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El fuego bajo el hielo por Laet

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Notas del capitulo:

Buenas, ¿como os va? Espero que bien ^^


Gracias mil por leerme, y otras mil por los reviews. Este capítulo es, me parece, más corto, o al menos suceden menos cosas, pero creo que es bastante interesante, al menos a mí me lo pareció al escribirlo. Espero que lo disfrutéis.


 


  ¿Por qué, por qué, por qué? ¿Por qué a él? Algo muy malo debía de haber hecho en una vida pasada. No llevaba ni un día con Kai y…


  Con las manos firmemente aferradas al lavabo, inclinó la cabeza hasta que dio con ella en el espejo y apretó los dientes con rabia. Conocía a aquel muchacho casi desde el primer día, y no habían tenido mucha relación. ¿Por qué justo ahora se mostraba tan interesado en él?


***Flash back***


  La segunda clase terminó, y ahora tenían un pequeño descanso. Kai, como siempre, salió a la terraza que había en la parte trasera del edificio. El oriental decidió no seguirlo. A Kai le costaba estar rodeado de gente, así que reservaba aquel lapso antes de la cuarta hora para estar solo, y no quería atosigarlo.


  Abrió una libreta por las hojas del final y se entretuvo garabateando un rato, hasta que alguien se le acercó.


  -Buenos días, Ray, ¿estás ocupado?


  El chino alzó la vista y sonrió.


  -Hola Mystel, no, la verdad, no lo estoy.


  Conocía al exótico joven de ojos azules y cabello rubio, casi tan largo como el suyo, porque era la primera persona de clase, exceptuando a Kai, con la que había hablado. Tenía verdadero talento con la flauta travesera, pero tenía el defecto de que no era muy amigo de practicar.


  -Bien, entonces, ¿podrías venir conmigo un momento? Querría pedirte un favor.


  -Por supuesto.


  Caminaron por los pasillos hasta llegar a una de las aulas de ensayo, presidida por un hermoso piano de cola. Un muchacho de piel blanca y cabellos anaranjados pulsaba las teclas con delicadeza, arrancándole armoniosas notas, ajeno a su presencia.


  -Mystel, ¿qué es exactamente lo que quieres?-preguntó en voz baja para no interrumpir al pianista.


  -Pues verás, mi amigo me pidió que buscase a alguien que pudiese ayudarle y… creo que tú quizás puedas hacerlo.


  -¿Qué le pasa?


  -Digamos que… -volvió la vista hacia el pelirrojo, que se había quedado con las manos suspendidas sobre el teclado. Su boca se torcía en un gesto frustrado-, tiene problemas con su inspiración –dijo divertido.


  Un par de ojos turquesa se centraron en el rubio con un ligero fastidio.


  -¿Te parece gracioso?-protestó el joven. Su voz era suave y bien modulada, con un acento que no se correspondía al ruso.


  -Ver a Brooklin Masefield en apuros es algo que no sucede todos los días –se encogió de hombros.


  -No estoy en apuros, simplemente necesito ayuda con mi proyecto.


  -¿Y qué puedo hacer yo?-intervino el oriental.


  El pelirrojo se volvió hacia él con una encantadora sonrisa que dejó a Ray ligeramente desconcertado.


  -Ven, déjame que te explique –lo invitó a acercarse.


  -Ah, bueno, yo creo que no hago falta aquí. Nos vemos chicos –se despidió Mystel.


  -¿Huh?


  -Tranquilo, Ray, no te robaré mucho tiempo –dijo el joven de ojos turquesa.


  -Y… ¿cuál es ese proyecto tuyo?


  -Intento componer una canción, pero estoy atascado. Además, siento que le falta algo. Llevo intentando hacerla desde el día del recital, desde que os oí tocar a ti y a tu compañero. La sensación que produce vuestra música es algo… mágico –dijo con aire soñador-, y me gustaría poder hacer algo similar.


  Le mostró de nuevo aquella sonrisa de aspecto adorable. Por alguna razón, a Ray estaba comenzando a ponerle nervioso.


  -En ese caso deberías hablar con Kai… él fue quien compuso…


  -No, no creo que eso ayudase, porque lo que yo necesito es una fuente de inspiración –se puso en pie y caminó hasta el oriental.


  -Ah… lo siento, yo no…


  -Tú eres perfecto –lo atajó Brooklin, poniéndole las manos sobre los hombros.-Nunca antes había visto un ángel más hermoso que tú, querido Ray. Me gustaría que tú fueses mi… musa, por decirlo de algún modo. Está claro que a Hiwatari le has venido bien.


  El pelinegro rehuyó el contacto con aquel joven. Definitivamente, aquello ya no le gustaba. El modo en que lo estaba mirando era totalmente indecente.


  -Lo siento, no puedo ayudarte –dijo con brusquedad.


  -Y enojado te ves aún más bello –continuó el pelirrojo sin perder la sonrisa.


  Ray gruñó y salió del aula, indignado. No anduvo mucho hasta que escuchó pasos que lo seguían y, antes de poder volverse, dio con su espalda en la pared. Cerró los ojos a causa del golpe. No debió hacerlo, ya que entonces quizás podría haber evitado…


***Fin flash back***


  Brooklin lo había besado.


  Eso era malo.


  Él se había revuelto, y había conseguido alejarlo un poco… sólo para ver a Kai al fondo del pasillo, mirándolos con una expresión impenetrable.


  Eso era terrible.


  Después, el bicolor había seguido su camino sin decir una palabra.


  Eso era aún peor.


  Al final, se había soltado del agarre de Brooklin y le había dado un puñetazo en la cara.


  Eso había estado bien…


  …Pero el balance de su día seguía siendo nefasto.


  Ojalá Kai hubiese dicho algo en lugar de marcharse sin más. Él no había sido capaz de volver a clase y encontrarse con él, así que se había escondido en el lavabo, pensando qué debería hacer.


  La puerta del baño se abrió y todos sus músculos se tensaron.


  -Si vuelves a tocarme, te mataré –gruñó con rabia, sin dignarse a mirar al recién llegado.


  Una risita burlona fue toda la respuesta.


  Ray dio un respingo y abrió los ojos, sobresaltado.


  -Oh, Kai, perdóname, pensé que eras…


  -Sí, sí, me hago una idea de quién pensaste que era.


  -Kai, yo… siento mucho… Lo que viste antes no era… Yo no le… -no sabía cómo disculparse. Lo que había pasado era espantoso. Se tapó la cara con las manos para que no lo viese llorar.


  -Tranquilo, Ray –dijo el ruso con dulzura-, no estoy enfadado contigo.


  -¿Ah, no?-se atrevió a mirarlo. El bicolor se acercó y le secó las lágrimas.


  -Por supuesto que no. Confío en ti, Ray, sé que no me engañarías de ese modo… además, si hubieses consentido que te besase, no le habrías golpeado. Y tampoco me habrías amenazado de muerte cuando pensaste que era él –sonrió con perversa diversión.


  -¿Le has visto?


  -Me crucé con él cuando se marchaba. No le vi bien la cara, porque se la estaba tapando, pero, por la sangre, debiste de partirle la nariz o el labio.


  -Le está bien empleado –masculló.


  Kai le revolvió el pelo con cariño y una expresión de orgullo en el rostro.


  -Confieso que tuve ganas de hacerlo pedazos… hacía mucho que no quería pegar a alguien sin motivo –ladeó la cabeza, pensativo.-Supongo que en parte son los celos. Una sensación bastante desagradable, la verdad. Y también bastante inútil.


  -¿A qué te refieres?


  -En parte quiero atizarle por haberte besado sin permiso, pero si tú hubieses querido irte con él, también habría deseado hacerlo…


  -Estarías en tu derecho.


  -Pero sería egoísta por mi parte. Si no eres feliz conmigo, tratar de retenerte sólo te haría daño.


  -Soy feliz contigo, Kai. Te quiero.


  El ruso sonrió.


  -Y eso me alegra. Porque yo también te quiero –lo besó con suavidad.


  Ray cerró los ojos, disfrutando de las sensaciones que el ruso le despertaba.


  -Por cierto –murmuró el bicolor-, resultas muy atractivo cuando estás enfadado.


  El oriental enrojeció intensamente, y Kai volvió a besarlo. Al final el día no estaba siendo tan malo.


***


  Las clases habían terminado por aquel día. Kai y Ray caminaban con tranquilidad hacia la salida cuando se tropezaron con Brooklin. El pelirrojo tenía los labios amoratados e hinchados, y una delgada línea roja los partía en dos. El oriental se habría sentido satisfecho por ello… de no ser porque eso no había borrado la sonrisa del joven.


  -Hola, Ray. Mi oferta sigue en pie, por si te lo has pensado mejor.


  -¿Cómo te atreves…?-gruñó el pelinegro. Sus ojos dorados chispeaban, henchidos de enojo.


  Kai le puso una mano en el hombro y se adelantó un paso.


  -Masefield –dijo, perfectamente calmado-, creo que ha quedado bastante claro que Ray no está interesado en tu propuesta. ¿Qué tal si dejas de acosarlo?


  -¿O qué? ¿Vas a pegarme?-seguía sonriendo, de aquel modo aparentemente inocente.


  Su tranquilidad y su descaro estaban crispando a Ray, pero no tenían efecto alguno sobre el bicolor.


  -Yo no, pero puede que él sí lo haga –sonrió también el ruso, mirando significativamente el labio herido del pelirrojo.


  -Sólo es cuestión de tiempo, Hiwatari. Algún día se cansará de tu frialdad y se irá. Y entonces no tendrás nada que hacer.


  -Ahí te doy la razón –asintió, lo cual desconcertó al joven de cabello anaranjado.-Si Ray quiere irse, lo hará, porque es su vida y no me pertenece. Él es una persona, no un objeto. Y si quiere estar conmigo, entonces tú debes aceptarlo del mismo modo. De lo contrario, no te lo mereces. Ni a él ni a nadie.


  -¿Y tú sí?-su bello rostro de porcelana se contrajo en una mueca de desagrado.


  Kai se limitó a mirar al oriental, que le sonrió.


  -¿Lo dudas, Kai?


  El ruso le devolvió la sonrisa, agradecido.


  Brooklin soltó un bufido, pero enseguida recuperó su gesto habitual.


  -Muy bien, entonces, que no se diga que Brooklin Masefield es un mal perdedor. Pero, Ray, si cambias de idea…


  El pelinegro entrecerró los ojos y suspiró.


  -Ese chico es imposible –dijo cuando desapareció de su vista.


  -En cierto modo le comprendo.


  -¿Eh?


  -No es que abunden las personas como tú. La verdad, empezaba a preguntarme si todos aquí estaban ciegos para no fijarse en ti.


  -Será que estaban muy ocupados mirándote –contraatacó, sonriendo.


  -¿Huh?


  La expresión de genuino desconcierto del bicolor hizo que Ray se extrañase. ¿De verdad no era consciente de su aspecto?


  -¿Qué quieres decir?


  Pues no…


  -Kai… quizás deberías mirarte con algo más de atención en el espejo. Yo no tengo nada que hacer a tu lado.


  El ruso le dirigió una mirada intensa que le hizo estremecerse.


  -Creo que no soy el único que tiene que usar más el espejo –murmuró.

Notas finales:

Hasta el próximo cap!!!

Y, por supuesto, se agradecerán mucho los comentarios, que serán respondidos y muy tenidos en cuenta ^^


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