancia prudente para que no me viese. Llegamos al parque y empezamos a caminar por la banqueta. Después de darle una vuelta entera al lugar, Mello se sentó en una banca. Yo observé cada uno de sus movimientos desde atrás de un árbol.
Trague saliva. Estaba nervioso, muy nervioso. Quería acercarme pero, ¿Cómo?, ¿Simplemente llegando y saludando como si nada?, si hago eso ¿Qué diré?, ¿Qué lo he estado siguiendo desde que salió de la casa de Matt? Sí, claro, así seguro que me manda a la…. ¡¡Bueno, ya!! ¡Camina Near! ¡Y deja de pensar en lo que puede y no puede pasar!
Camine lenta y entrecortadamente hasta quedar será de la banca donde está el rubio. Aun no nota mi presencia. Me senté un poco cerca de él, pero aun esta perdido en su mundo. Típico de Mello.
-…Mello….- Susurre para captar su atención. Lo logre, pues volteo a verme,
-¿Near? ¿Qué haces aquí? ¿Cuándo llegaste?- Dijo. Al parecer no noto cuando pase frente a él [U¬¬]
-Acabó de llegar- Sonreí
[Versión normal. Con narrador]
-¿Quieres chocolate?- El peli-blanco extendió su mano con la barra de chocolate. Mello lo miro desconfiado
-¿Que planeas? ¿Intentas drogarme o algo por el estilo?-
-¿Por qué piensas eso?-
-Te creo capaz- Cerró los ojos, relajándose
-Pues que desconfiado eres- Abrió la envoltura, tomo un trozo y se lo llevo a la boca -¿Seguro que no quieres?- Volví a extender la mano. El rubio lo miro
-Si me drogas….te golpeare hasta que tengas moretones en los moretones- Dijo, tomando un trozo de chocolate y comiéndoselo -Mmm…. Hace mucho que no probaba un chocolate… en el hospital no me dejaban comerlo…-
-Sí, lo sé-
-Me pelee con Matt hace rato…- Cambio el tema abruptamente
-¿He? ¿Por qué?-
-Por cosas sin importancia- tomo otro pedazo de chocolate -Near… ¿Por qué estás aquí? ¿Es casualidad o me has estado siguiendo?-
-N-No es eso…- Dijo nervioso
-¿Entonces? ¿Qué quieres? Tu nunca me has caído bien, ni yo a ti ¿Qué cambio?- Tomo mas chocolate. El peli-blanco bajo la mirada.
-No lo se…supongo que quería ayudarte…-
-¿Tu también?- Dijo molesto -No soy un estúpido mocoso desvalido-
-¿Qué intentas decir?-
-Que no necesito tu ayuda, ni la de Matt, ni la de L, ni Watari-
-Yo no estaba ofreciéndote ayuda….- Susurro. Mello lo vio confundido -Yo te estoy CONFIRMANDO que necesitas MI ayuda. SIEMPRE has necesitado que te ayude, desde que éramos pequeños-
-Sí que eres bastarlo- Lo miro serio -¿Es lo único que tienes para decirme?- Se puso de pie -Bien. Me voy- Antes de que pudiera dar un paso Near tomo a Mello del brazo impidiéndole que se fuera
-…No he terminado de hablar contigo-
-Pues yo si he acabado de platicar contigo- Dio un paso, aun con el agarre del peli-blanco
-Siéntate- Ordeno
-Suéltame- Fue jalado, quedando sentado donde estaba antes -¿Qué quieres?-
-Que me escuches- Dijo serio. El rubio se rindió, relajando su cuerpo -Yo siempre fui a verte en el hospital….- Susurro -Esas cicatrices no cambian lo que eres aquí adentro- Puso la mano en su propio pecho, encima del corazón -Las personas te quieren por quien eres… no por cómo eres…- Susurro
-Lo único que hace la gente es ver mis cicatrices, no mi corazón-
-Yo puedo verlo…- Susurro acercándose a Mello -Tu solo quieres ser amado y aceptado… así como yo…-
-NO me compares contigo- Se puso de pie -Tu y yo NO somos NADA parecidos ¿Entiendes? NADA-
-Claro que si, Mello- Se puso de pie a lado de él -Somos más parecidos de lo que crees… ambos compartimos un mismo sentimiento-
-Los únicos sentimientos que poseo son el odio y el rencor, NADA más-
-Eso es mentira. Todo ser humano es capaz de amar y ser amado. Ser feliz…estar triste…nostálgico…tenemos más de dos sentimientos…y no todos son malos…-
-¿Por qué mencionas el amor?-
-Porque es el sentimiento más fuerte que poseemos… un sentimiento que siempre tendremos en nuestros corazones…-
-Eso es ridículo…. ¿Cuándo te metieron esa mierda a la cabeza?-
-Deja de pensar así… lo que te digo es verdad…. Esta científicamente comprobado-
-¿Todo lo que dices está científicamente comprobado?-
-No, no todo…-
-¿Estas científicamente comprobado que comer chocolate me provocará SIDA?-
-Tu pregunta no tiene lógica-
-Si no puedes responderme, entonces déjame ir-
-¿A dónde iras?-
-Con Matt-
-¿Por qué volverás con él?-
-El me ofreció su casa. Todas mis cosas esta hay. Además no tengo a donde más ir-
-Puedes volver a casa-
-No, no puedo-
-¿Por qué no?-
-¿No te cansas de hacer tantas preguntas?- Pregunto frustrado
-Solo respóndeme-
-No quiero-
-Hazlo- Empujo a Mello, haciendo que se sentara en la banca. Se coloco frente a él, para que no se fuera -Contéstame-
El rubio intento irse, pero Near lo acostó en la banca y se sentó sobre su estomago, agarrándolo por las muñecas, las cuales puso a los lados de su cabeza
-Quítate de encima. Estúpido niño cabeza de cebolla-
-No lo hare hasta que me digas ¿Qué tiene Matt que no tenga yo?-
-El es mi amigo; y tu nunca lo serás-
-¿Por qué?-
-Por el odio y rencor que te tengo hace años. Nunca he podido creer que por más que me esforzaba tu siempre eras el mejor y yo siempre el segundo-
-¿Es solo eso?-
-Si-
-Es ridículo-
-Suéltame. Ya te conteste-
-No lo entiendo, Mello-
-¿Qué cosa?- Dijo serio
-¿Por qué lo amas a él y no a mí? Ese inútil es solo un fumador adicto a los videojuegos-
-Yo no lo amo. Y no es un inútil. Si tiene problemas con los cigarros y los videojuegos pero, es mi amigo-
-Si lo amas. ¿Por qué a él y no a mi?-¿Qué puedo hacer para ganarme tu corazón y que olvides a ese idiota?-
-No, no lo amor por que no soy gay. Y nunca te podrás ganar mi corazón porque… NO SOY GAY- El silencio reino por unos momentos -Suéltame. Maldito niño con gustos raros-
El peli-blanco soltó al rubio de su agarre y lo dejo libre. Mello se puso de pie y empezó a caminar bajo la mirada del otro chico
-Near…- Lo llamo, deteniendo su propio andar. El chico lo miro confundido -No vuelvas a hablarme…no me mires….no me busques…no quiero saber nada sobre un maldito gay como tu- Dicho esto siguió caminando hasta desaparecer de la vista del peliblanco, quien se echo a corres en dirección a su casa
[Versión Near. Otra vez]
Después de que Mello desapareció de mi vista me eche a correr. En ese momento no le tome importancia pero corría en dirección a mi casa. ¿En verdad había dicho que no le volviera a dirigir la mirada?... No… no puede ser… ¡¡NO, MALDITA SEA!!
Corrí, corrí y corrí a más no poder. Después de unas cuadras me cuantas cuadras me empecé a cansar, así que disminuí la velocidad hasta que me falto el aire por completo.
Me detuve en una esquina y me apoye la espalda contra la pared, respirando agitadamente. En verdad me canse.
Mire a la calle vacía. Mis ojos se humedecieron y no pude mas…lloré.
Llore amargamente, como nunca antes lo había hecho. Pero, ¿Por qué? ¿Por lo que me dijo Mello? No lo sé. Tal vez sea eso, tal vez no… entonces ¿Por qué me siento así? Como si me hubieran clavado una daga en el corazón…
Cuando calme mis lágrimas un poco seguí mi camino, solo que caminando por que ya no me sentía con fuerzas para seguir corriendo. ¿Acaso es que Mello me ponía así? No lo sé. Primera vez en mi vida que no se algo…
Siempre fui el primero en todo; el primero en la clase, el primero en resolver algo, en estudiar, en acabar, el primer consentido de L y Watari. Nunca creí que eso le molestaba a Mello. Pero ahora entiendo que le importa más de lo que pensé…
Nunca creí que mis hormonas llegarían a tal grado de querer más que una simple amistad con él, la persona con la que crecí, casi como un hermano pero, sin lazos sanguíneos. No pensé que reaccionaria así. Creo que no pensé en las consecuencias de mis actos y palabras.
Por culpa de mi distracción creo que ahora perdí toda esperanza de poder conquistar el corazón de Mello. En especial porque su reacción fue la de un típico homofóbico.
Llegue a casa. Abrí la puerta y entre.
-Near, llegas tarde, son las 10 P.M.- Watari empezó a regañarme pero, no le hice caso y me encerré en mi cuarto
Me vendría muy bien una ducha, eso me relajara (además de que estoy sudado). Luego tendré toda una noche de sueño para pensar que pasara con esta situación tan… complicada…